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PARASITOLOGÍA CLÍNICA. Dr. Luis Fernando Rojas Terrazas Página 1 BALANTIDIASIS DEFINICIÓN. Balantidiasis es una zoonosis causada por Balantidium coli, protozoo ciliado del intestino grueso del cerdo, reservorio de la infección. La infección humana es rara y se caracteriza por lesiones intestinales y sintomatología similar a la amebiasis intestinal. MORFOLOGIA El trofozoíto Es ovalado y mide de 50 a más de 150 um de longitud por 40 a 70 um de diámetro. Es el más grande de los protozoos intestinales. La porción anterior suele ser más ancha y presenta una hendidura, el citostoma o punto de entrada de su alimento. El cuerpo está cubierto de prolongaciones pequeñas o cilios dispuestos, uniformemente, en hileras; los más grandes se encuentran alrededor del citostoma. En preparaciones frescas, se le observa de color grisáceo, con movimientos activos de los cilios que lo trasladan rápidamente de un segmento a otro del campo microscópico. Por transparencia, se puede apreciar la presencia de vacuolas con elementos nutritivos o de desecho y una de ellas, la vacuola contráctil, situada hacia la porción posterior. En la terminación posterior suele observarse una abertura o ano llamada citopigio. En las preparaciones coloreadas se puede distinguir dos núcleos situados en la porción media del parásito, el macronúcleo de forma arriñonada y el micronúcleo de forma redondeada, ubicado en la concavidad del macronúcleo. El quiste Tiene forma redondeada y mide de 40 a 60 um de diámetro, está cubierto por una membrana quística y contiene sólo un parásito, que se le puede distinguir, en las preparaciones en fresco, con sus cilios y núcleos en el interior. BIOLOGÍA Balantidium coli tiene por habitad habitual el intestino grueso del cerdo y presenta dos formas evolutivas, el trofozoíto y el quiste. PARASITOLOGÍA CLÍNICA. Dr. Luis Fernando Rojas Terrazas Página 2 Los trofozoítos se multiplican por fisión binaria, pero en ocasiones se suele observar el fenómeno de la conjugación, mediante la cual dos trofozoítos se fusionan, intercambian material cromosómico de sus respectivos núcleos y luego se separan, por lo cual se considera que se trataría de una forma de reproducción sexual, a pesar que no ha habido multiplicación del parásito. Los trofozoítos se alimentan de las substancias nutritivas que encuentran en el intestino principalmente carbohidratos, los que metaboliza anaeróbica mente para obtener su energía. Cuando las condiciones de su habitad no le son favorables, se enquista. Los trofozoítos y quistes salen con las heces del cerdo al medio ambiente. Los trofozoítos suelen persistir algún tiempo y luego perecen por desecación, no así los quistes. Los quistes deben ser ingeridos por los cerdos para mantener la infección en la naturaleza. El hombre, principalmente el que está en contacto directo con la crianza y/o comercialización del cerdo, está propenso a ingerir alimentos contaminados con heces de cerdo conteniendo los quistes o éstos pueden ser vehiculizados por el agua, viento o vectores mecánicos hasta el alimento del hombre. Los quistes al ingresar al tubo digestivo del animal u hombre van a sufrir la acción de los jugos digestivos del estómago e intestino delgado, lo que permite la digestión de la cubierta del quiste y la liberación del trofozoíto, el cual, en el intestino grueso, si las condiciones son favorables, comenzará a reproducirse. EPIDEMIOLOGÍA - La forma infectante para el hombre es el quiste. - La puerta de entrada es la vía oral - El mecanismo de transmisión es la contaminación del agua y alimento con los quistes. En el cerdo se ha descrito Balantidium suis morfológicamente indistinguible del B. coli y aún hay opiniones sobre si se trata de la misma especie, razas o cepas de una sola especie. En el antecedente epidemiológico de las personas parasitadas, se encuentran datos de contacto directo o indirecto con cerdos. En áreas de crianza libre de cerdos, como ocurre en los villorios de las zonas rurales, los quistes que contaminan el suelo pueden ser vehiculizados por el agua, el viento y los vectores mecánicos como las moscas y cucarachas, hasta el alimento humano. En zonas endémicas, el hombre parasitado con malos hábitos higiénicos se convierte en el principal difusor de la infección. Similarmente a lo manifestado en otros parasitismos intestinales, la falta de educación sanitaria, en este caso, en relación a la crianza higiénica del cerdo, la ausencia de letrinas en zonas rurales y la pobreza, son factores condicionantes en la epidemiología de estas parasitosis. PARASITOLOGÍA CLÍNICA. Dr. Luis Fernando Rojas Terrazas Página 3 PATOLOGÍA Balantidium coli no causa lesiones en el intestino grueso del cerdo, pero en el hombre puede producir ulceraciones similares a las ocasionadas por Entamoeba histolytica, con cuya etiología hay que diferenciarlas, así como de las ulceraciones bacterianas. Las lesiones son favorecidas por la presencia de lesiones previas del intestino, ocasionadas por diversas etiologías, tipo de alimentación rica en carbohidratos, flora bacteriana favorable, etcétera. Las lesiones ulcerativas pueden extenderse a lo largo del intestino grueso, desde el ciego hasta el recto. El rectosigmoides suele ser el más afectado. Las úlceras.- son pequeñas, de bordes edematosos en cuyo fondo se observa tejido necrótico. En el corte histológico puede reconocerse, fácilmente, a los parásitos por su tamaño. Los cuales se observan atravesando la capa muscular de la mucosa, alcanzando la submucosa y a veces, el interior de vasos sanguíneos pueden en ocasiones atravesar toda la pared intestinal, produciendo perforación y peritonitis. Alrededor de los parásitos, se observan lesiones neuróticas con escasa infiltración celular de neutrófilos, linfocitos y eosinófílos. SINTOMATOLOGÍA Las formas clínicas de presentación de la balantidiosis son: • La balantidiosis aguda o disentería balantidiana • La balantidiosis crónica • La balantidiosis asintomática (portadores). La disentería balantidiana.- Se caracteriza por un cuadro agudo de diarrea con mucosidad, sangre, pujo y tenesmo que semeja a la disentería amibiana o bacilar. El examen sigmoidoscópico permite observar las úlceras, y la toma de muestras de las lesiones posibilita examinarlas al microscopio y aclarar la etiología balantidiana. La sintomatología digestiva se acompaña de manifestaciones generales, principalmente fiebre, malestar general, deshidratación, dolor abdominal y postración. La Balantidiasis crónica.- Se presenta con sintomatología digestiva variada, pues en ocasiones o esporádicamente, hay diarrea con o sin moco y sangre, dolor abdominal, malestar general o sólo molestias digestivas vagas de dolor abdominal, náuseas, vómitos, etcétera. La Balantidiasis asintomática.- Algunos infectados no presentan sintomatología evidente siendo portadores del parásito y, en muchos casos, importantes reservorios y difusores de la infección humana. PARASITOLOGÍA CLÍNICA. Dr. Luis Fernando Rojas Terrazas Página 4 DIAGNÓSTICO El diagnóstico clínico se plantea generalmente en las formas agudas o de disentería, donde la diferenciación con amibiasis debe establecerse desde el inicio, ya que la forma de Balantidiasis crónica presenta sintomatología variada. METODO DIRECTO El diagnóstico de laboratorio se hace por el examen de las heces en busca del parásito. En las heces líquidas, diarreicas, disentéricas o formadas, la presencia del trofozoíto de B. coli puede detectarse en el examen directo de las heces. METODODE CONCENTRACIÓN En las formas crónicas, el hallazgo de los quistes mediante los métodos de concentración, establece el diagnóstico. Son de ayuda para la búsqueda del parásito, el método de Baermann que permite encentrar los trofozoitos, así como el cultivo en medios similares a los usados para E. histolytica. TRATAMIENTO El parásito es sensible a las tetraciclinas, a la paramomicina y los derivados nitroimidazólicos. PREVENCIÓN La profilaxis individual se basa en la ingesta de alimentos bien lavados o cocidos; así como la higiene de manos antes de ingerir los alimentos y luego de defecar, lo cual se realiza en forma limitada en las áreas endémicas. Más importante es la profilaxis colectiva dirigida a la crianza higiénica del cerdo, al mejoramiento del saneamiento ambiental incluyendo agua potable, sistema de eliminación de excretas o letrinas y educación de buenos hábitos higiénicos en la alimentación.
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