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Cap 63 Guyton – Propulsión y mezcla de los Alimentos en el tubo digestivo (Espanhol)

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Cap 63 : Propulsión y mezcla de los Alimentos en el tubo digestivo
Fase de deglución faringea (alimentos desde la faringe hacia el esofago): es involuntaria. 
La lengua impulsa de forma voluntaria los alimentos hacia la faringe. 
El bolo alimenticio estimula los receptores de la deglución y sus impulsos llegan hasta el tronco encefálico el cual estimula las contracciones automáticas de los músculos faringeos.  
El paladar blando realiza una tracción superior e impide el reflujo de los alimentos hacia las fosas nasales.
Pliegues palatofaringeos : crea una hendidura sagital que impide el paso de grandes objetos hacia la parte posterior de la faringe. 
Esfinter esofagico superior: se relaja y facilita el paso de los alimentos a la porción superior del esofago. 
En la faringe se origina una onda peristaltica rápida que impulsa el bolo alimenticio hacia la porción  superior del esofago. 
El esofago presenta 2 tipos de movimientos peristalticos. 
peristaltismo primario : continuación del peristaltismo faringeo.  Mediado por el nervio vago y va de la faringe hasta el estomago. 
peristaltismo secundario : distensión del esofago cuando la onda peristaltica primaria no impulsa el alimento hasta el estomago. No precisa la inervacion vagal.  
El esfinter esofagico inferior se relaja antes d e que llegue la onda peristaltica y facilita la Propulsión del alimento al estómago.  
Funciones motoras del estomago. 
- almacenamiento de alimentos
- mezcla de los alimentos (quimo )
- vaciar el alimento al intestino delgado.
El estomago se relaja cuando recibe al alimento. Cuando el alimento entra al estómago el reflejo vagovagal reduce el tono de la pared muscular gástrica y así el estomago se relaja.
La retropulsion es un mecanismo importante de mezcla dentro del estomago. El músculo pilorico se contrae e impide el vaciamiento por el piloro. Así el contenido antral regresa en dirección al cuerpo gástrico.  
El esfinter pilorico es importante en el vaciamiento gástrico.  El permanece contraído la mayor parte se tiempo y evita el paso de partículas alimentarias hasta que se hallan mezclado en el quimo. 
Los reflejos enterogástricos del duodeno inhiben el vaciamiento gástrico:
- grado de distensión del duodeno
- presencia de irritación en la mucosa duodenal
- grado se acidez del quimo duodenal
- grado de osmolaridad del quimo
- presencia de productos de degradación de las proteínas.  
La distensión del intestino delgado estimula las contracciones de segmentación. 
El químicos es impulsado a través del intestino delgado por las ondas peristalticas que son controladas por señales nerviosas (entrada del quimo al duodeno y reflejo gastroenterico) y señales hormonales (estimulan la gastrina,  colecistocinina e insulina. Inhiben el glucagon y la secretina). 
Válvula ileosecal: evita el retroceso del contenido fecal desde el colon hacia el intestino delgado. 
El esfinter ileosecal y la intensidad del peristaltismo están regulados por reflejos secales.  Cuando se distiende el ciego, se intensifica la contracción del esfinter ileosecal y se inhibe el peristaltismo ileal.  Los reflejos desde el ciego hasta el esfinter ileosecal y el íleon estan regulados por el plexo mienterico y nervios extrínsecos ( reflejos de los ganglios simpáticos paravertebrales) 
Funciones principales del colon: 
- absorción de agua y electrolitos del quimo (mitad proximal)
- almacenamiento de la materia fecal hasta su excresion ( mitad distal)
La contracción de los músculos circulares y longitudinales del intestino forman haustras  ( sobre saliências del intestino grueso en forma de sacos)
Funciones de las haustras: 
Propulsión anterograda del contenido del colon. Mezcla y absorción de líquidos y sustancias disueltas. 
Los movimientos en masa son importantes para impulsar el contenido fecal hacia el intestino grueso. Cuando la masa fecal se introduce en el recto da el deseo de defecar. 
Los reflejos gastrocolicos y duodenocolico facilitan la aparición de movimientos en masa después de las comidas. 
Estos reflejos ocurren por la distensión del estomago y el duodeno y son conducidos por los nervios extrínsecos del S.N.A.
El reflejo intrínseco mediado por el sistema nervioso enterico local puede desencadenar la defecación.  
Cuando las heces entran en el recto la distensión de las paredes del recto envía señales aferentes que pasan por el plexo mienterico e inician ondas peristalticas en el colon descendente, sigmoideo y recto que impulsan las heces hacia el ano.  
Para que ocurra la defecación deben relajarse los esfinteres internos y externos. 
El reflejo defecatorio intrínseco resulta por si mismo bastante débil. 
Para que ocurra la defecación hay que intensificar al reflejo intrínseco con el reflejo defecatorio parasimpático en los segmentos medulares sacros esto hace que el esfinter anal interno se relaje y que el reflejo defecatorio intrínseco se transforme en un proceso intenso de defecación.

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