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MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y 
CIMENTACIONES 
 
CAPITULO 1: CARACTERIZACION DE LOS SUELOS 
 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
 
 
INDICE CAPITULO 1: CARACTERIZACION DE LOS SUELOS 
 
 
1 CARACTERIZACION DE LOS SUELOS ................................................................ 3 
1.1 Suelos y rocas: origen del suelo ......................................................................... 3 
1.2 Propiedades físicas y clasificación de los suelos ............................................... 6 
1.3 Reconocimiento del terreno .............................................................................. 15 
1.3.1 Investigación in situ..................................................................................... 16 
1.3.2 Ensayos de laboratorio ............................................................................... 43 
1.4 Esfuerzos en una masa de suelo: presiones normales y tangenciales ............ 47 
1.4.1 Concepto de esfuerzo efectivo en un sistema de particulas....................... 47 
1.4.2 Esfuerzos geostáticos................................................................................. 49 
1.4.3 Esfuerzos producidos por las cargas aplicadas.......................................... 52 
1.4.4 Tensión Plana ............................................................................................. 58 
1.4.5 Tensiones Principales y Tensiones Tangenciales máximas....................... 66 
1.4.6 Círculo de Mohr para tensión plana............................................................ 73 
1.4.7 Tensión Triaxial........................................................................................... 88 
1.5 Resistencia al esfuerzo cortante....................................................................... 90 
1.5.1 Parámetros de resistencia en presiones efectivas...................................... 92 
1.5.2 Parámetros de resistencia en condiciones sin drenaje............................... 94 
1.6 Relaciones tensión-deformación....................................................................... 95 
1.6.1 Conceptos de la teoría de elasticidad......................................................... 98 
1.6.2 Comportamiento en compresión confinada .............................................. 100 
1.6.3 Consolidación. Consideraciones generales .............................................. 102 
1.6.4 Cálculo de asentamientos por consolidación............................................ 107 
1.6.5 Tasa de por consolidación ........................................................................ 109 
 
 
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MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
1 CARACTERIZACION DE LOS SUELOS 
 
1.1 Suelos y rocas: origen del suelo 
 
La mayoría de los suelos que cubren la tierra están formados por la meteorización de 
las rocas. Los geólogos emplean el término meteorización de las rocas para describir 
todos los procesos externos, por medio de los cuales la roca experimenta 
descomposición química y desintegración física, proceso mediante el cual masas de 
roca se rompen en fragmentos pequeños. Esta fragmentación continua es un mero 
cambio físico y por eso se llama también meteorización mecánica. Por otra parte, la 
meteorización química de una roca es un proceso de descomposición, mediante el 
cual los minerales constitutivos de rocas allí presentes cambian de composición 
química. En la descomposición, los minerales persistentes se transforman en 
minerales de composición y propiedades físicas diferentes. Es preciso indicar que la 
desintegración física completa la descomposición, ya que los minerales y partículas 
rocosas de menor tamaño producidos por meteorización mecánica son mucho más 
susceptibles al cambio químico que los granos minerales firmemente soldados en 
grandes masas de roca compacta. 
 
La meteorización mecánica es el proceso por el cual las rocas se fracturan en piezas 
de menor tamaño bajo la acción de las fuerzas físicas, como la corriente de agua de 
los ríos, viento, olas oceánicas, hielo glacial, acción de congelación, además de 
expansiones y contracciones causadas por ganancia y pérdida de calor. 
 
La meteorización química es el proceso de descomposición química de la roca 
original. Entre los distintos procesos de alteración química pueden citarse: la 
hidratación (paso de anhidrita a yeso), disolución (de los sulfatos en el agua), 
oxidación (de minerales de hierro expuestos a la intemperie), cementación (por agua 
conteniendo carbonatos), etc.Por ejemplo, la meteorización química de los feldespatos 
puede producir minerales arcillosos. 
 
Muy relacionada con la meteorización química se encuentra la meteorización 
biológica, producida fundamentalmente por la actividad bacteriana, originando 
putrefacciones en materiales orgánicos. 
 
La acción conjunta o individual de estos procesos de meteorización da lugar a un perfil 
de meteorización de la roca en función de la profundidad (ver figura adjunta). En este 
perfil la roca sana ocupa la zona más profunda, transformándose gradualmente a 
suelo hacia la parte más superficial. 
 
 
 
 
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MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
 
Figura 1: Perfil de meteorización, según diversas fuentes 
 
Así, por ejemplo, la observación de una trinchera recién abierta (una excavación para 
una carretera, una pared de cantera, etc.), a menudo revelará una sucesión de capas 
de diferentes materiales térreos. En la base del afloramiento puede haber roca 
compacta, denominada roca firme; se encuentra todavía en su lugar de origen y está 
relativamente poco modificada. La roca firme suele presentar innumerables grietas, 
denominadas juntas o diaclasas, que son consecuencia de esfuerzos principalmente 
asociados a una historia anterior de procesos tectónicos. Allí donde existen familias de 
juntas que se cruzan, la roca firme se desintegra fácilmente en bloques. 
 
Por encima de la roca firme puede haber una capa de materia mineral blanda, 
denominada regolita. (El prefijo rego viene de la palabra griega que significa “manto”.) 
La regolita puede formarse in situ por descomposición y desintegración de la roca 
firme inmediatamente subyacente; este tipo se denomina regolita residual o suelo 
residual. Si esta capa de partículas minerales relativamente sueltas o blandas, 
dispuestas sobre la roca firme, es transportada por agentes tales como corrientes de 
agua, hielo, viento, olas…, recibe el nombre de regolita transportada o suelo 
sedimentario. 
 
Suelos residuales
 
Los suelos residuales se originan cuando los productos de la meteorización de las 
rocas no son transportados como sedimentos, sino que se acumulan in situ. Si la 
velocidad de descomposición de la roca supera a la de arrastre de los productos de 
descomposición, se produce una acumulación de suelo residual. Entre los factores que 
influyen sobre la velocidad de alteración en la naturaleza de los productos de 
meteorización están el clima (temperatura y lluvia), el tiempo, la naturaleza de la roca 
original, la vegetación, el drenaje y la actividad bacteriana. Los suelos residuales 
suelen ser más abundantes en zonas húmedas, templadas, favorables al ataque 
químico de las rocas y con suficiente vegetación para evitar que los productos de 
meteorización sean fácilmente arrastrados. 
 
Suelos sedimentarios 
 
La formación de los suelos sedimentarios puede explicarse más adecuadamente 
considerando la formación, el transporte y el depósito de los sedimentos. 
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MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
El modo principal de la formación de sedimentos lo constituye la meteorización física y 
química de las rocas en la superficie terrestre.En general, las partículas de limo, arena 
y grava se forman por la meteorización física de las rocas, mientras que las partículas 
arcillosas proceden de la alteración química de las mismas. 
 
Los sedimentos pueden ser transportados por cualquiera de los cinco agentes 
siguientes: agua, aire, hielo, gravedad y organismos vivos. El transporte afecta a los 
sedimentos de dos formas principales: a) modifica la forma, el tamaño y la textura de 
las partículas por abrasión, desgaste, impacto y disolución; b) produce una 
clasificación o graduación de las partículas. 
 
Después de que las partículas se han formado y han sido transportadas se depositan 
para formar un suelo sedimentario. Las tres causas principales de este depósito en el 
agua son la reducción de la velocidad, la disminución de la solubilidad y el aumento de 
electrolitos. Cuando una corriente de agua desemboca en un lago, océano, etc., pierde 
la mayor parte de su velocidad. Disminuye así la fuerza de la corriente y se produce 
una sedimentación. Cualquier cambio en la temperatura del agua o en su naturaleza 
química puede provocar una reducción en la solubilidad de la corriente, produciéndose 
la precipitación de algunos de los elementos disueltos. 
 
 
 
Figura 2: Esquema del proceso de formación de los suelos 
 
Por tanto, el suelo es el resultado del proceso de meteorización de las rocas, con o sin 
transporte de los productos de alteración. Los suelos se caracterizan 
fundamentalmente por los siguientes aspectos: 
 
• Los suelos están formados por partículas pequeñas (desde micras a algunos 
centímetros) e individualizadas que pueden considerarse indeformables. 
• Entre estas partículas quedan huecos con un volumen total del orden de 
magnitud del volumen ocupado por ellas (desde la mitad a varias veces 
superior). 
• Un suelo es un sistema multifase (sólida, líquida y gaseosa). 
• Los huecos pueden estar llenos de agua (suelos saturados), o con aire y agua 
(suelos semisaturados), lo que condiciona la respuesta de conjunto del material. 
En condiciones normales de presión y temperatura, el agua se considera 
incompresible. 
 
 
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MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
1.2 Propiedades físicas y clasificación de los suelos 
 
a) Relaciones peso-volumen 
 
Como se mencionó en el apartado anterior, el suelo constituye un sistema de 
varias fases. La figura siguiente muestra un elemento típico de suelo que 
contiene 3 fases diferenciables: sólida (partículas minerales), líquida (agua 
generalmente) y gaseosa (aire o gas). La parte de la izquierda representa las tres 
fases como podrían presentarse en un elemento de suelo natural. En la parte de 
la derecha se han separado las tres fases con el fin de facilitar la deducción de 
las relaciones entre ellas. 
 
 
 
 
Los términos que aparecen en la figura anterior representan los siguientes 
conceptos: 
 
V: Volumen total del elemento de suelo 
Vs: Volumen ocupado por las partículas de suelo 
Vw: Volumen ocupado por la fase líquida (agua) 
Vg: Volumen ocupado por la fase gaseosa (aire) 
Vv: Volumen ocupado por los huecos (fase líquida+fase gaseosa) 
 
W: Peso total del elemento de suelo 
Ws: Peso de las partículas de suelo 
Ww: Peso de la fase líquida (agua) 
Wg: Peso de la fase gaseosa (aire)≈ 0 
 
 
Las expresiones que relacionan las distintas fases son las siguientes: 
 
 
 
 
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MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
Relaciones en volumen 
 
Indice de huecos o poros: 
s
v
V
Ve = 
 
Porosidad: 
V
Vn v= 
 
Grado de saturación: 
v
w
V
VS = 
 
Las relaciones entre el índice de huecos y la porosidad son las siguientes: 
 
 
n
n
V
V
V
V
V
V
VV
V
V
Ve
v
v
v
v
s
v
−=−
=−== 1 
 
e
e
V
V
V
V
V
V
VV
V
V
Vn
s
v
s
s
s
v
vs
vv
+=+
=+== 1 
 
Relaciones en peso
 
Humedad: 
s
w
W
Ww = 
 
Peso específico de las partículas sólidas: 
s
s
s V
W=γ 
 
Peso específico del agua: 
w
w
w V
W=γ 
 
Peso específico seco: 
 
 
eVV
W
V
W s
vs
ss
d +=+== 1
γγ 
 
Peso específico aparente: 
 
 )1(
1
1
11
w
e
w
e
Vw
e
wW
VV
WW
V
W
ds
sssss
vs
ws
ap +=+
+=+
+=+
+=+
+== γγγγγγ 
 
Peso específico saturado (Vv = Vw =e) 
 
 
e
e
VV
WW ws
vs
ws
sat +
+=+
+=
1
γγγ 
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MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
b) Densidad o compacidad relativa 
 
Una magnitud muy empleada para caracterizar la compacidad de un suelo 
granular es la densidad relativa, definida como: 
 
 100100
min,max,
min,max,
minmax
max xxx
ee
eeD
dd
dd
d
d
r γγ
γγ
γ
γ
−
−=−
−= 
 
Siendo: 
 
emax: Indice de huecos del suelo en el estado más suelto 
emin: Indice de huecos del suelo en el estado más denso 
e: Indice de huecos in situ 
γd: Peso específico seco in situ 
γd,max: Peso específico seco en el estado más denso (emin)
γd,min: Peso específico seco en el estado más suelto (emax)
 
 
En la tabla siguiente se indican las denominaciones de la compacidad de los 
suelos granulares a partir de su densidad relativa: 
 
Densidad relativa (%) Denominación 
0-15 Muy suelto 
15-35 Suelto 
35-65 Medio 
65-85 Denso 
85-100 Muy denso 
 
c) Granulometría 
 
En cualquier masa de suelo, los tamaños de las partículas varían 
considerablemente. Para clasificar apropiadamente un suelo se debe conocer su 
distribución granulométrica, es decir, la distribución, en porcentaje, de los 
distintos tamaños dentro del suelo. 
 
La distribución granulométrica de partículas de tamaño superior a 0,08 mm. se 
determina generalmente mediante un análisis granulométrico por tamizado. Para 
partículas de tamaño inferior al mencionado (0,08 mm.) se emplea la 
granulometría por sedimentación. 
 
El análisis granulométrico por tamizado se efectúa tomando una cantidad 
medida de suelo seco, bien pulverizado y pasándolo a través de una serie de 
tamices (cuyo tamaño de malla suele ir disminuyendo en progresión geométrica 
de razón 2), agitando el conjunto. La cantidad de suelo retenido en cada tamiz se 
pesa y se determina el porcentaje acumulado de material que pasa por cada 
tamiz. 
 
El porcentaje de material que pasa por cada tamiz, determinado de la forma 
anterior, se representa en un gráfico semilogarítmico. El diámetro de la partícula 
se representa en una escala logarítmica (abscisas), y el porcentaje de material 
que pasa se representa en escala aritmética (ordenadas). En la figura siguiente 
se muestra un ejemplo de esta curva. 
 
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MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
 
 
Una vez determinada dicha curva granulométrica, existen dos coeficientes que 
se utilizan para una mejor descripción de la granulometría de un suelo. Estos 
coeficientes son: 
 
Coeficiente de uniformidad: 
15
60
D
DCu = 
 
Coeficiente de curvatura: 
1060
2
30
DD
DCc = 
 
El coeficiente de uniformidad representa la relación entre el diámetro 
correspondiente al tamiz por el que pasa un 60% de material y el diámetro 
correspondiente al tamiz por el que pasa un 10%. Si Cu es menor que 5, el suelo 
tiene una granulometría uniforme. Si 5<Cu<20, el suelo es poco uniforme; y si 
Cu>20, se considera bien graduado. Cuanto más uniforme es el suelo, más 
uniforme es el tamaño de sus huecos y más difícil es su compactación, al no 
existir una cierta variación de tamaños que rellenen adecuadamente los huecos. 
 
El coeficiente de curvatura, también llamado de graduación, ha de adoptar 
valores entre 1 y 3 para considerar al suelo bien graduado. Se determina 
dividiendo el cuadrado del diámetrocorrespondiente al tamiz por el que pasa un 
30% del material, entre el producto de los diámetros correspondientes a los 
tamices por los que pasa un 60% y un10% del material. 
 
El análisis granulométrico por sedimentación (partículas de tamaño inferior a 
0,08 mm.) se lleva a cabo con el hidrómetro (ver figura adjunta), y se basa en el 
principio de la sedimentación de las partículas de suelo en agua. Los hidrómetros 
están calibrados para mostrar la cantidad de suelo que está aún en suspensión 
en cualquier tiempo dado, t. Así, con lecturas tomadas en tiempos diferentes en 
el hidrómetro, el porcentaje de suelo más fino que un diámetro dado puede 
calcularse y prepararse una gráfica de la distribución granulométrica. 
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MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
Con los dos métodos de análisis granulométrico expuestos puede determinarse 
la curva granulométrica completa de una muestra de suelo (ver curvas 
granulométricas adjuntas). En función de la granulometría se clasifican los suelos 
en cuatro grandes grupos: 
 
• Gravas, con tamaño de grano entre unos 80 mm. y 4,75 mm. Los granos 
son observables directamente, existen grandes huecos entre las 
partículas y no retienen el agua. 
• Arenas, con partículas de tamaño entre 4,75 mm. y 0,075 mm. Estas son 
observables a simple vista y se mantienen inalterables en presencia de 
agua. 
• Limos, con partículas comprendidas entre 0,075 mm. y 0,002 mm. 
Retienen el agua y si se forma una pasta limo-agua y se coloca sobre la 
mano, al golpear con la mano se aprecia cómo el agua se exhuda con 
facilidad. 
• Arcillas, cuyas partículas tienen tamaños inferiores a 0,002 mm. Son 
partículas de tamaño gel y están formadas por minerales silicatados, 
constituidos por cadenas de elementos tetraédricos y octaédricos, unidas 
por enlaces covalentes débiles y pudiendo entrar las moléculas de agua 
entre las cadenas, produciendo aumentos de volumen, a veces muy 
importantes. Por tanto, presentan una gran capacidad de retención de 
agua, con un porcentaje de huecos muy elevado (huecos pequeños pero 
con una gran superficie de absorción en las partículas). Debido a que el 
tamaño de los huecos es muy pequeño (aunque el índice de huecos es 
elevado), exhiben unos tiempos de expulsión de agua muy elevados y 
una permeabilidad muy baja. 
 
 
d) Plasticidad 
 
Cuando un suelo arcilloso se mezcla con una cantidad excesiva de agua, éste 
puede fluir como un semilíquido. Si el suelo se seca gradualmente, se 
comportará como un material plástico, semisólido o sólido, dependiendo de su 
contenido de agua. 
10 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
Los contenidos de humedad y los puntos de transición de unos estados a otros 
se denominan Límites de Atterberg. El concepto de que un suelo puede 
presentarse en varios estados, en función del contenido de humedad, se basa en 
que cuanto mayor sea la cantidad de agua que contiene un suelo, menor será la 
interacción entre partículas adyacentes y más se aproximará el comportamiento 
del suelo al de un líquido (ver esquema adjunto). 
 
Esta variación de la consistencia en función de la humedad (plasticidad) es 
propia de suelos finos (arcillas y limos), ya que los suelos gruesos (arenas y 
gravas) no retienen agua y se mantienen inalterables en presencia de ésta. 
 
Estado Líquido 
Estado Plástico 
Estado Semisólido 
Estado Sólido 
Límite líquido: LL ó wL 
Límite Plástico: LP ó wP 
Límite de Retracción: LS ó wS 
Suelo seco
Mezcla fluida de 
agua y suelo 
Humedad 
creciente 
 
 
La determinación de los Límites de Atterberg se lleva a cabo en laboratorio, 
definiéndose el límite plástico como el contenido de agua con el cual el suelo se 
agrieta al formarse un rollito de 3 mm. de diámetro. El límite líquido se determina 
con la cuchara de Casagrande. 
 
La diferencia entre el límite líquido y el límite plástico de un suelo se define 
como Indice de Plasticidad: 
 
 IP= LL-LP 
 
 
El índice de liquidez se define como: 
 
 
PL
Pn
L ww
wwI −
−= 
 
 wn: humedad natural 
 
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MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
El índice de plasticidad indica la magnitud del intervalo de humedades en el cual 
el suelo posee consistencia plástica, mientras que el índice de liquidez indica la 
proximidad de la humedad natural del suelo al límite líquido. 
 
Con el fin de proporcionar una representación adecuada de la plasticidad de una 
muestra de suelo se emplea la denominada Carta de plasticidad de 
Casagrande (ver figura adjunta). 
 
 
 
 
En este gráfico se representa la relación del límite líquido (abscisas) con el índice 
de plasticidad (ordenadas). Casagrande definió que los suelos con LL>50 son de 
“alta plasticidad” (pueden admitir un mayor contenido de agua y por tanto pueden 
experimentar deformaciones plásticas mayores). Los suelos con LL<50 se 
denominan de “baja plasticidad”. Complementariamente, Casagrande definió una 
línea A, que separa los suelos arcillosos de los más limosos. Así, a partir del 
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MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
criterio de alta y baja plasticidad y de la línea A, se pueden definir varias zonas 
en el gráfico anterior. Los suelos limosos y con apreciable contenido orgánico 
tienen un intervalo de humedad menor para pasar del estado semisólido al 
estado líquido (menor índice de plasticidad), situándose por debajo de la línea A. 
En el caso de las arcillas, dicho intervalo de humedad es mayor, situándose por 
encima de la línea A. Se definen, por tanto, varios tipos de suelos: arcillas de alta 
plasticidad (CH), arcillas de baja plasticidad (CL), limos y suelos orgánicos de 
alta plasticidad (MH-OH) y limos y suelos orgánicos de baja plasticidad (ML-OL). 
 
e) Clasificación de suelos 
 
Con el objeto de dividir los suelos en grupos de comportamiento semejante, con 
propiedades geotécnicas similares, surgen las denominadas clasificaciones de 
suelos. 
 
La clasificación de suelos consiste, pues, en incluir un suelo en un grupo que 
presenta un comportamiento semejante. La correlación de unas ciertas 
propiedades con un grupo de un sistema de clasificación suele ser un proceso 
empírico puesto a punto a través de muchos años de experiencia. 
 
La mayoría de las clasificaciones de suelos utilizan ensayos muy sencillos, para 
obtener las características del suelo necesarias para poderlo asignar a un 
determinado grupo. Las propiedades ingenieriles básicas que suelen emplear las 
distintas clasificaciones son la distribución granulométrica, los Límites de 
Atterberg, el contenido en materia orgánica, etc. 
 
Los dos sistemas principales de clasificación de suelos actualmente en uso son 
el sistema AASHTO (American Association of State Highway and Transportation 
Officials) y el USCS (Unified Soil Classification System). El primero se usa 
principalmente para la evaluación cualitativa de la conveniencia de un suelo 
como material para la construcción de explanadas de carreteras. El Sistema 
Unificado de Clasificación de Suelos (USCS) fue propuesto inicialmente por 
Casagrande en 1942 y después revisado por el Bureau of Reclamation de 
Estados Unidos y por el Cuerpo de Ingenieros. Este sistema es el más extendido 
para la amplia variedad de problemas geotécnicos. 
 
El sistema USCS clasifica los suelos en base a su granulometría, los Límites de 
Atterberg y el contenido en materia orgánica. A continuación se muestra dicha 
clasificación, junto con los símbolos empleados en la misma, así como una 
descripción de las propiedades esperables de los grupos diferenciados. 
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MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR:ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
 
 
1.3 Reconocimiento del terreno 
 
Dada la muy diversa problemática que puede derivarse tanto de la finalidad prevista 
inicialmente de la investigación, como de las condiciones geotécnicas del terreno, es 
complicado establecer unas recomendaciones de detalle para cada una de las 
distintas situaciones que podrían llegar a plantearse. 
 
Partiendo de la identificación de necesidades que ha de figurar expresamente en el 
Informe Geotécnico Preliminar, se debe estudiar el modo de satisfacerlas de la forma 
más adecuada teniendo presente las distintas técnicas de reconocimiento disponibles. 
 
15 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
La elección del método de reconocimiento más adecuado en cada caso, la posición de 
los puntos en los que efectuar los trabajos de campo, profundidad a alcanzar con los 
reconocimientos, ensayos de muestras, ensayos especiales, etc, será competencia de 
los técnicos responsables del trabajo al que está destinado el reconocimiento. 
 
A continuación se indican las técnicas de reconocimiento normalmente empleadas en 
la investigación del terreno. 
 
1.3.1 Investigación in situ 
 
A) Calicatas 
 
Consisten en excavaciones de formas diversas (pozos, zanjas, rozas, etc.), 
realizadas mediante medios mecánicos convencionales, que permiten la 
observación directa del terreno a cierta profundidad, así como la toma de 
muestras y la realización de ensayos in situ. 
 
Este tipo de reconocimiento del terreno permite acceder directamente al terreno 
para tomar datos litológicos del mismo, así como tomar muestras de gran tamaño 
para la realización de ensayos. 
 
Este tipo de excavaciones presentan las siguientes limitaciones: 
 
• Profundidad de reconocimiento moderada (<4 ó 5 m.) 
• Los terrenos han de ser excavables con medios mecánicos. 
• Ausencia de nivel freático o, al menos, aportaciones de agua moderada 
en terrenos de baja permeabilidad. 
• Ausencia de instalaciones, conducciones, cables, etc. 
• Deben evitarse cuanto puede deteriorarse el terreno de apoyo de las 
futuras cimentaciones o cuando puedan crearse problemas de 
inestabilidad en estructuras próximas. 
 
Los resultados de este tipo de reconocimientos se registran en estadillos en los 
que se indica la profundidad, descripción litológica, discontinuidades, presencia 
de filtraciones, situación de las muestras tomadas y fotografías. 
 
B) Sondeos mecánicos 
 
Son perforaciones de pequeño diámetro que permiten reconocer la naturaleza y 
localización de las diferentes capas del terreno. Dichas perforaciones pueden 
realizarse a presión (suelos blandos), percusión (gravas, materiales cementados) 
o rotación (rocas, suelos duros), con diámetros que oscilan habitualmente entre 
65 mm. y 140 mm. y que sirven para la extracción y reconocimiento del terreno 
(testigos), para la obtención de muestras del terreno mediante útiles apropiados 
(tomamuestras) y para la realización de algunos ensayos in situ. En suelos no 
muy duros con cierta cohesión, se emplean a veces los sondeos helicoidales con 
barrena maciza o hueca, sobre todo cuando sólo se requieren muestras 
alteradas. Eventualmente también pueden extraerse muestras inalteradas si el 
terreno se mantiene estable sin entubación o a través de las barrenas huecas. 
 
En un sondeo a rotación el sistema de perforación consta de lo siguientes 
elementos integrados en las baterías: corona de corte, manguito portaextractor, 
extractor, tubo portatestigo y cabeza. La cabeza es la pieza de unión entre el 
tubo portatestigo (donde se recoge el testigo que se extrae en la perforación) y el 
varillaje que le transmite el movimiento de rotación y empuje ejercido por la 
16 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
máquina de perforación. El manguito porta extractor aloja un muelle (extractor) 
que sirve para cortar el testigo al sacarlo y no dejar que se desprenda durante la 
maniobra de extracción. La corona es el elemento perforador que se emplea en 
el sondeo y cuyos útiles de corte pueden ser de widia (carburo de wolframio) o 
de diamante. Las coronas de widia se emplean en suelos y rocas blandas y las 
coronas de diamante en rocas duras o muy duras. 
 
Las baterías de perforación pueden ser de tubo simple o doble. En el tubo 
simple, el fluido de perforación lava toda la superficie del testigo. Este efecto y el 
de la rotación del tubo pueden ocasionar el desmenuzamiento de suelos 
parcialmente cementados o rocas blandas. Cuando se requieren recuperaciones 
muy altas se emplea el tubo doble, en el que el fluido de perforación (agua) 
desciende por el contacto entre ambos tubos. En este caso, sólo puede 
producirse el lavado del testigo en la base del tubo, en su unión con la corona. El 
tubo interior va montado sobre rodamientos de bolas que independizan su 
movimiento del tubo exterior. 
 
En el cuadro siguiente se muestran distintos tipos de diámetros de perforación y 
de testigos, siendo el diámetro de perforación más habitual el NX o superior. 
 
Los sondeos con barrena helicoidal se emplean en suelos relativamente 
blandos y cohesivos, no siendo operativos para suelos duros o cementados. Este 
tipo de perforación no permite precisiones inferiores a ± 0,50 m. en la localización 
de los diferentes estratos atravesados. El tipo de muestras que se obtiene en la 
sonda helicoidal es alterada, aunque es posible en determinadas sondas obtener 
muestras inalteradas. 
 
Las barrenas son de dos tipos, huecas y normales. Las primeras están formadas 
por un tubo central de mayor diámetro que en las normales, y permiten obtener 
muestras inalteradas sin extraer a la superficie la maniobra. A lo largo y por el 
interior de la barrena se instala un varillaje que termina al final de la cabeza 
helicoidal y lleva una pequeña broca. Estas varillas giran solidariamente con la 
barrena hueca. Cuando se toma una muestra se extraen las varillas del interior 
de la barrena, y a continuación se introduce por el interior de la misma un 
tomamuestras (ver figura adjunta). 
 
Los sondeos a percusión se utilizan tanto en suelos granulares como 
cohesivos, pudiendo atravesar suelos de consistencia firme a muy firme. Las 
profundidades alcanzadas mediante este sistema rondan los 15-20 m. El sistema 
de perforación consiste en la hinca de tubos de acero mediante el golpeo de una 
maza de 120 kg. que cae desde una altura de 1 m. Se deben contar 
sistemáticamente los golpes necesarios para la penetración de cada tramo de 20 
cm., lo que permite conocer la compacidad del suelo atravesado. Las tuberías 
empleadas, que pueden tener diámetros exteriores de 91, 128, 178 y 230 mm., 
actúan como entibación durante la extracción de muestras mediante cucharas. 
 
Existe otro tipo de métodos especiales de perforación, denominados métodos de 
perforación a destroza, debido a que en ellos no se obtiene testigo, sino el 
material triturado que sale por la boca del sondeo. La perforación se puede 
realizar con trépano, martillo de fondo o rotopercusión y la trituración con tricono. 
La utilización de uno u otro método depende del tipo de terreno a perforar y del 
objetivo de la investigación. 
 
En general, deben tenerse en cuenta las recomendaciones siguientes: 
 
17 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
-Los sondeos a percusión son preferibles por su calidad, siempre que el terreno 
pueda atravesarse con la energía disponible. Este método está especialmente 
indicado para reconocer suelos granulares gruesos, adaptando el diámetro del 
sondeo al tamaño de las gravas o bolos a atravesar. Normalmente se emplea 
tubería de hinca o tomamuestras a percusión. En el caso de suelos granulares 
finos se utilizan cucharas con cierre inferior de clapeta. 
 
-Los sondeos a rotación, mediante baterías simples,dobles o especiales pueden 
utilizarse en cualquier tipo de terreno, aunque pueden existir problemas en el 
caso de suelos granulares finos bajo el nivel freático y en el caso de bolos o 
gravas gruesas. 
 
-Los sondeos con barrena helicoidal pueden utilizarse cuando: 
 
• El terreno es relativamente blando y cohesivo 
• No existen capas cementadas o de gravas, ni capas arenosas fluyentes 
bajo el nivel freático. 
• No es necesario atravesar o penetrar en rocas. 
• No se requiere una precisión superior a ±0,50 metros en la localización en 
profundidad de las diferenes capas. 
• Se puede justificar la calidad de las muestras inalteradas extraídas por el 
eje hueco de la barrena. 
 
-Cuando se conozca suficientemente la naturaleza y propiedades de costras, 
capas duras o rocosas intercaladas en el espesor de terreno a reconocer pueden 
utilizarse métodos destructivos como la perforación con trépano, martillo de 
fondo o percusión, y la trituración con tricono o corona ciega. 
 
En la tabla siguiente se resumen de forma muy general los diversos métodos de 
realizar sondeos mecánicos. 
 
 
 
 
 
 
 
18 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
C.- Ensayos en sondeos 
 
Los ensayos más frecuentes realizados en sondeos son los siguientes: 
 
C.1.- Ensayo de Penetración Standard (SPT), con cuchara bipartida o puntaza. 
 
El Ensayo de Penetración Estándar (SPT, del inglés, standard penetration test) 
nace en el año 1927, desarrollado por un sondista de la Raymond Concrete Pile 
Co., quien propuso a Terzaghi contabilizar el número de golpes necesarios para 
hincar 1 pie (30 cm) el tomamuestras que solía utilizar para obtener muestras en 
terrenos sin cohesión (arenas). 
 
De forma resumida, la realización del ensayo es la siguiente (ver esquema en la 
figura siguiente): 
 
 
 
 
1. Se ejecuta un taladro hasta la cota deseada y en el fondo del mismo (una vez 
limpiado cuidadosamente) se introduce un tomamuestras de dimensiones 
estándar (Figura 1-2) que consta de tres elementos: zapata, tubo bipartido y 
cabeza de acoplamiento con el varillaje. 
 
2. Se hinca el tomamuestras en el terreno 60 cm, contando en número de golpes 
necesarios para hincar tramos de 15 centímetros. La hinca se realiza mediante 
una maza de 63,5 kg (140 libras) que cae desde una altura de 76 cm (30 
pulgadas) en una cabeza de golpeo o yunque. La lectura del golpeo del primer y 
último tramo no se tienen en cuenta, por posible alteración del suelo o derrumbes 
de las paredes del sondeo en el primer caso y por posible sobrecompactación en 
el segundo. Los valores de golpeo de los tramos centrales de 15 cm sumados 
conducen al parámetro N30 SPT o NSPT, denominado también resistencia a la 
penetración estándar. Cuando el terreno es muy resistente se detiene la prueba 
para un determinado número de golpes (rechazo, R), anotando la penetración 
realizada. 
 
19 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
 
La norma ASTM D1586-84 indica que la prueba se puede dar por finalizada: 
 
1. Cuando se aplican 50 golpes para un tramo de 15 cm. 
2. Cuando se aplican 100 golpes en total. 
3. Cuando no se observa penetración alguna para 10 golpes. 
 
El tomamuestras permite por otro lado recoger una muestra alterada del suelo 
que posibilita su identificación. Normalmente esta muestra se introduce en un 
recipiente o bolsa en los que se indican en una etiqueta, además de los datos de 
la obra, sondeo, profundidad, fecha, etc., los valores de golpeo obtenidos, por 
ejemplo: 
 
• 5/7/6/8 
• 12/13/21/R:50/5cm 
 
El valor del parámetro NSPT será 7+6 = 13 en el primer caso y 13+21 = 34 en el 
segundo. Asimismo, para este segundo ejemplo se ha llegado al rechazo (50 
golpes en un tramo de 15 cm) habiendo penetrado sólo 5 centímetros. 
 
El ensayo SPT es por naturaleza simple y puede ser intercalado con facilidad en 
cualquier sondeo de reconocimiento. Puede ejecutarse en casi cualquier tipo de 
suelo, incluso en rocas blandas o meteorizadas. Los resultados de la prueba, 
difundida ampliamente en todo el mundo, se correlacionan empíricamente con 
las propiedades específicas in situ del terreno. Existe una abundante bibliografía 
a este respecto. La gran mayoría de datos y correlaciones corresponden a 
terrenos arenosos. La presencia de gravas complica la interpretación, cuando no 
impide su realización. En resumen, el ensayo resulta apropiado para terrenos en 
los que predomina la fracción arena, con reserva tanto mayor cuanto mayor es la 
proporción de la fracción limo-arcilla o de fracción grava. 
 
Existen numerosas correlaciones empíricas con diversos parámetros 
geotécnicos. Debe entenderse claramente que estas relaciones son 
aproximativas y su uso resulta tanto más adecuado cuanto mayor sea la 
experiencia de quien las utiliza. 
 
a). Correlaciones en suelos granulares 
 
a.1) Densidad Relativa 
 
Terzaghi y Peck (1948) publicaron la primera correlación entre NSPT y la 
Densidad Relativa (DR%), válida para arenas cuarzosas (ver figura adjunta). 
20 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
 
En base a los valores de la DR%, Terzaghi y Peck establecieron lo que hoy es un 
clásico sistema de clasificación de las arenas según su compacidad. El índice 
SPT está relacionado con la compacidad de las arenas. Terzaghi y Peck 
propusieron la siguiente relación: 
 
N SPT Compacidad 
0-4 Muy floja 
5-10 Floja 
11-30 Media 
31-50 Densa 
>50 Muy densa 
 
a.2) Angulo de Rozamiento Interno
 
Los datos que se obtienen del ensayo SPT permiten estimar el ángulo de 
rozamiento interno de los materiales granulares, bien indirectamente, deducido 
de los valores estimado de la densidad relativa, bien directamente a partir del 
valor NSPT (tendencia actual). En la Figura siguiente se presentan conjuntamente 
los ábacos propuestos por Meyerhof (1956) y Peck et al. (1974). 
 
21 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
 
Existen otras correlaciones directas entre el valor de NSPT y el ángulo de 
rozamiento interno. En la figura siguiente se presenta la correlación de De Mello 
(1971): 
 
 
 
 
 
22 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
Existe una correlación evidente entre el ángulo de rozamiento de los suelos 
granulares y el índice N (SPT). La de mayor difusión probablemente sea la 
definida por Schmertmann que puede aproximarse con la siguiente expresión 
analítica: 
 
 
⎟⎟
⎟⎟
⎠
⎞
⎜⎜
⎜⎜
⎝
⎛
+
=
a
v
SPT
p
N
0'3,202,12
tan σφ 
 
donde: 
 
φ: ángulo de rozamiento. 
NSPT: índice del ensayo SPT. 
σ’v0: presión vertical efectiva al nivel del ensayo. 
pa: presión de referencia (1 bar = 100 kPa). 
 
a.3) Deformabilidad
 
Existen numerosas correlaciones entre el valor de NSPT que permiten deducir 
reglas empíricas o semiempíricas a partir de las cuales se puede estimar los 
módulos de deformabilidad. 
 
En general se utiliza el módulo confinado (edométrico), aunque muchas veces 
esto no queda claro en la literatura ya que muchos autores hacer referencia 
simplemente a un módulo de deformabilidad. 
 
Mitchell y Gardner (1975) resumen una serie de trabajos publicados hasta esa 
fecha, detallando el tipo de suelo y la base de cada método. Estas correlaciones 
con el Módulo Confinado se presentan en la Figura siguiente. Se observa la 
enorme dispersión de los valores. De estas correlaciones, sólo la de Schultze y 
Meltzer (1965) tienen en cuenta la presión de confinamiento. 
 
Las relaciones entre NSPT y Es, pueden expresarse de forma general mediante la 
relación lineal empírica: 
 
 ES = S1 NSPT + S2
 
Algunos valores de estas constantes se muestran en la tabla siguiente: 
23 
MANUALDE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
 
Como resumen, a continuación se incluye una tabla en la que se muestran una 
serie de parámetros correlacionados con el valor NSPT para suelos granulares: 
 
 
 
b). Correlaciones en suelos cohesivos 
 
En los terrenos cohesivos las correlaciones basadas en los resultados del 
ensayo SPT sólo deben considerarse orientativas. La dispersión de las 
correlaciones en suelos cohesivos es mucho mayor que en los terrenos 
granulares. Las presiones insterticiales que se generan en el momento del 
golpeo y los rozamientos parásitos afectan substancialmente los resultados. 
 
b.1) Resistencia a compresión simple 
 
Muchos investigadores han intentado realizar correlaciones entre el valor de N 
SPT y la resistencia a la compresión simple de suelos arcillosos. La dispersión 
de los resultados obtenidos es muy grande, como puede apreciarse en la Figura 
siguiente (NAVFAC, 1971). En la tabla incluida a continuación se presentan 
también correlaciones entre el golpeo NSPT , la densidad saturada y la resistencia 
a la compresión simple según la adaptación de Hunt (1984) a los trabajos de 
Terzaghi y Peck (1948). 
 
24 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
Valores de la resistencia a compresión simple a partir de Nspt para suelos 
cohesivos de distinta plasticidad. NAVFAC, 1971 
 
 
 
Finalmente, se incluye una tabla resumen con correlaciones orientativas del 
ensayo SPT con otros parámetros para suelos arcillosos. 
 
 
25 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
C.2.- Ensayo presiométrico 
 
El Ensayo Presiométrico consiste en efectuar una puesta en carga lateral 
creciente del terreno por medio de una sonda cilíndrica dilatable radialmente y 
que se introduce en un taladro. Se trata, pues, de un ensayo de carga-
deformación. Normalmente el ensayo se realiza en el interior de un sondeo 
previamente perforado (PBP, Pre-Boring Pressuremeter) donde se introduce el 
equipo presiométrico. El equipo consta de tres componentes principales (ver 
figuras siguientes): 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Estos ensayos no están normalizados en España, realizándose normalmente al 
amparo de la normativa francesa (NFP 94-110). 
26 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
En los presiómetros se utiliza un recinto cerrado por una membrana que aloja un 
volumen de fluido controlable. El aumento del volumen de ese fluido comprime la 
membrana contra las paredes del sondeo (ver fotos adjuntas de la deformación 
de la sonda presiométrica). 
 
 
 
Con estos dos datos (volumen y presión) se puede preparar el diagrama 
deformación-presión que se ilustra en el esquema de la figura siguiente: 
 
 
 
Normalmente los resultados del ensayo presiométrico se representan en gráficos 
cuya abcisa corresponde a la deformación radial, εr, definida por la expresión: 
 
 
0
0
r
rr
r
−=ε 
 
 
27 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
donde: 
 
r = radio medio de la cavidad en un momento del ensayo. 
r0 = radio inicial de referencia. 
 
Para el ensayo de rocas y de suelos muy firmes se pueden utilizar equipos más 
robustos, que se denominan dilatómetros y que miden la deformación mediante 
extensómetros, con lo cual se obtiene la deformación radial directamente y con 
mayor precisión. 
 
El tarado del equipo, antes de su utilización, permite conocer qué parte de la 
presión que se aplica es necesaria para deformar la membrana y ese valor se 
debe restar a la presión aplicada para obtener la presión corregida que es la que 
debe utilizarse en el gráfico de resultados. 
 
La interpretación del ensayo presiométrico permite conocer tres presiones de 
interés: 
 
a) Presión horizontal inicial, ph0. Es la presión que ha de ejercerse para 
establecer el contacto membrana-terreno y deformarlo hasta su posición 
original, antes de realizar el sondeo. En los presiómetros convencionales esa 
presión corresponde al quiebro de la curva presión- deformación (punto de 
máxima curvatura). 
 
b) Presión de fluencia, pf. Es la presión donde acaba un tramo recto que suele 
aparecer en estos diagramas. A partir de ella, las deformaciones son 
claramente no lineales. Su determinación detallada puede realizarse con 
ciertas técnicas, aunque en la práctica rutinaria suele definirse casi a simple 
vista. 
 
c) Presión límite, pl. Es la presión que provoca una deformación radial del 41% 
(deformación volumétrica del 100%). Si el ensayo no ha alcanzado esa 
deformación, es necesario hacer una extrapolación para obtenerla. 
 
 
Los datos mencionados (ph0, pf y pl) pueden utilizarse para el proyecto de 
cimentaciones superficiales y profundas. 
 
Además, la interpretación de la curva presiométrica permite obtener, si bien sólo 
con una aproximación grosera, ciertos parámetros característicos del 
comportamiento del terreno, tal como se indica a continuación. 
 
El coeficiente de empuje al reposo, K0, del terreno se puede obtener mediante la 
expresión siguiente: 
 
 
0
0
0 'v
h upK σ
−= 
 
donde: 
 
ph0: presión horizontal inicial, deducida del ensayo. 
u: presión intersticial al nivel del ensayo. 
σ’v0: presión vertical efectiva al nivel del ensayo. 
 
28 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
El módulo de rigidez transversal, G, del terreno, para el nivel de deformaciones 
del ensayo y para la dirección de carga correspondiente (perpendicular al eje del 
sondeo), se puede obtener mediante la expresión: 
 
 
V
pVG Δ
Δ= 0 
 
donde: 
 
Δp: aumento de presión entre los dos puntos donde se advierte una respuesta 
lineal. 
ΔV: aumento de volumen entre esos dos mismos puntos. 
V0: volumen de referencia. Normalmente se debe utilizar como volumen de 
referencia el correspondiente al inicio del tramo elástico (tramo recto). 
 
 
 
 
Se define como módulo presiométrico, Ep, al valor siguiente: 
 
 
)1(2 ν+=
GEP 
 
donde: 
G: módulo de rigidez transversal, antes definido. 
ν: módulo de Poisson. 
 
En la tabla adjunta se indican unos valores orientativos de módulos 
presiométricos y presiones límite para distintos tipos de suelo. 
 
 
 
29 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
Los ensayos presiométricos permiten conocer la naturaleza del terreno ya que, 
para su ejecución, requieren la extracción previa del terreno donde ha de alojarse 
el equipo de ensayo. Estos testigos deben ser objeto de análisis de laboratorio; al 
menos deben realizarse con ellos los ensayos de identificación más elementales. 
 
En suelos arcillosos saturados es posible obtener un valor recomendado de la 
resistencia al corte sin drenaje, su, mediante un análisis específico de la zona no 
lineal del final de la curva presiométrica (presión de ensayo comprendida entre pf 
y pl). La expresión correspondiente es: 
 
 
⎟⎟⎠
⎞
⎜⎜⎝
⎛
−
−
−=
01
02
12
ln
VV
VV
ppsu 
 
donde: 
 
p1, p2: presiones cualquiera en el tramo pf─pl. 
V1, V2: volúmenes de fluido en el presiómetro para esas mismas presiones. 
V0: volumen de referencia. Se tomará el que corresponde a ph0. 
 
Teóricamente el valor de su sería independiente de los puntos 1 y 2 que se elijan, 
pero será necesario tantear distintos valores para obtener un valor razonable. 
 
En suelos arenosos permeables, siempre que se garantice que durante el 
ensayo no se generan presiones intersticiales importantes, se puede obtener, de 
esa misma rama curva final del ensayo, una idea aproximada del ángulo de 
rozamiento interno del terreno, mediante la expresión siguiente: 
 
 φ= 7° (1+10 s) > 30° 
 
donde:⎟⎟⎠
⎞
⎜⎜⎝
⎛
−
−
⎟⎟⎠
⎞
⎜⎜⎝
⎛
−
−
=
01
02
01
02
ln
ln
rr
rr
up
up
s 
 
p1, p2: presiones cualquiera en el tramo pf — pl. 
r1, r2: radios del presiómetro para esas mismas presiones. 
r0: radio de referencia, se tomará el que corresponda a ph0. 
u0: presión hidrostática del agua intersticial al nivel del ensayo. 
 
 
C.3.- Ensayo de molinete o veleta (“vane test”) 
 
Consiste en hincar en el terreno un “molinete” constituido por cuatro placas de 
acero ortogonales (ver figura adjunta) soldadas a un varillaje y medir el par de 
torsión T al girar el dispositivo hasta la rotura del terreno. 
 
Existen normalizaciones de este ensayo (ASTM D 2573, DIN 4096). En España 
está en vías de normalización. 
 
30 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
 
Como el cizallamiento es relativamente rápido, el agua no tiene tiempo a ser 
evacuada y se trata entonces de un ensayo no consolidado y no drenado 
(Unconsolidated-undrained). 
 
El par de torsión T aplicado está equilibrado por el momento de las reacciones de 
cizallamiento del suelo sobre la superficie circunscrita al molinete. Se hace de 
crecer T hasta lograr la ruptura del suelo (valor pico), que se manifiesta por una 
disminución brusca de la fuerza aplicada. A continuación sucede una 
estabilización del momento, inferior al valor máximo pero no nulo (valor residual). 
 
 
En la figura siguiente se presenta la curva de un ensayo controlado por 
ordenador en tiempo real a su ejecución. Se observa un primer tramo horizontal 
que corresponde a la medida del rozamiento de las varillas más el niple de unión 
(valor que debe ser deducido de la resistencia pico). 
 
 
 
 
El ensayo de molinete o «vane test», realizado en el fondo de sondeos o 
mediante hinca directa hasta el nivel de ensayo, está especialmente indicado 
para investigar la resistencia al corte sin drenaje de suelos arcillosos blandos. 
 
 
31 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
Para la interpretación del ensayo se admite que la tensión de cizallamiento 
máxima (pico), igual a la cohesión no drenada, está uniformemente repartida 
sobre la superficie circunscrita al molinete. Cálculos teóricos muestran que esta 
hipótesis no es estrictamente así. En el caso de un molinete rectangular, por 
ejemplo, el suelo sobre la superficie cilíndrica entrará en plasticidad, mientras 
que sobre los discos extremos estará aún en elasticidad (Casan, 1982). En la 
práctica, no obstante, las desviaciones debidas a la hipótesis simplificadora 
resultan despreciables, menos del 4%. La distribución de tensiones de corte de 
un molinete rectangular puede observarse en la figura siguiente: 
 
 
 
Para calcular la resistencia al corte no drenada su, se utiliza el máximo momento 
torsor T corregido para deducir los rozamientos parásitos: 
 
 
k
Tsu = 
 
siendo: 
T = Torsión máxima aplicada 
k = Constante dependiente de la geometría de la paleta. 
 
Resumiendo, la expresión general para paletas rectangulares de altura H y 
diámetro D, es: 
 
 3
2
28
3
⎟⎠
⎞⎜⎝
⎛
=
D
Tsu
π
 
 
 
 
 
 
 
32 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
Para paletas trapezoidales se tiene: 
 
 
⎟⎟
⎟⎟
⎠
⎞
⎜⎜
⎜⎜
⎝
⎛
⎟⎠
⎞⎜⎝
⎛++⎟⎠
⎞⎜⎝
⎛
=
2
311
23
2 3
D
H
sen
D
Tsu
α
π
 
 
Estudios de deslizamientos en terraplenes construidos sobre arcillas plásticas 
(Bjerrum, 1972, 1973) han demostrado que la cohesión movilizada en el terreno 
es realmente menor que la cohesión medida con este ensayo, siendo la 
diferencia función del Indice de Plasticidad IP. Bjerrum propone la introducción 
de un coeficiente corrector μ: 
 
 Su = Su vane μ 
 
En la figura siguiente se presenta la relación entre μ (eje de ordenadas) y el 
índice de plasticidad (eje de abscisas). Se observa que su está más 
sobreestimada cuanto más plástico es el suelo. Esta corrección es importante 
para suelos con índice de plasticidad superior a 30 (IP>30). 
 
 
 
 
Los parámetros de resistencia que se obtienen en este ensayo están igualmente 
indicados para la determinación de cargas de hundimiento de cimentaciones 
superficiales o profundas en condiciones no drenadas así como para el estudio 
de estabilidad de taludes de dragado o relleno, también en condiciones no 
drenadas. 
 
33 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
D) Pruebas de penetración 
 
D.1.- Ensayos de penetración dinámica 
 
La forma más económica y sencilla de ensayar el terreno en profundidad 
consiste en la hinca de un varillaje con una punta metálica de forma conveniente. 
El ensayo penetrométrico más difundido en España (y en Europa) es el conocido 
con el nombre de Borro (NLT 261). Este equipo consiste en un varillaje metálico 
macizo de 32 mm de diámetro exterior que hinca una puntaza metálica de la 
forma y dimensiones que se indican en la figura siguiente. La hinca se realiza 
con una maza de 65 kg (igual peso que la del SPT) que cae libremente desde 50 
cm de altura. 
 
 
 
 
 
 
 
Durante la hinca se van contabilizando los números de golpes para hacer 
avanzar la hinca 20 cm. El resultado se suele representar en forma de diagrama 
de ese número de golpes «NB» obtenido en cada profundidad (ver diagrama 
siguiente). 
B
34 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
 
Como quiera que el tamaño de la puntaza es más amplio que el diámetro del 
varillaje, el rozamiento entre éste y el terreno es pequeño y el resultado del 
ensayo estaría relacionado con la resistencia del terreno en el entorno de la 
punta. 
 
La hinca se continúa hasta la profundidad de interés previamente fijada o hasta 
alcanzar una resistencia elevada. La punta metálica queda perdida en el terreno 
al recuperar el varillaje. 
 
Para evitar que el varillaje roce con el terreno se le suelen dar, aunque sea 
manualmente, algunas vueltas. Existen equipos de penetración en los que este 
giro se hace de una manera regular y donde, además, existe un mecanismo de 
escape de la maza de golpeo que evita también los posibles rozamientos del 
cable de izado. 
 
Existe, dentro del equipo Borro, otra puntaza diferente, con forma cónica y de 
menor tamaño. 
 
Además del equipo Borro existen, aunque se empleen con menos frecuencia, 
penetrómetros dinámicos como el DIN ligero o el Stump, que se idearon, 
inicialmente para ser hincados manualmente (sin motor y cabrestante para el 
izado). 
 
 
 
35 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
En España están normalizados dos ensayos de penetración dinámica continua: 
 
- DPSH. Norma UNE 103.801. 
Ensayo de penetración dinámica superpesado. 
 
- DPH. Norma UNE 103.802. 
Ensayo de penetración dinámica pesado. 
 
 
Entre distintos penetrómetros dinámicos continuos se puede establecer una 
equivalencia de manera que la energía específica de la hinca sea semejante. 
 
El índice NB del ensayo tipo Borro (con escape automático de la maza de 65 kg 
cayendo de 50 cm de altura con puntaza cuadrada de 4 x 4 cm y medida del 
número de golpes para avanzar la hinca 20 cm) suele ser mayor que el N (SPT) 
a grandes profundidades y menor en los primeros metros. La correlación, sin 
embargo, es muy dispersa y, de ser necesaria su definición, debe ser analizada 
en cada formación y a cada profundidad o utilizar correlaciones previamente 
establecidas o basadas en experiencias locales contrastadas. 
B
 
Los penetrómetros dinámicos tienen su mejor campo de aplicación en la 
determinación de la profundidad de suelos blandos o de consistencia media que 
apoyan sobre formaciones mucho más resistentes donde la hinca sedetiene. 
 
El ensayo de penetración es muy útil para detectar cambios de compacidad en el 
terreno (zonas más blandas de los rellenos, oquedades, defectos de 
compactación en terraplenes, etc...). Este ensayo es también útil en la estimación 
de la facilidad de hinca de pilotes. 
 
Es recomendable realizar ensayos de penetración dinámica en las mismas 
alineaciones que los sondeos de reconocimiento y/o en los mismos perfiles en 
que se realicen prospecciones geofísicas; sus resultados permiten confirmar la 
homogeneidad del terreno entre los puntos reconocidos mediante sondeos o 
detectar posibles heterogeneidades locales que adviertan sobre la necesidad de 
densificar la malla de sondeos mecánicos. 
 
En cualquier caso y dadas las posibles variaciones en cuanto a detalles de la 
ejecución, se recomienda que en los diagramas de resultados de estos ensayos 
figuren explícitamente los datos siguientes: 
 
-Peso de la maza y altura de caída. 
-Forma de escape de la maza (manual o automática). 
-Forma de la puntaza, en un pequeño dibujo. 
 
La resistencia al avance de las tuberías de entubación de los sondeos colocadas 
mediante hinca, así como el control del número de golpes necesarios para hincar 
el tomamuestras, son datos que pueden servir también para estimar la 
consistencia del terreno. A esos efectos, sería necesario conocer los detalles de 
esas hincas. 
 
Se recomienda no utilizar los datos de los penetrómetros dinámicos continuos 
con el fin de cuantificar cargas de hundimiento o asientos de cualquier tipo de 
cimentación si no es a través de una experiencia local claramente contrastada 
por otros métodos. 
 
36 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
D.2.- Ensayos de penetración estática 
 
El ensayo de penetración estático (o CPT «Cone Penetration Test») consiste en 
una hinca mediante empuje, a velocidad lenta (1 a 3 cm./s), de una varilla con 
una punta adecuada, dentro del terreno. El equipo más común en España (y en 
Europa) es el cono holandés (UNE 103804). 
 
El avance del penetrómetro se realiza en intervalos discontinuos de modo que se 
pueda medir la resistencia a la penetración de la punta sola o del conjunto 
completo. Existen equipos automáticos que miden, en una hinca continua, la 
resistencia al avance en la punta y la resistencia a la penetración por fuste en el 
manguito lateral. 
 
Los equipos varían según su capacidad de empuje y distintas formas de las 
puntas. Existen normativas en otros países sobre la ejecución del ensayo (DIN 
4094, ASTM D-3441) cuya aplicación puede ser de interés. 
 
En los gráficos de resultados conviene incluir un esquema del tipo de punta 
utilizado, pues este dato no siempre es el mismo. 
 
37 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
 
 
 
38 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
La interpretación de estos ensayos permite determinar la resistencia al corte del 
terreno y obtener una descripción indirecta del tipo de suelo atravesado y de su 
compresibilidad. En ese sentido, se necesitarían reconocimientos 
complementarios por otros métodos para obtener una descripción cierta de la 
naturaleza del terreno e, incluso, una determinación más exacta de su 
deformabilidad. 
 
La resistencia al corte del terreno obtenida mediante estos ensayos es 
especialmente adecuada para el cálculo de la carga de hundimiento de 
cimentaciones profundas. 
 
Existe una relación entre la resistencia por la punta en el ensayo de penetración 
estática, qc, y la densidad relativa de las arenas. También existe una relación 
entre esa resistencia de las arenas y el módulo de deformación que se debe 
utilizar en los cálculos de asientos de cimentaciones superficiales (ver figura 
siguiente -Schmertmann (1978): 
 
 
 
Para suelos granulares existe una correlación evidente entre la resistencia por 
punta del ensayo de penetración estática y el ángulo de rozamiento interno. 
39 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
Aunque esta correlación depende de varios factores, como valor orientativo se 
puede usar ia siguiente expresión dada por Robertson y Campanella: 
 
 
0
0
'
log38,010,0
v
vcqtg σ
σφ −+= 
 
donde: 
 
φ: ángulo de rozamiento interno. 
qc: resistencia por punta. 
σv0: presión vertical total al nivel del ensayo. 
σ’v0: presión vertical efectiva al nivel del ensayo. 
 
El ensayo de penetración estática es especialmente adecuado para medir ia 
resistencia al corte sin drenaje de los suelos cohesivos blandos. La relación que 
se suele establecer para los suelos cohesivos de los fondos marinos es: 
 
 ( )vc
k
u qN
s σ−= 1 
 
donde: 
 
su: resistencia al corte sin drenaje. 
qc: resistencia unitaria por la punta al avance del cono. 
σv0: presión vertical total en el terreno al nivel del ensayo. 
NK: factor adimensional de proporcionalidad. 
 
El factor NK está próximo a 15. El ingeniero puede utilizar este dato como 
referencia básica pero sabiendo que es un factor variable dependiente del tipo de 
terreno, de la profundidad y de otros posibles factores aún no bien conocidos. 
 
E) Ensayos de carga con placa 
 
Los ensayos de placa de carga están especialmente indicados en el estudio de la 
capacidad portante de rellenos compactados y también de terrenos naturales. 
 
La interpretación de sus resultados permite obtener valores de los módulos de 
deformación aplicables a la predicción de asientos así como una estimación 
aproximada de las cargas de hundimiento de las cimentaciones superficiales. 
 
Dado que el ensayo afecta a una zona pequeña del terreno para los tamaños 
usuales de las placas (ver NLT 357, Ø 30, 60 ó 76,2 cm), estos ensayos no 
permiten conocer la deformabilidad del terreno más que en la zona próxima a la 
superficie del ensayo. 
 
F) Toma de muestras 
 
La toma de muestras es una de las actividades importantes de las campañas de 
reconocimiento geotécnico. Por ese motivo ha de estar planificada antes de 
comenzar la campaña de reconocimientos. 
 
 
40 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
Las muestras pueden obtenerse de sondeos, de calicatas o de lugares 
especificados donde no se haya hecho perforación o excavación previa. 
 
Las muestras pueden ser alteradas, esto es, que después de tomadas tengan 
otra densidad o humedad distintas de las originales o inalteradas, esto es, en las 
que la humedad y la densidad (y por lo tanto la resistencia, la deformabilidad y la 
permeabilidad) sean lo más próximas posibles a las originales. En cualquier caso 
las muestras han de ser representativas del suelo que se quiere ensayar; en ese 
sentido deben evitarse siempre los lavados o segregaciones de las muestras 
salvo que ese aspecto, por alguna razón singular, no tenga importancia en el 
problema en estudio. 
 
Las muestras alteradas pueden tomarse manualmente, con pico y pala, con 
excavadoras mecánicas o proceder de testigos de sondeos. Pueden 
transportarse en sacos o bolsas. 
 
Las muestras inalteradas o poco alteradas pueden tomarse con tomamuestras 
específicos (hincando tubos cortos biselados) de paredes de pozos, zanjas o 
calicatas previamente apuntalados. Deben empaquetarse, transportarse y 
conservarse en laboratorio hasta su ensayo de manera que no sufran alteración. 
 
La toma de muestras más usual de los reconocimientos geotécnicos se realiza 
en sondeos mediante tomamuestras específicos adaptados al tipo de terreno. En 
la tabla siguiente se resume la información relativa a los más empleados. 
 
 
41 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
La toma de muestras inalteradas o poco alteradas de suelos granulares limpios 
no es posible por procedimientos convencionales.En algunas arenas resultan 
eficaces los tomamuestras de pistón tipo Osterberg o tipo Bishop. 
 
La toma de muestras debe ser supervisada por el técnico responsable de los 
trabajos de campo. Es de gran importancia que el carácter más o menos alterado 
de las muestras tomadas sea estimado por un técnico experto. 
 
El procedimiento debe quedar documentado indicando, para cada muestra o 
grupo de muestras, su procedencia (sondeo, calicata u otro punto de 
coordenadas conocidas), la columna litológica correspondiente al lugar donde se 
hace la toma, la indicación expresa de su profundidad, la posición del nivel 
freático en el lugar donde se tomó la muestra así como cualquier observación 
que el técnico responsable crea oportuna. 
 
Ya que las muestras se toman para hacer ensayos de laboratorio, la 
programación del número de ellas y su ubicación sólo deberá definirse tras 
considerar los ensayos que resulten necesarios para analizar los problemas 
objeto del informe geotécnico. 
 
 
 
 
42 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
 
 
1.3.2 Ensayos de laboratorio 
 
Los ensayos de laboratorio constituyen hoy la herramienta principal para el estudio de 
las características geotécnicas del terreno. Rara vez será posible un estudio 
geotécnico correcto que no incluya ensayos de laboratorio. 
 
Existen ensayos de laboratorio destinados a definir la naturaleza del suelo, esto es, su 
composición granulométrica y mineralógica, sus propiedades índice, etc... Existen 
otros ensayos de laboratorio especialmente destinados al estudio de la resistencia, de 
la deformabilidad y de la permeabilidad. 
 
A) Ensayos de identificación en suelos 
 
Dentro de este grupo de ensayos de laboratorio se consideran incluidos los 
siguientes: 
 
- Ensayos granulométricos por tamizado y por sedimentación (UNE 103.101 y 
UNE 103.102). 
- Ensayo de límites de Atterberg (UNE 103.103 y UNE 103.104). 
- Densidades mínima y máxima de arenas (UNE 103.105 y UNE 103.106). 
- Determinaciones del peso específico de las partículas (UNE 103.302). 
- Análisis químicos del suelo. Contenido en sulfatos, carbonatos y materia 
orgánica como más interesantes (UNE 103.201 (cuantitativa) ó UNE 103.202 
(cualitativa), UNE 103.200 yUNE 103.204). 
- Análisis químicos del agua intersticial. 
 
Estos ensayos se pueden realizar con muestras alteradas o inalteradas. En 
cualquier caso exigen desmenuzar previamente la muestra. 
 
 
 
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MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
Con los dos primeros ensayos (granulometría y límites de Atterberg) es posible 
clasificar los suelos dentro de tipos cuyas características geotécnicas son 
similares. A estos efectos se recomienda utilizar el sistema unificado de 
clasificación de suelos, que está ampliamente difundido. 
 
También se consideran de este grupo los ensayos de densidad seca y humedad 
natural que permiten conocer las dos variables más importantes del estado del 
suelo. Su determinación debe hacerse, sin embargo, en muestras inalteradas o 
poco alteradas. 
 
B) Ensayos de compresión simple en suelos 
 
Están indicados para ensayar muestras de suelos cohesivos de consistencia 
media, firme o muy firme, inalteradas o poco alteradas, así como suelos 
cohesivos recompactados. UNE 103.400. De su resultado se obtiene una idea 
precisa de la resistencia al corte del suelo en condiciones de saturación similares 
a las del ensayo. 
 
El resultado puede ser poco preciso en arcillas que muestren síntomas de 
fisuración. 
 
Siempre que se haga este ensayo se recomienda que se determine 
específicamente, en cada probeta, la humedad y la densidad seca antes del 
ensayo. 
 
La resistencia a la compresión simple de los suelos arcillosos puede calificarse 
de acuerdo con la siguiente escala: 
 
 
 
C) Ensayo de corte directo 
 
Está indicado para cualquier tipo de muestra de suelos cohesivos o granulares, 
estén o no alterados. Evidentemente la preparación de probetas de ensayo 
procedentes de muestras arenosas inalteradas es complicada y requiere técnicas 
especiales que desaconsejan su utilización. 
 
El ensayo de corte directo puede realizarse con las probetas semisaturadas, tal 
como esté la muestra de las que procedan, o con una saturación adicional 
provocada en el equipo de ensayo. 
 
Del ensayo se puede obtener una estimación aproximada de la resistencia al 
corte. Las condiciones de deformación son tan poco homogéneas en la caja de 
corte que no se debe esperar precisión en los parámetros resistentes. Por ese 
motivo su utilización sólo es aconsejable cuando no existe la posibilidad de hacer 
ensayos triaxiales. 
44 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
Existe una versión de ensayo de corte directo normalizado en España UNE 
103.401. 
 
Para el estudio de suelos de grano grueso y, sobre todo, para el caso de gravas 
y escolleras finas (materiales de enrase de las banquetas) son necesarios 
equipos de grandes dimensiones. En España se dispone de cajas de corte de 
hasta 1 m x 1 m. 
 
D) Ensayo triaxial de suelos 
 
El ensayo está especialmente indicado para conocer la resistencia y la 
deformabilidad del suelo ante distintos niveles de confinamiento. Se puede 
realizar con muestras de cualquier tipo de suelo ya sean alteradas o inalteradas. 
Es dificil, sin embargo, preparar probetas inalteradas de suelos granulares. 
 
El ensayo se puede hacer con probetas de distinto tamaño. Usualmente (UNE 
103.402) se ensayan probetas cilíndricas de altura igual al doble del diámetro. 
Los diámetros usuales mínimos son 1 1/2” y es posible ensayar en España 
probetas de hasta 9” de diámetro con cierta normalidad cuando el suelo contiene 
gravas de hasta 2”. 
 
El ensayo suele hacerse con o sin consolidación previa y rompiendo con el 
drenaje abierto o cerrado. Son típicos los ensayos: 
 
U.U. - Sin consolidación previa y rotura sin drenaje. 
C.U. - Con consolidación previa y rotura sin drenaje. 
C.D. - Con consolidación previa y rotura con drenaje. 
 
El ensayo tipo C.U., se puede hacer con o sin medida de las presiones 
intersticiales de la probeta. 
 
El ensayo se suele realizar con probetas saturadas previamente con una 
contrapresión de 6 bares, aunque el ensayo U.U. puede hacerse con probetas no 
saturadas. 
 
En cada ensayo triaxial se suelen romper tres probetas, cada una de ellas 
sometidas a una presión de célula que supera en 0,5, 1 y 3 bares a la 
contrapresión de saturación. Es posible y aconsejable indicar otras presiones de 
ensayo que puedan ser más adecuadas al problema que se investiga. 
 
Durante la fase de carga vertical del ensayo hasta rotura se controla la 
deformabilidad tomando nota de la carga para cada 0,5 % adicional de reducción 
de altura de la probeta. El conocimiento de esos datos de deformación es 
esencial para deducir la deformabilidad del suelo. 
 
De la interpretación de ensayos triaxiales se puede obtener los parámetros de 
resistencia y deformación del suelo en condiciones no drenadas (ensayos U.U.) o 
drenadas (ensayos C.U. con medida de presiones intersticiales o ensayos C.D.). 
 
Los resultados de resistencia y deformación de suelos obtenidos de ensayos 
triaxiales son aplicables al estudio de todos los problemas geotécnicos. 
 
 
 
 
45 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
E) Ensayos edométricos 
 
Los ensayos edométricos están especialmente indicados para estudiar los 
asientos de suelos arcillosos blandos saturados. Pueden realizarse con muestras 
inalteradas de suelos cohesivos o muestras recompactadas de cualquier 
material. 
 
Estos ensayos suelen realizarse incrementando la carga vertical en escalones, 
de manera que cada nueva carga duplica la compresión vertical existente en el 
escalón anterior. Elensayo suele alcanzar la carga vertical máxima de 1 MN/m2 
aunque es posible especificar cargas mayores si el problema que se pretende 
analizar lo requiere. El ensayo incluye también el control de deformaciones 
durante la descarga. 
 
Cada escalón de carga del ensayo edométrico se mantiene durante un día. Se 
recomienda mantener este tiempo mínimo de espera y, por lo tanto, se 
desaconseja especificar duraciones menores al solicitar la realización de estos 
ensayos. 
 
Los ensayos edométricos suelen realizarse con probetas saturadas aunque es 
posible, en casos especiales, hacerlos con humedad menor o saturarlos después 
de haber colocado cierta sobrecarga. Estas variantes pueden ser de interés en el 
estudio del colapso o la expansión de suelos metaestables. 
 
De la interpretación de los ensayos edométricos se deducen parámetros 
geotécnicos relativos a la deformabilidad y permeabilidad del suelo 
especialmente indicados para el estudio de problemas de consolidación. 
Existe una norma española, UNE 103.405, que regula la realización de este 
ensayo. 
 
F) Ensayos de compactación 
 
Los ensayos de compactación están indicados para el estudio del efecto de la 
humedad en la densidad máxima que puede alcanzarse al compactar un suelo. 
Se realizan con muestras de cualquier tipo de suelo hasta gravas que puedan 
tener 25 mm (1”) de tamaño máximo (aprox.). 
 
Los ensayos más tradicionales son el Proctor Normal (UNE 103.500) y el Proctor 
Modificado (UNE 103.501). El segundo se realiza compactando en moldes más 
grandes y con energías mayores y por eso suelen alcanzar densidades 
claramente más altas (5 a 15% mayores que las correspondientes al P.N.). 
 
El resultado de estos ensayos es especialmente aplicable al control de calidad de 
compactación de rellenos. 
 
G) Otros ensayos 
 
Existen una gran variedad de ensayos, menos comunes, que pueden ser de gran 
interés en el estudio de determinados problemas geotécnicos específicos. 
 
Entre estos ensayos de suelos, se citan los siguientes: 
 
• CBR. Determinación de la capacidad portante para explanadas y capas 
de firmes. 
46 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
• Determinación de la presión de hinchamiento y de la expansión libre de 
suelos expansivos. 
• Ensayos de compresión brasileños (medida indirecta de la resistencia a 
tracción). 
• Ensayos de molinete (vane test) y penetrómetro en laboratorio. 
• Ensayos de permeabilidad mediante permeámetros de carga constante o 
variable. 
 
 
1.4 Esfuerzos en una masa de suelo: presiones normales y tangenciales 
 
1.4.1 Concepto de esfuerzo efectivo en un sistema de particulas 
 
La figura siguiente muestra una pequeña celda de medición hipotética (elemento A) 
enterrada en una masa de suelo. 
 
 
 
Imaginemos que esta celda se ha colocado de tal forma que las partículas del suelo no 
se han desplazado. Los diagramas de dicha figura representan las caras horizontal y 
vertical del elemento A, con las partículas de suelo que cargan sobre esas caras. 
Estas partículas ejercen generalmente fuerzas normales y tangenciales sobre dichas 
caras. Si cada cara es cuadrada, de lado a, podernos definir los esfuerzos que actúan 
sobre la celda por: 
 
2a
Nv
v =σ 2a
Nh
h =σ 2a
Tv
v =τ 2a
Th
h =τ 
 
donde Nv y Nh representan respectivamente las fuerzas normales en direcciones 
vertical y horizontal; Tv y Th son respectivamente las fuerzas tangenciales en 
direcciones vertical y horizontal; y σv, σh, τv y τh representan los esfuerzos 
47 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
correspondientes. De esta forma hemos definido cuatro esfuerzos que, al menos 
teóricamente, pueden visualizarse y medirse directamente. 
 
En este apartado, excepto cuando se indique lo contrario, se supondrá que la presión 
en la fase intersticial del suelo es nula; es decir igual a la presión en la atmosférica. De 
aquí que las fuerzas Nv, Nh, Tv y Th se deben únicamente a las fuerzas transmitidas a 
través del esqueleto minera!. En un suelo seco, el esfuerzo puede imaginarse como la 
fuerza existente en el esqueleto mineral por unidad de área de suelo. 
 
Realmente, es bastante difícil medir con precisión los esfuerzos existentes en el 
interior de un suelo, principalmente debido a que la presencia de un medidor altera el 
campo de esfuerzos que existiría si aquel no se hubiera colocado. Con objeto de que 
nuestra definición de esfuerzos se pueda aplicar con independencia de un medidor, 
podemos hacer pasar un plano imaginario a través del suelo, como se indica en la Fig. 
8.2 
 
 
 
Este plano atravesará los granos minerales y los espacios intersticiales. Puede 
suceder que este plano pase a través de uno o más puntos de contacto entre 
partículas. En cada punto en que este plano atraviesa materia mineral, la fuerza 
transmitida a través del esqueleto mineral puede descomponerse en fuerzas normales 
y tangenciales al plano. Las componentes tangenciales pueden a su vez 
descomponerse según un par de ejes coordenados. Estas diversas componentes se 
han representado en la Fig. 8.2 La suma de las componentes normales al plano de 
todas las fuerzas, dividida por el área del plano es el esfuerzo normal σ que actúa 
sobre dicho plano. Análogamente, la suma de todos los componentes tangenciales 
sobre el plano en la dirección x, por ejemplo, dividida por el área de este plano es el 
esfuerzo tangencial o cortante τx en la dirección x. 
 
Existe también otra imagen bastante utilizada para la definición de esfuerzos. Puede 
imaginarse un plano “ondulado” que se dobla justo lo suficiente para cortar materia 
minera! unicarnente en los puntos de contacto entre partículas. El esfuerzo es 
entonces la suma de las fuerzas de contacto dividida por el área del plano ondulado. 
La suma de todas las áreas de contacto será una parte muy pequeña del área total del 
48 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
plano, ciertamente menos de 1%. Por ello, el esfuerzo definido de esta forma difiere 
mucho numéricamente de los esfuerzos en los puntos de contacto. 
 
Al utilizar la palabra “esfuerzo” en este libro nos referimos al esfuerzo macroscópico, 
es decir fuerza/área total, tal como se ha definido con ayuda de las Figs. 8.1 y 8.2. 
 
 
1.4.2 Esfuerzos geostáticos 
 
Los esfuerzos en el interior de un suelo están producidos por las cargas exteriores 
aplicadas al mismo y por el peso del propio suelo. El sistema de esfuerzos debido a 
las cargas aplicadas suele ser bastante complicado. El sistema de esfuerzos 
correspondiente al peso propio del suelo también puede ser complicado. Sin embargo, 
existe un caso habitual en el que el peso del suelo da lugar a un sistema de esfuerzos 
muy sencillo: cuando la superficie del terreno es horizontal y cuando la naturaleza del 
suelo varía muy poco en dirección horizontal. Este caso se presenta frecuentemente, 
en especial en suelos sedimentarios. En tal caso los esfuerzos se denominan 
geostáticos. 
 
Esfuerzos geostáticos verticales 
 
En el caso que acabamos de describir, no existen esfuerzos tangenciales sobre planos 
verticales y horizontales trazados a través del suelo. De aquí que el esfuerzo vertical 
geostático a cualquier profundidad puede calcularse simplemente considerando el 
peso de suelo por encima de dicha profundidad. 
 
Así pues, si el peso específico del suelo es constante con la profundidad, se tiene: 
 
 zv γσ = 
 
donde z es la profundidad y γes el peso específico total del suelo. En este caso, el 
esfuerzo vertical variará linealmente con la profundidad, como se indica en la Fig. 8.3. 
 
49 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
 
Por supuesto el peso específico no es una constante con la profundidad. 
Generalmente un sueloresultará cada vez más compacto al aumentar la profundidad 
debido a la compresión originada por los esfuerzos geostáticos. Si el peso específico 
del suelo varía de forma continua con la profundidad, los esfuerzos verticales pueden 
calcularse por medio de la integral: 
 
 ∫= Zv dz
0
γσ
 
Si el suelo está estratificado y el peso específico de cada estrato es diferente, los 
esfuerzos verticales pueden calcularse adecuadamente por medio de la sumatoria: 
 
 ∑ Δ= zv γσ 
 
El ejemplo siguiente muestra el cálculo de los esfuerzos verticales geostáticos para un 
caso en el que el peso específico es función del esfuerzo geostático. 
 
Datos: La relación entre el esfuerzo vertical y el peso específico es 
 
γ = l,520+0,0022 σv
 
donde γ viene dado en ton/m3 y σv en ton/m2. 
 
Problema: Calcular los esfuerzos verticales a una profundidad de 30 m. para el caso 
de esfuerzos geostáticos. 
 
 
 
 
 
50 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
Solución por cálculo directo. A partir de la ecuación: 
 
 ∫∫ +==
Z
v
Z
v dzdz
00
)0022,0520,1( σγσ
(z en metros) 
 
 )0022,0520,1( vvdz
d σσ += 
 
La solución de esta ecuación diferencial es: 
 
 )1(90,6 0022,0 −= Zv eσ
 
Para z = 30 m: 
 
σv = 6.90 (1,0683 — 1) = 47,73 ton/m2. 
 
Esfuerzos geostáticos horizontales 
 
La relación entre los esfuerzos horizontal y vertical se expresa por un coeficiente 
denominado coeficiente de esfuerzo lateral o de presión lateral y se designa por el 
símbolo K. 
 
 
v
hK σ
σ= 
 
Esta definición de K se emplea indiferentemente de que los esfuerzos sean 
geostáticos o no. 
 
Incluso en el caso de que los esfuerzos sean geostáticos, el valor de K puede variar 
entre amplios límites, según que el suelo resulte comprimido o expandido en dirección 
horizontal, bien por las fuerzas de la naturaleza o de los trabajos del hombre. 
 
Frecuentemente tiene interés la magnitud del esfuerzo geostático horizontal en el caso 
especial en el que no se haya producido deformación lateral en el terreno. En este 
caso se habla del coeficiente de presión lateral en reposo y se designa por el símbolo 
K0. 
 
Como se ha comentado en apartados anteriores, un suelo sedimentario está formado 
por una acumulación de sedimentos de abajo a arriba. Al continuar aumentando el 
espesor de sedimentos, se produce una compresión vertical del suelo a todos los 
niveles debido al aumento del esfuerzo vertical. Al producirse la sedimentación, 
generalmente en una zona bastante extensa, no existe razón por la cual deba tener 
lugar una compresión horizontal apreciable. Por esta razón, se llega lógicamente a la 
conclusión de que en un suelo sedimentario el esfuerzo total horizontal debe ser 
menor que el vertical. Para un depósito de arena formado de esta manera, K0 suele 
tener un valor comprendido entre 0,4 y 0.5. 
 
Por otro lado, existe evidencia de que el esfuerzo horizontal puede ser superior al 
vertical si un depósito sedimentario ha tenido una carga importante en el pasado. En 
efecto, los esfuerzos horizontales quedaron “congelados” cuando el suelo estuvo 
51 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
cargado con un espesor mayor de tierras que el actual y no se disiparon al suprimirse 
esta carga. En este caso, K0 puede alcanzar valores de hasta 3. 
 
En la Fig. 8.3 se ha representado la gama de variación de los esfuerzos horizontales 
para el estado en reposo. 
 
1.4.3 Esfuerzos producidos por las cargas aplicadas 
 
Los resultados de la teoría de la elasticidad se emplean frecuentemente para calcular 
los esfuerzos producidos en una masa de suelo por las cargas aplicadas 
exteriormente. Esta teoría parte de la hipótesis de que el esfuerzo es proporcional a la 
deformación. La mayoría de las soluciones más útiles de esta teoría suponen también 
que el suelo es homogéneo (sus propiedades no varían de un punto a otro) e isótropo 
(sus propiedades son las mismas cualquiera que sea la dirección que se considere a 
partir del punto.) El suelo rara vez se ajusta exactamente a estas hipótesis, y muy a 
menudo no las cumple en absoluto. Sin embargo el ingeniero no tiene otra alternativa 
que emplear los resultados de esta teoría junto con su criterio personal. 
 
La obtención de la solución elástica para unas determinadas cargas y condiciones de 
contorno o frontera es bastante tediosa. En este libro no nos interesa la forma de 
obtener estas soluciones, sino más bien, la forma de emplearlas. En este capítulo se 
incluyen varias soluciones en forma gráfica. 
 
Carga uniforme sobre una superficie circular 
 
Las Figs. 8.4 y 8.5 dan los esfuerzos producidos por una presión normal 
uniformemente repartida Δqs que actúa sobre una superficie circular de radio R en la 
superficie de un semiespacio elástico. Estos esfuerzos deben añadirse a los esfuerzos 
geostáticos iniciales. La figura 8.4 proporciona los esfuerzos verticales. 
 
52 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
 
53 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
 
El significado de Δσ1 y Δσ3, dados en la Fig. 8.5, a lo largo del eje vertical, es el 
siguiente: 
 
 Δσ1=Δσv
 Δσ3=Δσh
 
El ejemplo siguiente muestra el empleo de estos ábacos. Los esfuerzos provocados 
por una carga superficial deben afiadirse a los esfuerzos geostáticos con objeto de 
obtener los esfuerzos finales después de aplicar la carga. 
 
Ejemplo 
Datos: Se tiene un suelo con γ = 1.70 ton/m3 y K0 = 0.5, cargado con Δqs = 25 ton/m2 
sobre una superficie circular de 6 m de diámetro. 
Problema: Calcular los esfuerzos vertical y horizontal a una profundidad de 3 m. bajo 
el centro. 
Solución: 
 
 Esfuerzo vertical (ton/m2) Esfuerzo horizontal (ton/m2) 
Esfuerzos iniciales γz=5,10 K0 γ z= 2,55 
Increm. de esfuerzos Fig 8.4: 0,64x25= 16,00 Fig 8.5b: 0,10x25= 2,50 
Esfuerzos finales 21,10 5,05 
 
Las figuras como las indicadas dan una idea de cómo se distribuyen los esfuerzos en 
una masa de suelo. Por ejemplo, la zona situada bajo la superficie cargada, donde los 
esfuerzos verticales son más importantes, se suele denominar frecuentemente “bulbo 
de esfuerzos”. Para una superficie circular cargada, los esfuerzos verticales son 
menores de 0.15 Δqs a una profundidad de 3R y menores de 010 Δqs a una 
profundidad de 4R. Generalmente se conidera que el bulbo de esfuerzos corresponde 
al volumen comprendido dentro del contorno correspondiente a 0.1 Δqs , aunque esta 
elección es totalmente arbitraria. 
 
 
54 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
Carga uniforme sobre una superficie rectangular
 
El gráfico de la Fig. 8.6 puede emplearse para obtener los esfuerzos verticales bajo la 
esquina de una superficie rectangular cargada. 
 
 
 
El ejemplo siguiente muestra la forma de emplear este gráfico para obtener los 
esfuerzos en puntos no situados bajo la esquina de la superficie cargada. Los 
problemas que comprenden cargas superficiales no repartidas uniformemente o 
distribuidas sobre una superficie de forma irregular pueden resolverse dividiendo la 
carga en partes que contengan cargas uniformemente repartidas sobre superficies 
rectangulares. 
 
Ejemplo 
Datos: El esquema de carga representado en la Fig. E8.3-1. 
 
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Problema: Calcular el esfuerzo vertical a una profundidad de 3 m bajo el punto A. 
 
Solución: La carga dada es equivalente a la suma de los 4 rectángulos de carga que 
aparecen en la Fig. E8.3-2. 
 
 
 
 
 
Cargas en faja
 
Las Figs. 8.7 y 8.8 dan los esfuerzos producidos por cargas en faja; es decir, cargas 
que son infinitamente largas en la dirección normal al plano dela figura. Se recogen 
dos casos: carga uniformemente repartida y carga en faja de forma triangular. 
Análogamente, Δσ1=Δσv y Δσ3=Δσh a lo largo del eje vertical. 
 
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57 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
 
Otras soluciones
 
También se dispone de gráficos para otros casos de carga en medios elásticos 
estratificados y en terrenos elásticos rígidos en dirección horizontal pero deformables 
en dirección vertical. Con un ordenador, el ingeniero puede obtener fácilmente las 
distribuciones elásticas de esfuerzo para cualquier tipo de carga y condiciones de 
contorno. Gráficos como los aquí recogidos resultan útiles para el estudio preliminar de 
un problema o cuando no se dispone de un ordenador. 
 
1.4.4 Tensión Plana 
 
Para explicar la tensión plana, consideraremos el elemento de tensión mostrado en la 
figura 7-1a. Este elemento es infinitesimal en tamaño y puede esbozarse como un 
cubo o un paralelepípedo rectangular. Los ejes xyz son paralelos a los bordes del 
elemento, cuyas caras se designan según las direcciones de sus normales dirigidas 
hacia fuera. Por ejemplo, la cara derecha se designa como cara x positiva y la cara 
izquierda (oculta para el observador), cara x negativa. De manera similar, la cara 
superior es la cara y positiva y la cara frontal, la cara z positiva. 
 
Cuando el material está en tensión plana en el plano xy, sólo las caras x e y del 
elemento están sometidas a tensiones y todas las tensiones actúan paralelamente a 
los ejes x e y como se muestra en la figura 7-1a. Esta condición de tensión es muy 
común porque está presente en la superficie de cualquier cuerpo tensionado, excepto 
en puntos donde las cargas externas actúan sobre la superficie. Cuando el elemento 
mostrado en la figura 7-1a se localiza en la superficie libre de un cuerpo, el eje z es 
58 
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perpendicular a la superficie y la cara z está en el plano de la superficie. Si no hay 
fuerzas externas que actúen sobre el elemento, la cara z estará libre de tensión. 
 
 
 
Figura 7-1. Elementos en tensión plana: 
a) Vista tridimensional de un elemento orientado según los ejes xyz 
b) Vista bidimensional del mismo elemento 
c) Vista bidimensional de un elemento orientado según los ejes x1y1z1 
 
Los símbolos para las tensiones ilustrados en la figura 7-1a tienen los siguientes 
significados. Una tensión normal σ tiene un subíndice que identifica la cara sobre la 
que actúa la tensión; por ejemplo, la tensión σx actúa sobre la cara x del elemento y la 
tensión σy, sobre la cara y. Puesto que el tamaño del elemento es infinitesimal, las 
tensiones normales que actúan sobre las caras opuestas son iguales. La convención 
de signos para las tensiones normales es la habitualmente empleada en elasticidad; 
es decir, la tracción es positiva y la compresión es negativa. 
 
Una tensión tangencial τ tiene dos subíndices: el primero denota la cara sobre la que 
actúa la tensión y el segundo da el sentido sobre esa cara. Así la tensión τxy actúa 
sobre la cara x en el sentido del eje y (Fig. 7-1a) y la tensión τyx, sobre la cara y en el 
sentido del eje x. 
 
La convención de signos para las tensiones tangenciales es como sigue. Una tensión 
tangencial es positiva cuando actúa sobre una cara positiva de un elemento en el 
sentido positivo de un eje y es negativa cuando actúa sobre una cara positiva de un 
elemento en el sentido negativo de un eje; por lo tanto, las tensiones τxy y τyx 
mostradas sobre las caras x e y positivas en la figura 7-1a son tensiones tangenciales 
positivas. De manera similar, una tensión tangencial es positiva cuando actúa en el 
sentido negativo de un eje; sobre una cara negativa de un elemento, por lo tanto, las 
tensiones τxy y τyx mostradas sobre las caras x e y negativas del elemento también 
son positivas. 
 
Esta convención de signos para las tensiones tangenciales es fácil de recordar si la 
enunciamos de la siguiente manera: una tensión tangencial es positiva cuando los 
sentidos asociados con sus subíndices son más-más o menos-menos; la tensión es 
negativa cuando los sentidos son más-menos o menos-más. 
 
La convención de signos anterior es congruente con el equilibrio del elemento, porque 
sabemos que las tensiones tangenciales sobre caras opuestas de un elemento 
infinitesimal deben ser iguales en magnitud y opuestas en sentido; por lo tanto, de 
acuerdo con nuestra convención de signos, una tensión positiva τxy actúa hacia arriba 
sobre la cara positiva (Fig. 7-1a) y hacia abajo sobre la cara negativa. De manera 
59 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
similar, las tensiones τyx que actúan sobre las caras superior e inferior del elemento 
son positivas aunque tengan sentidos opuestos. 
 
Sabemos también que las tensiones tangenciales sobre planos perpendiculares son 
iguales en magnitud y tienen sentidos tales que ambas tensiones se acercan o se 
alejan de la línea de intersección de las caras. En tanto que las tensiones τxy y τyx sean 
positivas en los sentidos mostrados en la figura, son congruentes con esta 
observación; por lo tanto, notamos que 
 
 τxy = τyx
 
Por conveniencia al trazar los elementos de tensión plana, usualmente dibujamos sólo 
una vista bidimensional del elemento, como se muestra en la figura 7-1b. Aunque una 
figura de este tipo es adecuada para ilustrar todas las tensiones que actúan sobre el 
elemento, debemos tener en mente que el elemento es un cuerpo sólido con un 
espesor perpendicular al plano de la figura. 
 
Tensiones sobre secciones inclinadas 
 
Ahora estamos listos para considerar las tensiones que actúan sobre secciones 
inclinadas, suponiendo que se conocen las tensiones σx, σy y τxy (Figs. 7-1a y b). Para 
representar las tensiones que actúan sobre una sección inclinada, ahora tomamos en 
cuenta un nuevo elemento de tensión (Fig. 7-1c) que se encuentra en el mismo punto 
en el material que el elemento original (Fig. 7-1b). Sin embargo, el nuevo elemento 
posee caras paralelas y perpendiculares a la dirección inclinada. Asociados con este 
nuevo elemento se tienen los ejes x1, y1, y z1, tales que el eje z1 coincide con el eje z y 
los ejes x1y1 están girados en sentido antihorario un ángulo θ con respecto a los ejes 
xy. 
 
Las tensiones normales y tangenciales que actúan sobre este nuevo elemento se 
denotan σx1, σy1, τx1y1, y τy1x1, usando las designaciones por subíndices y convención 
de signos descritas para las tensiones que actúan sobre el elemento xy. Las 
conclusiones anteriores relativas a las tensiones tangenciales aún son aplicables; es 
decir, 
 
 τx1y1 = τy1x1
 
A partir de esta ecuación y del equilibrio del elemento, vemos que las tensiones 
tangenciales que actúan sobre las cuatro caras de un elemento en tensión plana son 
conocidas si determinamos la tensión tangencial que actúa sobre cualquiera de las 
caras. 
 
Las tensiones que actúan sobre el elemento inclinado x1y1 (Fig. 7-1c) pueden 
expresarse en términos de las tensiones sobre el elemento xy (Fig. 7-1b) usando 
ecuaciones de equilibrio. Con este fin, escogemos un elemento de tensión en forma de 
cuña que se muestra en la figura 7-2a que tiene una cara inclinada que es la misma 
que la cara x1 del elemento inclinado (Fig. 7-1 c) Las otras dos caras laterales de la 
cuña son paralelas a los ejes x e y. 
 
A fin de escribir las ecuaciones de equilibrio para la cuña, necesitamos construir un 
diagrama de cuerpo libre que muestre las fuerzas que actúan sobre las caras. Sea A0 
el área de la cara izquierda (esto es, la cara x negativa). Entonces las fuerzas 
normales y cortantes que actúan sobre dicha cara son σx A0 y τxy A0, según se aprecia 
en el diagramade cuerpo libre de la figura 7-2b. El área de la cara inferior (o cara y 
60 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
negativa) es A0 tan θ y el área de la cara inclinada (o cara x1 positiva) es A0 sec θ. Así, 
las fuerzas normales y cortantes que actúan sobre esas caras tienen las magnitudes y 
sentidos mostrados en la figura. 
 
 
 
61 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
Las fuerzas que actúan sobre las caras izquierda e inferior pueden descomponerse en 
componentes ortogonales que actúan en las direcciones x1 e y1. Entonces podemos 
obtener dos ecuaciones de equilibrio sumando fuerzas en tales direcciones; la primera 
ecuación, obtenida sumando fuerzas en la dirección x1, es: 
 
0cos tanA-sen tanAsenAcosA-secA 0yx0y0xy00x1 =−− θθτθθσθτθσθσ x 
 
De la misma manera, sumando las fuerzas en la dirección y1 obtenemos: 
 
0sen tanAcos tanAcosAsenAsecA 0yx0y0xy00yx 11 =+−−+ θθτθθσθτθσθτ x 
 
Si usamos la relación τxy = τyx, simplificamos y reordenamos, obtenemos estas dos 
ecuaciones: 
 
θθτθσθσσ cos sen 2sen cos xy2y2xx1 ++= ( ) ( )θθτθθσστ 22xyyxyx sen-coscos sen --11 += 
 
Las ecuaciones anteriores dan las tensiones normales y tangenciales que actúan 
sobre el plano x1 en términos del ángulo θ y las tensiones σx, σy, y τxy que actúan 
sobre los planos x e y. 
 
Para el caso especial en que θ=0, las ecuaciones anteriores dan σx1 = σx y τx1y1=τxy , 
como era de esperar. También, cuando θ=90°, las ecuaciones dan σx1=σy y τx1y1= - τxy 
= -τyx. En el último caso, como el eje x1 es vertical cuando θ=90°, la tensión τx1y1 será 
positiva cuando actúe hacia la izquierda; sin embargo, la tensión τyx actúa hacia la 
derecha, por lo que τx1y1= -τyx. 
 
Ecuaciones de transformación para tensión plana 
 
Las ecuaciones anteriores de tensiones sobre una sección inclinada pueden 
expresarse de manera más conveniente introduciendo las siguientes identidades 
trigonométricas: 
 
( )θθ 2cos1
2
1cos2 += ( )θθ 2cos1
2
1sen2 −= θθθ sen2
2
1cos sen = 
 
Cuando se hacen esas sustituciones, resultan las ecuaciones: 
 
θτθσσσσσ sen2 cos2 
22
 xy
yxyx
x1
+−++= 
θτθσστ 2 cos sen2 
2
-
- xy
yx
yx 11
+= 
 
Se conocen como ecuaciones de transformación para tensión plana porque 
transforman las componentes de tensiónl de un conjunto de ejes en otro. Ahora bien, 
como se explicó antes, el estado de tensión intrínseco en el punto considerado es el 
mismo, ya sea que lo representen tensiones que actúan sobre el elemento xy (Fig. 7-
1b) o sobre el elemento inclinado x1y1 (Fig. 7-1c). 
 
62 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
Puesto que las ecuaciones de transformación nada más se obtuvieron a partir del 
equilibrio del elemento, son aplicables a tensiones en cualquier tipo de material, sea 
éste lineal o no lineal, elástico o inelástico. 
 
Una importante observación relativa a las tensiones normales puede obtenerse de las 
ecuaciones de transformación. Como asunto preliminar, notamos que la tensión 
normal σy1 que actúa sobre la cara y1 del elemento inclinado (Fig. 7- 1c) puede 
obtenerse de la ecuación anterior sustituyendo θ por θ+90°. El resultado es la 
siguiente ecuación para σy1 : 
 
θτθσσσσσ sen2 cos2 
22
 xy
yxyx
y1
−−−+= 
 
Sumamos las expresiones para σx1 y σy1 y obtenemos: 
 
yxyx 11
σσσσ +=+ 
 
Esta ecuación muestra que la suma de las tensiones normales que actúan sobre caras 
perpendiculares de elementos de tensión plana (en un punto dado de un cuerpo 
sometido a tensiones) es constante e independiente del ángulo θ. Esta suma se 
conoce como primer invariante del tensor de tensiones. 
 
La manera en que varían las tensiones normales y tangenciales se presenta en la 
figura 7-3, que es una gráfica de σx1 y τx1y1 versus el ángulo θ. La gráfica está trazada 
para el caso particular de σy = 0,2σx y τxy= 0,8 σx , y en ella vemos que las tensiones 
varían de modo continuo conforme la orientación del elemento cambia. En ciertos 
ángulos, la tensión normal alcanza un valor máximo o mínimo; en otros, se vuelve 
cero. De forma similar, la tensión tangencial tiene valores máximo, mínimo y cero en 
ciertos ángulos. En la siguiente sección se plantea una investigación detallada de esos 
valores máximos y mínimos. 
 
 
 
Casos especiales de tensión plana 
 
El caso general de tensión plana se reduce a estados más simples de tensión en 
condiciones especiales; por ejemplo, si todas las tensiones que actúan sobre el 
elemento xy (Fig. 7-1b) son cero excepto la tensión normal σx, entonces el elemento 
está en tensión uniaxial (Fig. 7-4). Las ecuaciones de transformación 
correspondientes que se obtienen igualando σy y τxy a cero en las ecuaciones 
anteriores son: 
63 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
 
 
( )θσσ 2 cos -1
2
 xx1 = sen2 2-
x
yx 11
θστ = 
 
Otro caso especial es el de cortante puro (Fig. 7-5), para el cual se obtienen las 
ecuaciones de transformación sustituyendo σx=0 y σy=0 en las ecuaciones citadas: 
 
θτσ sen2 xyx1 = θττ 2 cos xyyx 11 = 
 
 
 
Para finalizar, notamos el caso especial de tensión biaxial, en donde el elemento xy 
está sometido a tensiones normales en las direcciones x e y pero sin tensiones 
tangenciales. (Fig. 7-6). Las ecuaciones para la tensión biaxial se obtienen de las 
ecuaciones de transformación sencillamente anulando los términos que contienen τxy 
como se muestra a continuación: 
 
θσσσσσ cos2 
22
 yxyxx1
−++= 
 sen2 
2
-
- yxyx 11 θ
σστ = 
 
La tensión biaxial se presenta en muchos tipos de estructuras, como por ejemplo, los 
recipientes de pared delgada a presión. 
 
 
64 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
 
Ejemplo 
 
Se tiene una condición de tensión plana en un punto sobre la superficie de una 
estructura cargada donde las tensiones poseen las magnitudes y direcciones 
mostradas sobre el elemento de tensiones de la figura siguiente: 
 
 
 
Determinar las tensiones que actúan sobre un elemento orientado a un ángulo de 15° 
horario con respecto al elemento original. 
 
Solución: 
Las tensiones que actúan sobre el elemento original tienen los siguientes valores: 
 
 σx = - 46MPa σy = 12MPa τxy = -19MPa 
 
En la figura siguiente se muestra un elemento orientado según un ángulo horario de 
15°, donde el eje x1 forma un ángulo θ = - 15° con el eje x (Como alternativa, el eje x1 
podría colocarse a un ángulo positivo θ = 75°). 
 
Podemos calcular con facilidad las tensiones sobre la cara x1 del elemento orientado a 
θ = - 15° usando las ecuaciones de transformación. Los cálculos son: 
 
65 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
MPa6,3230)(-19)sen(-cos(-30) (-29) 17- sen2 cos2 
22
 xy
yxyx
x1
−=++=+−++= θτθσσσσσ
 MPa31,0- cos(-30) (-19)sen(-30) )29(2 cos sen2 
2
-
- xy
yx
yx 11
=+−−=+= θτθσστ 
 
También, la tensión normal que actúa sobre la cara y1 es: 
 
-1,4MPasen(-30) (-19)- 30)(-29)cos(--17- sen2 cos2 
22
 xy
yxyx
y1
==−−−+= θτθσσσσσ 
 
Esta tensión puede confirmarse sustituyendo θ = 75° en la ecuación de σx1. Como 
comprobación adicional de los resultados, notamos que: yxyx 11 σσσσ +=+ 
 
Las tensiones que actúan sobre el elemento inclinado se muestran en la figura 
siguiente, donde las flechas indican las direcciones verdaderas de las tensiones. 
Notamos de nuevo que ambos elementos de tensión presentados en las figuras 
anteriores representan el mismo estado de tensión. 
 
 
 
1.4.5 Tensiones Principales y Tensiones Tangenciales máximas 
 
Las ecuaciones de transformación para tensión plana muestran que las tensiones 
normales σx1 y las tensionestangenciales τx1y1 varían continuamente conforme giran 
los ejes a través del ángulo θ. Esta variación se exhibe en la figura 7-3 para una 
combinación particular de tensiones. En la figura vemos que las tensiones normales y 
las tangenciales alcanzan valores máximos y mínimos a intervalos de 90°. No es para 
sorprenderse que, esos valores máximos y mínimos suelan requerirse para fines de 
diseño; por ejemplo, las fallas por fatiga de estructuras como máquinas y aeronaves 
suelen relacionarse con las tensiones máximas, por lo que hay que determinar sus 
magnitudes y orientaciones como parte del proceso de diseño. 
 
Tensiones principales 
 
Las tensiones normales máxima y mínima, llamadas tensiones principales, pueden 
encontrarse con la ecuación de transformación para la tensión normal σx1. Derivamos 
σx1 con respecto a θ, igualamos a cero y obtenemos una ecuación de la que podemos 
encontrar los valores de θ para los que σx1 es un máximo o un mínimo. La ecuación 
para la derivada es: 
66 
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0 cos2 2 sen2 )-(- 
d
d
xyyx
x1 =+= θτθσσθ
σ
 
 
De donde obtenemos: 
 
yx
xy
p -
2
 tan2 σσ
τθ = 
 
El subíndice p indica que el ángulo θp define la orientación de los planos principales; 
es decir, los planos sobre los que actúan las tensiones principales. 
 
Dos valores del ángulo 2θ, en el intervalo de 0 a 360° se pueden obtener de la 
ecuación anterior. Esos valores difieren en 180°, con un valor entre 0 y 180° y el otro 
entre 180° y 360°; por lo tanto, el ángulo θp tiene dos valores que difieren en 90°, un 
valor entre 0 y 90° y el otro entre 90° y 180°. Los dos valores de θ se conocen como 
los ángulos principales. Para uno de estos ángulos, la tensión normal σx1 es una 
tensión principal máxima; para el otro, es una tensión principal mínima. Como los 
ángulos principales difieren en 90°, vemos que las tensiones principales ocurren sobre 
planos mutuamente perpendiculares. 
 
Las tensiones principales pueden calcularse sustituyendo cada uno de los dos valores 
de θp, en la primera ecuación de transformación de tensiones y despejando σx1. Al 
determinar las tensiones principales de esta manera, no sólo obtenemos los valores de 
las tensiones principales, sino también vemos qué tensión principal se vincula con qué 
ángulo principal. 
 
 
Figura 7-9. Representación geométrica de la ecuación anterior 
 
También podemos obtener fórmulas generales para las tensiones principales. Con 
este fin observamos al triángulo rectángulo en la figura 7-9, el cual se construye a 
partir de la ecuación anterior. Nótese que la hipotenusa del triángulo, obtenida con el 
teorema de Pitágoras, es 
 
2
xy
2
yx
2
-
 R τσσ +⎟⎟⎠
⎞
⎜⎜⎝
⎛= 
 
La cantidad R siempre es un número positivo y al igual que los otros dos lados del 
triángulo, tiene unidades de tensión. Del triángulo obtenemos dos relaciones 
adicionales: 
 
67 
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2R
-
2 cos yxp
σσθ = 
R
2 sen xyp
τθ = 
 
Al sustituir estas expresiones para cos 2θp y sen 2θp en la ecuación de transformación 
para σx1, obtenemos la tensión principal mayor en términos algebraicos, denotada con 
σ1: 
 
⎟⎟⎠
⎞
⎜⎜⎝
⎛+⎟⎟⎠
⎞
⎜⎜⎝
⎛−++=+−++==
R2R
-
 
22
sen2 cos2 
22
 xyxy
yxyxyx
xy
yxyx
x1 1
ττσσσσσσθτθσσσσσσ 
 
Luego de sustituir el valor de R obtenido anteriormente y de ordenar de manera 
algebraica, se tiene: 
 
2
xy
2
yxyx
1 2
-
 
2
τσσσσσ +⎟⎟⎠
⎞
⎜⎜⎝
⎛++= 
 
La menor de las tensiones principales, denotada con σ2, puede encontrarse a partir de 
la condición de que la suma de las tensiones normales sobre planos perpendiculares 
es constante: 
 
yx21 σσσσ +=+ 
 
Sustituimos la expresión para σ1 en la ecuación anterior, despejamos σ2 y obtenemos: 
 
2
xy
2
yxyx
1yx2 2
-
 
2
τσσσσσσσσ +⎟⎟⎠
⎞
⎜⎜⎝
⎛−+=−+= 
 
Esta ecuación tiene la misma forma que la ecuación para σ1 pero difiere por la 
presencia del signo menos antes de la raíz cuadrada. 
 
Las fórmulas anteriores para σ1 y σ2 pueden combinarse en una sola fórmula para las 
tensiones principales: 
 
2
xy
2
yxyx
1,2 2
-
 
2
τσσσσσ +⎟⎟⎠
⎞
⎜⎜⎝
⎛±+= 
 
El signo más da la tensión principal algebraicamente mayor y el signo menos, la 
tensión principal algebraicamente menor. 
 
Angulos principales 
 
Denotemos ahora los dos ángulos que definen los planos principales con θp1 y θp2, 
correspondientes a las tensiones principales σ1 y σ2. Ambos ángulos pueden 
determinarse de la ecuación para tan 2θp; sin embargo, no podemos saber de esa 
ecuación qué ángulo es θp1 y cuál es θp2. Un procedimiento simple para identificarlos 
es tomar uno de los valores y sustituirlo en la ecuación para σx1. El valor resultante de 
σx1 será σ1 o σ2 (suponiendo que ya hemos encontrado σ1 y σ2 de la ecuación 
anterior), lo que permite relacionar los dos ángulos principales con las dos tensiones 
principales. 
68 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
Otro método para relacionar los ángulos principales con las tensiones principales es 
usar las ecuaciones de cos 2θp y sen 2θp para hallar θp, ya que el único ángulo que 
satisface las dos ecuaciones es θp1. Entonces podemos reescribir estas ecuaciones 
como sigue: 
 
2R
-
2 cos yx p 1
σσθ = 
R
2 sen xy p 1
τθ = 
 
Existe sólo un ángulo entre 0 y 360° que satisface ambas ecuaciones. Así, el valor de 
θp1 puede determinarse en forma única con las ecuaciones anteriores. El ángulo θp2 
correspondiente a σ2 define un plano perpendicular al plano definido por θp1; por lo 
tanto, θp2 puede tomarse como 90° mayor o 90° menor que θp1. 
 
Tensiones tangenciales sobre los planos principales 
 
Una característica importante de los planos principales puede obtenerse de la 
ecuación de trasformación para las tensiones tangenciales. Si igualamos a cero la 
tensión tangencial τx1y1, obtenemos una expresión que es la misma que la ecuación 
anterior de la derivada de σx1 respecto a θ; en otras palabras, los ángulos 
correspondientes a los planos de tensión tangencial cero son los mismos que los 
ángulos correspondientes a los planos principales. Así pues, podemos expresar la 
importante observación que sigue relativa a los planos principales: las tensiones 
tangenciales son cero sobre los planos principales. 
 
 
 
 
 
 
 
69 
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Casos especiales 
 
Los planos principales para elementos en tensión uniaxial y tensión biaxial son los 
planos x e y mismos (Fig. 7-10) porque tan 2θp, = 0 y los dos valores de θp son 0 y 90°. 
Sabemos también que los planos x e y son los planos principales porque las tensiones 
tangenciales son cero en esos planos. 
 
Para un elemento en cortante puro (Fig. 7-11a), los planos principales están 
orientados a 45° respecto al eje x (Fig. 7-11b) porque tan2θp es infinita y los dos 
valores de θp son 45° y 135°. Si τxy es positiva, las tensiones principales son σ1=τxy y 
σ2= -τxy . 
 
 
La tercera tensión principal 
 
El análisis anterior de las tensiones principales se refiere sólo a rotación de ejes en el 
plano xy; esto es, rotación respecto al eje z (Fig. 7-12a); por lo tanto, las dos tensiones 
principales determinadas anteriormente se denominan las tensiones principales en el 
plano. No debemos pasar por alto el hecho de que el elemento de tensión es 
tridimensional y que tiene tres (no dos) tensiones principales en acción sobre tres 
planos mutuamente perpendiculares. 
 
 
 
Mediante un análisis tridimensional más completo, puede demostrarse que los tres 
planos principales para un elemento de tensión plana son los dos planos principales 
descritos,más la cara z del elemento. Estos planos principales se ilustran en la figura 
7-12b, donde un elemento de tensión se ha orientado según el ángulo principal θp1, 
que corresponde a la tensión principal σ1. Las tensiones principales σ1 y σ2 están 
dadas por la fórmula única de las tensiones principales y la tercera tensión principal σ3 
es igual a cero. 
 
Por definición, σ1 es más grande que σ2 en términos algebraicos, en tanto que σ3 
puede ser mayor, o menor que σ1 y σ2 o estar entre ambos. Por supuesto, también es 
posible que sean iguales algunas o todas las tensiones principales. Nótese de nuevo 
que no hay tensiones tangenciales sobre plano principal alguno.* 
 
70 
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Tensiones tangenciales máximas 
 
Ya encontradas las tensiones principales y sus direcciones para un elemento en 
tensión plana, se determinan las tensiones tangenciales máximas y los planos sobre 
los que actúan. Las tensiones tangenciales τx1y1 que actúan sobre planos inclinados 
están dados por la segunda ecuación de transformación. Derivamos τx1y1 con respecto 
a θ, igualamos a cero y obtenemos 
 
0 sen2 2 cos2 )-(- 
d
d
xyyx
yx 11 =−= θτθσσθ
τ
 
 
De donde: 
 
xy
yx
s 2
-
 tan2 τ
σσθ −= 
 
El subíndice s indica que el ángulo θs define la orientación de los planos de tensiones 
tangenciales máximas positiva y negativa. 
 
La ecuación anterior da un valor de θs entre 0 y 90° y otro entre 90° y 180°. Además, 
estos dos valores difieren en 90°, por lo cual las tensiones tangenciales máximas 
ocurren sobre planos perpendiculares. Puesto que las tensiones tangenciales sobre 
planos perpendiculares son iguales en valor absoluto, las tensiones tangenciales 
máximas positiva y negativa difieren sólo en signo. 
 
La comparación de la ecuación anterior con la correspondiente a los ángulos de las 
tensiones principales θp , muestra que: 
 
p
p
s 2 cotg2 tan
1 tan2 θθθ −=−= 
 
A partir de esta ecuación podemos obtener una relación entre los ángulos θs y θp. 
Primero reescribimos la ecuación anterior en la forma 
 
0
2 sen
2 cos
2 cos
2 sen
p
p
s
s =+ θ
θ
θ
θ
 
 
Multiplicamos por los términos en el denominador y obtenemos 
 
02 cos 2 cos 2 sen 2 sen psps =+ θθθθ 
 
Que equivale a 
 
0)2-(2 cos ps =θθ 
 
Por lo tanto: 
 
°±= 90 2 - 2 ps θθ 
 
 
71 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
Y resulta: 
 
°±= 45 ps θθ 
 
Esta ecuación muestra que los planos de tensión tangencial máxima ocurren a 45° 
respecto a los planos principales. 
 
El plano de la tensión tangencial máxima positiva τmax está definido por el ángulo θs1, 
para el cual son aplicables las siguientes ecuaciones: 
 
R
2 cos xy s 1
τθ = 
2R
-
2 sen yx s 1
σσθ −= 
 
Además el ángulo θs1 se relaciona con el ángulo θp1 como sigue: 
 
°= 45 - 
11 ps
θθ 
 
La tensión tangencial máxima correspondiente se obtiene sustituyendo las 
expresiones para cos 2θs1 y sen 2θs1 en la segunda ecuación de transformación: 
 
2
xy
2
yx
max 2
-
 τσστ +⎟⎟⎠
⎞
⎜⎜⎝
⎛= 
 
La tensión tangencial máxima negativa τmin tiene la misma magnitud pero signo 
opuesto. 
 
Otra expresión para la tensión tangencial máxima se puede obtener a partir de las 
tensiones principales σ1 y σ2. Así, vemos que: 
 
2
 - 21
max
σστ = 
 
Entonces, la tensión tangencial máxima es igual a la mitad de la diferencia de las 
tensiones principales. 
 
Los planos de tensión tangencial máxima también contienen tensiones normales. La 
tensión normal que actúa sobre los planos de tensión tangencial máxima positiva 
puede determinarse sustituyendo las expresiones para el ángulo θs1 en la ecuación 
para σx1 (primera de las ecuaciones de transformación). La tensión resultante es igual 
al promedio de las tensiones normales sobre los planos x e y: 
 
2
 yx
prom
σσσ += 
 
Esta misma tensión normal actúa sobre los planos de tensión tangencial máxima 
negativa. 
 
En los casos particulares de tensión uniaxial y tensión biaxial (Fig. 7-10), los planos 
de tensión tangencial máxima ocurren a 45° respecto a los ejes x e y. En el caso de 
cortante puro (Fig. 7-1 1), las tensiones tangenciales máximas ocurren en los planos x 
e y. 
72 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
Tensiones tangenciales en el plano y fuera del plano 
 
El análisis anterior de las tensiones tangenciales trató sólo con tensiones tangenciales 
en el plano; o sea, con tensiones que actúan en el plano xy. Para obtener las 
tensiones tangenciales máximas en el plano, consideramos elementos que se 
obtuvieron girando los ejes xyz respecto al eje z, que es un eje principal (Fig. 7-12a). 
Encontramos que las tensiones tangenciales máximas ocurren sobre planos a 45° 
respecto a los planos principales. Los planos principales para el elemento de la figura 
7-12a se muestran en la figura 7-12b, donde σ1 y σ2 son las tensiones principales; por 
lo tanto, las tensiones tangenciales máximas en el plano se encuentran de un 
elemento obtenido girando los ejes x1y1z1 (Fig. 7-12b) respecto al eje z1 un ángulo de 
45°. 
 
También podemos obtener tensiones tangenciales máximas por rotaciones a 45° 
respecto a los otros dos ejes principales (los ejes x1 e y1 en la Fig. 7-12b). Tendremos 
entonces tres conjuntos de tensiones tangenciales positiva máxima y negativa 
máxima: 
 
2
 )( 2xmax 1
στ ±= 
2
 )( 1ymax 1
στ ±= 
2
 )( 21zmax 1
σστ −±= 
 
en donde los subíndices indican el eje principal respecto al cual tiene lugar la rotación 
a 45°. Las tensiones obtenidas por las rotaciones respecto a x1 e y1 se denominan 
tensiones tangenciales fuera del plano. 
 
Los valores algebraicos de σ1 y σ2 determinan cuál de las expresiones anteriores da la 
tensión tangencial numéricamente mayor. Si σ1 y σ2 tienen el mismo signo, una de las 
dos primeras expresiones es numéricamente mayor; si tienen signos opuestos, la 
última expresión es mayor. 
 
 
1.4.6 Círculo de Mohr para tensión plana 
 
Las ecuaciones de transformación para la tensión plana pueden representarse en 
forma gráfica por medio de un trazado conocido como círculo de Mohr. Esta 
representación gráfica es de gran utilidad porque permite visualizar las relaciones 
entre las tensiones normales y tangenciales que actúan sobre varios planos inclinados 
en un punto de un cuerpo sometido a tensiones; sirve también para calcular las 
tensiones principales, las tensiones tangenciales máximas y las tensiones en planos 
inclinados. Además, el círculo de Mohr es válido no sólo para tensiones, sino también 
para otras cantidades de naturaleza matemática similar, incluidas las deformaciones y 
los momentos de inercia. 
 
Ecuaciones del círculo de Mohr 
 
Las ecuaciones del círculo de Mohr pueden deducirse de las ecuaciones de 
transformación para la tensión plana. Las dos ecuaciones se repiten aquí pero con un 
pequeño reordenamiento de la primera expresión: 
 
θτθσσσσσ sen2 cos2 
22
 xy
yxyx
x1
+−=+− 
73 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
θτθσστ 2 cos sen2 
2
-
- xy
yx
yx 11
+= 
 
Por la geometría analítica, reconocemos que ambas son las ecuaciones de un círculo 
en forma paramétrica, donde el ángulo 2θ es el parámetro y las tensiones σx1 y τx1y1 
son las coordenadas. En esta etapa no es necesario identificar la naturaleza de las 
ecuaciones; si eliminamos el parámetro, el significado de las ecuaciones resultará 
claro. 
 
Para suprimir el parámetro 2θ, elevamos al cuadrado ambos lados de cada ecuación y 
luego sumamos ambas. El resultado es: 
 
 
22
 
2
 2xy
2
yxyx2
yx
2
yx
x 111
τσσσστσσσ +⎟⎟⎠
⎞
⎜⎜⎝
⎛ −=+−+⎟⎟⎠
⎞
⎜⎜⎝
⎛ +− 
 
Estaecuación puede escribirse en forma más simple usando la siguiente notación: 
 
2
 yx
prom
σσσ += 2xy
2
yx
2
-
 R τσσ +⎟⎟⎠
⎞
⎜⎜⎝
⎛= 
 
La ecuación anterior toma la forma 
 ( ) 22 yx2promx R - 111 =+τσσ 
 
que es la ecuación algebraica de un círculo. Las coordenadas son σx1 y τx1y1, el radio 
es R y el centro del círculo tiene las coordenadas σx1= σprom y τx1y1=0. 
 
Dos formas del círculo de Mohr 
 
El circulo de Mohr puede trazarse a partir de las ecuaciones anteriores de dos 
maneras distintas. En la primera se traza la tensión normal σx1 positiva hacia la 
derecha y la tensión tangencial τx1y1 positiva hacia abajo, como se muestra en la figura 
7-14a. La ventaja de trazar las tensiones tangenciales positivas hacia abajo es que el 
ángulo 2θ sobre el círculo de Mohr es positivo en sentido antihorario, lo que concuerda 
con la dirección positiva de 2θ en la deducción de las ecuaciones de transformación 
(vea las Figs. 7-1 y 7-2). 
 
En la segunda forma del círculo de Mobr, τx1y1 se traza positivo hacia arriba pero el 
ángulo 2θ ahora es positivo en sentido horario (Fig. 7-14b), que es opuesto a su 
dirección positiva usual. 
 
Ambas formas son matemáticamente correctas y cualquiera puede usarse; pero, es 
más fácil visualizar la orientación del elemento de tensión si la dirección positiva del 
ángulo 2θ es la misma en el cfrculo de Mohr y en el elemento. 
 
Por lo tanto, optaremos por la primera forma del círculo de Mohr (Fig. 7-14a) en la que 
la tensión tangencial positiva se traza hacia abajo y un ángulo positivo 2θ se traza en 
sentido antihorario. 
 
 
74 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
 
Construcción del círculo de Mohr 
 
El círculo de Mohr puede construirse de varias maneras, dependiendo de cuáles 
tensiones se conozcan y cuáles se desconozcan. Para nuestro propósito inmediato, 
que es mostrar las propiedades básicas del círculo, supongamos que conocemos las 
tensiones σx, σy, y τxy que actúan sobre los planos x e y de un elemento en tensión 
plana (Fig. 7-15a). Como veremos, esta información es suficiente para construir el 
círculo. Luego, con el círculo dibujado, podemos determinar las tensiones σx1, σy1, y 
τx1y1 que actúan sobre un elemento inclinado (Fig. 7-15b). También podemos obtener 
las tensiones principales y las tensiones tangenciales máximas con ayuda del círculo. 
 
75 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
 
76 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
Con σx, σy, y τxy, conocidos, el procedimiento para construir el circulo de Mohr es 
el siguiente (Fig. 7-15c): 
 
1. Dibuje un conjunto de ejes coordenados con σx1 como abscisa (positivo 
hacia la derecha) y τx1y1 como ordenada (positivo hacia abajo). 
2. Localice el centro C del círculo en el punto con coordenadas σx1 = σprom y 
τx1y1 =0. 
3. Localice el punto A, que representa las condiciones de tensión sobre la 
cara x del elemento mostrado en la figura 7-15a, marcando sus 
coordenadas σx1 = σx y τx1y1 = τxy. Note que el punto A corresponde a θ=0°. 
Observe también que la cara x del elemento (Fig. 7-l5a) está marcada “A” 
para mostrar su correspondencia con el punto A sobre el círculo. 
4. Localice el punto B que representa las condiciones de tensión sobre la cara 
y del elemento mostrado en la figura 7-15a, trazando sus coordenadas 
σx1=σy y τx1y1= -τxy. Note que el punto B sobre el círculo corresponde a 
θ=90°. Además, la cara y del elemento (Fig. 7-15a) está marcada “B” para 
mostrar su correspondencia con el punto B en el diagrama. 
5. Dibuje una línea del punto A al punto B. Esta línea es un diámetro del 
círculo y pasa por el centro C. Los puntos A y B, que representan las 
tensiones sobre planos a 90° uno del otro (Fig. 7-15a), están en extremos 
opuestos del diámetro (y, por lo tanto, están a 1800 uno del otro sobre el 
círculo). 
6. Con el punto C como centro, trace el círculo de Mohr por los puntos A y B. 
El círculo dibujado de esta manera tiene radio R, como se expone en el 
siguiente párrafo. 
 
 
Ahora que hemos dibujado el círculo, podemos confirmar por geometría que las líneas 
CA y CB son radios y tienen longitudes iguales a R. Notamos que las respectivas 
abscisas de los puntos C y A son (σx + σy)/2 y σx, respectivamente. La diferencia de 
estas abscisas es (σx - σy)/2, tal como están dimensionadas en la figura. También la 
ordenada del punto A es τxy; por lo tanto, la línea CA es la hipotenusa de un triángulo 
rectángulo que tiene un lado de longitud (σx - σy)/2 y el otro lado de longitud τxy. 
Extraemos la raíz cuadrada de la suma de los cuadrados de esos dos lados y 
obtenemos el radio R: 
 
2
xy
2
yx
2
-
 R τσσ +⎟⎟⎠
⎞
⎜⎜⎝
⎛= 
 
que es la misma que la ecuación matemática obtenida anteriormente. Por un 
procedimiento similar, podemos mostrar que la longitud de la línea CB también es 
igual al radio R del círculo. 
 
Tensiones sobre un elemento inclinado 
 
Consideraremos ahora las tensiones σx1, σy1 y τx1y1, que actúan sobre las caras de un 
elemento de tensión plana orientado según un ángulo θ respecto al eje x (Fig. 7-15b). 
Si se conoce el ángulo θ, estas tensiones pueden determinarse con el círculo de Mohr. 
El procedimiento se indica a continuación. 
 
77 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
Sobre el círculo (Fig. 7-15c), medimos un ángulo 2θ en sentido antihorario desde el 
radio CA, porque el punto A corresponde a θ = 0° y es el punto de referencia desde 
donde medimos los ángulos. El ángulo 2θ localiza el punto D, que (según se expone 
en el párrafo siguiente) tiene coordenadas σx1 y τx1y1; por lo tanto, el punto D sobre el 
círculo, el cual representa las tensiones sobre la cara x1 del elemento de la figura 7-
15b. En consecuencia, esta cara del elemento se marca “D” en la figura. 
 
Note que un ángulo 2θ sobre el círculo de Mohr corresponde a un ángulo θ sobre un 
elemento de tensión; por ejemplo, el punto D sobre el círculo está a un ángulo 2θ del 
punto A, pero la cara x1 del elemento mostrado en la figura 7-15b (la marcada “D”) está 
a un ángulo θ de la cara x del elemento ilustrado en la figura 7-15a (la cara marcada 
“A”). De manera similar, los puntos A y B están separados 180° sobre el círculo, pero 
las caras correspondientes del elemento (Fig. 7-15a) lo están 90°. 
 
Para demostrar que las ecuaciones de transformación de tensiones dan las 
coordenadas σx1 y τx1y1 del punto D sobre el círculo, usamos de nuevo la geometría del 
círculo. Sea β el ángulo entre la línea radial CD y el eje σx1. Entonces, con base en la 
geometría de la figura, obtenemos estas expresiones para las coordenadas del punto 
D: 
 
βσσσ cos R
2
yx
x1
+−= βτ sen R
11yx
= 
 
Si observamos que el ángulo entre el radio CA y el eje horizontal es 2θ+β, podemos 
obtener: 
 
2R
) (2 cos yx
σσβθ −=+ 
R
) (2 sen xy
τβθ =+ 
 
Desarrollamos las expresiones para el seno y el coseno y resulta: 
 
2R
 - 
 sen 2 sen cos 2 cos yx
σσβθβθ =− 
R
 sen 2 cos cos 2 sen xy
τβθβθ =+ 
 
Multiplicamos la primera de estas ecuaciones por cos 2θ y la segunda por sen 2θ y 
sumamos, con lo que resulta: 
 
⎟⎟⎠
⎞
⎜⎜⎝
⎛ +−= θτθσσβ sen2 cos2 
2R
1 cos xy
yx 
 
También multiplicamos la primera de las ecuaciones por sen 2θ, y la segunda por cos 
2θ y restamos, con lo que obtenemos: 
 
⎟⎟⎠
⎞
⎜⎜⎝
⎛ +−−= θτθσσβ 2 cos 2 sen 
2R
1 sen xy
yx 
 
Cuando estas expresiones para cos β y sen β se sustituyen en las ecuaciones ya 
citadas: 
78 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
βσσσ cos R
2
yx
x1
+−= βτ sen R
11yx
= 
 
obtenemos las ecuaciones de transformación de tensiones para σx1y τx1y1. Así, hemos 
demostrado entonces que el punto D sobre el círculo de Mohr, definido por el ángulo 
2θ, representa las condiciones de tensión sobre la cara x1 del elemento de tensión 
definido por el ángulo θ (Fig. 7-15b). 
 
El punto D’, que es diametralmente opuesto al punto D sobre el círculo, se localiza por 
un ángulo 2θ (medido desde la línea CA) que es 180° mayor que el ángulo 2θ al punto 
D; por lo tanto, el punto D’ sobre el circulo representa las tensiones sobre una cara del 
elemento de tensión (Fig. 7-15b) a 90° de la cara representada por el punto D. Así 
entonces, el punto D’ sobre el circulo da las tensiones σy1 y -τx1y1 sobre la cara y1 del 
elemento de tensión (la cara marcada “D” en la Fig. 7-15b). 
 
De este análisis vemos cómo las tensiones representadas por puntos sobre el círculo 
de Mohr se relacionan con las tensiones que actúan sobre un elemento. Las tensiones 
sobre un plano inclinado definido por el ángulo θ (Fig. 7-1 5b) se encuentran sobre el 
círculo en el punto donde el ángulo desde el punto de referencia (punto A) es 2θ. 
Entonces, conforme giramos los ejes x1y1 en sentido antihorario un ángulo θ (Fig. 7-
15b), el punto sobre el círculo de Mohr correspondiente a la cara x1 se mueve en 
sentido antihorario un ángulo 2θ. De manera similar, si giramos los ejes en sentido 
horario, el punto sobre el círculo se moverá también en sentido horario un ángulo dos 
veces mayor. 
 
Tensiones principales 
 
Quizá la determinación de las tensiones principales sea la aplicación más importante 
del círculo de Mohr. Note que al movernos alrededor del circulo de Mohr (Fig. 7-15c), 
encontramos el punto P1 en donde la tensión normal alcanza su valor algebraico 
máximo y en donde la tensión tangencial es cero; por consiguiente, el punto P1 
representa una tensión principal y un plano principal. La abscisa σ1 del punto P1 da 
la tensión principal algebraicamente mayor y su ángulo 2θ desde el punto de 
referencia A (donde θ = 0) proporciona la orientación del plano principal. El otro plano 
principal, asociado con la tensión normal menor en términos algebraicos, está 
representado por el punto P2, diametralmente opuesto al punto P. 
 
Por la geometría del círculo, vemos que la tensión principal más grande en términos 
algebraicos es 
 
 R
2
 
CPOC yx11 ++=+= σσσ 
 
que, al sustituir la expresión para R, concuerda con la ecuación previa para esta 
tensión. De manera similar, podemos comprobar la expresión para la tensión principal 
σ2 algebraicamente menor. 
 
El ángulo principal θp1 entre el eje x (Fig. 7-15a) y el plano de la tensión principal 
algebraicamente mayor es la mitad del ángulo 2θp1 que es el ángulo en el circulo de 
Mohr entre los radios CA y CP1. 
 
El coseno y el seno del ángulo 2θp1 pueden obtenerse por inspección del círculo: 
 
79 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
2R
-
2 cos yx p 1
σσθ = 
R
2 sen xy p 1
τθ = 
 
Estas ecuaciones concuerdan con las ecuaciones anteriormente deducidas para los 
ángulos principales. Sobre el círculo, el ángulo 2θp2 correspondiente al otro punto 
principal (punto P2) es 180° mayor que 2θp1; por consiguiente, θp2=θp1+90°, como era 
de esperarse. 
 
Tensiones tangenciales máximas 
 
Los puntos S1 y S2, que representan los planos de tensiones tangenciales máxima 
positiva y máxima negativa, respectivamente, se localizan en la parte inferior y 
superior del círculo de Mohr (Fig. 7-15c). Estos puntos están a los ángulos 2θ= 90° de 
los puntos P1 y P2, lo que concuerda con el hecho de que los planos de tensión 
tangencial máxima están orientados a 45° respecto a los planos principales. 
 
Las tensiones tangenciales máximas son iguales en términos numéricos al radio R del 
circulo. Además, las tensiones normales sobre los planos de tensión tangencial 
máxima son iguales a la abscisa del punto C, que es la tensión normal promedio σprom. 
 
Convención alternativa de signos para las tensiones tangenciales 
 
En algunas ocasiones se usa una convención de signos alternativa para las tensiones 
tangenciales al construir el círculo de Mohr. En esta convención, la dirección de una 
tensión tangencial que actúa sobre un elemento del material se indica por el sentido de 
la rotación que tiende a producir (Figs. 7-16a y b). Si la tensión tangencial τ tiende a 
girar el elemento de tensión en sentido horario, se llama tensión tangencial horaria y si 
tiende a hacerlo en sentido antihorario, se denomina tensión tangencial antihorario. 
Entonces, al construir el círculo de Mohr, las tensiones tangenciales horarias se trazan 
hacia arriba y las tensiones tangenciales antihorarias, hacia abajo (Fig. 7-16c). 
 
Debe quedar claro que la convención alternativa de signos produce un circulo idéntico 
al descrito (Fig. 7-15c). La razón es que una tensión tangencial positiva τx1y1 también 
es una tensión tangencial antihoraria y ambas se trazan hacia abajo. Además, una 
tensión tangencial negativa τx1y1 es una tensión tangencial horaria y ambas se trazan 
hacia arriba. 
 
 
80 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
 
Comentarios generales sobre el círculo 
 
De acuerdo con los análisis anteriores en esta sección, está claro que podemos 
encontrar las tensiones que actúan sobre cualquier piano inclinado así como las 
tensiones principales y las tensiones tangenciales máximas con ayuda del circulo de 
Mohr. Sin embargo, sólo se han considerado rotaciones de ejes en el plano xy (es 
decir, rotaciones respecto al eje z), por lo que todas las tensiones sobre el círculo de 
Mohr son tensiones en el plano. 
 
Por conveniencia, el circulo de la figura 7-15 se dibujó con σx, σy, y τxy como tensiones 
positivas, pero puede seguirse el mismo procedimiento si una o más de las tensiones 
es negativa. Si una de las tensiones normales es negativa, parte o todo el círculo 
estará a la izquierda del origen, como lo ilustra el ejemplo que sigue. 
 
El punto A, que representa las tensiones sobre el plano θ = 0°, puede estar en 
cualquier parte alrededor del círculo; sin embargo, el ángulo 2θ se mide siempre en 
sentido antihorario desde el radio CA, se encuentra donde se encuentre el punto A. 
 
81 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
En los casos especiales de tensión uniaxial, tensión biaxial y cortante puro, la 
construcción del círculo de Mohr es más simple que en el caso general de tensión 
plana. 
 
Además de usar el círculo de Mohr para obtener las tensiones sobre planos inclinados 
cuando se conocen las tensiones sobre los planos x e y, podemos utilizarlo de manera 
opuesta. Si conocemos las tensiones σx1, σy1 y τx1y1 que actúan sobre un elemento 
inclinado orientado según un ángulo conocido θ, resulta fácil construir el círculo y 
determinar las tensiones σx, σy, y τxy para el ángulo θ = 0°. El procedimiento es 
localizar los puntos D y D’ a partir de las tensiones conocidas y luego dibujar el círculo 
usando la línea DD’ como diámetro. Si medimos el ángulo 2θ en sentido negativo 
desde el radio CD, podemos localizar el punto A, correspondiente a la cara x del 
elemento. Entonces podemos localizar el punto B construyendo un diámetro desde A. 
Por último, podemos determinar las coordenadas de los puntos A y B y de ahí obtener 
las tensiones que actúan sobre el elemento para el cual θ = 0°. 
 
Si se desea, es posible construir el circulo de Mohr a escala y medir los valores de las 
tensiones con base en el dibujo. Sin embargo, a menudo es preferible obtener las 
tensiones por cálculo numérico, ya sea directamente de las ecuaciones o bien usando 
trigonometría y la geometría del círculo. 
 
Ejemplo 1 
 
 
 
 
82 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
 
Ejemplo 2 
 
 
83 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELOY CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
 
 
 
 
 
84 
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85 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
El Círculo de Mohr en Geotecnia 
 
En Geotecnia, al contrario de lo que sucede en Resistencia de Materiales, se 
consideran las compresiones positivas y las tracciones negativas. En cuanto a los 
esfuerzos cortantes, se consideran positivos si se ven girar, desde el lado opuesto del 
plano elemental a aquel en que actúan, en sentido antihorario. El esfuerzo cortante 
representado en la figura siguiente será, pues, positivo. 
 
 
 
En la misma figura se representan los planos sobre los que actúan las tensiones 
principales mayor, σ1, y menor, σ3. Llamaremos a estos planos, plano principal mayor 
y plano principal menor, respectivamente. El diagrama de Mohr, con el convenio de 
signos indicado, permite una excelente visión de la orientación de los diversos planos. 
Supongamos que la figura 8.3 (b) representa el círculo de Mohr correspondiente al 
estado de tensiones de la ftgura 8.3 (a). Si a través del punto D, cuya abscisa es la 
tensión principal mayor, trazamos una recta paralela a la orientación conocida del 
plano principal mayor, AB, esta recta corta a la circunferencia de Mohr en un punto P, 
llamado “Polo”. Si trazamos por P una recta perpendicular a PD, esta recta será 
paralela al plano principal menor, BC, y cortará a la circunferencia en el punto E, cuya 
abscisa es la tensión principal menor. En general, cualquier línea trazada por el polo 
paralelamente a un plano arbitrario corta a la circunferencia de Mohr en el punto que 
representa el estado de tensiones correspondiente a dicho plano. 
 
En efecto, si proyectamos las fuerzas que actúan en el triángulo de la figura 8.3 (a) 
sobre la perpendicular a AC y sobre AC, respectivamente, deduciremos: 
 
θσθσσ sen cos 2321 += 
θσστ 2 sen 
2
 - 31= 
 
 
 
 
86 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
Si PF es paralela a AC, las coordenadas del punto F serán: 
 
θσσθτ 2 sen 
2
 - 2 sen MF FN 31=== 
θσθσθσσσσσ sen cos 2 cos 
2
- 
2
 MN OM ON 23
2
1
3131 +=++=+== 
 
Vemos, pues, que las coordenadas del punto F representan, efectivamente, las 
tensiones sobre AC. 
 
En el apartado siguiente veremos que para pasar de las tensiones totales que actúan 
sobre un plano a las efectivas basta restar a la componente normal de la tensión total 
la presión intersticial (presión debida al agua). Así, pues, para obtener el círculo de 
Mohr en tensiones efectivas a partir del círculo de Mohr en tensiones totales basta 
trasladar éste paralelamente al eje de las σ y hacia la izquierda una magnitud igual a la 
presión intersticial si ésta es positiva (y hacia la derecha si es negativa). 
 
El diámetro del círculo de Mohr, σ1-σ3 recibe el nombre de “tensión desviadora”, y es el 
doble de la máxima tensión cortante existente en el punto considerado. 
 
La relación σ’1/σ’3 recibe el nombre de “razón de tensiones”. 
 
Si θ es el ángulo que forma con la horizontal la tangente por el origen al círculo de 
Mohr (Fig. 8.4), en el triángulo OAB se verificará: 
 
θσσσσ sen
2
' ' 
2
' - ' 3131 += 
 
 
 
Despejando de esta ecuación la relación de tensiones, obtenemos: 
 
)
2
(45 tan
 sen - 1
 sen 1
'
' 2
3
1 θ
θ
θ
σ
σ +=+= 
87 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
 
1.4.7 Tensión Triaxial 
 
Se dice que un elemento de material se encuentra en estado de tensión triaxial al estar 
sometido a tensiones normales σx, σy y σz que actúan en tres direcciones mutuamente 
perpendiculares (Fig. 7-26a). Dado que no hay tensiones tangenciales sobre las caras 
x, y y z, las tensiones σx, σy y σz son las tensiones principales en el material. 
 
 
 
Si se corta un plano inclinado paralelo al eje z a través del elemento (Fig. 7-26b), las 
únicas tensiones sobre la cara inclinada son la tensión normal σ y la tensión tangencial 
τ; que actúan paralelas al plano xy y son análogas a las tensiones σx1 y τx1y1 que 
hallamos en el análisis de la tensión plana (vea, por ejemplo, la Fig.7-2a). Puesto que 
las tensiones σ y τ (Fig. 7-26b) se encuentran a partir de las ecuaciones de equilibrio 
de fuerzas en el plano xy, son independientes de la tensión normal σz; por lo tanto, 
podemos usar las ecuaciones de transformación de tensión plana y el círculo de Mohr 
para tensión plana al determinar las tensiones σ y τ en la tensión triaxial. La misma 
conclusión general es válida para las tensiones normal y tangencial que actúan sobre 
planos inclinados cortados a través del elemento paralelos a los ejes x e y. 
 
Tensiones tangenciales máximas 
 
Por nuestros análisis de la tensión plana, sabemos que las tensiones tangenciales 
máximas se presentan en planos orientados a 45° respecto a los planos principales; 
88 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
por lo tanto, para un material en tensión triaxial (Fig. 7-26a), las tensiones tangenciales 
máximas se dan en elementos orientados según ángulos de 45° respecto a los ejes x, 
y y z. Consideremos por ejemplo, un elemento obtenido por una rotación de 45° 
respecto al eje z. Las tensiones tangenciales positiva y negativa máximas que actúan 
sobre este elemento son 
 
2
 - 
)( yxzmax
σστ ±= 
 
De modo similar, obtenemos las siguientes tensiones tangenciales máximas por 
rotaciones de ángulos de 45° respecto a los ejes x e y: 
 
2
 - 
)( zyxmax
σστ ±= 
2
 - )( zxymax
σστ ±= 
 
La tensión tangencial máxima absoluta corresponde al valor numéricamente mayor de 
las tensiones determinadas con las ecuaciones anteriores en térmicos numéricos. Es 
igual a la mitad de la diferencia entre el mayor a nivel algebraico y el algebraicamente 
menor de las tres tensiones principales. 
 
Las tensiones que actúan sobre elementos orientados a diversos ángulos respecto a 
los ejes x, y y z se pueden visualizar con ayuda de los círculos de Mohr. Para 
elementos orientados por rotaciones respecto al eje z, el círculo correspondiente está 
marcado con una A en la figura 7-27. Nótese que este círculo está dibujado para el 
caso en que σx > σy y que tanto σx como σy son tensiones de tracción. 
 
 
 
De manera similar, podemos construir los círculos B y C para elementos orientados 
por rotaciones respecto a los ejes x e y, respectivamente. Los radios de los círculos 
representan las tensiones tangenciales máximas dadas por las ecuaciones anteriores 
y la tensión tangencial máxima absoluta es igual al radio del círculo mayor. Las 
tensiones normales que actúan sobre los planos de tensiones tangenciales máximas 
tienen magnitudes dadas por las abscisas de los centros de los círculos respectivos. 
 
 
89 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
En el análisis anterior de la tensión triaxial consideramos sólo las tensiones que actúan 
sobre planos obtenidos por rotación respecto a los ejes x, y y z. Entonces, cada plano 
que consideramos es paralelo a uno de los ejes; por ejemplo, el plano inclinado en la 
figura 7-26b es paralelo al eje z y su normal es paralela al plano xy. Por supuesto, 
también podemos cortar a través del elemento en direcciones inclinadas, de manera 
que los planos inclinados resultantes estén inclinados respecto a los tres ejes 
coordenados. Las tensiones normal y tangencial que actúan sobre tales planos 
pueden obtenerse a partir de un análisis tridimensional más complicado. Sin embargo, 
las tensiones normales que actúan sobre planos inclinados tienen valor intermedio 
entre las tensiones principales algebraicamente máximo y mínimo; por otro lado, lastensiones tangenciales sobre dichos planos son menores (en valor absoluto) que la 
tensión tangencial máxima absoluta obtenida con las ecuaciones anteriores. 
 
 
1.5 Resistencia al esfuerzo cortante 
 
Al modificar el estado tensional del suelo se producen deformaciones que pueden 
originar su rotura. Aunque los suelos con cohesión rompen a veces por tracción, como 
puede ser el caso de las grietas verticales que a veces se observan en la coronación 
de un talud deslizado, la forma de rotura más habitual en los suelos es por esfuerzo 
cortante (tensión tangencial). 
 
La resistencia al corte de un suelo depende, entre otros factores de las 
características de la carga. 
 
En el apartado anterior se daban las ecuaciones para determinar las presiones 
verticales geostáticas en un suelo seco. Las mismas ecuaciones se pueden utilizar 
también para determinar la presión geostática vertical total de un suelo húmedo. El 
peso específico del suelo que contribuye a estas presiones totales es por supuesto, el 
total, y las ecuaciones correspondientes se transforman en: 
 
ztv γσ = 
 
∫=
Z
tv dz
0
γσ 
∑ Δ= ztv γσ 
 
 
La Fig. 16.1 muestra el caso de un suelo saturado con agua estática. El nivel para el 
cual la presión del agua intersticial es la atmosférica (es decir presión manométrica 
nula) se denomina nivel freático, y la profundidad desde este nivel hasta el elemento A 
es zw. Para el caso de la Fig. 16.1 además de las presiones o esfuerzos σv y σh , 
existen también las presiones de agua vertical uv y horizontal uh. Como uv y uh se 
miden al mismo nivel en nuestro elemento infinitamente pequeño y como el agua no 
puede soportar esfuerzos de corte estáticos, 
 
 uv = uh = u 
 u = zw γw
 
90 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
 
Principio de esfuerzos efectivos 
 
Perpendicularmente a un plano cualquiera que pasa por el elemento A del terreno (Fig. 
16.1) existe un esfuerzo total σ y una presión intersticial o de poro u. Se define el 
esfuerzo efectivo como el valor del esfuerzo total σ menos la presión intersticial u: 
 
 σ’= σ - u 
 σv’= σv – u 
 σh’= σh – u 
 
El coeficiente de presión lateral se basa realmente en los esfuerzos o presiones 
efectivas en lugar de en las totales. Así pues: 
 
 
v
hK
'
'
σ
σ= 
 
Se puede razonar intuitivamente que el esfuerzo efectivo estará relacionado más 
directamente con el comportamiento del suelo que el esfuerzo total o la presión 
intersticial. Por ejemplo, un aumento de esfuerzo efectivo producirá un reajuste de las 
partículas de suelo pasando a una agrupación más compacta; sin embargo, un 
aumento análogo del esfuerzo total o de la presión intersticial, manteniendo constante 
el esfuerzo efectivo producirá lógicamente un efecto escaso o nulo sobre la 
compacidad de las partículas. Esta hipótesis viene apoyada por una cantidad 
considerable de datos experimentales. 
 
La definición de esfuerzo efectivo y el hecho de que éste está relacionado con el 
comportamiento del suelo se combinan para establecer el principio de esfuerzos 
efectivos que pueden plantearse de la forma siguiente: 
 
1. El esfuerzo efectivo (presión efectiva) es igual al esfuerzo total (presión 
total) menos la presión intersticial. 
2. El esfuerzo efectivo controla ciertos aspectos del comportamiento del suelo, 
principalmente la consolidación y la resistencia. 
91 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
 
1.5.1 Parámetros de resistencia en presiones efectivas 
 
La resistencia al corte del suelo no puede considerarse corno un parámetro único y 
constante, ya que depende de su naturaleza, estructura, enlaces, nivel de 
deformaciones, etc., así como, muy especialmente, de su estado tensional y de la 
presión del fluido que rellena sus poros (agua o agua y aire). 
 
El criterio de rotura en suelos más difundido deriva del propuesto por Coulomb, que 
relaciona tensiones efectivas normales y tensiones tangenciales actuando en cualquier 
plano del suelo Este criterio establece que, para un suelo saturado, la resistencia al 
corte viene dada por la expresión: 
 
 τ = c’ + (σn-u) tg φ’ = c’ + σ’ tg φ’ 
 
Donde: 
 
τ = resistencia al corte del terreno a favor de un determinado plano 
σn = tensión total normal actuando sobre el mismo plano 
u = presión intersticial 
c’ = cohesión efectiva 
φ’ = ángulo de rozamiento interno efectivo 
 
El ángulo de rozamiento φ’ y la cohesión c’ se obtienen de ensayos lentos donde se 
permite el drenaje totalmente (ensayos triaxiales C.D. con consolidación previa y 
rotura con drenaje, por ejemplo) o ensayos donde se controlan las presiones 
intersticiales y se descuentan al interpretarlos (ensayos triaxiales C.U., con 
consolidación previa y rotura sin drenaje pero midiendo las presiones intersticiales, 
por ejemplo). 
 
La ecuación anterior representa una recta en el espacio (σ’, τ), que a menudo se 
denornina línea de resistencia intrínseca o envolvente de rotura del suelo (ver figura 
siguiente). 
 
 
 
Esta línea proporciona, para cada valor de la tensión efectiva normal a un plano que 
atraviesa un elemento del suelo, la máxima tensión tangencial movilizable a favor de 
dicho plano. 
 
 
92 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
De la figura anterior se pueden deducir algunos aspectos interesantes: 
 
• La cohesión efectiva es la ordenada en el origen de la envolvente de rotura. 
Representa por lo tanto la máxima resistencia tangencial movilizable en un 
plano cualquiera cuando la tensión efectiva normal en dicho plano es nula. 
• La máxima tensión tangencial movilizable en un plano es mayor a medida 
que aumenta la tensión efectiva normal que actúa sobre dicho plano. Es 
decir, el suelo es más resistente cuanto mayor es su nivel de tensiones 
efectivas. 
• La línea de resistencia definida actúa como una «envolvente o superficie de 
estado», separando estados posibles de imposibles. Así: 
 
? El punto (1) señalado en la figura anterior representa un estado de 
rotura. 
? El punto (2) representa una combinación (σ’, τ) que cuenta con un 
cierto factor de seguridad ya que, para una determinada tensión 
efectiva normal, la tensión tangencial es inferior a la máxima 
movilizable. 
? El punto (3) representa un estado imposible en tanto en cuanto se sitúa 
por encima de la envolvente de rotura, lo que significa que se ha 
sobrepasado la combinación máxima (σ’, τ) del criterio de rotura, y por 
lo tanto no es compatible con la resistencia definida del suelo. 
 
Si se recuerdan los conceptos básicos del tensor de tensiones y el círculo de Mohr, se 
pueden relacionar fácilmente las condiciones de rotura en un plano dado con las 
tensiones actuantes a favor de otros planos. En la Figura siguiente se han 
representado tres círculos de Mohr en el espacio (σ’, τ), que en principio 
representarían tres estados tensionales de un elemento de suelo. 
 
Si los parámetros de resistencia al corte del suelo (c’, φ’) dan lugar a la línea de 
resistencia intrínseca dibujada, es inmediato observar que: 
 
El estado tensional representado por el círculo (A) cuenta con un margen de 
seguridad, ya que no llega a alcanzar a la envolvente de rotura del suelo. Es por tanto 
un estado posible y seguro (el suelo no ha roto). 
 
El estado tensional representado por el círculo (B) indica una situación de rotura. Así, 
el punto (O) representa la combinación (σ’, τ) en un plano que atraviesa el elemento 
de suelo en el que se alcanzan las condiciones del criterio de rotura definido. 
 
El estado tensional representado por el círculo (C) es imposible, ya que existirían 
orientaciones de planos atravesando el elemento de suelo en los que se excederían 
las condiciones (σ’, τ) de rotura (todos los planos representados por puntosdel círculo 
situados por encima de la línea de resistencia intrínseca). 
 
93 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
 
Del análisis anterior se desprende que. cuando se alcanzan las condiciones de rotura 
en un elemento de suelo, el círculo de Mohr que representa su estado tensional será 
tangente a la línea de resistencia intrínseca y que, además, el plano a favor del cuál se 
alcanzan dichas condiciones de rotura será el representado por el punto de tangencia. 
 
 
1.5.2 Parámetros de resistencia en condiciones sin drenaje 
 
Para conocer mejor el comportamiento de los suelos arcillosos o limosos y, en 
general, de todos aquellos que tienen permeabilidad baja, suele ser necesario 
investigar la resistencia al corte en aquellas situaciones en las que el drenaje está 
impedido. 
 
En esas condiciones la resistencia del suelo se puede aproximar mediante una 
expresión similar a la ley de Coulomb. 
 
 su = cu + σn tg φu
 
donde: 
φu = Angulo de rozamiento aparente en la rotura sin drenaje 
cu = Cohesión aparente en la rotura sin drenaje 
su = Resistencia al corte sin drenaje 
σn = Presión total en el plano de rotura 
 
Es frecuente, en el estudio de situaciones de duración corta respecto al plazo de 
consolidación del suelo, sin posibilidad de drenaje parcial del agua, suponer que φu = 
0, ya que así resulta en ensayos triaxiales realizados con arcillas saturadas; la 
resistencia al corte es independiente de la presión de confinamiento aplicada. 
 
La resistencia al corte sin drenaje se puede medir en campo con ensayos in situ 
(molinete y penetración estática, por ejemplo) o en laboratorio (ensayos triaxiales UU. 
realizados con muestras inalteradas, por ejemplo). 
94 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
En ocasiones interesa conocer cuál hubiera sido esa resistencia si el suelo 
estuviera más consolidado (esto es con mayores densidades) tal como podría ocurrir 
en zonas más profundas del terreno. También puede aumentar la densidad y por lo 
tanto la resistencia al corte sin drenaje, después de cierto tiempo, en zonas 
sobrecargadas por las obras en estudio. Para investigar esos casos se pueden 
consolidar las muestras de manera artificial en el laboratorio hasta alcanzar la 
situación que se quiere simular y después proceder a su rotura sin drenaje. 
 
La resistencia al corte sin drenaje de suelos arcillosos (o fangosos) normalmente 
consolidados crece con la profundidad a medida que lo hace la presión efectiva 
vertical. El ingeniero debe buscar, en sus exploraciones geotécnicas, esa correlación. 
Como referencia puede utilizar la ley dada por la siguiente expresión: 
 
 vvu
IPs '15,0'
100
303,02,0 σσ ≥⎟⎠
⎞⎜⎝
⎛ −+= 
Donde: 
su = Resistencia al corte sin drenaje del suelo cohesivo normalmente consolidado 
IP = Indice de plasticidad expresado en %. 
σ’v = Presión efectiva vertical que actúa sobre el plano horizontal donde se determina 
la resistencia al corte. 
 
Es posible medir resistencias al corte incluso menores que la indicada por la ecuación 
anterior. Esa situación puede indicar que el terreno está aún en proceso de 
consolidación. 
 
En los suelos costeros o en los fondos marinos pueden darse situaciones de 
sobreconsolidación. Esa sobreconsolidación se mide mediante el parámetro OCR. La 
sobreconsolidación puede alcanzarse debido a una carga previa que después se 
retira. También puede ser el resultado de ciertos procesos de envejecimiento o de 
cementación o incluso de densificación causada por las cargas de corte que 
experimenta el terreno. 
 
La sobreconsolidación aumenta la resistencia al corte sin drenaje de los suelos 
arcillosos (o fangosos). Existe una relación teórica que indica que ese crecimiento es: 
 
 su* = su OCR0,8
 
donde: 
su* = Resistencia al corte sin drenaje del suelo cohesivo sobreconsolidado 
OCR= Razón de sobreconsolidación 
su = Resistencia al corte sin drenaje del suelo cohesivo normalmente consolidado 
 
 
1.6 Relaciones tensión-deformación 
 
Una vez que el ingeniero ha comprobado satisfactoriamente que un suelo no va a 
fallar totalmente, en general debe estimar el grado de deformación que se producirá al 
aplicar cargas, decidiendo si esta deformación es admisible. Para hacer esto, el 
ingeniero debe obtener una relación esfuerzo-deformación del suelo. 
 
El grado de deformación producido por un esfuerzo dependerá de la composición, 
relación de huecos, historia de esfuerzos y forma en que se aplique el esfuerzo. 
 
95 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
Para muchos problemas, el mejor método consiste en medir directamente las 
deformaciones producidas en una prueba de laboratorio bajo los esfuerzos que 
existirán en el terreno real. 
 
En otros casos, suele ser muy útil recurrir a conceptos y fórmulas de la teoría de la 
elasticidad. Esto significa que las curvas reales no lineales de esfuerzo-deformación 
de un suelo deben “linealizarse”, es decir, sustituir por líneas rectas. Entonces se 
habla del módulo de elasticidad y del coeficiente de Poisson del suelo. Evidentemente, 
el módulo de elasticidad y el coeficiente de Poisson no son constantes de un suelo, 
sino más bien magnitudes que describen aproximadamente el comportamiento de un 
suelo para una combinación particular de esfuerzos. Para otra serie de esfuerzos se 
aplicarán valores diferentes de las citadas magnitudes. En especial, al hablar del 
módulo, debe definirse cuidadosamente qué se entiende por tal. 
 
Los términos módulo tangente y módulo secante se utilizan frecuentemente. El módulo 
tangente es la pendiente de una recta trazada tangente a una curva esfuerzo-
deformación en un punto particular (ver la Fig. 12.1). El valor del módulo tangente 
variará con el punto elegido. El módulo tangente en el origen de la curva es el módulo 
tangente inicial. El módulo secante es la pendiente de una recta que une dos puntos 
diferentes de la curva. El valor del módulo secante variará con la situación de ambos 
puntos. Cuando ambos puntos coincidan, el modulo secante será igual al módulo 
tangente. Para un material realmente lineal, todos estos valores de los módulos 
coinciden. 
 
96 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
 
 
 
 
97 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
1.6.1 Conceptos de la teoría de elasticidad 
 
Si aplicamos un esfuerzo uniaxial σz a un cilindro elástico (Fig. 12.1) se producirá una 
compresión vertical y una expansión lateral de forma tal que 
 
 
E
z
z
σε = 
 
 zyx νεεε −== 
 
Donde 
 
εx, εy, εz = deformaciones en la dirección x, y, z, respectivamente (positivas 
cuando son compresiones 
E = Módulo de Young o de elasticidad 
ν = Coeficiente de Poisson 
 
Si se aplican esfuerzos tangenciales τxz a un cubo elástico, se producirá una distorsión 
tangencial tal que 
 
 
G
xz
xz
τγ = 
Donde 
 
G = modulo de deformación tangencial. 
 
Las ecuaciones anteriores definen las tres constantes básicas de la teoría de la 
elasticidad: E, G y ν. Realmente sólo se requieren dos de estas constantes ya que: 
 
 ( )ν+= 12
EG 
 
Para un material elástico sobre el que actúen todas las componentes de los esfuerzos, 
podernos utilizar el principio de superposición obteniendo: 
 
 ([ ]zyxx E σσνσε +−= 1 ) Gxyxy τγ = 
 
 ([ ]zxyy E σσνσε +−= 1 ) Gyzyz τγ = 
 
 ([ ]yxzz E σσνσε +−= 1 ) Gxzxz τγ = 
 
 
La deformación volumétrica es: 
 
 zyxV
V εεε ++=Δ 
98 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
Para el caso especial en que σx = σy = σz = σ0 y τxy = τyz = τxz = 0, la variación de 
volumen vale: 
 
 ( )νσ 213 0 −=Δ
EV
V
 
 
El módulo de deformaciónvolumétrica B se define por: 
 
 ( )ν
σ
213
0
−=Δ=
E
V
VB 
 
Otro tipo de módulo especial es el de compresión confinada D, que es la relación entre 
el esfuerzo axial y la deformación axial en compresión con confinamiento lateral (Fig. 
12.1). Este módulo puede obtenerse a partir de las ecuaciones anteriores, haciendo εx 
= εy = 0. Así pues, 
 
 zyx σν
νσσ −== 1 
 
 
( )
( )( )νν
ν
211
1
−+
−= ED 
 
Las compresiones simple y confinada suponen deformación tangencial y cambio de 
volumen. Este importante hecho se demuestra en el ejemplo siguiente. 
 
Ejemplo 
 
Problema. Obtener la deformación volumétrica (ΔV/V) y la deformación tangencial 
máxima en a) compresión simple, b) compresión confinada. 
 
Solución. 
 
 
99 
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Para un material elástico, las ecuaciones anteriores dan los incrementos de esfuerzos 
a partir de un cierto esfuerzo inicial, al igual que los incrementos de esfuerzos 
partiendo de un esfuerzo nulo. El ejemplo siguiente deduce ecuaciones que pueden 
utilizarse para obtener E y ν a partir de las deformaciones medidas. 
 
Ejemplo 
Datos: las deformaciones Δεx = Δεy y Δεz , producidas por los esfuerzos Δσx = Δσy y Δσz 
sobre una probeta cilíndrica de un material elástico. 
Problema. Obtener las expresiones del módulo de Young y del coeficiente de Poisson. 
 
Solución. Las ecuaciones anteriores que relacionan tensiones y deformaciones en tres 
dimensiones x y z se transforman en: 
 ( )zxxxE σσνσε Δ+Δ−Δ=Δ 
 xzzE σνσε Δ−Δ=Δ 2 
Y resolviendo se obtiene: 
 
 
( )( )
( ) zzxzx
xzxzE εσεεσ
σσσσ
ΔΔ+Δ−ΔΔ
Δ−ΔΔ+Δ=
2
2
 
 
 ( ) zzxzx
zxzx
εσεεσ
σεεσν ΔΔ+Δ−ΔΔ
ΔΔ−ΔΔ=
2
 
 
 
1.6.2 Comportamiento en compresión confinada 
 
La figura siguiente muestra una curva típica tensión-deformación para una arena en 
compresión confinada. Como no existe deformación lateral durante esta prueba, la 
deformación axial es exactamente igual a la volumétrica. 
 
 
Coeficiente de compresibilidad = av = - Δe/Δσv 
 
La pendiente de la curva resultante se define como coeficiente de compresibilidad av: 
100 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
 
v
v d
dea σ−= ó vv
ea σΔ
Δ−= 
 
La fig. 12.6 muestra los mismos resultados, representando la relación de vacíos en 
función de la presión vertical en escala logarítmica. Esta forma de representación es 
útil por dos razones: a) es conveniente para mostrar el comportamiento esfuerzo-
deformación para una amplia gama de presiones; y b) tales curvas se vuelven 
generalmente más o menos rectas para presiones grandes. Esta forma de diagrama 
es especialmente apropiada para las arcillas. 
 
 
 
La Fig. 12.7 muestra varias curvas representadas de esta forma. Para presiones 
grandes, las curvas de las diferentes arenas tienden a seguir una trayectoria común. 
La pendiente de este tipo de curva es el índice de compresión Cc. 
 
 ( )vc d
deC σlog−= ó ( )vc
eC σlogΔ
Δ−= 
 
Cc es. por tanto, la variación de la relación de vacíos en un ciclo logarítmico de 
presiones. 
 
101 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
 
 
Otro término utilizado también para describir el comportamiento esfuerzo-deformación 
en compresión confinada es el coeficiente de variacion volumétrica mv, que es 
simplemente el inverso del módulo de deformación confinada: 
 
 
v
v
v d
dm σ
ε= ó 
v
v
vm σ
ε
Δ
Δ= 
 
Las relaciones entre D, mv, av y Cc se dan en la Tabla 12.2. La deformación vertical en 
compresión confinada vale Δe/(1+e0), siendo e0 la relación de huecos inicial. 
 
 
 
 
1.6.3 Consolidación. Consideraciones generales 
 
En campo, cuando el esfuerzo sobre una capa de arcilla saturada se incrementa –por 
ejemplo, por la construcción de una cimentación-, la presión de poro del agua (presión 
intersticial) se incrementará. Debido a que la permeabilidad hidráulica de las arcillas es 
muy pequeña, se requerirá algún tiempo para que el exceso de presión de poro del 
102 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
agua se disipe y el incremento del esfuerzo se transfiera gradualmente a la estructura 
del suelo. De acuerdo con la figura siguiente, si Δp es una sobrecarga en la superficie 
del terreno sobre un área muy grande, el incremento del esfuerzo total Δσ en cualquier 
profundidad del estrato de arcilla será igual a Δp, o 
 
 Δσ = Δp 
 
 
 
 
Sin embargo, en el tiempo t=0 (es decir, inmediatamente después de la aplicación del 
esfuerzo), el exceso de presión de poro del agua en cualquier profundidad Δu, será 
igual a Δp, o 
 
 Δu = Δhiγw = Δp (en el tiempo t=0) 
 
Además, el incremento de esfuerzo efectivo en el tiempo t=0 será 
 
 Δσ’ = Δσ - Δu = 0 
 
Teóricamente, en el tiempo t=∞, cuando todo el exceso de presión de poro en el 
estrato de arcilla se ha disipado como resultado del drenado hacia los estratos de 
arena, 
 
 Δu = 0 (en el tiempo t=∞) 
 
Entonces, el incremento de esfuerzo efectivo en la capa de arcilla es 
 
 Δσ’ = Δσ - Δu = Δp – 0 = Δp 
 
Este incremento gradual ocasionará asentamientos durante cierto tiempo y se conoce 
como consolidación. 
 
Los ensayos de laboratorio realizados para analizar este proceso son los ensayos 
edométricos. En ellos se coloca la muestra dentro de un anillo, con una piedra porosa 
en la parte superior y otra en la parte inferior (ver figura adjunta). En todo momento 
durante la prueba, el espécimen se mantiene saturado. Se aplica la carga sobre la 
muestra de manera que el esfuerzo vertical total sea igual a p. Las lecturas del 
103 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
asentamiento para la muestra se toman durante 24 horas. Después, la carga se 
duplica y se toman las lecturas respectivas. Este procedimiento continúa hasta que se 
alcanza el límite deseado de esfuerzo. 
 
 
 
 
Con base en pruebas de laboratorio se traza una gráfica que muestre la variación de la 
relación de huecos e al final de la consolidación contra el esfuerzo vertical 
correspondiente p (gráfica semilogarítmica: e sobre la escala aritmética y p sobre la 
escala log). 
 
 
 
 
La naturaleza de la variación de e contra log p para un tipo de arcilla se muestra en la 
figura anterior. Después que la presión de consolidación deseada se alcanza, el 
espécimen puede descargarse gradualmente, lo que resultará en su expansión. La 
104 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
figura también muestra la variación de la relación de vacíos durante el periodo de 
descarga. 
 
De la curva e-log p mostrada en la figura anterior, se determinan tres parámetros 
necesarios para calcular el asentamiento. 
 
1. La presión de preconsolidación p es la máxima sobrecarga efectiva a la que 
el suelo estuvo sometido en el pasado. Se determina usando un simple 
procedimiento gráfico propuesto por Casagrande (1936), con referencia a la 
figura anterior e implica cinco pasos: 
 
a) Determine el punto O sobre la curva e-log p que tenga la curvatura más 
aguda (es decir, el menor radio de curvatura). 
b) Dibuje una línea horizontal OA. 
c) Dibuje una línea OB tangente a la curva e-logp en O. 
d) Dibuje una línea OC bisectriz del ángulo AOB. 
e) Trace la porción de línea recta de la curva e-log p hacia atrás hasta 
cruzar OC. Este es el punto D. La presión que corresponde al punto D 
es el esfuerzo de preconsolidación pc. 
 
Los depósitos naturales de suelo pueden estar normalmente consolidados 
o sobreconsolidados (o preconsolidados). Si la presión actual efectiva de 
sobrecarga p = p0 es igual a la presión de preconsolidación pc, elsuelo está 
normalmente consolidado. Sin embargo, si p0<pc, se considera 
sobreconsolidado. 
 
2. El índice de compresibilidad Cc, es la pendiente de la porción recta de la 
curva (última parte de la curva de carga), o 
 
⎟⎟⎠
⎞
⎜⎜⎝
⎛
−=−
−=
1
2
21
12
21
log
loglog
p
p
ee
pp
eeCC 
Donde e1 y e2 son las relaciones de huecos al final de la consolidación bajo 
los esfuerzos p1 y p2, respectivamente. 
 
El índice de compresibilidad, determinado con la curva e-log p en el 
laboratorio, será algo diferente de la encontrada en campo. La razón 
principal es que el suelo se remoldea en alguna medida durante la 
exploración de campo. La naturaleza de la variación de la curva e-log p en 
el campo para arcilla normalmente consolidada se muestra en la figura 
siguiente. A ésta se le conoce generalmente como curva virgen de 
compresibilidad. Esta cruza aproximadamente la curva de laboratorio en 
una relación de vacíos de 0,42 e0 (Terzaghi y Peck, 1967). Note que e0 es 
la relación de huecos de la arcilla en el campo. Conocidos los valores de e0 
y p puede construirse fácilmente la curva virgen y calcular el índice de 
compresibilidad de la curva usando la ecuación anterior. 
 
105 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
 
El valor de Cc, varía ampliamente dependiendo del suelo. Skempton (1944) 
dio la siguiente correlación empírica para el índice de compresión: 
Cc = 0,009 (LL-10) 
donde LL = límite líquido 
 
No obstante, existen otras muchas correlaciones de otros autores para 
obtener el índice de compresión. 
 
3. El índice de expansión o entumecimiento, Cs, es la pendiente de la porción 
de descarga de la curva e-log p. Puede definirse como: 
 
⎟⎟⎠
⎞
⎜⎜⎝
⎛
−=
3
4
43
log
p
p
eeCC 
En la mayoría de los casos, el valor del índice de expansión (Cs) es de 4
1 
a 5
1 del índice de compresibilidad Cc. 
 
La determinación del índice de expansión es importante en la estimación 
del asentamiento por consolidación de las arcillas sobreconsolidadas. En el 
campo, dependiendo del incremento de presión, una arcilla 
sobreconsolidada seguirá una trayectoria abc en la curva e-logp, como 
muestra la figura 1.20. Note que el punto a, con coordenadas p0 y e0, 
corresponde a las condiciones de campo antes de cualquier incremento de 
presión. El punto b corresponde a la presión de preconsolidación (pc) de la 
arcilla. La línea ab es aproximadamente paralela a la curva de descarga cd 
obtenida en laboratorio (Schmertmann, 1953). 
106 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
 
Además, si se conocen e0, p0, pc, Cc y Cs, se podrá construir fácilmente la 
curva de consolidación de campo. 
 
Nagaraj y Murthy (1985) expresaron el índice de expansión como: 
 
ss 100
LL 0,0463 C γ⎟⎠
⎞⎜⎝
⎛= 
 
Siendo LL el límite líquido y γs el peso específico de las partículas del suelo. 
 
Cabe destacar que cualquiera de las correlaciones empíricas para Cc y Cs dadas 
en esta sección son sólo aproximadas. Esto puede ser válido en un suelo dado 
para el cual la relación fue desarrollada, pero tal vez no serán válidas para otros 
suelos. 
 
 
1.6.4 Cálculo de asentamientos por consolidación 
 
El asentamiento unidimensional por consolidación (causado por una carga adicional) 
de una capa de arcilla (ver figura siguiente) con espesor Hc puede calcularse como: 
 
c
0
 H
e 1
e S +
Δ= 
 
donde 
 
S = asentamiento 
Δe = cambio total de la relación de huecos causada por la aplicación de carga 
adicional 
e0 = relación de huecos de la arcilla antes de la aplicación de la carga 
107 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
Note que 
 
erticalunitaria v ndeformació 
e 1
e
0
==+
Δ
vε 
 
 
 
Para arcilla normalmente consolidada, la curva de campo e-log p tendrá la forma 
mostrada en la figura 1.22b. Si p0 = presión de sobrecarga efectiva promedio inicial 
sobre el estrato de arcilla y Δp = incremento promedio de presión sobre el estrato de 
arcilla, causado por la carga agregada, el cambio de la relación de huecos provocada 
por el incremento de carga es: 
 
0
0
c p
pp log Ce Δ+=Δ 
Ahora, combinando las ecuaciones anteriores, se tiene: 
 
0
0
0
cc
p
pp log 
e1
 HCS Δ++= 
 
108 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
Para arcilla sobreconsolidada, la curva de campo e-log p se verá como la mostrada en 
la figura 1.22c. En este caso, dependiendo del valor de Δp, pueden presentarse dos 
condiciones. 
 
Primera, si p0+Δp < pc (presión de preconsolidación) 
 
0
0
s p
pp log Ce Δ+=Δ 
Y por tanto: 
 
0
0
0
cs
p
pp log 
e1
 HCS Δ++= 
 
Segunda, si p0 < pc < p0+Δp, 
 
c
0
c
0
c
s21 p
pp log C 
p
p log C e e e Δ++=Δ+Δ=Δ 
 
Y el asiento resulta: 
 
c
0
c
0
cc
0
c
0
cs
p
pp log C
e1
 HC 
p
p log 
e1
 HC e Δ++++=Δ 
 
 
1.6.5 Tasa de por consolidación 
 
En apartados anteriores (véase la figura 1.16) se muestra que la consolidación es 
resultado de la disipación gradual del exceso de la presión de poro del agua en un 
estrato de arcilla, que a su vez incrementa el esfuerzo efectivo que induce los 
asentamientos. Además, para estimar el grado de consolidación de un estrato de 
arcilla en un tiempo t después de la aplicación de la carga, se requiere conocer la 
rapidez de la disipación del exceso de presión de poro del agua. 
 
La figura 1.23 muestra un estrato de arcilla de espesor Hc que tiene estratos de arena 
altamente permeables arriba y abajo. Aquí, el exceso de presión de poro en cualquier 
punto A en un tiempo t después de la aplicación de la carga es Δu=(Δh)γw. 
 
109 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
 
 
Para una condición de drenaje vertical (es decir, sólo en la dirección de z) del estrato 
de arcilla, Terzaghi obtuvo la siguiente ecuación diferencial: 
 
2
2
v z 
u)( C 
 t
u)(
δ
δ
δ
δ Δ=Δ 
 
Donde Cv es el coeficiente de consolidación 
 
w
prom
wv
v
)e(1 p
e
k
 m
kC
γγ +Δ
Δ== 
 
Donde: 
 
k: Permeabilidad hidráulica de la arcilla 
Δe: Cambio total del índice de huecos causada por un incremento Δp de presión 
eprom: índice de huecos promedio durante la consolidación 
mv: coeficiente volumétrico de compresibilidad 
 
 
La ecuación diferencial anterior se resuelve para obtener Δu como función del tiempo t 
con las siguientes condiciones de contorno: 
 
1. Como se tienen estratos de arena altamente permeables en z = 0 y z = Hc, el 
exceso de presión de poro desarrollada en la arcilla en esos puntos será 
inmediatamente disipada. Por consiguiente 
 
Δu =0 en z =0 
Δu =0 en z = Hc = 2H 
 
110 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
Donde H= longitud de la trayectoria máxima de drenaje (debido a una 
condición de drenaje doble, es decir, superior e inferiormente a la capa de 
arcilla). 
2. En el tiempo t=0, 
Δu = Δu0 = exceso inicial de presión de poro del agua después de la 
aplicación de la carga 
 
 
Con las condiciones de contorno citadas, la ecuación anterior da: 
 
v
2 T M-
m
0m 0
0 e 
H
zM sen 
M
)u( 2u ∑∞=
=
⎥⎦
⎤⎢⎣
⎡
⎟⎟⎠
⎞
⎜⎜⎝
⎛Δ=Δ 
 
Donde: 
 ( )[ ]
2
 1m 2M π+= 
m: un entero: 1, 2, 3,… 
Tv: factor de tiempo adimensional= 2
v
v H
 tC T = 
 
Determinar el valor de campo de Cv es difícil. La figura siguiente proporciona una 
estimación de Cv empleando el límite líquido (Dpto. de Marina de los EEUU, 1971). 
 
 
 
111 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
El valor deΔu para varias profundidades (es decir, z = 0 a z = 2H) en cualquier tiempo 
t (es decir, cualquier Tv) puede calcularse con la ecuación anterior. La naturaleza de 
esta variación de Δu lo muestra la figura 1.23b. 
 
El grado promedio de consolidación del estrato de arcilla se define como: 
 
max
t
S
SU = 
 
Donde: 
 
U: grado de consolidación promedio 
St: Asentamiento del estrato de arcilla en el tiempo t después de la aplicación de la 
carga 
Smax: Asentamiento máximo por consolidación que el estrato de arcilla experimentará 
bajo determinada carga 
 
Si la distribución de la presión intersticial del agua inicial (Δu0) es constante respecto a 
la profundidad, como muestra la figura 1.25 a, el grado promedio de consolidación 
puede también expresarse como: 
 
( ) ( )
( )
( ) ( )
( )
( )
( )2H u
dz u
1
2H u
dz u-2H u
dz u
dz u-dz u
S
SU
0
2H
0
0
2H
0
0
2H
0
0
2H
0
2H
0
0
max
t
Δ
Δ
−=Δ
ΔΔ
=
Δ
ΔΔ
==
∫∫
∫
∫ ∫
 
 
 
 
Ahora, combinando esta última ecuación con la anterior que permite evaluar Δu a partir 
de una sumatoria, se obtiene: 
 
112 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
v
2 T M-
m
0m
2
max
t e 
M
21
S
SU ∑∞=
=
⎟⎠
⎞⎜⎝
⎛−== 
 
La variación de U con Tv puede calcularse con la ecuación anterior y está graficada en 
la figura 1.26. Note que ambas son también válidas cuando el estrato impermeable se 
encuentra en el fondo del estrato de arcilla (figura 1.25b). En ese caso, la disipación 
del exceso de la presión intersticial del agua puede tener lugar en una sola dirección. 
La longitud de la trayectoria máxima de drenaje es entonces igual a H = Hc. 
 
La variación de Tv con U mostrada en la figura 1.26 puede también ser aproximada 
por: 
 
2
v 100
U%
4
T ⎟⎠
⎞⎜⎝
⎛= π (Para U= 0-60%) 
 
U%)-(100 log 0.933 - 1.781 Tv = (Para U>60 %) 
 
 
 
En algunos casos, el exceso inicial de la presión intersticial del agua puede no ser 
constante con la profundidad como muestra la figura 1.25. A continuación se dan 
algunos casos y las soluciones para el grado promedio de consolidación. 
 
Variación trapezoidal. La figura 1.27 muestra una variación trapezoidal del exceso 
inicial de la presión intersticial del agua para un drenaje en dos direcciones. Para este 
caso, la variación de Tv con U será igual a la mostrada en la figura 1.26. 
 
113 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
Variación senoidal. Esta variación se muestra en las figuras 1.28a y 1.28b. Para la 
variación del exceso inicial de la presión intersticial del agua mostrada en la figura 
1.28a: 
 
 H2
z sen u u 0
πΔ=Δ 
 
Similarmente, para el caso mostrado en la figura 1.28b: 
 
 H4
z cos u u 0
πΔ=Δ 
 
Las variaciones de Tv con U para esos dos casos se muestran en la figura 1.29. 
 
 
 
 
 
114 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
 
Variación triangular. Las figuras 1.30 y 1.31 muestran varios tipos de cambio de la 
presión intersticial del agua inicial y la variación de Tv con el grado promedio de 
consolidación U. 
 
115 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
 
Ejemplo 
 
Un ensayo de consolidación en laboratorio de arcilla normalmente consolidada mostró 
lo siguiente: 
 
 
 
La muestra ensayada tenía 25.4 mm de espesor y estaba drenada por ambos lados. El 
tiempo requerido para que el especimen alcanzara un grado de consolidación del 50% 
fue de 4.5 minutos. 
 
Si una capa similar de arcilla en el campo, de 2.8 m de espesor y drenada por ambos 
lados, se somete a un incremento similar de presión promedio (es decir, p0 =140 kN/m2 
y p0+Δp = 212 kN/m2), determine: 
 
a. El asentamiento máximo por consolidación esperado en el campo. 
b. El tiempo requerido para que el asentamiento total en el campo sea de 40 mm 
(suponga un incremento uniforme del exceso de presión intersticial del agua 
inicial respecto a la profundidad) 
 
 
116 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
Solución: 
 
Parte a
 
Para una arcilla normalmente consolidada: 
 
333.0
140
212 log
86.092.0
p
p log
e- eC
1
2
21
c =
⎟⎠
⎞⎜⎝
⎛
−=
⎟⎟⎠
⎞
⎜⎜⎝
⎛= 
 
Por tanto, el asiento será: 
 
mm. 87.5m. 0875.0
140
212log 
0.921
(2.8) )333.0(
p
pp log 
e1
 HCS
0
0
0
cc ==+=
Δ+
+= 
 
Parte b 
 
El grado promedio de consolidación es: 
 
% 7.45)100(
5.87
40
S
SU
max
t === 
 
 
El coeficiente de consolidación Cv se determina a partir del ensayo de laboratorio. 
 
El factor de tiempo se define como: 2
v
v H
 tC T = 
 
La variación de Tv con el grado de consolidación U mostrada en la figura 1.26 puede 
también ser aproximada por: 
 
2
v 100
U%
4
T ⎟⎠
⎞⎜⎝
⎛= π (Para U= 0-60%) 
 
U%)-(100 log 0.933 - 1.781 Tv = (Para U>60 %) 
 
117 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
 
 
En nuestro caso, el grado de consolidación alcanzado en el ensayo de laboratorio es 
del 50%, por lo que: 
 
196.0
100
50
4100
U%
4
T
22
v =⎟⎠
⎞⎜⎝
⎛=⎟⎠
⎞⎜⎝
⎛= ππ 
 
El valor de Cv es entonces: 
 
( )
/minmm 03.7
5.4
2
4.25196.0
t
 HTC 2
2
2
50
v =
⎟⎠
⎞⎜⎝
⎛
== 
 
En el campo, el grado de consolidación obtenido es U=45.7%. A este valor de U le 
corresponde un factor de tiempo Tv igual a: 
 
164.0
100
45.7
4100
U%
4
T
22
v =⎟⎠
⎞⎜⎝
⎛=⎟⎠
⎞⎜⎝
⎛= ππ 
 
Con el valor de Tv y el coeficiente de consolidación Cv obtenido en el ensayo de 
laboratorio, se puede obtener el tiempo t: 
 
El factor de tiempo es igual a: 2
v
v H
 tC T = 
 
118 
MANUAL DE MECANICA DEL SUELO Y CIMENTACIONES AUTOR: ANGEL MUELAS RODRIGUEZ 
Despejando t, se tiene: 
 
( )
días 31.7min 45724
03.7
2
1000x 8.2164.0
C
 HTt 
2
v
2
v ==
⎟⎠
⎞⎜⎝
⎛
== 
 
119 
	1 CARACTERIZACION DE LOS SUELOS
	1.1 Suelos y rocas: origen del suelo
	1.2 Propiedades físicas y clasificación de los suelos
	1.3 Reconocimiento del terreno
	1.3.1 Investigación in situ
	1.3.2 Ensayos de laboratorio
	1.4 Esfuerzos en una masa de suelo: presiones normales y tangenciales
	1.4.1 Concepto de esfuerzo efectivo en un sistema de particulas
	1.4.2 Esfuerzos geostáticos
	1.4.3 Esfuerzos producidos por las cargas aplicadas
	1.4.4 Tensión Plana
	1.4.5 Tensiones Principales y Tensiones Tangenciales máximas
	1.4.6 Círculo de Mohr para tensión plana
	1.4.7 Tensión Triaxial
	1.5 Resistencia al esfuerzo cortante
	1.5.1 Parámetros de resistencia en presiones efectivas
	1.5.2 Parámetros de resistencia en condiciones sin drenaje
	1.6 Relaciones tensión-deformación
	1.6.1 Conceptos de la teoría de elasticidad
	1.6.2 Comportamiento en compresión confinada
	1.6.3 Consolidación. Consideraciones generales
	1.6.4 Cálculo de asentamientos por consolidación
	1.6.5 Tasa de por consolidación

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