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UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO FACULTAD DE FILOSOFÍA Y LETRAS COLEGIO DE HISTORIA EL MAPAMUNDI DE GUAMÁN POMA DE AYALA: UNA SÍNTESIS HISPANO-INDIGENA DEL MUNDO ANDINO A PRINCIPIOS DEL SIGLO XVII T E S I S QUE PARA OBTENER EL TÍTULO DE: LICENCIADA EN HISTORIA P R E S E N T A : NIDIA CARISA MARTÍNEZ JUÁREZ DIRECTOR DE TESIS: DR. TOMÁS FRANCISCO MARCELO RAMÍREZ RUIZ CIUDAD UNIVERSITARIA, CDMX 2017 UNAM – Dirección General de Bibliotecas Tesis Digitales Restricciones de uso DERECHOS RESERVADOS © PROHIBIDA SU REPRODUCCIÓN TOTAL O PARCIAL Todo el material contenido en esta tesis esta protegido por la Ley Federal del Derecho de Autor (LFDA) de los Estados Unidos Mexicanos (México). El uso de imágenes, fragmentos de videos, y demás material que sea objeto de protección de los derechos de autor, será exclusivamente para fines educativos e informativos y deberá citar la fuente donde la obtuvo mencionando el autor o autores. Cualquier uso distinto como el lucro, reproducción, edición o modificación, será perseguido y sancionado por el respectivo titular de los Derechos de Autor. Agradecimientos y dedicatoria *Investigación realizada gracias al Programa UNAM-DGAPA-PAPIIT IN 302115 “Paisaje y conflicto en comunidades de tradición indígena: Geografía cultural de casos del México Central”. La presente investigación es el resultado de una serie de esfuerzos individuales y colectivos que confluyeron para que esta tesis fuera posible. Por ello me es necesario dedicar unas palabras de agradecimiento a quienes me acompañaron a lo largo de esta interesante travesía. En el nivel de lo institucional y académico, agradezco a la Universidad Nacional Autónoma de México que, desde las aulas del CCH, me cobijó y me permitió desarrollar mi espíritu crítico: “Aprender a ser, Aprender a hacer y Aprender a aprender”. A la Facultad de Filosofía y Letras y sus profesores, especialmente al Dr. Roberto Fernández Castro, a la Dra. María del Carmen Vázquez Mantecón, a la Dra. Berenice Alcántara Rojas, al Dr. Rodrigo Moreno Gutiérrez, a la Dra. Josefina Flores Estrella y al Dr. Marcelo Ramírez Ruiz. Sus clases dejaron profundas enseñanzas en mi formación académica y en mi quehacer como historiadora. Agradezco también al Dr. Federico Fernández Christlieb y al Dr. Marcelo Ramírez Ruiz, la oportunidad de permitirme colaborar en el proyecto “Paisaje y conflicto en comunidades de tradición indígena”, mismo que me permitió vislumbrar los puentes que existen entre el quehacer histórico y geográfico. En ese sentido agradezco también al Lic. Jaime Gaytán, contador del Instituto de Geografía de la UNAM, el apoyo brindado con los trámites administrativos del proyecto. A mi director de tesis, el Dr. Marcelo Ramírez debo mi primer acercamiento a la Nueva corónica, la amplia bibliografía sugerida, la comprensión que siempre me brindó y las amenas charlas que Guamán Poma suscitó, su guía y acompañamiento fue imprescindible en este camino, infinitas gracias. A mis lectoras y miembros del jurado Dra. Silvia Limón, Dra. Berenice Alcántara, Dra. Clementina Battcock y Dra. Diana Pérez agradezco encarecidamente sus observaciones, recomendaciones y atenciones mismas que enriquecieron enormemente mi investigación. Gracias por leer mi tesis con el detenimiento y rigor requerido, por enseñarme a no temer a la crítica y por alentarme a seguir recorriendo el camino de los estudios históricos andinos. Mi agradecimiento y admiración están con ustedes. De manera más personal agradezco a quienes han permanecido a mi lado antes y durante este momento de transición para mí. En primer lugar agradezco a mis padres Gerardo Martínez y Alma Juárez a quienes debo la vida misma. Gracias por el amor, la confianza y los apapachos que me han brindado a lo largo de estos veinticuatro años, gracias por creer en mí en todo momento e impulsarme a alcanzar mis sueños, por hacerme sentir amada, por desvelarse conmigo cuando mis nervios no ayudaban, por secar mis lágrimas y sonreír con mis locuras. Los amo infinitamente, cada palabra de esta tesis es suya. A mis hermanas Kalid (mi gemela y compañera de vida) y Samara (mi hermanita menor, más grande que yo) agradezco las risas, las películas, las palabras de aliento, los secretos, la complicidad y las peleas encarnizadas que a veces nos aventamos. No concibo mi vida, ni estos tiempos de tesis sin su apoyo y amor. ¡GRACIAS! A mi familia Martínez, tíos, primos, sobrinos, a mis abuelitos Lupita y Chucho y a mi familia Zaldivar, gracias a todos porque a medida de sus posibilidades estuvieron al pendiente de mí. A Yolita Jimenez Recillas y su familia que han visto correr mi vida por el pasillo de nuestro patio, más que vecinos somos familia. Gracias por el gran cariño que nos hemos brindado en todos estos años. Dedico esta tesis también a mi adorada ahijada Valeria Paulina, quien tuvo que entender que su tía no podía jugar porque debía escribir. Espero que en el futuro yo también pueda ver tu tesis, mi hermosa muñequita. A mi abuelita Elisa, quien no pudo ver los inicios de mi formación académica pero sé que en donde esté sigue cuidando de mí y amándome como yo a ella. A mis amigos. En primer lugar a Luis quien me ha acompañado desde hace nueve años y ha estado a mi lado en momentos alegres y difíciles, gracias por tenderme la mano siempre que lo he necesitado y por la hermandad que nos une, mil gracias. A Ricardo gracias por apoyarme, escucharme y asesorarme cuando he requerido ayuda. Por las charlas entre tazas de chocolate y churros, por la amistad. A mis entrañables amigos Yolanda, Tonatiuh, Iván, Cuauhtémoc y Jorge, agradezco las locuras, las fiestas, los bailes, las pláticas en las tardes soleadas, los círculos de estudio, las deliciosas comidas, los sueños y las ilusiones, por eso y más, gracias y ¡SALUD! A Laura, Nathaly, Javier y Dulce, mis pecesianos, gracias por tantos años de amistad, tantas aventuras y sueños compartidos, los adoro. A Marisol, Ana, Frida, Inés, Misael, Eduardo, Arturo, Jesús, Daniel, Ricardo “Metalero”, en fin a todos quienes han estado en diversos momentos en mi vida, muchísimas gracias. Finalmente a Guillermo Analco Reyes, quien tuvo un papel trascendental en el curso de esta investigación, agradezco la paciencia brindada, el cariño siempre demostrado, las palabras de aliento, la confianza, la comprensión, las charlas sobre Guamán Poma que se hacían presentes en el café, el cine y la comida, gracias por la amistad, el compañerismo, las risas, las atenciones, pero sobre todo ¡gracias por coincidir! ÍNDICE INTRODUCCIÓN………………………………………………………………………2 CAPÍTULO 1. FELIPE GUAMÁN POMA DE AYALA. PRÍNCIPE Y CRONISTA INDÍGENA………………………………………………………………………………8 1.1 Rasgos biográficos del autor……………………………………………………..9 1.2 Contexto de la vida y obra de Felipe Guamán Poma………………………...17 1.3 La escritura indígena en el Perú colonial………………………………………27 CAPÍTULO 2. ESCRITURA INDÍGENA. EL PRIMER NUEVA CORÓNICA Y BUEN GOBIERNO……………………………………………………………………42 2.1 La obra y sus ediciones…………………………………………………………..42 2.2 Hacia un estado de la cuestión……………………………………………….....46 2.3 El contenido………………………………………………………………………..49 2.4 Arbitrismo, resistencia o utopía. Hacia un análisis de las intenciones del autor…………………………………………………….................................68 CAPÍTULO 3. EL MAPAMUNDI DE GUAMÁN POMA. UTOPIA E HISTORIA ANDINA………………………………………………………………………………...74 3.1 La trascendencia del contenido visualen la Nueva corónica………………...74 3.2 El universo andino en las láminas de Guamán Poma………………………...79 3.3 El Mapamundi del reino de las indias, una ventana al pensamiento de Guamán Poma…………………………………………………………………………86 CONCLUSIONES…………………………………………………………………..…102 ANEXO DE FIGURAS……………………………………………………………..…105 FUENTES DE CONSULTA………………………………………………………….133 2 INTRODUCCIÓN La presente investigación comprende el estudio del Mapamundi del Reino de las Indias dibujo que, junto con otros 397 compone la extensa obra del cronista indio Felipe Guamán Poma de Ayala. Dicho dibujo llamó mi atención por su composición la cual proyecta la división territorial del mundo andino bajo el dominio incaico. En el dibujo están presentes los caminos, ríos, vegetación y accidentes físicos del lugar así como centros poblacionales importantes e incluso los dirigentes de cada sector del territorio (suyu). Sin embargo cuando me adentré en el texto y lo analice con detenimiento advertí que, además de aspectos geográficos, el Mapamundi presenta un estrato simbólico e ideológico que condensa en buena medida la idea de reforma, justicia y utopía que el autor quiso plasmar en su obra. Es por ello que el objetivo principal de esta investigación será analizar el Mapamundi de Guamán Poma de Ayala para entender su cosmovisión y la manera en que el autor entretejió los elementos simbólicos de su tradición indígena y la europea logrando así la síntesis que refleja el punto de contacto y conflicto de dos tradiciones tan lejanas entre sí que se conjuntan en discurso y dibujo para obtener la atención de su lector, el rey Felipe III. Es importante tener en cuenta que en el terreno de los estudios históricos, el análisis de los mapas y la cartografía no han sido comprendidos del todo. Gran parte de las investigaciones elaboradas en nuestra disciplina se realizan sin recurrir a mapas antiguos o contemporáneos y cuando estas fuentes son tomadas en cuenta únicamente se las utiliza para ubicar determinado punto en el espacio geográfico sin tomar en cuenta a los realizadores de esas representaciones, ni los modelos e implementos utilizó o los aspectos que destacan en cada representación. Todo ello tiene que ver con las visiones tradicionalistas que consideran que los mapas son la “representación geográfica de algún aspecto del mundo real”1. De ahí 1Jhon Brian Harley, La nueva naturaleza de los mapas. Ensayos sobre la historia de la cartografía, comp. Paul Laxton, trad. Leticia García Cortés y Juan Carlos Rodríguez, México, Fondo de Cultura Económica, 2005, p. 60. 3 que los historiadores desdeñen con frecuencia las representaciones geográficas antiguas pues la mayoría de ellas se encuentra muy lejos de ser una representación exacta de la realidad. Por ello es necesario tomar en cuenta que si bien un mapa se puede juzgar en términos de ubicación de coordenadas, representación de accidentes geográficos, precisión en las líneas y fronteras, otro elemento a considerar es que los mapas también son una construcción social del mundo expresada en un medio cartográfico. De acuerdo con Brian Harley, en un mapa se encuentra la combinación de elementos tanto físicos como simbólicos, por ello ambas connotaciones no se contraponen “lo que leemos en un mapa está tan relacionado con el mundo invisible y con la ideología como con los fenómenos vistos y medidos en el paisaje.”2 En ese sentido destaca el papel de la cartografía americana pues es necesario recordar que el proceso de la expansión colonial hispánica, estimuló la necesidad de representar los territorios americanos. Vemos entonces que entre los siglos XVI y XVII tanto europeos como indígenas hicieron uso de la cartografía como una forma de discurso que servía para diversos fines, entre los cuales el político era el más importante. Los mapas geográficos sirvieron como poderosos instrumentos de poder como no había sucedido en otras épocas. De ser espacios vacíos, manifestaciones impersonales de un territorio, abstracciones de la realidad, los mapas se convirtieron en documentos que no solamente representaron un territorio geográfico sino también humano. En algunas ocasiones los mapas fueron representaciones de protesta.3 En particular la cartografía elaborada por indígenas muestra la necesidad de expresar y perpetuar en la memoria cómo se explicaban y representaban el mundo estos artistas. 2Harley, La nueva naturaleza de los mapas… p. 61. 3 Cecilia Cuesta Vélez. “La cartografía y los mapas como documento social en la colonia” en Procesos Históricos. No.7, 2005, p. 11. 4 Para alcanzar este propósito es necesario conocer al autor que elaboró el Mapamundi, así como el horizonte social y político en que vivió y finalmente el contexto de la escritura indígena en el Perú. En el primer capítulo de esta investigación que lleva por título “El cronista indígena” se verán algunos de los rasgos más importantes de la vida del autor y se advertirá que tenía un amplio conocimiento de la cultura europea, mismo que utilizó a su favor para alcanzar los fines que proyectó en su obra. De manera que el objetivo de este capítulo será Identificar el contexto histórico en el que vivió Guamán Poma para explicar las causas que lo llevaron a realizar su obra y mostrar algunos ejemplos de literatura indígena contemporánea a Guamán Poma para entender los puntos de convergencia y discrepancia entre ellas. Luego de indagar sobre la vida de Guamán Poma es pertinente examinar su obra pues en ella se encuentra el dibujo del Mapamundi. Se debe tener en cuenta que este esbozo del mundo no está aislado y que forma parte de un extenso corpus al que el autor llamó El primer nueva corónica y buen gobierno. Es por ello que el segundo capítulo de la presente investigación titulado “Escritura indígena. El primer nueva corónica y bien gobierno” ofrecerá un panorama general sobre la historia del manuscrito y su descubrimiento, pasando por las ediciones que se le han hecho y los estudios que a partir del mismo se han realizado; así como el contenido de la obra para determinar qué motivaciones lo llevaron a elaborar una crónica de tal magnitud y qué fines pretendía alcanzar con su realización y distribución. Finalmente la investigación aterrizará en el último capítulo titulado “El Mapamundi de Guamán Poma. Utopía e historia andina” donde los objetivos son identificar los elementos que componen el Mapamundi y determinar cuáles son de tradición europea y cuáles de tradición andina, así como demostrar que esta representación cartográfica concentra la idea de reforma y buen gobierno concebida por el autor. El capítulo hará hincapié en la importancia de los dibujos, el contenido, la estructura y el significado de los mismos y algunos patrones de representación hallados en ellos. En cuanto al Mapamundi se analizarán los elementos físicos y simbólicos que lo componen y se interpretará la composición en su conjunto. 5 Las preguntas que dirigen esta investigación tienen que ver con la composición cartográfica del autor ya que al ver por primera vez el dibujo me cuestioné ¿qué está representado en el Mapamundi de Guamán Poma?, ¿cómo lo representó?, ¿qué elementos de su tradición indígena figuran en el dibujo y cuáles son de impronta hispánica? Y finalmente ¿con qué intención realizó esa representación del mundo? Lo anterior me lleva a proponer que el Mapamundi dibujado por Guamán Poma recrea el pasado de la sociedad incaica y crea a partir de él, un modelo que sería útil para el porvenir y en el que su familia resultaría beneficiada al posicionarse en la escala social y política del virreinato. Este dibujo representa la idealización del mundo incaico sintetizando las tradiciones iconográficas andinasy europeas. En lo que respecta a las fuentes de consulta empleadas en esta investigación, fueron divididas en dos ejes temáticos. El primero tiene que ver con las publicaciones sobre Guamán Poma y su obra; en ese rubro destaco a cuatro investigadores cuyas obras han sido indispensables en este estudio. Rolena Adorno, quien es reconocida como autoridad en las investigaciones sobre Guamán Poma, ha publicado desde el terreno de la crítica literaria, una serie de artículos, capítulos en libros colectivos y obras de su autoría. Esta investigadora ha destacado la vertiente occidental del autor, sus posibles lecturas castellanas y la manera en que empleó el recurso escrito. Sus publicaciones han sido muy vastas y han tenido gran difusión tanto en el público de habla hispana como en el de habla inglesa. Por otra parte Mercedes López-Baralt se ha aproximado a la Nueva corónica desde el punto de vista de la literatura y especialmente desde la semiótica cultural. Finalmente los trabajos de Juan Ossio y Nathan Wachtel también han aportado al estudio de Guamán Poma desde la perspectiva histórica y antropológica, ambos autores han llegado a conclusiones similares afirmando que la obra en su conjunto muestra una perspectiva indígena de la historia. En el otro eje temático de las fuentes de consulta reúno algunos estudios teóricos que me permitieron aproximarme al Mapamundi como representación simbólica del pensamiento de Guamán Poma. En primer lugar me refiero a Brian Harley quien en el año de 1980 comenzó a publicar en algunos ensayos su pensamiento respecto 6 a lo que entendía como filosofía de la historia de los mapas. Estos ensayos fueron recopilados por Paul Laxton en una obra póstuma publicada en inglés en 20014 bajo el título de La nueva naturaleza de los mapas. Ensayos sobre la historia de la cartografía.5 Harley proponía que para obtener un mejor resultado en el estudio de los mapas era necesario entender el contexto del cartógrafo y del mapa pues se hacía evidente estudiarlo en el orden político y social en que fue realizado. Siguiendo el camino que Harley empezó a trazar a partir de la década de 1980 varios geógrafos e historiadores de la cartografía de habla inglesa llegaron a conclusiones similares. En la revista academica Imago Mundi. The international Journal for the History of Cartography −creada en 1935 para tratar asuntos de la historia de la cartografía así como diversos aspectos que tienen que ver con el estudio de mapas antiguos− autores como Matthew Edney6 y Christian Jacob7 destacaron la importancia de un nuevo tratamiento en los estudios cartográficos. Por último queda advertir al lector sobre la manera en que se citará el paginado de la Nueva corónica en esta investigación. Para las referencias a la obra me basaréen 4 La edición en español la realizó el Fondo de Cultura Económica en el 2005. 5 A Brian Harley (1932-1991) se le ha reconocido como una figura importante en la teoría cartográfica. En la década de 1980 fundó junto con David Woodward un proyecto editorial titulado “The History of Cartography Project” el cual tenía la finalidad de invitar a los especialistas dedicados a la identificación y descripción cartográfica a considerar cómo y por qué se realizaron y utilizaron dichos mapas; sin embargo existe una larga lista de geógrafos e historiadores de la cartografía que de igual manera notaron la necesidad de buscar nuevas perspectivas para el estudio de la cartografía recurriendo a la historia del arte, la ciencia, la antropología, la semiología, y la historia cultural. 6 En su artículo titulado “Theory and the History of Cartography”, Edney señala que es necesario desnaturalizar el mapa, es decir dejar de creer que la naturaleza del mapa es evidente por sí misma y que no necesita ninguna teoría que lo pruebe. De ahí su planteamiento sobre la intención de los estudios teóricos de la cartografía “is to break through the sheEll of objectivity with which our culture has surrounded the map in order to expose and then to study the map for what it is: a human practice”. Siguiendo a Harley, Edney propone que la nueva historia de la cartografía es una historia crítica de la humanidad abordada desde una perspectiva espacial. Matthew Edney “Theory and the History of Cartography” en Imago Mundi. The International Journal for the History of Cartography, Londres, No. 48, 1996. p. 188. 7 En el artículo “Toward a Cultural History of Cartography” Jacob menciona que es posible considerar los mapas como un artefacto visual y estudiarlos desde puntos de vista gráficos, estéticos y estructurales y encontrar en ellos una arquitectura compleja de signos. Sin embargo la Nueva Historia de la Cartografía debe ocuparse por investigar “key points as the social and professional status of map makers, their links to institutions and to the power structures of theirs states, and their envolvement in particular markets”. Según Jacob uno de los propósitos de la cartografía “is to provide its users whit a view or a model of geographical, cosmographical, metaphorical, conceptual, physical or metaphysical space”. Christian Jacob. “Toward a Cultural History of Cartography” en Imago Mundi. The International Journal for the History of Cartography, Londres, No.48, 1996. p.192. 7 el patrón propuesto en la edición de Siglo XXI, de manera que se advertirán dos sistemas de numeración: el primero corresponde a la página del original y el segundo, entre corchetes, señalará la paginación corregida por los editores para una lectura más precisa. 8 Mapa de localización geográfica de los sitios transitados y descritos por Guamán Poma. Víctor Velezmoro. “Principales ciudades de la entonces Audiencia de Lima”. En Ciudades y villas en la obra de Guamán Poma . 9 CAPÍTULO 1. FELIPE GUAMÁN POMA DE AYALA. PRÍNCIPE Y CRONISTA INDÍGENA En el presente capítulo se analizarán los datos de la vida del autor para entender el mundo en el que vivió y qué lo motivó a pensar que escribir una obra y dirigirla al rey era la única arma con que podía adentrarse en la dinámica colonial y obtener un papel como el que sus antepasados habían tenido en tiempos preicaicos e incaicos. El capítulo se dividirá en tres apartados. El primero de ellos recogerá los rasgos biográficos del autor para así reconstruir los momentos significativos y determinantes en su vida. Esto nos llevará al segundo apartado el cual indagará aspectos del contexto político y social del autor que caracterizaron sus ideas y las moldearon. El último apartado explicará de manera breve el contenido y carácter de algunos textos de tradición indígena contemporáneos a la Nueva corónica de Guamán Poma. 1.1 Rasgos biográficos del autor Hasta hace poco tiempo las referencias sobre la vida de Guamán Poma eran escasas y se hallaban en el contenido de su obra, los datos proporcionados por el autor eran precarios y un tanto contradictorios. La situación cambió cuando se encontraron otros documentos que han permitido vislumbrar a Guamán Poma como un personaje de carne y hueso que se desplazaba en el área de Huamanga, asistiendo con frecuencia a Lima para defender sus tierras y otras causas indígenas, así mismo se sabe que trabajaba como intérprete o "lengua" en las composiciones de tierras y que era una persona de estatus porque firmaba siempre como don Felipe Guamán Poma de Ayala. A estos documentos regresaremos más tarde, ya que en primera instancia se comentarán los aspectos biográficos presentados de manera explícita e implícita por el autor a lo largo de su obra. 10 Por principio de cuentas los datos de lugar y fecha de su nacimiento son desconocidos; en varios pasajes (pregunta el rey y del viaje del autor a Lima1 ), el autor dice ser un viejo que para 1614 tiene ochenta años por lo que el año de su nacimientoprobablemente se fijara en 1534 o 1535 ya que en la carta que envió al rey en 1615 dice tener la misma edad. De haber sido así el lugar de su nacimiento fue Huánuco, "lugar donde sus padres vivieron hasta 1539 o 1542"2, sin embargo al final de su obra Guamán Poma dice ser de San Cristóbal de Susuntunto.3 Algunos biógrafos de Guamán Poma como Raúl Porras Barrenechea y Abraham Padilla Bendezú4 insisten en la posibilidad de que el cronista haya nacido en la década de 1550 y que su lugar de nacimiento fue efectivamente San Cristóbal de Susuntunto en la provincia de Lucanas pues esta región tiene gran importancia dentro de la obra. Guamán Poma afirma ser indígena de ascendencia noble pues su madre, Juana Curi Ocllo, era la hija menor del Inca Tupac Yupanqui. En este punto, Mercedes López-Baralt nota una evidente exageración ya que "de ser hermana del Inca andaría cerca de los 60 años al casarse con el padre de Guamán Poma."5 A este respecto, Elvira Tundidor de Carrera apunta que es más probable que Juana Curi Ocllo formara parte de un grupo de parentesco (denominados panaca) que tuviera como ancestro común a Tupac Yupanqui.6 El padre del cronista, Martín Guamán Mallque de Ayala, es quizá más importante dentro de la obra tanto a nivel biográfico como a nivel discursivo. Dice que fue de la dinastía de los Yarovilcas de Huánuco, importante linaje anterior al incario que logró 1 Felipe Guamán Poma de Ayala, El primer nueva corónica y buen gobierno, 4ª ed, México, Siglo XXI editores, 2006, pp. 962 [976], 1094 [1104], 1096 [1106]. 2 Mercedes López-Baralt, Ícono y conquista: Guamán Poma de Ayala. Madrid, Hiperión, 1988. p. 68. 3 “Príncipe, autor de las Yndias del rreyno del Pirú de la ciudad y medio de San Cristóbal de Suntunto, Nueua Castilla, de la prouincia de los Andamarcas, Soras, Lucanas de la corona rreal”. Guamán Poma de Ayala, Op. cit. s/p. 4 Cuyas respectivas obras son El cronista indio Felipe Guamán Poma de Ayala. Lima, Lumen, 1948., y Huamán Poma, el indio cronista dibujante. México, Fondo de Cultura Económica, 1979. 5 López-Baralt. Op. cit. p. 69. 6Elvira, Tundidor de Carrera, "Guamán Poma, cronista indio, autor de la primera tipología morfológica americana" en Revista de antropología americana. Madrid, 1972, Vol. 7, No. 2. p. 163. 11 -según nuestro autor- unificar y dominar las cuatro partes del reino (Chinchaysuyo, Andesuyo, Collasuyo y Condesuyo) y que al ser conquistada por Tupac Yupanqui ocupó un puesto importante bajo la dominación de los incas, de esta manera Guamán Poma asegura que su padre fue la segunda persona del Inca: ques préncipe, y señor de la prouincia de los Lucanas, Andamarcas y Circamarca y Soras y de la ciudad de Guamanga y de su juridición de Sancta Catalina de Chupas, príncipe de los Chinchay Suyos y segunda persona del Ynga deste rreyno del Pirú.7 Además de pertenecer a una importante familia, Guamán Poma muestra a su padre como un buen aliado y colaboracionista de las huestes españolas en las primeras décadas de conquista. Según nuestro autor, Martín Mallque de Ayala formó parte de los embajadores que, por parte del Inca, recibieron a Pizarro y Almagro, tomó parte en la prisión de Túpac Amaru en Vilcabamba realizada por el capitán Martín García de Loyola, asimismo fue fundador -junto con Hernando Cacya Marca- de la ciudad de Huamanga.8 Es importante resaltar la manera en que Guamán Poma construye algunos pasajes de la vida de su padre y cómo en ocasiones, éstos caen en contradicción. Tal es el caso de un fragmento al inicio de la obra donde menciona que la embajada de Huáscar −personaje que habría sido designado como sucesor del Inca Huayna Cápac− recibe a los conquistadores y Martín Mallque aparece como su representante […] Y ací, como señor, fue al enbaxador del enperador don Carlos, al dicho don Francisco Pizarro y a don Diego de Almagro, y a bezar las manos y a darze pas y amistad con su Magestad y al seruicio y lo rrecibió en el puerto de Tunbes, en la ciudad de Caxamarca. Don Martín de Ayala, segunda persona, fue por parte de Guascar Ynga, rrey lexítimo, se fue en su lugar y tiniente birrey deste rreyno y pareció ante los cristianos.9 7Poma de Ayala, Op. cit., 5 [5]. 8Guamán Poma menciona que por esta fundación su padre recibió tierras en Santa Catalina de Chupas, mismas por las que el autor se vio envuelto en un litigio que el autor reclamará más adelante. Ibíd., 1050 [1058]. 9Ibíd., 16 [16]. 12 No obstante, en el capítulo que versa sobre la conquista española el autor menciona que fue embajador de Atahualpa, hermano de Huáscar y contendiente al gobierno del Tahuantinsuyo, y los españoles don Francisco Pizarro y don Diego Almagro y don Martín de Ayala se hincaron de rrodillas y se abrasaron y se dieron pas, amistad con el enperador. Y le honrró y comió en su mesa y hablaron y conuersaron y le dio presentes a los cristianos. Acimismo le dio al señor don Mar[tín] de Ayala que fue primer enbaxador que de Atagualpa Ynga en el puerto de Tunbes, adonde saltó primero.10 Otro acontecimiento que Guamán Poma menciona y que está en entredicho es cuando su padre recibe el apellido de Ayala, hecho que nuestro autor sitúa en la batalla de Huarina, cuando Martín Mallque salvó la vida del capitán Luis Avalos de Ayala […] Y estando en esto, fue serbiendo a un cauallero, capitán generar, muy gran seruidor de su Magestad, llamado capitán Luys de Ávalos de Ayala, estando en la batalla, rreniendo en el Collao, en Uarina Pampa, peleando en el seruicio de su Magestad, en el encuentro cayó del cauallo de una lansada al suelo […] y le salbó de la muerte y le mató al dicho traydor Martín de Olmos contrario, le xarretó y le mató el dicho don Martín de Ayala. Y ancí se salbó el dicho Luys de Áualos de Ayala y se leuantó y dio bozes deziendo, “¡O señor deste rreyno, don Martín de Ayala, seruidor de Dios y de nuestro muy alto enperador don Carlos de la gloriosa memoria! Aunque a yndio, tendrá cuydado de dalle su encomienda su Magestad. Y ací, por este dicho seruicio, ganó onrra y mérito como señor y cauallero del rreyno y se llamó Ayala, segunda del enperador en este rreyno, don Martín Ayala.11 Sin embargo, Porras Barrenechea asegura que este acontecimiento fue alterado por Guamán Poma pues El capitán Avalos de Ayala no fue herido en la Huarina (1547). Llegó un año más tarde de este suceso y siete años después cayó herido en Villacuri (1554) o en Chuquinga según otros documentos. Es posible que en este trance le auxiliara Huaman Mallqui, pues los indios Lucanas intervinieron en esta campaña.12 10Ibíd., 376 [378]. 11Ibíd., 16 [16]. 12Raúl, Porras Barrenechea, El cronista indio Felipe Huamán Poma de Ayala. Lima, Lumen, 1948. p. 35. 13 Elvira Tundidor propone que, además de recibir el apellido Ayala a manera de recompensa, Avalos de Ayala le cedió a su amancebada (la india Juana Curi) con quien para ese entonces ya tenía un hijo, el mestizo Martín de Ayala. Como matrimonio, Martín Mallque de Ayala y Juana Curi Ocllo tuvieron cuatro hijos: Felipe Guamán Poma de Ayala, Melchor de Ayala, Diego de Ayala y Francisco de Ayala. Los primeros años de la familia transcurrieron en San Cristóbal de Suntunto, luego se trasladaron a Cuzco, donde el padre de Guamán Poma obtuvo un puesto en el Hospital de los Naturales. Más tarde, se dirigieron a Huayallapampa sitio en el cual residieron hasta 1587, para posteriormente dirigirse a Huamanga en cuyo hospital Martín de Ayala era capellán. Mención especial merece el medio hermano de Guamán Poma quien, además de ser "muy gran sancto hombre, el qual no quizo dotrina nenguna, cino toda su uida que auía de estar con los pobres del hospital de la ciudad de Guamanga"13,instruyó a toda la familia en la doctrina cristiana e inició particularmente a Guamán Poma en el estudio del castellano y la historia sagrada y antigua de Europa. Estos saberes insertaron a Guamán Poma dentro de la sociedad colonial como indio ladino14 para ejercer el oficio de intérprete, ayudante de visitador y escribano. El trabajo que Guamán Poma refiere más a menudo en su obra, es el que realizó como intérprete del visitador eclesiástico Cristóbal de Albornoz a quién acompañó por todo el Perú en la extirpación de idolatrías de lo escrito de los pontífeses lo sé porque fue serbiendo a Cristóbal de Albornós, uecitador general de la santa madre yglecia, que consumió todas las uacas ýdolos y hecheserías del rreyno.15 13 Poma de Ayala, Op. cit., 18 [18]. 14 Este término se empleó “para designar a los nativos ibéricos que tenían un conocimiento suficiente de la lengua y cultura latina. En los andes se define al indio que, habiendo adquirido un conocimiento suficiente de la lengua española, lo emplearon con el objeto de ayudar en las negociaciones entre la administración española y los andinos”. Ortega Sánchez, Delfín. Sociedad política y religión en el virreinato del Perú, p. 19. Según Rolena Adorno, las personas que se identificaron con dicho término “no representaban ni a un solo étnico ni a una clase social. Tanto mestizos como andinos se identificaban como ladinos”. Adorno, Rolena. “El indio ladino en el Perú colonial” en León-Portilla, Miguel, Gutiérrez Estévez, Manuel, et.al. De palabra y obra en el Nuevo Mundo. Vol. 1. Imágenes interétnicas, Madrid, Siglo XXI de España, 1992. p. 369. 15 Poma de Ayala, Ibíd., 280 [282]. 14 Por otra parte, nuestro autor se muestra como auxiliar de españoles en otros ámbitos […] y e seruido a los señores bisorreys, oydores, prisedentes y alcaldes de corte y a los muy yllustres yn Cristos señoría obispos y a los yllustres comisarios. Y e tratado a los padres, corregidores, comenderos, becitadores, ciruiendo de lengua y conuersando, preguntando a los españoles pobres y a yndios pobres y a negros pobres.16 A través de una carta ficticia de 1587 escrita por el padre del autor, Guamán Poma dice ser teniente de corregidor y cacique en la provincia de Lucanas. De acuerdo a lo que relata en su obra, su posición debió ser buena -pese a las limitantes que como indio pudo haber tenido dentro del régimen colonial- pues cuando joven "solía andar todo de seda y de cunbes [tejido fino] y se rregalaua como señor y príncipe, nieto del dézimo rrey"17 además asegura haber sido dueño de tierras en el valle de Santa Catalina de Chupas, mismas que tenían valor de veinte mil pesos. Nuestro autor se reconocía como persona de estatus pues antes de firmar con su nombre colocaba el título de don, lo que indica que era reconocido como indio principal en la zona. Actualmente esta información puede ser corroborada gracias a fuentes documentales halladas en el Archivo Departamental de Ayacucho que dan luces sobre la participación de Guamán Poma en el entorno burocrático y el papel que desempeñó dentro de la sociedad colonial andina. Estos documentos muestran que la posición de indio principal que tanto reitera pudo ser auténtica. Los documentos que respaldan esta información son: 1.- Un amparo en posesión a los hijos de don Pedro Suyro, cacique principal en la región de Huamanga, firmado por el visitador Amador de Valdez Peña y ratificado por "don Phelipe Guaman Poma" en 1595. 2.- Una composición de tierras de la zona de Huamanga realizada tras un litigio existente entre la dueña de las propiedades, la viuda Cathalina Patta y dos indios. En este documento Guamán Poma figura como auxiliar del visitador 16 Ibíd., 701 [715]. 17 Ibíd., 1094 [1104]. 15 Solano de Figueroa, describiendo las tierras, fijando los límites de ellas y dando la razón en su declaración a la dueña de las propiedades, en dicho documento se le da el título de "don" en varias ocasiones.18 3.- Un documento hallado en el Archivo Regional de Ayacucho con fecha de 1594 que ofrece datos referentes a la posesión de las tierras en Chaira por indios Chachapoyas desde 1587 y el amparo que les dio el juez en 1594. Guamán Poma fue el intérprete de esa visita y quizá pudo valerse de ello para obtener un auto de posesión de tierras en el valle de Rantavilca y auto titularse como cacique de la región, esto le causó problemas con los indios de la región y en 1600 los resultados de este litigio fueron desfavorables para nuestro autor.19 Este último documento es importante pues el pleito entre Felipe Guamán Poma y Diego Jaulis, cacique en representación de los indios Chachapoyas, culmina con el fallo en contra del cronista y una sentencia de destierro en diciembre de 1600 en donde se acusa a nuestro autor de ser un indio humilde que por embuste se intitula casique y sin ser casique ni principal sugeta indios a que le respeten por tal y las intensiones maliciosas y embustes conque siempre ha procedido, ha pretendido oficios y ser indio de mala inclinacion […] Dijo que por este auto condenava y condeno a el dicho Lázaro indio en doscientos azotes que se le den publicamente haciendo saber los delitos al pregon para que a él sea castigo y a otro ejemplo y más le condena en dos años de destierro a seis leguas a la redonda.20 Otras actividades subversivas que quizá le llevaron al destierro son las constantes denuncias de las injusticias y la preparación de discípulos que "an salido cristianos y ladinos prencipales, amigo de defender a los pobres".21 18 Véase el expediente con nota introductoria y transcripción de Nelson Pereyra Chávez publicado en Histórica, Lima, Vol. XXI, No. 2, 1997, bajo el título de "Un documento sobre Guamán Poma existente en el Archivo Departamental de Ayacucho". 19 Este documento, con introducción y transcripción de Juan Clímaco Zorrilla Aramburú, se encuentra en línea publicado por la revista Runa Yachachiy en 2007 bajo el título de "Antecedentes y conclusión de un litigio entre don Felipe Guamán Poma y los caciques de los chachapoyas, quinitos y cayambes en Huamanga".http://www.alberdi.de/Doc-proceso-Chacha-G.Poma,%2004.06.07.pdf Fecha de consulta: 14 agosto 2016. 20Juan Clímaco Zorrilla Aramburú, Op. cit. p. 8. 21Poma de Ayala, Op. cit., 495 [499]. 16 Su destierro fue decisivo en la elaboración de su obra pues Guamán Poma afirma que a partir de ese momento comenzó con la visita a los pobres para conocer su situación y llevar sus denuncias ante el monarca español. El autor cuenta que pasó cerca de treinta años recorriendo todas las regiones del Perú, tuvo que dejar todo lo que tenía para conocer la penosa situación en la que vivían muchos hermanos de raza, como los llama constantemente. Sin embargo este tiempo no debe tomarse de manera literal pues probablemente emprendió el recorrido de dichas regiones cuando era ayudante de visitador y quizá desde aquellas visitas comenzó a tener en mente un proyecto tan grande como la Nueva corónica. Lo cierto es que la extensión de territorio que conoció es bastante más limitada de lo que narra. Se sabe que además de Cuzco y un par de visitas a Lima, la única región que conoció ampliamente fue Huamanga en el sector próximo a la provincia de Lucanas. Pasado el tiempo de su destierro, Guamán Poma regresó a San Cristóbal de Suntunto en 1612 donde tenía casas y haciendas, pero al volver halló en sus propiedades a otros indios que ya vivían allí. Nuestro autor reclamó sus tierras al corregidor Flores, quien estando a punto de hacer el fallo a su favor, fue acusado por Poma de tener una actitud poco honorable hacia los indios. Esta actitud de rebeldía lo llevó a una nueva expulsión de la provincia.Partió entonces de Huamanga a Lima dispuesto a llevar al virrey el memorial de agravios. Para 1614 se encontraba en la Ciudad de los Reyes, lugar donde terminó su crónica. Lo último que se conoce del cronista es una carta con fecha de 14 de febrero de 1615 dirigida al rey español en donde anuncia el envío de su obra. Sin embargo Rolena Adorno ha propuesto que este no es el último movimiento del autor pues existen varios folios sin coser del capítulo "Camina el autor". Adorno sugiere que fueron redactados y añadidos tardíamente pues en ellos el autor narra su último viaje a Lima. 17 1.2 Contexto de la vida y obra de Felipe Guamán Poma Si admitimos que Guamán Poma nació en el año de 1550 podemos afirmar que la época en que vivió nuestro cronista fue complicada para el Perú pero sobre todo para la región en la que se desenvolvió. Muchos acontecimientos importantes en la región de Huamanga y sus alrededores quedan señalados en el contenido de su obra, en muchos de ellos Guamán Poma fue testigo y hasta partícipe. Las enfermedades, pestes y epidemias se hicieron presentes en el Perú antes de la dominación española, incluso se cree que la muerte del Inca Huayna Cápac acaecida entre 1529 y 1530 “se debió a la primera de las pestes que se originaron a partir del contacto”.22 Luego de su descenso inició una profunda crisis pues no existía un sucesor designado legítimamente, los problemas incrementaron con el enfrentamiento de los dos hermanos y contendientes al poder Huáscar y Atahualpa. La llegada de Francisco Pizarro y su hueste a territorio andino se dio en medio de esta pugna. Más tarde la conquista española también se vería marcada por una fuerte guerra interna cuyo detonante era la ambición territorial y el poder político. El enfrentamiento entre los conquistadores Francisco Pizarro y Diego de Almagro conocido como Guerras Civiles las cuales duraron poco más de diez años. Este periodo es ampliamente descrito por nuestro autor pues rememora el pasaje en que su padre participó en la batalla contra Francisco Hernández Girón, misma que marcaría el fin de la conquista Don Martín Guaman Malque de Ayala, capac apo, segunda persona del Ynga y su bizorrey destos rreynos, el excelentícimo señor, duque deste rreyno, y don León Apo Uasco, Hanan Changa, y don Juan Guaman Uachaca, Lurin Changa del pueblo de Andaguaylas y de su prouincia, dieron la batalla con sus personas en seruicio de su Magestad con Francisco Hernandes Girón, traydor23 Las primeras relaciones entre pueblos autóctonos y europeos comprendían una mezcla de fuerza, negociaciones y alianzas, ambas partes sabían que se 22 Luis, Millones, Historia y poder en los Andes centrales (desde los orígenes al siglo XVII), Madrid, Alianza, 1987, p. 143. 23 Poma de Ayala, Op. cit., p. 433 [435]. 18 necesitaban mutuamente. En las comunidades indígenas de Huamanga las alianzas con los europeos habían sido relativamente buenas pues “sus adaptaciones las liberaban de vínculos onerosos con los incas, les aportaban aliados en sus combates con grupos autóctonos rivales y les brindaban la oportunidad de acumular riqueza en forma de metales preciosos”.24 Varias situaciones desgastaron a la población indígena de los Andes; guerras, emigraciones y las epidemias de viruela, pestes y gripe azotaron distintas regiones en 1546, 1558 y 1559. Sin embargo, esas condiciones no mermaron la productividad en la zona de Huamanga que gozaba de un crecimiento demográfico notorio. No obstante, la pérdida de libertades, humillaciones, la dependencia de los europeos para resolver sus propios conflictos y la excesiva demanda de mano de obra que iba más lejos de lo que las comunidades podían ofrecer, provocaron tensiones que se vieron agravadas cuando en la década de 1560 se descubrieron minas de oro y plata en Atunsulla y de mercurio en Huancavelica (1564). Estos descubrimientos estimularon los sueños españoles sobre una economía regional próspera en la cual las minas provocarían el crecimiento del comercio, la agricultura, la construcción y demás actividades productivas. El único impedimento para la realización de este proyecto era, de nueva cuenta, la mano de obra. Para 1562 este conflicto valió la investigación de un notable jurista llamado Juan Polo de Ondegardo, quien reformó las prácticas laborales y dictaminó que las comunidades debían enviar a una fuerza rotatoria de 700 trabajadores para laborar en las minas antes mencionadas. Pero sus reformas poco cambiaron la escasez de mano de obra pues era complicado enviar a indios de regiones muy lejanas a los centros mineros. Esta situación incrementó las discrepancias entre ambos grupos Las exigencias de mano de obra para las minas en una nueva escala, la vulnerabilidad política de los encomenderos y la probable disposición de los 24Steve J. Stern, Los pueblos indígenas del Perú y el desafío de la conquista española. Huamanga hasta 1640, Madrid, Alianza, 1986, 84p. 19 neoincas a encabezar una revuelta crearon una coyuntura que obligó a replantearse las alianzas postincaicas.25 Los indígenas del área andina central atravesaban un momento de explotación y opresión. Su incorporación al sistema de encomiendas, el pago de tributo y trabajo exhaustivo en las minas y la falta de libertad religiosa significaron una profunda crisis por ello no es gratuito que en el marco de estos acontecimientos surgiera el Taki Onqoy (enfermedad del canto) movimiento que “representó una forma de rechazo a la explotación colonial y una manifestación de arraigo en las tradiciones culturales indígenas en una coyuntura de crisis en esa área andina”.26 Este movimiento mesiánico27, descubierto hacía 1564, proclamaba el resurgimiento del culto a las huacas −dioses andinos que se expresaban en objetos, animales o fenómenos naturales−, el establecimiento del orden antiguo y la derrota del Dios extranjero y los españoles. El mensaje difundido por los predicadores decía a los indios que no creyesen en Dios ni en sus mandamientos, ni adorasen en las cruces, ni imágenes, ni entrasen en las iglesias, ni se confesasen con los clérigos, sino con ellos, y que ayunasen ciertos ayunos en sus formas y gentilidades que tenían de costumbre en tiempo de los incas, ni comiesen sal, ají, ni maíz, ni teniendo cópula con sus mujeres sino solo bebiendo una bebida de chicha destemplada sin fuerza alguna.28 Aunque el movimiento se extendió hacía otras áreas, poco a poco fue perdiendo fuerza por la falta de lealtad de los indios quienes en muchas ocasiones se aliaron y participaron como delatores para sofocar la resistencia. El cura Cristóbal de Albornoz demoró dos o tres años en realizar una inspección a fondo en las 25Stern, Op. cit., p. 92. 26Pedro, Guibovich Pérez, “Cristóbal de Albornoz y el Taki Onqoy” en Histórica, Vol. XV, No. 2, p. 205-236. p. 206. http://revistas.pucp.edu.pe/index.php/historica/article/view/7868 Fecha de consulta: 24 de septiembre del 2017. 27 Para Luis Millones la idea central del mesianismo “es que la divinidad, cumplidos ciertos requisitos por seguidores, enviará un mesías para redimirlos. […] La llegada de este personaje suele estar precedida por un anunciador o profeta que proclama la voluntad de dios de solucionar la crisis mediante su enviado. El pueblo debe organizarse para cumplir o modificar su ritual, de manera que lo haga aceptable a la divinidad”. Luis, Millones, “Del mesianismo andino del siglo XVI a la revolución informática: el Taki Onqoy” en Perspectivas Latinoamericanas, Centro de Estudios Latinoamericanos, Universidad Nazcan, Nagoya, Japón, 2015. p. 118- 135. p. 120. 28Luis, Millones, Las informaciones de Cristóbal de Albornoz: documentospara el estudio del Taki Onqoy. Centro Cultural de Documentación, Cuernavaca. http://revistas.pucp.edu.pe/index.php/historica/article/view/7868 20 provincias afectadas condenando a más de 8 000 indios idólatras. Cuando la victoria española era inminente, incluso los dirigentes de la secta buscaron la protección de europeos para evitar castigos severos. Este acontecimiento está directamente relacionado con nuestro cronista quien como recordaremos colaboró con el jesuita Cristóbal de Albornoz como intérprete de indios. Aun cuando el movimiento y la resistencia fueron sofocados, el peligro estaba latente, el Taki Onqoy fue parte de una crisis generalizada que amenazaba a todo el virreinato peruano, aún existían incursiones militares de neoincas al norte del Perú, conspiraciones y otros movimientos nativistas que inquietaban el orden establecido. En 1564 se sospechaba que el inca Titu Cusi estaba tratando de organizar una rebelión general convocando a los chiriguanos y en particular a los juríes y calchaquíes de Tucumán que ofrecían fiera resistencia a sus conquistadores […]. Además en Jauja se había descubierto y destruido un almacén de armas.29 Por esta razón era necesaria una renovación que condujera a la sociedad andina al bienestar general mediante el establecimiento de normas respetadas y seguidas por todos. Varios fueron los intentos reformistas a partir de ese momento, Juan de Matienzo, un notable jurista, representó muy bien el deseo de establecer fundamentos más seguros para un mejor desarrollo de la sociedad andina. Matienzo proponía la defensa de los indios contra los abusos de los europeos, opinaba que un programa de reasentamiento sería útil para establecer los tributos y las obligaciones laborales de las comunidades que anteriormente se encontraban dispersas. Dentro de su planteamiento es destacada la figura de un corregidor español que vigilaría el seguimiento de las instrucciones a nivel local. Todas estas propuestas estaban proyectadas para alcanzar el fortalecimiento del orden colonial. El virrey interino Lope García de Castro, en el periodo de 1564 a 1569, también realizó aunque con poco éxito, algunas innovaciones. En primera instancia, logró 29 Ana María Lorandi, Ni ley, ni rey, ni hombre virtuoso. Guerra y sociedad en el virreinato del Perú. Siglos XVI y XVII, Barcelona, Gedisa, 2002, p. 125. 21 pactar la paz con Titu Cusi en 1566, intentó asentar indígenas en pueblos y villas e insertar nuevos funcionarios indios. Una innovación importante fue la asignación de corregidores de indios que complementarían la labor de a los corregidores españoles que ya asistían a los asentamientos españoles. No obstante, sus iniciativas seguían siendo insuficientes para un territorio amenazado por la sublevación latente. Finalmente, el virrey Francisco de Toledo pudo concretar los proyectos que se habían planteado anteriormente. En un periodo de gobierno de once años (de 1569 a 1581) puso fin a la rebeldía neoinca ejecutando a Túpac Amaru (sucesor de Titu Cusi) en el año de 1572 en el Cuzco, logró la reducción de los indios asentándolos bajo el control de corregidores y funcionarios, llevó a cabo la instauración de un sistema de tributos fijo y empleó el sistema de rotación de mano de obra −mita30− que había funcionado tan bien en la organización económica incáica, esto con el respaldo de una reglamentación que administraba la economía y la política. Todo esto lo consiguió viajando por las sierras andinas durante cinco años, visitando en compañía de una comitiva, a las comunidades e informándose de las cuestiones que ocasionaban problemas al régimen colonial. Como apunta Stern su obra es “la culminación lógica de una crisis colonial que exigía una reforma”.31 En el área andina las reformas toledanas impulsaron numerosos cambios. Por principio de cuentas las etnias indígenas quedaron reorganizadas en la llamada “república de indios”, una nueva categoría colonial dirigida por un selecto grupo indígena que aportaría mano de obra, mercaderías y servicios. Asociada a esta 30 En tiempos incaicos la mita consistía en la realización de tareas diversas que el Tahuantinsuyu organizaba a manera de que los bienes obtenidos en estos trabajos se redistribuyeran y los excedentes se almacenaran en depósitos. “Las entregas de mano de obra dentro del esquema de la redistribución adquirían muchas y variadas formas […] No se entendía necesariamente como un turno fijo y obligatorio (como ocurrió después con las diversas modalidades de la mita colonial, que tantas resistencias generó)”. Franklin, Pease, Los últimos incas del Cuzco. Madrid, Alianza, 1991. p. 51. Según María Rostworowski “el término mita va más allá de un sistema organizativo del trabajo, conlleva cierto concepto filosófico andino de un eterno retorno” Rostworowski de Diez Canseco, María. Historia del Tahuantinsuyu, 3ª ed., Lima, Instituto de Estudios Peruanos, 2014. p. 260. 31 Stern, Op. cit., p. 129. 22 categoría estaba la “república de españoles” grupo que obtenía mayores beneficios por la explotación indígena. Por la cronología de su vida y sus comentarios y descripciones tan vívidas, sabemos que Guamán Poma presenció el periodo de gobierno del virrey Toledo. En cuanto a las reformas, el autor las calificó como buenas pero lamentó que no hayan resultado beneficiosas para el grueso de la población indígena. Lo que sí le causó gran aberración fue la figura del corregidor pues decía que estos personajes eran los responsables de los abusos cometidos en contra de los indígenas. Ya que el cargo de corregidor no era remunerado, estos debían buscar negocios que pudieran servir a sus intereses económicos. Según Guamán Poma, los corregidores perturbaban la paz y estabilidad dentro de las comunidades por eso su figura no era muy apreciada por nuestro cronista. Aunado a esta nueva categorización de repúblicas, se crearon 23 repartimientos o distritos de encomienda en Huamanga, lo que permitió una mejor contabilización de tributarios y las tasas de tributo que cada repartimiento debía aportar. Otro aspecto importante que del mismo modo tuvo repercusiones en Huamanga fue el asunto de la mano de obra. Como se había mencionado anteriormente, los colonizadores aprovecharon un recurso tradicional existente en tiempos de los incas, el sistema de mita; sin embargo Toledo lo modificó “en una institución colonial de trabajo forzoso, en la que el Estado exigía contingentes de una séptima parte, como máximo, de la población tributaria de un repartimiento”32 de tal manera que los trabajadores se empleaban durante periodos prolongados fuera de sus comunidades hasta que llegaran trabajadores (mitayos) de otros repartimientos a sustituirlos. No obstante, las prolongadas ausencias de los mitayos -quienes además se desplazaban con sus familias a los sitios de trabajo, ya sea para que los ayudaran en labores complejas, los alimentaran o les hicieran compañía- significaban pérdida 32 Stern, Ibíd., p. 136. 23 de fuerza de trabajo en las comunidades que dejaban y ello conducía a la disminución de la economía local. Varias situaciones, que tenían que ver directamente con la mita, ponían en riesgo la producción agrícola en las comunidades; podía ser que los mitayos y sus familias no volvieran nunca a su región de procedencia, podían regresar pero no a tiempo para las cosechas o podían regresar a tiempo pero enfermos, de tal manera que no les era posible cumplir con las actividades requeridas. Sin embargo, muchos indígenas realizaron estrategias para protegerse y mantener una economía autónoma, “pleitearon ante los tribunales coloniales para reducir los tributos y los cupos de lamita y para convertir tributos en especie en tributos en dinero y para combatir las intrusiones europeas sobre tierras fértiles”.33 Sobre este sistema Guamán Poma también realiza una serie de sentencias desaprobatorias y, aunque no responsabiliza al virrey Toledo de su mal manejo, si hace notar cierta preocupación por el poco cuidado de los indios en el empleo de esta forma de trabajo. Las redes y alianzas entre señores locales y corregidores, alimentaban esta estructura social en donde los corregidores (quienes eran jueces, administradores y carceleros de sus respectivas jurisdicciones) sabían que podían recibir regalos y sobornos por parte de los indios quienes ofrecían este tipo de mercedes percibiendo que la acumulación de favores y autoridad llevaba al éxito y a una mejor posición económica. Se trataba entonces de una sociedad “en la que el acceso a la influencia era vital para la riqueza y la empresa, tanto los grandes señores como los tiranuelos organizaban complicadas redes de parentesco que aumentaban su ámbito y estatura políticos”.34 El orden virreinal adquiría gran poder y para 1590 la tierra comenzó a formar parte del patrimonio de la corona española por lo que había jueces que periódicamente 33 Ibíd., p. 149. 34 Ibíd., p. 165. 24 asistían a realizar composiciones de tierras, revisando los títulos de ellas y concediendo las que carecían de dueños o no eran trabajadas por los indios aunque estas tierras eran ambicionadas por su valor comercial o fertilidad. Así mismo, se otorgaban puestos burocráticos que podían respaldar por medio de la sujeción, los tributos y los reclutamientos para la mano de obra. Pero en una sociedad así, no bastaban únicamente las alianzas, no era tan sencillo enmascarar el sabotaje. Por ello la violencia, las amenazas, los sobornos y la dominación eran elementos frecuentes en las relaciones de poder. Los indios seguían resistiendo a las instrucciones de Toledo, no daban el tributo de manera automática, entonces el encomendero de la región debía enviar a un asesor legal que impusiera el pago de éste. La mita fue otro sistema que también provocó enfrentamientos y violencia en la región pues era complicado para los corregidores convencer a los indios. Cuando la oferta de favores y las amenazas no eran suficientes, se tomaban medidas drásticas como el encarcelamiento o el secuestro para lograr tal fin. Era tanto el resentimiento de los indios que llegaron a planear un ataque a la sociedad española por esa imposición tan onerosa. “En 1589 un grupo de mitayos angaraes conspiró para destruir Huancavelica. Cuando llegaran para sustituir a los mitayos salientes proyectaban incendiar la ciudad y matar a todos los españoles”.35 No obstante, la conspiración fue descubierta y rápidamente se montaron patrullas que sofocarían cualquier intento de rebelión. Como se ha visto la relación entre españoles e indios era tensa por lo que los colonos tenían que pensar de mejor manera la imposición de nuevas políticas ya que un mal manejo de estas podía provocar conflictos mayores. De la misma manera, los indios se prepararon jurídicamente para protegerse de los abusos que el sistema de mita traía consigo. Sin embargo esta protección que era en contra de los españoles por medio de sus propias instituciones, terminó por crear cierta dependencia pues ya no había lugar para pelear fuera de la legalidad entonces la 35 Ibíd., p. 172. 25 lucha “acabó por debilitar su capacidad para montar un enfrentamiento radical contra la estructura colonial, con lo cual contribuyó a la dominación de la élite colonial”.36 Las primeras acciones jurídicas llevadas a cabo por los indios fueron en lo tocante al sistema de mita y el tributo pues los indios se valieron de artificios para mostrar censos de población alterados que les ayudaron a reducir la población tributaria oficial y así mismo, el número de mitayos. Hay que tomar en cuenta que dentro del esquema social y cultural andino, estas acciones fueron muy importantes pues implicaron la asimilación de un sistema que les era completamente ajeno (la escritura) y lo emplearon para los fines que les convenían. Estas apelaciones representaron entonces el éxito de los indígenas, sin embargo muestran también la dependencia de la legalidad española y de los favores de los españoles para ganar causas que muchas veces solo eran internas. Este sometimiento a las instituciones los sujetó con mayor firmeza a la autoridad hispánica. El siglo XVII comenzaba y las consecuencias de estas acciones ya no tenían vuelta atrás pues los indígenas estaban más preocupados por resistir a la cooperación con los colonizadores que por organizar un ataque enfocado a destituir la organización explotadora como tal. Al respecto Steve Stern dice que uno de los secretos para que un sistema de explotación tenga éxito es la “capacidad para hacer que los explotados “necesiten” a sus explotadores”37 y en el caso de las sociedades andinas esto resultó cierto. Estas herramientas llevaron a un cambio profundo en las comunidades pues muchos indígenas pudieron imitar rápidamente las estrategias hispánicas y acomodarlas a sus intereses para reforzar los vínculos con la sociedad española a la que muchos de ellos querían pertenecer. Lo anterior también llevó a la división 36 Ibíd., p. 187. 37Ibíd., p. 219. 26 de los grupos étnicos pues mientras la mayoría vivía en la pobreza, la minoría se veía favorecida por las relaciones de poder. Las diferencias eran notorias pues los indios con más recursos vestían a la española, iban a caballo, poseían armas europeas, ostentaban el título de don o doña e incluso podían leer y escribir español. Para ellos el éxito se veía reflejado en la obtención de propiedad privada y las relaciones sociales que los diferenciaban de la mayoría empobrecida, pero por mucho que ascendieran no pertenecían a la sociedad hispánica. En muchas ocasiones los indios menos afortunados se encontraban orgullosos de los ricos y aprovechaban su situación para obtener protección y beneficios económicos pues tener a un miembro rico dentro de la comunidad significaba incrementar la economía doméstica, además el conocimiento del sistema jurídico era de gran utilidad para cualquier conflicto, en fin, un indio “ladino” era de gran utilidad para la comunidad. En cuanto a los menos afortunados se puede apuntar que tenían la opción de huir en busca de un mejor nivel de vida. En este trabajo nos importa destacar la figura de los indios que trataron de incursionar en la sociedad hispánica pues nuestro autor, Felipe Guamán Poma de Ayala pertenecía a ese grupo que vestía a la española y trataba de sacar algún provecho de la relación que tenía con la sociedad hispánica. Guamán Poma tiene privilegios y reclama los derechos que como indio principal le corresponden. Nuestro autor quiere demostrar que no es un indio del común y en su obra presenta todo un alegato en el que reclama lo que le pertenece haciendo una crítica del gobierno establecido, la obra está cargada de reclamos hacia las autoridades e intenta mostrar los abusos que los funcionarios cometen con los menos favorecidos. Desde ese punto de vista Guamán Poma representa de la mejor manera al indio ladino en la sociedad colonial. 27 1.3 La escritura indígena en el Perú colonial Para entender de mejor manera el universo en el que Guamán Poma escribió su crónica es necesario tomar en cuenta la producción de textos contemporáneos realizados por indígenas en el Perú. En este apartado pondremos especial atención en tres textos de impronta indígena: La Relación de como los españoles entraron en el Perú y el suceso que tuvoManco Inga en el tiempo que entre ellos vivió de Titu Cusi Yupanqui; la Relación de antigüedades de este reino del Perú de Juan de Santacruz Pachacuti Yamqui Salcamaygua y Los Comentarios reales de los Incas e Historia general del Perú del Inca Garcilaso de la Vega. Estas obras son importantes pues en ellas los autores expresaron su concepción de la conquista y colonización española y las implicaciones que ambos procesos habían significado. Su valor radica también en la transición de la tradición oral a la tradición escrita, un proceso significativo en las culturas americanas, mismo que no se pudo dar en las décadas iniciales del contacto. Estas tres obras “ya no son fruto del desconcierto, del deslumbramiento y la sorpresa, sino más bien escritos tardíos del siglo XVII que transmiten las angustias e ilusiones de las poblaciones indígenas bajo el dominio colonial”.38 Esta generación de escritores vio morir con Túpac Amaru el último foco de resistencia indígena, el último vestigio del imperio incaico, por ello sus obras están llenas de nostalgia y añoranza del pasado. A partir de esos momentos el pensamiento indígena tomó un nuevo rumbo, uno en el que la defensa de su mundo y sus ideales podía llevarse a cabo mediante la escritura Los indígenas defendieron su causa precisamente en función de la imagen que tenían del mundo de los conquistadores y de los valores pregonados por ellos. En efecto, defender una causa es encontrar los argumentos que la otra parte es capaz 38 Manuel, Burga, Nacimiento de una utopía. Muerte y resurrección de los incas. 2ª ed. Lima, Universidad Nacional Mayor de San Marcos/ Universidad de Guadalajara, 2005. p. 265. 28 de entender y apoyarse en los valores morales que ésta reconoce con el fin de obligarla a cambiar de actitud.39 En los textos de estos indígenas se puede advertir el nacimiento de un nuevo pensamiento en donde entrar en la dinámica del sistema español suponía una opción para la supervivencia. Un denominador común en los autores que estamos a punto de conocer es la situación de despojo en que los colocó el nuevo régimen. Guamán Poma de Ayala, Juan de Santacruz Pachacútic y hasta el mestizo Garcilaso de la Vega “cada uno, en su órbita, fue arrojado de la posición a la que había podido pretender por su nacimiento”.40 Estos indios sufrieron la pérdida de rango social, en ello radica la importancia de sus obras como armas combativas para reivindicación de la historia indígena y reclamo del modo de vida de la sociedad colonial, dicha crítica es más notoria en la obra de Guamán Poma. Cada autor escribió bajo diversas circunstancias, sin embargo hay varios puntos en los que coinciden. Todos se proclamaban como descendientes de importantes linajes ya sea incaicos (como Titu Cusi y Garcilaso de la Vega) o preincaicos (como Santacruz Pachacúti y Guamán Poma); demandaban una vida digna para ellos y los demás indígenas a quienes sentían que debían proteger; se alarmaron con la destrucción del mundo indígena, por ello trataron de describir la grandeza del mundo prehispánico; tenían la firme convicción de que dos mundos se abrían ante ellos: el mundo español e indígena, sabían que entre ellos había puntos de convergencia pero que lo que predominaba era la diferencia. Finalmente todos, de una manera u otra, trataron de adentrarse en el nuevo orden político y social, en ello reside la importancia de su escritura. Los indígenas que legaron sus obras a la posteridad escribieron desde diversos ángulos y con diversos propósitos por ello no existe una clasificación que englobe estos escritos, lo importante es dar paso a las voces que se expresan a través de 39 Nicole Girón de Villaseñor, Perú: cronistas indios y mestizos en el siglo XVI, México, Secretaría de Educación Pública, 1975, p. 6. 40 Girón de Villaseñor, Op. cit., p. 98. 29 estos escritos que fueron pensados en función del mensaje y no del formato de enunciación. Titu Cusi Yupanqui. Relación de como los españoles entraron en el Perú y el suceso que tuvo Manco Inga en el tiempo que entre ellos vivió. La fecha de nacimiento de Titu Cusi es desconocida, como lo es en el caso de muchos personajes indios incluido Guamán Poma, sin embargo algunas referencias encontradas en su obra han permitido a los estudiosos datar su nacimiento entre 1530 y 1540. Fue hijo de Manco Cápac II y el tercer Inca que resistió a la dominación española gobernando a un pequeño reducto indígena en Vilcabamba. El gobierno de Titu Cusi se caracterizó por “el desarrollo de una hábil política basada en la conservación de la tradición religiosa y en negociaciones con los españoles”.41 Así mismo su actitud se juzga en muchas ocasiones como contradictoria ya que el Inca hostigaba a las huestes españolas que intentaban acercarse a la región pero mandaba a tomar las mercaderías e insumos españoles que iban destinados para el Cusco o Lima, también se hizo bautizar por la fe cristiana en 1568 recibiendo el nombre de Diego de Castro y sin embargo continuó con los rituales propios de su religión tradicional. En cuanto a su obra debe decirse que fue elaborada entre 1569 y 1570. Se sabe que ésta fue realizada en colaboración con el fraile agustino Marcos García quien también era su confesor, y con apoyo del amanuense Martín de Pando. El texto era una instrucción para el licenciado Lope García de Castro, gobernador de Perú, de quien se sabe que en esos años se preparaba para su regreso a España pues la llegada de Francisco de Toledo era ya inminente. 41Liliana Regalado de Hurtado, El inca Titu Cusi Yupanqui y su tiempo: los incas de Vilcabamba y los primeros cuarenta años del dominio español, Lima, Pontificia Universidad Católica del Perú, 1997, p. 69. 30 Dicho escrito tenía la finalidad de “hacer llegar al soberano español sus puntos de vista y los pedidos que hacía buen tiempo venía formulando como condiciones para salir de Vilcabamba”.42 Las principales demandas contenidas en la instrucción son: el reconocimiento explícito de su autoridad y el control de los territorios de Vilcabamba que hasta ese momento estaban bajo la autoridad del Inca. Además la obra pretendía hacer ver al rey la deuda que tenía con él pues los soldados de su padre apoyaron a los españoles en la lucha contra Atahualpa. El texto se dispuso en dos partes. La primera estaba destinada a relatar la empresa de los españoles en los Andes y las negociaciones que Titu Cusi hizo con las autoridades españolas, especialmente las hechas con el licenciado Lope de Castro. La segunda parte constaba de una especie de carta poder hecha por Titu Cusi para que el licenciado pudiera gestionar sus asuntos en la corte española. El texto sirvió para los intereses de los dos implicados pues por un lado Titu Cusi estaba convencido de que al contar con el apoyo de un personaje de la categoría de Lope de Castro, sus peticiones serían atendidas por el Rey con rapidez. Por otro lado el licenciado estaba interesado en la obra pues con ella demostraría que su tarea de negociación no fue nada fácil. La obra toca varios puntos y desarrolla distintas ideas y conceptos entre los que destacan la oposición y diferenciación entre indígenas y españoles, así como del mundo incaico y el colonial, en ella hace además una interpretación (de la elite indígena por supuesto ya que esta no representa la visión de todos los indígenas) de la conquista española y de la manera en que los españoles actuaron en esa empresa; argumentando así que el refugio en Vilcabamba fue consecuencia de las malas acciones y la falsedad con la que actuaron los conquistadores. Finalmente la instrucción tiene también un mensaje dirigido a los indígenasen donde pretende persuadirlos para que tomen con cuidado las palabras de los españoles pues estas difieren mucho con las intenciones que ellos tienen. Por lo 42 Regalado de Hurtado, Op. cit., p. 102. 31 tanto los invita a que no se dejen engañar ni deben confiar en ellos, menciona que lo mejor es actuar disimuladamente “hasta que el rey corrigiera los errores de su gente y cumpliera con lo que ellos no observaron”.43 Juan de Santacruz Pachacuti Yamqui Salcamaygua. Relación de antigüedades de este reino del Perú Se desconoce su fecha de nacimiento o cualquier dato sobre la vida y andanzas de este autor indio. Los datos biográficos que se conocen son los que él mismo proporciona en su obra en donde afirma ser “natural de los pueblos de Santiago de hanan Huahua y hurin Huaihua canchis de Orcosuyo entre Canas y Canchis de Collasuyo”,44 también menciona que sus padres fueron Diego Felipe Cóndor Canqui y María Huairo Tari, pertenecientes a la dinastía collahua, linaje importante anterior a los incas quienes eran sus enemigos, no por ello demerita sus acciones, por el contrario trata de seguir de manera fiel la historia incaica. Recalca insistentemente que sus antepasados, caciques del Orcosuyo, fueron los primeros en transformarse al cristianismo en Cajamarca. La insistencia de mostrarse y mostrar a su familia como cristianos, nos hace pensar en las motivaciones de su obra: demostrar que no está en contra de la colonización y únicamente pretende relatar la historia del pueblo andino antes de la llegada de los conquistadores españoles. Su obra ha sido calificada como una simple recopilación y traducción de cantares sobre gestas heroicas de los gobernantes incaicos, muchos investigadores recurrían a ella para corroborar acontecimientos, sin embargo no había sido analizada como objeto de estudio hasta que, en 1979, Luis Millones dio a conocer los comentarios que habían resultado de su relectura en un texto titulado: Los 43 Regalado de Hurtado, Op. cit., p. 116. 44 Juan de Santacruz Pachacuti, Relación de antigüedades de este Reino del Perú, México, Fondo de Cultura Económica, 1995, p. 3 32 dioses de Santa Cruz (Comentarios a la Crónica de Juan de Santa Cruz Pachacuti Yamqui Salcamaygua), A partir de ese momento, las miradas de los estudiosos se volcaron a la obra de Pachacuti, las investigaciones de Verónica Salles-Reese han aportado aspectos importantes para entenderla. Esta autora divide la estructura de la Relación en tres partes, las cuales atienden su división por medio del cambio en su contenido. En la primera parte se advierte la presencia del autor pues la narración es en primera persona, la segunda parte se centra en la época preincaica, una época mítica en donde se originó el Tahuantinsuyo; finalmente en la tercera parte el autor da cuenta de la historia de los incas hasta la llegada de las huestes españolas. La conjetura de Salles-Reese es que la obra de Pachacuti es un escrito legal ya que, comprobándolo con algunas probanzas y peticiones, se da cuenta que el autor indio utiliza una formula ya establecida para fijar su identidad, lugar de origen y linaje, “la fórmula legal usual requiere que toda escritura establezca la filiación de la persona que apela al sistema legal por cualquier pleito o causa”.45 Si la hipótesis de que nos encontramos ante un escrito legal es acertada, quedan por esclarecer los motivos que llevaron a Santacruz Pachacuti a escribir su obra. En este sentido Verónica Salles piensa que no se trataba de una demanda de derechos sino una “defensa de su calidad de cristiano y el descargo —sus conocimientos de la religión andina- de una posible acusación de idolatría”.46 Esto se puede inferir por la procedencia del escrito ya que este fue encontrado en los papeles de Francisco de Ávila, uno de los más duros extirpadores de idolatrías. Es posible que Pachacuti haya creado su obra por dos motivos; para dar una respuesta concreta a Francisco de Ávila que pudo acusarlo de idolatra, o bien como 45 Salles-Reese, Verónica. “Yo Don Juan de Santacruz Pachacuti Yamqui Salcamaygua… digo” en Revista Iberoamericana 51, 1995. p. 109. 46Íbid., p. 111. 33 una herramienta de sujeción usada por el extirpador para obtener información más certera. Cualquiera que haya sido la motivación del autor se puede inferir que en su ejercicio de escritura hay censura y represión por lo que su Relación representa lo que sus interlocutores quieren saber y no lo que el autor quiere decir, sin embargo ello no significa que su discurso sea sumiso, sino por el contrario, nos encontramos ante un escrito que representa la defensa de un indio ante las posibles acusaciones del sistema español. El contenido de la relación es por demás interesante en muchos aspectos sin embargo algo que llama la atención es el dibujo cosmogónico o retablo de la creación que el autor incluye en su obra, en él se puede encontrar un modelo de representación del universo andino con sus categorías tradicionales. Los estudiosos han determinado que en el cosmograma existe el elemento de dualidad así como la existencia de lo femenino y lo masculino, entre otros elementos que representan la visión del mundo para los andinos. Estos elementos resultarán importantes para el estudio del mapamundi de Guamán Poma ya que la idea de la dualidad y la división de lo masculino y femenino también estarán presentes en su representación del Tahuantinsuyo. Inca Garcilaso de la Vega. Comentarios reales de los Incas e Historia general del Perú La vida del Inca Garcilaso de la Vega es muy distinta a la de los escritores indígenas vistos anteriormente, en primera instancia porque este autor no es indígena sino uno de los primeros mestizos que aquella tierra andina vio nacer, además era noble por ambas partes de su linaje ya que su padre era el capitán Sebastián Garcilaso de la Vega y Vargas quien descendía de una ilustre familia extremeña y su madre era Isabel Chimpu Ocllo hija de Huallpa Túpac, nieta del Inca Túpac Yupanqui y sobrina de Huayna Cápac, el último gran Inca. La unión de estas dos culturas y 34 familias dio origen a la vida de Gómez Suárez de Figueroa (Garcilaso de la Vega) quien nació en Cuzco el 12 de abril de 1539. Sus primeros años de vida y juventud los vivió en Cuzco, rodeado de las tradiciones y costumbres de su familia materna así como de tertulias entre señores importantes de la sociedad española cuzqueña. Aunque no tuvo una educación formal, su familia materna no dudó en inculcarle los valores y tradiciones del universo andino y por otra parte gracias a su padre se instruyó en la lengua castellana y conoció los acontecimientos políticos y militares más importantes de la colonización en los andes. Su condición de mestizo y noble le permitió desenvolverse por ambos mundos: el indígena y el español. Su vida era holgada y sin inconvenientes, sin embargo las amarguras comenzaron cuando su padre recibió la orden de contraer matrimonio con una mujer distinta a su madre, de lo contrario podía perder sus posesiones. Entonces el capitán dejó a la india noble y casó con una mujer española, llevándose a su hijo a vivir con ellos. El Inca tenía veinte años cuando su padre murió, no sin antes dejarle una herencia de 4000 pesos en oro para que se fuera a estudiar a España. Para el año siguiente, el joven Gómez se embarcó a España, llegó a Montilla, una pequeña comunidad de la provincia de Córdoba donde vivía un pariente de nombre Alonso de Vargas y su esposa doña Luisa Ponce de León. Esperaba que este viaje a España le sirviera para obtener mercedes del rey “en atención de los servicios militares de su padre y a la calidad de princesa
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