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Sistema Penal y Criminalización

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1.- El derecho Penal. Contenido. Función.
Concepto del sistema penal: El sistema penal es el conjunto de agencias que coinciden en la cuestión criminal. Algunas de ellas, son exclusivamente penales, como por ejemplo la policía, el servicio penitenciario, la agencia de seguridad y la agencia de inteligencia; mientras otras, participan del poder punitivo pero sus funciones son más amplias, como es el caso de las agencias políticas, respecto al ejecutivo y el legislativo; y las agencias de reproducción ideológica, como es el caso de las facultades y las universidades. A su vez como ejemplo de estas, también podemos divisar las cooperaciones internacionales (agencias de países acreedores que financian programas en países deudores); los organismos internacionales que organizan programas, conferencias, seminarios, etc. (ONU, OEA, etc.); y a su vez, el gran aparato de propaganda sin el que no podría subsistir, o sea, las agencias de comunicación masiva (de prensa, radio, televisión, etc.).
Esto es un sistema en el sentido de un conjunto de entes y sus relaciones tanto reciprocas como con el ambiente. Pero no es un sistema en sentido biológico, ya que cada una de estas agencias tiene sus propios intereses sectoriales; es el caso por ejemplo de las cúpulas policiales, que quieren aumentar su poder y por ende su arbitrariedad e imponerse a los otros poderes y agencias. Sin embargo, en el caso de las cúpulas penitenciarias, se busca orden en las prisiones, porque los motines causan escándalos y las ponen en peligro. Como puede observarse, cada agencia tiene sus propios intereses sectoriales y sus propios controles de calidad de sus operaciones. Por ello, tienen discursos hacia fuera, que resaltan sus fines manifiestos (oficiales) más nobles, como la seguridad y la decencia para la policía, y la resocialización para los penitenciarios. 
Como resultado de esta disparidad de intereses, cada agencia o conjunto de agencias ocupa un compartimiento separado de las restantes y actúa en él de la forma que más convenga a sus intereses sectoriales. 
Finalmente, respecto al concepto de sistema penal, se debe comprender que está conformado tanto por agencias formales, como por distintos actores que materialmente inciden en el mismo. Como agencias formales, se divisan la policía, la agencia judicial de investigación y acusación; y el sistema penitenciario. Y la gran influencia material, la ejercen primordialmente los medios de comunicación; estos medios, alimentan hacia una configuración de la fisonomía del delincuente en el imaginario colectivo.
Proceso de criminalización: El sistema penal opera ejerciendo un poder punitivo represivo en forma de criminalización primaria y secundaria. Criminalización primaria es la formalización penal de una conducta en una ley, o sea que es un acto legislativo de prohibición bajo amenaza de pena; más claramente, una conducta está criminalizada primariamente cuando esta descripta en una ley como delito. Sin embargo respecto la criminalización secundaria, es la acción punitiva ejercida sobre personas concretas. Es el acto del poder punitivo por el que éste recae sobre una persona como autora de un delito. Es imposible llevar a cabo toda la criminalización primaria, no sólo porque se pararía la sociedad sino también porque la capacidad de las agencias de criminalización secundaria (policía, justicia, cárceles) es infinitamente inferior a lo planificado por la criminalización primaria. 
Para ello, la sociedad ofrece estereotipos: los prejuicios (racistas, clasistas, sexistas), van configurando una fisonomía del delincuente en el imaginario colectivo, que es alimentado por las agencias de comunicación, las cuales construyen una cara de delincuente. 
La selección criminalizante en definitiva, no la realizan los jueces ni las agencias jurídicas, a quienes las agencias ejecutivas les llevan los candidatos cuando ya ellas comenzaron el proceso de criminalización desde el punto de vista de la realidad (detención de la persona, secuestro de cosas, etc.). Las agencias jurídicas reciben el producto de la selección policial y solo pueden decidir si la criminalización sigue adelante o se interrumpe, y en el primer caso la cantidad de poder punitivo que puede ejercerse sobre la persona. Esto muestra claramente que el poder punitivo no es ejercido por las agencias jurídicas del sistema penal, sino por las policiales, y las jurídicas lo único que pueden hacen en la práctica y hasta cierto punto es contenerlo. Cabe mencionar, que no solo es selectiva la criminalización que lleva a cabo el sistema penal, sino que este opera de modo que la victimización, también se hace selectiva y va recayendo sobre los de menores rentas. 
Derecho penal: es el discurso del saber jurídico (un discurso científico), como todo saber, se ocupa de un cierto ámbito de cosas o entes del mundo. Ese ámbito son las leyes penales, que se distinguen de las restantes por habilitar la imposición de penas. Lo primero que debe hacer, por ende, es delimitar su objeto de conocimiento, es decir, definir cuáles son las leyes que constituyen su objeto (¿Qué es, de qué se ocupa y para qué lo hace?). Esta primera pregunta la responde la teoría del derecho penal. En segundo lugar deberá establecer en qué casos y bajo qué presupuestos se habilita el ejercicio del poder punitivo, o sea, la imposición de penas. Esta segunda pregunta la responde la teoría del delito. Por último, debe ocuparse de la pena, no como concepto, sino como respuesta que la agencia jurídica debe proporcionar, responsabilizándose por la filtración de poder punitivo en una manifestación concreta y en cierta cantidad (¿Qué pena y hasta qué medida?). Esta tercera pregunta la responde la teoría de la responsabilidad penal (que no es responsabilidad de la persona criminalizada, sino de la agencia jurídica, que es la que puede o no responder con la pena). 
Se trata ante todo, de una rama del saber jurídico o de los juristas. Como tal, persigue un objeto práctico: busca el conocimiento para orientar las decisiones judiciales. Se da por presupuesto el objetivo político, y de este modo se mantiene oculto.
El derecho penal como cualquier saber, también es interpretativo, o sea que interpreta o comprende los entes abarcados en su universo. Este universo del derecho penal, o sea, la materia del derecho penal, lo que este estudia, está constituida básicamente pro leyes y, fundamentalmente,, leyes penales, o sea, las leyes que habilitan el ejercicio de poder punitivo. Estas leyes permiten que en ciertas circunstancias opere el modelo punitivo de decisión de conflictos, el que en el ejemplo del alumno que rome un cristal en la escuela, optaba esta por la expulsión y hacia imposible la aplicación y acumulación de los restantes. 
En todos los saberes es necesario distinguir entre su definición actual y su concepto histórico. No es posible invalidar una definición actual. En el derecho penal suelen sostenerse proposiciones que corresponden a etapas de menor conocimiento, ignorándose la acumulación de saber posterior a ellas. Zaffaroni hace hincapié a su vez en la progresividad como esencia de cualquier saber, ya que, todos tienden a aumentar y acumular los conocimientos. 
La criminalización opera de modo que la victimización, también se hace selectiva y va recayendo sobre los de menores rentas. 
Buena parte de la comunicación masiva trqatan de proyectar el poder punitivo como una guerra a los delincuentes. La comunicqacion suele mostrar enemigos muertos (ejecuciones sin proceso) y también soldados propios caidos (policías victimizados).
El ejercicio del poder punitivo aumenta y reproduce los antagonismos entre las personas de esos sectores débiles. Las sociedades se han organizado en modelos comunitarios y modelos corporativos. En los modelos comunitarios priman los vínculos horizontales de solidaridad, es el modelo de sociedad mas tradicional. En los modelos corporativos la sociedad tiende a asemejarse a un ejercito, y priman los vínculos verticales de autoridad y disciplina. Como se puedeconcebir un estado, tarde o temprano dará con dos figuras ideales o modelos puros: el estado de derecho liberal democrático y el estado de policía totalitario autoritario. En el estado de derecho ideal todos estaríamos sometidos por igual ante la ley; en el estado de policía ideal todos estaríamos sometidos a la voluntad de los que mandas polica es aquí sinónimo de gobierno. 
El estado de policía fue el que predomino históricamente. El estado de derecho es un producto de la modernidad. Todos los sectores hegemónicos tienden a someter al resto. Nunca los de arriba quieren que la sociedad se dinamice verticalmente. 
Si el derecho penal se ocupase solo de las leyes penales manifiestas y dejase de lado las latentes, estaría suicidándose y destruyendo el estado de derecho, porque bastaría con cambiarle el nombre a las penas para que el estado pueda usar su poder punitivo sin limite alguno. 
Las leyes penales no se agotan con las manifiestas y latentes sino que también hay leyes con función punitiva eventual como leyes penales eventuales o eventualmente penales. Estas son leyes que habilitan el ejercicio de un poder estatal o no estatal sin funciones punitivas manifiestas ni latentes, no solo en el discurso sino tampoco e la realidad, pero del poder que ellas habilitan surge la particularidad de que, en algunos casos, puede hacerse un uso o un abuso que lo convierte en poder punitivo. 
1.1. Caracteres. Limites al “ius puniendi” estatal:
a) El principio de legalidad.
b) Principio de protección de bienes jurídicos.
c) Principio de culpabilidad
d) Principio de intervención mínima.
e) Principio de fin preventivo de la pena.
f) Principio de humanidad de las penas.
Metodo: en las ciencias o saberes sucede que son los objetos de un saber los que deciden el método adecuado para su conocimiento. El derecho penal al ser una rama del saber jurídico, su conocimiento debe ser alcanzqado por método jurídico. 
El saber jurídico tiene como objetivo orientar las decisiones de la jurisdicción osea las sentencias, de modo raconal y previsible. 
Desde el siglo XIX se propone para esto el llamado método dogmatico o dogmatica jurídica. Rudolf von Jhering lo planteo en el derecho privado y de allí pasó al resto del saber jurídico. Se trata de descomponer el texto legal, en elementos simples (dogmas porque el interprete no debe tocarlos), con los que luego se procede a construir una teoría interpretativa que debe responder a tres reglas básicas:
1- Completividad lógica o sea, no ser interiormente contradictoria. No cumple esta regla, una teoría que considera una misma circunstancia eximente, sin compatibilizar los criterios. 
2- Compatibilidad legal, o sea que no puede postular decisiones contrarias a la ley. 
3- Armonia jurídica, también llamada ley de la estética jurídica, según la cual debe ser simétrica, no artificiosa ni amanerada, y mostrar cierto grado natural. No es un requisito absoluto como los anteriores, pero su observancia es altamente conveniente. 
El método dogmatico requiere una decisión previa, premetodica, anterior a la selección de la via de acceso al conocimiento. Se reclama una previa decisión política. No hay un sistema de decisiones políticas sin objetivo político. 
El método dogmatico jurídico es como ciertas fuerzas de la naturaleza. Es neutro. La dogmatica jurídico penal no siemrpe sirvió para proveer seguridad jurídica, sino que en demasiadas oportunidades operó al servicio del estado de policía u ocultó el objetivo político quedando reducida a una función mercenaria. 
Caracteres: 
El derecho penal es una parte del saber jurídico general y, por ende, participa de todos los caraceres del derecho, por mucho que la circ instancia de tener por función la contención de un poder, no puede menos que dotarlo de algunas particularidades. El derecho penal desde el punto, de ser un saber jurídico, es parte del derecho publico, represivo, continuo y fragmentados, y normativo. En cuanto a las leyes penales manifiestas, puede afirmarse que son sacionadoras y que habilitan poder punitivo de modo fragmentado y dicontinuo. El poder punitivo, pro su parte, muestra siempre una constante vocación de continuidad. 
El derecho penal es una rama del derecho publico, este carácter se refuerza, porque puede ser considerado como un apéndice del derecho constitucional. 
El derecho penal tiene carácter represivo. En los discursos legitimantes, esta afirmación era funcional, porque la represión de las pulsiones, según Freud, está en la base de la cultura, es decir, de lo propiamente humano. 
El derecho pena es continuo y fragmentador en tanto que el poder punitivo habilitado por las letes penales manifiestas debe mantenerse dicontinuo y fragmentario, sabiendo que para ello el derecho penal como poder jurídico,, debe contener su estructural tendencias a la continuidad pues sin esa contrapulsion el poder punitivo dejaría de ser fragmentario para convertirse en continuo y total, lo cual desembocaría en el estado totalitario 
El derecho penal es normativo, como lo es todo el saber jurídico, pero no por estar constituido por normas ni por ocuparse solo del deber ser y desentenderse del ser, sino, simplemente porque es un saber que tiene por objeto el estudio de normas porque se ocupa de ellas. 
En conclusión: el derecho penal es normativo porque se ocupa de normas, entendiendo por tales las normas penales reales o leyes penales, y porque para la determinación de su alcance se vale de las normas deducidas como instrumentos metodológicos.
Limites al “ius puniendi” estatal: La construcción del sistema de comprensión del derecho penal (saber penal) presupone una decisión política que la condiciona. Toda la construcción estará condicionada pro esa previa decisión acerca de la función del sistema penal. 
El sistema es un medio y no un fin en si mismo. Con el método jurídico se construye el sistema del derecho penal (el saber penal se expresa en forma de sistema) para ser aplicado por la agencia jurídica con ciertos objetivos políticos, como el de acotar y reducir el poder punitivo. Cualquier acto de la vida lo decidimos descartando caminos prohibidos, que son meras posibilidades lógicas. En el derecho penal, el criterio para realizar este descarte lo proveen estos principios limitadores que condicionan la labor de construcción sistematica del penalista. 
Todos los principios limitadores demandan la legalidad, evitan choques groseros con el derecho internacional de los derechos humanos, y, en definitiva, pueden derivarse mas o menos directamente del principio republicano de gobierno. No obstante, algunos parecen emerger con mayor claridad de uno o de otro de estos aspectos, por lo que, por razones de mero orden expositivo, es poble clasidicarlos en principios que derivan de la legalidad, de la necesidad de evitar violaciones groseras a los derechos humanos, y del principio republicano de gobierno art. 1 c.n.
	L E G A L I D A D
	 
 
LEGALIDAD FORMAL 
 
	Se consagra en los art. 18 y 19 de la CN y mediante el inc. 22 del 75, en los arts. 9 de la CA y 9 del PIDCP.
 Desde 1853 se consagró con la fórmula ningún habitante de la nación puede ser penado sin juicio previo
 fundado en ley anterior al hecho del proceso. Este principio implica la prohibición de la ley “ex pos facto” 
La legalidad penal se completa con el llamado Principio de Reserva (ningún habitante puede ser obligado a hacer lo que
 la ley no manda, ni privado de lo que ella no prohibe). Los dos principios responden a un único requerimiento de racionalidad en el ejercicio del poder, emergente del principio republicano de gobierno art. 1 CN.
Desde el punto de vista la legalidad significa que la única funte de de ley penal en el sistema argentino 
son lo órganos constitucionalmente habilitados y la única ley penal es la ley forma de ellos emanada. La CN no admite que la jurisprudencia, la doctrina o los usos y constumbres puedan habilitar el poder punitivo. 
Es inconstitucional cualquier ley emanada de la administración. La materia penal queda excluida de los derechos de necesidad yurgencia (art. 99 inc. 3 CN).
Existen casos en que la ley penal se limita a establecer una conminación, dejando que la acción prohibida
 sea determinada por otra ley, que puede ser también formal, pero que por lo general no lo es: son las 
leyes penales en blanco. Estas leyes abren al puerta a la analogía y a la aplicación retroactiva. A demás de 
delegar la potestad punitiva por parte del poder legislativo a otros poderes.
	
	 
MAXIMA TAXATIVIDAD LEGAL E INTERPRETATIVA 
	La ley penal se expresa en palabras y estas no son nunca totalmente precisas. Por lo tanto se requiere al legislador que
 las leyes sean dictadas en forma taxativa y con la mayor precisión posible. Se da cuando el legislador prescinde de del 
verbo típico, cuando remite a conceptos vagos o valorativos de dudosa precisión, el derecho penal tiene dos 
posibilidades: declarar la inconstitucionalidad o aplicar el principio de máxima taxatividad interpretativa. Pero debe 
prevalecer la inconstitucionalidad cuando el PMT es demasiado artificioso.  El PMT se manifiesta mediante la 
prohibición absoluta de la analogía “in malam partem” 
La dudas interpretativas deben ser resueltas en la forma más limitativa de la criminalizacion.
	
	 
RESPETO HISTORICO AL AMBITO LEGAL DE LO PROHIBIDO 
	La ley es un texto y todo texto tiene un contexto, tanto discursivo como social. El ámbito de lo legalmente prohibido
 varía aunque el texto permanezca igual, porque el contexto cambia continuamente. Hay casos en que se debe tomar
 en cuenta el contexto cultural del texto legal, y cuando se comprueba un fenómeno de inusitada extensión prohibitiva
 se impone la reducción histórica.
	
	 
IRRETROACTIVIDAD DE LA LEY PENAL 
	La garantía de legalidad tiene como sentido impedir que alguien sea penado por un hecho que al tiempo de su 
comisión, no era delito o no era perseguible y a su vez, prohibir que a quien comete un delito se le aplique 
una pena más gravosa que la legalmente prevista al tiempo de la comisión del delito. Pero existe una excepción
 que es el efecto retroactivo de la ley penal más benigna. La ley penal más benigna puede tratarse de: la creación 
de una nueva causa de justificación, de inculpabilidad, una clase distinta de pena, etc. 
Los límites temporales que se toman en cuenta para determinar cual es la ley más benigna son los de la comisión 
del hecho (realización de la acción típica, no el resultado) y de la extinción de la condena.-
	
	 
	
	
	 
RETROACTIVIDAD DE LA JURISPRUDENCIA 
 
	Los tribunales no son fuente de legislación penal y toda pretensión de jurisprudencia obligatoria es
 inconstitucional (control difuso de la CN). No se le puede reprochar al agente como ilícita una acción 
por un nuevo criterio interpretativo, pero si el caso inverso por razones de equidad y del art. 16 CN. 
En el caso de jurisprudencia constitucional, la Corte no puede revertir su criterio regresivamente.
 
 
 
 
 
	PRINCIPIOS LIMITATIVOS QUE EXCLUEN VIOLACIONES GROSERAS CON LOS DD. HH.
	 
LESIVIDAD 
 
	Es el límite material más importante de la CN. No solo limita el poder criminalizante 
primario y secundario, sino que también a la ingerencia del estado en general. 
“Las acciones privadas de los hombres que de ningún modo 
ofendan al orden y la moral pública, ni perjudiquen a un tercero, 
están sólo reservadas a Dios y exentas de la autoridad de los magistrados”
Entonces: 
a. El Estado no puede imponer una moral. Todo estado que pretenda 
imponer una moral es inmoral ya que esta es una elección libre. 
b. Por el contrario debe garantizar un ámbito de libertad moral 
c. Las penas penas no pueden recaer sobre acciones que son ejercicio de esa
libertad. No puede haber delito que no se apoye sobre un conflicto que afecte 
bienes jurídicos ajenos. 
 
 
Una ley o sentencia que pretenda imponer pautas morales es ilícita y su antijuridicidad lesiona el modelo de estado de derecho consagrado en la CN. Esto se nota en la ley de tenencia de estupefacientes. 
 
O sea, penalmente no puede legitimarse la intervención punitiva cuando no media 
por lo menos un conflicto jurídico. 
Ahora bien, que es bien jurídico. No corresponde decir que los bienes jurídicos se tutelan, 
ya que por mera deducción, la eficacia tutelar de la ley penal (y por ende 
preventiva de la pena), el discurso del PP puede racionalizar afectaciones 
hipotéticas (peligros abstractos, remotos, etc.) y hasta intervenir desproporcionadamente 
tutelando bienes jurídicos insignificantes o inexistentes.
	
	 
 
	 
	
	 
Trascendencia minima
 
	Si bien el art. 119 de la CN establece que las penas no deben trascender a la persona,
 el poder punitivo hace trascender la pena a la familia, sus ingresos, estigmatizando a la
 persona a su familia. Un ejemplo es la prohibición de contacto con la pareja de los
 imputados, aquí la pena también es sufrida por la pareja.- Para el derecho penal argentino, la pena 
es personal no puede trascender. La multaa penal, por ejemplo, la debe la persona, y si esta fallece 
antes de pagarla, la obligación pasa a sus herederos. No obstante es imposible que la pena no 
trascienda del penado. 
	
	 
HUMANIDAD 
 
	Este principio se encuentra establecido en el art. 18 CN (se prohíbe la pena de azotes y
 toda forma de tormentos) y consagrado expresamente a través del inc. 22 del 75 
prohibición de la tortura y penas o tratos crueles o degradantes (art. 5 de la DUDH,
 art. 7 del PIDCP y el 5 de la CADH). Pese a esta expresa consagración y jerarquía
 es el principio más ignorado del poder criminalizante. 
Por este principio es inhumana toda pena brutal (muerte, castración, esterilización y
 las consecuencias jurídicas).
	
	 
PROHIBICION DE DOBLE PUNICION 
 
	La primera hipótesis se da cuando se da cuando la administración impone penas
 (multas, inhabilitaciones, etc), pero que el discurso penal no las considera penas.
 Toda pena no manifiesta debe declarase inconstitucional, ya que estas penas no 
manifiestas habilitan el poder punitivo más discrecional. 
En el segundo grupo están los casos en que las personas sufren enfermedades o perjuicios
 por acción u omisión de las agencias, en las etapas de investigación o represión del delito.
 También se dan torturas en comisarías o en sede judicial (las penas ilícitas,
 no por ser prohibidas dejan de ser penas). A la hora de la sentencia se
 deben tomar en cuenta y descontarse de la pena aplicada jurisdiccionalmente, ya 
que se puede caer en la doble punición.
El tercer grupo son los indígenas con culturas diferentes que tienen su propio sistema 
de sanciones al que el estado no puede imponerle otra (al menos descontar la comunitaria).
 El art. 75 inc. 17 (preexistencia étnica y cultural de los pueblo indígenas) obliga a tomarlas
 en cuenta.
	
	 
BUENA FE Y PRO HOMINE 
 
	Los textos constitucionales e internacionales que consagran derechos deben interpretarse
 de buena fe y en caso de duda, conforme a la cláusula pro homine. 
Principio de buena fe: los textos deben interpretarse de buena fe y teniendo en cuenta su fin.
Principio Pro Homine: establece que ante la duda se decida en el sentido más garantizador
 del derecho que se trate.
Estos principios impiden que el discurso penal invoque normas de la CN y tratados para 
violar las garantías. Un ejemplo de esto es invocar derechos para convertirlos en bienes 
jurídicos e imponer penas inusuales o crueles, con el pretexto de tutela.
 
 
 
 
Limites derivados del principio republicano de gobierno.  
	PRINCIPIOS  LIMITADORES DE LA CRIMINALIZACION 
	 
SUPERIORIDAD ETICA DEL ESTADO 
 
 
 
	La renuncia estatal a los límites éticos da lugar a su ilitimidad y consiguiente carencia de títulos para requerir comportamientos adecuados al derecho por parte de sus habitantes. 
Si el Estado de Derecho cede ante el Estado de Policía, pierde racionalidad y debilita su función de pacificador social y pierde nivel ético.
	
	 
SANEAMIENTO GENEALOGICO 
 
 
 
	Las criminalizaciones primarias surgen de cierto momento histórico y son consagradas por el legislador participando de cierto contexto históricoy de poder. Por esto los tipos penales frecuentemente arrastran una carga ideológica poco compatible con el estado de derecho. Esta carga se llama genealogía del tipo penal y es necesario, a través de investigaciones genealógicas, depurarlos de arrastres al estado de derecho.
	
	 
CULPABILIDAD 
 
 
 
	El principio de culpabilidad abarca dos niveles: 
A. La exclusión de la imputación de un resultado accidental 
B. La exclusión de la punibilidad por no conocer el la conminación o adecuar su conducta al hecho. Aquí se expresa la máxima no hay pena sin exigibilidad. 
 
Derecho Penal y control social.
El delito como "construcción" y como "realidad". Si prescindimos del código y de las leyes penales y lanzamos una pregunta indiscreta a la realidad social, no necesitamos mucha penetración para percatarnos de que entre la conducta de quien libra un cheque sin provisión de fondos y la de quien golpea a una mujer y la viola, no hay nada en común, es decir, que se trata de dos acciones con significado social completamente distinto. 
Lo único común entre esas conductas es que ambas están previstas en la ley penal, amenazadas legalmente con una pena. Sometidas a un proceso de verificación previo Institucionalizado a través de los funcionarios públicos, conforme al cual sus autores pueden ser privados de libertad en una cárcel. Esto basta para demostrarnos que "el delito" sociológicamente no existe si prescindimos de la solución institucional común. 'En la realidad social existen conductas, acciones, comportamientos, que importan conflictos que se resuelven de un modo común institucionalizado, pero que aisladamente considerados tienen significados sociales completamente diferentes. 
No sólo eso es lo que observamos, sino que, en cuanto a las mismas conductas que generan conflictos con soluciones institucionales idénticas, vemos que las instituciones operan de un modo diferente: la violación o el homicidio suelen publicarse en los diarios; los libramientos de cheques sin fondos no, como tampoco los hurtos. Además, lo curioso esque en la inmensa mayoría de los casos la solución común-institucional no tiene lugar: el receptor del cheque quiere cobrarlo y si lo logra da por terminado el problema; la víctima de hurto quiere recuperar la cosa o parte de ella y puede omitir la denuncia que perjudique ese objetivo; la victima de violación puede no querer denunciar para no someterse a vergüenza pública. En realidad, si cada ciudadano practicase un somero examen de conciencia, comprobaría que varias veces en su vida infringió las normas penales: se quedó con el libro prestado, se llevó la toalla del hotel, se quedó con un objeto perdido, etc. En conciencia, cada uno de nosotros tiene un "voluminoso prontuario". Los jueces nacionales lo incrementan diariamente, al suscribir falsamente declaraciones como prestadas en su presencia y en las cuales jamás están presentes. Los secretarios judiciales certifican diariamente varias de estas falsedades ideológicas. 
Se oirá que tales acciones no son delito o que son delitos levísimos. Sin embargo hay numerosísimas condenas penales por hechos análogos, y aún más insignificantes: hurto de un pocillo ordinario de café por parte de un mozo de limpieza; apoderamiento de dos latas de- duraznos al natural por un empleado; negativa del conductor de ómnibus urbano a detenerse en una parada para que' descienda un pasajero; hurto de un formulario de cheque de una libreta inútil por cuenta cerrada; etc. 
A esto se añade que en el panorama general del mundo, la máxima cantidad de daño causado al mayor número de personas, al menosen el siglo XX, no proviene de quienes son detectados y señalizados como "criminales" o "delincuentes", sino por agencias de los Estados, en guerra o fuera de -ella (Quinney.Wildeman). Desde el punto de vista jurídico no cabe duda de que el armamentismo que desemboca en la "disuasión nuclear" configura un conjunto de acciones preparatorias de crímenes de guerra; como lo ha demostrado recientemente el profesor de la Universidad Católica de Lovaina (Jacques Verhaegen), pero a nadie se criminaliza por ello, pese a que por la estructura jurídica de la NATO son competentes las autoridades judiciales de Estados Unidos y de Europa. Por otra parte, llama también !a atención que en la gran mayoría de los casos, quienes son señalados como "delincuentes" , pertenecen a los sectores sociales de menores recursos. En general, es bastante obvio que casi todas las cárceles del mundo están pobladas de pobres. Esto indica que hay un proceso de selección de las personas a las que se califica como "delincuentes”, y no, como se pretende, un .mero proceso de selección de las conductas o acciones calificadas como tales. 
Por lo demás, acciones nada deseables o inmorales y conflictivas hay muchas: tener relaciones sexuales con una prostituta y no pagarle el precio convenido: no pagarle el salario al empleado: no pagar la cuenta de la luz eléctrica: etc. Sin embargo. en el primer caso no se puede buscar ninguna solución por vía institucional (conforme al Art. 953 CC): en el segundo la solución debe procurarse mediante una demanda laboral y en eltercero el proveedor procede unilateralmente a interrumpir el suministro. Es decir, no todas las acciones inmorales o indeseables y conflictivas abren la posibilidad de una solución penal. 
Ello obedece a que en cualquier situación conflictiva la solución punitiva del conflicto es sólo una de las posibles soluciones. Un autor contemporáneo ejemplifica con el caso de cinco estudiantes que conviven y uno de ellos en cierto momento, golpea y rompe e! televisor. Cada uno de los restantes analizará el suceso a su manera y adoptará una actitud diferente. Uno furioso declarará que no quiere vivir más con el primero: otro reclamará que pague e! daño o compre otro televisor nuevo: otro afirmará que seguramente se halla enfermo, y. el último observará que para que tenga lugar un hecho de esa naturaleza algo debe marchar mal en la comunidad, lo que exige un examen común de conciencia (Hulsman). Estas diferentes reacciones señalan cuatro estilos diversos para resolver un conflicto: el punitivo, el reparatorio, el terapéutico y el conciliatorio. 
Lo cierto es que cuando previamente se ha elegido obligatoriamente la primera solución se excluyen las otras y lo que es peor que incluso esa solución reconoce dos variables: excluirlo del grupo es una y reaccionar golpeándolo es otra. La primera seria eliminatoria y la segunda realmente retributiva. 
En síntesis: acciones conflictivas de muy diferente gravedad y' significado social se resuelven por la vía punitiva institucionalizada, pero no todos los que las realizan sufren esa solución, Sinoúnicamente una minoría ínfima de ellos, después de un proceso de selección que casi siempre selecciona a los más pobres; otras acciones conflictivas se resuelven por otras vías institucionalizadas y otras carecen de solución institucional: la solución punitiva (eliminatoria o retributiva) es sólo una alternativa que excluye la posibilidad de las otras-formas de resolver los conflictos (reparatoria, terapéutica y conciliatoria) Como si esto fuese poco, las acciones que abren la posibilidad de solución penal de mayor gravedad, son cometidas por los mismos Estados que institucionalizan tales soluciones. . 
En estas condiciones, se tiene toda la impresión de que "el delito" es una construcción destinada a cumplir cierta función sobre algunas personas y respecto de otras, y no una realidad social individualizable. Ya veremos si esta impresión es verdadera, pero lo cierto es que, con esta constatación tan simple, ya nadie puede quedarse a nivel de meras respuestas formales a la hora de encarar la pretensión de saber "algo" acerca del derecho penal. 
2. Concepto y formas del control social. El hombre siempre aparece en sociedad, interaccionando estrechísimamente con otros hombres. Se agrupan dentro de la sociedad en grupos permanente alternativa o eventualmente coincidentes o antagónicos en sus intereses y expectativas. Los conflictosentre grupos se resuelven en forma que, si bien siempre es dinámica, logra una cierta estabilización que va configurando la estructura de poder de una sociedad, que en parte es institucionalizada y enparte difusa. 
Lo cierto es que toda sociedad presenta una estructura de poder, con grupos que dominan y grupos que son dominados, con sectores más cercanos o más lejanos a los centros de decisión. Conforme a esta estructura, se "controla" socialmente la conducta de los hombres, control que no s6lo se ejerce sobre los grupos más alejados del centro del poder, sino también sobre los grupos más cercanos al mismo, a los que se les impone controlar su propia conducta para no debilitarse (en la misma sociedad de castas, los miembros de las más privilegiadas no pueden casarse con los descastados). 
-De este modo, toda sociedad tiene una estructura de poder (político y econ6mico) con grupos más cercanos al poder y grupos más marginados del poder, en lo cua1, lógicamente, pueden distinguirse grados de centralización y de marginación. Hay sociedades con centralización y marginación extremas, y otras en que el fenómeno se presenta más atenuada mente, pero en toda sociedad hay centralización y marginación del .poder. 
Esta "centralizaci6n-marginaci6n" teje una maraña de múltiples y proteicas formas de "control social" (influencia de la sociedad delimitadora del ámbito de conducta de1 individuo). Investigando la estructura de poder nos explicamos el control social e, inversamente, analizando éste, se nos esclarece la naturaleza de 1a primera. 
El" ámbito del control social es amplísimo y, dada su proteica configuraci6n y la inmersión del investigador del mismo, no siem. 
pre es evidente. Este fenómeno de ocultamiento del controlsocial es más pronunciado en los países centrales que en los periféricos, donde los conflictos son más manifiestos. De cualquier modo, incluso en los países periféricos, el control social tiende a ser más anestésico entre las capas sociales más privilegiadas y que adoptan las pautas de consumo de los países centrales. 
Así, por ejemplo, los medios masivos de comunicación social, inducen pautas de conducta sin que la población, en general, perciba eso como "control social", sino como formas de recreación. Cualquier institución social tiene una parte de control social que es inherente a su esencia, aunque también puede ser instrumentada- mucho más allá de lo que corresponde a esa esencia. El control social se ejerce, pues, a través de la familia, de la educación, de la medicina, de la religión, de los partidos políticos, de los medios masivos, de la actividad artística, de la investigación científica, etc. 
El control social se vale, pues, desde medios más o menos difusos" y encubiertos hasta medios específicos y explícitos, como es el sistema penal (policía, jueces, personal penitenciario, etc.). 
La enorme extensión y complejidad del fenómeno del control social demuestra que una sociedad es más o menos autoritaria o más o menos democrática, según se oriente en uno u otro sentido la totalidad del fenómeno y no únicamente la parte del control social institucionalizado o explícito. 
Así, para valorar el control social en un determinado contexto, no debe detenerse el observador en el sistema penal, y menos aún en la mera letra dela ley penal, sino que le es menester analizar la estructura familiar (autoritaria o no), la educación (la escuela, tos. métodos pedagógicos, el control ideológico de los textos, la universidad, la libertad de cátedra, etc.) , la medicina (la orientación "anestesiante" o puramente organicista o más antropológica de su ideología y práctica) y muchos otros aspectos que hacen al complicadísimo tejido social. Quien pretenda formarse una idea del modelo de sociedad con que se enfrenta olvidando esta pluridimensionalidad del fenómeno del control, caerá en un simplismo ilusorio. 
3. Saber y control social (saber y poder). Tradicionalmente se repite el principio positivista según el, cual cuanto mayor es el saber, mayor es el poder, lo cual se nos ha vuelto "lógico". Parecía una verdad incontrovertible que el hombre con más conocimientos científicos tenía más poder, sobre todo teniendo en cuenta los logros tecnológicos de nuestra civilización industrial. Sin embargo, a estas alturas de la historia, lo que parece incuestionable es lo contrario: el poder es el que condiciona el saber. 
Es incuestionable que en el mundo hay una estructura de poder que se vale de ideologías que en buena parte son "encubridoras" o _"de ocultación" o francamente 'creadoras de la realidad". Lo cierto es que nuestra "civilización industrial" ha llegado, en su carrera en pos de un permanente aumento de producción, a un punto en que se teme seriamente por la viabilidad futura de la vida en el planeta, que no sólo está amenazado por explosivos nuclearescapaces de arrasarlo, sino también por una acelerada destrucción de los bosques, agotamiento de recursos no renovables y creciente polución de la atmósfera y los mares, sin contar con la contaminación radiactiva. En esta situación, se destinan más de quinientos mil millones de dólares anuales -cifra que crece acumulativamente un 8% anual- a armamentos mientras mueren de hambre anualmente cuarenta millones de niños y muchos millones más no lograrán jamás un completo desarrollo de la inteligencia como resultado de carencias alimentarias en los primeros años de vida. 
Las estructuras del poder mundial, tanto en el mundo mal llamado "occidental" (capitalista o de economía descentralizada) como en el mal llamado "oriental" (comunista o de economía centralizada) reconocen países centrales y países periféricos. 
El control social, en cada uno de esos países: ha de ser diferente, según se trate de un país central o periférico y, a su vez, según se trate de países de economía descentralizada (capitalistas) o estatal o centralizada, y aún, entre los periféricos, según su grado y momento de desarrollo (economía rural, en vías de industrialización, etc.). 
En cada uno de ellos, el poder generará, condicionará, fomentará o será proclive a explicaciones o versiones de la "realidad" que, en forma de ideologías ("sistema de ideas", es decir, con contenido no Peyorativo) abarcarán también las ideologías científicas. Toda ciencia es ideológica (porque cualquier saber es ideológico) y el poder, en cada caso, la manipulará según convenga a _suconservación, privilegiando una ideología y desechando (o reprimiendo, coartando e1 desarrollo u ocultando) las que considere peligrosas o negativas para ésta. 
Por grande que sea la apariencia de seriedad y asepsia de una 
ideología, siempre será una ideología. La ilusión científica de "objetividad" no pasó de ser un elemento sedativo y anestésico que hoy carece de predicamento. Con mucha mayor razón esto se torna evidente cuando se trata del conocimiento que versa sobre el propio control social, como es el que nos ocupa. Precisamente a ello obedece la enorme confrontación ideológica que se opera en el campo de las ciencias penales y su ineludible tratamiento. 
Latinoamérica se haya entre los países periféricos, o sea que, en la injusticia social que se genera a nivel internacional, como resultado de la división internacional del trabajo (ejemplarmente criticada en la Encíclica laborem Exercens) nuestras sociedades presentan características particulares que se revelan en su control social y en sus sistemas penales y de las que más adelante nos ocuparemos. No obstante, al explicar nuestro derecho penal -como parte del control social- se pasan por alto estas características, tratando de importar ideologías masivamente. Por otra parte, la misma posición periférica nos ha impedido elaborar un desarrollo ideológico propio, le cual nos mantiene en posición tributaria de las ideologías de los países centrales. 
Hay autores -tanto en nuestra área geográfica como fuera de ella- que, en razón del gran choque ideológico que se operaen el campo jurídico, afirman que el conocimiento jurídico no tiene carácter científico. Sin pretender entrar eneste debate, lo cierto es que el fenómeno que señalan es común a todo saber relacionado más o menos directamente con lo social y en modo alguno exclusivo del derecho. Por otra parte, ni siquiera las ciencias más alejadas de lo social quedan marginadas de la manipulación ideológica: en biología, el evolucionismo simplista, fue la base ideológica del racismo, justificación cientificista del colonialismo; en física, el mecanismo fue la base del determinismo positivista, ideología típica de las capas sociales encumbradas con el industrialismo. 
Diversas manifestaciones del Derecho Penal.Derecho Penal objetivo y subjetivo. 
El Derecho Penal como forma de control social: Lo que diferencia al derecho penal de las otras ramas del derecho, es la sanción impartida por parte del mismo que se hace a través del Estado. El derecho Penal es el sistema de normas coercibles que limita el “ius puniendi” del Estado. Es una muy importante herramienta de control social, ya que trata de encauzar la conducta de aquellas personas que se desvían de las conductas socialmente aceptadas.
Derecho Penal objetivo: es la expresión que alude al conjunto de normas que integran el sistema penal, formando por todas las leyes que establecen delitos, penas, medidas de seguridad y diversas formas de responsabilidad criminal. El denominado derecho penal objetivo comprende normas derecho penal material, que se ocupa de las conductas conminadas con pena, sus presupuestos y consecuencias; y el derecho procesal penal, que regulan el esclarecimiento de los hechos punibles y la imposición del derecho del Estado a castigar. 
El derecho penal material contiene una parte general, que comprende principios generales validos para todos los delitos, y una parte especial, dedicada al conocimiento de los distintos delitos en particular, como, por ejemplo: el homicidio, el hurto, la estafa, el contrabando, etc. 
El derecho penal es la rama del saber jurídico que, mediante la interpretación de las leyes penales, propone a los jueces un sistema orientador de decisiones que contiene y reduce el poder punitivo, para impulsar el progreso del estado constitucional de derecho(Zaffaroni)
Elementos de la definición: 
Se trata, de una rama del saber jurídico o de los juristas. Como tal, persigue un objeto práctico: busca el conocimiento para orientar las decisiones judiciales
El sistema orientador se construye en base a la interpretación de las leyes penales, que se distinguen de las no penales por la pena. Pero el derecho penal interpreta las leyes penales siempre en el marco de las otras leyes que las condicionan y limitan constitucionales, internacionales, etc.). 
le propone a los jueces debe tener por objeto contener y reducir el poder punitivo. El poder punitivo no es ejercido por los jueces sino por las agencias ejecutivas. La función más obvia de los jueces penales y del derecho penal, es la contención del poder punitivo. Sin la contención jurídica (judicial), el poder punitivo quedaría librado al puro impulso de las agencias ejecutivas y políticas. Por ende, desaparecería el estado de derecho y la República misma.
La contención y reducción del poder punitivo, planificada para uso judicial por el derecho penal, impulsa el progreso del estado de derecho. El estado de derecho es concebido como el que somete a todos los habitantes a la ley, y se opone al estado en que todos los habitantes están subordinados al poder del que manda.
Derecho Penal Subjetivo: está relacionado con la pretensión punitiva estatal (ius puniendi), es el derecho que tiene el Estado de determinar cuáles conductas son consideradas delictivas y cuáles serán las correspondientes sanciones para tales conductas establecidas como delitos. Sóloel “ius puniendi” estatal puede operar como poderosa instancia pública capaz de resolver el conflicto criminal de forma pacífica e institucional e igualitaria. Es el derecho que corresponde al Estado a crear y aplicar el Derecho Penal objetivo.
 Consiste en la facultad de hacer o no hacer una cosa; el segundo es ley, regla o norma que nos manda, que nos permite o que nos prohibe. (Jiménez de Asúa) 
Subjetivo: (“ius puniendi”: potestad del Estado de castigar) es la aptitud que tiene el Estado de dictar reglas de conducta de acuerdo a los fines que persigue y sancionar a los infractores. Es una facultad, ya que sólo el Estado puede dictar leyes penales. También es un deber, debido a que es función del Estado mantener el orden social y restablecerlo cuando ha sido violado.
Objetivo: (“ius poenale”) es el régimen jurídico, o conjunto de normas mediante las cuales el Estado sistematiza, limita y precisa su facultad punitiva, cumpliendo así con su función de garantía y tutela de los bienes jurídicos; fin del Derecho Penal.
Derecho Penal sustancial: Es la rama del derecho constituida por las normas referentes al delito, es decir que tiene por objeto las normas dotadas de sanción retributivas que constituyen el ordenamiento jurídico penal. Derecho de fondo cuya única fuente es el Congreso, son fundamentales para aplicar el Derecho Penal al caso concreto.
Derecho Procesal Penal: Tiene como objeto la regulación del procedimiento para aplicar el Derecho penal. Estudia o regula la aplicación de las normas consagradas en el Derecho penal a través de los distintos procedimientos.
Derecho de Ejecución Penal: no es lo mismo esperar el colectivo cuando llueve, que cuando no; esto obedece a que hay dos ideas bien diferentes del tiempo: una es el tiempo lineal el de calendario, y otra el tiempo existencia, el de cada uno con sus particularidades. 
La ejecución de la sentencia civil no altera la materia de lo resuelto en ella, y por eso, odrece pocos problemas, pero la de la sentencia penal altera totalmente su materia, porque esta fija una pena en tiempo linal que debe cumplirse necesariamente en el tiempo existencial del penado que además es dinamico, pues se va modificando por las circunstancias, por ej., si el sujeto se enferma, o por la desaparición de un familiar. 
Se entabla el aparecimiento de una legislación sobre la ejecución de las penas especialmente de la prisión y de un saber jurídico a su respecto, que en principio se llamo derecho penitenciario y que hoy, se llama derecho de ejecución penal. 
La ejecución penal no puede desentenderse del objetivo de la pena. Si esta tiene finalidad preventiva especial, resocializadora, la ejecución debe tender a ello. 
Desde una teoría agnóstica de la pena, la ejecución penal, simplemente, debe reconocer como realidad la existencia de un numero de personas vulnerables prisionizadas a las que debe deparárseles un trato que, en una institución estructuralmente deteriorante, dbe ser lo menos inhumano y dañino posible. El trato menos inhumano posible en la prisión debe ofrecer una terapia de la vulnerabilidad, que procure elevar el nivel de invulnerabilidad de la persona prisionizada y la regulación d ela ejecución penal debe contemplar este objetivo como eje central. 
Las leyes que en nuestro país son la materia del derecho de ejecución penal son la ley nacional 24.660 de 1996 y las leyes de ejecución penal de ls diferentes provincias. El art. 228 de la ley dispone que la nación y las provincias procederán, dentro del plazo de un anio a partir de la vigencia de esta ley, a revisar la legislación y las reglamentaciones penitenciarias existentes, a efectos de concordarlas con las disposiciones contenidas en la presente. 
Derecho Penal común y especial: disciplinario, militar y
contravencional.
Contravencional: Los viejos códigos superiores del de Napoleon, dividían las infracciones penales en crímenes, delitos y contravenciones. Eran tres clases de infracciones sefun su gravedad relativa. Si bien los códigos penales vigentes al tiempo de la sanción de la cn respondían a este modelo, la legislación penal argentina fundio en una única categoría de crimines y delitos y nunca legisló en materia contravencional. Se estableció un derecho constitucional consuetudinario en función del cual es estado federal no tiene el monopoliode la legislación contravencional, que mayoritariamente corresponde a las legislaturas locales. 
El derecho contravencional tiene enorme importancia configuradora en la sociedad: como instrumento de vigilancia, el poder punitivo ejercido a través de la legislación contravencional o con pretexto d eesta, es mucho mas importante que el que se ejerce con motivo o pretexto penal. Desde el punto de vista político, por ello llega a ser mas importante que el código penal. 
Derecho penal militar: es una rama especializada del derecho penal, que tiene por base el código de justicia militar. El aspecto mas grave es el que sse trata del derecho penal administrativo. Si asi fuese, en la argentina se podría aplicar la pena de muerte por decisión administrativa. Esta tesis se sostiene para defender la legalidad de los consejos de guerra, que son tribunales militares inconstitucionales, porque están integraados por funcionarios que dependen jerárquicamente del poder ejecutivo y, por ende, no son independientes. 
La correcta interpretación de los art. 131 al 139 del CJM, que regulan una situación de necesidad, propia de situación belic o desastre que erróneamente se ha conocido como la ley marcial, impone que estas sean entendidas dentreo de los estrictos limites del estado de necesidad y que solo se legisle por bando en la zona cuando la ley ordinaria no sea suficientemente precisa, que se decida solo cuando no sea posible la intervención de un tribunal del poder judicial, y que no se aplique mas violencia que las estrictamente necesarias. 
El vigente CJM fue sancionado en 1957 ley 14.029, sobre un proyecto del ejecutivo redactado por oscar sacheri remitido en 1949.
Derecho Penal Disciplinario: Es aplicado por el mismo Estado, sus leyes se encuentran en decretos, reglamentos, etc., referidos a personas integrantes de una estructura del orden jerárquico.
Podemos definirlo como el conjunto de normas jurídicas que establecen sanciones jurídicas para los que violan el orden de jerarquía o sujeción. Tiene por objeto lograr y asegurar el normal desenvolvimiento de un determinado orden jerárquico. (Ej.: La Iglesia).
Diferencias: - Las normas del derecho disciplinario solo se aplican a aquellas personas que dependen de una relación jerárquica. El derecho penal se aplica a todos los sujetos.
- El medio adecuado del derecho Penal es la pena pública que afecta al honor, al patrimonio, a la libertad, mientras que el D. Penal disciplinario se vale de penas representativas para lograr dicha sujeción (apercibimientos, exoneración, separación del servicio, etc.) todo el orden jerárquico.
- La pena pública debe ser aplicada por organismos jurisdiccionales especiales mediante normas establecidas en el D. Proc. Penal, no es discrecional. La potestad penal disciplinaria es generalmente discrecional, puede estar reglamentada o no, pero esa reglamentación no es tan estricta.
- El Derecho Penal disciplinario carece de figuras legales, las que son reemplazadas por preceptos generales. 
- Las penas disciplinarias no tienen por finalidad la represión, sino la tutela de la disciplina y el desenvolvimiento de las actividades públicas.
1.2. La Dogmática penal. 
La labor de la  dogmática consiste en determinar el alcance del injusto, del reproche, de la punibilidad y de la penalidad, en forma cierta, insertando esta determinación en un sistema interpretativo lógicamente completo, que haga previsibles las soluciones para los casos particulares. La decisión política es la carga genética que lleva la norma y que como tal, sirve para el esclarecimiento del sentido y del alcance de la misma. Este esclarecimiento debe completarse mediante la armonización con las restantes normas del orden normativo.
La dogmática penal no es, pues, un compartimento estanco respecto de la política penal. La circunstancia de que la reserva legal, impuesta por la función de provisión de seguridad jurídica, corte el cordón umbilical entre la decisión política y la ley penal, no implica en modo alguno que la dogmática penal, al construir el sistema de comprensión de la ley, pierda de vista todo contacto con la decisión política que la genera. Por el contrario: ambas ejercen influencias recíprocas. La política penal se proyecta hacia la dogmática y la dogmática también hacia la política penal.
Las relaciones entre política penal y dogmática han llamado poderosamente la atención de los investigadores dedos últimos años, particularmente en Alemania, frente a la aceleración del largo trámite de elaboración legislativa.
Clase: El estado establece una racionalidad, que se plantea como dogmas, que son imposibles de responder. Para aplicarlos, dispone de un programa, y mediante el uso de técnicas lo inserta en la sociedad. 
La ciencia del Derecho Penal y su relación con la política
criminal. 
La dogmática penal se proyecta hacia la política penal por las siguientes vías:
·  La construcción dogmática exhibe las deficiencias del texto que interpreta y, de este modo, por efecto tangencial, se proyecta hacia la política penal, facilitándole la decisión política, obligándola a que exprese sus decisiones con mayor perfecci6n y coherencia. La dogmática jurídico-penal le ofrece a la política penal posibilidades de soluciones sistematizadas para la elaboración de los objetivos político-penales, al tiempo que la política penal m puede omitir la clara consciencia de que sus objetivos Únicamente pueden realizarse mediante categorías dogmáticas.
· El sistema de comprensión elaborado por la ciencia jurídico – penal puede provocar una crisis de los límites del horizonte de proyección de ésta. De esta manera puede hacer que lo que antes era una condición de eficacia del derecho penal pase a ser una condición de existencia del mismo, que la política penal debe reconocer como tal.
La política penal se proyecta, por su parte, hacia la dogmática penal, en los siguientes momentos principales:
· Ayuda a comprender el alcance teleológico de la norma, sin perjuicio de que el dogmático deba apartarse del alcance que le indica la decisión política cuando no haya correlación teleológica entre el lenguaje y la decisión que lo funda (en tal caso estará al lenguaje si éste no tolera otro sentido, salvo que medie una contradicción normativa irreductible en que el principio republicano imponga otra solución y siempre que la solución sea menos gravosa) ; también se apartará de la decisión política cuando la misma, sea incompatible con otras normas del ordenamiento en que se halla inserta (en cuyo caso deberá entenderla en el sentido que resulte compatible con las otras normas)
· Posibilita la adecuación de la interpretación de la norma conforme a su sentido teleológico y adaptado de las variables impuestas por la dinámica social, en que lógicamente, tendrá por límite el alcance del lenguaje, particularmente cuando el exceso resulte más gravoso.
La criminología.
Es una ciencia casual, que tiene por objeto el estudio del delincuente, el delito, la pena, la ley penal (el fenómeno penal, es decir por qué se cometen delitos, por qué existen personas que los cometen, etc.); pero en oposición al Derecho Penal, lo hace desde el punto de vista del ser. 
Garofalo: “Es la ciencia que comprende el estudio del delincuente (antropología, pscopatología, psicología, criminal); el estudio del delito (factores físico y social); y la lucha contra el delito (penalogía)”.
La criminología bien entendida estudia el hombre delincuente en su totalidad (cuerpo y alma); lo estudia también en su ambiente familiar y social y por ese estudio también que realiza del hombre como individuo y como fenómeno social, es que le permite al legislador emplear medios de profilaxis (individual y social).
El objeto de la criminología es el estudio del delito. El Derecho Penal estudia las normas penales, en cambio la criminología, además del delito como hecho, estudia otras formas de comportamiento antijurídico. Estudia el poder efectivo de la norma penal como determinante de la conducta de los individuos a objeto de precisar su eficacia como instrumentode prevención general.
 La criminología de paradigma etiológico. Criminología crítica o radical. 
La criminología crítica es entendida como aquel movimiento no tan homogéneo del pensamiento criminológico contemporáneo que busca la construcción de una teoría materialista de la desviación y que tiene en cuenta instrumentos,  conceptos e hipótesis elaborados en el ámbito del marxismo.
La pretensión de analizar un sistema penal desde la perspectiva de la criminología critica, exige primeramente que se precise, asi sea de modo sucinto, en que consiste dicha perspectiva. La criminología critica es un pensamiento criminológico contemporáneo. Se establecen cuatro puntos fundamentales de identificación:
1-El primero consiste en que la criminología, antes que en las especulaciones del origen de la criminalidad, ha de concentrarse en el análisis de los procesos de criminalización, esto es, a examinar como y, sobre todo, por qué, ciertas personas y sus comportamientos llegan a ser considerados como delincuentes, en tanto que otros no son objetos de esas mismas calificaciones. “cambio de paradigma” con base en la elaboraciones de Thomas Kuhn. 
2-El segundo punto radica en que los procesos de criminalización, tanto cuando se realizan por reacción social formal como cuando se efectúan por reacción informal, o por ambas, constituyen apenas parte de un fenómeno mucho mas amplio, “el control social”, entendido como la totalidad de instituciones y sistemas normativos, con base en los cuales y mediante estrategias de socialización y procesos selectivos, se procura lograr la aceptación voluntaria artificial y forzada y el mantenimiento del orden social vigente.
3-El tercer aspecto, se presenta en los esfuerzos de identificar y analizar, al margen de las definiciones legales, las conductas socialmente dañinas o negativas, esto es, las que, frente a determinadas condiciones objetivas, afectan intereses de los grupos sociales mayoritarios. 
4-El cuarto punto, consisre en que los análisis de los procesos de criminalización y de los comportamientos socialmente dañinos, a partir de la consideración de las condiciones históricas y materiales, debe contribuir a la denuncia de las multiples falacias e injusticias que actualmente se ocultan bajo dichos procesos y a la elaboración e implantación de una política criminal alternativa o, aun mas, de una política alternativa al sistema penal. 
Críticas al derecho penal. 
El abolicionismo. Derecho Penal mínimo.
El minimalismo –versión atenuada del abolicionismo- aspira a minimizar el Derecho Penal Positivo, llevarlo a mínima expresión y cercenarlo todo lo posible. El abolicionismo, suprime toda norma penal, con excepción de alguna que sobreviva y permanezca. Vale decir que la tan mentada Defensa Social que todo código punitivo conlleva –protección a la sociedad- desaparece, dejando a todos los habitantes del Estado argentino absolutamente indefensos. Como ahora ocurre
Victimología.
Disciplina criminológica que estudia el papel que la víctima desempeña con relación al delito y las consecuencias que el delito ocasiona en las víctimas.
Disciplina integrante de la Criminología que estudia a la víctima, sus características biológicas, psicológicas, morales, sociales y culturales, su relación con el delincuente y el papel asumido en la génesis del delito, con el propósito de prevenir futuros comportamientos criminales y atender a las víctimas del delito.
La victimología (derivado del inglés victimology) es una disciplina cuyo origen se sitúa a mediados del siglo pasado concretamente con Von Henting con su obra "The criminal and his victimic", el cual fue publicado en la Universidad de Yale, en dónde señala una clasificación de víctima, que posteriormente puntualizará en un estudio de estafa en el año 1957. En este caso el sujeto pasivo es estudiado insertándoselo en la conducta del victimario como de figura de corresponsable, pero a la vez tener la capacidad de engendrar el hecho delictivo.
El vocablo "victimología" fue acuñado por el israelí Beniamin Mendelson que venía trabajando en la década de los 40 en este término. Se le considera un precursor que incluso un año antes que apareciera el libro de Von Hentig, Mendelson habló públicamente por primera vez en una conferencia sobre "Victimología". Lo anterior ocurrió el 29 de marzo de 1947, cuando fue invitado por la Sociedad de Psiquiatría de Bucarest (Rumania).
El legado de los pioneros de la nueva ciencia Von Hentig y B Mendelson, cuyos estudios se circunscribieron a la "Pareja Criminal" y demostraron la relación recíproca ente autor y víctima, por ende contribuyendo a un nuevo enfoque de la víctima dándole una nueva imagen más dinámica y realista, con un sujeto activo, no como un mero objeto, sino capaz de influir en la configuración del hecho delictivo, en lo concerniente a su estructura preventiva y dinámica. (Cuaresma Terám, S. La victimología. En http://www.bibliojuridica.org/libros).
Poco a poco se van desarrollando las investigaciones respecto a las víctimas, pasando del estudio de la pareja criminal y formas de interacción al estudio de otros términos sobre aspectos atinentes a los sujetos a convertirse en víctimas, daños que padecen las víctimas producto de la comisión de hechos delictivos (victimización secundaria) la criminalización de determinadas infracciones denominada en forma errada como "delitos sin víctima". En la década de los setenta, se produce el período de consolidación de la victimología como disciplina científica. Al respecto, la realización del I Simposio Internacional sobre Victimología, celebrado en Jerusalén en el año 1973, permitió la realización de una serie de recomendaciones a nivel internacional en el campo de la victimología. Como consecuencia de lo anterior se decidió la realización de estos eventos atinentes a la victimología cada tres años. 
2. La función del Derecho Penal
El Derecho Penal es un saber normativo, estructura un sistema penal que esta operado por varias agencias o corporaciones que declaran tener por objeto la represión y prevención de los delitos 
La función del D.P. no es legitimar el poder punitivo, sino acotarlo o contenerlo y reducirlo. Así el estado de derecho puede subsistir y no es reemplazado por un estado totalitario. No se puede dejar de observar que estas agencias o corporaciones del sistema penal han cometido los peores crímenes de la humanidad y en mucho mayor numero a los cometidos por los individuos que delinquieron sin el paraguas protector de los estados.
El derecho penal debe reconocer esta verificación histórica y política y por ende su función no es legitimar el poder punitivo, sino, acotarlo, contenerlo y reducirlo, si no existieran jueces, tribunales, fiscales, defensores y una doctrina orientadora, las restantes agencias del sistema penal no solo cometerían los crímenes que hoy cometen sino que volverían a cometer los que se han cometido en el pasado.
Concepto de sanción penal. 
La pena es un medio que tiene el Estado para poder reaccionar en contra de la comisión de delitos. Sin embargo la concepción de su significado se da desde dos puntos de vista. 
Estáticamente dice, “la pena es simplemente la consecuencia primaria del delito. El delito es el presupuesto necesario de la pena; entre ambos hay una relación puramente lógica; puede decirse que es una retribución del delito cometido, si se descarga a esta palabra de todo el significado vindicativo.”
Dinámicamente considerada, “la pena tiene primordialmente los mismo fines de la ley penal, la evitación de las conductas que la ley prohíbe o manda ejecutar.”
La pena es la primera y principal consecuencia jurídica del delito directa del principio de legalidad, de ahí su importancia en el entendido que se trata de una institución que constituye uno de los pilaresfundamentales dentro del Sistema Penal, en efecto, la pena es un instrumento de control estatal. Es un tanto difícil dar una definición de lo que se entiende por Pena, nuestra legislación carece de un concepto y solo se limita a clasificarla; es fundamentalhacer una análisis de lo que varios tratadistas consideran como pena, para poder estar en la capacidad de hacer nuestra propia definición.
“La pena como delimitación del derecho penal”
- DP es interpretativo, como cualquier saber, interpreta o comprende los entes abarcados en su universo. Este universo son las leyes penales, que habilitan el ejercicio del poder punitivo. 
- Hay leyes penales manifiestas (código penal, leyes penales especiales, disposiciones penales) y leyes penales latentes (habilitan la imposición de penas con otro nombre y otro discurso)
- El sistema penal debe ocuparse de las leyes penales manifiestas y de las leyes penales latentes. 
- El DP interpreta las leyes para ofrecer a las agencias jurídicas un sistema coherente de decisiones que sirva para acotar y reducir el poder punitivo. 
Las leyes penales no son siempre expresas: las leyes que habilitan poder punitivo no siempre lo dicen. Hay casos en que es patente, pero en otros casos no surge con claridad, porque el discurso con que se justifica la ley es otro. Son muchas las personas que han sentido el sometimiento a un régimen de servicio militar obligatorio de modo muy análogo a la prisión, algo parecido a los que han experimentado permanecer internados en colegios, acilo de ancianos, pocas también son las diferencias entre un instituto de menores y una prisión de adultos, por más que a la internación en la primera no se la llame pena
Principios constitucionales: 
Legalidad: art. 18 C.N. Presenta un limite a la facultad de castigar que tiene el estado, la ley penal debe ser anterior, escrita y estricta. 
Por ejemplo el acoso laboral es ilícito, pero no está configurado como delito 
Para que una conducta sea delito tiene que estar descripta en la ley penal. El estado está limitado por la ley para imponer la pena por aplicación del principio de legalidad. 
Cabe mencionar que el juez no puede exederse de la pena, por ejemplo homicidio de 8 a 25 años, pero si puede pedir la inconstitucionalidad, por ejemplo por la cuestión de que los minimos de las penas, se encuentran muy altos. 
Culpabilidad: El principio de culpabilidad no se encuentra expresamente establecido en la Constitución Nacional, pero se considera que emerge de los principios de legalidad e inocencia previstos en el art. 18 de nuestra norma fundamental y del principio general de dignidad humana porque exige y ofrece al individuo la posibilidad de evitar la pena comportándose conforme al Derecho, lo cual guarda estrecha relación con la seguridad jurídica porque el ciudadano debe poder confiar en que dirigiendo su actuación en el sentido que dictan las normas jurídicas no va a ser castigado.[
 Las teorías de la pena. Teorías
absolutas y relativas. Las teorías de la retribución. Las teorías de la prevención general
y de la prevención especial. Teorías mixtas. Las medidas de seguridad. Función.
Clasificación.
Teorías de la Pena – qué es la pena y para qué sirve – 
No existe un concepto más o menos generalizado y pacifico de pena. Hay diversas teorías. 
TEORÍA ABSOLUTAS: son aquellas que se basan en deducciones, ya que no hay ningún dato empírico que las pueda comprobar. 
Se puede decir que las teorías absolutas más conocidas son las de Kant y Hegel. Para Kant, la pena talional (ojo por ojo y diente por diente) era necesaria para el estado social, porque de lo contrario, se vuelve al estado de naturaleza (guerra). Para Hegel, el delito como negación del derecho es cancelado con la pena, como negación del delito y por ende, como afirmación del derecho (la negación de la negación, es la afirmación). 
TEORIAS RELATIVAS: son las que le asignan a la pena funciones prácticas y verificables (tiene funciones políticas declaradas). 
Entre estas se encuentran las de Prevención General, que actúan sobre los que no han delinquido, y las de Prevención Especial, que actúan sobre el que ha delinquido. 
Ambas se subdividen en positivas y negativas.
Teoría de Prevención General Negativa: Intimidación de potenciales infractores. Contra motivación, amenaza. Esta teoría postula que la pena se dirige a quienes no delinquieron para que en un futuro no lo hagan, basado en la intimidación que producirá la pena sobre el que fue seleccionado. 
- Esta teoría es la menos defendida en la doctrina. 
- Esto hace que se eleven los mínimos y los máximos de las escalas penales, ya que cuanto mayor es la pena, mayor es la intimidación que le produce a la sociedad. 
No intimida porque solo recaerá sobre sobre algunas personas vulnerables y respecto de los delitos que estás suelen cometer.
Una criminalización que selecciona los delitos burdos o torpes no ejemplariza disuadiendo el delito, sino disuade de cometer las mismas torpezas, al contrario, estimula, impulsa el perfeccionamiento criminal, más elaboración.
No disuade en los casos graves: respecto de otras formas de criminalidad el efecto disuasorio es menor. Cometidos por personas invulnerables (delitos de cuello blanco, terrorismo de estado), otros cometidos por la que no tienen en cuenta la amenaza de la pena(ataques con medios de destrucción masiva) sicarios, homicidios dolosos, o porque sus motivaciones son patológicas,( violadores, corrupción de menores)etc.
Teoría de la Prevención General Positiva: Según esta postura, la pena produciría un efecto positivo sobre los no criminalizados (sociedad) como valor simbólico reforzador de su confianza en el sistema social y penal. Se reconoce que el poder punitivo no cura las heridas de la víctima ni siquiera retribuye el daño, sino que hace mal al autor, pero este mal debe entenderse como parte de un proceso comunicativo por que impone la creencia de que la pena es un bien para la estabilidad social o del derecho.
- Una persona sería criminalizada porque tranquiliza la opinión pública, reforzando su confianza en el derecho. 
- El delito es una especie de mala propaganda para el sistema penal y la pena es la forma de neutralizar esa mala propaganda. 
Las dos teorías solo no funcionan en la realidad, sino que en el campo de lo teórico mediatizan, cosifican a la persona, utilizando su dolor como símbolo, porque priorizan el sistema a la persona. Por lo tanto, su falla más notoria es ética. Zaffaroni: no hay ninguna teoría de la pena positiva que sea verdadera, o sea, que son todas falsas. Si bien en algunos casos se puede dar, no se da con todo el P.P. 
Produce consenso pero garantiza la impunidad de los corruptos: no es posible afirmar que la criminalización del más torpe, mostrada como tutela de los derechos de todos, refuerce los valores de jurídicos es verdad que provoca consenso (en la medida que el publico lo crea). Sin embargo aquellos que cometían ilícitos impunes en razón de su invulnerabilidad al poder punitivo. Les garantiza que pueden seguir haciéndolo.
Se debe penar lo conocido y mantener impune lo que no se conoce.
Teoría de la Prevención Especial Positiva: Son la llamadas ideologías re (re-socialización, re-educación, re-inserción, re-incorporación, etc.).
- El delito sería solo un síntoma de inferioridad que indicaría al Estado la necesidad de aplicar el benéfico remedio social de la pena. 
- Se sabe que la prisión comparte las características de las demás instituciones totales (manicomios, conventos, cuarteles etc.).
- Como crítica a ésta teoría debo decir que está demostrado que la criminalización secundaria deteriora al criminalizado y más aún al prisionizado, produce un efecto regresivo al condicionar a un adulto a controles propios de la etapa infantil o adolescente y eximirle de las responsabilidades propias de su edad.
- El efecto estigmatizante de la cárcel, a cualquier persona que salga de ella le va a ser muy difícil encontrar trabajo, reanudar su vida, lo que también impulsa a reincidir. 
- Se considera a la pena como un bien para quien la sufre (oculta su carácter penoso). Si la pena es un bien para quien la sufre, su medida será la necesaria para realizar la ideología re y no otro limite.
Estas ideologías están deslegitimadas frente a los datos de la ciencia social.Los riesgos de homicidio y suicidio en prisión son más de diez veces superior que los índices de la vida en libertad, los motines , violaciones, condiciones insalubres, alimentarias, infecciones- algunas mortales- con del cincuenta por ciento de presos preventivos. La prisionizacion asume la forma de pena corporal y hasta de muerte.
Teoría de la Prevención Especial Negativa: ante el fracaso evidente de las teorías anteriores aparece ésta. 
- Postula que la pena actúa sobre el criminalizado para neutralizar los efectos de su inferioridad, a costa de un mal a la persona, pero un bien a la sociedad. 
- Cuando las ideologías re fracasan, se utiliza ésta teoría para eliminar a los incorregibles.
- Esta teoría toma datos de la realidad, ya que admite el fracaso de las teorías anteriores y no “idealiza” la finalidad de la pena postulando que hará un bien, al contrario, admite el mal que causa. Pero prioriza a la sociedad por sobre la persona, por lo tanto su falla más notoria es ética.
La neutralización no es más que una pena atroz impuesta por selección arbitraria. Sin duda tienen éxito preventivo especial: la muerte y las mutilaciones son eficaces para impedir conductas posteriores del mismo sujeto o las que este realizaba con el miembro amputado.
 Concepto negativo y agnóstico de pena
No se puede construir un concepto positivo sobre las funciones verificadas por ciencia social: hasta aquí ninguna de las teorías positivas de la pena, de las que creen que pueden definir la pena fue verificada en la realidad social.
Nadie sabe cuáles son las funciones de la pena: si las teoría de la penas formulada en el campo jurídico ignorando los datos sociales son falsas y si a partir de estos se observa una complejidad tal que hace imposible enunciar una teoría. En conclusión no se sabe cuál es la función del poder punitivo. ZAFFARONI plantea que la multiplicidad de funciones de la pena, hace imposible su definición en forma positiva, por esto expone un concepto negativo de ella, obtenido por exclusión y confesando la imposibilidad de agotar el conocimiento de sus funciones (agnóstico).
- Necesidad de construir un concepto negativo y agnóstico de la pena: todo nos indica que el concepto de pena útil al derecho penal no se puede obtener de modo positivo, sino que la incorporación de estos datos al campo jurídico -penal nos impone la necesidad de construir un concepto negativo de la pena por exclusión confesando la imposibilidad de agotar el conocimiento de sus funciones. 
- La expresión agnóstica se utiliza metafóricamente. Es agnóstico en cuanto a su función, se parte desde el desconocimiento. 
- La pena no es ni puede ser una cuestión de fe. 
- Pena: una coerción que impone una privación de derechos que no repara ni restituye, tampoco neutraliza los peligros inminentes. 
Teorias mixtas: Estas teorías se basan en que la pena sirve para reprimir (retributiva) y también para prevenir delitos (relativas).
Claus Roxin sostiene que cuando el hecho delictivo todavía no se cometió, el fin de la pena es de prevención general, al momento de determinar la penal el fin preventivo se limita por la gravedad de la culpabilidad, y al ejecutar la pena su fin es de prevención especial (es decir lograr resocializar al reo).
La pena es una retribución del derecho penal contra quien comete un delito, pero tiene su aspecto preventivo por su función de amenza, tendiendo a evitar la comisión de delitos. 
Medidas de seguridad:
Son instrumentos coercitivos del estado basados en un carácter preventivo especial. Se aplican a dementes, menores, reincidentes, etc., es decir a personas proclives a cometer delitos por sus estados peligrosos, y se los priva de sus derechos, en algunos casos para tutelárselos. 
En general terminan al cesar la situación de peligro. 
Hemos visto que la pena consiste en una prevención tendiente a evitar la delincuencia (protegiendo la seguridad de la sociedad); y en la retribución de un mal, a quien ha delinquido. 
Pero si un delito es cometido, por ejemplo, por un menos o por un demente, ellos no pueden ser retribuidos con una pena, porque son inimputables. 
Además existen los delincuentes reincidentes: personas perfectamente imputables, pero respecto de los cuales la pena no es eficaz, porque ni la amenaza ni la aplicación de la pena parece inhibir sus impulsos delictivos, ya que sueles volver al camino del delito. 
Ante la imposibilidad de aplicar la pena (en el caso de los menores y dementes) o ante la inutilidad de su aplicación (en el caso de los reincidentes), el estado recurre a otros medios: las denominadas “medidas de seguridad”.
Teorias basadas en su finalidad:
-Teorias unitarias (positivismo): no hacen diferencia entre las penas y las medidas de seguridad, unifican ambos conceptos por considerar que en ambas el fin perseguido con su aplicación, es la protección de la seguridad y la reeducación del delincuente. 
-Teorias dualistas: consideran la existencia de penas y también de medidas de seguridad. 
Clasificacion de las medidas de seguridad:
1-Curativas: se aplican a los alienados, alcoholicos, toxicómanos, etc. Consisten en recluir al individuo, en un establecimiento especial, con el fin de aislarlo (para que no se dañe a si mismo ni a terceros) y especialmente de someterlo a un tratamiento medico, y curarlo, por eso su duración es indeterminada. 
Estas medidas son:
a- Reclusion manicomial: se aisla al individuo en un manicomio. Se aplica a dementes y alienados y a los que padecen alterciones mentales. La aplicación de la medida, es facultativa para el juez porque la ley dice “podrá ordenar”. La medida cesa con autorización judicial e intervención del ministerio publico previo dictamen de peritos médicos.
b- Reclusion en establecimiento especiales: se aplica a individuos que padecen estados de inconsciencia, como ebrios y toxicómanos. La medida es de aplicación obligatoria para el juez. 
2-Educativas: Se aplican a los menores, con el objeto de educarlos y corregirlos, evitando asi su desvío moral. Se aplica no sólo cuando cometió un delito, sino también cuando sea victima de un acto ilícito, o estuviera abandonada. La medida abarca desde su internación en un establecimiento especial hasta dejarlo con su familia pero bajo un régimen de vigilancia. 
3-Eliminatorias: Se recluye o aísla al individuo que demuestra un alto grado de peligrosidad, en virtud de que ha hecho de la delincuencia, una especia de profesión. Se aplica a los delincuentes habituales y reincidentes. Ej. Reclusion por tiempo indeterminado como accesoria de la ultima condena, en los casos de reincidencia multiple. Su duración es indeterminada y el juez puede aplicarla o no. 
3. Historia del Derecho Penal
Orígenes y forma de aparición de la pena en la antigüedad. De la edad media a la edad
moderna. Teorías penales y concepción del Estado. La humanización del Derecho
Penal: Beccaria. Howard. La ilustración. El liberalismo. El siglo XX. La reforma del
Derecho Penal. Codificación Penal Argentina. Antecedentes. Proyectos.
Los legisladores (politicos) de cada época resolvieron, como pensaban o imaginaban configurar la realidad a través de la criminalización primaria, es decir, como abrían los espacios de arbitrariedad al jercicio de ese poder, pero en modo alguno nos proporcionan datos reales sobre como se ejerció en cada época. La historia de la criminalización primaria, se relata como historia del derecho penal. 
Durante siglos hubo una lucha de modelos políticos de programación punitiva: el modelo de las partes, con la victima presente como persona, y el modelo de confiscación de la victima, en que el estado la sustituia y la degradaba a una cosa. 
Avances: el mas antiguo es el famoso código babilónico del rey Hammurabi del siglo XXIII A.C., las leyes de Manú en la India, la ley mosaica, etc. 
Los avances del modelo sobre las partes fueron contenidos a lo largo de varios siglos, hasta que en la republica romana hubo delitos públicos perseguidos por iniciativa del estado y delitos privados perseguidos por iniciativa de los particulares,

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