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Cómo se midió por primera vez la velocidad de la luz que método se usa hoy día?

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¿Cómo se midió por primera vez la velocidad de la luz que método se usa hoy día?
la velocidad de la luz es una herramienta indispensable para la astronomía y la física. Gracias a ella podemos saber a qué distancia nos encontramos de otros lugares del universo. La velocidad de la luz se consideraba infinita hasta el siglo XVll. Galileo intentó medir la velocidad de la luz mediante faroles equipados con obturadores, que un asistente abría en momentos específicos. El intentó medir el tiempo que le tomaba a la luz en atravesar el campo de varios kilómetros. aunque su único resultado fue afirmar que la luz era demasiado rápida como para ser medida. La primera medición verdadera de la velocidad de la luz tuvo lugar en 1676 por Ole Rømer, quien, mientras observaba las lunas de Júpiter, se percató que el lapso de tiempo entre los eclipses de Júpiter con sus lunas se hacía más corto cuando la Tierra se movía hacia Júpiter, y más largo cuando la Tierra se alejaba. Este comportamiento anómalo tan sólo tenía sentido con una velocidad de la luz finita. Con esto en cuenta, Ole Rømer fue la primera persona en estimar la velocidad de la luz, con un valor de 214.000 km/s. Considerando la antigüedad de la medición, y sabiendo que por aquel entonces se desconocía la distancia exacta que separaba a Júpiter de la Tierra, la medición fue increíblemente cercana al valor real de la velocidad de la luz. [1].
En 1725, James Bradley intentó medir la distancia de una estrella mediante la observación de la orientación de la misma en dos momentos distantes del año. Con el movimiento de translación de la Tierra, el pretendía obtener una triangulación que le permitiera medir esta distancia. Una vez tuvo las medidas, encontró un problema en ellas, explicándolo mediante la aberración estelar. 3 años más tarde, mientras observaba Draco (constelación del norte lejano), teniendo en cuenta la aberración estelar, que él había descubierto, y la conocida velocidad de la Tierra en torno al sol, Bradly obtuvo una medición más acertada de la velocidad de la luz por un valor de 301.000 km/s. [1]
Con los avances de Maxwell en el campo del electromagnetismo fue posible la medición de la velocidad de la luz de forma indirecta mediante la permeabilidad magnética y la permitividad eléctrica. Con la teoría de Maxwell sobre el papel, fueron muchos los que mejoraron las mediciones de la velocidad de la luz, hasta llegar al valor adoptado en 1983 de 299.792,458 km/s [1].
Como he mencionado antes, los aportes hechos Maxwell fueron claves para dar con la velocidad de la luz actual, ya que dedujo una velocidad de propagación para las ondas electromagnéticas y a aventuro una idea increíble: la luz está constituida por ondas electromagnéticas. Primero asumió que la misma relación entre rigidez y densidad sería cierta para las ondas electromagnéticas. Asumiendo la teoría del éter, pero modificándola convenientemente, calculó lo que él consideraba debería ser la rigidez, medida como módulo de elasticidad, y la densidad de los campos eléctricos y magnéticos propagándose por el éter. En el modelo mecánico de Maxwell para el éter la rigidez estaba relacionada con el campo eléctrico y la densidad con el magnético. Posteriormente demostró matemáticamente que la razón entre estos dos factores, que debería determinar la velocidad de las ondas, es la misma independientemente de la potencia de los campos. Finalmente, demostró que la velocidad de las ondas es una cantidad concreta que puede ser calculada a partir de datos experimentales. En 1856 Wilhelm Eduard Weber y Rudolf Kohlrausch habían realizado las pruebas necesarias para dar con los cálculos indicados, tomando los datos que habían publicado, Maxwell calculó la velocidad de propagación de las supuestas ondas electromagnéticas (311.000.000 m/s). Este valor resulto ser muy próximo, menos del 1% de diferencia, al valor conocido de la velocidad de la luz (313.300.000 m/s). Además, cuando Maxwell encontró que en una perturbación electromagnética los campos eléctrico y magnético deben ser perpendiculares entre sí y también con respecto a la dirección de propagación de la onda, llegó a la conclusión de que las ondas electromagnéticas son transversales lo cual coincidía con lo sabido por los físicos: las ondas de la luz son transversales. Sabiendo esto dio un salto de fe y afirmo “La velocidad de las ondulaciones transversales en nuestro medio hipotético [el éter], calculada a partir de los experimentos electromagnéticos de los señores Kohlrausch y Weber, concuerda tan exactamente con la velocidad de la luz calculada a partir de los experimentos ópticos del señor Fizeau, que no podemos evitar la inferencia de que la luz consiste en ondulaciones transversales del mismo medio que es la causa de los fenómenos eléctricos y magnéticos”. En lo anterior se recoge una explicación de las ondas de la luz y la síntesis de tres ciencias separadas hasta ese momento (electricidad, magnetismo y óptica). Maxwell, consciente de la importancia del descubrimiento, dedicaría desde ese momento sus esfuerzos a hacer la teoría consistente desde el punto matemático y en liberarla de su modelo artificial basado en la hipótesis del éter. [2].
Bibliografía
[1] Milhaud ¿Cómo se midió por primera vez la velocidad de la luz? 2010. Recuperado de: https://recuerdosdepandora.com/ciencia/fisica/como-se-midio-por-primera-vez-la-velocidad-de-la-luz/ 
[2] César Tomé López. La velocidad de las ondas electromagnéticas y la naturaleza de la luz. Cuaderno de cultura científica. 2016. Recuperado de: https://culturacientifica.com/2016/07/26/la-velocidad-las-ondas-electromagneticas-la-naturaleza-la-luz/

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