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NOTA FTOPATOLOGICA- ENFERMEDADEDES El declinamiento del nogal causado por Ceratocystis sp. (Cerphalosporium sp.) en la Provincia de Catamarca, Argentina S. Weht 1, F. Seleme 1, M. .I..Fernandez 2, C.A. Gonzalez Vera1 y M. Abel 1 Resumen Desde principios del siglo se vienen observando en el mundo grandes perdidas de árboles frutales y forestales (Ulmus sp., Mespillus sp., Quaercus sp. Prunus sp., Platanus sp., Coffea sp., Hevea sp., Vistis sp., Mangifera sp., Theobroma sp., etc) por graves afecciones vasculares producidas por el hongo Ceratocystis spp. Se han detectado muertes súbitas y declinamientos lentos. Desde 1980 se observa en la Provincia de Catamarca, Argentina un fenómeno similar en Junglans regia, cultivo nacional de máxima importancia. El presente trabajo se propuso identificar el agente patógeno, estudiar su biología y capacidad destructiva y sus formas de transmisión. Esto se llevo a cabo en el laboratorio y en campo y las pruebas de patogenicidad, en vivero. Se aisló e identifico al agente a nivel de genero (Ceratocystis, Céphalosporium). Se infiere que es un parásito que solo penetra por heridas provocadas principalmente por inadecuado manejo; y que afecta a la planta, tanto en su forma aguda con en al crónica, por la destrucción y oclusión de vasos xilemáticos. Abstract Weht S.; Seleme, F. ; Fernandez, M. I.; Gonzalez Vera, C. A. y Abe, M. Decline of walnut caused by Ceratocytis sp. (Cephalosporium sp.) in the Province of Catamarca, Argentina. FITOPATOLOGIA 40 (2): 97-101. Severe losses on fruit and forest crop. (Ulmus sp., Mespillus sp., Quaercus sp. Prunas sp., Platamus sp., Coffea sp., Hevea sp., Vistis sp., Mangifera sp., Theobroma sp.,…..etc) due to vascular diseases caused by Ceratocytis spp. Have been observed worldwide since the beginning of de century. Sudden death and slow decline have been detected. A similar phenomenom has been observed in the Province of Catamarca, Argentina since 1980 on Junglans regia, an importat regional crop. The purpose of this research was to identify the causal agent, to study its biology and destructive potential, and means of transmission Laboratory and field work were carried out, including pathogenicity test in nurseries. The causal agent was isolated and identified to the genus level: Ceratocytis, Cephalosporium. It is belived to be a parasite that penetrates the plnat only through wounds, usually caused by enadequate management, causing sedden death or slow decline. Trabajo financiado con fondeos de SEDECYT de la UNCa. 1 Prof. Asociado, Jefe Tr. Pr., Prof. Ayudante Diplomado de la Cátedra de Fitopatología de la FCA. UNCa., respectivamente. 2 Ex Profesional de la Secc. Produc. De Semillas FCA: UNCa. Aceptado para publicación: julio 15, 2005 Vol. 40 Nº 2, Julio 2005 -95 NOTA FTOPATOLOGICA- ENFERMEDADEDES INTRODUCCION En 1980 aparece una grave enfermedad en Europa en Ulmus sp., denominada “mal holandes”, atribuida a Ceratocytis ulmi (Graphium ulmi) En 1933 otra grave enfermedad produce en EEUU la muerte rapida en Misperus germanica L. causada por Ceratocystis sp. (Graphium sp., Chalara sp.) en 1943 Quaercus sp. Es aniquilado en EEUU por C. fagacearum (Chalara quaescina) (7). En 1951 aparece en Colombia el cancro del tronco de Coffea sp., la podredumbre de Ipomea sp. y la muerte súbita de Thebroma sp., entre otros cultivos, provocados por C. fimbriata (14). En 1962, C. moniliformis es citada afectando gravemente a Fagus, Liquidambar, Populus, Theobroma (2). En 1964 Ceratocystis es citado como contaminante de semilla (8). En 1967 C. paradoxa es citada afectando la parte basal del racimo de Musa sp,, a Coffea sp., Cupresus macrocarpa, Vitis vinifera, Sorghum vulgare y Zea mays (10). En 1968 son citadas como no patogénicas C. alba y C. californica (Graphium, Leptographium, Chalaropsis) (4) Entre las formas de transmisión de este hongo se han reconocido al viento como uno de los menos eficaces y al suelo como limitada fuente de inoculo (9, 13). Por el contrario, son eficaces transmisores los insectos (6, 7, 11), los ácaros y los ratones (9), las semillas (8), el injerto radicular natural, el machete o serrucho de poda, y el garrote de cosecha (9). La forma de penetración es por heridas, por ello a esta enfermedad en Centro America se la conoce como “el mal del machete” o “mal del garrote” de los árboles frutales. El olor de las heridas ejerce una gran atracción sobre los insectos visitadores (Nitidulidae, Coleoptera: Carpophilus spp., Litargus sp.; Dipterae: Drosophila sp.). Estos insectos son portadores de hongos patogenos y saprofitos. Al crecer los hongos, su olor es causa de atracción de otros insectos, los micetófagos, que al comerlos y digerirlos totalmente, los diseminan a otras plantas a través de sus excrementos. A partir de heridas iniciales de 3 mm, los hongos se profundizan hasta los 40 mm. En algunos casos no se requiere herida previa, pues la producen los propios vectores: ácaros (Tarsonemus sp.), insectos barrenadores o escarabajos (Scolytus, Hylurgopinus, Xyleborus, Platinus, Steirastomas, Hiphotenemus) y ratones (9). Desde 1980 se viene observando en la Provincia de Catamarca, el declinamiento del nogal (Junglans regia L.). en algunos casos produce la muerte súbita, en otros se observa un declinamiento lento que generalmente termina con la muerte al año siguiente. No se han observado citas de Ceratocsytis sobre este hospedante en el mundo, a excepción de C. alba que no es patogénica (4). Parte de la presente investigación aqui reportada fue anticipada en una nota periodística local por el segundo y tercer autores. El objetivo del presente trabajo de identificar al agente patógeno, estudiar su biología, detectar sus formas de transmisión y sus formas predisponentes. MATERIALES Y METODOS Se procedió a realizar un relevamiento de las zonas nogaleras del Dpto. de Belén, Pcia. de Catamarca. Se observo el estado de las plantas, la época de mayor susceptibilidad y el rápido avance de la enfermedad; se recavaron informes de manejo cultural del monte frutal y se relevaron las posibles fuentes de transmisión. Las muestras seleccionadas no se procesaron en los laboratorios con las técnicas comunes de medios de cultivo, sino que se procedió con una metodología mas apropiada para este hongo (1, 11, 16, 17). Se lavo las muestras con agua corriente y cepillo, se las enjuago con agua destilada estéril y se las coloco en cámara húmeda durante 18 a 22 días con luz ultravioleta negra para favorecer la esporulación (12 horas de luz, 12 horas de oscuridad) y a las 25 -+ 1º C de temperatura. Las alteraciones fisiobioquímicas se pusieron en observación según técnicas conocidas (5). Las pruebas de patogenicidad se llevaron a cabo en un vivero de nogal de un año. Se hicieron punciones en cruz de 3 a 5 mm de profundidad y se inoculo con una concentración de 10 7 esporas /ml. Para identificación de patógenos se recurrió a las clasificaciones ya publicadas (4, 6, 12, 15) RESULTADOS La mayoría de los árboles afectados son árboles envejecidos, debilitados por anegamiento o maltrato mediante podas inadecuadas y heridas expuestas. El periodo de máxima susceptibilidad es el primavero – estival, con la máxima proporción de muertes súbitas. Los árboles atacados en otoño muestran una languidez crónica, con alguna recuperación en algunos casos en la primavera subsiguiente. Los montes frutales en general están compuestos por árboles longevos, de gran altura, regados por surcos y tazas profundas expuestos a anegamientos. Aradas profundas remueven y lastiman el sistema radicular de las trochas. Durante las cosechas, las ramas son severamente golpeadas para liberar los frutos. Se han observadoinsectos barrenadores cuyas larvas se cobijan en los huecos de podas mal hechas, o bajo las cortezas; e insectos visitadores de heridas. Dichos insectos aún no han sido identificados. En los casos agudos se observó un marchitamiento foliar y de ramas repentino y generalizado; las hojas se acartuchan, se ponen castañas a cobrizas, mueren y quedan adheridas. En la corteza rajada del árbol muerto se observo un moteado o rayado castaños oscuro sobre la capa externa de la madera, con puntuaciones negras. En cortes transversales se observaron anillos de color castaños oscuro marcando los vasos xilemáticos. En los casos crónicos el marchitamiento ocurre en ascenso, por las ramas laterales, generalizándose mas cuanto mas desde abajo se inicia y cuanto mas jóvenes son las plantas. Las hojas inician una leve ondulación, luego palidecen, se marchitan progresivamente, pardeando desde el margen externo hacia el centro, y defoliando desde arriba hacia el centro de la planta. Generalmente mueren al año siguiente. En la corteza se observan gomas, masas miceliales entre la corteza y el leño; la corteza se raja hacia fuera. Los vasos conductores de agua aparecen ennegrecidos, taponados con sustancias producidas por las toxinas del hongo, a partir de estas rajaduras se pueden obtener las fructificaciones. Al microscopio óptico se observo un micelio tabicado con tres tipos de fructificaciones (Fig. 1 y 2) Peritecios superficiales con cuellos largos, desflecados en el extremo con abundante cilias; no se observan ascos; ascosporas unicelulares, hialinas, pequeñas, reniformes, pertenecientes al genero Ceratocystis. Conidioforos delgados, simples, aislados; conidios unicelulares, hialinos, agrupados en racimos evanescentes, pe5rtenecientes al genero Cephalosporium. No se llego en le presente estudio a definir la especie. DISCUSION En nuestro medio hay factores muy coincidentes que han posibilitado la aparición y dispersión de un agente patógeno que pone en peligro un cultivo de máxima importancia. Con los datos hasta aquí recogidos se muestra de que el agente responsable es el genero Ceratocystis y que puede presumir que se trata de una especie similar a C. fimbriata (2, 4, 6, 7, 10, 12, 13, 14, 15, 16,17) no hay evidencias de transmisión por ácaros y ratones (9) pero si por insectos vectores, tanto taladradores o escarabajos, como visitadores de heridas y micetófagos (6, 7, 9, 11). Es muy posible también su transmisión por injertos radiculares naturales (9) y por semillas o estacas (8). La muerte súbita en los casos de infecciones primavero – estivales es explicable por la rápida difusión del patógeno en forma ascendente; esto mismo explica la desaceleración del proceso en otoño – invierno, tratándose de ejemplares de hojas caducas. Los cortes transversales, con infecciones en anillo, confirman esta afirmación. El problema podría ser mas generalizado si las primaveras registraran mayores precipitaciones , con lo que se favorecerían las condiciones para el hongo. La presencia de Ceratocystis sp. en nogal obliga a un replanteo del manejo del monte frutal. El adecuado manejo a corto plazo es el control de insectos vectores, una correcta poda que evite la formación de sobrenudos donde se alojan los insectos y un tratamiento sin heridas. A mas largo plazo, en los nuevos montes frutales, se deberá reestructurar las formas de laboreo, el sistema de riego y de cosecha, y se deberán buscar e incorporar cultivares resistente. 100 - Vol. 40 Nº 2, Julio 2005 Un cuidado especial merece tenerse en cuenta en los almácigos y/o viveros para evitar las especies de Ceratocystis contaminantes. La existencia de especies de Ceratocystis no patogénicas abriga la esperanza de conseguir y manejar antibiosis naturales que compitan por espacios con las patogénicas en las heridas expuestas, hasta la cicatrización. Mientras tanto convendrá ensayar fungicidas sistémicos mediante inyecciones y/o pulverizaciones. AGRADECIMIENTO Se deja expreso agradecimiento a la Ing. Agr. Amalia Barrios de Rivera, por su participación en la extracción de las primeras muestras y en los primeros aislamientos; y a la Ing. Agr. Nilda Vázquez de Ramallo por la confirmación del diagnostico en muestras que le fueron enviadas a su laboratorio (Comunicación personal). LITERTURA CITADA 1 – Arevalo De Sandoval G. y Granada G.A. 1974. Observaciones sobre el aislamiento del hongo Ceratocystis fimbriata. Boletín de la asociación Colombiana de Fitopatología y Ciencias afines (ASCOLFI): 19 – 20. 2 – Barba C., and Hansen A. J. 1962. Pathogenicity test with different isolates of C. fimbriata. Phytopath. 52.2. 3 – Crane J.L., and Schoknecht J. D. 1973. Conidiogenesis in Ceratocystis ulmi, C. piceae and Graphium penicillioides Am. J. Bot. 60: 346 -354. 4 - De Vay J.E., Davison R. W., and Moller W. J. 1968. New specie of Ceratocystis associated with bark injuries on deciduous fruit trees. Mycologia 60: 636 – 641. 5 - Dickinson, C. H. 1987. Patología vegetal y Patógenos de Plantas. Edit. Limusa (Mexico) 6 – Hunt J. 1956. Taxonomy of the genus Ceratocystis Lloydia 19: 1-59 7 – Kenneth R. 1978. Plant disease handbook. Wescott`s. four Edition. 8 – Malone J. P., and MusKett A. E: 1964. Ceratocystis sp. as a contaminant of seeds. Seed borne fungi. Plant pathol. Division, Belfast, 29 (2): 216 -219. 9 – Moller W. J. and De Vay J. E. 1968. Insect transmition of Ceratocystis fimbriata in deciduous fruit orchards. Phytopath. 58: 1499-1508 10 – Morgan – Jones G. 1967. CMI. Descrp. Pathogen. Fungi Bact. Nº 143 11 – Neely D. 1968. Twig inoculations on American Elm with Ceratocystis ulmi. Phitopath. 58: 1566 -1570. 12 – Olchowesky A., and Resid J. 1974. Taxonomy of the genus Ceratocsytis in Manitoba. Can. J. Bot. 52: 1675 – 1711 13 – Parkinson B. S. 1964. Studdies in the etiology of Ceratocystis cancker of stones fruists. M. S. Thesis. Univ. California, Davis. 14 – Pontis – Videla, R. 1951. A canker disease of the coffee tree in Colombia and Venezuela. Phytopathology 41: 178 - 184. 15 – Upaday H. P., and Kendrich W. B. 1975. Propomus for a revision of Ceratocystis (Microsascales, Ascomycetes) and its conidial states. Mycologia 67:798-805. 16 – Webter, R. K. 1967. The inheritance of sexuality color and colony type in Ceratocystis fimbriata. Mycologia 59 (2): 222 – 234. 17 – Webster R. K., and Butler. 1967. The origin of self sterile croosfertile strains and culture saterility in Ceratocysis fimbriata. Mycologia 59: 212 – 221.
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