Logo Studenta

Práctica docente

¡Este material tiene más páginas!

Vista previa del material en texto

PRÁCTICA DOCENTE
	La práctica docente se entiende como una acción que permite innovar, profundizar y transformar el proceso de enseñanza del docente en el aula. Está unida a la realidad y entorno del aula, esto ante lo que acontece en el mismo, es reflejo de la vida cotidiana de la escuela. Así pues, hace posible una generación de conocimientos a partir del abordaje de la práctica docente como objeto de conocimiento, para los sujetos que intervienen, por ello, la práctica se debe delimitar en el orden de la praxis como proceso de comprensión, creación y transformación de un aspecto de la realidad educativa. 
	En esta tendencia, la presente investigación de carácter documental planteó como propósito describir el concepto de estrategias de enseñanza y de aprendizaje como vías para operacionalizar el ejercicio docente. De esta manera, el referido estudio se justifica desde la perspectiva teórico-conceptual, pues permite el análisis de los diferentes enfoques de enseñanza y aprendizaje y las implicaciones de las estrategias como aspectos inherentes al proceso educativo.
	Para la recolección de datos se consultaron fuentes bibliográficas vinculadas a la temática mediante técnicas documentales como la toma de notas, el subrayado y el resumen, los cuales de manera analítica aportaron el cuerpo teórico elemental para la interpretación de los contenidos. El producto de la consulta bibliográfica se presenta en secciones debidamente identificadas, así como la incorporaron de ilustraciones referidas a los contenidos en estudio vinculados a la práctica docente.
PRÁCTICA DOCENTE
	La práctica docente se apoya en un conjunto de fundamentos conceptuales que configuran el ejercicio profesional en el ámbito educativo. En este sentido, la práctica docente, como afirma Escobar (2007), “Constituye un proceso complejo en el que confluyen múltiples factores que van a incidir en la concreción de teorías, lineamientos, políticas; es decir, en el logro de los fines educativos” (p. 1). En tal sentido, el maestro como componente activo del proceso de práctica docente, debe generar procesos pedagógicos a partir del dominio de competencias conceptuales respecto a contenidos curriculares; asumir un liderazgo en el contexto, fundamentado en principios morales que genere trabajo cooperativo en el ámbito escolar. En esta perspectiva, se abordan seguidamente diferentes contenidos asociados a dicha práctica docente.
Función Mediadora del Docente
	De acuerdo a la apreciación de Díaz-Barriga (2006), “Es ampliamente reconocido que la aplicación de las diferentes corrientes psicológicas en el terreno de la educación ha permitido ampliar las explicaciones en torno a los fenómenos educativos e intervenir en ellos…” (p. 24). Esta perspectiva permite visualizar nuevos retos y demandas ante modelos inoperantes que destinan al docente el rol de transmisor de información. Un enfoque educativo que implica interacciones muy complejas, las cuales involucran cuestiones simbólicas, afectivas, comunicativas, sociales, valores, entre otros.
	Dicha tendencia educativa debe ser motora de procesos de aprendizajes constructivistas, en un marco educativo centrado en el estudiante, considerado capaz de aprender, pensar, sentir, actuar y desarrollarse como persona. Por ello, las tendencias recientes formadoras de personal docente se han ampliado considerablemente en distintos ámbitos de la actuación docente cuya acción se enmarca en funciones mediadoras por parte del docente en diferentes dimensiones que convergen en el proceso educativo.
	Esta apreciación emerge del pleno conocimiento que el estudiante no construye el conocimiento en solitario, sino gracias a la intervención de otros en un momento y contexto cultural particular. Respecto a esto, Díaz-Barriga (ob.cit.), asocia el acto educativo centrado en una concepción constructivista de la enseñanza y del aprendizaje centrado en postulados psicogenético (desarrollo de funciones mentales), cognitivo (procesos mentales) y sociocultural (aspecto social), aspectos vinculados a la naturaleza interpersonal del aprendizaje de carácter individual y endógeno en un plano de actividad social y experiencias compartidas. Esta visión ubica al docente como un ente organizador y mediador en el encuentro del alumno con el conocimiento apoyado en fundamentos teóricos y prácticos que guían el desempeño pedagógico, su acción y concreción de competencias docentes mediadoras en el proceso.
Aprendizaje Cooperativo y Proceso de Enseñanza
	El concepto de aprendizaje es descrito por Johnson, Johnson y Holubec (2004) como “el empleo didáctico de grupos reducidos en los que los alumnos trabajan juntos para maximizar su propio aprendizaje y el de los demás” (p. 14). Esta tendencia educativa delega en la práctica docente un modo alternativo de organizar los procesos cognitivos que se han de estimular un proceso de enseñanza aprendizaje tanto dentro como fuera del aula. Es decir, la función de enseñanza en este marco conceptual se apoya en métodos y técnicas pedagógicas orientadas a promover la interdependencia positiva, interacción cara a cara, responsabilidad individual, habilidades sociales y el procesamiento grupal autónomo.
	En todo sentido, el aprendizaje cooperativo se puede considerar como una aproximación integradora entre las habilidades sociales objetivas y los contenidos educativos y, de forma general, se basa en una concepción holística del proceso de enseñanza-aprendizaje donde el intercambio social constituye el eje director de la organización del aula. En este modelo el docente promueve, además de la instrucción, la integración en actividades teniendo en cuenta que todas las actividades que se desarrollan en un entorno de aprendizaje cooperativo gravitan en relación a un sistema tridimensional formado por la actividad constructiva del alumno, la mediación cognitiva y social y la organización de actividades. En este particular, Serrano (1991), expresa que:
El profesor deberá tener muy en cuenta que los contextos de interacción son construidos por las propias personas que participan en el acto educativo, y que los intercambios educativos no se pueden producir bajo el principio de ´todo-o-nada´, es decir, bajo la dicotomía de que se producen bajo un respeto absoluto de las reglas o no se producen, puesto que la realidad del aula es mucho más compleja y sería un error contemplar la interacción entre el profesor y los alumnos como una ´escenificación´ de un guión con un reparto de roles establecido de antemano. (p. 4). 
Esta perspectiva refiere que el proceso de enseñanza conforma dentro del modelo cooperativo una dinámica a través de la cual las personas que convergen en el intercambio interactúan en un contexto abierto a situaciones variables de acuerdo a las características particulares del grupo y en función de los roles específicos. Este modelo cooperativo supone una articulación mediadora del docente en el impulso y guía de las actividades escolares como eje del proceso, sin desestimar las características particulares de los intervinientes.
Estrategias Metacognitivas
	El Diccionario de Educación (2002) define a la metacognición como “la capacidad por parte del individuo de auto-regular el propio aprendizaje, así como planificar qué estrategias se han de utilizar en cada situación, aplicarlas, controlar el proceso, evaluarlo para detectar posibles fallos, y como consecuencia, transferir todo ello a una nueva actuación” (p. 56). Esta acepción se interpreta como un grupo de estrategias de aprendizaje que sirven al aprendiente para planificar, controlar y evaluar el proceso de su aprendizaje. Estas estrategias permiten al aprendiente regular su propio proceso, son externas al mismo y comunes a todo tipo de aprendizaje. 
La intervención del docente consta en promover por medio de las tareas escolares, el desarrollo de la inteligencia de los alumnos. Dichas tareas, como refiere Johnson, Johnson y Holubec (2004), están dirigidas a la adquisición de conocimientos, pero no sólo de los conocimientosdeclarativos, sino también de los conocimientos procedimentales y condicionales. Además de los conocimientos, las tareas escolares pretenden desarrollar en los alumnos las habilidades de comprensión y expresión y, en general, el conjunto de estrategias cognitivas y metacognitivas que les permitan aprender a aprender. 
Para Soliveres y Mascias (2002) las estrategias metacognitivas pueden ser ser conscientes de lo que uno sabe o no sabe, utilizar estrategias de aprendizaje que varían con la naturaleza del material a aprender y las demandas de la situación de aprendizaje, poder predecir y monitorear el éxito de los propios esfuerzos de aprendizaje, entre otras. De igual manera sostienen que algunas estrategias que llevan indirectamente a resultados de aprendizaje son el monitoreo para determinar si el proceso de aprendizaje sucede tal como se planeó, el diagnóstico de las causas de las dificultades, el ajuste de los procesos cuando sea necesario, entre otros.
Estrategias de Enseñanza
	Retomando las ideas de Díaz-Barriga (2006) en relación a las estrategias de enseñanza, las mismas “Son procedimientos que el agente de enseñanza utiliza en forma directa y flexible para promover el logro de aprendizajes significativos en los alumnos” (p. 141). Propone la autora que las estrategias de enseñanza deben concebirse de manera heurística, flexible y reflexiva. 
Consisten en proporcionar una ayuda de enfoque constructivista mediante el empleo de recursos y estrategias por parte del docente, las cuales, en conjunto con las estrategias motivacionales y las de aprendizaje cooperativo, las estrategias de enseñanza propician en los alumnos un aprendizaje con comprensión. En este sentido, Díaz-Barriga (ob. cit.) refiere que: “…consideramos que el docente debe poseer un bagaje amplio de estrategias, conociendo qué función tienen y como pueden utilizarse y desarrollarse apropiadamente. Dichas estrategias de enseñanza se complementan con las estrategias o principios motivacionales y de trabajo cooperativo (p. 14).
En esta tendencia, el siguiente cuadro destaca estrategias de enseñanza que el docente puede emplear con la intención de facilitar el aprendizaje significativo de los alumnos. Las estrategias seleccionadas han demostrado, en diversas su efectividad al ser introducidas como apoyos en textos académicos así como en la dinámica de la enseñanza (exposición, negociación, discusión, entre otros) generada en clases. Entre las principales estrategias de enseñanza a que hace referencia Díaz-Barriga (ob. cit.) son las siguientes:
Cuadro 2. Estrategias de enseñanza.	
	
Objetivos
	Enunciado que establece condiciones, tipo de actividad y forma de evaluación del aprendizaje del alumno. Generación de expectativas apropiadas en los alumnos. 
	
Resumen
	Síntesis y abstracción de la información relevante de un discurso oral o escrito. Enfatiza conceptos clave, principios, términos y argumento central. 
	
Organizador previo
	Información de tipo introductorio y contextual. Es elaborado con un nivel superior de abstracción, generalidad e inclusividad que la información que se aprenderá. Tiende un puente cognitivo entre la información nueva y la previa. 
	
Ilustraciones
	Representación visual de los conceptos, objetos o situaciones de una teoría o tema específico (fotografías, dibujos, esquemas, gráficas, dramatizaciones, etcétera). 
	
Analogías
	Proposición que indica que una cosa o evento (concreto y familiar) es semejante a otro (desconocido y abstracto o complejo). 
	
Preguntas intercaladas
	Preguntas insertadas en la situación de enseñanza o en un texto. Mantienen la atención y favorecen la práctica, la retención y la obtención de información relevante. 
	
Pistas topográficas y discursivas
	
Señalamientos que se hacen en un texto o en la situación de enseñanza para enfatizar y/u organizar elementos relevantes del contenido por aprender. 
	
Mapas conceptuales y redes semánticas
	
Representación gráfica de esquemas de conocimiento (indican conceptos, proposiciones y explicaciones). 
	
Uso de estructuras textuales
	
Organizaciones retóricas de un discurso oral o escrito, que influyen en su comprensión y recuerdo. 
Fuente: Díaz Barriga, F. (2002; p. 31).
Estrategias de Aprendizaje
	En las orientaciones de Díaz-Barriga (2006) se distingue las mismas “son procedimientos que un aprendiz emplea en forma consciente, controlada e intencional como instrumentos flexibles para aprender significativamente y solucionar problemas” (p. 234). En este sentido, las autora refiere que las estrategias de aprendizaje son procedimientos o secuencia de acciones; son actividades consientes y voluntarias; pueden incluir técnicas, operaciones o actividades específicas; persiguen un propósito determinado; son instrumentos para potenciar las actividades de aprendizaje y solución de problemas.
	Explica la autora que diferentes posturas teóricas en relación a las estrategias de aprendizaje es controlada y no automática; requieren necesariamente de una toma de decisiones, de una actividad previa de planificación y de un control de su ejecución. Así las estrategias de aprendizaje necesitan la aplicación del conocimiento metacognitivo y, sobre todo, auto-regulador; la aplicación experta de las estrategias de aprendizaje requiere de una reflexión profunda sobre el modo de emplearlas; la aplicación de las mismas implica que el aprendiz sepa seleccionar inteligentemente de entre varios recursos y capacidades que tenga a su disposición.
	Explica Díaz-Barriga (ob. cit.) que las estrategias de aprendizaje son ejecutadas por el agente instruccional sino por el aprendiz, siempre que se le demande aprender, recordar o solucionar problemas sobre algún contenido de aprendizaje. Aquí afirma que la ejecución de las estrategias de aprendizaje ocurre asociada con otros tipos de recursos y procesos cognitivos de que dispone cualquier aprendiz. 
Clasificación de las Estrategias 
Existen diferentes clasificaciones de las estrategias, una de ellas es la que proponen Weinstein y Mayer (1985). Estas estrategias cognoscitivas de aprendizaje se pueden clasificar en ocho categorías generales: seis de ellas dependen de la complejidad de la tarea, además de las estrategias metacognitivas y las denominadas estrategias afectivas. 
1. Estrategias de ensayo para tareas básicas de aprendizaje 
Existe un número de tareas educativas diferentes que requieren de un recuerdo simple. Un ejemplo de estrategia en esta categoría lo constituye la repetición de cada nombre de los colores del espectro, en un orden serial correcto. Estas tareas simples ocurren particularmente en un nivel educacional menor o en cursos introductorios. 
Una diferencia importante entre expertos (quienes utilizan la información de manera efectiva) y novatos (quienes aún no dominan las estrategias efectivas para recuperar y utilizar la información), parece estar relacionada con la base de conocimientos que poseen. La estructura, la organización y la integración de esta base de conocimientos son importantes para la experta toma de decisiones, aun para los alumnos más inteligentes, con formas profundas de procesamiento de la información. 
2. Estrategias de ensayo para tareas complejas de aprendizaje 
Las estrategias de aprendizaje en esta categoría son más complejas y tienden a involucrar el conocimiento que se extiende más allá del aprendizaje superficial de listas de palabras o segmentos aislados de información. Las estrategias en esta categoría incluyen copiado y subrayado del material de lectura. Generalmente involucran la repetición dirigida hacia la reproducción literal. Estas actividades parecen ser particularmente efectivas cuando se ejercitan conjuntamente con otras estrategias que conducen a un procesamiento significativo de la información, tales como el uso de la elaboración, la organización o el monitoreo de la comprensión. 
3. Estrategias de elaboración para tareas básicas de aprendizaje 
La elaboración involucra el aumento de algún tipo de construcción simbólica a lo que uno estátratando de aprender, de manera que sea más significativo. Esto se puede lograr utilizando construcciones verbales o imaginales. Por ejemplo, el uso de imaginería mental puede ayudar a recordar las secuencias de acción descritas en una obra, y el uso de oraciones para relacionar un país y sus mayores productos industriales. La creación de elaboraciones efectivas requiere que el alumno esté involucrado activamente en el procesamiento de la información a ser aprendida. Numerosos estudios han demostrado que esto es un prerrequisito importante para el aprendizaje significativo versus la codificación superficial para el recuerdo. 
4. Estrategias de elaboración para tareas complejas de aprendizaje 
Las actividades de esta categoría incluyen la creación de analogías, parafraseo, la utilización de conocimientos previos, experiencias, actitudes y creencias, que ayudan a hacer la nueva información más significativa. Una vez más, la meta principal de cada una de estas actividades es hacer que el alumno esté activamente involucrado en la construcción de puentes entre lo que ya conoce y lo que está tratando de aprender. Las diferentes maneras de elaborar incluyen el tratar de aplicar un principio a la experiencia cotidiana, relacionar el contenido de un curso al contenido de otro, relacionar lo que se presentó anteriormente en una lectura a la discusión actual, tratar de utilizar una estrategia de solución de problemas a una situación nueva y resumir un argumento. 
5. Estrategias organizacionales para tareas básicas de aprendizaje 
Las estrategias en esta categoría se enfocan a métodos utilizados para traducir información en otra forma que la hará más fácil de entender. En esta categoría se incluyen, por ejemplo, el agrupamiento de las batallas de la Segunda Guerra Mundial por localización geográfica, la organización de animales por su categoría taxonómica, entre otras. En este tipo de estrategias, un esquema existente o creado se usa para imponer organización en un conjunto desordenado de elementos. Requieren un rol más activo por parte del alumno que las simples estrategias de ensayo. 
6. Estrategias organizacionales para tareas complejas de aprendizaje 
Las estrategias organizacionales pueden ser también muy útiles para tareas más complejas. Ejemplos comunes del uso de este método con tareas complejas incluyen el esbozo de un capítulo de un libro de texto, la creación de un diagrama conceptual de interrelaciones causa-efecto, y la creación de una jerarquía de recursos para ser usados al escribir un trabajo final. Parecen contribuir a la efectividad de este método tanto el proceso como el producto.
Estrategias de Enseñanza y Aprendizaje Acelerado
	De acuerdo al educador y psicólogo búlgaro Georgi Lozanov, creador del método de Aprendizaje Acelerado el cual permite multiplicar por 10 nuestra potencialidad de aprendizaje y de memorización, utilizando de forma coordinada los hemisferios cerebrales derecho e izquierdo. Se trata de un aprendizaje multi-sensorial, a través de todos los sentidos. Se fundamenta en la capacidad humana de aprender y recordar, así como técnicas para alterar los estados de la conciencia, métodos de adiestramiento en visualización y adquirir facultades supra-normales.
El método plantea algunas técnicas de aprendizaje acelerado que posibilitan crear en la mente nuevos circuitos secundarios que amplían innumerables capacidades humanas. Indistintamente del método utilizado, hay elementos comunes que todos emplean, como por ejemplo: ejercicios de relajación, la inducción de visualizaciones, la sugestión (efecto pigmalión), música apropiada al tipo de aprendizaje, algunos ejercicios respiratorios para contribuir a la sincronía cerebral y disminución del estrés. 
El método de Aprendizaje Acelerado tiene sus raíces en estudios de la Sugestología como ciencia de la sugestión, la cual parte del principio de la activación sistematizada de las capacidades de reserva -habilidades potenciales- del cerebro y mente para liberar a la persona de las frecuentes limitaciones impuestas por las diferentes normas sociales que pueden condicionar tanto su personalidad y conducta, como su capacidad de aprendizaje. Su origen se ubica en la psicoterapia la cual emplea la sugestión como elemento de curación, no obstante, su creador Lozanov, afirma que la sugestión está presente en todas las áreas de la vida, siendo un factor constante -consciente o inconsciente- en la comunicación.
La esencia conceptual y práctica de este método acelerado consiste en aprender a aprender, identificar cómo funciona el proceso de aprendizaje individual y proveerle de herramientas adecuadas para que las pueda emplear de manera natural. El cerebro, en un punto medio de los hemisferios, se desarrolla una síntesis ante el estímulo de ritmos, frecuencias, tonos y el lenguaje corporal. Así pues, el aprendizaje está fundamentado en representaciones, juegos y en el uso de específicas melodías musicales. El aprendizaje acelerado se ha visto fortalecido por aportes de la Programación Neurolingüística (PNL), de los mapas conceptuales y de la lectura rápida. La siguiente ilustración ofrece las principales diferenciasen el aprendizaje tradicional y el acelerado.
Ilustración 1. Síntesis de Diferencias en el Aprendizaje.
Fuente: Neuro Learning Center, 2010.
Las Tecnologías de Información y Comunicación (TIC) como Estrategias de Enseñanza y Aprendizaje
	En un primer orden, Gómez y Vidangos (2008) conciben a las Tecnologías de Información y Comunicación (TIC) “Como como el universo de dos conjuntos, representados por las tradicionales Tecnologías de la Comunicación (TC) - constituidas principalmente por la radio, la televisión y la telefonía convencional - y por las Tecnologías de la Información (TI), caracterizadas por la digitalización de las tecnologías de registros de contenidos (informática, de las comunicaciones, telemática y de las interfases).
	Se agrega al referente previo que las TIC son instrumentos y procesos utilizados para recuperar, almacenar, organizar, manejar, producir, presentar e intercambiar información por medios electrónicos y automáticos. Ejemplo de ello, los equipos físicos y programas informáticos, material de telecomunicaciones en forma de computadoras personales, scanners, cámaras digitales, asistentes personales digitales, teléfonos, facsímiles, modem, tocadiscos, grabadoras de CD y DVD, radio y televisión, además de Programas como bases de datos y aplicaciones multimedia. En resumen, las TIC’s son aquellas tecnologías que permiten transmitir, procesar y difundir información de manera instantánea.
	Respecto a la relación de las TIC en el ámbito educativo, las mismas pretenden un cambio estructural y cognitivo, a través de la innovación tecnológica y los procesos de enseñanza-aprendizaje que permitan flexibilizar, impulsar y fortalecer el proceso de enseñanza a través de las TIC. En este sentido, la incorporación de las TIC al proceso educativo marca un distanciamiento de la enseñanza tradicional cuyo objetivo fundamental era la adquisición de conocimientos, basándose para ello en los procesos de memorización, impartiéndose la enseñanza de forma colectiva en el que el profesor actuaba como el emisor de conocimientos y el estudiante el receptor de los mismos. Este tipo de enseñanza sigue un modelo conductista para la adquisición de conocimientos. 
	En un enfoque opuesto, en la sociedad de la información, el objetivo fundamental de la educación es posibilitar que el alumno sea partícipe de la construcción de sus propios conocimientos a partir de otros previos, de las experiencias y de las informaciones a las que puede acceder. Es oportuno distinguir, por tanto, entre información y conocimiento, la sola disponibilidad de informaciones no garantiza la adquisición de conocimientos, es necesario que el alumno, apoyado y guiado por el profesor, sea capaz de “aprender a aprender”, esto es acceder a la información, comprenderla, resaltar las ideas fundamentales, estructurarla, y tener una visión crítica sobre lamisma. 
	Esta orientación asume que el alumno pasa a ser el centro del proceso de aprendizaje, es quien construye el conocimiento, mediante la acción mediadora del docente. En este contexto son de gran importancia el uso de entornos y metodologías facilitadoras del aprendizaje que permitan al alumno aprender y convertir las informaciones en conocimientos. Así pues, las TIC conforman elementos adecuados para la creación de estos entornos por parte de los docentes, fortaleciendo el aprendizaje constructivo, colaborativo y por descubrimiento.
	De acuerdo a la perspectiva que ofrecen las TIC en educación, como afirma Palomo, Ruiz y Sánchez (2006), las TIC favorecen el trabajo colaborativo entre los intervinientes del proceso educativo, impulsa el trabajo en grupo, no solamente por el hecho de tener que compartir ordenador con un compañero o compañera, sino por la necesidad de contar con los demás en la consecución exitosa de las tareas encomendadas por el profesorado. Esto resalta que los medios informáticos existentes en el aula favorecen actitudes como ayudar a los compañeros, intercambiar información relevante encontrada en Internet, resolver problemas a los que los tienen. Además, estimula a los componentes de los grupos a intercambiar ideas, a discutir y decidir en común, a razonar el por qué de tal opinión. 
Ilustración 2. Esquema de la acción de las TIC.
Fuente: Wikipedia, 2010.
CONCLUSIÓN
	Tomando en cuenta la práctica docente bajo un enfoque constructivista, es posible ver como sus principios y metodologías se articulan con elementos del proceso educativo, y como aporta al diseño y elaboración de estrategias didácticas, por lo cual es posible proyectar diseños flexibles en los que se puedan presentar diferentes aspectos de algunas de ellas. Quizás lo más relevante es que el docente tenga claro los objetivos a lograr con la administración de estrategias de enseñanza y aprendizaje, así como en la elaboración de dichos recursos y cómo puede valerse de los aportes de distintas corrientes teóricas que delegan al docente una función altamente mediadora del proceso educativo entre los intervinientes del mismo. 
	Por otra parte, aún continúa la discusión sobre la pertinencia de los aportes y la efectividad de usar uno u otro elemento propuesto por diferentes corrientes de estrategias de enseñanza y aprendizaje y sus respectivos sustentos teóricos. Es cierto que la elaboración de técnicas y estrategias en el marco del proceso educativo en general, surgen elementos que dinamizan y hacen más complejos y exigentes su diseño y al mismo tiempo más atractivos en su uso e implementación en el ámbito educativo, entre estas se ubican las Estrategias de Información y Comunicación (TIC) a partir de los aportes teóricos del enfoque constructivista, teniendo como premisa, el interés supremo de generar procesos educativos altamente significativos para la vida de los alumnos en armonía con su contexto más próximo.
	En tal sentido, las estrategias abordadas: Metacognitivas, de Aprendizaje Acelerado, y el uso de las TIC, en su dimensión de enseñanza y aprendizaje, conforman desde la perspectiva del modelo educativo constructivista un invalorable aporte a la dinamización de los procesos de vigencia en el marco de la Educación por constituir en esencia una tendencia educativa que mediante la acción pertinente del quehacer educativo desde las aulas confronta a los estudiantes con las realidades socio-educativas que rodean su contexto inmediato, a través de procesos educativos significativos que requieran del análisis y reflexión como elemento activo del proceso de enseñanza y aprendizaje. 
La visión de las estrategias referidas dentro del marco constructivista nivela el aprendizaje con la creación de significados a partir de experiencias. Los estudiantes no transfieren el conocimiento del mundo externo hacia la memoria, más bien construyen interpretaciones personales del mundo basado en las experiencias e interrelaciones individuales. En consecuencia, las representaciones internas están constantemente abiertas al cambio. Esto significa, que los conceptos elaborados por el individuo van asumiendo su caracterización y forma con la adquisición de experiencias externas relacionadas con el alumno. Esta noción centra su interés en la creación de herramientas que reflejan los deseos y experiencias de los individuos sustentados en factores como actividad (ejercitación), concepto (conocimiento) y cultura (contexto), para que puedan ser exitosas. 
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
Díaz-Barriga, F. (2002). Estrategias docentes para un aprendizaje significativo. Una interpretación constructivista. 2ª edición. México. Mc Graw Hill Interamericana.
Escobar, N. (2009). La práctica profesional docente desde la perspectiva de los estudiantes. Disponible en: [Página Web en Línea: www.ug.edu.ec/files.] 
Gómez, M., y Vidangus, K. El impacto de las Tecnologías de Información y Comunicación en el proceso de enseñanza y aprendizaje. Disponible en: [Página Web en Línea: www. univalle.edu/publicaciones.]
Palomo, R., Ruiz, y Sánchez, J. (2006): Las TIC como agente de innovación educativa. Junta de Andalucía, Sevilla, Consejería de Educación. Dirección General de Innovación Educativa y Formación del Profesorado.
Serrano, J. (1996). El aprendizaje cooperativo. Madrid: Editorial Síntesis, S.A. 
Weinstein, C. y Mayer, R. (1985). The teaching of learning strategies. Disponible en: [Traducción en Línea: www. univalle.edu/publicaciones.]
19

Continuar navegando