Timoteo el Aprendiz ARTE PARA IMPRENTA (1)

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TIMOTEO, 
EL APRENDIZ
(Dieciséis lecciones para la transformación personal)
Eden Barrientos
Editado por el Instituto de Capacitación Gerencial Icadich
Caracas, 2014
AGRADECIMIENTOS
En primer lugar, agradezco a Dios mi principal asociado, y 
quien me ha inspirado en cada una de estas líneas. Agradezco 
también a todas aquellas personas que colocaron su granito 
de arena en el logro de este maravilloso proyecto; en especial 
a Florencia Zabala, por su contribución en la diagramación del 
libro; a Dayana Agüero, por su importante aporte en la revisión 
de contenido; y a mi hermano Abraham Barrientos, quien aportó 
valiosas ideas para la selección del título.
TIMOTEO, EL APRENDIZ
(Dieciséis lecciones para la transformación personal)
Eden Barrientos
Caracas. Venezuela, 2014
Reservados todos los derechos. Queda terminantemente prohibida, sin la 
autorización escrita del autor bajo las sanciones establecidas en las leyes, 
la reproducción parcial o total de esta obra por cualquier medio 
o procedimiento, incluidos la reprografía y el tratamiento informático.
Hecho el Depósito de Ley:
Depósito Legal: lf25220141502363
ISBN: 978-980-12-7487-2 
Diseño Gráfico: Florencia Zabala.
Impreso por: 
Índice
Prefacio ................................................................................................................................9
Palabras Del Autor .........................................................................................................11
El Éxodo .............................................................................................................................13
El Regreso A Casa ...........................................................................................................17
LAS DIECISÉIS LECCIONES
1. Aprende A Pescar ...................................................................................................21
2. Ten Una Visión .......................................................................................................25
3. Trabaja Tu Carácter ...............................................................................................31
4. Asume El Servicio Como Una Sagrada Vocación .......................................37
5. Enfócate En Lo Que Te Apasiona .....................................................................45
6. La Vida, Es Algo Más Que La Comida .............................................................51
7. Elabora Tu Proyecto De Vida ............................................................................57
8. Saca Lo Mejor De Tu Equipo..............................................................................69
9. Busca Ser Auténtico ..............................................................................................83
10. Haz Todo Con Excelencia ....................................................................................89
11. Desarrolla Varias Habilidades ..........................................................................95
12. Lo Primero Es Tu Paz Interior ....................................................................... 105
13. Supera Tus Adicciones ...................................................................................... 111
14. Tus Palabras Crean Realidades .................................................................... 141
15. Cultiva La Fe, El Amor Y Las Buenas Obras .............................................. 147
16. La Muerte, Un Paso Para Trascender .......................................................... 153
Referencia Ministerial ............................................................................................... 163
Resumen Curricular ................................................................................................... 167
Referencias Bibliográficas ....................................................................................... 169
PREFACIO 
El sueño de escribir un libro motivacional, inspirado en la vida de San Pablo y Timoteo, ha sido un desafío que por mucho 
tiempo añoré y que hoy veo materializado. Me ha emocionado 
desde la adolescencia conocer a profundidad la vida de estos 
personajes. San Pablo, llamado Saulo de Tarso, antes de su 
conversión al cristianismo, se dedicaba a perseguir a los 
cristianos como parte de su devoción al “Dios” de sus padres. 
Sin embargo, en el camino a Damasco, una luz resplandeciente 
le rodeó, y con ella una voz que le decía: “Saulo, Saulo ¿por 
qué me persigues? Este hecho dio un giro dramático en la vida 
del apóstol, cuando reconoció con humildad que era Jesús a 
quien perseguía. Y por mucho que se esforzaba en predicar 
a Cristo, al inicio fue objeto de desconfianza de parte de los 
demás apóstoles y creyentes de la iglesia primitiva. “Ya no vivo 
yo, mas vive Cristo en mi” ha sido una frase muy propia del 
apóstol de los gentiles, con la que se han identificado millones 
de cristianos, a lo largo de la historia, y que tomara para sí 
San Francisco de Asís, cuya vida ha sido motivo de inspiración 
para el mundo cristiano.
Timoteo, a quien en sus dos epístolas se le conoce como 
un joven pastor, inicialmente fue un muchacho algo inseguro, 
razón por la cual el apóstol le escribió en su segunda carta 
pidiéndole: “te ruego que avives el fuego del don de Dios que 
hay en ti”. La formación espiritual de Timoteo, transmitida 
de su abuela Loida y su madre Eunice, definitivamente fue 
complementada por San Pablo, quien a través de sus dos 
cartas le instruye sobre la forma en que debe ser asumido el 
ministerio cristiano. 
EDEN BARRIENTOS10
Combinar las experiencias de vida de estos dos hombres 
con la ficción no resultó nada fácil. Extraer a estos personajes de 
su contexto histórico para hacerlos vivir nuevas experiencias, 
requirió de mucha imaginación; sin embargo, esperamos 
dejar satisfecho al lector sobre la forma en que se narran los 
acontecimientos. 
Si a San Pablo le hubiese tocado vivir en nuestros tiempos, 
seguramente pudiésemos comparar su trabajo con el de 
un coach; este es un profesional que ayuda a otro llamado 
cochee, a descubrir su potencial, con base en la observación, 
la escucha atenta y la conversación. Y es eso, precisamente, 
lo que hace el referido apóstol con su pupilo Timoteo, en su 
acompañamiento, durante el desarrollo de su vida ministerial. 
Este ha sido, definitivamente, el mayor desafío como escritor, 
combinar en la sagrada narración principios de gerencia, 
coaching y liderazgo. 
Pero, más allá del esfuerzo por combinar la realidad con la 
ficción e incorporar cuidadosamente elementos de coaching 
en la narración, el mayor anhelo como escritor es tocar sus 
corazones, al incluir, mediante dieciséis lecciones, relatos 
que atañen nuestra sensibilidad, y que nos muestran algunas 
facetas de la vida humana, donde la desesperanza es superada 
por una fe inquebrantable en un poder que no comprendemos, 
pero que está a merced de todos nosotros, el Poder de Dios.
Bienvenidos a esta fabulosa e interesante aventura de 
crecer mediante la lectura. Estoy seguro que en muchos de 
ustedes se abrirán procesos que les ayudará a reenfocar de 
manera positiva la forma en que están viviendo sus vidas. De 
ser así, entonces podremos decir que la misión está cumplida.
PALABRAS DEL AUTOR
“Quiero aprovechar estas líneas para felicitarte por tu deseo de crecer mediante la lectura. La decisión de 
adquirir este libro me habla mucho del anhelo que tienes por 
hacer cambios significativos en tu vida. Personalmente, creo 
en el poder transformacional de la palabra escrita, por lo que 
estoy convencido de que no serás el mismo luego de leer cada 
una de estas emocionantes lecciones. Te animo a apuntar 
cada una de las reflexiones y pensamientos que te surjan en 
la medida en que estén teniendo avances en la lectura. Para 
ello, se ha dispuesto un espacio destinado a hacer estas 
anotaciones. 
En el proceso interactivo del coaching, se habla de dos 
momentos que surgen en el coachee, lapersona que recibe 
los conocimientos y las competencias que necesita para 
mejorar algún aspecto de su vida personal o profesional, a 
saber: cuando se están generando nuevos aprendizajes; y los 
quiebres y desplazamientos. Los quiebres son situaciones 
específicas que afectan el curso normal de la vida, y que nos 
llevan a tomar decisiones trascendentales. Mientras que los 
desplazamientos son cambios que experimentamos a medida 
que somos confrontados por una verdad que nos libera.
También, se ha insertado al final de cada lección un cuadro 
con ejemplos para que, luego de hacer un diagnóstico de tu 
situación actual, plantees tus objetivos, metas y acciones a 
ejecutar. No sin antes recordarte que un objetivo es una visión 
futura que se escribe con el verbo en infinitivo, como saltar, 
correr, salir, y debe ser alcanzable y realizable. Mientras que 
EDEN BARRIENTOS12
una meta es una expresión medible del objetivo, y puede 
fijarse a corto, mediano o largo plazo.
Para finalizar, es importante que revises cada dos o tres 
meses estos cuadros a fin de que puedas determinar cuán 
comprometido has estado con tu proyecto de vida. Si en esa 
tarea te das cuenta de que tienes mucha dificultad para ser 
constante y persistente con el cumplimiento de tus objetivos, 
quizá sea la hora de buscar en coach.
Éxitos…
EL ÉXODO
Eran las tres de la madrugada en el poblado de Breta en Jerusalén cuando Eunice, una joven madre judía, daba a luz 
a un niño cuyas profecías señalaban como un sabio maestro 
que luego sería llamado el apóstol de los sueños. Eunice estaba 
desposada con Andrés, hijo de un sacerdote muy popular entre 
los aldeanos por ser un hombre íntegro y de buen corazón. 
Veinte años antes el humilde sacerdote había tenido un sueño 
en el que vio a príncipes y reyes inclinarse ante un niño cuya 
fama se extendería por los confines de la tierra por su gran 
sabiduría y asombrosa capacidad para ayudar a la gente a 
lograr los sueños.
Breta era un humilde poblado ubicado en las riveras 
del rio Jordán. Un bello lugar donde las verdes sabanas se 
extendían como un lienzo abierto dejando una estela de grato 
olor a hierba fresca, y las viejas casas, construidas de ladrillo 
mezclado con barro, parecían gritar al visitante que allí el 
tiempo se había detenido. Ciertamente, desde que se fundó la 
aldea nada novedoso había ocurrido, sólo se narraba un suceso 
en el que, según los más ancianos del pueblo, unos astrólogos 
venidos de las cercanías del rio Éufrates habían seguido una 
estrella que se posaría sobre ese lugar, donde nacería un sabio 
de mucha influencia. Y fue Breta el sitio destinado por el Dios 
de los hebreos para que naciera el deseado de las naciones; 
un hombre cuya sapiencia solo igualaría a la sabiduría del rey 
Salomón, y cuyos dones usaría para hacer felices a las personas 
al guiarles en el logro de sus sueños.
EDEN BARRIENTOS14
El hospedaje que Eunice y Andrés escogieron para dar la 
bienvenida al precioso niño era uno de los más conocidos del 
pueblo de Breta, una edificación construida con madera de pino 
labrado, con ventanas y puertas pulidas con un esmalte que se 
extraía de los frondosos arboles de Sauce. Afortunadamente, 
por mucho tiempo habían guardados sus ahorros movidos 
por la convicción de que el apreciado niño vendría al mundo 
con una misión especial.
Pero no todo era regocijo, por aquellos días había en 
Jerusalén un rey muy malvado llamado Apolión, y sus 
encantadores y adivinos le habían advertido que un príncipe 
muy sabio habría de nacer en aquella región; cuya fama y 
erudición superaría a la de todos los reyes de la tierra. Esta 
noticia carcomía el corazón del perverso rey, a quien le 
mortificaba la idea de tener en su región a un contrincante 
superior a él. 
Desde que se corrió la noticia de que un hombre muy sabio 
nacería en aquella región, fuerzas espirituales de maldad 
venidas de los lugares más profundos de la tierra poseyeron al 
malvado rey para firmar un edicto a fin de matar a todo niño 
varón nacido en aquellos días. 
Era el día tres del mes Nisán en el calendario judío 
cuando nació el niño cuyos astros señalaban como el apóstol 
de los sueños, siendo su nacimiento también seguido por 
personalidades demoniacas con el fin de lograr su destrucción.
Gritos de dolor, terror, angustia y aflicción se habían 
apoderado del pueblo, que hasta esa noche era conocido como 
uno de los más tranquilos de la región. Ruidos de sables y de 
soldados a caballo se escuchaban en aquella madrugada fatal. 
La sangre que salía de las humildes casas había formado un 
riachuelo que salpicaba a los jinetes de la muerte, y los chillidos 
TIMOTEO, EL APRENDIZ 15
agudos de los niños degollados crearon una atmosfera de 
mortandad. “Noche de dolor, Raquel llora a sus niños”, era un 
fragmento extraído de la profecía contenida en el Tanaj, el libro 
sagrado de los hebreos, y cuyo anuncio los Rabinos habían 
leído más de una vez en el templo, pero que nunca imaginaron 
se cumpliría con tan cruel realidad. 
Un día antes de la terrible matanza, un ángel había 
aparecido a Andrés y a Eunice mientras recogían agua del 
pozo de Jacob, advirtiéndoles sobre el inminente peligro que 
se avecinaba, y dándoles instrucciones específicas de salir 
del pueblo a la región del bajo Egipto; tierra de pastores y 
beduinos, donde el sol abrazaba con gran calor a sus habitantes 
y la árida vegetación plagada de espinos recordaba al visitante 
que estaba en una tierra hostil. 
Esa misma noche mientras salían del pueblo, pudieron 
escuchar a lo lejos el ruido de las espadas, y el galopar de los 
caballos que avanzaban a toda prisa trayendo a su paso muerte 
y destrucción. 
EL REGRESO A CASA
Había llegado la primavera en el bajo Egipto, flores y rosas se abrían paso entre plantas de cactus y espinos. Una 
suave brisa venida del mar parecía acariciar a las palmeras 
de cocoteros, y a las aves marinas de distintas especies que 
relinchaban posadas sobre las barcazas ancladas en el muelle. 
Diez años transcurrieron desde que Andrés y su esposa 
Eunice, por instrucción divina, dejaron atrás la casa de sus 
padres en Jerusalén. El niño, a quien le pusieron por nombre 
Timoteo, crecía en gracia y estatura, siempre sujeto a sus 
padres, quienes tenían muchas expectativas por las cosas que 
se habían anunciado de él.
Una calurosa tarde, un pariente que había bajado desde 
Breta, en Jerusalén, les llevó la noticia de la muerte del Rey 
Apolión y la sucesión de un emperador pacífico y humanitario, 
quien se hacía llamar Artajerjes. Ello representaba la seguridad 
de un retorno feliz a su tierra de origen y la posibilidad de 
que el joven Timoteo recibiera una educación por Rabinos 
hebreos, quienes tenían un profundo conocimiento del Tanaj, 
el libro de la sabiduría. 
Tres días después de aquella alentadora noticia, la humilde 
familia decidió regresar a su tierra natal, llena de ilusiones 
y sueños por las profecías que se habían declarado sobre 
el niño, ahora convertido en un joven adolescente; aunque 
nada especial veían en él, por el contrario, su madre le habría 
manifestado a su esposo Andrés, su preocupación por lo 
retraído y tímido de aquel muchacho, siendo esta situación 
corroborada por Nicodemo, su primer maestro.
EDEN BARRIENTOS18
La preocupación del rabino más allá del tema del 
retraimiento, era la dificultad del adolescente en lograr un 
aprendizaje; y el escenario empeoraba por el hecho de que 
era tartamudo y le resultaba complicado memorizar aspectos 
elementales del Tanaj. Tal situación era muy embarazosa y 
confusa para sus padres quienes comenzaban a dudar de 
las profecías que una vez se hicieron sobre él. En efecto, el 
muchacho comenzaba a ser objeto de comentarios y burlas 
entre los vecinos de la aldea.
Cierta noche, mientras Eunice lloraba en su lecho llena de 
dolor y decepción por la situación del joven Timoteo, un ángel 
de luz se le apareció diciendo:
 — Eunice, bienaventurada eres entre las mujeres. El Señor, tu 
Dios ha visto tuaflicción. No temas, pues lo que se anunció 
del niño sucederá. 
 — Señor, respondió Eunice al ángel, ¿cómo es posible que 
ello ocurra, si el muchacho tiene limitaciones y constante-
mente es burlado por sus propios hermanos?
 — Eunice, replicó el ángel, Dios no es hombre para que mien-
ta, ni hijo de hombre para que se arrepienta, solo ten fe y 
espera el tiempo de Dios.
Hasta ese día lloró Eunice, y movida por su corazón de 
madre fue tras un conocido maestro a quien llamaban San 
Pablo; hombre que, según los colonos, había tenido una 
experiencia mística en el camino hacia Damasco, cuando una 
luz resplandeciente le rodeó, y con ella una voz de alguien 
quien se hacia llamar Jesús, un hombre que en vida fue llamado 
el Cristo, el hijo del Dios viviente.
Era sábado, en horas de la mañana, cuando Eunice le 
encontró bordando tiendas a la orilla del mar de Galilea. Se 
TIMOTEO, EL APRENDIZ 19
trataba de San Pablo, un hombre anciano, pequeño de estatura, 
algo calvo, pero con una mirada profunda que expresaba 
sabiduría. También era fariseo y judío de nacimiento aun 
cuando había obtenido la ciudadanía romana. 
 — ¿Qué quieres mujer? preguntó el ocupado anciano, mien-
tras bordaba una colorida tela. Y mirando fijamente a los 
ojos de ella, tuvo discernimiento espiritual y entendió que 
la inesperada visitante deseaba algo de él. Y Eunice, sin-
tiéndose incapaz de hacer contacto visual con el apóstol 
quedó muda, sin poder expresar lo que la tenía tan atri-
bulada.
 — ¡Sé a que vienes mujer!, expresó el apóstol. 
 — Dime ¿dónde está el muchacho? 
 — La mujer impresionada por aquellas palabras, musitando 
respondió: 
 — ¿Cómo señor… usted?
 — Deja de tartamudear mujer, yo soy a quien buscas.
 — ¡Señor, necesito ayuda¡
 — Habla mujer, respondió San Pablo.
 — Tengo un hijo a quien los profetas anunciaron como un 
gran apóstol, cuya sabiduría guiará a muchos a alcanzar 
sus sueños, sin embargo, la realidad es que se trata de un 
muchacho torpe, retraído, tartamudo, condiciones que lo 
han hecho objeto de burla por parte de sus compañeros.
Durante dos horas, aquella mujer narró al anciano con 
lujo de detalles cómo había sido el nacimiento y el desarrollo 
EDEN BARRIENTOS20
del muchacho, sin que aquél la interrumpiera. Al final del 
monólogo el maestro respondió:
Tráeme al muchacho tres veces a la semana por un periodo 
de dos años.
Sin contestar una sola palabra, Eunice volvió a su casa 
contenta, llena de esperanza, pues parecía que un rallo de luz 
comenzaba a aclarar el camino y a despejar los nubarrones de 
duda por aquello que las profecías habían anunciado del joven 
Timoteo.
PRIMERA LECCIÓN: 
APRENDE A PESCAR
Era un día significativo en la vida del joven Timoteo, a quien sus primeros tutores le habían augurado un futuro de 
fracasos por sus limitaciones emocionales e intelectuales. Por 
fin, se abría una posibilidad distinta, al comenzar a formarse 
al lado de San Pablo; un maestro de quien se decía poseía 
sabiduría y dones espirituales para ayudar a la gente a ser 
felices.
El primer día de clases el joven Timoteo llegó acompañado 
de su madre, ante lo cual el apóstol expresó:
Hasta este día acompañarás al muchacho.
 — ¿Y eso… por qué mi señor?, manifestó Eunice algo perple-
ja, ante lo cual respondió San Pablo:
 — Oye mujer no quiero culparte de los fracasos del joven Ti-
moteo, pero tú eres parte de ellos.
 — Señor, pero… ¿cómo voy a ser culpable de sus incapacida-
des, si lo que he hecho hasta ahora es cuidarlo y amarlo?
 — Escucha mujer, todo tiene su tiempo. El tiempo de cuidar 
y proteger a tu hijo ha pasado. Si quieres que el muchacho 
crezca debes dejarlo sólo. No le des más peces, enséñalo a 
pescar.
 — Así será gran maestro, tus palabras sean hechas. Contestó 
Eunice, convencida de que había dejado a Timoteo en bue-
nas manos.
EDEN BARRIENTOS22
Desde aquel momento, el joven aprendiz comenzó a 
andar sólo y con ello adquirió un sentido de seguridad e 
independencia que asombraba a sus padres.
“El arte de la vida consiste en hacer de la vida una obra de arte” 
 Mahatma Gandhi
Quiebres y desplazamientos que experimenté 
con la lectura de la lección: “Aprende a pescar”.
QUIEBRES
1)Me he dado cuenta que estoy en una zona de confort
DESPLAZAMIENTOS
1)Hoy decido comenzar a desarrollar otras habilidades
DIAGNOSTICO DE MI 
SITUACIÓN ACTUAL
OBJETIVO 
A ALCANZAR
META A LOGRAR TAREAS 
A EJECUTAR
Tengo sobrepeso Bajar de peso Reducir diez kilos en 
seis meses
Caminar veinte 
minutos diarios 
durante tres meses
Evitar el consumo de 
comida chatarra
No me alcanza el 
sueldo
Incrementar mis 
ingresos 
Buscar un mejor 
empleo al cabo de los 
tres meses
Colocar mi hoja de 
vida en algunas bolsas 
de trabajo
Buscar referidos que 
me recomienden en 
alguna empresa
SEGUNDA LECCIÓN: 
TEN UNA VISIÓN 
Hasta este momento, San Pablo se había enfocado en desarrollar en el joven un sentido de independencia de 
manera que pudiera valerse por sí mismo. Pero había llegado 
el momento en el que el muchacho se levantaría sobre sus pies 
y comenzaría a avanzar hacia su destino. 
La casa donde residía el viejo apóstol se encontraba en 
el centro de la ciudad, muy cerca del mercado principal. Por 
situarse frente al mar constantemente recibía a viajeros y 
turistas que fatigados del viaje buscaban con afán un lugar 
para comer y descansar. 
Cuando llegó Timoteo, el sabio maestro se encontraba 
leyendo el Tanaj, la Biblia de los hebreos. Su llamado como 
apóstol y pastor de almas requerían de él un basto conocimiento 
de las escrituras. 
En la sala principal de la casa había una enorme mesa 
labrada en madera de sauce, que sería utilizada por discípulo 
y maestro para iniciar un proceso de enseñanza-aprendizaje 
que se extendería por dos años y medio. 
 — Buen día Señor, asintió el joven aprendiz, estando frente 
al maestro. 
 — Pasa muchacho y toma asiento, indicó el maestro, y sin 
perder tiempo preguntó: 
 — ¿Qué esperas de la vida muchacho?
EDEN BARRIENTOS26
 — No se señor, respondió Timoteo con algo de timidez.
 — ¿Que te gustaría hacer en la vida?, insistió el maestro.
 — Pastor, me gustaría pastorear almas.
 — ¿Y por qué quieres pastorear almas?
 — Porque es la profesión más noble que existe, señor.
 — Oye muchacho, has escogido una profesión difícil, pues en 
un rebaño hay cabritos y ovejas. Las ovejas son mansas y 
siempre están dispuestas a obedecer a su pastor, pero los 
cabritos son rebeldes y producen canas al pastor. Por otra 
parte, las profecías hablan de ti como un sabio apóstol, 
quien ayudará a cumplir los sueños de las personas.
 — ¿Seguirás pensando en ser pastor de almas?
 — Lo pensaré mejor señor.
 — Oye muchacho, es importante que entiendas lo siguien-
te: nada tiene más poder que seguir tus sueños, visualiza 
lo que quieres ser, decláralo con tus palabras y lucha por 
ellos. Cuando uno tiene una visión, hay fuerzas invisibles 
que se van a mover a nuestro favor ayudándonos a alcan-
zar la meta. Pero lo lograrás, si con determinación luchas 
por alcanzarla. Hace mucho tiempo, pensé que servía al 
“Dios” de mis padres persiguiendo a los cristianos. Pero 
en una ocasión, mientras buscaba autorizaciones de mis 
superiores para encarcelar a algunos de ellos, una luz bri-
llante se me apareció en el camino a Damasco y con ella 
una voz del cielo que me dijo: Saulo, Saulo ¿por qué me 
persigues?, y yo pregunté a la voz: ¿quién eres Señor y 
qué quieres que hagas?, y la voz respondió: “Yo soy Jesús a 
TIMOTEO, EL APRENDIZ 27
quien persigues, desde ahora te he escogido para que seas 
ministro del evangelio y lleves luz a las naciones”.
Desde ese momento entendí que fui llamado apóstol de 
Jesucristo, posición que ahora defiendo, pues muchos de mis 
hermanos en la fe aún la desconocen. Pero yo sé quién soy, 
y conozco a quien me llamó. De eso se trata muchacho, de 
conocer cuál es la vocación a la que la vida nos ha llamado y de 
asumirla como un apostolado. Ello implica hacernos expertos 
en nuestra disciplina,de manera que no haya nadie que haga 
el trabajo como lo haces tú. 
 — Escucha muchacho, continuó el apóstol. Toma papel y lá-
piz. Para la próxima sesión me vas a traer respondidas las 
siguientes preguntas: ¿Qué deseas hacer en la vida?, ¿con 
cuáles recursos cuentas para hacer lo que tanto te apasio-
na?; y, por último, tráeme un inventario de tus fortalezas y 
tus debilidades.
 — ¡Con todo gusto lo haré señor¡ expresó con mucha emo-
ción el joven aprendiz.
“Hay que ir más allá de toda posibilidad física”, 
Manuel Belmonte. 
Quiebres y desplazamientos que experimenté 
con la lectura de la lección: “TEN UNA VISIÓN”.
QUIEBRES
DESPLAZAMIENTOS
DIAGNOSTICO DE MI 
SITUACIÓN ACTUAL
OBJETIVO 
A ALCANZAR
META A LOGRAR TAREAS 
A EJECUTAR
TERCERA LECCIÓN: 
TRABAJA TU CARÁCTER
La vida de San Pablo era muy conocida por los judíos, pues era de conocimiento público que había sido instruido por 
un maestro llamado Gamaliel. Y siendo fariseo, creía que servía 
al “Dios” de sus padres, persiguiendo a los que se llamaban 
cristianos. Además, tenía un profundo conocimiento de los 
libros de la ley y los profetas; conocimientos que luego utilizó 
para demostrar que Jesús era el Cristo, el hijo del Dios vivo. 
Aparte de ello, había recibido el don de guiar a las personas en 
su camino a la felicidad.
Habían pasado seis meses desde que el apóstol San Pablo 
dio inicio al proceso de ser mentor del joven Timoteo, ya se 
notaba en el muchacho un crecimiento sostenido en el tiempo. 
En una ocasión, el apóstol llevó al muchacho a aprender una 
de las lecciones más importantes de su vida: “trabajar su débil 
carácter”; para ello, le pidió que le acompañara a uno de sus 
viajes misioneros a la ciudad de Corinto.
Mientras navegaban en alta mar rumbo a su destino, la 
conversación entre el sabio maestro y el joven aprendiz se 
desarrolló de la siguiente manera:
 — Dime muchacho ¿has decidido lo que quieres ser en la 
vida?
 — Quiero ser un pastor de almas, señor. Respondió el joven 
Timoteo, esta vez, con más firmeza.
EDEN BARRIENTOS32
 — ¿Y sabes qué cualidades debe tener un pastor de almas?
 — Bueno, pienso que deber ser capaz de guiar a las personas 
por el camino correcto.
 — Has acertado muchacho, pero lo primero que debe traba-
jar un líder espiritual es su carácter.
 — ¿Su carácter?, ¿cómo es eso señor?
 — Te explicaré. Cuando se tiene una posición de liderazgo 
siempre encontraremos personas que aplaudirán nues-
tros logros, al final ellos serán los verdaderos amigos. Pero 
también aparecerán aquellos que nos adversarán, y trata-
rán de sabotear nuestros triunfos. ¿Sabes qué necesitarás 
en esos momentos?
 — ¿Qué cosa señor?
 — Carácter, hijo, mucho carácter.
 — ¿Y qué es el carácter señor?
 — Te lo explicaré de la siguiente manera: 
Hace algunos años, después de mi conversión, conocí a 
un discípulo llamado Pedro, respecto de quien el Señor había 
dicho que fundaría su iglesia. Ambos estábamos sirviendo 
en una iglesia en Antioquia donde asistían judíos y gentiles, 
siendo estos últimos cristianos no judíos. Y encontrándonos 
en ese lugar pude observar que Pedro actuaba con hipocresía 
pues siendo él judío actuaba como los gentiles, al obligar a 
los gentiles a hacer ritos judíos. En esa oportunidad, tuve que 
confrontarlo con mucho valor, pero también con un profundo 
respeto por su investidura de apóstol. Un líder siempre debe 
hacer lo correcto sin importar el riesgo personal, y eso se 
llama tener carácter.
TIMOTEO, EL APRENDIZ 33
 — ¡Entiendo señor¡ contestó muy emocionado el joven Ti-
moteo.
 — Muchacho, otra cosa que debes aprender es que la per-
sonalidad del hombre es como una casa. Cuando alguien 
construye una casa, lo primero que establece son las 
bases y las columnas, ellas constituyen el fundamento 
de la casa. En la vida del hombre las bases y columnas 
representan el carácter. Si un hombre no tiene carác-
ter se quebrará fácilmente ante las tempestades de la 
vida. Luego, cuando entras a una casa en primer lugar 
consigues la sala o recepción, ese lugar donde llegan las 
visitas. La sala en la vida del hombre representa las rela-
ciones. Si no haces vida social, al final te quedarás solo. 
Una sección importante de la casa son los dormitorios 
o cuartos. Estos son espacios para dormir, y en la vida 
representan el descanso. Si únicamente te dedicas a tra-
bajar, sin dejar lugar para el relax y el esparcimiento, ter-
minarás quemado y agotado. Y una mente colapsada se 
hace improductiva. Otro espacio importante en una casa 
es la cocina, el lugar donde se preparan los alimentos. En 
la vida, los nutrientes contenidos en los alimentos son 
importantes para tener energía y vitalidad. Pero también 
hay un alimento que nutre el alma, y eso tiene que ver 
con el estudio y la comprensión de las Santas Escrituras. 
Bien lo dijo Jesús: “Yo soy el pan de la vida, el que come 
de mi nunca tendrá hambre” (Juan 6:35). Por último hijo, 
en una casa no debe faltar el jardín. La jardinería da un 
atractivo especial a la casa, sobre todo si siembras flo-
res, rosas y claveles. En la vida del hombre, la jardine-
ría es su cuidado personal. Si solo te dedicas a trabajar y 
por ejemplo, no ejercitas tu cuerpo, comenzarás a ganar 
peso, y no faltará mucho para enfermarte. 
EDEN BARRIENTOS34
Pon atención muchacho, expresaba el maestro, para 
la próxima sesión vas a traer respondidas las siguientes 
preguntas: ¿quién eres?, ¿cómo crees que te perciben los 
demás?, y ¿cómo te enfrentas a la adversidad?
“La grandeza de los hombres se mide en la escala de la humildad”, 
El autor 
Quiebres y desplazamientos que experimenté 
con la lectura de la lección: “TRABAJA TU CARÁCTER”.
QUIEBRES
DESPLAZAMIENTOS
DIAGNOSTICO DE MI 
SITUACIÓN ACTUAL
OBJETIVO 
A ALCANZAR
META A LOGRAR TAREAS 
A EJECUTAR
CUARTA LECCIÓN: 
ASUME EL SERVICIO 
COMO UNA SAGRADA VOCACIÓN
Eran las seis de la mañana cuando la nave donde viajaba Pablo y el joven Timoteo ancló a orillas de Corinto, una 
ciudad de comerciantes, donde constantemente llegaban 
barcos venidos del Asia Menor con cargamentos de frutas, y 
animales de distintas especies. En el muelle les esperaba el 
recibimiento de un grupo de fieles, con quienes el apóstol 
se encontraba por segunda vez, y pertenecían a la iglesia allí 
establecida. Era un encuentro de mucho regocijo, pues habían 
pasado tres años desde la última vez que Pablo les visitó, no 
sin antes dejarles instrucciones que impactarían de manera 
favorable a la pequeña comunidad.
Habiendo descendido del barco, los hermanos les 
invitaron a desayunar, lo que hicieron entre muestras de 
alegría y hermandad por un encuentro que, sin duda alguna, 
traería mucho fruto espiritual a los fieles de la iglesia. Una 
vez tomados los alimentos, los hermanos acompañaron a los 
gratos viajeros a una pequeña iglesia, situada al norte de la 
ciudad, que disponía de un cuarto diseñado para hospedar 
misioneros. Allí pasarían gran parte del día descansando, luego 
de un largo y poco confortable viaje a través del inmenso mar.
Al anochecer, un grupo importante de hermanos esperaba a 
los misioneros, entre cánticos e himnos espirituales. Tres años 
atrás, el apóstol había dejado una iglesia robusta y madura 
espiritualmente, sin embargo, la influencia de enseñanzas y 
EDEN BARRIENTOS38
costumbres paganas había penetrado sus bases doctrinales. 
Esta situación, había sido informada unos meses antes a Pablo 
mediante carta de Filemón, un fiel creyente, a quien el liderazgo 
de la iglesia había excomulgado por oponerse a actitudes y 
prácticas poco éticas de sus pastores. A continuación, el texto 
de la carta que Filemón había escrito a Pablo respecto a la 
situación de la iglesia de Corinto:
“Estimado hermano en la fe, te saludo con un beso santo. 
Desde hace algún tiempo he querido informarte sobre algunos 
asuntos que están sucediendo en la iglesia y que están al margen 
de la sana doctrina y de las enseñanzas que fueron dadas por 
Jesús a los apóstoles. He visto con muchapreocupación que 
los pastores que una vez abrazaron la fe, trasquilan a sus 
ovejas, dejando la vida sencilla de un siervo de Dios por la 
opulencia y las ganancias deshonestas. Por otra parte, exaltan 
el poder terrenal como formas de piedad, dejando a un lado el 
modelo de la vida de servicio que nos dejó Cristo. También me 
inquieta que muchos utilicen los dones espirituales para sacar 
provecho de los fieles, les prometen abundantes bendiciones a 
cambio de dinero. Pero lo que más me preocupa mi estimado 
hermano en la fe, es la supuesta explosión de milagros que 
algunos pregonan con mucho sensacionalismo para captar la 
atención de las multitudes, convirtiendo el evangelio en un 
recetario instantáneo, y haciendo del culto un espectáculo 
público. De manera que en las iglesias ya no se habla de 
la piedad, ni de la cruz, y mucho menos de la necesidad de 
desarrollar el carácter de Cristo en el creyente. Por esto, mi 
amado hermano he querido escribirte, deseando tu pronto 
regreso y esperando que nos confirmes en la fe. Te escribe tu 
apreciado servidor; Filemón”.
Un silencio sepulcral invadió el ambiente, mientras el 
apóstol se dirigía con pasos firmes al púlpito de la iglesia. 
TIMOTEO, EL APRENDIZ 39
Todas las miradas estaban enfocadas en Pablo, el siervo de 
Dios. Algunos dejaron las bancas delanteras para acomodarse 
en las situadas en la parte posterior del templo, pues parecía 
que un millar de cuchillas saldrían disparadas por la boca del 
apóstol, rumbo a los corazones que se habían acomodado a la 
vida mundana y a la mediocridad espiritual.
De esta manera inició el apóstol su discurso ante la 
congregación de los Corintios:
“Amados hermanos, les saludo con un beso santo. Ustedes 
más que nadie conocen cómo fue mi llamado y la manera 
en que abandoné todo por servir a Cristo. Si ustedes tienen 
algo en que gloriarse yo más; circuncidado al octavo día, del 
linaje de Israel, de la tribu de Benjamín, hebreo de hebreos; 
en cuanto a la ley, fariseo; en cuanto al celo, perseguidor de la 
iglesia; en cuanto a la justicia que es en la ley, irreprensible. 
Pero cuantas cosas que eran para mi ganancia, las he estimado 
como pérdida por amor a Cristo. 
Hermanos, con estas palabras no pretendo juzgarlos, 
pero temo que algunos de ustedes se han desviado de la 
cruz de Cristo. Nuestros títulos terrenales sólo tienen valor 
en lo terrenal. En la vida espiritual lo que realmente vale 
son nuestros frutos, las acciones de caridad y una buena 
conciencia. No estoy diciendo que lo que ustedes logren en esta 
vida no tiene ningún valor, todo lo contrario, si ustedes desean 
sacar de ello alguna utilidad, colóquenlo a los pies de Cristo. 
¿Eres médico? esfuérzate por ser el mejor médico, y sirve a 
tus pacientes como si lo hicieras para Cristo. ¿Eres maestro? 
siembra valores en tus estudiantes y asume tu llamado como 
un apostolado. 
¿Eres soldado? entiende que eres servidor de Dios para 
impartir justicia.
EDEN BARRIENTOS40
Si ustedes quieren ser importantes, sirvan a los más 
pequeños entre ustedes. Ya lo enseñó Jesucristo: “El que 
quiera ser grande en el reino de los cielos, sea el que más sirve 
a sus hermanos” (Marcos 10:43). Ustedes no se imaginan el 
increíble poder que se desata cuando de manera voluntaria 
servimos al prójimo. Puertas se abren, cadenas se rompen, y 
extrañas fuerzas impulsadas por el universo actúan a nuestro 
favor, devolviéndonos con gratitud más de lo que hemos 
sembrado.
Amados hermanos, por otra parte, sé que muchos de 
ustedes hacen un mal uso de los dones espirituales, incluso 
me he enterado que algunos manifiestan tener la propiedad 
exclusiva del Espíritu Santo. Deben recordar que todos fuimos 
bautizados por un mismo Espíritu y que ustedes recibieron el 
Espíritu desde que creyeron, de manera que nadie tiene por 
qué prometerles algo que ya les ha sido dado. El mayor entre 
ustedes no es quien más dones espirituales tiene, sino aquel 
que actúa movido por el amor. Recuerden mis hermanos que la 
fe, la ciencia y las profecías cesarán, pero el amor permanecerá 
para siempre.
Mis apreciados hijos, también ha llegado a mis oídos 
que algunos de ustedes han hecho del culto un espectáculo 
público, de manera que su forma de adoración es vista por 
los paganos. No podemos hacer del culto un acto público para 
demostrar al mundo nuestra devoción a Dios. Recuerden que 
la verdadera adoración a Dios es la que se hace en privado y 
que se evidencia en una vida sencilla, integra y transparente 
ante Dios y los hombres.
Para finalizar, los pastores deben atender con honestidad 
al pueblo de Dios. Los líderes deben cuidar al rebaño, 
sirviéndoles con amor, no sacando de ellos ganancias para 
TIMOTEO, EL APRENDIZ 41
su propio provecho. Y no hagan culto a quienes les dirigen, 
pensando que son dioses. Ellos son hombres como ustedes, 
con virtudes y defectos. Dejen de seguir a personalidades, pues 
sólo serán recompensados aquellos que siguen los principios 
divinos. Paz sea a ustedes”.
Silencio, lágrimas y un profundo sentido de constricción 
se había apoderado de aquel ambiente espiritual. Todo estaba 
dicho, ni una palabra menos, ni una más. El mensaje del apóstol 
había sido como un bisturí cuidadosamente utilizado para 
extirpar el mal en el corazón de los confundidos creyentes. 
Palabras de felicitaciones y agradecimientos llovían sobre el 
elocuente predicador, quien con su dedo señalaba hacia arriba, 
indicando que toda gloria era para el Dios de los cielos.
“Para el que cree todo es posible”, 
 Jesús 
Quiebres y desplazamientos que experimenté con la lectura 
de la lección: “ASUME EL SERVICIO COMO UNA SAGRADA VOCACIÓN”.
QUIEBRES
DESPLAZAMIENTOS
DIAGNOSTICO DE MI 
SITUACIÓN ACTUAL
OBJETIVO 
A ALCANZAR
META A LOGRAR TAREAS 
A EJECUTAR
QUINTA LECCIÓN: 
ENFÓCATE EN LO QUE TE APASIONA
Cumplida la misión de confirmar la fe de los creyentes de Corinto, Pablo y Timoteo fueron acompañados por 
algunos diáconos de la iglesia hacia el puerto de la ciudad. Allí, 
luego de orar fueron despedidos y zarparon a Chipre, isla de 
pescadores, ubicada en el mar mediterráneo.
Mientras navegaban, ambos disfrutaban del hermoso 
paisaje marino, plagado de manglares, arrecifes y aves marinas 
de distintas especies. Una fresca brisa acariciaba el rostro 
de los siervos del Dios altísimo, quienes conversaban sobre 
el impacto espiritual que aquel mensaje dejaría sobre los 
creyentes de Corinto. Fue el apóstol, quien de manera abrupta 
interrumpió la conversación para dirigir una pregunta al joven 
acompañante:
 — ¿Ya estás seguro de lo que quieres hacer en la vida?
 — Si señor, quiero ser pastor de almas, contestó Timoteo con 
mucha determinación dirigiendo su mirada hacia los pro-
fundos ojos del apóstol.
 — ¿Pastor de almas?, ¿y qué vas a hacer con las profecías que 
se han revelado respecto a ti? Se dice que vas a ser un gran 
apóstol, un impulsador de sueños. 
 — Señor, con todo respeto, no quiero honores, ni fama, sólo 
deseo servir a la gente a través de mis talentos.
 Una pausa silenciosa surgió en la conversación. La 
contundencia y seguridad con la cual Timoteo se expresaba, 
EDEN BARRIENTOS46
impresionaron al viejo apóstol, quien reflexionaba sobre su 
evidente crecimiento.
 — Muy bien muchacho, veo que ya estás enfocado. Eso es 
muy importante en la vida, pues en mi carrera de apóstol 
fundando iglesias he visto gente que actúa en función de 
sueños y revelaciones, pero sólo buscan complacer a otras 
personas. También he observado con frecuencia fieles con 
buenas intenciones que tratan de asumir varios ministe-
rios y terminan en la nada. 
 — ¿Cómo es eso señor?- preguntó el aprendiz.
 — Escucha muchacho, la iglesia es como un cuerpo. Cada 
parte del cuerpo cumple una función importante por vil 
que parezca. Imagina que el cuerpo fuera sólo las orejas, 
¿quién caminaría para desplazar al cuerpo?, o imagina 
que todo el cuerpo fuera únicamente los ojos, ¿por dónde 
entrarían los alimentos? Pero resulta que cada parte del 
cuerpotiene una función específica, así es la iglesia. Ella 
es el cuerpo de Cristo, y nosotros como sus miembros, te-
nemos una función. ¿Has sido llamado a servir? hazlo con 
solicitud, dando gracia, de lo que de gracia has recibido. 
¿Has sido llamado a profetizar? habla lo que edifica a la 
iglesia. ¿Eres evangelista? predica con esmero lo que está 
de acuerdo con la sana doctrina.
Mientras San Pablo disertaba, el joven Timoteo 
reflexionaba en lo desdichado que sería para sus padres 
saber que no seguiría la corriente de las profecías que sobre 
él se había declarado. Sin embargo, una extraña sensación 
de seguridad le invadía al saber que con el trabajo pastoral 
que deseaba emprender, ayudaría a mucha gente a encontrar 
en la espiritualidad un sentido para sus vidas. Por otro lado, 
estaba convencido de que no quería ser un pastor más, sino 
TIMOTEO, EL APRENDIZ 47
uno que se esforzaría por dar el mejor pasto a sus ovejas, y 
de ser necesaria su propia vida por ellas. Ello implicaba un 
consecuente estudio de las Santas Escrituras para obtener un 
profundo conocimiento, y convertirse en un efectivo maestro 
bíblico, capaz de enseñar a los fieles respecto a los misterios 
del Reino, además asumir una vida de oración, a fin recibir 
sabiduría para tratar los asuntos de la iglesia.
Pero, aun cuando el joven Timoteo estaba enfocado en 
formarse en el trabajo pastoral, no se imaginaba que en un 
futuro cercano la providencia le convertiría en un hombre 
multidisciplinario, cuyos dones utilizaría para ayudar a la 
gente a ser auténticamente felices. Estaría a su cargo cambiar 
un paradigma que hasta ese momento había en la iglesia 
primitiva, pues, las conocidas epístolas paulinas hacían énfasis 
en asumir y madurar únicamente un don para la edificación 
de los creyentes. Pero en los caminos de Dios, todo es posible, 
y los milagros acurren cuando se trata de agregar valor en la 
vida de los fieles.
De esta manera el joven Timoteo, crecía cada día en la 
gracia, convirtiéndose en un pastor, un elocuente orador y 
en un futuro impulsador de sueños. Mientras que San Pablo 
delegaba en él muchos de sus asuntos, al darse cuenta de su 
rápido crecimiento. 
Por otra parte, en el corazón del apóstol Pablo estaba 
la visión de que Timoteo le superase; dejando de ser un 
discípulo para convertirse en un gran maestro. De esto se 
trata el liderazgo, pensaba San Pablo dentro de sí: “de trabajar 
arduamente en la vida de un discípulo, hasta que supere a 
su maestro”. Esta verdad estaba inserta en la mente de los 
seguidores de Cristo, por ello, Juan el bautista, al enterarse que 
Jesús andaba haciendo milagros entre las multitudes, afirmó: 
“es necesario que yo mengue, para que él crezca” (Juan 3:30).
“Mi religión, la excelencia” 
 El Autor
Quiebres y desplazamientos que experimenté con la lectura 
de la lección: “ENFÓCATE EN LO QUE TE APASIONA”.
QUIEBRES
DESPLAZAMIENTOS
DIAGNOSTICO DE MI 
SITUACIÓN ACTUAL
OBJETIVO 
A ALCANZAR
META A LOGRAR TAREAS 
A EJECUTAR
SEXTA LECCIÓN: 
LA VIDA, ES ALGO MÁS QUE LA COMIDA
Quince días habían pasado los misioneros en alta mar, desde que zarparon de Corinto. Esta vez se dirigían a la isla de 
Chipre en el mar mediterráneo. Allí el apóstol, por dirección 
divina, debía fundar una iglesia, no sin antes predicar en las 
plazas públicas el sencillo mensaje del evangelio. Mientras 
llegaban al puerto, pensaba en la posibilidad de darle al joven 
aprendiz la oportunidad de predicar por primera vez en la 
sinagoga de la ciudad.
Luego de llegar a tierra, recorrieron las principales calles 
que conducían a la plaza pública donde era frecuente encontrar 
a reconocidos oradores que filosofaban entre si. Esta situación 
le pareció oportuna al apóstol para predicar a Jesucristo. Y 
habiendo llegado a la plaza, con mucho temor aunque con una 
gran determinación, comenzó a hablar de cómo Dios se había 
hecho hombre y había tomado forma de siervo, muriendo en 
una cruz para salvar a los pecadores.
La elocuencia y el poder espiritual que emanaba del apóstol 
captaron de manera inmediata la atención de los colonos de la 
isla, quienes pensaban que Pablo hablaba de nuevos dioses. 
Luego de la alocución, una cantidad importante de hombres 
y mujeres presentes en el lugar manifestaron su deseo por 
oír más acerca de ese Dios que predicaba Pablo, sin embargo, 
algunos otros se burlaban cuando el apóstol se refería a la 
resurrección de los muertos.
Encontrándose ya en una posada, ambos misioneros 
conversaban sobre la efectividad del mensaje del evangelio en 
EDEN BARRIENTOS52
la vida de los colonos; y el apóstol aprovechaba para animar 
al joven aprendiz para que predicara el día siguiente, en la 
sinagoga.
 — Oye muchacho, he hablado con el rabino de la sinagoga 
para que te de la oportunidad de predicar. ¿Te animas?
 — Yooo… esteee…
 — Deja de tartamudear muchacho, tienes madera de evange-
lista más de lo que piensas.
 — ¿Usted cree?, preguntó el aprendiz.
 — Claro que sí, sin embargo, hay varias cosas que debes 
aprender: primero, a tener un dominio cabal del tema 
que vas a predicar, y si es posible memorizar el mensaje 
de arriba hacia abajo; segundo, debes estudiar a diario las 
Escrituras, ello te convertirá en una carta abierta al mun-
do; tercero, visualízate como un evangelista eficaz, recuer-
da que uno llega a ser la persona quien cree ser; cuarto, 
por muy preparado que te sientas, siempre habrá algo que 
te falta y eso es exactamente lo que complementará Dios. 
Has todo lo que te dicho y te ira muy bien.
Finalizada la conversación, el joven aprendiz tomó el viejo 
papiro que contenía las Sagradas Escrituras, y comenzó a 
estructurar un bosquejo cuyo tema se refería al significado de 
la vida en Cristo. De esta manera surgió el siguiente mensaje:
“Mis amados hermanos, desde que somos niños, nuestros 
padres nos educan de la mejor manera que pueden hacerlo. A 
muy pocos quizás les faltó amor, cuidado o educación. Cuando 
llegamos a la adolescencia nos convencen de la necesidad de 
tener un oficio para obtener el pan de cada día. De este modo, 
nos esmeramos por cursar estudios a fin capacitarnos y, de 
TIMOTEO, EL APRENDIZ 53
ser posible, de titularnos en alguna profesión. Luego, con el 
paso de los años surge para la gran mayoría de las personas 
la necesidad de tener una pareja, procrear hijos, y constituir 
una familia. En este proceso, algunos crecemos con traumas 
emocionales, al no saber manejar la ira, los celos o la falta de 
perdón, pues nadie nos enseñó a educar nuestras emociones. 
A muchos de nosotros, jamás nos hablaron de la necesidad 
de desarrollar una vida espiritual, ni de Dios. De manera que 
es común que algunos inicien la etapa de padres y esposos, 
errando en la crianza de los hijos, sin un manual que indique 
cómo hacerlo de la mejor forma, cómo ser un buen amigo, 
amante, buen esposo y buen padre, y cómo trascender 
espiritualmente. 
Con el paso de los años muchos envejecen padeciendo 
los males y enfermedades propias de la edad, y sin darse 
cuenta, se les escapa la vida, subsistiendo sin saber lo que 
es vivir, y sin haber hallado en un propósito de existencia, 
un sentido, una razón por la cual haya valido la pena venir 
a este mundo.
Mis amados, es necesario hacer lo dijo el profeta Isaías: 
“deténganse en el camino y examinen cuan provechosa han 
sido sus vidas” (Jeremías 6:16) y ello tiene que ver con el 
legado que hemos de dejar a nuestras generaciones cuando 
llegue el momento de abandonar este tabernáculo, que es el 
cuerpo. ¿Consideras qué eres un buen padre? Bien, entonces 
habla de los valores que les has dado a tus hijos. ¿Crees qué 
has sido un excelente esposo?, ¿dónde están los comentarios 
halagadores hacia tu mujer? ¿Consideras que eres un buen 
hombre? Explica: ¿a cuántos hambrientos has dado de comer, 
o de cuántos enfermos has tenido misericordia?
Amados hermanos, con estas palabras no pretendo 
juzgarlos y menos aun condenarlos. Ustedes han vivido de la 
EDEN BARRIENTOS54
manera que elmundo les enseñó a vivir, pero ahora que han 
escuchado este mensaje están a tiempo de hacer cambios 
significativos en sus vidas y dejar huellas positivas en las 
personas que les rodean. Recuerden las palabras de Cristo: 
“la vida es más que la comida y el cuerpo más que el vestido” 
(Lucas 12:23). Si sólo viven para vestir y comer, y nunca se han 
preguntado cómo pueden contribuir a hacer de este mundo 
un mejor lugar, entonces han errado en el camino. Necesario 
es hallar una razón por la cual vivir, y ustedes desde hoy la 
tienen. Les amo en Cristo”.
Un efecto muy positivo había dejado aquellas palabras 
en el corazón de cada creyente. Por primera vez alguien 
se interesaba en ayudarles a cambiar sus vidas. Al final 
del sermón, una joven mujer llamada Damaris se acercó al 
intrépido orador para agradecer por haberle enseñado a 
discernir entre lo urgente y lo importante. Pues su familia, por 
generaciones, se había dedicado a trasmitir a sus hijos y nietos 
la importancia de ser pioneros en el negocio de las telas; por lo 
que muchos de sus parientes eran personas muy ricas pero, a 
la vez, seres desdichados, con casos recurrentes de divorcios, 
suicidios, y adicciones al vino.
Eso que me cuentas sucede en una familia cuando el 
dinero se hace una prioridad, y se descuidan los valores del 
espíritu, le decía el predicador a Damaris, mientras que ambos 
caminaban hacia la salida del templo.
“Servir, servir y servir, fue el modelo que Jesús nos dejo” 
El Autor
Quiebres y desplazamientos que experimenté con la lectura 
de la lección: “LA VIDA, ES ALGO MÁS QUE LA COMIDA”.
QUIEBRES
DESPLAZAMIENTOS
DIAGNOSTICO DE MI 
SITUACIÓN ACTUAL
OBJETIVO 
A ALCANZAR
META A LOGRAR TAREAS 
A EJECUTAR
SÉPTIMA LECCIÓN: 
ELABORA TU PROYECTO DE VIDA
Finalizado el servicio eclesiástico, los ancianos de la iglesia invitaron a los misioneros a compartir los alimentos. En 
la parte de superior de la iglesia había una amplia terraza, 
que los hermanos utilizaban para hacer actividades de 
convivencia. Esta vez se reunirían para celebrar la presencia 
de sus invitados, pues la visita de los dos servidores había sido 
de bendición para aquella humilde congregación. 
Al día siguiente, antes de que levantara el sol, Pablo 
y Timoteo partirían en un largo viaje misionero hacia la 
isla de Malta, ubicada al igual que Chipre, en el centro del 
mediterráneo. Los habitantes de esa región eran conocidos 
por tener vidas ociosas y aburridas entregadas a los excesos 
de la carne. Para los determinados misioneros, tal condición 
cultural representaba un desafío, pues se necesitaba algo más 
que elocuentes palabras para convencer a los colonos sobre la 
necesidad de hacer un cambio favorable en sus vidas. 
Un grupo considerable de hermanos había acompañado a 
los misioneros al puerto, donde una nave llamada “Valentina” 
zarparía hacia la referida isla. La enorme embarcación se 
trasladaba de manera constante a la región para transportar 
comerciantes, quienes intercambiaban mercancía con los 
lugareños. 
Transcurridos diez días desde que Pablo y Timoteo 
partieron desde la isla de Chipre, un sentimiento de nostalgia 
les embargó por haber dejado a los hermanos, con quienes 
EDEN BARRIENTOS58
compartieron días y noches de experiencias de fe. Pero esa es 
la tarea de los misioneros: plantar iglesias y preparar obreros. 
Muy poco tiempo había para descansar.
Mientras la enorme embarcación se desplazaba por el 
océano, dejaba una estela de espuma blanca como huellas 
en el inmenso mar. Un revoloteo de aves marinas asentadas 
sobre la proa del barco daba avisos a sus tripulantes sobre su 
cercanía a tierra. A lo lejos se divisaba la pequeña isla en forma 
de una piedrecita de color gris. Cuando de repente asintió en 
alta voz el capitán:
 — ¡Recojan las velas, suelten anclas¡ Habían llegado a su des-
tino.
La isla de Malta era conocida por sus encantos naturales; 
corales, manglares y cocotales rodeaban el islote. Según 
leyenda de sus habitantes, mucho tiempo atrás los dioses 
habían descendido con forma de hombres para unirse en 
acto carnal con las mujeres de la isla, dejando con su partida 
una estela de belleza natural que hacía del lugar un paraíso 
terrenal. Sus habitantes eran conocidos por vivir en el ocio y 
los excesos temporales de la carne.
Descendieron de la nave, y Pablo y Timoteo se dirigieron 
al norte de la isla, la zona más poblada de la región. Allí era 
común ver a las personas entregadas al juego y la glotonería. 
Los únicos que trabajaban eran los pescadores, quienes a diario 
intercambiaban alimentos del mar por frutas y verduras.
El “Ensueño” era el nombre del hospedaje al cual llegaron 
los esforzados misioneros. Al entrar, un grupo de hombres 
jugaban apostando quién bebería más cantidad de vino, y 
al percatarse de la presencia de los dos extraños en el lugar, 
detuvieron el juego y un pesado silencio dominó la atmosfera.
TIMOTEO, EL APRENDIZ 59
 — Paz a este lugar, manifestó San Pablo.
 — Paz a este lugar, respondieron a una sola voz y de mane-
ra burlona el grupo de hombres alojados en el lugar. Al 
percatarse el apóstol de su estado de ebriedad, se abrió 
paso entre ellos junto al joven Timoteo, logrando llegar a 
la recepción del hospedaje, donde una somnolienta mujer 
señalaba con su dedo, indicando el lugar donde encontra-
rían las llaves de la habitación.
Estando en la habitación, maestro y aprendiz conversaban 
sobre la estrategia qué utilizarían para captar la atención 
de los colonos a fin de convencerles sobre la necesidad de 
cambiar sus vidas. Tal acción representaba un desafío, pues 
nada era más importante y normal para los habitantes que ser 
esclavos del vicio, los juegos, y la glotonería.
La plaza principal de la isla era el mejor lugar que los 
enérgicos misioneros habían escogido para llevar el mensaje a 
los perdidos pobladores. En ese lugar era frecuente ver a una 
cantidad importante de hombres y mujeres ebrios abrazados 
entre sí. También se posaban allí jóvenes malabaristas que 
vivían de la propina de los transeúntes. 
Luego de orar, le pareció bien a Pablo dar al joven Timoteo 
la responsabilidad de llevar el mensaje a la necesitada y 
confundida comunidad, concentrada ahora en la plaza. A 
continuación el texto del sermón que Timoteo con la ayuda 
del maestro preparó, y cuyo tema principal versó sobre la 
importancia de desarrollar un proyecto de vida:
“He visto con suma preocupación cómo muchos de ustedes 
van de un lugar a otro, como quien no tiene un motivo por el 
cual vivir. También he observado que, al no tener un proyecto 
de vida, los juegos, el ocio y el aburrimiento ocupan la mayor 
EDEN BARRIENTOS60
parte de su tiempo. Apreciados amigos, no piensen que hemos 
venido a juzgarlos, pues ustedes por generaciones han hecho 
lo que vieron y aprendieron de sus antecesores. Queremos que 
entiendan que fuimos escogidos por el Altísimo para traerles 
una buena noticia: A partir de hoy sus vidas comenzarán a 
tener un verdadero significado”.
Hasta ese momento, nadie había prestado atención al 
discurso del joven orador. Cada quien estaba ocupado en 
su diversión. Sin embargo, cuando oyeron la frase “sus vidas 
tendrán un verdadero significado”, de inmediato dejaron 
cuanto estaban haciendo y la atención de todos se volcó 
sobre los misioneros. Así, el joven Timoteo continuó con su 
disertación, pero esta vez ante una multitud hambrienta de 
escuchar, a quienes señaló lo siguiente:
“Mis queridos amigos, a cada uno de ustedes la vida los 
dotó de una serie de destrezas y habilidades, de manera 
que al hacer uso de ellas, no sólo serán capaces de ganar el 
pan de cada día, sino que ocuparían su tiempo en algo útil y 
significativo. En este hermoso día les pregunto: ¿Cuáles son 
sus habilidades?, ¿cuáles son sus fortalezas?, ¿qué es lo que la 
gente elogia de ustedes? Si dominas bien la escritura, puedes 
llegar a ser un gran escritor; si tienes habilidades manuales, 
puedes convertirte en un gran orfebre, o en un experto 
trabajadordel cuero. Si tienes una bella voz, prueba entonando 
canciones que te edifiquen”.
El joven Timoteo explicaba a la multitud haciéndoles 
ver la importancia de que cada quien elaborara su plan de 
vida: “Amigos, ¿quién de ustedes ha oído hablar de la rueda 
de la vida?” Ante esa interrogante, nadie pudo responder, y 
esperaron escuchar con mucho interés, de parte del orador, de 
que se trataría esa extraña expresión “rueda de la vida”.
TIMOTEO, EL APRENDIZ 61
Les dijo: “Presten atención amigos, imaginen ustedes un 
pastel; ese pastel representa la vida. Es necesario separarlo 
en trozos para que cada una de las partes encuentre su 
significado. Supongan que el pastel ha sido dividido en 6 
porciones de tamaños iguales. Un pedazo representa el trabajo, 
necesario para garantizarnos el sustento de cada día. Otra 
porción simboliza las amistades, ellas conforman nuestra vida 
social. Una tercera parte es la familia, nuestro mejor apoyo en 
momentos de necesidad. Un trozo son los ahorros, necesarios 
para los tiempos de escases y las inversiones futuras. No 
puede faltar la sección de la diversión y el esparcimiento para 
lograr enfoque y relajación. Y el último trozo del pastel, la 
vida espiritual, de donde surgen los valores sobre los cuales 
se sustentan todas nuestras acciones, y lo que al final dará 
significado verdadero a nuestra vida. ¿Qué han hecho ustedes 
con el pastel de su vida hasta ahora?”. Se hizo una larga pausa, 
hasta que un jovencito levantando su mano manifestó:
 — Hemos hecho un solo pastel, dejando todo nuestro tiempo 
para la diversión. 
 — Exactamente mi querido amigo, has acertado en la res-
puesta, respondió Timoteo, mientras observaba con ad-
miración la osadía del muchacho.
Al finalizar, Pablo y Timoteo se abrieron paso ante la 
multitud. Los siguientes días hablaron a los habitantes de 
la ciudad de día y noche sobre la importancia de tener un 
proyecto de vida que incluyera el desarrollo de una genuina 
espiritualidad, de manera que sus vidas cobraran significado, 
y fueran de provecho para los demás. 
Había transcurrido un año desde que Pablo y Timoteo 
arribaron a la isla de Malta. Cambios significativos ocurrieron 
en la vida de la mayor parte de sus habitantes, desde que 
EDEN BARRIENTOS62
los misioneros llegaron a ese lugar. Los sitios que antes se 
destinaban para el juego, las apuestas y la ingesta de bebidas 
alcohólicas ahora eran escuelas de talentos. Y las mujeres 
que antes se sentaban en la plaza a hablar sobre la vida de 
los demás, se formaron en el oficio del tejido; así que todos 
encontraron en sus tareas, una actividad para estar ocupados 
en el trabajo creativo. 
Un hombre de la isla llamado Gayo, agradecido por haber 
desarrollado con mucho éxito su proyecto de vida donó a la 
comunidad una de sus casas para que allí se levantara una 
iglesia, en la cual el viejo apóstol pensó colocar a un liderazgo 
con una forma de servir nada convencional.
Dirigidos por el Espíritu Santo, decidieron nombrar en 
la conducción de aquella iglesia a hombres de reconocido 
testimonio, quienes serían llamados servidores. La experiencia 
del apóstol Pablo fundando iglesias le advertía sobre el peligro 
de usar el término gobierno en la casa del Señor, pues conocían 
de casos donde hombres, cegados por la avaricia y habiéndose 
desviado de la verdad, utilizaron su investidura ministerial 
para sacar provecho de los fieles. Por tal razón, en la iglesia 
nadie gobernaba, todos servían, de allí que los pastores eran 
aquellos que se destacaban porque con humildad de espíritu 
servían a los demás. 
Otro aspecto en el cual el apóstol Pablo insistía 
frecuentemente, era en la necesidad de que los fieles siguieran 
principios espirituales y no a personalidades. Estando en 
Jerusalén muchas veces se vio en la necesidad de confrontar 
a algunos líderes, quienes permitían ser idolatrados por sus 
congregaciones, debido a su gran carisma y elocuencia, y 
muchos de ellos se volvían a las palabrerías huecas, dejando 
a un lado las sencillas enseñanzas de Cristo. En una de las 
TIMOTEO, EL APRENDIZ 63
iglesias Pablo tuvo que lidiar con uno llamado Apolos, a quien 
muchos creyentes seguían por su poder persuasivo mediante 
la oratoria. ¿Quién es Pablo?, ¿quién es Apolos? sino servidores 
de Jesucristo, predicaba San Pablo con gran vehemencia, 
convenciéndoles de que el evangelio no se trataba de vanas 
palabrerías, sino de una vida sencilla en donde se obraba por 
el amor, primero a Dios y luego a los hermanos. 
Un día, de regreso al hospedaje, Pablo y Timoteo platicaban 
sobre la necesidad de fundar iglesias a lo largo de la isla, 
cuando un mensajero interrumpió:
 — Señor, carta para usted.
 — ¿Una carta…? respondió algo sorprendido el apóstol.
 — Parece venir de Jerusalén, replicó el mensajero.
 — Y luego de desenrollar el papiro, el apóstol leyó lo siguien-
te:
“Amado hermano en la fe, me es grato comunicarme 
contigo por medio de estas líneas, deseando que la bendición 
del Altísimo sea sobre ti y el hermano Timoteo. Es mi mayor 
anhelo informarte que la iglesia de Jerusalén ha crecido en 
número de creyentes, tanto que tuvimos que ampliar el local 
y comprar nuevas bancas. Pero asimismo, participarte mi 
preocupación, estimado apóstol, ya que se ha introducido en 
la iglesia una doctrina que hace énfasis en la necesidad de que 
los creyentes tengan prosperidad material. Tal cosa no parece 
mala, en sí misma, a no ser porque ello se ha convertido en la 
principal enseñanza, dejando a un lado la doctrina del amor 
fraternal, del arrepentimiento, la piedad y de la fe no fingida. 
Por esta razón deseo que regreses, pues es necesario que les 
EDEN BARRIENTOS64
recuerdes a mis hermanos los primeros rudimentos de la fe. 
Te saluda con un beso santo, tu amado hermano Teófilo”.
Una sensación de ira santa recorrió las fibras del apóstol 
Pablo. Le parecía imposible que los hermanos en tan poco 
tiempo se hubieran apartado de la fe, siguiendo enseñanzas de 
hombres impíos que con astucia y movidos por la ambición del 
dinero no buscan otra cosa más que despellejar a las ovejas. 
 — Escucha Timoteo, manifestaba el apóstol Pablo mientras 
sentado en su lecho colocaba ambas manos sobre su cabe-
za en señal de preocupación.
 — Mañana mismo zarparé para visitar la iglesia de Jerusalén.
 — ¿Y qué va a pasar conmigo? preguntaba el inexperto pas-
tor, algo inseguro por la inacabada tarea de seguir guiando 
a los hermanos de la isla hacia el logro de sus sueños.
 — Te quedarás sólo, pero con la guía del Espíritu Santo debes 
aprender desde ahora a asumir tu responsabilidad como 
pastor de almas.
Una sensación de temor e impotencia recorría de pie a 
cabeza las fibras emocionales del joven Timoteo. ¿Cómo era 
posible que con tan poca experiencia pastoral pudiera dirigir a 
una congregación? sin embargo, al pensar que en ese negocio 
la dirección era de Dios, la confianza le era devuelta, y con ello 
la posibilidad de asumir con dignidad su tarea como pastor de 
almas e impulsador de sueños.
La mañana siguiente, muy temprano, algunos ancianos de 
la congregación acompañaron al apóstol Pablo al malecón de 
la playa, de donde partiría una nave llamada “Isabelica” con 
destino a Jerusalén. Luego de orar, los hermanos colocaron sus 
TIMOTEO, EL APRENDIZ 65
manos sobre él, y le despidieron dotándolo de agua, comida y 
ropa para el largo viaje.
 — Te quedarás en mi corazón, susurró Timoteo a los oídos 
del anciano mientras le despedía con un caluroso abrazo. 
 — Tú también estarás en mi corazón muchacho, le respondió 
el apóstol, devolviendo con algo de nostalgia el caluroso 
abrazo.
“A Jesús es difícil conocerle y no amarle, amarle y no servirle” 
Anónimo 
Quiebres y desplazamientos que experimenté con la lectura 
de la lección: “ELABORA TU PROYECTO DE VIDA”.
QUIEBRES
DESPLAZAMIENTOS
DIAGNOSTICO DE MI 
SITUACIÓN ACTUAL
OBJETIVO 
A ALCANZAR META A LOGRAR
TAREAS 
A EJECUTAR
OCTAVA LECCIÓN: 
SACA LO MEJOR DE TU EQUIPO
Seis meses transcurrierondesde que el apóstol San Pablo abandonó la isla de Malta para ir a Jerusalén, obedeciendo 
al llamado que algunos ancianos de esa iglesia le hicieron a 
través de Teófilo, por causa de algunas prácticas poco éticas 
que allí que se habían introducido. Mientras tanto, Timoteo se 
había dedicado a predicar las Santas Escrituras a los fieles de la 
pequeña congregación. Sin embargo, a pesar de su entusiasmo 
y de su sobrada juventud, el agotamiento físico estaba creando 
en él un vacío emocional que ocasionalmente le deprimía. En 
la iglesia había mucho trabajo por hacer, desde limpiar las 
bancas de madera hasta administrar los recursos destinados 
a obras de caridad; y el joven pastor había asumido todas esas 
tareas, además de sus funciones pastorales. 
Una noche, mientras dormía, un ángel del Señor se le 
apareció en sueños y le dijo: “no temas Timoteo, el Altísimo 
me ha enviado a tí para decirte que le entregues a Él tu pesada 
carga. Debes entender que a todos los fieles de tu congregación 
Dios los ha dotado de muchos dones, talentos y habilidades 
para que junto a tí cumplan la misión para la cual han sido 
llamados. Cornelio, en su vida pasada fue recaudador de 
impuestos, él tiene habilidades administrando los recursos 
financieros de la iglesia, Simón, es un humilde carpintero, 
será muy útil en la reparación y mantenimiento de las bancas. 
Felipe, es un fiel servidor, él te ayudará a repartir las viandas 
entre los necesitados. Para la predicación apóyate en Gayo, el 
anciano tiene cualidades de buen orador”.
EDEN BARRIENTOS70
Cuando despertó el joven pastor reflexionaba sobre el 
sueño que había tenido. No le quedaban dudas “la providencia 
estaba en el asunto”, y tomando una pluma escribió sobre 
un viejo lienzo las instrucciones que el ángel le había dado. 
Mientras lo hacía, una sensación de fe le embargó. Por primera 
vez, tenía la fuerte convicción de que Dios le estaba guiando en 
ese duro camino. 
Una vez que delegó las respectivas funciones entre los 
hermanos de aquella iglesia, según el ángel había señalado, 
pudo apreciar que tenía más tiempo para escribir los sermones, 
mientras que cada uno de los servidores estaba enfocado en su 
actividad. De esta manera crecía aquella comunidad cristiana, 
transformando la vida de sus habitantes. 
Aquel sueño que había tenido noches atrás, también 
despertó en el joven pastor la necesidad de hacer un monitoreo 
de las habilidades que tenían los miembros de la iglesia. Había 
mucho trabajo por hacer y ya era hora de buscar formas no 
tradicionales de llevar las buenas nuevas a las almas perdidas. 
Mientras que hacía un inventario de las competencias y 
habilidades que poseían los miembros de aquella humilde 
iglesia, pensaba en lo maravilloso que resultaría utilizar todo 
aquel talento humano para la expansión del evangelio. De 
esta manera y para grata sorpresa encontró entre los laicos: 
payasos, titiriteros, danzarines, cantantes, poetas, músicos, 
carpinteros, tejedores, escritores y otros oficios de interés. 
Pero, ¿cómo hacer para utilizar y combinar estas 
habilidades y talentos para llevar el mensaje a los perdidos 
sin Dios?, ¡que mejor idea que conversar con los fieles de 
la congregación sobre opciones innovadoras para llevar las 
buenas nuevas!; al final, ellos son los expertos, pensaba el 
apóstol Timoteo. Así, conversando con Andrés, el payaso, pudo 
TIMOTEO, EL APRENDIZ 71
entender que el mensaje de la cruz era posible transmitirlo 
con algo de humor, pues la verdad es que mucha gente vaga 
por el mundo sintiéndose triste, desamparada, y sin una 
razón por la cual vivir. Mientras Marcos, el titiritero, opinaba 
que la primera población que necesitaba ser evangelizada 
son los niños, mediante el uso de títeres y marionetas, de 
manera que pudieran entender el mensaje del evangelio de 
una forma entretenida. Por otra parte Esteban, el danzarín, 
estaba convencido de que mediante el baile y la danza se podía 
trasmitir un mensaje de salvación utilizando al cuerpo como 
un medio de expresión.
De este modo, todos los que formaban parte de aquella 
congregación, ofrecieron sus dones y talentos para la 
expansión del evangelio; y en poco tiempo aquella iglesia fue 
conocida por los habitantes de la isla, como una comunidad 
que les había traído esperanza, luz y felicidad. 
La primera actividad evangelística al aire libre, la realizó 
un domingo en la mañana en la plaza principal. En ese lugar se 
reunían los lugareños para conversar sobre sus faenas diarias. 
El equipo de evangelismo, bajo la dirección del joven pastor, 
había decidido expresar la historia del hijo pródigo mediante 
una obra teatral, pues a muchos de los colonos les apasionaba 
el teatro. 
Aproximadamente quinientas personas se reunieron 
alrededor del equipo evangelístico. Aquella obra del hijo 
pródigo tocó el corazón de mucha gente. Pues la historia 
relataba cómo un hijo que pidió a su padre anticipadamente 
la parte de la herencia que le correspondía, luego de haber 
derrochado su dinero en bebida, amigos de farras, y mujeres 
de la mala vida, se vio obligado a pedir trabajo a un hacendado, 
quien lo colocó al cuidado de los cerdos. Y estando allí, con 
EDEN BARRIENTOS72
mucha hambre deseaba llenar su estómago de las algarrobas 
que comían estos animales. Pero, al darse cuenta de su precaria 
condición, decidió volver a la casa de su padre, quien al verlo 
regresar lo recibió entre muestras de amor y regocijo. 
El día de la presentación, casi trescientas personas 
decidieron formar parte de aquella cristiana comunidad, 
movidos por esta dramática pero conmovedora historia, que 
les habló del incondicional amor de Dios Padre, quien envió a 
su unigénito hijo a dar la vida en una cruz por la salvación y 
vida eterna del resto de sus hijos. Esa fue la primera vez que 
cientos de personas fueron evangelizados mediante las artes 
escénicas, pues anteriormente misioneros habían visitado a la 
isla, usando el tradicional método de evangelizar casa por casa, 
que lamentablemente no ofreció los resultados esperados. 
Un año transcurrió desde que el apóstol Pablo había 
abandonado la isla para ir por instrucción divina a Jerusalén. 
En la isla de Malta, la iglesia bajo la dirección del joven pastor 
seguía creciendo y Timoteo sentía que era hora de formar un 
nuevo liderazgo. Por enseñanza de Pablo, había entendido que 
en la viña del Señor nadie es indispensable y que era necesario 
pasar la antorcha a las nuevas generaciones. También tenía 
la firme convicción de su llamado como apóstol para fundar 
otras comunidades y llevar el evangelio a otras fronteras; y 
estaba convencido de que era una labor especial, pues además 
del trabajo pastoral, Dios le había dado el don de guiar a las 
personas en el logro de sus sueños. 
En el desempeño de su labor, Timoteo a diario recibía una 
muchedumbre que hacía fila en la puerta de la humilde casa 
pastoral buscando ser atendidos. ¿Qué debo hacer con mi 
vida?, ¿hacia dónde debo ir? Eran algunas de las preguntas 
que los lugareños frecuentemente le hacían a Timoteo. 
TIMOTEO, EL APRENDIZ 73
A pesar de la gran cantidad de trabajo, el corazón del 
joven pastor estaba ligado al de Pablo, y extrañaba mucho 
su presencia, pues fue para él como un padre, un mentor, 
un amigo. Un viernes en la mañana, mientras preparaba su 
sermón dominical, una carta llegó a sus manos, se trataba 
de su estimado hermano y compañero de milicia, San Pablo, 
quien desde una cárcel en Roma le escribió:
“Mi estimado amigo y fiel discípulo, te escribo esta 
carta desde mi prisión en Roma. La iglesia de Jerusalén fue 
duramente perseguida por Nerón, el emperador. De manera 
que algunos fueron lacerados y muertos a espada, mientras 
que otros están encarcelados. Y yo, me debato entre morir y 
estar con Cristo o quedarme en la tierra por causa de la obra. 
Pero esa decisión la dejo al Señor, a quien sirvo de corazón. 
Mi amado Timoteo estoy orgulloso de ti, pues ha llegado a 
mis oídos que con corazón sincero sirves al Señor.Sé que en 
ocasiones has renunciado a tu salario para dar de comer a 
los más necesitados de la congregación, cumpliéndose así la 
palabra de que el buen pastor, su vida da por las ovejas. Yo 
estoy a punto de ser sacrificado, el tiempo de mí partida está 
cercano, por lo que no me queda otra cosa que entregarme en 
las manos del Señor. He peleado la buena batalla, he acabado 
la carrera, he guardado la fe. Por favor, cuando puedas, ven a 
visitarme en Roma”. 
Mientras que el Joven Timoteo leía aquella carta, un mar de 
lágrimas recorría sus mejillas. No podía entender cómo un fiel 
y servidor de Jesucristo, podía terminar su vida de esta manera. 
Sin embargo, ahora compendia por el Espíritu lo que Jesús 
había enseñado sobre la necesidad de pasar por tribulaciones 
a fin de que sea probada nuestra fe. Definitivamente, el reino 
de los cielos sólo será arrebatado por los valientes.
EDEN BARRIENTOS74
Al día siguiente, mientras acomodaba su equipaje, Timoteo 
pensaba en quién sería la persona más idónea para ocupar 
su lugar como pastor suplente de la congregación, mientras 
se trasladaba a Jerusalén. Y habiendo orado, pensó en Gayo, 
quien además de ser un hombre integro, y de buen testimonio, 
poseía habilidades para enseñar. Por otra parte, se identificaba 
con la visión que Timoteo tenía sobre la iglesia como un lugar 
para adorar, crecer y compartir experiencias de fe. Aspecto 
que desviaron muchas iglesias, al utilizar sus espacios para 
comercializar, y hacer vida social.
Timoteo fue ministrado y despedido por los hermanos más 
allegados de su congregación, el joven pastor se enrumbó en 
una nave de pasajeros llamada “La Italiana” que partía rumbo 
a Roma.
Tres horas habían transcurrido desde que salieron del 
muelle, cuando vientos huracanados comenzaron a golpear 
la nave, sacándola de su rumbo, y no pudiéndola dominar el 
capitán del barco dio instrucciones a los marineros de lanzar al 
mar toda la mercancía habida en la nave, lo que hicieron entre 
los gritos e insultos de los comerciantes que en ella viajaban. 
Por más que los experimentados hombres de mar trataron 
de controlar la agitada nave, grandes olas pegaban con furia al 
costado de la embarcación. Parecía que en cualquier momento 
se partiría en dos. Y justo cuando el capitán avanzaba 
con dificultad al centro de proa para dar a los tripulantes 
instrucciones de abandonar la fracturada embarcación, alguien 
comenzó a entonar una canción; era Timoteo, quien sujetado 
fuertemente a uno de los pilotes de la nave quien cantaba: 
“Porque tú eres bueno, porque para siempre 
tu misericordia es, cada mañana al despertar 
TIMOTEO, EL APRENDIZ 75
sé que en tí puedo confiar, me sostienes por 
tu gran fidelidad. 
Porque tú eres bueno, porque tu justicia, 
justicia eterna es, con ella yo me deleitaré 
y en tu verdad caminaré por tu senda de 
justicia guíame. 
Porque tú eres bueno, porque para siempre 
tu misericordia es, cada mañana al despertar 
se que en tí puedo confiar, me sostienes por 
tu gran fidelidad”
Mientras que el joven pastor cantaba, los marineros y 
demás tripulantes buscaban desesperadamente entre la nave 
piezas de madera para mantenerse a flote en el mar. Por su 
parte, el capitán se había aferrado con todas sus fuerzas del 
timón, tratando infructuosamente de enderezar la zarandeada 
embarcación. Pero, de repente, ante la mirada atónita de todos, 
la tempestad cesó; y luego una suave, pero misteriosa brisa 
acariciaba el rostro de los asombrados pasajeros, quienes 
dirigían sus miradas hacia el joven viajero. 
 — ¿Quién eres tú? preguntó alguien, mientras que al fondo 
de la nave otro interrogó: ¿quién es tu dios? Y poniéndose 
de pie comenzó a hablarles diciendo:
“Soy Timoteo, siervo del Dios viviente. El Dios que hizo los 
cielos y la tierra, el mar y las cosas que subsisten. Todo fue 
creado por Él y por medio de Él; de manera que todas las cosas 
le están sujetas bajo sus pies, sean tronos, sean dominios. Ese 
Dios les ama, y no ha querido que ustedes perezcan, antes bien 
desea que ustedes se conviertan a Él”.
EDEN BARRIENTOS76
Cuando Timoteo terminó de predicar algunos hombres 
compungidos de corazón se acercaron a él rogándoles que 
orara a su Dios a favor de ellos, lo que hizo imponiendo sus 
manos sobre las cabezas de aquellas personas. Una sensación 
de paz y bonanza cubrió la atmósfera de la nave, mientras que 
algunos pasajeros tarareaban la canción que habían aprendido 
del joven pastor.
Eran las seis de la mañana cuando “La Italiana” llegó a 
las costas de Roma en Italia. Luego de pisar tierra, el joven 
Timoteo tardó dos horas más en llegar a su destino, viajando 
como pasajero en un carruaje tirado por caballos. Mientras 
tanto, una serie de pensamientos sobre el estado de salud del 
apóstol pasaban como aguijones encendidos sobre su cabeza. 
Al llegar a la entrada de la cárcel, se impresionó por la 
hermética construcción de piedras con ventanales aseguradas 
con gruesas barras de hierro, diseñadas para impedir el escape 
de los presos. Entró a la prisión escoltado por un soldado 
de una compañía llamada “la indestructible”. San Pablo se 
encontraba alojado en uno de los sótanos de aquella fortaleza, 
aferradas manos y piernas a un cepo con cadenas de hierro. 
En la celda donde se encontraba el apóstol, un anciano 
ciego preguntó a gritos: ¿Quién anda ahí? Timoteo no lo 
podía creer, era su hermano en la fe, su padre espiritual, San 
Pablo. Sentimientos encontrados invadieron su corazón. ¿Se 
trataba en realidad del apóstol o era alguien a quien la vida 
injustamente había dado una condena perpetua?
Inmediatamente reconoció la cicatriz en forma de cruz 
que el anciano llevaba en su brazo, que él mismo llamaba “la 
marca de Cristo en mi cuerpo”. Un nudo se había formado en la 
garganta del joven pastor. Por un momento, se halló así mismo 
bañado en lágrimas de dolor, mientras tomaba con suavidad 
TIMOTEO, EL APRENDIZ 77
las manos del anciano susurrándole en el oído: “He aquí un fiel 
soldado de Jesucristo”. 
 — ¡No puede ser¡ gritaba emocionado el anciano, mientras 
restregaba sus ojos, tratando de hacer un esfuerzo en des-
cifrar la borrosa imagen que estaba ante él. ¡Timoteo, hijo 
de mi alma¡ voceaba el anciano, mientras hacia un esfuer-
zo para alcanzar la silueta del joven pastor.
El cuadro no podía ser más conmovedor. Padre e hijo se 
abrazaban como si se tratara de un reencuentro luego de 
cien años de separación. Mientras tanto, el guardia que había 
custodiado al joven pastor se quitaba su casco protector en 
señal de reverencia por tan noble escena.
Encontrándose ya calmadas las emociones, comenzó un 
dialogo que se extendió más de dos horas, en la que el anciano 
contó a Timoteo las penurias y maltratos que enfrentó por la 
causa de Cristo. También le habló sobre la gran preocupación 
que sentía sobre sus hombros, por la forma en que muchas 
iglesias habían abandonado la sana doctrina para dar lugar a 
enseñanzas blandas y banales que confundían a los que con 
sinceridad de corazón habían escapado del error. 
 En muchas oportunidades el apóstol había amonestado 
por carta a los pastores que se alejaron de la verdad y se 
volvieron a las fábulas. Las enseñanzas gnósticas dispersadas 
desde Grecia habían penetrado las bases doctrinales de la 
iglesia. Muchos se esforzaban en dar mensajes elocuentes, 
como fuente de supremos conocimientos, mezclados con 
ideas referentes a la reencarnación, y al culto a los ángeles. 
Por otra parte, algunos pastores que una vez recibieron con 
humildad y sencillez de corazón el mensaje del evangelio, 
ahora hacían mercadería con los fieles utilizando palabras 
fingidas. Comentaba San Pablo que ese dolor que sentía al 
EDEN BARRIENTOS78
saber del extravío de hermanos de la fe, era más amargo y 
fuerte que las cadenas que le ataban. 
 — Toma nota hijo mío de lo que te voy a decir, y asegúrate de 
enviar esta carta a todas las iglesias que están en Jerusa-
lén, Europa, y buena parte de Asia Menor.
“Porque