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5380658000755 Xavier Molina nace en 1967 en Barcelona. Desde 2007 escribe en el blog Media Hora Para Cocinar, habiendo publicado una decena de títulos dedicados a la gastronomía y los viajes. Reeetas de ave, carnes, entrantes, pescados, postres y bebidas para nuestras fiestas navideñas. Un nuevo proyecto de MEDIA HORA PARA COCINAR ( http://mediahoradecocina.blogspot.com) 2007-2011 xavier molina torres Recetas de Navidad x a v ie r m o lin a to rre s R e c e ta s d e N a v id a d Recetas de Navidad por Xavier Molina 1 Dedicado a mi hija Ayshe Isabel que, a pesar de la adversidad, vive la Navidad con la pasión de aquellos que no han perdido la inocencia. 2 índice Entrantes, Pág 6 Platos principales, Pág 87 Postres, Pág 186 Bebidas, Pág 199 Etiqueta en la mesa de Navidad, Pág 208 Sugerencias de menús, Pág 213 3 Los niños la adoran. Los adultos la temen. Te hace sentir la soledad o es motivo de reencuentro. Algunos hasta huyen de ella, incapaces de soportar ese aire consumista e hipócrita que a veces la impregna. Por si no lo habéis adivinado, hablamos de la Navidad. Estas fechas se prestan, como ningún otro evento del calendario cristiano, a los malabarismos gastronómicos, a los excesos y al sibaritismo. Ya sea como comensales o cocineros, alguna preocupación al respecto de la comida tendréis estos días. Es inevitable. Media Hora para Cocinar os quiere ayudar con una recopilación de recetas y menús navideños que han ido apareciendo a lo largo de la existencia de nuestro blog. Aquí encontraréis todo tipo de platos : baratos, caros, vegetarianos, de marisco y de lata, tradicionales, extravagantes, exóticos y modernos. Combinadlos a vuestro gusto o seguid nuestras recomendaciones. Y para que vuestra economía no sufra aún más en fechas tan señaladas, la descarga del libro en formato PDF es totalmente gratuita. Os deseamos una muy Feliz Navidad. 4 5 - ENTRANTES - Los llamados entrantes inician las comidas. Pueden ser cremas, sopas, ensaladas o diversas delicatessen. Puesto que las comidas navideñas suelen ser copiosas, evitaremos servir raciones abundantes, primando siempre el sabor sobre la cantidad. Los entrantes permiten experimentar con nuevas recetas y ser temerarios incluso ante comensales que esperan manjares tradicionales. Si hay que sorprender, que sea nada más iniciar el ágape. 6 - SOPAS - La sopa es un buen entrante para casi cualquier comida navideña. En primer lugar prepara nuestro estómago para la recepción de los platos que la sucederán. No es lo mismo ingerir un asado de carne sin "preliminares" que hacerlo tras una sopa, consomé o caldo ligero que permitirá al estómago iniciar de forma pausada su trabajo. Por otro lado la sopa nos hidrata con el equivalente a uno o dos vasos de agua, según la ración. Esto es importante para conseguir la cantidad necesaria de agua diaria y para proporcionarnos cierta sensación de saciedad que evite atiborrarnos con los segundos y los postres. Finalmente es una buena fuente de proteínas vegetas y vitaminas. Nuestra dieta suele ser deficitaria de tales nutrientes y excesiva en grasas y proteínas animales por lo que la sopa puede y debe compensar el desequilibrio. 7 - SOPAS FRIAS - Puede parecer contradictorio ofrecer en una comida navideña del Hemisferio Norte sopa fría como entrante. Conviene recordar pasadas reuniones familiares multitudinarias, con nuestros jerseys de lana que tan bien nos iban en la calle y de repente nos ahogaban, comiendo platos hipercalóricos y con la calefacción a tope y ya no nos parecerá tan fuera de temporada... 8 SOPA DE MELÓN CON CRUJIENTE DE JAMÓN Esta sopa es un entrante refrescante muy adecuado para los ambientes calurosos que se suelen dar en las comidas navideñas, constituyendo una alternativa a otras sopas frías como el gazpacho o la vichysoisse. Por otro lado es saciante gracias a su alto contenido en agua, ayudando a sentirnos "llenos" de manera que no abusemos de las raciones de los platos que sucedan a la sopa. Hay muchas maneras de preparar la sopa, todas ellas extremadamente sencillas. INGREDIENTES (4 personas) 1 melón tipo piel de sapo de tamaño medio (máx 2 Kg) 1 tarrina de yogur natural sin azúcar o medio vaso (125 ml) de nata líquida para cocinar 100 gramos de jamón ibérico cortado en lonchas 1 pizca de sal (opcional) Escogeremos un melón maduro pero no excesivamente. Es importante catarlo antes de emplearlo en la sopa pues debe tener buen sabor y ser suficientemente dulce sin llegar a ser empalagoso. Lo cortamos en dados y lo pasamos por la batidora con un yogur natural o bien con nata líquida. La elección del acompañante lácteo vendrá determinado por varios factores. Si nos gusta dar un punto ácido a la mezcla, evidentemente eligiremos el yogur; si en cambio preferimos dar un suave toque cremoso 9 utilizaremos la nata líquida (ojo, siempre sin azúcar). Si el batido resultante resulta demasiado dulce o bien el melón no tiene demasiado buen sabor podemos arreglarlo añadiendo una pizca de sal, que también serviría para evitar un contraste demasiado acusado entre el jamón y el melón. Ahora vamos a preparar un crujiente de jamón ibérico. Recomiendo emplear jamón ibérico porque el resultado es mucho mejor que empleando jamón serrano (por el hecho de que la grasa se encuentra finamente veteada en la carne). La manera más rápida consiste en poner las lonchas en el microondas a media potencia cubiertas por un plato adecuado para el horno. Las mantenemos cuatro minutos o hasta que queden secas y crujientes. Las dejamos enfriar y eliminamos la grasa, quebrándolas a continuación con las manos de manera que los trozos siempre sean más pequeños que el tamaño de la cuchara. Otra manera de hacer crujiente de jamón consiste en poner las lonchas en el horno a 100 grados sobre la rejilla del mismo, de manera que la grasa escurra. Cuando esto ocurre, elevamos la temperatura 120 grados unos 12 minutos o hasta que quede bien crujiente. De nuevo dejamos enfriar eliminando las vetas de grasa pues si las dejáramos podrían ablandar toda la pieza. La sopa se sirve muy, muy fría - por tanto es conveniente dejarla en la nevera un buen rato antes de servir - cubierta por el crujiente de jamón. Otras variantes añaden a la mezcla un poco de 10 menta o espolvorean sobre la sopa nueces o piñones. VICHYSOISSE La paternidad de esta receta, paradigma de las sopas frías, se la disputan Francia, Estados Unidos y el País Vasco. Para los últimos, la Vichyssoise sería heredera "refinada" de la porrusalda mientras que para los americanos la sopa nació a principios del siglo XX en el Ritz- Carlton de Nueva York creada por el chef francés Louis Diat. Lo que sí es cierto es que por sus características tiene una inspiración inequívocamente francesa. Es de largo la sopa fría más popular del Mundo, muy por delante del gazpacho, aunque ambas sopas no son equiparables. La Vichyssoise es una sopa que se toma fría pero ha sido cocinada, mientras que el gazpacho no se obtiene mas que por mezcla de hortalizas crudas. Por esta razón el gazpacho es una fuente muy importante de vitaminas, equivalente a las obtenidas de las ensaladas, de manera que su consumo está recomendado a lo largo de todo el año. INGREDIENTES (4 comensales) : 2 patatas medianas 1 puerro grande Medio vaso de leche Medio vaso de nata para cocinar Media cebolla morada tipo "Figueres" o dos cebollitas francesas11 2 cucharadas de mantequilla Medio litro de caldo de verduras Sal Pimienta blanca Picamos la cebolla y la doramos en una cazuela con las dos cucharadas de mantequilla. Mientras vence, picamos muy pequeño el puerro y añadimos al sofrito. Es importante utilizar sólo la parte blanca del puerro. Salteamos unos tres minutos. A continuación añadimos la patata cortada en dados pequeños, la leche y el caldo de verduras. Cuando inicie la ebullición, bajamos el fuego y cubrimos de manera que la ebullición cese si levantamos la tapa. Lo mantenemos así durante 20 minutos, añadiendo sal y pimienta al gusto. Transcurrido el tiempo dejamos enfriar y lo pasamos todo por la batidora hasta que quede suave y muy fino. Entonces añadimos la nata (la nata siempre se debe añadir en frio), la mezclamos bien, rectificamos de sal y pimienta y refigeramos para servir siempre muy fria. Se suele servir coronada bien con perejil picado, bien con menta o eneldo. SALMOREJO El salmorejo es una receta que últimamente ha ganado mucha popularidad por diversas razones. En primer lugar es muy sencilla de preparar. De hecho más sencilla que su primo-hermano el gazpacho ya que sólo utiliza tomate como hortaliza. En segundo lugar presenta una consistencia cremosa – de hecho es más una crema que una sopa - que la hace apta tanto 12 para ser tomada sola, como base de complejos platos o como crema para untar ("dip", como suelen decir los angloparlantes). En tercer lugar tiene un sabor muy suave y al no llevar pepino la hace más adecuada para aquellos que reniegan del gazpacho precisamente por el sabor del pepino. Otro punto a favor del salmorejo es que los tomates se utilizan en crudo, lo cual la hace idónea como el gazpacho para ser tomada en cualquier época del año con aportes vitamínicos parecidos a los de la ensalada. Repito, es recomendable tomarla en cualquier época del año a pesar de que por ser tomada fría podría considerarse como receta de verano. Desde mi punto de vista, tanto el gazpacho como el salmorejo son "ensaladas" en formato de sopa y crema, respectivamente. Y las ensaladas las debemos tomar todo el año por muy frío que sea el día. La preparación tradicional del salmorejo consiste en majar en un mortero grande los tomates, el pan duro y el ajo. Se puede conseguir una preparación rápida y bastante fiel al original empleando una batidora de vaso. INGREDIENTES : Medio kilo de tomates maduros 100 gramos de pan duro Medio vaso (125 ml) de aceite virgen extra de oliva Sal Vinagre de vino tinto Ajo (opcional) 1 huevo por comensal (opcional) Virutas de jamón ibérico (opcional) 13 Se puede preparar cualquier cantidad de salmorejo siempre que se respete lo siguiente : El pan a agregar es una quinta parte del peso en tomates y por cada kilo de tomates se debe emplear un vaso de aceite. Supongamos que tenemos 3 Kg de tomates. Para esta cantidad de tomates necesitaríamos 3 vasos de aceite y 600 gramos de pan. Pelamos y quitamos las semillas de los tomates maduros (cuanto más rojos y más maduros, mucho mejor). Agregamos a la batidora los tomates, el pan duro, el aceite, una cucharadita de sal y otra cucharada de vinagre de vino tinto. Si se quiere - no es imprescindible - se puede añadir medio diente de ajo o incluso menos cantidad. Batimos hasta que quede cremoso. Probamos y rectificamos de sal y vinagre, si fuera necesario. Para regular la densidad de la crema se pone más o menos pan. Lo que nunca se debe hacer es añadir agua para darle una apariencia más cercana a la sopa. Toda el agua que tiene el salmorejo proviene exclusivamente del tomate. Y tampoco añadáis aceite o el gusto será demasiado graso. En Córdoba, origen de esta receta, se sirve cada plato cubierto de virutas de jamón ibérico y un huevo duro cortado en rodajas. De hecho, en algunas recetas, se añade a la mezcla la yema del huevo. El salmorejo es uno de los platos estrella de la gastronomía española a pesar de su simplicidad. 14 TARATOR Por establecer un símil se podría decir que el tarator es a la gastronomía búlgara lo que el gazpacho respresenta en la gastronomía española. Es por tanto una sopa fría o muy fría que se sirve de entrante, elaborada con el producto más típico de Bulgaria, el yogur. La receta es prácticamente idéntica al çaçik turco y por tanto la versión "aguada" del Tsatsiki griego. INGREDIENTES (2 personas, aprox) : 1 pote de yogur natural sin azúcar, tipo griego o normal 1 pepino 1 diente de ajo 1 cucharada de aceite virgen de oliva eneldo (opcional) nueces (opcional) sal En un mortero picaremos el diente de ajo con un poco de sal. Si queremos podemos picar también nueces, aunque personalmente como no me agradan no las suelo utilizar. Pelaremos el pepino y lo cortaremos en dados muy pequeños. Cogemos la picada y los pepinos y los incorporamos a un recipiente donde verteremos el contenido del yogur. Echaremos agua muy fría poco a poco para desleir el yogur y mezclar los ingredientes, comprobando el sabor de vez en cuando para rectificar de sal (debe quedar ligeramente salado). Cuando esté listo añadiremos la cucharada de aceite de oliva y si queremos el eneldo que lo aromatizará. A veces 15 se ponen las nueces al final, más como decoración que como parte de la picada. GAZPACHO Hay bastante gente que continua consumiendo gazpacho hasta en lo más crudo del invierno. Y bien hecho que hacen. El gazpacho es una increíble fuente de vitaminas si bien debo indicar que fuera de temporada las verduras que forman el gazpacho no han sufrido un proceso de maduración "natural" y por tanto su aporte vitamínico es menor. Las verduras "de cámara" terminan su maduración en cámaras frigoríficas en el justo momento en que el mercado las demanda. Por fuera son perfectas pero a menudo el color de la carne no se corresponde con el exterior y presentan anomalías internas dificilmente explicables. Todo ello se debe a que no ha sido el sol quien ha terminado de madurarlas. No hay tomates en invierno, por mucho que las estanterías de los supermercados estén llenas. En cualquier caso esta es la receta de gazpacho más habitual. Aplícala en verano o en invierno y por supuesto, es un excelente entrante para cualquier ágape navideño. INGREDIENTES : 1 Kg de tomates 1 pimiento rojo grande 1 pimiento verde grande 1 cebolla 1 pepino 16 pan duro limón (opcional) sal vinagre aceite virgen de oliva En primer lugar vamos a pelar los tomates y los pimientos. Para ello lavaremos las verduras y practicaremos algunos cortes no muy profundos en la piel. Con un par de cortes será más que suficiente. Colocamos al fuego una olla grande con agua hasta el hervor. En otra cazuela ponemos agua fria con cubitos de hielo. En primer lugar incorporamos en el agua hirviendo los tomates durante 10 segundos como máximo. Retiramos e inmediatamente llevamos al agua helada. Si todo ha sido correcto la piel quedará arrugada y se levantará separándose de la carne por el corte practico. Fácilmente retiraremos la piel. Con el pimiento rojo y el verde actuaremos de la misma manera pero manteniendo la verdura un minuto. Es muy importante quitar las pieles, por favor no os saltéis el paso. Si no lo hacéis el gazpacho queda amargo. Una vez hemos eliminado las pieles procederemos a quitar las semillas y dejar solamente la carne. Pelamos también el pepino simplemente con el cuchillo. El pan duro lo mojamos en agua fría simplemente para reblandecerlo. Ahora llevaremos el pepino,los pimientos, el pan duro mojado, la cebolla, un chorro de aceite virgen de oliva y el diente de ajo al vaso de la batidora y los trituraremos hasta que queden muy finos. Con agua helada empezaremos a diluir la crema resultante de la trituración y de 17 vez en cuando vamos echando un poco de sal, una cucharadita de vinagre y hasta un poco de limón para ir probando y rectificando a nuestro gusto, tanto en la consistencia de la sopa como evidentemente el sabor (hay gente a la que no le gusta muy avinagrado, a otros le gusta de tacto grueso etc). No hace falta decir que se sirve frio o muy frio. 18 - SOPAS CALIENTES - para los que piensan que las sopas en invierno han de ser calientes, nieve o haga sol... 19 SOPA CAMPESINA Típica sopa de verduras sin más complicaciones. Ideal para abrir una comida que se anuncia copiosa. INGREDIENTES (4 comensales) 250 gramos de patatas 150 gramos de zanahorias Media cebolla morada tipo "Figueres" 1 huevo 50 gramos de jamón serrano en tacos pequeños 1 cucharadita de concentrado de buey "Bovril" 2 litros de agua Sal Ponemos los dos litros de agua a hervir. Cocemos el huevo hasta dejarlo duro (12 minutos aproximadamente). Quitamos la cáscara y lo cortamos en cubos lo más pequeños posible. Hacemos lo mismo con las patatas, la zanahoria y la cebolla. Cuando el agua hierva incorporamos los ingredientes picados y bajamos el fuego hasta conseguir el punto óptimo de cocción. El punto óptimo de cocción para esta sopa es aquel en el que al levantar la tapa cesa la bullición tumultuosa. Con cuarenta y cinco minutos al fuego debería estar más que hecha, aunque es conveniente sacarla del fuego antes si la verdura ya está blanda (la sobrecocción "mata" gran parte de las vitaminas). Cinco minutos antes de retirarla conviene disolver la cucharadita del concentrado de carne y rectificar de sal con cuidado puesto que tanto el jamón como el concentrado ya contiene una cierta cantidad. 20 Esta sopa es muy saludable y ligera, con un pequeño aporte de proteína animal destinado a mejorar el sabor. SOPA PROVENZAL He visto muchas recetas diferentes de esta sopa. La que transcribo es la que preparo y que se parece más a la que he tomado en algunos restaurantes del sur de Francia. Es muy sencilla de preparar y como inicio de una comida navideña, simplemente perfecta. INGREDIENTES : 1 cebolla grande morada (tipo "Figueres") 4 tomates maduros 1 rama de apio 1/4 vaso de arroz aceite virgen de oliva sal queso rallado (opcional) pan duro (opcional) Cortamos la cebolla en juliana. Pelamos y quitamos las semillas de los tomates, picándolos muy finos a continuación. En una cazuela de cierta capacidad (1 litro como mínimo) verteremos aceite virgen de oliva donde sofreiremos la cebolla, el tomate y el apio cortando en secciones. Cuando el sofrito haya adquirido textura incorporaremos 1 litro de agua, manteniendo la cocción durante una hora aproximadamente. Rectificamos de sal de vez en cuando. Veinte minutos antes de finalizar el tiempo añadiremos el arroz. 21 La sopa se puede servir con un poco de queso rallado por encima, incluso gratinándolo, aunque prefiero freir una rodaja de pan duro y colocarla encima. SOPA DE MISO El miso es un producto obtenido de la fermentación de la soja y sal marina gracia al hongo Aspergillus oryzae. La calidad del miso se mide a través del tiempo de fermentación, siendo los más apreciados aquellos obtenidos con fermentaciones largas. Tal y como se presenta y se usa el miso es un condimento fermentado y por tanto se debe tener sumo cuidado con las temperaturas de cocción (hay hongos que literalmente mataríamos a altas temperaturas). Aparte de aportar un sabor que desde mi punto de vista es excepcional (y por eso siempre he creído que sería un producto potencialmente de éxito en Occidente) provee de un buen grupo de vitaminas, isoflavonas, acido linoleico, enzimas, ácido fólico y lecitina de soja. Dichos aportes nutricionales tienen un efecto muy saludable incidiendo directamente sobre los problemas cardiovasculares, los derivados de la menopausia y la flora intestinal. El miso se obtiene en compuestos granulares secos y su utilización normal es una vez hemos terminado la cocción añadirlo en una proporción no superior a una cucharadita por comensal o incluso menos ya que hemos de pensar que contiene sal. De hecho se plantea la posibilidad de reemplazar la sal convencional por miso siempre y cuando el plato permita su disolución. 22 INGREDIENTES (4 personas) : 2 cucharaditas de miso (3 si os gusta fuerte y 4 extra-salado) Cebollino Caldo de pollo o verduras (alrededor de 1 litro)* Algas (wakame, nori o kombu, entre otras) en hojas** 100 gramos de tofu * ¡ no lo compréis hecho ! El caldo que se vende está en general muy salado y al añadir el miso sería imbebible. ** podéis obviarla. Si las algas se consiguen secas se deben hidratar en agua al menos durante media hora. Se calienta el caldo procurando que no hierva en ningún momento. Disolvemos el miso y a continuación vertemos el tofu cortado en dados a modo de tropezones, el cebollino cortado en rodajas y las algas. Damos vueltas unos 15 minutos y la sopa ya está lista. No hay que poner sal ya que el miso ya la incorpora. Si esta sopa os parece demasiado exótica o queréis dar miso a los niños sin que se enteren simplemente hacéis la sopa a la que estéis habituados. La sacáis del fuego y disolvéis una cucharadita (o media en el caso de los niños) por comensal como si fuera sal. Debido a que el miso no es muy popular todavía en Occidente su costo es alto, que sin embargo se compensa por la escasa cantidad que se utiliza por preparación. También conviene indicar que en tiendas de dietética es posible encontrar 23 sobre liofilizados con la sopa que os descrito, listas para consumir con sólo añadir agua caliente. SOPA DE TOMATE Esta es la receta de la sopa de tomate tal y como se hace en Grecia. INGREDIENTES : Medio kilo de tomates maduros* 1 cebolla grande 1 zanahoria grande 1 rama de apio 1 cucharada de maizena ** 1 vaso de caldo de pollo*** Aceite virgen extra de oliva Sal Pimienta Agua embotellada o filtrada (libre de cal) Queso rallado para fundir**** * También podéis utilizar una lata de tomate, aunque deberéis tener la precaución de eliminar el agua que contienen. Para obtener el equivalente a medio kilo de tomates es necesario adquirir una lata de un kilo. ** La maizena se emplea para espesar la sopa. Si no tenéis podeis emplear harina de trigo u otro espesante (agar-agar, por ejemplo). *** El caldo de pollo enriquece la sopa, nada más. Con un vaso (250 ml) se cubre un cuarto del líquido necesario. 24 **** El queso rallado sirve para espolvorearlo por encima y gratinar la sopa, para los días más fríos del año. Si no espesáis la sopa, mejor no utilizarlo ya que el queso se hundirá y no se gratinará. En una cazuela grande echáis un buen chorro de aceite de oliva virgen. Se pica la cebolla muy fina y se fríe hasta que vence. Si se quiere una sopa espesa se debe añadir la maizena y disolverla en el sofrito. Incorporáis entonces el agua (1 litro para cuatro comensales). Se corta la zanahoria en juliana y se incorpora. La rama de apio se corta en rodajas evitando que se desprendan las fibras externas que serían muy desagradables. Mientras pelamos los tomates y extraemos las semillas. Para facilitar la cocción es preferible picarlos tomates un tanto gruesos. Si utilizamos una lata, que sea de tomates enteros, pelados y sin semillas, intentando secarlos al máximo. Cuando el apio y la zanahoria empiezan a vencer introducimos los tomates y cocemos hasta que todos los vegetales están blandos (con diez minutos debería ser suficiente). Iremos rectificando de sal y pimienta a lo largo de la cocción. Finalmente podemos gratinar un puñado de queso sobre cada plato o espolvorear perejil picado. A veces se prefiere pasar todos los ingredientes por la minipimer, va a gustos. SOPA DE TRUFAS NEGRAS Esta sopa fue creada por el gran chef Paul Bocuse en honor del Presidente francés Valerie Giscard D'Estaing en 1975. Es una sopa fácil de 25 hacer pero de presentación muy impactante porque se presenta el cuenco de sopa al comensal cubierto de una cúpula de pasta hojaldre que debe romper para acceder al líquido. Lo de la cúpula de hojaldre no es una idiotez que simplemente haga atractiva la receta. Sirve en primer lugar para cocinar perfectamente la sopa que se hace al horno, no al fuego. En segundo lugar, si el comensal se limita a romper lo justo para meter la cuchara se conseguirá que la sopa se mantenga caliente - muy caliente - durante toda la degustación. Claro que me diréis que la trufa negra no es muy económica que digamos. A unos 750 euros el kg los 100 gramos que empleamos en la receta os saldrían a 75 euros (!!!). Podéis emplear sucedáneos de trufa que son menos aromáticos pero mucho más baratos (los encontraréis en los supermercados a pocos euros envasados en potes de cristal) o trufa blanca que es más asequible pero aún así de alto precio. INGREDIENTES (4 comensales) : 4 cucharadas de vermut blanco 3 vasos de caldo de pollo 100 gramos de trufas negras 200 gramos de foie gras de ganso o pato Apio Cebolla morada (tipo "Figueres") o preferiblemente fresca Zanahoria Champiñones 100 gramos de pechuga de pollo hervida Pasta hojaldre 26 1 huevo Mantequilla sin sal (1 cucharada) Sal Pimienta negra Es imprescindible que dispongamos de cuencos cerámicos capaces de soportar la cocción en el horno y que además sean "presentables" puesto que serán servidos directamente al comensal. En primer lugar picamos fina cebolla, zanahoria, apio y champiñones. En total necesitamos unos 100 gramos de picada. Los salteamos con mantequilla y reservamos. Ahora vamos a montar los cuencos. Incorporamos en cada uno la cucharada de vermut blanco. A continuación distribuimos equitativamente el sofrito de verduras. Luego la trufa cortada en láminas y la pechuga de pollo también en finas láminas. La pechuga la podéis cocer en un poquito de caldo de pollo si éste lo habéis comprado hecho o bien utilizar la que habéis empleado en hacer el mismo caldo. Salpimentáis al gusto. A continuación añadimos el caldo de pollo que como he dicho es posible comprarlo hecho o bien hacerlo vosotros mismos. Si lo compráis hecho el más natural y de mejor calidad en España es el de la marca ANETO. Seguidamente cortáis círculo de pasta hojaldre algo mayores que el diámetro del cuenco de manera que puedan ser colocados encima y hagan comba sin llegar a tocar el líquido, teniendo además suficiente tamaño para poder "sellarlo" alrededor. En importante que haga comba porque si lo hiciéramos plano y tensante al subir por acción del calor del horno se 27 rompería. Finalmente pintamos el hojaldre con yema de huevo para que quede brillante. Finalmente metemos los cuencos en el horno precalentado a 200 grados durante 25 minutos y ya está listo para servir. ¡Atención! Es una sopa que se come muy caliente, así que deberéis advertir al comensal que al romper el hojaldre puede salir vapor. El hojaldre no es necesario comerlo. Como véis se trata de una receta de fácil preparación y que además se hace en el horno, con lo cual dejamos libre el resto de la cocina para preparar otros platos. BORSCHT Sopa típica de los países de Europa del Este. Muy atractiva por su colorido e impactante sabor agridulce (tal vez no del gusto de todos, así que cuidado con ella). INGREDIENTES : 1 cebolla morada grande 1 remolacha 4 tomates maduros 1 vaso de caldo de verduras 3 cucharadas de vinagre 1 cucharada de azúcar (por lo del agridulce...) 3 vasos de agua embotellada o filtrada Sal Aceite virgen extra Pimienta negra En primer lugar freímos la cebolla bien picada hasta que se dore. Entonces añadimos los 28 tomates sin piel ni semillas y cortados en dados, así como la remolacha pelada y rallada. Removemos bien. A continuación añadimos el vinagre, el azúcar, el caldo y el agua. Llevamos a un hervor y entonces dejamos a fuego lento. Vamos rectificando de sal y pimienta, incluso de azúcar, para dejar un sabor agridulce suave. Se deja al fuego hasta que las verduras se cocinan pero sin perder la textura (el tomate no se ha de deshacer). Se suele servir adornada con eneldo y nata agria, aunque no es imprescindible. También cabe decir que a menudo no se ralla la remochala, sino que se cocina en trozos. SOPA DE CEBOLLA La sopa de cebolla es originaria de Francia aunque probablemente su origen sea muy anterior. Considerada desde siempre como una sopa "de pobres" no fue hasta mediados del siglo XX que volvió a popularizarse, incluso como sopa de calidad. Hoy en día es muy raro que la Soupe à l'oignon falte en las cartas de invierno de los restaurantes de nuestro país vecino. He leído muchas burradas de recetas acerca de esta sopa, desde aquellas que complican la realización hasta lo indecible - generalmente recetas francesas - hasta aquella que prescinden de los principios básicos de su preparación para convertirla en una mera cocción de una hortaliza. Ni lo uno ni lo otro. Básicamente se trata de caramelizar la cebolla y a continuación añadir un caldo de carne, a ser posible vacuna. 29 INGREDIENTES (4 personas) 2 cebollas moradas medianas tipo “Figueres” 3 cucharadas de mantequilla Caldo de ternera Sal Pimienta Aceite virgen extra de oliva Pan Una cucharadita de azúcar moreno (opcional) Queso para gratinar (opcional) Harina de trigo (opcional) En primer lugar vamos a caramelizar las cebollas. Se puede hacer a la manera tradicional, que es indudablemente la mejor, o bien tomar un atajo para reducir sensiblemente el tiempo de cocción. Si lo hacemos por el método tradicional cogeremos las cebollas y la cortaremos en juliana. La pondremos en una cacerola de barro pequeña con aceite de oliva que la cubra y la situaremos al fuego mínimo removiendo cada 30 diez minutos. Con el calor lento la cebolla saca el azúcar propio y se va autocaramelizando hasta tornarse de un color morado muy oscuro casi negro. El problema es que para conseguir una caramelización completa podemos tardar tanto como queramos ya que dependerá de la potencia de fuego, pero 4, 6 y hasta 12 horas podrían ser gastronómicamente lógicas. Como no solemos disponer de tanto tiempo hay otra manera que produce unos resultados aceptables. Cortamos igualmente la cebolla en juliana y la cubrimos lo justo en aceite virgen de oliva. Incorporaremos una cucharadita de azúcar moreno y removemos constantemente a fuego medio y en media hora las cebollas estarán caramelizadas. Si hemos hecho un buen caramelizado la cebolla estará entera y compacta, sólo que muy oscurecida. Para esta receta en particular nos interesa que no acabe de hacerlo del todo, por lo cual la retiraremos cuando todavía esté bastante rubia. Esto puede suponer algo menos de veinteminutos del método rápido. Si le queremos dar un toque "francés" emplearemos mantequilla en lugar de aceite de oliva. Si habéis probado esta sopa en Francia echaréis de menos la mantequilla si optáis por el aceite ya que el sabor no es el mismo. Otra cosa es lo "cardiosaludable" que pueda ser la receta. También cabe decir que la cebolla carameliza mejor en una grasa saturada como la mantequilla. Antes de que acabe la cocción se debe añadir la cucharadita de brandy esperando unos cinco minutos para que se evapore el alcohol. Si deseamos que la sopa sea espesa añadimos a las cebollas una cucharadita de harina de trigo y si la deseamos casi cremosa 31 una o dos cucharadas. Hemos de trabajar la harina para que quede marrón y sin grumos. Personalmente prefiero esta sopa muy líquida, así que suelo optar por una sola cucharadita de harina. Ahora añadimos el caldo de ternera. Para cuatro comensales precisamos un litro. También es posible añadir caldo de pollo o incluso de verduras, pero el más ortodoxo es el caldo de vacuno. Salpimentaremos al gusto. Ahora dejaremos a fuego medio durante 20 o 30 minutos, espacio que aprovecharemos para freir en aceite de oliva unas rodajas de pan (cada plato deberá ser decorado con un par de ellas). La sopa se sirve tal cual, no olvidando ni las rodajas de cebolla ni tampoco el pan. En el más crudo invierno muchos restaurantes franceses gratinan la sopa del comensal que se sirve en los mismos cuencos - a menudos ramekin - donde se ha cocido al horno. En estos casos "extremos" la sopa se suele cubrir de queso rallado que funde con el calor formando una costra que mantiene el calor hasta llegar a la mesa. Un plato magnífico que recomiendo cuando llega el frío del invierno. 32 SOPA DE RAPE CON MARISCO INGREDIENTES (4 personas) 1 cabeza de rape 1 cebolla morada mediana o una chalota 2 tomates maduros 100 gramos de carne de mejillón 100 gramos de gambas pequeñas peladas 1 litro y medio de agua Sal Aceite virgen extra de oliva Perejil picado En una cazuela de al menos dos litros vertemos un chorrito de aceite de oliva y calentamos. Rayamos la cebolla o chalota y la freímos. Cuando empieza a tomar colar incorporamos los dos tomates sin piel ni semillas cortados en dados pequeños. Cuando el sofrito está hecho apartamos del fuego y reservamos. En otra cazuela añadimos la cabeza de rape al litro y medio de agua. Llevamos a ebullición tras lo cual bajamos el fuego y tapamos. Al cabo de media hora filtramos el agua con un colador incorporándola a la cazuela del sofrito. Extraemos toda la carne que sea posible de la cabeza de rape - cuidando de que no entre piel ni espinas - y también la echamos en la cazuela del sofrito que calentamos a fuego medio incorporando las gambas y la carne de los mejillones. Rectificamos de sal. Al cabo de cinco minutos la sopa está lista. Se sirve cada plato espolvoreando por encima perejil picado. 33 - CREMAS - Las cremas, de clara inspiración francesa, suelen añadir un toque de distinción a nuestros menús de Navidad. 34 CREMA DE CALABAZA La preparación de cremas de verduras sigue siempre una misma pauta : la mezcla del producto con productos lácteos y ocasionalmente alguna verdura - generalmente patata - que le proporcione consistencia y densidad. INGREDIENTES : 400 gramos de calabaza 1 patata grande 1 vaso de leche entera Queso rallado cremoso Sal Hervimos la calabaza libre de semillas y piel juntamente con la patata hasta que todos los trozos estén blandos. Reservamos el agua de cocción. Metemos los trozos en la trituradora añadiendo el vaso de leche y el queso rallado (un puñado). Para reducir la densidad añadiremos agua de cocción (poco a poco para no "aguar" la crema) y una cucharadita de sal. PURÉ DE HONGOS Esta excelente receta es sencilla, nutritiva y fácil de preparar. Como su nombre indica, se trata más bien de un puré que de una crema. Vamos a enriquecer un puré de patatas con un variado de setas. En los ingredientes doy el nombre en castellano y catalán de las setas empleadas pero sed flexibles, casi ninguna es imprescindible, así que arreglad el variado de setas y hongos a vuestro gusto. 35 INGREDIENTES : 1 Kg de patatas 1/2 vaso de leche Aceite virgen de oliva Sal Setas empleadas : fredolic (CAT), negrilla(CAST) rossinyol(CAT), trompeta de la muerte(CAST) cep(CAT), hongo negro(CAST) cama sec(CAT), senderuela(CAST) xampinyo(CAT), champiñon(CAST) (entre 160 y 250 gramos de setas sería lo correcto) En primer lugar indicar que del listado anterior es casi obligatorio disponer de senderuelas. Además son las más fáciles de encontrar. En cualquier supermercado hay bolsas o tarros de setas secas que en la mayoría de los casos son senderuelas. Si no lo son probablemente se trate de especies similares que también sirven para esta receta. Cogemos las setas y las rehidratamos en un poco de agua. Pueden tardar un par de horas en volver a su situación normal. Desechamos esta primera agua. Ponemos al fuego un litro de agua con un poco de sal y la mitad de las senderuelas. Dejamos que hierva durante unos 10 minutos. Luego retiramos con una espumadera o similar las setas e incorporamos las patatas cortadas en trozos pequeños. Si queda algún trozo de seta no importa demasiado. El agua deberá hervir hasta que las patatas queden blandas. 36 En una sartén con aceite de oliva salteamos brevemente las setas con un poco de sal. Las depositamos sobre un papel absorbente para que elimine el sobrante de aceite y reservamos. Ahora vamos a pasar las patatas por la trituradora o el pasapurés con el medio vaso de leche. Ha de quedar un poco líquido, así que añadid un poco del agua de cocción para conseguir una sopa espesa más que un puré. En otro recipiente pasamos con sólo tres golpes secos por la trituradora las setas salteadas y medio vaso del caldo de cocción de las patatas- así quedarán en trozos grandes -. Ahora mezclaremos las patatas trituradas muy finas con las setas picadas y pondremos al fuego, removiendo para eliminar el exceso de agua. Rectificamos de sal y listo para consumir. CREMA DE SETAS Y CASTAÑAS Esta receta pertenece al otoño pero es probable que en Diciembre todavía podáis encontrar castañas y setas, ya sea envasadas o al natural, cosas (supongo) del cambio climático... Una crema que podríamos calificar de “elegante” si dicho adjetivo fuera gastronómicamente apropiado. INGREDIENTES : 250 gramos de setas (hongos, champiñones, rovelló/níscalo, fredolic etc) * 5 ó 6 castañas de tamaño medio 1 cebolla fresca o morada tipo "Figueres" 37 Medio litro de caldo de pollo 300 ml de leche entera Boniato 200 ml de nata para cocinar Aceite virgen extra de oliva Sal * Es posible hacer la sopa con un solo tipo de seta o bien con una mezcla de varios tipos. Es recomendable utilizar hongos si están disponibles o fredolics, ya que son los que mejor casan el sabor con la castaña. La sopa de níscalo nos dará un aroma a pino o a sotobosque muy interesante. Si empleáis setas con sabor suave como el champiñón o la gírgola es recomendable añadir un poco de trufa rallada o bien una pizca de nuez moscada. Conviene advertir que la crema con setas secas o enlatadas es menos apetitosa ya que el sabor que pretendemos realzar se ha perdido hace tiempo. En primer lugar limpiamos bien los hongos mientras hervimos las castañas peladas en agua paraque queden blandas. Tenemos a mano el caldo de pollo que habremos echo simplemente hirviendo las piezas de pollo. En una olla grande echamos un par de cucharadas de aceite y freimos la cebolla picada hasta que queda dorada. A continuación incorporamos las setas y las salteamos brevemente. Seguidamente añadimos el caldo de pollo, las castañas ya hervidas y la leche entera. Dejamos hirviendo al fuego medio alrededor de media hora. Transcurrido el tiempo de cocción pasamos todos los ingredientes por la batidora hasta que queda una pasta fina. Añadimos entonces la nata 38 líquida y removemos a fuego bajo alrededor de dos minutos. Sacaremos del boniato unas láminas muy finas. Las pasamos por la sartén con un poco de mantequilla. Lo incorporamos al centro de cada plato a modo de decoración. CREMA DE ESPÁRRAGOS TRIGUEROS INGREDIENTES : 1 manojo de espárragos trigueros 2 patatas medianas 1 cebolla caldo de verdura 1 vaso de leche 100 gramos de queso cremoso puerro apio sal pan perejil Hacemos un caldo con 2 litros de agua embotellada o de grifo filtrada, un puerro, una rama de apio, una cebolla y las dos patatas. Cuando las patatas estén blandas añadimos un vaso de leche, los 100 gramos de queso cremoso y finalmente los espárragos trigueros. El agua no debe hervir y si esto va a ocurrir es aconsejable reducir el fuego. El caldo estará preparado cuando los espárragos estén blandos. Una vez esto ocurra pasaremos por la batidora en la 39 misma cazuela hasta obtener una crema muy fina. Añadimos sal al gusto. Para servir colocamos en una taza o plato hondo con una rebanada de pan frito y si se desea un poco de perejil picado encima. Se sirve caliente o muy caliente. CREMA DE ZANAHORIAS INGREDIENTES : 4 ó 5 zanahorias 1 cebolla 1 vaso de leche queso rallado agua sal En unos dos litros de agua incorporamos las zanahorias y la cebolla peladas, el vaso de leche y un puñado de queso rallado cremoso (parmesano o similar). Hervimos hasta que las zanahorias queden blandas. Pasamos por la batidora o el pasapurés rectificando de sal y ya está lista para servirse. CREMA DE ESPINACAS Esta no es la receta de la crema de espinacas tradicional, sino la receta de una crema de espinacas hecha "a ojo". No voy a dar por tanto medidas exactas de los ingredientes sino la manera de hacer la crema sobre la marcha. 40 INGREDIENTES : Espinacas Leche entera Harina de trigo Mantequilla Queso rallado Sal Aceite virgen de oliva Para hacer una receta a ojo debemos comprender lo que hacemos y por qué lo hacemos. Para esta crema primero vamos a confeccionar una bechamel bastante diluida para adicionarle a continuación las espinacas. En una cazuela metálica calentamos un par de cucharadas de aceite de oliva e incorporamos una cucharada de harina de trigo. Vamos removiendo la harina hasta que se disuelva en el aceite. Es la manera de "quemarla" y evitar que tenga sabor a harina. De hecho la harina es un mero espesante y su sabor no nos interesa lo más mínimo. Ahora añadimos la leche poco a poco sin dejar de remover. El primer chorro hará que la harina cuaje y se secará enseguida. Cambiamos la cuchara por las varillas y vamos echando leche poco a poco a la vez que deshacemos los grumos. Al cabo del rato, por la acción del fuego, la salsa espesará. Es el momento de echar más leche hasta que observemos un grado de saturación en que ya no hay espesamiento adicional. En ese momento vertemos un poco más de leche para hacer la bechamel líquida. Lavamos las espinacas - unos 300 gramos serían 41 suficientes para 4 comensales - y las picamos muy finas. A continuación las hervimos unos cinco minutos en muy poca agua (recordemos que las espinacas tienen bastante agua por si mismas). Nada mas salir del hervor las escurrimos e incorporamos a la bechamel. Comenzamos mezclar añadiendo media cucharada de mantequilla y sal. Si lo haceis os dareis cuenta que el guiso todavía huele a harina. Debemos por tanto ir removiendo y haciendo a fuego lento hasta que ese olor desaparezca y la crema sepa simplemente a espinaca. Es el típico "blop-blop" de las cremas de leche. Mientras el olor no desaparezca no hay crema. ¿ Y qué pasa si se seca sin que el olor haya desaparecido? Pues añadid otro poco de leche y seguir removiendo. También se puede espolvorear un puñado de queso rallado cremoso para darle un poco más de cuerpo a la crema. E id probando, rectificando de sal y leche, pero no añadáis más harina porque al final os encontraríais con una crema de 8 litros, sólo por tapar el sabor a harina. Es preferible dejar que el fuego consuma un hipotético exceso de líquido, siempre vigilando que no se queme la leche. Otra prueba definitiva para saber si la crema está a punto es pasar la cuchara de madera por el fondo de la sartén de manera que si el punto es correcto se formará un surco que lentamente se cerrará sobre si mismo. 42 - ENSALADAS - La agradable frescura y ligereza de las ensaladas es el mejor contrapunto de las hipercalóricas recetas navideñas. Si además las elegimos como acompañantes su sabor puede complementar el plato que viste. 43 ENSALADA ROJA DE COUS-COUS Una refrescante ensalada muy rica en vitaminas y carbohidratos, creación original de "Media Hora para Cocinar". Se toma como entrante cuando los platos que le suceden son ligeros. INGREDIENTES : 1 vaso de cous-cous (sémola fina de trigo) 1 vaso de agua 1 docena de fresones (mejor sin son ácidos) 1 manzana tipo fuji o royal gala 2 tomates raf 1 pepino mediano 1 cebolla tierna 1 limón 1 cucharada de perejil picado Sal Pimienta negra Aceite virgen extra de oliva Vinagre balsámico de módena Hervimos el agua y la vertemos sobre el cous- cous. Dejamos reposar hasta que la sémola se ablande o bien hasta que absorba toda el agua. Si no ha sido suficiente, añadiremos más agua hirviéndola en pequeñas cantidades. Si disponéis de aparatos para la cocción al vapor, utilizadlos para ablandar el cous-cous, son más eficaces. Separamos 6 fresones y los trituramos, incorporándolos al cous-cous y mezclando con la mano para que quede bien mezclado. Rallamos la 44 cebolla, picamos muy fino el perejil y los añadimos a la masa junto a una cucharadita de sal y una pizca de pimienta negra. Mezclamos de nuevo con las manos. A continuación cortamos en dados pequeños - pero no demasiado - el pepino sin piel, los fresones restantes, la manzana (es conveniente remojar los cubos de manzana en zumo de limón para evitar la oxidación) y los tomates raf pelados. Mezclamos con una cuchara. Finalmente aliñamos con aceite de oliva y un buen chorro de vinagre de Módena. Se deja reposar en la nevera un mínimo de dos horas y ya está listo para servir. ENSALADA NIÇOISE No soy uno de esos que pretenden ser cien por cien fieles a los modos de preparación e ingredientes de cada receta. Ni siquiera lo soy con mis propias recetas. Si hoy no tengo lechuga pues pongo escarola y tan felices. La cuestión es analizar lo que es básico y lo que es accesorio y trabajar a partir de ese punto. Mi opinión es que las recetas muchas veces nacen de la improvisación y se enriquecen y hasta cambian totalmente cada vez que alguien se pone en los fogones a reproducirlas. Fijaos si no en la Fideuà, un plato con personalidad propia que nació cuando unos marineros embarcados quisieron preparar un arroz y se dieron cuenta que se habían olvidado precisamenteel arroz. A alguien se le ocurrió poner fideos en lugar de arroz y... voilà, maravilloso error. Por una vez, sin embargo, voy a reproducir exactamente la receta original de la ensalada 45 niçoise tal y como empezó a conocerse durante el siglo XIX. Que nadie se tire de los cabellos : la original no lleva ni lechuga ni atún, ni siquiera judia verde. Eso sí, es probable que vuestros comensales esperen una pseudo-niçoise : una ensalada verde con pescado, así que no les decepcionéis si teméis por vuestra seguridad. INGREDIENTES : Corazones de alcachofa Tomates maduros Aceitunas negras Pimiento rojo crudo (no escalivado) Filetes de anchoa Aceite de oliva Vinagre de vino Sal Pimienta Mostaza "francesa" Hervimos las alcachofas y extraemos el corazón, la parte más tierna de la misma. Las ponemos a marinar en aceite de oliva con un toque de vinagre y sal al menos durante 24 horas. Si ésto es demasiado engorroso podemos utilizar conservas de corazón de alcachofa, aunque recomiendo marinar un rato antes de montar la ensalada (sin sal, las conservas suelen llevar exceso de la misma). Pelamos el tomate y lo cortamos en sectores. Cortamos en rodajas el pimiento rojo. Ahora ya podemos montar la ensalada. Colocamos los corazones de alcachofa en el fondo del plato y mezclamos con el tomate y el 46 pimiento rojo. Incorporamos un buen puñado de aceitunas negras y salpimentamos. Ahora construiremos una vinagreta con tres cucharadas de aceite virgen de oliva, una de vinagre de vino y una cucharada de mostaza francesa. La mostaza francesa es muy diferente de la que habitualmente consumimos en España - es fuerte, nasal - pero fácil de conseguir. En Francia la sirven con cualquier aderezo al lado del vinagre y el aceite. Si no podeis conseguirla es mejor no poner la mostaza habitual ya que desvirtua la vinagreta, dejad sólo el aceite y vinagre. Bañaremos la ensalada. Sobre todo el conjunto dispondremos los filetes de anchoa...y listo. Claro que hay extras que para muchos son habituales en la niçoise, pero conviene aclarar que son añadidos que no tienen nada que ver con la receta original. Por ejemplo, en lugar de alcachofas utilizan judia verde cocida del tipo redondo. Luego añaden atún en aceite de oliva, huevo duro y alcaparras. Y también lechuga. A fin de cuentas es una ensalada, el reino de la anarquía. ENSALADA “ENRROLLADA” Vamos a dar otra vuelta de tuerca a las crepes. La ensalada enrollada no es mas que una mezcla de tomate y queso feta o blanco dentro de un crepe. El contraste entre el caliente de la masa y el frío del relleno, además de la sorprendente presentación puede ser una agradable sorpresa para empezar la comida navideña. 47 INGREDIENTES : Para la crepe : Harina de trigo (ir añadiendo para ver la textura) 1 vaso de leche 2 huevos 3 cucharadas mantequilla 1 pizca sal Para la ensalada : Queso feta o blanco tipo "Burgos" 4 tomates maduros zanahoria Aceitunas sin hueso Orégano Sal Aceite virgen de oliva Vinagre Primero haremos la ensalada. Pelaremos los tomates y les sacaremos las semillas. Los picamos en trozos muy pequeños e incorporamos en un bol. Rallamos la zanahoria y la echamos también al bol. Añadimos las aceitunas sin hueso y el queso, ya sea en trozos o bien rallado. Finalmente sazonamos con la sal, el aceite virgen de oliva, el orégano y el vinagre. Hemos de hacerlo con moderación ya que no debe quedar caldo. Ahora procedemos con las crepes : Mezclamos todos los ingredientes y batimos con la batidora de varillas o eléctrica. La masa debe quedar sin grumos y ni muy líquida ni tampoco sólida (algo así como chocolate derretido). Si queda muy seca añadiremos leche y si 48 demasiado líquida rectificaremos con un poco de harina.Colocamos una sartén antiadherente al fuego y la calentamos. Con un poco de mantequilla embadurnamos el fondo. A continuación cogemos parte de la masa con un cazo de los empleados para servir sopa y lo depositamos en el centro, removiendo con una espátula para cubrir todo el fondo de la sartén. Cuando los bordes se empiezan a oscurecer damos la vuelta (no estaría de más poner otro poco de mantequilla líquida) y dejamos que se haga. Es posible que la primera crepe sea sólo de prueba ya que tal vez debamos rectificar la elasticidad de la masa o la temperatura de la plancha. Por último montamos el plato. Cogemos la crepe y sobre ella extendemos en la parte central la ensalada a modo de relleno. Cerramos los pliegues sobre el centro o bien enrollamos. Queda bien si parte del relleno sale por los extremos, da "idea" al comensal del contenido. Para decorar el plato recomiendo hojas de lechuga picada y aderezo de limón. HORIATIKI La horiatiki salata es la ensalada griega más tradicional y también la más sencilla de hacer. Si vamos a Grecia evidentemente no encontraremos en la carta ninguna referencia a la "ensalada griega" ya que para ellos todas las que sirven en el restaurante son griegas. Deberemos pedir "horiatiki salata" (joriatiki salata). Los ingredientes básicos son el tomate maduro, la cebolla, el pepino, el queso feta, las aceitunas, el orégano, la sal y el aceite virgen 49 extra. Algunos añadidos son el perejil picado y el pimiento verde, totalmente opcionales. INGREDIENTES : Tomate maduro 1 cebolla morada 1 pepino Aceitunas negras 100 gramos de queso feta Orégano Sal Aceite virgen extra Perejil picado (opcional) Pimiento verde (opcional) Pelamos los tomates y los cortamos en secciones, sin quitarles las semillas. Los espolvoreamos con un poco de sal y orégano. Quitamos la piel al pepino y lo cortamos en rodajas, al igual que la cebolla. A continuación incorporamos el queso feta cortado en tacos o bien desmenuzado, las olivas negras y, si queremos, el pimiento verde troceado y el perejil picado. Sazonamos con sal y orégano, así como con un buen chorro de aceite de oliva y removemos cuidando de no destrozar los tomates. Lo conveniente es dejar reposar al menos un hora a temperatura ambiente o bien en frigorífico si hace calor. Esta ensalada se puede tomar como entrante o bien acompañando el resto de platos. 50 ENSALADA TEMPLADA INGREDIENTES cebolla escarola o lechuga aceitunas ½ Kg de champiñones (a ser posible frescos) aceite virgen de oliva vinagre sal Confeccionamos una ensalada verde a nuestro gusto con cebolla, escarola, y aceitunas. En una sartén con una cucharada de aceite de oliva iremos colocando los champiñones que previamente habremos lavado y quitado el pie. Deberemos de hacer que la parte abombada del sombrero toque la sartén de manera que donde antes estaba el pie quede mirando hacia arriba. Esto es importante porque al calentar el champiñón desprende un aceite que recogeremos en esta “cazoleta” improvisada. Una vez estén calientes y con la cazoleta del anverso del sombrero llena de aceite natural del propio champiñón los iremos cogiendo con cuidado y vertiendo este aceite en un cucharón que utilizaremos para rociar la ensalada. El cuerpo de los champiñones se utilizará para coronar la ensalada en un montículo central. La ensalada se ha de servir con los champiñones y el aceite caliente para que "temple" el resto de la ensalada. 51 TREMPÓ El trempó es la ensalada típica mallorquina. Como particularidad reseñar que antiguamente se comía con rebanadas de pan a modo de pinzas, nunca con cubiertos. La he visto también hecha con atún perome parece un añadido posterior. INGREDIENTES : Pimiento verde tierno Tomates maduros Cebolla tierna Aceitunas Alcaparras Sal Aceite virgen extra de oliva Cortamos los pimientos verdes en trocitos y los tomates maduros sin piel en taquitos. Hacemos lo mismo con la cebolla tierna y lo echamos todo, acompañado de las alcaparras y las aceitunas a un bol profundo. Esto es importante porque ahora aliñaremos con sal y aceite en abundancia (lo que en Mallorca se dice trempar, de ahí el nombre) y es en realidad el jugo del fondo lo que tiene de especial esta ensalada. La ensalada se deja reposar alrededor de 1 hora en en frigorífico y ya está lista para consumir. Así que cuando lo hayais comido, peliizcando con pan o no, tened una buena hogaza de pan a mano, dejad la etiqueta a un lado y mojad el aceite del fondo QUE ES ESPECTACULAR. 52 Evidentemente esta ensalada sólo es recomendable cuando los platos que la sucedan no sean muy calóricos puesto que de otra manera “demasiado pan” nos impediría degustar los mismos. FATOOSH La ensalada fatoosh es tan popular en el Líbano como el tabouleh - ensalada de cous-cous - pero de preparación aún más sencilla. Como toda ensalada cada cual desarrolla la receta con los ingredientes que le resultan más atractivos aunque el pan pita nunca falta como ingrediente imprescindible que es. INGREDIENTES : Pan pita Lechuga Tomate maduro Cebollinos Pepino Rábanos Perejil 1 diente de ajo Menta fresca 1 limón Sal Pimienta negra molida Aceite virgen extra de oliva Damos por supuesto que podéis encontrar pan pita en vuestro supermercado habitual. Generalmente se envasan dos o tres piezas al 53 vacío no muy grandes. Utilizaremos dos de ellas. Con un cuchillo marcamos un enrejado sobre el pan sin llegar a cortarlo. El rectángulo resultante debe caber en la boca fácilmente. Precalentamos el horno a 220 grados y horneamos el pan hasta que resulte crujiente pero sin dorarse. Cogemos un bol grande y fraccionamos el pan siguiendo las guías que hemos practicado con el cuchillo. Incorporamos el zumo de medio limón, dos o tres cucharadas de aceite virgen extra, los cebollinos cortados, el diente de ajo picado y el perejil y la menta fresca muy picados, además de una pizca de sal. Añadimos también un poco de pimienta negra molida. Mezclamos bien y dejamos reposar al menos media hora. Lavaremos la lechuga y extraeremos el agua sobrante - esto es importante - incluso empleando una centrifugadora manual. Incorporamos al bol con tres tomates cortados en gajos y los rábanos en rodajas. Mezclamos de nuevo y ya está lista para ser consumida. BACALLÀ ESQUEIXAT El bacalao esqueixat es simplemente el bacalao salado hecho migas. Con él se puede hacer una esqueixada que es básicamente una ensalada de bacalao. Es un plato que se prepara en pocos minutos. INGREDIENTES : Migas de bacalao Tomate verde de ensalada Cebolla violeta tipo "Figueres" 54 Aceite virgen de oliva Aceitunas verdes y negras Vinagre Sal Desalamos el bacalao sumergiéndolo en agua y manteniéndolo en la nevera durante unas 5 horas. Cambiaremos el agua al menos un par de veces. Prepararemos una vinagreta con una cucharada de vinagre y tres de aceite de oliva. Sacamos el bacalao ya desalado y lo ponemos en papel absorbente para que no quede nada de agua. Lo marinamos durante una hora en la vinagreta. Ahora montamos la ensalada. Cortamos los tomates en rodajas y colocamos en el fondo del plato. Incorporamos el bacalao y la cebolla picada finísima encima de ellos (a algunos les gusta más hacer simplemente aros de cebolla). Mezclamos estos dos últimos ingredientes. Echamos las aceitunas por encima y un poco de la vinagreta que hemos empleado para marinar, sobretodo para empapar los tomates. MELITZANOSALATA La Melitzanosalata es la ensalada de berenjenas típica de Grecia y en general de Oriente Medio. He escogido la receta griega porque las árabes suelen incorporar tahini que es una salsa o pasta hecha a base de sésamo que no me agrada demasiado. Si a vosotros os gusta podéis añadirla sin problemas. 55 INGREDIENTES : 3 berenjenas orégano perejil aceite de oliva vinagre o zumo de limón 1/2 diente de ajo sal En primer lugar hornearemos las berenjenas. Si queremos ir rápidos mi consejo es pelarlas, bañarlas en aceite de oliva y meterlas en el microondas durante unos 20-30 minutos a 700W. La berenjena debe quedar muy blanda y maleable. Las dejamos enfriar. La metemos en un bol y con una cuchara de madera la vamos deshaciendo con movimientos circulares. Añadimos el medio diente de ajo picado sin dejar de mover, así como el perejil y el orégano tambiénmuy picados. Incorporamos a la masa el vinagre (o zumo de limón si el vinagre no es de nuestro agrado) y la sal. Finalmente, y poco a poco, iremos añadiendo una cantidad considerable de aceite de oliva (en teoría 1 taza de café por berenjena) mezclando con contundencia. Debe quedar una masa ligada y suave. Podemos ir probando el resultado para rectificar de sal y vinagre, principalmente. Esta ensalada se toma fría del tiempo, no de la nevera (a menos que se haya preparado con mucha antelación y sea necesaria su conservación). 56 XATÓ El xató es una ensalada compuesta por escarola, bacalao, atún, anchoas y aceitunas arbequinas además de salsa xató, la auténtica alma de la receta. Es muy tradicional en la costa sur de Cataluña, principalmente en la tarragonina aunque en sitios como Sitges, ya en la provincia de Barcelona, es también muy popular. INGREDIENTES : Escarola Bacalao desmigado Atún Anchoas Aceitunas arbequinas INGREDIENTES PARA LA SALSA XATÓ : almendras avellanas una ñora* 3 dientes de ajo 3 tomates asados aceite de oliva virgen extra vinagre sal y pimienta * La ñora es un pimiento de pequeño tamaño y de forma redonda, que se deja secar y que tiene un sabor un poco picante Desalaremos el bacalao metiéndolo en agua y dejándolo reposar en el frigorífico durante 24 horas. Cambiaremos el agua cada 8 horas, más o menos. 57 Para la preparación de la receta en primer lugar ponemos en remojo la escarola durante un par de horas para reducir el amargor. Escurrimos bien y reservamos. Mientras preparamos la salsa xató. En un mortero grande incorporaremos las almendras y avellanas con un puñado de sal y machacaremos. Sin dejar de moler, añadiremos la ñora sin piel, el aceite, los ajos, el vinagre, la pimienta negra, los tomates asados y un poco de pan frito (esto último no es imprescindible). Dejamos reposar. Según el método tradicional para montar el plato disponemos la escarola, luego echamos el atún y las migas de bacalao para rematar con las anchoas y finalmente echamos la salsa. Generalmente yo prefiero colocar la escarola y echar la salsa para a continuación trabajarla circularmente con una espátula de madera de manera que empape bien. Si todo queda bien quedará una forma de "nido" y en el centro incorporaremos el atún, el bacalao y las anchoas mientras que las aceitunas se repartirán entre el centro de pescado y la escarola. TABOULEH El tabouleh es un tipo de ensalada muy popular en el Líbano pero que está extendida por todo el mundo árabe. En Turquía se denomina Kisir (pronúnciese keser), mientras que desde el Magreb hasta Oriente Medio la denominación habitual es la de Tabouleh. 58 INGREDIENTES : 1 taza de bulgur o de cuscus 1 taza de agua 4 tomates maduros 1 cebolla tierna, a ser posible zumo de limón aceite virgen de oliva ajos tiernosperejil sal pimienta lechuga El bulgur o cuscus no es mas que trigo desmenuzado ; es decir, si se hubiera seguido moliendo se hubiera obtenido harina. Se puede adquirir en bolsas con el aspecto de pasta y en España, por la influencia de los inmigrantes marroquíes, es fácil de encontrar en cualquier supermercado. Para reblandecer el cuscus herviremos una taza de agua y la echaremos encima, dejando reposar para que el cuscus se ablande o hasta que absorba toda el agua. Si todo es correcto una taza de idéntica capacidad al cuscus vertido debería ser suficiente. Si no es así, añadid más agua. Particularmente me gusta más la forma de cocción empleada en el Magreb que no es más que hervirlo al vapor. Si disponéis de las cacerolas necesarias para hacer esto, empleadlas ya que la absorción del agua es mejor. Pelamos y quitamos las semillas de tres tomates maduros y hacemos una salsa de tomate cruda, simplemente pasándolos por la batidora. 59 Cuando el cuscus está frío le incorporaremos sal, pimienta, la salsa de tomate y un buen chorro de aceite de oliva. Con la mano amasaremos la mezcla trabajándola para que quede bien homogénea pero sin que quede "mazacote". Como en el caso de un buen arroz se aprecia que el cuscus quede "suelto". El resultado es un cuscus teñido de rojo por el tomate. A continuación picamos muy finamente la cebolla tierna, los ajos tiernos (podemos prescindir si los sabores demasiado fuertes nos desagradan) y el perejil. Los incorporamos y amasamos de nuevo. Finalmente aderezamos con al menos el zumo de un limón y cortamos el cuarto tomate para adornar con las rodajas. Colocamos en el refrigerador. Se sirve en un plato con hojas de lechuga que sirven para recoger el cuscus y llevárselo a la boca. Además se debe disponer de limones adicionales o zumo de limón para que el comensal aderece a su gusto. ENSALADA AMARGA El mejor acompañamiento para asados grasos es una ensalada bien fresca. Recomiendo las ensaladas hechas con hortalizas amargas. El sabor amargo en realidad corresponde a un protector digestivo de gran utilidad ante un contundente plato de asado. INGREDIENTES (4 personas) 4 endivias 60 1 escarola grande 1 lombarda Sal Vinagre de vino tinto Aceite virgen extra de oliva Si se quiere disminuir la amargura de esta ensalada es posible mantener en remojo las hortalizas aunque conviene no pasarse porque las vitaminas y minerales hidrosolubles se perderán irremisiblemente. Cortamos las hortalizas y las llevamos a una fuente. Aliñamos con el aceite y vinagre, una pizca de sal y ya está lista para servir. 61 - OTROS ENTRANTES - Entrantes “caprichosos” con los que sorprender a los comensales sin que la realización nos lleve demasiado tiempo o esfuerzo. Para servir como entrante o acompañamiento. 62 PASTEL DE PATATA Y MORCILLA DE BURGOS CON REDUCCIÓN DE VINAGRE DE MÓDENA INGREDIENTES (4 personas) 1 kg de patatas 2 morcillasde Burgos Medio vaso de nata Vinagre de Módena Sal En primer lugar ponemos agua en una cazuela grande, suficiente para cubrir las patatas, y la llevamos a hervir. Cuando esto ocurre, vertemos las patatas peladas y enteras. Cocemos hasta que clavando un cuchillo podemos llegar con facilidad al corazón del tubérculo. Llevamos entonces las patatas al pasapuré añadiendo la nata. Salamos ligeramente. Mientras habremos frito las morcillas pinchándolas en una sartén con un poco de aceite de oliva (o casi mejor, cocinándolas con su propia grasa a fuego lento). Las pelamos y con un tenedor mezclamos la carne con el puré. Ahora vamos a montar cada plato. Colocamos un aro sobre cada plato y lo rellenamos con la masa (los aros metálicos nos permiten montar diversas composiciones de comida directamente sobre los platos). Para decorar el plato utilizaremos vinagre de módena. Echamos una buena cantidad en una sartén y a fuego lento reducimos hasta que se vuelve denso como un jarabe (el vinagre de módena es dulce y por tanto contiene bastante fructosa en caso de ser original o azúcar si es una imitación. En ambos casos nos vale.) . A continuación hacemos un dibujo 63 alrededor del pastel con el jarabe y si queremos podemos incluso echar una pequeña salpicadura sobre él. BRASEADO DE VERDURAS CON SALSA ROMESCO INGREDIENTES : Alcachofas Espárragos verdes Calçots En una bandeja que pueda ir al horno colocamos las alcachofas y los calçots. Rociamos con aceite virgen extra y sal. Metemos en el horno a 150 grados durante unos veinte minutos. Los espárragos los hacemos a la plancha. Servimos acompañados con salsa romesco que podéis comprar hecha sin ningún problema. HUEVOS RELLENOS CON SALSA ROSA Y ATÚN INGREDIENTES (4 personas) : 8 huevos (la ración típica es de dos huevos por comensal) 200 gramos de guisantes congelados 2 latas pequeñas de atún en aceite de oliva 16 espárragos blancos gruesos 2 cucharadas de tomate frito 1 pote grande mahonesa Sal 64 Hervimos los huevos para dejarlos duros (10-12 minutos). Los pasamos por un chorro de agua fría del grifo, pelamos y partimos por la mitad. Sacamos las yemas con cuidado, salamos ligeramente y reservamos. Escurrimos bien las dos latas de atún para eliminar el aceite. En un bol mezclamos medio pote de mahonesa con dos cucharadas de tomate frito y el atún. Cargamos la mezcla en una manga pastelera con la boquilla grande. Colocamos las mitades de los huevos con la parte que antes ocupaban las yemas vueltas hacia arriba. En cada concavidad depositamos la mezcla de salsa rosa y atún, de manera que sobresalga. Mientras pondremos a hervir los guisantes unos cinco minutos. Dejamos enfriar y reservamos. Desmenuzamos las yemas. Ahora ya podemos montar el plato. En una bandeja grande colocamos en el fondo los guisantes. Sobre ellos irán los huevos rellenos. Los cubrimos totalmente con las yemas desmenuzadas y encima, si queremos, ponemos más mahonesa. Los espárragos blancos se colocan encima haciendo algún dibujo "bonito". Se mete en el frigorífico la bandeja bien cubierta para que no coja sabores y cuando está bien frio se sirve. ALMEJAS PICANTES A LA MARINERA Esta receta se realiza en un cuarto de hora y es bastante económica. Se puede emplear cualquier tipo de almeja, así como berberechos o incluso mejillones. Si no las queréis picantes basta con substituir el pimentón picante por dulce. Y si los 65 queréis mucho más picantes se puede añadir una guindilla. INGREDIENTES (4 personas) : 1 Kg de almejas 1 vaso de vino blanco 1 vaso de caldo de pescado 1 cucharada de harina de trigo 1 cucharada de perejil picado 1 diente de ajo 1 cucharadita de pimentón picante Sal Aceite virgen extra de oliva En primer lugar deberemos poner en remojo las almejas en abundante agua con una cucharada de sal. Lo mejor es dejarlas toda la noche para que se abran y caiga la mayor cantidad posible de arena. Este proceso se debe hacer aunque utilicéis almejas congeladas. Antes de iniciar la preparación las limpiáis de forma definitiva bajo un chorro de agua del grifo. Para hacer las almejas vamos a emplear una olla ancha y baja. Generalmente empleo una paella. Ponemos un chorro abundante de aceite de oliva y en él freímos un diente de ajo a fuego medio. Cuando esté dorado retiramos. Ahora añadimos una cucharada de harina para freírla ligeramente. Esta harina nos servirá para espesar el caldo. Cuando la harina esté bien frita - sin que llegue a ponerse marrón - vertemos las almejas, el vaso de vino y el vaso de caldo de pescado.Cubrimos con la tapadera y removemos agitando la paellera - ojo, no con un cuchara que podría romper las conchas - hasta que la salsa haya 66 ligado. Cuando esto ocurra rectificamos de sal y espolvoreamos el perejil picado y el pimentón picante. Se sirven en platos hondos con un cucharón de caldo, retirando las piezas que no se hayan abierto. Para este plato es imprescindible dejarse de remilgos y mojar pan en la salsa así como acompañar las almejas con un buen vino blanco. COCTEL DE GAMBAS Hay varias recetas de cóctel de gambas. En todas ellas lo esencial es la presencia de salsa rosa y las gambas, el resto es meramente accesorio. La salsa rosa la preparo siempre con salsa de tomate frita (le tengo una manía espantosa al ketchup). INGREDIENTES (4 personas) : 6/8 gambas medianas por persona (también sirven langostinos) Leche entera Aceite de Girasol Tomate frito Escarola o lechuga (tallos tiernos) Hielo picado (opcional) 1 limón Sal Hervimos las gambas durante cinco minutos para pelarlas a continuación. Vamos a montar el cóctel en una copa grande y ancha - como las empleadas para helados - . En el fondo 67 depositamos hielo picado. El hielo va a mantener la temperatura baja y además va a ser decorativo. En la siguiente capa colocamos los brotes más tiernos de una lechuga o escarola hasta la mitad de la copa. Ahora vamos a preparar la salsa rosa. Para ello calculamos la cantidad que necesitamos (4 copas grandes podrían significar alrededor de medio litro de salsa). En un bol adecuado para su uso con batidora vertemos 1/3 de la cantidad total de salsa que queremos obtener. Los 2/3 restantes echamos aceite de girasol y una pizca de sal. Colocamos el brazo de la batidora eléctrica en el fondo y sin moverlo batimos hasta que cuaje. Deberá quedar espeso como la mahonesa de huevo tradicional. Incorporamos el zumo de medio limón y dos cucharadas de tomate frito para darle color (o más si el tono resultante no es de un rosa "satisfactorio") .Repartimos la salsa entre las copas añadiendo las gambas. VOUL AU VENT DE GAMBAS El voul au vent es una pequeña cazuela de hojaldre que podemos rellenar fácilmente con todo tipo de revueltos. El que os propongo es de verduras con gambas pero se podría hacer con mejillones, setas etc. INGREDIENTES : 200 gramos de gamba pelada Pimientos rojos escalibados (del piquillo, a ser posible) 1 pimiento verde pequeño para freir 1 cebolla pequeña morada tipo "Figueres" 68 2 cucharadas de mantequilla sin sal Queso rallado para gratinar (emmental, manchego semi curado, chedar etc) Sal Pimienta negra molida En una sartén salteamos las verduras cortadas muy finas en las dos cucharadas de mantequilla hasta que venzan. Empleamos mantequilla porque en primer lugar queremos dar un toque "francés" al menú y en segundo lugar porque si empleáramos aceite de oliva deberíamos eliminar muy bien el sobrante para no "mojar" el voul au vent. Cuando las verduras han vencido incorporamos las gambas cortadas pequeñas y sofreímos un par de minutos a fuego medio salpimentando al gusto. Ahora con una cuchara de postre rellenamos los hojaldres hasta el borde con cuidado de no romperlos. Sobre cada voul au vent ya relleno depositamos un buen puñado de queso rayado y los metemos en el gratinador hasta que el sombrero de queso se deshace adquiriendo un ligero color tostado. ALBONDIGAS DE SETAS Esta receta procede de la isla de Lesbos. El nombre original es Μανιταροκεφτέδες que se compone de dos palabras : manitaro, que es el nombre griego para setas y keftedes, que significa albóndiga. Es muy fácil de realizar y bastante sana ya que toda la proteína procede de las setas, no de productos cárnicos o lácteos. Empleo champiñones pero se podrían utilizar níscalos o cualquier otro tipo de hongos. 69 INGREDIENTES : 400 gramos de champiñones 1 cebolla grande morada, tipo "Figueres" 3 huevos 1 vaso de caldo vegetal 6 rebanadas de pan (alrededor de 100 gramos de pan) Pimienta negra molida Sal Orégano Comino (opcional pero recomendada porque le da un sabor muy "oriental") Aceite virgen extra de oliva Harina de trigo Salsa de tomate frita (opcional) Harina de galleta (opcional) Lavamos a concienza y picamos muy finos los champiñones. Una vez hecho esto es importante secarlos empleando una centrifugadora o colocándolos sobre papel absorbente de cocina. Mientras remojamos el pan en el caldo vegetal para que se ablande. Lo mejor es llenar un plato sopero a medias y colocar el pan encima para que absorba por su mismo el líquido. El pan debe quedar mojado, no "borracho". Ahora colocamos en un bol los champiñones, el pan, la cebolla bien picada, una cucharadita de sal, una pizca de comino, otra de pimienta y los tres huevos. Amasamos con las manos hasta que todo queda muy bien mezclado. El resultado es una masa un tanto suelta por lo que podemos hacer dos cosas : la primera es "secar" agregando poco a poco harina de galleta de manera que podamos 70 trabajarla sin problemas o bien (recomendado) formar una bola con la ayuda de una cuchara para rápidamente cubrirla de harina y echarla a continuación en abundante aceite de oliva para que quede bien frita. Se sirven generalmente cubiertas de salsa de tomate. Es curioso probar a hacerlas con diferentes tipos de setas. La más sorprendente es desde luego la albóndiga de níscalo (rovelló), especialmente si no la especiáis dejando que el aroma a bosque de la seta impregne la masa. MEJILLONES A LA MOSTAZA Una receta barata y rápida de realizar que con ingredientes sencillos deja a los comensales con ganas de más. En Bélgica y Francia se suelen servir cocidos con la salsa aparte para que los comensales mojen en ella a placer. INGREDIENTES : 10 mejillones por comensal (los ingredientes a partir de ahora son para 2 comensales) Media cebolla morada tipo "Figueres" 1 diente de ajo 1 cucharada de mostaza francesa Perejil Medio vaso de crema de leche Medio vaso de caldo de pescado Medio vaso de vino blanco Sal Aceite virgen extra de oliva En una sartén vertemos un par de cucharadas de aceite virgen extra y freimos la cebolla y el 71 diente de ajo bien picados. Cuando la cebolla empieza a vencer añadimos el vino blanco aumentando el fuego para que reduzca. Una vez ha reducido la mitad, más o menos, añadimos la cucharada de mostaza francesa reduciendo el fuego. Es muy importante que utiliceis la mostaza francesa que es amarilla, fuerte y nasal. Si empleais la mostaza suave, marrón y dulce el resultado es bastante pobre. Disolvemos la mostaza e incorporamos la crema de leche, el perejil picado, el caldo de pescado y los mejillones limpios con su cáscara. Cubrimos la sartén. Con cinco minutos de hervor debería ser suficiente. Desechad los mejillones que no se hayan abierto y rectificad de sal antes de servir. ARANCINE Los arancine (literalmente "naranjitas") son el plato típico de Sicilia. Se trata de unas bolas fritas de arroz con diversos rellenos (carne o queso, principalmente). Son bastante fáciles de preparar y en una hora se pueden tener listos. En esta receta haremos un relleno de queso y jamón, por ejemplo. INGREDIENTES : Arroz (1 vaso) Caldo de pollo (3 vasos) algunas hebras de azafrán 1 cucharada de mantequilla huevos harina de galleta harina de trigo queso rallado (tipo parmesano mejor, por lo de conservar un toque "italiano") 72 50 gramos de jamón serrano 50 gramos de
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