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MATERIALES DIDÁCTICOS 
para Educación Infantil
MATERIALES DIDÁCTICOS
para Educación Infantil
CÓMO CONSTRUIRLOS 
Y CÓMO TRABAJAR 
CON ELLOS EN EL AULA
Elvira Salido Soler
Mariano Salido Soler
NARCEA, S. A. DE EDICIONES
MADRID
© NARCEA, S. A. DE EDICIONES
Paseo Imperial, 53-55. 28005 - Madrid (España)
www.narceaediciones.es
Cubierta: Roser Bosch
Primera edición en eBook (Pdf): 2013
ISBN (eBook): 978-84-277-1930-9
ISBN (Papel): 978-84-277-1896-8
 
Impreso en España. Printed in Spain
Queda prohibida, salvo excepción prevista en la ley, cualquier forma de reproducción, distribución, 
comunicación pública y transformación de esta obra sin contar con autorización de los titulares de 
propiedad intelectual. La infracción de los derechos mencionados puede ser constitutiva de delito contra 
la propiedad intelectual (arts. 270 y sgts. Código Penal). El Centro Español de Derechos Reprográficos 
(www.cedro.org) vela por el respeto de los citados derechos.
“Nada hay en la inteligencia 
que no haya pasado por los sentidos”
Maria Montessori
0-Materiales didacticos.indd 6 8/11/12 15:16:53
Nota del Editor: En la presente publicación digital, se conserva la misma 
paginación que en la edición impresa para facilitar la labor de cita y las 
referencias internas del texto. Se han suprimido las páginas en blanco 
para facilitar su lectura.
© narcea, s.a. de ediciones 7
 Índice 
PRESENTACIÓN ......................................................................... 9
CONSIDERACIONES METODOLÓGICAS GENERALES ............. 13
 1. Las Letras y los Números. Cómo construir letras minúsculas. 
Cómo construir letras mayúsculas. Cómo construir los números .. 17 
Aplicaciones didácticas. Objetivos, contenidos. Actividades ........ 24
 2. El Ábaco desmontable. Cómo construir un ábaco desmontable 27 
Aplicaciones didácticas. Objetivos, contenidos. Actividades ........ 30
 3. El Dominó. Cómo construir un dominó .................................. 33 
Aplicaciones didácticas. Objetivos, contenidos. Actividades y juegos 35
 4. Las Regletas. Cómo construir regletas segmentadas. Cómo cons- 
truir regletas comunes ............................................................ 37 
Aplicaciones didácticas. Objetivos, contenidos. Actividades y juegos 44
 5. Los Bloques lógicos. Cómo construir bloques lógicos: con goma- 
espuma dura, con cartón, con pasta de modelar ....................... 47 
Aplicaciones didácticas. Objetivos, contenidos. Actividades y juegos 58
 6. Geoplanos I. Cómo construir un geoplano cuadrado ................ 61 
Aplicaciones didácticas. Objetivos, contenidos. Actividades ........ 65
 Págs.
8 © narcea, s.a. de ediciones
 7. Geoplanos II. Cómo construir un geoplano circular .................. 69 
Aplicaciones didácticas. Objetivos, contenidos. Actividades ........ 72
 8. El Lápiz mágico. Cómo construir un lápiz mágico .................... 73 
Aplicaciones didácticas. Objetivos, contenidos. Actividades y juegos 77
 9. Ensartables. Cómo construir ensartables: con gomaespuma dura, 
con pasta de modelar. Ensartables de madera: cubos, cilindros, 
círculos ................................................................................. 79 
Aplicaciones didácticas. Objetivos, contenidos. Actividades ........ 92
10. Bastidores. Cómo construir bastidores .................................... 93 
Aplicaciones didácticas. Objetivos, contenidos. Actividades y juegos 103
11. El Calendario escolar. Cómo construir un calendario escolar ... 105 
Aplicaciones didácticas. Objetivos, contenidos. Actividades ........ 116
12. El LEOLEO. Cómo construir un “LEOLEO” ............................ 119 
Aplicaciones didácticas. Objetivos, contenidos. Actividades y juegos 133
REFLEXIONES FINALES ............................................................. 137
BIBLIOGRAFÍA ............................................................................ 139
ÍNDICE
© narcea, s.a. de ediciones 9
Presentación
Este libro pretende abrir puertas, a los maestros y maestras de 
Educación Infantil, y a los estudiantes de esta especialidad, para de-
sarrollar la habilidad manual con vistas a construir su propio material 
didáctico. Esta práctica manual es paralela al conocimiento de las 
finalidades que cumple tal material en el campo de esta primera e 
importante etapa de la educación de cero a seis años, en la que tanto 
los especialistas como las diversas legislaciones educativas, aseguran 
que se configura la personalidad del individuo.
Por tanto, dos son los pilares que sustentan esta obra: la manera 
de construir el propio material para el desarrollo de juegos de aula 
y sus posibles aplicaciones didácticas.
En el ámbito de la creatividad, pretendemos transmitir el proceso 
de elaboración de cada uno de los materiales, haciendo hincapié en 
la idea de que no es necesario un gran dispendio ni buscar una ma-
teria prima difícil de encontrar ni especial; lo que utilizamos lo tene-
mos al alcance de nuestras manos, está a nuestro alrededor.
Para la elaboración del material presentado en este manual, hemos 
seguido unas pautas generales que nos aseguran el éxito del pro-
ducto, a saber: su higiene (materiales lavables, por ser de superficies 
no porosas), su seguridad (utilización de productos no tóxicos, aca-
bados no punzantes ni puntiagudos, resistentes), su aplicación a las 
distintas edades de la Educación Infantil, su carácter globalizador 
10 © narcea, s.a. de ediciones
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
(porque debe atender a distintos conceptos con el mismo objeto); 
pero, ante todo, el material que construyamos debe ser atrayente 
para despertar el interés de los niños y niñas, motor fundamental 
para el aprendizaje; por ello el material aunará forma, color, mane-
jabilidad, magia, etc.
Antes de continuar, insistimos en la minuciosidad con que hay que 
trabajar: la paciencia y la tenacidad deben ser dos grandes compañeras 
de viaje. Invitamos al “lector-constructor”, a que se embarque en esta 
aventura de crear, no por hacer cosas nuevas, puesto que la mayoría de 
las herramientas que presentamos son objetos ya inventados, sino por 
sentir el placer de hacerlo uno mismo, de experimentar sus resultados 
y, además, por transmitir el cuidado del material al alumnado.
Como precepto de la Escuela Nueva, no podemos olvidar que, a la 
hora de emprender cualquier tarea, tan importante es el proceso 
como el resultado; estos conceptos deben ser transmitidos al alumno 
como si el maestro fuera un alumno más. A la vez de ser un gran 
observador, capaz de guiar al niño tanto en sus aprendizajes concep-
tuales como procedimentales y actitudinales.
Para cualquier maestro * que se considere a sí mismo como tal, o 
estudiante que desee serlo, la manifestación de la creatividad es un 
gran paso en su vida profesional porque en su desarrollo está la po-
sibilidad de transmitir a los niños ese deseo de hacer cosas nuevas, 
de emplear las manos; estos son, a nuestro juicio, los cimientos de 
gran parte de la aventura de enseñar y aprender. En la realización de 
sus propios trabajos para “su” aula, el maestro logrará no sólo trans-
mitir este deseo a sus alumnos, sino también enseñarles a tratar el 
material con respeto. Les despertará su imaginación porque de lo 
inventado y conocido se pasará a la creación propia y personal, al-
canzando así nuevos objetivos con sus pequeños. No olvidemos que, 
el maestro desde el ejercicio de sus manos, pasará al de su mente, y 
el mismo proceso experimentará el niño, puesto que lo que se fija en 
la mente habrá pasado primero por los sentidos.
* Se opta, a lo largo de esta obra, por el uso genérico del masculino con objeto de facilitar la 
lectura y sin ánimo alguno de exclusión.
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PRESENTACIÓN
Así lo corroboran dos grandes maestros de la pedagogía moderna: 
Jean Piaget y Maria Montessori. Esta última afirmaba, que “los sen-
tidos son la plataforma de lanzamiento del pensamientocognitivo”; 
y más aún: “Lo que procede hacer es presentar a los niños un ma-
terial que despierte su interés y su curiosidad; y, mediante dicho 
material, graduando las sucesivas dificultades, conducirlo hacia solu-
ciones espontáneas (…). Por todo ello nos parece indispensable un 
material preparado por el educador”.
Este último aspecto, clave en la tarea educativa, es el que nos lleva 
a presentar el segundo pilar de esta obra: el establecimiento de los 
objetivos pedagógicos que se relacionan con cada trabajo así como 
la culminación con su puesta en práctica.
Cada uno de los capítulos de este libro presenta un determinado 
material didáctico y está dividido en dos apartados: en primer lugar, 
los pasos a seguir para la construcción del material, y en segundo 
lugar, sus aplicaciones didácticas.
Los materiales didácticos seleccionados para esta obra, 12 en total, 
son todos ellos básicos en cualquier aula de Educación Infantil. Se 
presentan en orden ascendente de complejidad en su elaboración. Van 
desde elementos muy conocidos como las regletas o los ensartables, 
a algunos creados por los propios autores como el LEOLEO.
Antes de adentrarnos en estos capítulos intentamos plasmar unas 
consideraciones metodológicas básicas en el seguimiento de la lógica 
matemática, fundamentación primordial de cualquiera de los juegos 
propuestos.
© narcea, s.a. de ediciones 13
Consideraciones 
metodológicas 
generales
¿Qué se entiende por material didáctico en el aula de Educación 
Infantil? Es la idea de instrumento la que nos va a facilitar la relación 
entre el niño y los conceptos que queremos que aprenda, por tanto los 
instrumentos, los materiales didácticos, son el canal o soporte físico que 
facilitará la generación de representaciones mentales en los pequeños.
No fueron pocos los pedagogos que hicieron hincapié en esta 
idea: Froebel, creador de los dones o juguetes ideados para potenciar 
el desarrollo intelectual del niño; Montessori, para quien el desarrollo 
de la intuición perceptiva pasaba por la utilización del material; Dé-
croly, quien destacaba el carácter globalizador por medio de los cen-
tros de interés; las hermanas Agazzi, así como el padre Manjón, 
ambos en la línea de Froebel, que utilizaban un material natural.
Una gran revolución en el mundo de la educación fue el movi-
miento de la Escuela Nueva que supuso una concepción del proceso 
de enseñanza-aprendizaje que enfatizaba la idea de paidocentrismo.
Todos sus presupuestos sirven de guía para nuestra acción didác-
tica basada en los siguientes principios metodológicos de la Educa-
ción Infantil:
El aprendizaje significativo (Vigotsky), defiende que el niño 
debe poder establecer relaciones entre experiencias previas y 
nuevos aprendizajes; por tanto, la función del docente supondrá 
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
14 © narcea, s.a. de ediciones
la presentación de actividades para captar el interés y con ello 
motivarlo.
La globalización (Décroly) es considerado el principio metodo-
lógico más adecuado para ofrecer al alumno aprendizajes signi-
ficativos. Supone que el aprendizaje es producto de múltiples 
conexiones. Este proceso dará sus frutos si permite que las rela-
ciones que se establezcan y los significados que se construyan 
sean amplios y diversificados.
La actividad física y mental de carácter constructivo (Piaget) 
que, para darse, reunirá tres elementos, a saber: el juego, la 
acción y la experimentación; el niño, gracias a estos tres ele-
mentos, construye sus conocimientos descubriendo propiedades 
y relaciones. 
El juego como la actividad más natural por ser inherente a la 
naturaleza infantil; potencia la construcción mental en tres di-
mensiones: emocional, intelectual y social; y es fuente de motiva-
ción para establecer relaciones significativas. Por ello el juego 
tiene un doble tratamiento metodológico porque dota de carácter 
lúdico cualquier actividad y rompe la diferencia entre el trabajo y 
el ocio. Si la actividad es presentada por el docente como juego, 
el niño no caerá en la frustración cuando se equivoque, porque 
pensará que equivocarse es posible en el juego; lo que llevará 
implícito el principio del ensayo-error y de la autocorrección.
Atendiendo a la psicología evolutiva, el niño descubre su cuerpo y 
la relación con los objetos, en un principio, por medio de los senti-
dos, posteriormente de forma intuitiva y, finalizando la Educación 
Primaria, empleará la lógica. Por esta razón, la metodología debe 
partir: de lo cercano a lo lejano, de lo fácil a lo difícil, de lo particu-
lar a lo general, de lo concreto a lo abstracto; de ahí parte nuestra 
apuesta por la elaboración de este material educativo.
Como ya hemos señalado el juego manipulativo se basa en la lógica-
matemática. No debemos limitar la idea de la lógica-matemática a los 
números y sus operaciones, ésta va más allá: incluye el pensamiento 
lógico, las representaciones espacio-temporales, las diversas magnitu-
© narcea, s.a. de ediciones 15
des, etc. Deberemos ser conscientes en nuestra tarea educativa de que 
este concepto envuelve todo el quehacer de nuestra vida cotidiana.
El origen del conocimiento lógico-matemático está en las relacio-
nes activas que establece el niño sobre los objetos y, mediante su 
manipulación, en el modo en que descubre sus características. Des-
pués poco a poco aprenderá las relaciones de su cuerpo con el en-
torno, de su cuerpo con el objeto y de los objetos entre sí, siendo 
esta última la fase más abstracta. Estas relaciones le permitirán orga-
nizar, agrupar, comparar, etc. Estas destrezas no están en los objetos 
como tales sino que son una construcción del niño sobre la base de 
las relaciones que intuye y experimenta.
Un aspecto importante en el uso del material es, primero, que el 
niño se familiarice con él, con el objetivo de fomentar la motivación 
y el interés cuando realice libremente las tareas, potenciando con ello 
su atención y, a la vez, realizar las actividades cuantas veces quiera. 
Dejándole hacer y deshacer, inventar e imaginar, dará rienda suelta a 
su creatividad. Luego vendrán las pautas y las consignas, observando 
si el niño puede alcanzar aquello que le proponemos, lo que supone 
un tratamiento individualizado en el aula y a la vez socializado. Al 
abrir un rincón de juego podremos dar consignas distintas a cada uno 
de los niños según sus posibilidades; como contrapartida también, la 
relación entre ellos será consustancial al propio aprendizaje.
Implicar al niño en el cuidado del material didáctico, y su orden al 
utilizarlo, supone la interiorización de pautas en el marco de la adqui-
sición de hábitos, indispensables para la captación intuitiva del 
tiempo y del espacio.
Por último destacamos la relación inversa que existe entre el ta-
maño del material utilizado y la edad del niño: a menor edad el ma-
terial ha de ser de mayor tamaño, como si los objetos ocupasen más 
espacio que los conceptos, así podríamos justificar esta imagen. 
Del mismo modo también entendemos que este hecho se justifica 
por la evolución de sus propias habilidades, condicionadas por la 
progresión del dominio de las partes segmentadas de las extremida-
des superiores, dominando progresivamente el hombro, el codo, la 
muñeca, los dedos y la pinza digital.
CONSIDERACIONES METODOLÓGICAS GENERALES
© narcea, s.a. de ediciones 17
Si deseamos construir el abece-
dario, los números, el dominó o 
cualquier material que requiera 
un soporte plano, podremos op-
tar por usar madera, plástico o 
bien echar mano de las varieda-
des existentes en cartón.
El inconveniente del plástico 
es el encarecimiento del pro-
ducto por un lado, y la necesi-
dad de disponer de utensilios 
específicos para el corte, por 
otro. El cartón representa una 
solución muy casera por ser un 
material fácil de conseguir y, so-
bre todo, de manejar; sin em-
bargo no descartamos, como 
demostración, el uso de la ma-
dera, material que deberemos 
aprender a manejar.
Ante todo debemosconsiderar 
la importancia que supone traba-
jar con estos materiales tan trivia-
les y de tan alta rentabilidad; ten-
gamos en cuenta que la facilidad 
de conseguirlo, y en abundancia, 
nos abre puertas a otros trabajos 
de más envergadura como ten-
dremos ocasión de comprobar.
Los materiales necesarios en 
este caso serán:
 Cartón grueso de embalaje 
y cartón pluma.
 Listones finos de madera.
 Papel de periódico.
 Cola blanca rebajada.
 Papel de lija adhesiva del 60.
 Colores acrílicos y fijador.
CÓMO CONSTRUIR LETRAS MINÚSCULAS
1. Las Letras 
y los Números
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
18 © narcea, s.a. de ediciones
Vamos pues a preparar las 
bases de las letras del abecedario 
de la manera más rudimentaria.
Deberemos conseguir un car-
tón de embalaje, usado para 
proteger electrodomésticos, por 
ejemplo, de 8 mm de grueso 
aproximadamente.
Con un cúter cortamos piezas 
cuadradas, para construir letras 
simples (tipo a, c, e, ...), y rec-
tangulares para letras que necesi-
tan más espacio. Pensamos para 
ello en el criterio de la caligrafía 
tradicional que nos obliga a se-
guir sus pautas, de tal modo que 
no ocupan el mismo espacio las 
letras b, d, g, h, j, que la a, e, 
o...; y no hablemos ya de la f.
Trabajaremos estas piezas de 
6x6, 7x7 o 9x12 cm, con papel 
de periódico y cola blanca de 
carpintero rebajada al 50%, 
como vemos a continuación.
Con una brocha encolamos el 
trozo de papel de periódico.
Deberemos comprobar que la 
cola está bien extendida, de lo 
contrario se observarán bolsas 
una vez seca la pieza.
Cual si de un envoltorio se tra-
tase, aplicaremos el papel de pe-
riódico al cartón.
Estos son los dos pasos inicia-
les antes de cubrir la pieza por 
completo.
LAS LETRAS Y LOS NÚMEROS
© narcea, s.a. de ediciones 19
Una vez envuelto repetiremos 
la operación empezando por la 
cara contraria. La operación es 
la misma, aunque en esta se-
gunda ocasión nos aseguraremos 
de que los vértices queden bien 
pegados.
El gran inconveniente de esta 
labor (gratificante puesto que es-
tamos aprendiendo a reciclar) es 
que, al secarse, el cartón pierde 
su forma plana inicial. Para evi-
tar en lo posible este contra-
tiempo pondremos peso sobre 
las piezas, por ejemplo una caja 
de botellas, hasta que nos asegu-
remos de que quedan totalmente 
planas. Una vez secas las pinta-
remos de colores variados con 
pintura al agua y posteriormente 
con barniz o esmalte sintético.
Mientras el lastre hace su tra-
bajo, nos dedicamos a las letras, 
para las que necesitaremos pa-
pel de lija intermedia y, sobre 
todo, adhesiva puesto que nos 
va a ahorrar mucho trabajo.
Buscaremos en el ordenador 
el tipo de letra caligráfica enlaza-
ble ya que ésta es la requerida 
en Educación Infantil.
Reunimos todo el abecedario 
y lo imprimimos para usar luego 
el negativo.
Nos hacemos con el abeceda-
rio usando como plantilla el ne-
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
20 © narcea, s.a. de ediciones
gativo de las letras. Recortamos 
la letra y la colocamos sobre el 
reverso de la lija de tal manera 
que la utilizamos como plantilla 
para obtener la copia.
Recortamos cuidadosamente 
por el reverso y conseguimos la 
letra deseada. No temamos al 
deterioro de las tijeras, contraria-
mente a lo que se pudiera imagi-
nar, las tijeras no se estropean 
cuando cortamos lija sino que se 
afilan.
Una vez conseguidas todas las 
letras, las pintamos con pintura 
acrílica eligiendo colores que 
contrasten con la base. Tras su 
secado, retiramos los protectores 
del adhesivo y las pegamos so-
bre dichas bases.
Apreciamos a la vez el aca-
bado de las bases ya sea usando 
pintura acrílica o esmalte sinté-
tico; si optamos por la primera 
deberemos dar una mano final 
de barniz al agua, con el fin de 
evitar la adherencia de las piezas 
por el efecto del calor.
LAS LETRAS Y LOS NÚMEROS
© narcea, s.a. de ediciones 21
Como última indicación debe-
remos tener presente que a cada 
letra la podemos acompañar con 
las flechas que indican la direc-
ción que debe llevar el trazo co-
rrecto.
CÓMO CONSTRUIR 
LETRAS MAYÚSCULAS
Las letras mayúsculas tienen la 
ventaja de ser muy esquemáticas 
por lo que el corte de las piezas 
resultará más sencillo que en las 
minúsculas.
Siguiendo el mismo procedi-
miento, imprimimos por el nega-
tivo el abecedario completo. En 
función de las medidas de las le-
tras preparamos las bases.
Esta vez optamos por usar el 
cartón pluma, fácil de cortar con 
cúter; además es resistente, aun-
que no tanto como la madera. 
En cualquier caso, la opción es 
válida.
Siguiendo siempre el mismo 
método, obtenemos las plantillas 
de la impresión de la primera 
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
22 © narcea, s.a. de ediciones
ilustración. Trazamos los contor-
nos en el reverso precintado de la 
lija y recortamos las letras. Recor-
tamos las letras, como siempre, 
antes de pegarlas a las bases.
Recordamos los tres materia-
les que vamos a emplear en el 
montaje:
 Las bases de cartón pluma.
 El vinilo adhesivo de colores 
que pegaremos a la cara 
vista del cartón pluma.
 Las letras de papel de lija 
que, por último, irán pega-
das al vinilo.
La adherencia de los tres ele-
mentos está asegurada. Las pie-
zas de vinilo (en los talleres de 
rotulación siempre tienen retales 
inservibles para ellos) deberán 
sobresalir con el fin de que, tras 
el corte con el cúter, cubran la 
totalidad de la cara vista.
Si lo preferimos, es cuestión 
de gustos dejar un contorno 
blanco cortando algo más el vi-
nilo que, tras despegar la tira 
resultante, deja visible el cartón 
blanco de la base.
Vemos el resultado cuando 
pegamos la letra, ya desprendido 
el precinto del reverso de la lija.
Este es nuestro abecedario de 
variados y llamativos colores.
LAS LETRAS Y LOS NÚMEROS
© narcea, s.a. de ediciones 23
El procedimiento para la elabora-
ción de números será el mismo 
que con las letras. En cualquier 
caso, para ilustrar mejor el tra-
bajo, los presentamos bajo otra 
modalidad de soporte: la madera.
De un listón de 7 cm de an-
cho, cortamos diez piezas igua-
les de 10 cm de largo. Una vez 
cortadas atenuamos las aristas 
con una lija. Deberemos lograr 
piezas suaves al tacto. Este es el 
acabado de las piezas de 
7x10x0,5 cm.
En la misma línea de opción 
de letras, tenemos los números 
que imprimiremos por su nega-
tivo. Al igual que con las letras, 
colocamos cada número en la 
cara no rasposa de la lija adhe-
siva, marcamos los contornos y 
los cortamos.
 
Para llegar al resultado final 
habremos pintado los números 
con pintura acrílica y, una vez 
secos, quitaremos el precinto li-
berando la cara adhesiva para 
así pegarlos a los soportes.
CÓMO CONSTRUIR LOS NÚMEROS
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
24 © narcea, s.a. de ediciones
APLICACIONES DIDÁCTICAS
LETRAS Y NÚMEROS
Objetivos
Los objetivos que se persiguen manipulando este material son:
✓ Entender, captar y apropiarse de la direccionalidad a través del 
tacto del dedo índice.
✓ Coordinar de forma óculo-manual el gesto.
✓ Distinguir la direccionalidad de cada letra o de cada número, 
teniendo en cuenta que la norma es de izquierda a derecha y de 
arriba abajo.
✓ Ligar las letras minúsculas (5 años).
Contenidos
Los contenidos se concretan en:
– La direccionalidad.
– La coordinación óculo-manual.
– La ligazón de las letras minúsculas (5 años).
Actividades
Dado que las letras y los números son líneas, tanto abiertas como 
cerradas, deberemos aprovechar en las actividades esta apreciación 
para inculcar al niño el concepto de “abierto” y “cerrado”.
Cualquier maestro sabe que en Educación Infantil es de vital impor-
tancia que, al aprender el niño los rasgos de letras y números, se 
debe tener en cuenta la direccionalidad, para evitar posteriormente 
problemas de caligrafía difícilmente subsanables.
Para conseguir este aprendizaje, con el dedo índice recorrerá el 
niño las letras hasta asimilar la dirección correcta.
Las actividadesposibles a desarrollar con este material deben estar 
basadas en las sensaciones visual y táctil para convertirlas en percep-
ciones, quedando así interiorizadas o asimiladas.
LAS LETRAS Y LOS NÚMEROS
© narcea, s.a. de ediciones 25
Respecto a las letras:
 En el aula de 3 años se elegirán las letras mayúsculas que 
correspondan al nombre del niño o el de sus compañeros, 
manipulando previamente las letras indistintamente para reco-
nocerlas paulatinamente.
En el aula de 4 años, el niño añadirá sus apellidos, usando 
siempre las mayúsculas, con actividades similares a las del curso 
anterior.
En el aula de 5 años recorrerá el niño con el dedo las letras 
minúsculas haciendo hincapié en el enlazado, trasladando a su 
lenguaje los principios o finales de cada letra (“rabito”, “bra-
cito”…), ya que la intención es que se acostumbre a realizar una 
letra minúscula ligada.
Otra posible actividad consiste en trazar con pintura de dedo letras 
y números.
Para 3 años, hasta el número 3.
Para 4 años, hasta el 6.
Para 5 años, hasta el 9, sin excluir que los niños puedan tener 
interés por ir más lejos.
También tenemos la posibilidad de escribir sobre el papel el ca-
mino señalado de letras y números (direccionalidad y trazo). Empeza-
remos con el dedo y luego con cera de distintos colores y, finalmente, 
difuminarán los colores de las ceras con algodón, siguiendo siempre 
la direccionalidad correcta.
Respecto a los números:
Seguiremos los mismos procedimientos aunque con aplicaciones 
distintas; siempre atendiendo a un aprendizaje funcional y significa-
tivo; así tanto las letras como los números cobrarán vida.
Lo más importante en el marco de las aplicaciones didácticas es 
lograr que los niños establezcan la correspondencia entre el número 
y la cantidad de elementos de una colección. Para esto podemos 
proponer juegos de agrupar a personas u objetos del entorno del 
niño y el número que les corresponda.
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
26 © narcea, s.a. de ediciones
También podemos asociar en situaciones próximas a ellos (signifi-
cativas) el número al evento y objeto: un cumpleaños requiere un 
número, la agrupación de objetos requiere un número; al igual, el día 
del mes, las piezas de un puzzle, las filas, etc.
© narcea, s.a. de ediciones 27
Vamos a realizar un ábaco sencillo 
y algo distinto de los que habitual-
mente se conocen, aunque ya 
existente. Será desmontable por 
motivos prácticos y su mecanismo 
nos permitirá ocultar bolas para 
facilitar la tarea de contar hasta las 
centenas (concepto que se im-
parte en primer ciclo de Primaria 
con niños de 7 u 8 años de edad), 
lo que implicará la construcción 
de tres columnas de bolas.
Presentamos los materiales 
necesarios para el montaje del 
ábaco:
 Dos tablillas de madera ma-
ciza de 7x22x1,50 cm.
 Una tabla de contracha-
pado de 15x22x0,7 cm, 
que nombraremos como ele-
mento A.
 El mismo tipo de tabla ante-
rior de 27x22x0,7 cm. En 
este caso elemento B.
 Tres alambres gruesos a los 
que daremos forma de 
puente alto.
 30 abalorios de madera de 
tres colores distintos, 10 de 
cada color.
 Pintura al agua y fijador
El primer detalle que debemos 
tener en cuenta es que las bolas 
tendrán un orificio muy superior 
al grosor del alambre de tal ma-
nera que puedan hacer todo el 
recorrido sin que la curva del 
puente constituya un obstáculo.
CÓMO CONSTRUIR UN ÁBACO DESMONTABLE
2. El Ábaco desmontable
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
28 © narcea, s.a. de ediciones
La primera tarea consistirá en 
practicar tres taladros del calibre 
de los alambres a las tablas ge-
melas.
Para situar correctamente es-
tos taladros, deberemos dividir 
una tabla en tres partes y trazar 
las diagonales de cada una con el 
fin de centrar cada taladro.
Por el corte de las diagonales 
haremos los taladros verticales 
superponiendo las tablas; así lo-
graremos hacer coincidir los agu-
jeros donde se instalarán más 
tarde los alambres.
Pasamos a la fase de pegado 
de cada tabla sobre el elemento 
A. Aplicamos cola blanca y suje-
tamos con pinzas metálicas hasta 
el secado.
Para el pegado de la segunda 
tabla, y por razones de preci-
sión, pasamos el elemento B 
entre ambas (elemento que será 
extraíble y por tanto no lo pega-
remos). Colocar provisional-
mente este elemento nos ase-
gura una ranura entre las tablas 
gemelas igual al grosor del ele-
mento B.
EL ÁBACO DESMONTABLE
© narcea, s.a. de ediciones 29
Esta es la ranura o canal que 
deseamos obtener y, en defini-
tiva, la base de nuestro ábaco 
desmontable.
Por motivos estéticos hemos 
redondearemos los ángulos su-
periores del elemento B o tabla 
extraíble.
Tras pasar diez bolas en cada 
alambre instalamos los mismos 
en la base del ábaco y obtene-
mos este resultado.
Hasta aquí hemos conseguido 
alcanzar el objetivo fundamental 
del presente trabajo. Podemos sin 
embargo sacarle más partido es-
merándonos en lograr un mejor 
acabado. Para ello puliremos o 
redondearemos todas las aristas.
Finalmente coloreamos las bo-
las; como de costumbre hemos 
aplicado una pintura al agua con 
su posterior fijador. La diferencia 
de resultados se aprecia en estas 
dos últimas ilustraciones.
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
30 © narcea, s.a. de ediciones
APLICACIONES DIDÁCTICAS 
EL ÁBACO DESMONTABLE
El ábaco de tres varillas no constituye un material específico para la 
Educación Infantil porque lleva implícitos los conceptos de unidad, de-
cena y centena. Este hecho no significa sin embargo que privemos al 
niño de saber que una agrupación de diez cuentas o abalorios comporta 
el número 10 y que recibe el nombre de decena; ya en primaria se 
pasaría al concepto de centena.
Objetivos
✓ Manipular el ábaco (3-4 años).
✓ Asimilar que cada cuenta representa una unidad.
✓ Ejercitarse elaborando una serie o una colección.
✓ Representar sumas y restas (5 años).
Contenidos
– Montaje del ábaco (3-4 años).
– Manipulación del ábaco (3-4 años).
– Las unidades del ábaco (3-4 años).
– Las series o colecciones (4 años).
– La abstracción matemática en sumas y restas (5 años).
Actividades
3 años esta actividad será por parejas, intentarán montar el ábaco 
empezando por ensartar las tres varillas, agrupando las cuentas 
según su color. Ensartarán posteriormente las varillas en sus orifi-
cios colocando finalmente la tabla de ocultación. Trabajamos así 
la pinza, los conceptos “abierto/cerrado”; “todo/nada/alguna”.
-
dolas o mostrándolas en cantidades libres. De este modo, traba-
EL ÁBACO DESMONTABLE
© narcea, s.a. de ediciones 31
jamos la pinza, el concepto de “todo/nada/alguna” (3 años). 
Esta actividad la ampliaremos a 4 años introduciendo dos varia-
bles: cantidad y color; por ejemplo, tanta cantidad de bolas de 
un color como ensartables iguales en número y en color.
-
pulativo; por ejemplo, representar en la primera varilla de la 
derecha el número de bolas con relación a un conjunto de obje-
tos y jugar a añadir objetos, representando ese paso con la 
adición de bolas.
ábaco, podremos realizar sumas de modo más abstracto para 
comprender que la agrupación de dos colecciones supone la 
totalidad de otra colección mayor (ej. 7 lápices) cuyo conjunto 
queda simbolizado en las bolas del ábaco (7 bolas). Después, se 
añadirán paulatinamente colecciones.
-
tos a una colección (5 años).
implícito en las dos anteriores actividades (5 años).
de la segunda varilla y ninguna en la primera. Para trabajar este 
concepto, hay que tener presente la comparación de contar 
hasta 10 realizando agrupaciones; aquí ya se introduciría el con-
cepto de decena. Para llegar a esta abstracción, obviamente se 
requiere una alta madurez en el alumno (5 años).
-
ción propiamente matemática: sumas y restas en horizontal y 
vertical manipulando números; aunque esta actividad se realizará 
ya en Educación Primaria.
© narcea, s.a. de ediciones 33
Con cartón pluma, vinilo de colo-
res y chinchetas vamos a elaborar 
un juego de dominó original,de 
fichas de 8x4 cm con el doble de 
grosor que el usado para las le-
tras mayúsculas: necesitamos 
conseguir fichas consistentes.
Cortamos con el cúter y una 
regla tiras de 4 cm de ancho, cal-
culando las necesarias para que 
resulten 28 piezas de 4x8 cm.
Es preciso tener mucho cui-
dado en el corte ya que de éste 
depende el buen acabado del 
trabajo. Con un lápiz trazamos 
una línea divisoria en cada ficha 
con el fin de situar en cada mitad 
los motivos correspondientes.
En lugar de optar por colorear 
puntos, como en el dominó tradi-
cional, elegiremos motivos 
geométricos variados, de vinilo 
adhesivo, según un criterio ló-
gico.
Así, para las partes con seis 
puntos optamos por figuras cua-
dradas de un mismo color; para 
las de cinco, pequeños círculos; 
para las de cuatro, rectángulos; 
CÓMO CONSTRUIR UN DOMINÓ
3. El Dominó
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
34 © narcea, s.a. de ediciones
para las de tres, triángulos; para 
las de dos, rombos, y para las de 
uno, cuadrados en posición de 
cartabón.
Pegamos vinilo rojo en el re-
verso y recortamos los sobran-
tes. La línea divisoria que traza-
mos con lápiz la cubrimos con 
tiras de vinilo adhesivo amarillo.
Para facilitar el movimiento de 
mezclado de las fichas, clavare-
mos en el centro de cada ficha 
una chincheta de color y de 
forma abombada, no plana.
Deberemos asegurarnos antes 
de que la punta de la chincheta 
no sobresalga por la cara opuesta.
Para evitar este contratiempo, 
cortaremos previamente parte de 
esa punta con unos alicates.
Las chinchetas suelen quedar 
bien sujetas; de no ser así y por 
seguridad, haremos primero el 
agujero con la misma chincheta, 
la volvemos a extraer, aplicamos 
una gota de pegamento (no usar 
cianocrilato) o cola y volveremos 
a colocar la chincheta.
EL DOMINÓ
© narcea, s.a. de ediciones 35
APLICACIONES DIDÁCTICAS
EL DOMINÓ
La progresión de objetivos enunciados en este apartado tiene como 
condición previa que el niño posea una mínima imagen mental de los 
bloques lógicos y sus diferencias. En el nivel de tres años, el manejo de 
esta circunstancia no se da, aunque no por ello prohibiremos al niño el 
manejo de este material. Al utilizarlo en el juego libre irá poco a poco 
familiarizándose con la categorización exhaustiva de las figuras geomé-
tricas planas, básicas en esta etapa educativa.
Objetivos
✓ Identificar, agrupar y asociar formas geométricas planas.
✓ Verbalizar el color de la figura plana correspondiente.
✓ Formar y rellenar, con plantillas dadas, el color de estas figuras 
geométricas.
✓ Asociar que la superficie blanca de la ficha de dominó equivale 
a “nada”, “cero” o “conjunto vacío”.
✓ Formar figuras planas tomando como referencia la figura básica 
del cuadrado.
✓ Apreciar que la figura plana circular no es referencia para for-
mar otras figuras planas existentes en el dominó.
✓ Comprender y aplicar las reglas básicas del juego del dominó (5 
años).
Contenidos
– Las piezas de nuestro dominó.
– El color asociado a su correspondiente figura plana.
– El valor y la noción de las partes blancas de las fichas.
– Las figuras geométricas planas que incluye nuestro dominó.
– La figura plana circular.
– Los conceptos “pertenecer/no pertenecer a”, “ser igual a/ser dis-
tinto de”.
– El juego del dominó y sus reglas (5 años).
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
36 © narcea, s.a. de ediciones
Actividades
Juego de construcción libre. Los niños, organizados en pe-
queños grupos, manipularán y se familiarizarán con las piezas 
del dominó dando rienda suelta a su imaginación; realizarán 
series, apilamientos, caminos, etc. La finalidad de este juego es 
que el niño se apropie de las piezas del dominó.
Juegos de identificación. Con todas las piezas del dominó, los 
niños deberán agruparlas siguiendo las variables de color y forma 
que se reflejan en las fichas, haciendo hincapié en los conceptos: 
“pertenece”, “no pertenece”, “son iguales”, “son distintas”.
Juegos de adivina-adivinanza. Con grupos de cuatro niños, 
uno de ellos tomará una ficha y, escondiéndola, dará pistas para 
que los demás adivinen de qué figura geométrica se trata; por 
ejemplo, respecto al cuadrado: “tiene cuatro piquitos, cuatro 
esquinas y sus lados son iguales”. Respecto al triángulo: “tiene 
tres piquitos, tres esquinas, tres lados”. Enriqueceremos el juego 
haciendo que el niño busque estas formas en su entorno.
Juegos de formar y completar figuras planas. Sobre papel, ha-
biendo trazado figuras planas incompletas, el niño deberá acabar 
la figura, primero visualizada y posteriormente trazada. Paulatina-
mente la actividad desembocará en la misma realización en cua-
drícula grande hasta pasar a la mediana. Otra variante del juego 
será que, dando figuras incompletas, las termine de realizar ju-
gando con su imaginación, verbalizando lo que ha dibujado.
Juegos de asociación. Consistirá en descartar las fichas del do-
minó que son distintas, y agrupar aquéllas que tengan las mis-
mas formas. ¿Qué pasará con la figura blanca? Haremos com-
paraciones con el vaciado y llenado de cajas, estuches, bolsas de 
tela; formaremos conjuntos sin ningún elemento para llegar a la 
conclusión del concepto de “vacío” o “nada”. Una variante es 
los juegos de agrupación, agrupando fichas en las que uno de 
sus espacios esté en blanco.
Juego del dominó. El niño de cinco años deberá saber aplicar 
las reglas del juego del dominó.
© narcea, s.a. de ediciones 37
Vamos a construir un tipo de 
regletas diferentes de las demás, 
que se caracterizan por ser re-
gletas segmentadas. Como po-
dremos suponer se trata de diez 
regletas de diferentes tamaños 
divididas en unidades: la primera 
es de una unidad, la segunda de 
dos unidades y así sucesivamente 
hasta la de diez unidades.
No responde al canon de re-
gleta tradicional de 1 cm. Son 
regletas integradas por hexae-
dros o cubos de 3x3x3 cm.
Los materiales nacesarios para 
su construcción son:
 Un listón de madera de 3x3 
cm de grosor.
 Cola blanca de carpintero.
 Pinturas acrílicas y fijador.
El primer paso en la construc-
ción de estas regletas es quizás el 
más complicado dado que para 
un juego de regletas se requieren 
55 piezas en forma de cubos o 
dados. Las 55 piezas han de ser 
exactamente iguales de tal ma-
CÓMO CONSTRUIR REGLETAS SEGMENTADAS
4. Las Regletas
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
38 © narcea, s.a. de ediciones
nera que, una vez construidas, 
cualquiera que sea la posición de 
las mismas siempre coincidan las 
líneas de separación.
Hemos obtenido 55 piezas de 
un listón de 3x3 cm. Una vez 
cortadas las piezas, lijaremos sua-
vemente las aristas.
Uniremos de uno en uno los 
cubos utilizando el listón sobrante 
como guía en la alineación de las 
piezas. Este paso es el que posi-
bilitará hablar de regletas seg-
mentadas.
Para el pegado de las piezas 
utilizaremos cola blanca de car-
pintero. Bastará una gota en el 
centro (siempre por la cara del 
corte) para que quede a la vista 
la veta de la madera.
Haremos presión con la pieza 
siguiente al tiempo que utilizare-
mos el listón de guía para cada 
unión.
En la fase de coloreado segui-
remos el código que se establece 
para las regletas, a saber:
blanco.
7 cm.
© narcea, s.a. de ediciones
LAS REGLETAS
Utilizaremos pintura acrílica 
rebajada con un poco de agua. 
Se trata de conseguir que la ma-
dera la absorba y permita que se 
aprecie el color y también las 
vetas de la madera; una capa 
será suficiente.
Antes de pintar las piezas, 
pincharemos una cara con tres 
alfileres con el fin de que nin-
guna toque otra superficie y así 
podamos hacer la labor pintando 
todas las caras a un tiempo.
Este sería el acabado de nues-
tras regletas.
CÓMO CONSTRUIR 
REGLETAS COMUNES
Se entiende por regletas comunes 
aquellas que responden a las me-
didas estándar de barras de 1x1 y 
de longitudes de las diez piezas de 
Hacerse con un juego de re-
gletas bien nutrido es tarea ar-
dua si tenemos en cuenta la 
cantidadde cortes de listoncillos 
de 1x1 que se deben realizar.
Proponemos un sistema, labo-
rioso en un principio, aunque de 
alta rentabilidad: se trata de 
construir unos moldes para ha-
cer regletas con una pasta sólida 
y muy consistente, esto es, la 
pasta de modelar. 
Por tanto, para la construción 
de regletas comunes, necesitare-
mos estos materiales:
 Una tabilla de contracha-
pado de 17x15 cm y de 
7 mm de grosor.
 Siete listoncillos de 1x1x15 
cm.
 Diez listoncillos de 1x1x3 
cm.
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
 © narcea, s.a. de ediciones
 Cola blanca.
 Palillos para brochetas de 
madera.
 Pasta de modelar.
 Colores acrílicos reglamen-
tarios para regletas y fija-
dor.
Los moldes los montaremos 
con una tablilla de contracha-
pado, cinco listoncillos de 
1x1x15 cm y otros más cortos 
de 2 o 3 cm. La única dificultad 
para reunir estas piezas está en 
el corte que deberá ser bien ver-
tical, a máquina o con sierra de 
marquetería.
Estos son los elementos princi-
pales para hacernos con los mol-
des: los listoncillos (de 1x1x15 cm), 
la tablilla (de 17x15 aprox.) y las 
piezas cortas de 1x1x3 cm que 
actuarán como límites a las regle-
tas en fabricación.
Trazamos un ángulo recto y 
un lado paralelo. Situamos el 
primer listoncillo en línea con el 
lado que se aprecia.
Encolamos y prensamos el 
listoncillo con pinzas.
Una vez fija la primera barra 
situamos el conjunto tal y como 
lo utilizaremos para trabajar.
Segmentaremos en centíme-
tros el primero y el último listón 
con unas marcas que nos servirán 
de guía para instalar los límites de 
cada regleta que fabriquemos.
© narcea, s.a. de ediciones 41
LAS REGLETAS
Colocamos el listoncillo lateral 
que alinea todo el conjunto y 
segmentamos en centímetros el 
resto de los listoncillos tomando 
como referencia la segmentación 
del primero y el último.
Encolamos y prensamos la 
barra lateral que nos permitirá 
instalar correctamente todo en 
conjunto.
Colocamos las piezas de los lí-
mites en posición vertical u hori-
zontal según nos convenga a la 
hora de distribuir los huecos o 
moldes para fabricar las regletas.
Estos son los elementos nece-
sarios para el llenado de los 
moldes:
 Pasta de modelar amasada 
con un poco de agua aña-
dida.
 Palillos para reforzar las re-
gletas.
 Media pinza de madera para 
embutir la pasta.
 Un cuchillo para alisar.
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
42 © narcea, s.a. de ediciones
Llenamos el molde correspon-
-
mos dos palillos que refuerzan la 
pieza.
Seguimos cubriendo con pasta 
hasta alisar finalmente con el 
cuchillo.
Queda aquí expuesto el pro-
ceso de llenado de los moldes 
con las comprobaciones even-
tuales de longitudes.
Transcurridos dos días, tendre-
mos la certeza de que la pasta se 
ha secado completamente.
Desmontamos paulatinamente 
los moldes obteniendo las regle-
tas en bruto.
Ahora es el momento de limar 
asperezas; para ello pulimos lige-
ramente cada cara de la regleta 
sobre lija fina y no al revés. Ya 
tendremos así las regletas listas 
para ser pintadas.
© narcea, s.a. de ediciones 43
LAS REGLETAS
Tratándose de unas regletas 
hechas con pasta de modelar, 
elegimos como pintura el esmalte 
acrílico rebajado con un poco de 
agua. 
Serán necesarias dos manos 
con tal de que el color sea com-
pacto; en la primera mano nota-
remos que se absorbe la pintura 
con facilidad dado que se trata 
de un material poroso.
Con la segunda mano, ya cu-
bierto el poro, el resultado será 
mucho más compacto y uni-
forme; deberemos cuidar no obs-
tante que la pintura se extienda 
correctamente en las superficies 
porque, al tener el esmalte látex 
en su composición, correremos 
el riesgo de que en el almacenaje 
se peguen las regletas entre sí.
Una solución a este inconve-
niente es barnizarlas con fijado-
res o barniz al agua que se obtie-
nen fácilmente en tiendas de 
productos de bellas artes.
Este es el resultado que pode-
mos observar. 
En primer lugar hemos dado 
color a aquellas regletas que no 
necesitan mezclas: la azul, la ma-
rrón, la negra, la amarilla, la 
verde, la roja y la blanca. 
Las tres restantes las hemos 
pintado con mezclas (para la na-
ranja hemos mezclado el amari-
llo con un poco de rojo, para la 
verde oscura, verde con un poco 
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
44 © narcea, s.a. de ediciones
de marrón, para la rosa, blanco 
con un poco de rojo).
Gracias a los moldes usados 
podemos fabricar todas las regle-
tas que deseemos siempre y 
cuando tengamos paciencia en 
la fase de secado de la pasta en 
los moldes.
APLICACIONES DIDÁCTICAS
LAS REGLETAS
Las regletas fueron ideadas por Cuisenaire y son un material eminen-
temente manipulativo y muy apropiado para las primeras edades; no 
obstante exige del alumno cierto nivel de abstracción, por ello es 
conveniente que se familiarice con dicho material.
Las adquisiciones cognitivas básicas que aporta este material son, 
en el campo de la causalidad, tanto la invariante como las identidades 
y también la clasificación.
El que hayamos querido elaborar dos tipos de regletas, regletas 
segmentadas y regletas comunes, se justifica por el hecho de facili-
tar al niño, de forma vivencial, que en su origen (regletas segmen-
tadas) el juego de regletas representa unidades de unidades. 
La experiencia nos confirma que hay que empezar por las regle-
tas segmentadas para que los niños lleguen a comprender la abs-
tracción que suponen las regletas comunes.
Objetivos
✓ Desarrollar la imaginación.
✓ Ejercitar la coordinación óculo-manual.
✓ Conocer y diferenciar colores.
© narcea, s.a. de ediciones 45
✓ Familiarizarse con el material.
✓ Asociar el color con la longitud.
✓ Realizar seriaciones.
✓ Conceptualizar los aspectos topológicos de la realidad, “largo/
corto”.
✓ Intuir por comparación que varias piezas cortas equivalen a una 
larga.
✓ Formar conjuntos con las dos variables: color, longitud.
✓
iniciarse en la interiorización regresiva (5 años).
✓ Establecer que cada pieza con su color representa taxonómica-
mente la relación n+1 respecto a la siguiente y n-1 con respecto 
a la anterior (5 años).
✓ Iniciarse en la suma y la resta de modo manipulativo (5 años).
✓ Relacionar la regleta blanca con la forma cúbica (5 años).
Contenidos
– Los colores y su diferenciación.
– Las piezas que componen una serie de regletas: sus variables de 
color y longitud.
– Las seriaciones.
– Los conceptos “largo/corto”.
– Las equivalencias entre las regletas.
–
– La relación n+1 y n-1.
– La suma y la resta.
– El hexaedro.
Actividades
Las actividades que proponemos, presentadas como juegos, irán, 
como en todos los apartados, de menor a mayor complejidad, tal y 
como hemos intentado reflejar en los objetivos.
LAS REGLETAS
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
46 © narcea, s.a. de ediciones
Juegos imaginativos: a partir de unos ejemplos dados como for-
mar estrellas, laberintos, líneas continuas, discontinuas daremos pie 
a la composición de otras representaciones dando libertad al niño.
Juegos de agrupación: en estos juegos las consignas básicas 
serán que el niño interiorice el concepto de “igual longitud/igual 
color que” con lo cual, cuando formen grupos de regletas igua-
les, él por sí solo jugará con la comparación y hará una autoco-
rrección de esos errores.
Juegos de seriaciones: dado que las regletas permiten trabajar 
dos variables, formarán seriaciones jugando con el color de las 
mismas, empezando con dos colores combinados para así con-
tinuar alternando de pocos a muchos colores (esta última seria-
ción se realizará a los 5 años).
Juegos de completar regletas: exceptuando la regleta blanca equi-
valente a la unidad y tomando como medida la de mayor longitud 
formará equivalencias a ésta con el resto de las regletas.
Juegos de relación donde el niño asociará el color de la regleta 
con los números de lija equivalentes a cada regleta. El juego se 
presentará del siguiente modo: a la tablilla del númerode lija 
pondremos la regleta que le corresponde. Jugaremos sólo en un 
principio con dos o tres tablillas hasta ir aumentando la comple-
jidad del juego. 
daremos la posibilidad al niño de colocar la regleta que le corres-
ponde y todas las regletas posibles que equivalgan a este número. 
Este juego es el prerrequisito para poder ejecutar juegos que nos 
den paso a la adquisición de los dos últimos objetivos.
Juegos de figuras geométricas: en cartulina blanca, picar la 
forma cuadrada. En otra, la silueta de las seis caras que repre-
senta un cubo desplegado. A continuación formaremos el cubo 
y, por comparación, los niños observarán que, en el primer 
paso, se trata de una figura plana y en el siguiente de un volu-
men que lo forman seis cuadrados iguales.
Juegos de sumar y restar: con los cubos formados, crearemos 
dados para jugar a sumar y a restar.
© narcea, s.a. de ediciones 47
Proponemos en este capítulo la 
construcción de bloqués lógicos 
por tratarse de un material im-
prescindible en toda aula de 
Educación Infantil.
Para su elaboración, ofrecemos 
tres niveles de dificultad que van, 
a nuestro juicio, del más simple al 
más complicado. En cualquier 
caso, pensamos que no es difícil 
imaginar las distintas maneras de 
elaborar bloques, puesto que se 
trata de piezas compactas sin otra 
complicación que la de lograr las 
formas correctas, los distintos ta-
maños, etc.
El cartón, la madera, el plás-
tico o el corcho son materiales 
perfectamente válidos para ha-
cer nuestro trabajo.
Ofrecemos pues tres posibili-
dades para elaborar bloques ló-
gicos, de entre las muchas que 
pueden hacerse: con gomaes-
puma, con cartón y con pasta 
de modelar.
Realización de bloques 
lógicos con gomaespuma 
dura
Obtenemos la materia prima a 
partir de la reutilización de pie-
zas de un puzzle gigante.
Este material lo hemos conse-
guido en tiendas de artículos de 
bajo precio lo que significa que 
el coste de esta elaboración es 
mínimo. Comprobamos que el 
ensamblaje del material de que 
CÓMO CONSTRUIR BLOQUES LÓGICOS
5. Los Bloques lógicos
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
48 © narcea, s.a. de ediciones
disponemos es perfecto; este 
extremo nos hace prever que las 
piezas se aprovecharán al 
máximo como más adelante 
comprobaremos.
Elaboraremos los bloques utili-
zando un cúter y sirviéndonos de 
unas plantillas. Recordamos las 4 
variables a tener en cuenta en la 
elaboración de las piezas: cinco 
colores (aunque no sean los re-
glamentarios), cuatro formas, dos 
grosores y tres tamaños (frente a 
dos que son los reglamentarios).
Nos servimos de una plantilla 
de cartón que representa un 
triángulo equilátero. Lo aplica-
mos a la superficie de una pieza. 
Una vez marcados los lados cor-
tamos con unas potentes tijeras 
o un cúter por la línea, procu-
rando no desviarnos en lo más 
mínimo.
Este es un ejemplo de la ob-
tención de dos piezas iguales 
que irán pegadas entre sí. Re-
cordemos que en un juego de 
bloques no puede haber dos pie-
zas con el mismo color, tamaño, 
forma o grosor.
Para el trazado de otras figu-
ras, nos servimos de objetos 
comunes tales como platos de 
vajilla, de dos o más tamaños, 
para obtener los círculos. No 
sería necesario aquí marcar el 
contorno con bolígrafo; basta 
simplemente con presionar el 
plato y cortar con cúter.
© narcea, s.a. de ediciones
LOS BLOQUES LÓGICOS
Otro ejemplo de utilización de 
un objeto común (una tapadera 
cuadrada) también nos permitirá 
obtener el bloque deseado.
Este va siendo el producto 
obtenido.
En esta práctica iremos apli-
cando el mismo método de tra-
bajo utilizando sucesivamente los 
distintos colores de piezas de 
puzzle de que disponemos. Es 
importante aprovechar al 
máximo cualquier espacio que 
nos permita crear un bloque.
Como se ha podido compro-
bar anteriormente, para la ob-
tención de rectángulos utilizamos 
bases de cajas que siempre se 
tienen en casa. Procuraremos 
que los bloques presenten for-
mas iguales con distintos colores 
(recuérdense las condiciones 
para la elaboración del juego).
Presentamos aquí una forma 
de aprovechar los sobrantes. 
Dado que el ensamblaje del 
puzzle es perfecto, realizaremos 
estas uniones, que pegaremos 
con cola blanca y nunca con 
cola de contacto porque puede 
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
 © narcea, s.a. de ediciones
corroer este material, con el fin 
de obtener nuevas piezas.
Una vez cortadas las piezas 
obtendremos, de dos bloques 
iguales, un bloque del doble de 
grosor; tendremos por tanto blo-
ques simples y dobles, o, si se 
desea, bloques triples en grosor.
He aquí un muestrario de las 
piezas obtenidas.
Construcción de bloques 
lógicos con cartón
Seguiremos aquí pautas pare-
cidas a las seguidas para la ela-
boración de las letras minúscu-
las. Presentaremos bloques en 
gran formato que permitirán in-
troducir la actividad a edad más 
temprana. Un número limitado 
de bloques, y no todo el juego, 
será suficiente.
Usaremos los siguientes mate-
riales:
 Cartón grueso de embalaje.
 Cola blanca.
 Papel charol de varios colo-
res.
El cartón de base tendrá un 
grosor de 7-8 mm, precisamente 
el utilizado para embalajes de 
grandes electrodomésticos. Nos 
haremos con una caja y con re-
gla y cúter, la cortaremos para 
obtener los bloques deseados; las 
formas de los bloques las traza-
remos sobre el mismo cartón.
El mismo procedimiento antes 
expuesto para los bloques en 
gomaespuma, es de aplicación 
para la construcción de las figu-
ras en cartón.
Empezamos por los círculos. 
En lugar del compás simple, que 
© narcea, s.a. de ediciones 51
LOS BLOQUES LÓGICOS
no alcanza a veces el radio de-
seado, utilizamos como plantillas 
platos de distinto tamaño que 
nos permitirán formar los blo-
ques circulares.
Si no tuviésemos objetos para 
dibujar triángulos, deberemos 
prestar atención a la hora de 
trazar el triángulo equilátero.
Siguiendo las pautas habitua-
les de construcción a partir de 
un segmento, que representa el 
lado de triángulo, lo tomamos 
como radio para alzar un arco 
desde cada extremo del seg-
mento hasta que tales arcos se 
corten y así obtener el tercer 
vértice del triángulo.
Una vez obtenido un trián-
gulo, el siguiente en tamaño lo 
obtendremos aumentando por 
uno de los lados el equivalente a 
la anchura de la regla y así suce-
sivamente.
Como de costumbre, son tres 
los tamaños que vamos a obtener.
Ya hemos dado el primer paso 
en la consecución de bloques de 
gran formato.
Los pasos siguientes serán 
muy simples: basta con pegar 
con cola blanca rebajada o cola 
celulósica de empapelar, el papel 
charol y, una vez seca la cola, 
recortar el sobrante por la línea 
de cada bloque.
Podemos optar por encolar de 
una vez un bloque, encolando al-
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
52 © narcea, s.a. de ediciones
ternativamente cada cara y pe-
gando al final de cada encolado 
el trozo de papel que cubra la 
superficie. Procuramos presionar 
por ambas superficies hasta ase-
gurarnos de un pegado correcto.
Una vez seca la cola, tendre-
mos cuidado en el corte del pa-
pel por cada cara del bloque.
Para la obtención de bloques 
de doble o triple grosor bastará 
con pegar dos bloques iguales.
Tendremos en cuenta, en el 
ensamblaje de las piezas, que el 
cartón ondulado quede cruzado 
entre ambas piezas con el fin de 
lograr un bloque sólido y más 
difícil de deformar.
A continuación, incluímos al-
gunas muestras de los bloques 
realizados.
© narcea, s.a. de ediciones 53
LOS BLOQUES LÓGICOS
Elaboración de bloques lógicos 
con pasta de modelar
Realizaremos el juego com-
pleto de 48 piezas de un tamaño 
cercano al estándar. Seguimos en 
este apartado un procedimiento 
muy similar al de las regletas.
La base de este trabajo, como 
es de suponer, consiste en reunir 
unas buenas plantillas que nos 
permitirán hacer tantos juegos 
completos como deseemos, siem-
pre que nos armemos de la habi-
lidad y la paciencia suficientes.
Para elaborar bloques lógicos 
seránsuficientes estos sencillos 
instrumentos: dos pares de lis-
toncillos de distinto grosor para 
las dos variantes, grueso/del-
gado, pasta para modelar y pin-
tura acrílica. Las plantillas que 
utilizamos son moldes de acero 
usados en pastelería.
Lo que exponemos no es 
más que una muestra puesto 
que deberíamos reunir las cua-
tro formas en sus dos variables: 
grande/pequeño.
Para comenzar a trabajar utili-
zamos un rodillo de cocina, ama-
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
54 © narcea, s.a. de ediciones
samos la pasta añadiendo un 
poco de agua hasta hacerla ma-
nejable. La extendemos sobre 
una lámina de plástico entre un 
par de listones del mismo gro-
sor.
Hacemos rodar el rodillo pre-
sionando sobre los dos listones 
hasta uniformizar la superficie; 
presionando sobre la misma con 
los moldes de que disponemos.
Retiramos los sobrantes y des-
prendemos las piezas cuidadosa-
mente de la base de plástico co-
locándolas a continuación sobre 
una tapadera o base, también de 
plástico, para poner a secar 
(nunca lo pondremos al sol por-
que el secado acelerado defor-
mará las piezas), dando la vuelta 
de vez en cuando a las piezas.
© narcea, s.a. de ediciones 55
LOS BLOQUES LÓGICOS
No disponiendo de rectángulos 
utilizaremos la plantilla del cua-
drado para formar un rectángulo; 
cortaremos con un cuchillo por 
las líneas marcadas con la planti-
lla.
Vamos colocando las piezas en 
la bandeja de secado al tiempo 
que proseguimos con el círculo.
Nos ocupamos ahora de las 
piezas gruesas que deberemos 
desprender del molde con sumo 
cuidado.
Para ello hemos optado por 
separar primero la pasta del 
molde con las mismas platillas 
para después desprenderla de 
los moldes. Para el segundo rec-
tángulo hemos tomado la me-
dida del largo del primero y 
ampliamos, marcando el punto 
con la lengüeta del metro.
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
56 © narcea, s.a. de ediciones
Apreciamos dicha marca so-
bre la que recolocaremos el cua-
drado.
Cortamos por las líneas con 
el cuchillo poniendo después la 
pieza a secar.
Estas son, en bruto las piezas 
obtenidas: del mismo tamaño y 
de distinto grosor.
Sobre un papel de lija frota-
mos las piezas hasta regularizar 
sus superficies, nunca al revés.
© narcea, s.a. de ediciones 57
LOS BLOQUES LÓGICOS
Tras uniformizar los círculos 
obtenemos por fin la primera 
serie de bloques. 
Pensemos que hay que lograr 
48 piezas que formarán el juego 
completo.
Como ocurría con las regletas, 
utilizaremos pintura acrílica y apli-
caremos dos manos: observare-
mos que con una primera mano 
el color no queda del todo fijado 
dadas las superficies porosas de 
los elementos.
Tras el secado daremos a las 
piezas una mano de barniz acrí-
lico al agua o espray fijador: este 
acabado impedirá que las piezas 
se peguen entre sí por el efecto 
del calor.
Comprobamos en este punto 
que cada figura tiene tres colores 
(amarillo, azul y rojo), dos tama-
ños (grande, pequeño) y dos gro-
sores (grueso, delgado). 
Por tanto las figuras reunidas 
son, calculando las variables, 48 
(cuatro formas, dos grosores, tres 
colores y dos tamaños: 4x2x3x2 
= 48).
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
58 © narcea, s.a. de ediciones
APLICACIONES DIDÁCTICAS 
LOS BLOQUES LÓGICOS
Ideados por Zoltan Paul Dienes, los bloques lógicos forman parte de 
la adquisición cognitiva básica de la clasificación. A través de las ac-
tividades que se realicen con este material, al niño le será sencillo 
pasar de la noción sensorial a la descripción científica y la abstrac-
ción progresiva.
Este material posibilita a su vez la representación simbólica ya que 
potencia el juego simbólico y, mediante el lenguaje, el niño va adqui-
riendo vocabulario específico de las variables (tamaño, color, forma, 
grosor) que los bloques lógicos presentan.
Objetivos
✓ Identificar y denominar cada elemento de los bloques.
✓ Representar figurativamente utilizando la imaginación.
✓ Hacer clasificaciones atendiendo a uno o dos criterios (3-4 años).
✓ Hacer clasificaciones atendiendo a tres o cuatro criterios (4-5 años).
✓ Establecer semejanzas y diferencias por medio de la agrupación, 
de inclusión y exclusión de los elementos de conjuntos.
✓ Realizar series atendiendo a criterios preestablecidos.
✓ Introducir el concepto de pertenencia o no pertenencia a un 
conjunto, unión e intersección.
✓ Verbalizar las características de cada bloque, siguiendo criterios 
preestablecidos.
✓ Comparar magnitudes de los bloques lógicos entre sí, yendo de 
las más dispares a las más similares.
✓ Extrapolar los atributos y cualidades de los bloques lógicos con 
objetos del entorno.
Contenidos
– Los elementos de los bloques lógicos y su clasificación.
© narcea, s.a. de ediciones
LOS BLOQUES LÓGICOS
– Conceptos como “pertenece/no pertenece” a un conjunto.
– Seriaciones.
– El triángulo, el cuadrado, el rectángulo y el círculo.
– Los colores.
– Las magnitudes.
– Comparación de los bloques con elementos del entorno.
Actividades
Los bloques posibilitan un amplio abanico de actividades o juegos:
Juegos libres, de contacto con el material y manipulación.
Juegos de características perceptivas. Imaginamos que pode-
mos construir elementos del entorno (casas, barcos, sol…).
Juegos de reconocimiento de las variables de los bloques lógi-
cos introducidas según la edad.
Juegos de presentación de dibujos que reproduzcan los blo-
ques.
Juegos de asociación de los bloques según criterios dados.
Juegos de negación adivinando el bloque que falta en una serie 
dada.
Juegos de disyunción de piezas dadas, para la inclusión o no 
en un conjunto.
Juegos de formación de series: iniciarlas, continuarlas, comple-
tarlas, etc.
Juegos de verbalización de series lógicas.
© narcea, s.a. de ediciones 61
Vamos a construir un geoplano, 
de tales medidas, que permita 
que el acceso a los puntos o pi-
votes sea cómodo. Trabajaremos 
sobre un tablero de 55x55 cm.
Necesitamos para ello los si-
guientes materiales:
 Dos tableros de contracha-
pado de las medidas señala-
das y de un grosor de 7 mm 
aproximadamente. 
 121 tacos de madera o pi-
votes de un calibre de 
5-6 mm por 4 cm de largo.
 Pintura acrílica o sintética.
 Cola blanca.
Sobre un tablero practicare-
mos los taladros correspondien-
tes, y el otro, que irá pegado a 
éste, servirá de tope a los tacos 
o pivotes, a la vez que cumplirá 
una función estética de tal modo 
que impedirá que los tacos so-
bresalgan y, por tanto, quede 
bien afirmado sobre una super-
ficie plana (por ejemplo una 
mesa).
Estos son los tableros sobre 
los que vamos a trabajar utili-
zando el metro, la regla y las 
escuadras.
Deberemos ser precisos a la 
hora de trazar las líneas sobre el 
tablero superior.
Se trata de marcar cien cuadrí-
culas de 5x5 cm; de aquí depende 
el éxito del trabajo en cuestión.
CÓMO CONSTRUIR UN GEOPLANO CUADRADO
6. Geoplanos I. 
Geoplano cuadrado
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
62 © narcea, s.a. de ediciones
Buscamos los mejores medios 
para que las cuadrículas sean 
exactas. El compás abierto 5 cm 
puede ser muy útil una vez tra-
zado el cuadro del contorno de 
50x50.
Apreciamos aquí los trazos 
una vez unidos los puntos mar-
cados con el compás en todo el 
perímetro.
A continuación taladramos 
por los puntos donde se cortan 
las líneas teniendo en cuenta que 
el calibre de la broca coincida 
con el de los tacos que vamos a 
pegar. Este es el resultado de 
tales taladros. Vigilaremos en 
todo momento la verticalidad de 
la taladradora, segundo factor de 
éxito de este trabajo.
Este montoncito de tacos, de 
4 cm de largo, los hemos obte-
nido cortando varillas de 1 m 
que se encuentran a la venta en 
los almacenes de bricolaje.
La exposición del paso de 
fabricar pivotes o tacos res-
GEOPLANOS I. GEOPLANO CUADRADO
© narcea, s.a. de ediciones 63
ponde al hecho de explicar de 
qué manera se pueden obtener 
con pocos medios; si queremos 
ahorrarnos este paso, podemos 
recurrir a tacos,con estrías o 
sin ellas (preferimos sin estrías) 
ya prefabricados, que se ad-
quieren por paquetes a muy 
bajo coste.
Así instalaremos en la taladra-
dora cada taco cual si se tratase 
de una broca. En marcha, pulire-
mos con la lija esos contornos 
que afean los extremos.
Pegamos los dos tableros con 
cola blanca de carpintero. El pe-
gado lo aseguramos prensando 
con pinzas metálicas, con gatos 
o simplemente poniendo peso 
sobre ellos (pueden valer unos 
cuantos libros voluminosos).
Después de 4-5 horas pode-
mos trabajar el acabado de esta 
unión. Redondeamos las aristas 
y suavizamos las superficies con 
lija.
Aplicamos una mano de pin-
tura vistosa, esmalte sintético, 
que contraste con el color natural 
de los pivotes. No usaremos bro-
chas porque siempre dejan mar-
cas. Optamos por el uso de es-
ponjas (en cualquier taller de 
tapicería se consiguen retales), 
porque nos permite uniformizar 
mejor la aplicación.
Tengamos presente que de-
seamos pintar las dos caras a la 
vez; para ello clavaremos en 
cada extremo del cuadro un 
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
64 © narcea, s.a. de ediciones
clavo que impedirá el contacto 
con la mesa de trabajo. Una vez 
bien seca la primera mano, pro-
cederemos a la segunda no sin 
antes lijar las superficies para 
eliminar las asperezas.
Habremos realizado bien el tra-
bajo cuando las superficies queden 
suaves al tacto. Tras la segunda 
mano comprobaremos que la pin-
tura toma cuerpo y brillo, un tra-
bajo, quizás engorroso, aunque 
el esmero representa el tercer 
elemento del éxito.
Seguidamente clavaremos los 
tacos aplicando previamente un 
poco de cola y cuidando en cada 
momento la verticalidad de los 
tacos.
Si no estamos seguros, colo-
caremos la escuadra para com-
probar que el ángulo es de 90º. 
Si sobresale algo de cola, la eli-
minaremos con un trapo mo-
jado.
Este sería el resultado final.
GEOPLANOS I. GEOPLANO CUADRADO
© narcea, s.a. de ediciones 65
APLICACIONES DIDÁCTICAS
GEOPLANO CUADRADO
De los materiales didácticos que presentamos en este libro, quizás 
sean los geoplanos los más globalizadores porque nos permiten reco-
ger toda una serie de contenidos ya vistos en otros capítulos.
El geoplano cuadrado hace posible: construir letras; mayúsculas, ci-
fras, contar pivotes, familiarizar a los niños con la idea de cuadrícula; 
construir bloques lógicos (excepto el círculo que se podrán hacer en el 
geoplano circular, que veremos en el capítulo siguiente); formar un 
tangram y construir otras figuras geométricas que ya conocen.
Objetivos
✓ Ejercitarse en el empleo de la pinza.
✓ Practicar ejercicios óculo-manuales.
✓ Familiarizarse con el geoplano.
✓ Construir figuras planas.
✓ Desarrollar la memoria visual para copiar modelos propuestos.
✓ Realizar cenefas de preescritura.
✓ Familiarizarse con la cuadrícula, construyendo la base para el 
código escrito.
✓ Construir números, y letras, vocales o consonantes, pero en mayús-
cula (5 años).
✓ Aprender de forma manipulativa los conceptos topológicos de la 
realidad: “arriba/abajo”; “izquierda/derecha”; “largo/corto”; 
“abierto/cerrado”; “recto/curvo/transversal”.
Contenidos
– El geoplano.
– El uso de la pinza.
– Las figuras planas.
– La memoria visual.
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
66 © narcea, s.a. de ediciones
– Las cenefas de preescritura.
– Las cuadrículas.
– Vocales, consonantes en mayúscula y números (5 años)
Actividades
Tratándose de esta edades, las actividades pueden ser muy variadas; 
a modo orientativo señalaremos que el nivel de 3 años se enfoca 
preferentemente al desarrollo de la motricidad fina, a la coordinación 
óculo-manual al desarrollo de la creatividad (más que a la construc-
ción metódica de las figuras), al reconocimiento, y a la creación de 
figuras y líneas.
Para 4 y 5 años el enfoque se dirigirá más hacia el recuento de 
pivotes necesarios para la representación de las figuras y a la cons-
trucción metódica de figuras, cenefas o letras que propongamos al 
niño. Seguidamente le dejaremos que libremente, experimentando el 
ensayo y el error, realice sus propias construcciones. Estos ensayos 
le permitirán comparar longitudes, tamaños, colores, proporciones, 
etc., porque creemos que es de suma importancia dejar que el niño 
tome sus propias iniciativas; este principio le proporcionará seguri-
dad en sí mismo, autoconfianza, que lleva implícita la motivación por 
aprender.
He aquí algunas actividades concretas:
(3 años); para ello utilizará ambas pinzas digitales.
Para 3-4 años, con el objetivo de ejercitarse en actividades 
óculo-manuales, se tendrá en cuenta que la goma utilizada debe 
o no montarse con otras. Este ejercicio será pautado y, por 
tanto, se realizará en pequeños grupos, debiendo ser riguroso el 
lenguaje usado por el maestro (“de arriba hacia abajo”, “no cru-
ces las gomas, de izquierda a derecha”, etc).
Para 4-5 años. La base para realizar figuras planas angulares en 
el geoplano consistirá en ir contando los pivotes necesarios para 
su construcción. Primeramente sería una actividad guiada por la 
GEOPLANOS I. GEOPLANO CUADRADO
© narcea, s.a. de ediciones 67
visualización abstracta que conlleva el geoplano; posteriormente, 
tras las consignas, realizarán figuras por sí mismos.
Para 5 años. Usando los bloques lógicos (cuadrado, triángulo y 
rectángulo), reproducir sobre el geoplano las figuras de distintos 
tamaños y colores (grande, pequeño, rojo, amarillo, azul).
Para 5 años. Proporcionándoles ejemplos sobre el papel cuadri-
culado de distintas cenefas (líneas horizontales, verticales o que-
bradas), reproducirán sobre el geoplano estas líneas.
-
las con gomas de otro color, llegando así a reproducir comple-
tamente lo que visualizan en el papel cuadriculado. Para comple-
tar esta actividad pasaremos al proceso contrario: reproducirán 
cenefas en el geoplano y las transcribirán en papel cuadriculado, 
empezando por cenefas sencillas de realizar (por ejemplo: líneas, 
horizontal y vertical, cruces, oblicua a la derecha, oblicua a la 
izquierda, y el aspa).
Para 4-5 años. A lo largo del curso de 4 años, el niño ha ido 
escribiendo letras y números de su mundo más significativo (su 
nombre, su edad…). Con el geoplano se trataría de ir ajustando 
los tamaños en las seriaciones que iría realizando. Este sería un 
trabajo previo para después, en 5 años, utilizar la pauta montes-
sori o la pauta cuadriculada.
© narcea, s.a. de ediciones 69
El geoplano circular no es más 
que una variante del geoplano 
cuadrado que hemos diseñado 
en el capítulo anterior. Utilizare-
mos pues los mismos materiales 
que en el trabajo anterior.
A partir de dos tableros de 
contrachapado de 44x44 cm, 
utilizaremos uno de ellos para 
todos los trazos necesarios. En 
éste señalamos el centro con el 
trazado de sus dos diagonales; 
este centro nos permitirá marcar 
todas las líneas necesarias pre-
vias a su construcción.
Si no disponemos de un gran 
compás, clavamos un clavo en el 
centro trazado al que sujetaremos 
un cordel al que por el otro ex-
tremo anudaremos un lápiz según 
el radio deseado. El lápiz permi-
tirá el trazado de las circunferen-
cias deseadas. Empezamos tra-
zando la circunferencia mayor, 
cuyo radio será de 20 cm.
Acortamos distancias hacia el 
centro con nuevos nudos para 
trazar las dos circunferencias res-
tantes cuyos radios serán de 14 
y de 8 cm respectivamente.
CÓMO CONSTRUIR UN GEOPLANO CIRCULAR
7. Geoplanos II. 
Geoplano circular
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
70 © narcea, s.a. de ediciones
Tendremos en cuenta una cir-
cunferencia superior a todas que 
indicará la línea de corte; ésta 
tendrá un radio de 22 cm, la mi-
tad del lado del cuadrado inicial.
Sirviéndonos del trazado de 
las primeras diagonales, debe-
mos trazar a continuación radios 
equidistantes entre sí con el fin 
de obtener los puntos por donde 
se cortan los radios con las cir-
cunferencias (algo así como el 
trazado de una diana).
En principio obtenemos un to-
talde 8 radios. Uniendo por una 
recta dos de ellos y señalando la 
mitad del segmento resultante, 
unimos el punto con el centro y, 
a partir de ahí, seguimos trazando 
nuevos radios, tantos como se 
deseen. El resultado final será 
pues de 16 radios y tres circun-
ferencias. En la circunferencia 
mayor señalamos los puntos por 
donde se cortan los radios y tra-
zamos el punto medio entre dos 
puntos con el fin de obtener 32 
puntos.
De los 32 puntos situados en 
la circunferencia mayor pasamos 
a 16 en la siguiente y otros 16 
en la tercera.
Ya tenemos listas las dos pie-
zas: en la primera, obviamente, 
practicaremos los taladros en los 
puntos señalados. La segunda 
servirá de base al conjunto e irá 
encolada una vez hechos los ta-
ladros.
© narcea, s.a. de ediciones 71
GEOPLANOS II. GEOPLANO CIRCULAR
Como se aprecia, la primera 
pieza ya tiene sus taladros hechos 
con broca del calibre de las espi-
gas o tacos de madera que enco-
laremos.
Hemos encolado con cola 
blanca el círculo de la base y 
sujetado con pinzas el círculo 
superior mientras se seca.
Ya seca la cola, perfilamos los 
bordes del círculo con el fin de 
que el conjunto sea suave al 
tacto. Nos aplicamos ahora en la 
pintura. Como ocurría con el 
primer geoplano, el geoplano 
cuadrado, clavamos cuatro cla-
vos en la cara de la base (hacen 
el papel de patas provisionales) 
con el fin de pintar todo el con-
junto de una vez. Utilizaremos 
para pintar, como de costumbre, 
una esponja ya que nos permite 
uniformizar las superficies.
Damos la vuelta a la pieza y 
pintamos la otra cara sin temor 
(gracias a los clavos) a que la 
base entre en contacto con cual-
quier superficie. 
Una vez secas las superficies, 
lijamos ambas caras hasta que 
nos resulten suaves al tacto. 
Procedemos a la segunda y 
definitiva mano.
Estamos ya en la fase final. 
Retiramos los clavos provisiona-
les. Hemos comprado estos ta-
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
72 © narcea, s.a. de ediciones
cos lisos o espigas que encola-
mos y clavamos en cada taladro. 
Acompañamos el geoplano de 
gomas elásticas de colores que 
permiten jugar a crear figuras.
APLICACIONES DIDÁCTICAS
GEOPLANO CIRCULAR
Objetivos
Los objetivos citados en el capítulo anterior para el geoplano cua-
drado, que además aplicamos al geoplano circular son los cinco pri-
meros. Añadimos a éstos los objetivos siguientes:
✓ Realizar la forma circular.
✓ Localizar el centro de un círculo.
✓ Representar objetos y formas sobre el geoplano circular.
Contenidos
— El círculo.
— Las representaciones sobre el geoplano circular.
Actividades
pizza… que cortamos en porciones. Componer con los niños 
estrellas, lunas y otras representaciones con base circular.
bici, de coche, noria…).
tamaño y color.
© narcea, s.a. de ediciones 73
Vamos a construir, de forma muy 
sencilla, un lápiz que será muy 
apreciado en el aula infantil. En 
primer lugar porque es del todo 
atractivo y llamará la atención de 
los niños y, en segundo lugar, 
porque es de gran utilidad.
Pensamos en el objeto al que 
asignaremos unos colores llama-
tivos que contrasten, decorados 
con líneas como muchos lápices 
al uso.
Otra condición en la construc-
ción será la de dar sensación de 
autenticidad, es decir, que es un 
juguete educativo que ni pinta ni 
borra pero reúne muchas otras 
cualidades.
Y sin más preámbulos nos 
pondremos manos a la obra.
Conseguiremos tres bastones 
cilíndricos de madera de 25 mm 
de diámetro por 33, 31 y 26 cm 
de largo. Esto no es más que 
una opción: creemos que lo im-
portante sería que fueran más 
grandes de lo normal. Además, 
necesitaremos vinilos adhesivos 
de varios colores y pinturas acrí-
licas.
CÓMO CONSTRUIR UN LÁPIZ MÁGICO
8. El Lápiz mágico
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
74 © narcea, s.a. de ediciones
En caso de tratarse de basto-
nes con alguna aspereza o de-
fecto de fabricación, intentaremos 
lijar previamente las superficies 
para que queden suaves al tacto y 
para que, al forrarlos, no presen-
ten irregularidades.
Tenemos los tres bastones, las 
lijas (del n.º 120) con las que 
preparamos sus superficies y el 
disco de lija que fijaremos a la 
taladradora para trabajar las for-
mas de la punta y el borrador 
del extremo opuesto.
Hay que conseguir dar forma 
a los extremos. La parte inferior 
habrá que modelarla de forma 
cónica y la superior de forma 
semiesférica algo achatada ya 
que deberá simular la goma de 
borrar de los lápices al uso.
Esta es quizás la parte donde 
tendremos que trabajar más a 
fondo porque es precisamente la 
que define el objeto.
En estas ilustraciones se reco-
gen los primeros pasos que da-
remos para obtener las puntas 
de los lápices. Señalamos con 
un lápiz el alcance de cada punta 
o base del cono. Aplicamos a 
continuación el disco a la tala-
dradora. Ponemos en marcha la 
máquina y nos disponemos a 
“sacar punta” girando poco a 
poco el bastón con el fin de lo-
grar una superficie redondeada.
Si se trata de una taladradora 
pequeña, bastará con sostenerla 
con la mano mientras trabaja-
mos. De lo contrario habrá que 
sujetarla a la mesa de trabajo 
con una prensa o gato.
Vamos girando los bastones 
hasta obtener la punta.
Disponiendo la lija en forma de 
embudo, perfeccionaremos la 
punta con un mejor acabado. Da-
mos los mismos pasos para lograr 
© narcea, s.a. de ediciones 75
EL LÁPIZ MÁGICO
esa forma semiesférica achatada 
en el extremo opuesto, para obte-
ner la “goma de borrar”.
Procedemos a continuación a 
pintar estos extremos con pintura 
acrílica añadiendo al rojo un poco 
de blanco para lograr un tono 
algo rosáceo que simule la goma 
de borrar; para la punta añadire-
mos al negro un poco de blanco 
para obtener un color carbón.
Este es el resultado de la pri-
mera fase de nuestro trabajo.
Pasamos a la fase de decora-
ción de los lápices utilizando vi-
nilo adhesivo. Forramos primero 
el fondo de cada lápiz.
Elegimos a continuación unos 
colores llamativos que contrasten 
con el del fondo; cortamos tiras 
de estos colores señalando cua-
tro partes iguales alrededor del 
cilindro y, seguidamente, pega-
mos una tira entre cada dos con 
el fin de que la distribución sea 
equitativa.
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
76 © narcea, s.a. de ediciones
Una vez realizado este pro-
ceso cortaremos los sobrantes a 
la altura del color del fondo.
Con vinilo dorado pegaremos 
una faja en la parte superior de 
tal modo que simule el metal que 
fija la goma de borrar al lápiz.
Estos son los resultados obte-
nidos.
© narcea, s.a. de ediciones 77
EL LÁPIZ MÁGICO
APLICACIONES DIDÁCTICAS
EL LÁPIZ MÁGICO
Este material puede ser usado tanto por el docente, como por los 
alumnos, por imitación. Se trata de un objeto que genera en el niño 
el interés hacia la creatividad, ya que con él marcamos en el aire ce-
nefas, grafías de números y letras, líneas continuas, discontinuas, etc.
Para desarrollar actividades con este material, se utilizará como 
útiles los lápices y como soporte el espacio del aula, añadiendo mu-
chísima imaginación; más de lo imaginable.
Un requisito fundamental para su uso por parte del docente es el 
trabajo en espejo como condición indispensable para realizar la direc-
cionalidad adecuada.
Dado que los lápices pintan, y aunque éstos que hemos elaborado 
lo hacen con la imaginación, utilizando una variabilidad, también 
tienen la virtud de borrar. Esto permitirá corregir de forma imagina-
tiva lo que hemos trazado.
Otra de las características es hablar de la anatomía: el niño, cuando 
lo utiliza, traza las figuras con todo su cuerpo.
Objetivos
✓ Jugar con la imaginación.
✓ Utilizar de forma adecuada la pinza.
✓ Apreciar la presión y la prensión.
✓ Calibrar la intensidad de los trazos fuertes y débiles.
✓ Jugar con el ritmo de las grafías a gusto, rápido, lento.
✓ Ejercitar la anatomía del hombro, codo, muñeca y pinza.
Contenidos
– El juego imaginativo.
– Posición correcta del índice y del pulgar.
– La velocidad de los trazosy del ritmo de las grafías (rápido/lento).
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
78 © narcea, s.a. de ediciones
– Las partes de los elementos anatómicos que intervienen en la 
escritura.
Actividades
Las actividades y juegos en torno al uso del lápiz mágico deberán 
fomentar el aprendizaje de la lectoescritura; así se impone el lograr 
un correcto dominio de las partes anatómicas que intervienen en la 
escritura y una memoria visual tendente al reconocimiento de las le-
tras y los números en el aire.
y el niño, con su índice, las marcará en el aire. Primeramente 
será una actividad muy guiada dada su novedad, para, poco a 
poco, apropiarse el niño de la direccionalidad y del nombre de 
la letra y del número (4-5 años).
-
nefas, letras y números. Los demás deberemos adivinar qué 
trazo ha realizado. Si nos equivocamos, el niño borrará con la 
goma para volver a un nuevo ensayo. Previamente el maestro le 
dirá al oído qué letra o trazo debe realizar (4 años).
-
ciarán la direccionalidad del mismo tanto si son muy rápidos 
como si son muy lentos, dado que el niño aprende por contraste 
y no por matices. Este principio puede ser aplicado para estos 
juegos y no sólo para, por ejemplo, el aprendizaje de un color. 
Esta actividad se realizará según los principios de las dos ante-
riores (4-5 años).
-
tenido, hacen referencia a la amplitud del trazo, dado que, 
cuanto mayor sea el trazo dibujado en el aire, más partes ana-
tómicas intervienen en su ejecución. Si trazamos por ejemplo 
una “A” grande, intervendrán la pinza, la muñeca, el codo y el 
hombro; mientras que si es un tamaño menor, lo que más se 
ejercita es la muñeca y la pinza (3-4-5 años).
© narcea, s.a. de ediciones 79
El capítulo de los bloques lógicos 
nos puede dar claves interesan-
tes a la hora de desenvolvernos 
en la creación de ensartables. 
Pensemos que se trata de fabri-
car o modelar pequeñas figuras 
geométricas cuyo común deno-
minador es el de presentar uno 
o más orificios por el que el niño 
pasará un cordón logrando así 
formar series en función de las 
dos variables de estas figuras: el 
color y la forma.
Las figuras pueden ser de lo 
más variado: cubos, cilindros de 
distinto tamaño y grosor, esferas 
o bolas.
Los colores por su parte tam-
bién pueden ser muy variados, 
aunque nos inclinaremos por los 
tradicionales en este tipo de tra-
bajo: verde, rojo, amarillo y azul.
Como ya es habitual en nues-
tro trabajo presentaremos varias 
formas de elaborar figuras ensar-
tables según el grado de dificul-
tad o según el material que vaya-
mos a utilizar.
Las posibilidades de ensarta-
bles que ofrecemos son: goma-
espuma dura, pasta de modelar 
y madera.
Ensartables fabricados 
con gomaespuma dura
Recordaremos que en el capí-
tulo cinco, al construir bloques 
lógicos, ya utilizamos este mate-
rial como una posibilidad para su 
CÓMO CONSTRUIR ENSARTABLES
9. Ensartables
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
80 © narcea, s.a. de ediciones
elaboración. Muchos fueron los 
sobrantes que conservamos y 
que ahora nos van a servir para 
fabricar no pocas unidades.
De estos sobrantes de puzles 
infantiles recortamos piezas que 
nos permitirán fabricar figuras 
cuadradas de 3x3 cm.
Como se apreciará en la ilus-
tración, trazamos a lápiz los cua-
drados que se pueden obtener.
La guillotina o cortapapeles 
nos resulta muy apropiada ya 
que los cortes son precisos y a la 
vez no se daña el material, 
puesto que trabajamos con un 
material blando. La dificultad de 
este paso es mínima: no tene-
mos más que hacer los cortes 
por las líneas trazadas.
El rendimiento de este pro-
ceso es muy grande puesto que 
nos permite fabricar cantidades 
elevadas de unidades.
Los mismos pasos damos por 
lo que respecta a triángulos equi-
láteros (de 3,5 cm de lado) cuyo 
trazado es de todos conocido.
© narcea, s.a. de ediciones 81
ENSARTABLES
Por lo que al círculo respecta 
la dificultad es mayor. Nos pro-
ponemos fabricar aquí ensarta-
bles de 4 cm de diámetro, para 
lo cual necesitaremos usar una 
plantilla de madera de forma 
circular; a la vez se requiere una 
pieza de madera que haga de 
base sobre la que podamos tra-
bajar; y finalmente la pieza de 
goma-espuma de la que desea-
mos obtener el ensartable.
Colocamos la pieza de goma-
espuma entre la pieza base y la 
circular presionando al máximo 
con un gato de carpintero. Se-
guidamente cortamos con un 
cúter por la línea de la plantilla.
Estas son las piezas obtenidas.
Para muchos es desconocida 
una herramienta tan simple 
como útil llamada popularmente 
“sacabocados”. Es un instru-
mento que permite troquelar 
materiales blandos de forma ma-
nual, y en el caso que nos inte-
resa el elemento que falta en los 
ensartables que hemos fabri-
cado: el agujero central.
También podemos utilizarlo 
para hacer ensartables circulares 
como veremos más adelante.
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
82 © narcea, s.a. de ediciones
Este es el procedimiento para el 
corte del orificio aunque podemos 
dar dos pasos a la vez: uno para 
el corte exterior (con el accesorio 
correspondiente) y otro para el 
interior como comprobamos en 
las siguientes ilustraciones.
Aplicamos para ello al mango 
de la herramienta la pieza del 
calibre que nos conviene (estas 
piezas escaladas troquelan for-
mas circulares). Haciendo una 
ligera presión con el sacaboca-
dos en el centro de la pieza ob-
tendremos sin dificultad el orifi-
cio deseado. Es preciso colocar 
una tablilla de madera debajo de 
la pieza con el fin de no despor-
tillar la pieza cortante aplicada.
Manteniendo así aplicado el 
accesorio para orificios peque-
ños, nos ocupamos de realizar la 
misma operación a las demás 
figuras.
Ensartables hechos 
con pasta de modelar
Siguiendo igualmente las fór-
mulas utilizadas para los bloques 
lógicos, encontraremos aquí pro-
cedimientos mucho más sencillos. 
Presentaremos una muestra de lo 
que se puede obtener con esta 
pasta.
Los materiales que intervie-
nen en la fabricación de estos 
ensartables de forma general 
plana son:
 Un rodillo de cocina para 
aplanar la pasta.
 Dos tablillas o listoncillos de 
madera que nos sirven de 
guías para mantener siem-
© narcea, s.a. de ediciones 83
ENSARTABLES
pre el mismo grosor y por 
los que rueda el rodillo.
 Moldes que presenten la 
forma del ensartable que 
deseemos obtener (en la 
ilustración aparece una tapa 
de plástico circular que he-
mos perforado previamente 
para que no haga el efecto 
ventosa).
 Una lámina de plástico so-
bre la que haremos todo el 
trabajo.
 Un lápiz cilíndrico que nos 
permitirá hacer los aguje-
ros.
 Pasta de modelar.
Amasamos aquí la pasta con 
un poco de agua hasta compac-
tarla y seguidamente la aplana-
mos con el rodillo que hacemos 
rodar presionando sobre las ta-
blillas.
Con ligeros movimientos gira-
torios presionamos la pasta con 
el molde. Obtenemos así las pie-
zas circulares (4,5 cm de diáme-
tro) que la pasta nos permite.
Con el lápiz, también con movi-
mientos giratorios practicamos las 
correspondientes perforaciones. 
Separamos con un cuchillo las 
piezas por su base y las colocamos 
en otra lámina de plástico para 
ponerlas a secar.
Vamos ahora a obtener ensar-
tables cuadrados para lo cual 
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
84 © narcea, s.a. de ediciones
colocamos las tablillas a una dis-
tancia algo superior a la anchura 
de las mismas. Aplanamos. Co-
locamos una tablilla encima de la 
pasta aplanada por la línea de la 
otra tablilla.
Cortamos con un cuchillo la 
pasta sobrante.
Se comprueba que la segunda 
tablilla colocada en perpendicu-
lar a la primera nos va a servir 
de guía para obtener las piezas 
cuadradas (de 2x2 cm).
Hemos marcado suavemente 
con el cuchillo todos los segmen-
tos posibles.
© narcea, s.a. de ediciones 85
ENSARTABLES
Cortamos definitivamente por 
las líneas señaladas y practica-
mos los orificios con el lápiz.
Vamos colocando las piezas 
obtenidas en la lámina que nos 
permite transportarlas piezas 
para su secado. Una vez secas 
obtenemos la muestra de las pie-
zas en bruto.
Nos dedicamos ahora a lijar 
todas las caras de las piezas des-
lizándolas sobre la lija hasta ho-
mogeneizar las superficies. Esta 
operación es la misma que la 
realizada con las regletas. Tenga-
mos siempre en cuenta que de-
bemos deslizar la pieza sobre la 
lija y no al revés.
Ensartables de madera
Vamos a realizar una serie de 
figuras a partir de elementos fá-
ciles de conseguir: para construir 
cubos nos serviremos de un lis-
tón de corte cuadrangular. Para 
los cilindros, de un bastón de 
base cilíndrica; para obtener cír-
culos “galletas” o “botones” sa-
caremos partido a un tablero de 
contrachapado.
Cubos
Empecemos por la construc-
ción de cubos. Deberemos fabri-
car un mínimo de 16, múltiplo 
de 4 por las variables de color.
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
86 © narcea, s.a. de ediciones
Disponemos de este listón de 
2x2 de madera de abeto, ma-
dera apta porque no es del 
grupo de las duras, mucho más 
difíciles de trabajar.
Por la base trazamos sus dos 
diagonales con el fin de localizar 
el centro de la misma.
Dividimos el listón en seg-
mentos iguales a las dimensio-
nes de la base. Lo fijamos con 
un gato y practicamos un tala-
dro lo más horizontal posible 
respecto de la base.
Con el corte del listón por la 
líneas trazadas vamos obteniendo 
las piezas en bruto.
Antes de pintarlas procedere-
mos a lijar las superficies así 
como a suavizar las aristas y los 
vértices hasta lograr un acabado 
suave al tacto.
Cilindros
Para la construcción de cilin-
dros seguiremos el mismo proce-
dimiento que en el trabajo ante-
rior.
El bastón de la primera ilustra-
ción lleva un clavo en el centro 
de la superficie de la base que 
nos sirve de señal para practicar 
el taladro. Deberá ser siempre 
un taladro poco profundo (algo 
más que la altura del cilindro) 
© narcea, s.a. de ediciones 87
ENSARTABLES
porque de lo contrario corremos 
el riesgo de desviarnos en ex-
ceso y, por tanto, desplazar el 
orificio de la figura.
Estos son los resultados. Como 
se aprecia los orificios de las fi-
guras quedan aproximadamente, 
aunque no exactamente, en el 
centro de las figuras.
Círculos
Para la fabricación de círculos 
de mayor o menor grosor nece-
sitaremos un tablero de contra-
chapado y una broca de cam-
pana que nos permite hacer 
círculos de tamaños variados. 
Estos son los dos elementos bá-
sicos para nuestro cometido. La 
broca de campana presenta va-
rias piezas concéntricas; de ellas 
elegiremos una según la pieza 
que queramos obtener.
Colocamos en la taladradora la 
broca en cuestión. Esta opera-
ción es ejecutable cuando se trata 
de maderas blandas y de poco 
grosor (este tablero no supera los 
5 mm); si se tratase de maderas 
naturales o de mayor grosor, se 
debe utilizar la columna de tala-
dro que fija la taladradora.
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
88 © narcea, s.a. de ediciones
Estas son las piezas obtenidas, 
figuras válidas para los ensarta-
bles que deseamos fabricar.
Como deberemos suavizar 
cada una de las figuras a la vez 
que obtener figuras de doble 
grosor (o triple según deseemos), 
nos serviremos de un procedi-
miento mecánico bien simple. 
Un tornillo de tuerca con dos 
arandelas fijará un par de piezas 
previamente encoladas. Enrosca-
remos con fuerza las parejas de 
piezas simples.
Instalamos el ensamblaje en la 
taladradora que hará las funcio-
nes de torno. Activada la tala-
dradora aplicaremos la lija por 
las superficies y bordes, obte-
niendo así formas suavizadas.
© narcea, s.a. de ediciones 89
ENSARTABLES
Con un objeto metálico de 
acabados redondeados haremos 
presión con movimientos rotato-
rios en el orificio central con el 
fin de facilitar el paso del cordón 
en la ejecución de actividades, 
algo así como avellanar el orificio 
por ambas entradas.
Fabricaremos ahora círculos 
mayores de dos y de cuatro ori-
ficios. Para ello trazaremos sobre 
el tablero dos líneas perpendicu-
lares con la finalidad de fabricar 
una primera pieza que nos ser-
virá de platilla para la fabricación 
de las restantes. Tomando como 
centro el punto por el que se 
cortan dichas rectas marcamos 
cuatro puntos equidistantes con 
el compás. Señalamos estos 
puntos por donde practicaremos 
los taladros, paso previo a la 
obtención del círculo.
Obtenemos, siguiendo estos 
pasos, la primera pieza que nos 
sirve de plantilla para las restan-
tes ya sean de dos o de cuatro 
orificios. Bastará con señalar 
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
90 © narcea, s.a. de ediciones
sobre el tablero el punto central 
(para el taladro con broca de 
campana) y los restantes (dos o 
cuatro).
Por el procedimiento que he-
mos explicado obtenemos las 
copias deseadas, disponiéndonos 
a su avellanado, y procediendo 
como ya se ha explicado.
© narcea, s.a. de ediciones 91
ENSARTABLES
Hechos los avellanados que fa-
cilitarán el paso del cordel, pasa-
mos a suavizar los contornos del 
modo acostumbrado.
Procedemos a taponar el orifi-
cio central con un lapicero fino 
pasado a presión y cuyos so-
brantes cortaremos con la sierra 
de marquetería.
Una ver cortados los sobran-
tes deslizamos la pieza sobre lija 
con el fin de dar un buen aca-
bado a estos ensartables.
No estando a nuestro alcance 
la fabricación de abalorios, he-
mos conseguido los de la ilustra-
ción que nos permitirán dar más 
variedad al juego de ensartables 
que hemos fabricado.
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
92 © narcea, s.a. de ediciones
APLICACIONES DIDÁCTICAS
ENSARTABLES
Este material nos remite directamente a juegos de creatividad; cum-
ple por sí mismo un fin estético que el niño debe apreciar. Responde 
a su carácter globalizador al presentar unidades de forma, color y 
tamaño ya conocidas.
Objetivos
Los objetivos que se alcanzan presentan una doble dimensión: el 
trabajo manipulativo unido a la lógica y a la imaginación.
✓ Usar la pinza de ambas manos.
✓ Crear objetos ornamentales.
Contenidos
– El uso de la pinza.
– Las combinaciones.
– Los objetos creados.
Actividades
Los ensartables son muy adecuados para la realización de seriaciones 
según variables (color, forma, tamaño).
Para 3 años: seriaciones con 1 variable (color).
Para 4 años: jugaremos a ensartar con 2 variables.
Para 5 años: usaremos 3 variables según las combinaciones de 
forma-color-tamaño.
Para crear interés en el niño les daremos a todas estas actividades 
un matiz emocional, introduciendo la idea de construir objetos orna-
mentales que los niños conocen bien: collar, pulsera, diadema, cintu-
rón con botones ensartados, etc.
© narcea, s.a. de ediciones 93
Lograr que el niño sea capaz de 
realizar las acciones de abrir y 
cerrar sus prendas de vestir será 
posible gracias a las actividades 
ejecutables sobre estos bastidores. 
Para su elaboración nos servire-
mos de elementos fáciles de con-
seguir junto con otros que debere-
mos construir nosotros mismos.
Comenzaremos la explicación 
de los pasos construyendo los 
bastidores o soportes de forma 
cuadrangular que sujetarán las 
telas.
Estos materiales son suficien-
tes para construir el bastidor 
más simple que sabemos:
 Dos tubos de cartón duro 
tras haber agotado el rollo 
de papel aluminio que se 
utiliza en la cocina.
 Dos bastones redondos de 
madera de igual longitud.
 Cuatro tapones de botellas 
de cava o champán.
Hemos practicado un taladro 
a cada tapón del mismo calibre 
que los bastones de madera. Lo 
que pretendemos es montar 
CÓMO CONSTRUIR BASTIDORES
10. Bastidores
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
94 © narcea, s.a. de ediciones
unos bastidores desmontables 
que nos permitan desprender de 
los mismos las telas, para los 
obligados lavados, teniendo en 
cuenta que este material será 
muy manipulable.
En este paso ajustamos los ta-
pones de corcho a los bastones y 
los pegamos con cola blanca tras 
haberlos alineado correctamente.
Deberemos a su vez asegurar-nos de que ambos elementos 
tienen la misma longitud.
Con estos pocos pasos hemos 
logrado fabricar un bastidor, aun-
que muy rudimentario, pero lo 
suficientemente sólido para nues-
tro cometido.
Como se aprecia en la imagen 
los tapones encajan justo en los 
tubos de cartón duro. A partir de 
este punto daremos los pasos 
para ajustar su tela correspon-
diente. Una de las condiciones 
fundamentales para lograr un 
material de calidad es la de ele-
gir una tela de gran consistencia 
que a la vez nos permita un 
tenso ajuste al bastidor.
La tela de la ilustración es 
lona de toldo, quizás las más re-
sistente.
BASTIDORES
© narcea, s.a. de ediciones 95
Utilizamos un tubo sobrante 
como patrón para la anchura de 
la banda que necesitamos obte-
ner. Una vez comprobada la an-
chura coseremos las costuras por 
cada lado. Añadimos a nuestras 
habilidades manuales la de coser 
a máquina, tarea nada difícil de 
aprender si previamente se reali-
zan unas prácticas sobre retales.
Cubrimos el tubo de cartón 
con la lona y sujetamos con alfi-
leres por la línea de la costura.
Una vez realizada esta opera-
ción, extraemos el tubo de car-
tón y nos disponemos a coser 
por tal línea. En la última ilustra-
ción se comprobará que hemos 
hecho una doble costura con el 
fin asegurar la calidad del tra-
bajo.
Realizamos la misma operación 
en el otro extremo ajustando al 
máximo la lona al otro tubo. Para 
este fin, habremos instalado la 
pieza en el bastidor. Una vez en-
vuelto éste, señalamos con lápiz 
su alcance; desmontamos de 
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
96 © narcea, s.a. de ediciones
nuevo y sujetamos con alfileres 
para disponernos a coser este 
otro cabo. De esta manera conse-
guiremos la base sobre la que 
trabajar los pasos sucesivos.
Empezamos aquí la tarea de 
rescatar prendas viejas para obte-
ner de ellas los elementos de cierre 
que, por otra parte, nos ahorrarán 
el trabajo de confeccionarlos.
Reciclamos pues cremallera y 
botones de pantalones tejanos. 
Los colocamos primeramente 
sobre la lona y señalamos las lí-
neas verticales de abertura y, en 
la parte superior, las líneas hori-
zontales que marcan el alcance 
de cada pieza.
Con tijeras y cúter hacemos las 
incisiones por tales líneas para 
posteriormente fijar con alfileres 
las piezas que vamos a coser.
Hemos empezado por la con-
fección de la pieza de botones; 
comprobamos que la costura se 
realizará sobre la pieza desabro-
chada. Al abrochar los botones 
nos queda tensa la lona.
BASTIDORES
© narcea, s.a. de ediciones 97
Los mismos pasos hemos se-
guido para la pieza correspon-
diente a la cremallera. Hemos 
hecho la confección sobre la 
pieza abierta; al cerrarla com-
probamos que la lona de base 
sigue intacta. Aquí terminamos 
nuestro primer bastidor.
El segundo bastidor lo dedicare-
mos a los pies bajo dos modalida-
des de abrochado: el velcro y los 
cordones. No nos limitaremos a 
un solo elemento por modalidad: 
es importante realizar la tarea te-
niendo en cuenta los elementos 
derecho e izquierdo.
Rescatamos del olvido dos pa-
res de zapatillas de las que apro-
vecharemos las partes que nos 
interesan, sin perder de vista la 
identidad de cada una de ellas. Al 
verlas el niño percibirá que se 
trata de partes de unas zapatillas.
Hemos cortado con cúter las 
partes correspondientes al em-
peine incluidas las solapas que 
separan los cierres del pie. Que-
dan presentados, izquierdo y de-
recho, los elementos tal y como 
deberán ir cosidos a la lona. Las 
costuras están realizadas bor-
deando los elementos en posi-
ción de cerrados, a excepción de 
las solapas porque precisamente 
la actividad de abrochar se reali-
zará partiendo de este punto: las 
zapatillas desabrochadas.
La modalidad de cordones se-
guirá los mismos pasos que la 
anterior. Hemos presentado las 
piezas y, a continuación, hemos 
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
98 © narcea, s.a. de ediciones
hecho la confección por los mis-
mos contornos. Dada la rigidez 
del material no ha sido necesario 
sujetar las piezas con alfileres. 
Para evitar que las zapatillas nos 
“saquen la lengua” tendremos 
que hacer que el niño sea capaz 
de “llevar las cosas a su sitio”, 
colocando las solapas en el inte-
rior, pasando de forma correcta 
los cordones y, por último, atán-
dolos en forma de lazo. Queda 
así completado el bastidor.
La construcción del tercer bas-
tidor es sencilla de entender y, 
quizás, fácil de construir si somos 
capaces de trabajar con preci-
sión. Disponemos de dos listones, 
que hemos redondeado en sus 
extremos, y dos bastones cilíndri-
cos; la longitud de los mismos es 
de 34 cm, medidas muy similares 
a los anteriores. También estos 
bastidores serán desmontables; 
los bastones cilíndricos se debe-
rán ajustar a los taladros que se 
aprecian en los listones.
Siguiendo los mismos pasos, 
hemos confeccionado su lona 
correspondiente teniendo siem-
pre presente que al ajustarla 
quede tensa.
BASTIDORES
© narcea, s.a. de ediciones 99
Sobre el mismo tipo de lona 
doblada hacemos una demostra-
ción de colocación de ollaos que 
nos permitirá realizar actividades 
de paso de cordones por gran-
des orificios. Los ollaos y los 
elementos necesarios para su 
colocación se presentan a la 
venta en un kit, que se compone 
de una serie de ollaos, la base 
metálica para su ensamblaje y el 
cilindro que, golpeado con el 
martillo, permite tal ensamblaje.
Una vez agujereada la tela, se 
colocan las partes del ollao en 
cada cara; situamos el metal de 
base en la parte inferior aco-
plando la otra parte del ollao; 
colocamos en la cara superior el 
aro del ollao y, como si se tra-
tase de un clavo, golpeamos el 
cilindro con el martillo hasta en-
samblar cada parte.
Este es el resultado por ambas 
caras; se aprecia en la primera la 
parte remachada, resultado de 
golpear el cilindro con el martillo.
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
100 © narcea, s.a. de ediciones
Hemos confeccionado, em-
pleando lona doble, dos solapas 
de igual tamaño con 5 ollaos 
alineados en cada una que, dis-
puestas como se aprecia en la 
ilustración, irán cosidas a la lona 
del bastidor.
Hemos cosido ya las dos sola-
pas a lo largo de cada margen y 
hasta la mitad de su anchura, ya 
que lo importante es que la zona 
de los ollaos sea fácil de usar a 
la hora de pasar el cordón.
No podemos olvidar otra mo-
dalidad como es la de abrochar 
hebillas. Para ello nos hemos 
hecho con dos pequeñas, aun-
que manejables, correas que 
ocupen la parte inferior del bas-
tidor. Antes de coser las piezas 
las hemos cortado por la mitad 
resultando algo parecido a las 
correas de un reloj de pulsera.
BASTIDORES
© narcea, s.a. de ediciones 101
Hemos cosido las piezas con 
las hebillas pasadas con el fin de 
que la alineación sea correcta.
Agotando las posibilidades de 
capacidad de este tercer basti-
dor, buscamos un hueco donde 
colocar un conjunto de tres pa-
sadores. Presentamos la manera 
de hacer un modelo de pasador 
de madera, aunque estas piezas 
se consiguen en mercerías.
Le sacamos punta a un bastón 
del calibre de un lápiz hasta la 
forma de cono truncado y pre-
paramos un taladro de broca 
madera fina (1,5 mm aprox.)
Realizamos dos taladros muy 
próximos entre sí y con un cúter 
abrimos un pequeño canal entre 
ambos. Señalamos el punto por 
donde cortaremos, de tal modo 
que los orificios queden en la 
parte central del pasador.
Realizamos, por último, la 
misma operación sacando punta 
al cabo opuesto.
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
102 © narcea, s.a. de ediciones
Al igual que con los ollaos 
confeccionamos dos solapas so-
bre las que coser las cintas elás-
ticas: por un lado las redondea-
das para los pasadores y por 
otro las planas. Cosemos por 
último las solapas a la lona del 
bastidor siguiendo los mismos 
procedimientos que con los 
ollaos.
En el último rincón de este 
tercer y último bastidor cosemos 
un pequeño bolsillo de cierre de 
clic o automático. No tenemos 
más queseguir las líneas del bol-
sillo para su confección.
Así resulta el tercer bastidor.
Para terminar recordamos to-
dos los materiales que hemos 
utilizado en la elaboración de 
estos tres bastidores:
 Dos tubos de cartón duro 
(30 cm) por bastidor proce-
dente de rollos de papel 
aluminio.
 Dos varillas redondas de 
madera de 12 mm de cali-
bre la misma longitud por 
bastidor.
BASTIDORES
© narcea, s.a. de ediciones 103
 4 tapones de corcho de bo-
tellas de cava por bastidor 
coincidentes con el calibre 
inferior de los tubos de car-
tón.
 Para el marco del segundo 
modelo de bastidor emplea-
mos dos listones cuadrados 
de 34 cm aproximadamente 
de largo y 2,5 cm de grosor, 
y dos varillas redondas de la 
misma longitud y 12 mm de 
calibre.
 Recortes de lona fuerte del 
color deseado.
 Cierres de botones, de cre-
malleras… procedentes de 
prendas viejas.
 Cierres de cordones, de vel-
cro… procedentes de pren-
das viejas.
 Ollaos con kit de instala-
ción.
 Cordones.
 Correas con hebillas.
 Objetos con cierres de clic o 
automáticos.
 Botones de pasador.
 Goma elástica forrada.
APLICACIONES DIDÁCTICAS
LOS BASTIDORES
La utilidad básica de los bastidores consiste en ayudar al niño a alcan-
zar su autonomía a la hora de desvestirse y de vestirse (por este orden, 
ya que es más fácil deshacer por ejemplo un lazo que anudarlo).
Objetivos
✓ Reconocer distintas prendas y sus cierres.
✓ Usar las pinzas digitales.
✓ Apreciar las diferencias de cierres según el grado de dificultad.
✓ Ser autónomo a la hora de vestirse.
Contenidos
– Léxico de prendas y sus posibles cierres.
– Uso de las pinzas.
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
104 © narcea, s.a. de ediciones
– Clasificación de cierres según su dificultad.
– La autonomía al vestirse.
Actividades
A modo de juego, meteremos en un baúl prendas de vestir de cual-
quier estación del año. Sacaremos prenda tras prenda para que los 
niños las reconozcan señalando a la vez la estación a la que pertene-
cen, así como la parte del cuerpo que cubren dichas prendas (3-4-5 
años). Sobre las prendas vistas haremos dos clasificaciones: prendas 
con cierres y prendas sin cierres. Posteriormente pasaremos a men-
cionar de qué tipo de cierre se trata en cada caso (3-4-5 años).
Juego con bastidores. Los niños pueden trabajar individuale-
mente con los diversos tipos de cierres que presentan los basti-
dores. Mientras se realiza esta práctica, con la ayuda del maestro 
y dependiendo de la edad, se manipularán estos cierres según 
este orden de dificultad: cremallera, velcro, clic y botones (3 
años); pasadores y hebillas (4 años); lazos (5 años). El juego 
consistirá en usar el máximo de cierres posibles según la edad.
Aplicación del juego de bastidores: El juego de la actividad 
anterior se trasladará a las prendas que llevan los niños. Lleva-
remos un orden en esta actividad:
 En los momentos de rutinas de entrada y salida, ser autónomo 
para quitarse las chaquetas, abrigos, etc., y ponerse y aboto-
narse el babi.
 En los momentos de juego (de las sillas por ejemplo) el niño 
tendrá que dejar, en caso de perder, una prenda (zapatos, 
calcetines). Una vez cerrado el juego intentará vestirse de 
nuevo con dichas prendas.
© narcea, s.a. de ediciones 105
El calendario es un elemento 
imprescindible que debe estar 
siempre presente en un aula de 
Educación Infantil. Permitirá en 
todo momento dar al niño una 
visión clara del lugar, la fecha, el 
cómputo de los días, las sema-
nas, los meses y las estaciones. 
No excluye tampoco toda la sim-
bología que envuelve la meteoro-
logía, ilustrada de la forma más 
atractiva y original posible.
Para construir un calendario 
mural como el modelo, necesita-
remos estos materiales:
 Dos tableros de 7 mm de 
contrachapado de 73 cm de 
alto y 59 de ancho.
 Un rollo de alambre plastifi-
cado.
 Un bastón cilíndrico de 26 
mm de calibre y 60 cm 
aproximadamente de longi-
tud.
CÓMO CONSTRUIR UN CALENDARIO ESCOLAR
11. El Calendario escolar
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
106 © narcea, s.a. de ediciones
 Cera para muebles.
 Cola de contacto.
 Cola blanca.
 Gomaeva de varios colores.
 Cartón fallero (gris) para 
formar las plantillas.
 Velcro ashesivo.
Nos ponemos manos a la obra 
distinguiendo tres elementos fun-
damentales:
a) El soporte mural que re-
querirá los mismos materia-
les que a la hora de hacer 
los geoplanos, esto es, dos 
tableros de contrachapado 
pintados según los mismos 
pasos.
b) El etiquetado del calenda-
rio que lo forman todas las 
piezas informativas. Para 
ello contamos con un mate-
rial hasta ahora no utilizado, 
la gomaeva, de bajo coste y 
muy manejable.
c) El ensamblaje de los dos 
paneles, que hacen de nues-
tro calendario un conjunto 
original, a imagen y seme-
janza de un cuaderno o 
bloc, muy propio de un am-
biente escolar. Este tercer 
elemento será optativo ya 
que se requiere habilidad en 
su construcción, como des-
pués explicaremos.
El tablero base del calendario 
muestra el acabado de los mura-
les. Hemos optado por unas 
medidas, a nuestro juicio, ade-
cuadas: son dos paneles de 73 
de alto por 59 cm de ancho; 
abierto tendrá unas medidas to-
tales de 73 x 1,28. El grosor es 
de 7 mm.
La construcción del calendario 
no es en sí tarea difícil, requiere 
sin embargo paciencia a la hora 
de elaborar el completo etique-
tado que lo compone; se trata de 
multitud de piezas; piénsese que 
el número máximo de días de un 
mes será doble y de dos colores, 
31 etiquetas de días laborables y 
otras 31 de días festivos.
Necesitaremos para este eti-
quetado gomaeva de colores 
variados, siempre vistosos y lla-
mativos, y plantillas de cartón 
de números y letras que nos fa-
bricaremos nosotros mismos.
Comenzamos por éstas últi-
mas que obtenemos por el 
mismo procedimiento que al 
construir el abecedario de letras 
de lija y las cifras, que hemos 
visto en el capítulo primero. En 
aquel capítulo hicimos la impre-
sión en papel, ahora, tras la 
EL CALENDARIO ESCOLAR
© narcea, s.a. de ediciones 107
impresión en papel, trasladamos 
las letras y números recortados 
a un cartón consistente.
Esta es una muestra de los 
números que hemos conseguido; 
los colocaremos siempre por el 
reverso con el fin de que las 
marcas de bolígrafo en los con-
tornos permanezcan ocultas. La 
altura de estos números es de 
4 cm y la anchura de 2,5 cm.
Sobre un cartón vamos tra-
zando las letras necesarias que 
nos servirán de plantillas. Son 
las letras que necesitamos para 
etiquetar el calendario: haremos 
un doble conjunto o dos tama-
ños según se trate de títulos 
considerados de primer orden o 
de segundo.
Las alturas de estas letras son 
de 4 y 5 cm respectivamente y 
la anchura de 2,5 cm para am-
bos conjuntos. Curiosamente 
estas letras han sido formadas a 
partir de los números.
Con un poco de imaginación 
se entenderá cómo lo hemos 
logrado: la B resulta del 1 y de 
3; la C es un 0 o una O trun-
cada; la D resulta del palo del 1 
y media O; etc.
Comenzamos con la elabora-
ción de etiquetas que representan 
los días en el conjunto del mes. 
Deberemos hacer el etiquetado 
que representa los días laborables 
con la cifra azul y el fondo blanco 
cuyas medidas con de 6,5 x 
6 cm.
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
108 © narcea, s.a. de ediciones
Sobre la goma colocaremos la 
plantilla por el reverso y seguire-
mos el contorno con bolígrafo; 
cortaremos con sumo cuidado si-
guiendo bien las líneas curvas, y 
haremos un corte decidido para 
las rectas. El signo obtenido no 
presentará ningún trazo de bolí-
grafo puesto que hemos recor-
tado por su reverso.
Comprobamos, por la primera 
ilustración, los números realiza-
dos en serie una vez calculadas 
las cantidades.
En la segunda ilustración he-
mos procedido al pegado de los 
números. Hemos utilizado cola 
blanca aunque también es acon-
sejable la goma arábiga.
Hemos concluido las dos se-
ries bien diferenciadas de labora-
bles y festivos a la vez que he-
mos previstoque en el panel 
figure en vertical la semana del 
mes en que nos encontramos. 
Estos ordinales serán fijos.
Puesto que los días cambiarán 
de lugar, serán etiquetas movi-
bles, tanto para indicar la fecha 
del día como para recomponer 
de un mes para otro la disposi-
ción de los mismos.
Con velcro adhesivo solucio-
namos todo lo que responda a 
elementos movibles. En el caso 
de los días, hemos hecho una 
plantilla para que el velcro vaya 
adherido en el mismo lugar; ello 
nos permitirá disponer de forma 
correcta los días del calendario.
EL CALENDARIO ESCOLAR
© narcea, s.a. de ediciones 109
Para las etiquetas de los me-
ses hemos optado por las letras 
menores conservando las mis-
mas medidas de altura que los 
números: 6 cm para el fondo y 
4x2,5 cm para las letras. Las 
longitudes de las etiquetas van, 
lógicamente, en función de las 
letras que requiera cada mes.
La longitud de las tiras de vel-
cro es la misma para cada mes; 
lo importante en el pegado es 
centrar cada una en el reverso.
Una vez elaboradas las etique-
tas fijas de los días de la semana, 
disponemos los elementos en el 
panel trazando paralelas imper-
ceptibles que nos sirven de guía a 
la hora de pegar las etiquetas fijas 
así como las piezas de velcro para 
las movibles. De este modo logra-
mos la correcta alineación de las 
mismas.
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
110 © narcea, s.a. de ediciones
Ciñéndonos a la disposición 
de los elementos del primer pa-
nel, comenzamos a elaborar un 
titular grande en el que figuren 
las palabras “CALENDARIO ES-
COLAR” cuyas medidas son: 
6 cm para la altura del fondo 
azul y 5x2,5 cm para las letras.
Irá colocado en la parte supe-
rior del panel. Es el lugar que 
consideramos lógico, aunque tal 
vez, por razón de gustos, se 
quiera optar por una distribución 
distinta.
Así es como distribuimos los 
elementos del primer panel en el 
hemos colocado el día trasladando 
la etiqueta correspondiente.
El segundo panel lo iniciamos 
con el gran titular de “ESTACIO-
NES DEL AÑO”.
Aprovechamos éste paso para 
indicar el modo de pegado de 
las etiquetas con cola de con-
tacto, tarea algo ardua.
A pesar de las apariencias en 
la ilustración anterior tenemos 
tres etiquetas seguidas; ya que al 
utilizar el pegado con la cola de 
contacto es más sencillo hacerlo 
con piezas pequeñas que con 
una excesivamente larga.
EL CALENDARIO ESCOLAR
© narcea, s.a. de ediciones 111
La anterior ilustración recoge 
todos los elementos necesarios 
del tema; hemos optado por 
grandes letras y un motivo que 
define cada estación.
Sobre el panel hemos trazado 
los límites de las etiquetas corres-
pondientes al titular “estaciones 
del año”. Para proceder al pe-
gado de las letras extenderemos 
con una espátula la cola de con-
tacto en cada una de las superfi-
cies que vamos a pegar.
Una vez que las superficies 
estén bien secas (transcurridos 
unos cinco minutos) pasamos al 
pegado guiándonos por las lí-
neas que hemos trazado en el 
panel. En este paso hay que es-
tar seguros de la posición de 
cada etiqueta ya que una vez 
adherido no podremos corregir 
la posición.
Nos ocupamos seguidamente 
de completar el resto del panel 
de la derecha con los indicado-
res del tiempo atmosférico.
Todos estos elementos serán 
fijos. Encabezados por un titular 
en letras menores, darán cuenta 
de su significado y hará que en el 
aula se tenga una clara informa-
ción del tiempo que hace el día 
en cuestión.
Construiremos unas flechas 
que apunten a los símbolos o 
pictogramas necesarios que per-
mitan informar sobre el “tiempo 
atmosférico” de cada día.
Realizando unos trazados si-
métricos conseguimos estas fle-
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
112 © narcea, s.a. de ediciones
chas cuyo diseño obedece a una 
opción de colores, que desta-
quen sobradamente, ya que se 
trata de una señal informativa. 
El rojo sobre el blanco hace que 
aquel destaque más y, a su vez, 
al formar el elemento con doble 
capa conseguimos que sea mu-
cho más consistente.
En el reverso del centro del 
círculo colocaremos el velcro.
Así queda distribuido el panel, 
indicando que: es invierno, está 
nuboso, llueve y hace frío.
 
Pensemos ahora en qué hacer 
con los dos grandes paneles. 
Hemos intentado hacer lo que 
en un principio nos parecía im-
posible. Al tratarse de dos pane-
les habíamos pensado en varias 
posibilidades:
a) Colgarlos directamente a la 
pared, uno al lado de otro, 
como si de dos cuadros se 
tratase.
b) Llevados por la idea de que 
a los niños les encanta la 
acción de abrir y cerrar (ca-
jas, puertas…), unas bisa-
gras serían la solución.
c) Asociando los paneles a las 
tapas de un bloc, sería lo 
más acertado hacer algo así 
como un cuaderno gigante 
donde las tapas, como en 
todo bloc, van unidas por 
un muelle. Hemos optado 
por esta tercera posibilidad.
No obstante, antes de aventu-
rarse hemos creído conveniente 
hacer una prueba utilizando dos 
tableros de las mismas caracte-
rísticas aunque mucho más pe-
queños. Vamos a exponer como 
procedimos.
Colocando una tablilla encima 
de la otra hemos practicado los 
taladros a un centímetro de se-
EL CALENDARIO ESCOLAR
© narcea, s.a. de ediciones 113
paración. Una vez abiertos he-
mos procedido a avellanar los 
taladros por una cara ya que ello 
nos permitirá que la adaptación 
del muelle así como su paso sea 
óptimo. De no ser así el bloc no 
cerraría correctamente.
Mostramos en estas ilustracio-
nes los pasos que debemos dar a 
la hora de fabricar el muelle del 
bloc. Deberemos conseguir un 
rollo de alambre plastificado con-
sistente —éste es del n.º16— y 
un bastón de madera, tipo palo de 
escoba; es importante que el cali-
bre del palo supere sobradamente 
en grosor el de las dos tapas, 
máxime si pensamos que las eti-
quetas también tienen su espesor.
Este bastón en cuestión tiene 
26 mm de calibre. A continua-
ción, practicamos en él un tala-
dro con el fin de introducir el 
alambre y comenzar a enrollarlo, 
apretado y correctamente, dando 
tantas vueltas como taladros 
haya, aunque mejor si damos 
alguna de más: de este modo 
conseguiremos un muelle sobra-
damente regular y largo.
A continuación, procedemos a 
pasar el muelle como muestran 
estas imágenes. Al tratarse de un 
trabajo de grandes proporciones, 
este montaje se deberá realizar 
practicando el giro de rosca y 
abarcándolo todo lo que se 
pueda. Tendremos una adapta-
ción perfecta del mismo, no 
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
114 © narcea, s.a. de ediciones
presentando mayor dificultad, si 
se dan los pasos correctamente.
Terminamos aquí la prueba que 
nos propusimos antes de seguir 
los mismos pasos con el calenda-
rio en cuestión. Pasamos ahora a 
trabajar con el calendario real.
El primer paso consistirá en 
trazar una recta a un lado de 
una de las tapas; dicha recta nos 
permitirá alinear los taladros y 
distará 12 mm del lado de la 
tapa correspondiente al lomo. 
Inmovilizamos el metro con unas 
pinzas haciéndolo coincidir con 
la recta que hemos trazado. Este 
paso es de suma importancia 
dado que, centímetro a centíme-
tro, iremos señalando los puntos 
por donde deberemos taladrar.
Como ya dijimos, existe la op-
ción de ahorrarse estos pasos y 
colgar los dos paneles juntos; el 
entusiasmo de lograr un acabado 
original nos ha empujado a mate-
rializar esta idea. Es recomenda-
ble a continuación iniciar el tala-
dro con una marca previa hecha 
con un clavo y un pequeño golpe 
de martillo. Al igual se aconseja 
hacer los taladros, como en la 
fase de prueba, a las dos tapas a 
la vez, de tal modo que no haya 
margen alguno de error.
Hecho el muelle, deberemos 
sujetarlo por el otro extremo con 
unas pinzas metálicas, dejándolo 
unas horas con el fin de que el 
alambre quede perfectamente 
adaptado. Antes de desprenderlo 
EL CALENDARIO ESCOLAR
© narcea, s.a. de ediciones 115
del bastón, lo untaremos con 
cera para facilitar el paso por los 
agujeros.
En el paso del muelle debere-
mos, como ya señalamos,intentar 
enroscar con paciencia abarcán-
dolo al máximo conforme realiza-
mos el proceso. En sus extremos 
doblamos el alambre ligeramente 
hacia el interior para evitar que se 
desenrosque. Como se aprecia, 
hemos pegado en la tapa la eti-
queta “HOY” en letras mayúscu-
las sobre fondo circular obtenido 
de un plato como plantilla. El cie-
rre lo hemos fabricado tal y como 
se explica en el capítulo corres-
pondiente a los bastidores. 
Por último, hemos hecho en 
la tapa de la derecha dos tala-
dros, sobre el titular “estaciones 
del año”, que permitirán fijar 
esta cara a la pared.
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
116 © narcea, s.a. de ediciones
APLICACIONES DIDÁCTICAS
EL CALENDARIO ESCOLAR
Recomendado a partir de los 3 años, el calendario escolar es una 
herramienta de uso diario que se utiliza en el primer momento de la 
asamblea. A pesar de que el niño de 3 años en un principio no llega 
a comprender algún concepto de los que aparecen en el calendario, 
lo que se pretende es que, por medio de la rutina, lo vaya cono-
ciendo.
Con 4 años los niños escriben la fecha incompleta (día numérico, 
mes y año) y con 5 años escriben el lugar, la fecha del día, el número 
y el día de la semana, el mes y el año. Dependiendo de la evolución 
que se observe en el grupo, se avanzará en todos los contenidos que 
conlleva la descripción de la semana.
La fundamentación de trabajar las rutinas en el aula da al niño 
seguridad, ya que el concepto del tiempo al principio es algo viven-
cial y no cronológico.
Son muchos los conceptos a interiorizar por parte del niño: el día 
de la semana, el lugar que éste ocupa, el ordinal de la semana, el 
mes del año y la estación a que corresponde. Por otro lado, tenemos 
el tiempo atmosférico y la temperatura.
Objetivos
✓ Colocar el día en el lugar apropiado del calendario.
✓ Conocer los días de la semana y los meses del año.
✓ Conocer las estaciones del año y asociarlas a un tipo de clima.
✓ Contar las semanas de un mes.
✓ Reconocer los pictogramas alusivos al tiempo atmosférico (3 
años).
✓ Reconocer el tiempo atmosférico del día y el del día anterior (4 
años).
✓ Asociar el frío con el color azul y el calor con el rojo.
EL CALENDARIO ESCOLAR
© narcea, s.a. de ediciones 117
Contenidos
– El lugar y el día.
– Las semanas y los días de un mes.
– Los días de la semana, los meses del año y las estaciones.
– El tiempo atmosférico del día y el del día anterior.
– El color y la temperatura a la que se asocia.
– Las estaciones del año y sus características.
Actividades
Las actividades que proponemos a propósito del Calendario se reali-
zan con los números del calendario, con los pictogramas sobre el 
tiempo y con las estaciones del año.
Los números del calendario se pueden trabajar de diversas formas.
Con niños de 3 años, el maestro habituará al niño a verbalizar 
el lugar y el día: será él quien durante algún tiempo haga sólo 
estas menciones. Posteriormente algún niño se encargará de 
realizarlo. Iremos quitando el número del día para trasladarlo a 
la fecha y colocaremos el número del día anterior en el lugar 
adecuado.
Para niños de 4 años la actividad varía en cuanto que el nú-
mero de la fecha del día anterior se ha ido quitando igual que el 
propio día. El niño observa así que quedan menos días para que 
acabe el mes.
Para niños de 5 años se seguirá el mismo proceso con la dife-
rencia de que, estando en el último día del mes, tendremos que 
preparar el calendario para el día siguiente, haciendo así un 
juego de bingo: se reparten los números del mes a los niños y 
se les pregunta: “¿quién tiene el 1?…, el 12?…, el 21?”. Los 
que lo posean lo colocarán de forma consecutiva sin hacer nin-
guna corrección. Una vez colocados se leerán entre todos y 
verán que no es lo mismo el 12 que el 21 o el 13 que el 31. 
Trabajamos aquí la progresión de la semana, sus ordinales, los 
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
118 © narcea, s.a. de ediciones
números consecutivos así como el concepto de “primero”, “se-
gundo” en la colocación del propio número.
Los pictogramas sobre el tiempo atmosférico también deberán 
ser trabajados según la edad.
Para niños de 3 años se posicionarán las flechas, y nos confor-
maremos con que mencionen el sustantivo (sol, nubes, lluvia, 
viento, nieve…). Respecto a la temperatura haremos una simili-
tud de frío/calor con los pictogramas que correspondan, relacio-
nándolo con la sensación térmica de su cuerpo. Para que este 
hecho tenga un carácter más vivencial, trasladaremos la idea de 
asociación del color azul con el frío y el rojo con el calor, ha-
ciendo una similitud con los colores que figuran en los grifos del 
lavabo.
Para niños de 4 años la variable será la de cambiar el sustantivo 
por el adjetivo (lluvioso, soleado…)
Los niños de 5 años harán una verbalización completa a través 
de un enunciado: “Hoy hace buen tiempo,… o hace frío… Hoy 
llueve”. A mediados de curso, avanzada la lectoescritura de las 
etiquetas referidas al tiempo, tendrán que elegir la adecuada 
para colocarla donde corresponda. Deberán ser capaces a su vez 
de verbalizar en pasado el tiempo del día anterior.
Cuando se trate de las estaciones del año verbalizaremos las ca-
racterísticas de cada una de ellas:
Para niños de 3 años estas características se limitarán a la ob-
servación del entorno: “qué pasa en primavera, en otoño…”.
Para niños de 4 años potenciaremos el aumento de las carac-
terísticas con acontecimientos significativos para ellos.
Con los niños de 5 años señalaríamos ya los meses del año que 
corresponden a cada estación.
© narcea, s.a. de ediciones 119
 
12. El LEOLEO
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
120 © narcea, s.a. de ediciones
Finalizamos este libro con un 
juego ideado por nosotros, los 
autores, que tiene como objetivo 
el aprendizaje de la lectoescri-
tura. Para ello necesiraremos los 
siguientes materiales:
 4 botes cilíndricos de 12 cm 
de altura y 10 cm de diáme-
tro con sus tapas de plás-
tico.
 Ocho ollaos.
 Vinilo de colores suficiente 
para forrarlos.
 Velcro adhesivo.
 Cuatro pivotes de madera 
del calibre del orificio de los 
ollaos de unos 16 cm.
 Un perchero simple o listón 
grueso como base para los 
pivotes-eje.
 Cuatro bolas-abalorios gran-
des (opcional).
 Una caja de madera con 
tapa corrediza de base para 
el conjunto.
 Dos tornillos con tuerca-pa-
lomilla.
 Tantas cartulinas como ilus-
tración deseemos dibujar 
(10,5x7,5 cm).
 Fundas para plastificar.
Distinguimos en este proceso 
tres fases:
En la primera fase explicamos 
los pasos para fabricar el soporte 
material.
En la segunda, mostramos los 
criterios y diseños de pictogra-
mas o dibujos.
Por último, en la tercera fase, 
ofrecemos las distintas posibili-
dades del juego a través del cual 
el niño deberá construir enuncia-
dos con sentido pleno.
Conseguiremos una caja de 
madera de las empleadas para la 
custodia de vinos o cavas. Es im-
portante que sus dimensiones su-
peren en longitud la totalidad de 
los botes que usaremos (diremos 
cuáles) teniendo a la vez en cuenta 
una distancia entre los mismos de 
CÓMO CONSTRUIR UN “LEOLEO”
EL LEOLEO
© narcea, s.a. de ediciones 121
2 cm. La caja que hemos conse-
guido mide 47 cm de largo, 18 cm 
de ancho y 16 cm de alto.
Ocultando la cara frontal, por 
razones publicitarias, comproba-
mos que esta caja cumple con 
nuestro objetivo. A su vez la tapa 
es deslizante. La caja tiene como 
finalidad albergar todos los ele-
mentos del juego.
Sobre la tapa seleccionamos el 
resto de los elementos necesarios 
como veremos a continuación.
Hemos conseguido también 
un perchero de madera de 
44,5 cm de largo y 12 cm de 
distancia entre los centros de los 
pivotes. Así presentado se adapta 
a las dimensiones de la caja.
Preparamos 4 bastones cilín-
dricos que pegaremos a unas 
bolas (no son más que tiradores 
comunes) que nos facilitarán el 
montaje de los botes como vere-
mos después. Estas bolas han 
sido previamente taladradasde 
tal modo que permitan el paso 
de los bastones.
Pegamos con cola blanca cada 
bastón a su bola.
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
122 © narcea, s.a. de ediciones
Reunimos cuatro botes de cho-
colate soluble aunque necesitare-
mos ocho tapas de plásticos de 
las usadas para su conservación.
Las dimensiones de estos bo-
tes son de 12 cm de alto y 10 
de diámetro.
Un paso simple como es el de 
usar un abrelatas nos facilita el 
camino para el paso siguiente.
Estas tapas que vamos a usar 
presentan un pequeño punto en 
su centro que nos sirve de referen-
cia para practicar un taladro del 
calibre de los ollaos que debemos 
instalar (del mismo modo que hici-
mos en el capítulo nueve, cuando 
constuimos los bastidores).
Tenemos ya colocados los 
ollaos en el centro justo de cada 
tapa o base del bote.
Este es el objetivo de los pa-
sos dados: los bastones prepara-
dos con sus pivotes no son más 
que los ejes para cada bote. En 
el juego, como se puede sospe-
char, estos botes son giratorios.
Con vinilo adhesivo forramos 
cada bote utilizando los colores 
de costumbre.
EL LEOLEO
© narcea, s.a. de ediciones 123
Este es el resultado final de los 
botes forrados con sus respecti-
vas bases de plástico y sus pasos 
de eje.
En esta ilustración comproba-
mos que los botes se presentan 
con sus bastones pasados con 
una parte sobresaliente que será 
la que se instalará en los pivotes 
del perchero.
Vamos pues a practicar los 
taladros que permitan la coloca-
ción de estos elementos.
Para que los bastones se insta-
len de forma vertical con rela-
ción al perchero, es necesario 
practicar en las perchas unos 
taladros utilizando la columna de 
taladro.
Para que las piezas de este 
juego sean desmontables es pre-
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
124 © narcea, s.a. de ediciones
ciso lograr sistemas sencillos de 
ensamblaje. En la unión de los 
bastones a las perchas comproba-
remos que de forma manual los 
bastones pasan por los taladros 
de las perchas haciendo una li-
gera presión.
Explicaremos ahora la forma 
de ensamblar el perchero a la 
tapa de la caja de madera.
Centrando la pieza en la tapa, 
taladramos las dos piezas al mismo 
tiempo, teniendo bien sujetas am-
bas piezas durante el proceso.
A continuación pasamos unas 
palomillas que permiten montar y 
desmontar el conjunto.
Con estas ilustraciones compro-
bamos que lo más elaborado del 
proceso ya se ha conseguido.
Las ilustraciones que siguen 
completan la idea de lo que de-
seamos lograr.
EL LEOLEO
© narcea, s.a. de ediciones 125
El mecanismo instalado en la 
tapa se acopla a la caja no sin 
antes practicar en la cara lateral 
que mostramos una pequeña 
muesca para impedir que la ca-
beza del tornillo de la palomilla se 
atasque en dicha cara.
Hemos limpiado con lija las 
letras impresas que delataban el 
origen del producto.
Imitando el tipo de letra enla-
zada que veíamos en el primer 
capítulo de este libro, realizamos 
en gran tamaño las plantillas de 
las tres letras que necesitamos, 
sobre cartón grueso.
La unión de estas dos letras se 
encuentra en el punto medio de 
la cara frontal de la caja que de-
seamos ilustrar.
Habiendo trazado una recta 
en la base como guía, marcare-
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
126 © narcea, s.a. de ediciones
mos las letras restantes que com-
pletan el nombre que le damos 
al juego.
Siguiendo cuidadosamente por 
las líneas trazadas colorearemos 
el nombre de nuestro juego. Esta 
operación la realizaremos por 
ambas caras frontales.
En este conjunto se ilustra la 
instalación de una bolita de plás-
tico accesoria que permite im-
pulsar el bote para el giro. La 
bolita (es un pequeño tirador) 
lleva un tornillo que la fija, en 
este caso, a la tapadera en el 
punto más alejado del centro.
EL LEOLEO
© narcea, s.a. de ediciones 127
Este sería el montaje final al 
que hemos añadido dos tiras de 
velcro adhesivo que permitan la 
fijación de los pictogramas, y 
unos puntos de los mismos colo-
res que los botes para que siem-
pre ocupen el mismo lugar (espe-
cialmente el rojo que corresponde 
a los pictogramas relativos a ac-
ciones o verbos).
Podemos ver desde arriba la 
caja y los pasos para guardar 
todos los elementos integrantes 
del juego.
Como complemento hemos 
aprovechado un trozo de correa 
de cuero para formar un asa 
sujeta con dos simples tornillos 
de cabeza redonda.
Hasta aquí, la primera fase en 
la construcción del juego LEO-
LEO.
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
128 © narcea, s.a. de ediciones
Pictogramas y dibujos
La segunda parte de este capí-
tulo la dedicamos a los pictogra-
mas y dibujos.
Es preciso para su elaboración 
idear un dibujo que represente la 
palabra a que hace referencia 
cada pictograma.
Tendremos que evitar todo 
elemento superfluo que pudiera 
entorpecer el ejercicio mental de 
identificación de un pictograma o 
dibujo en cuestión.
Formalmente nos encontra-
mos con que cada bote puede 
portar cuatro ilustraciones de tal 
modo que cubran toda la super-
ficie del cilindro. Para ello, corta-
remos piezas de cartulina tal y 
como se aprecia en las siguientes 
fotografías.
Envolvemos el cilindro con la 
tira de cartulina coincidiendo en 
ancho con la altura del bote, des-
contando el grosor de las tapas. 
Dividimos la longitud obtenida 
por cuatro y obtenemos piezas 
rectangulares de 7,5x10,5 cm.
Una vez dibujadas las ilustra-
ciones las plastificamos, colo-
cando cuatro piezas de velcro 
que las fijan al cilindro.
Aquí presentamos ocho ilus-
traciones por su reverso, listas 
para ser utilizadas.
EL LEOLEO
© narcea, s.a. de ediciones 129
Como de lo que se trata es de 
que el niño sea capaz de cons-
truir enunciados, lo primero que 
deberemos elaborar son pictogra-
mas o dibujos que representen 
acciones; a partir de ahí elabora-
remos toda una serie de nuevas 
ilustraciones que estén vinculadas 
a estas acciones con el fin de fa-
cilitar las tareas en este ejercicio.
Es obvio que se podrían hacer 
tantas ilustraciones como voca-
blos de una lengua, agrupadas 
según campos semánticos o áreas 
de vocabulario. Así tendríamos 
como temas posibles: el cuerpo, 
la casa, la escuela, los deportes y 
muchos otros según el campo 
que deseemos desarrollar.
Veamos algunos ejemplos en 
estas ilustraciones:
Las primeras ilustraciones tie-
nen un denominador común, y es 
que están señaladas con un punto 
rojo correspondientes los ejem-
plos de pictogramas o dibujos re-
lativos a acciones: oír, comer, leer, 
escribir, lavarse-ducharse, llover, 
oler, ver, llorar, cantar, jugar, dor-
mir, salir, no gustar, ir, volver, pin-
tar, etc. 
Seguidamente se impone la 
creación de otras que representen 
los elementos relativos al resto del 
enunciado: no podremos dibujar 
al azar sino más bien vincularlas 
semánticamente a los pictogramas 
que representan acciones.
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
130 © narcea, s.a. de ediciones
Sin entrar en las posibilidades 
de relación de estas series con las 
acciones a las que se vinculan, se 
aprecia en todos los casos que 
cada ilustración debe apuntar a la 
palabra clave, evitando en su ela-
boración, como ya hemos seña-
lado, elementos superfluos que 
puedan prestarse a confusión.
Todos los ejemplos que expo-
nemos están pensados en rela-
ción a las acciones de que dispo-
nemos.
Cada fotografía representa 
dos mensajes fácilmente desci-
frables. Serían:
≤ “Dibujo un gallo y un circo 
con colores”.
≤ “No me gusta jugar al par-
chís”.
≤ “El payaso trabaja en el 
circo”.
≤ “Mi abuelo va al campo”.
≤ “A la gente le gusta ir al 
teatro y al cine”.
≤ “Llamo a la puerta de 
casa”.
EL LEOLEO
© narcea, s.a. de ediciones 131
≤ “Mi abuela barre la cocina 
a las tres”.
≤ “El bebé come helados en 
verano”.
≤ “No me gusta escribir car-
tas en la playa”.
≤ “Viajamos en avión, en 
coche o en tren”.
Una vez instalados los picto-
gramas y dibujos en los cilindros, 
entraremos en lo que sería el 
mecanismo del juego.Situamos los del punto rojo en 
el cilindro rojo; el resto los colo-
caremos en los demás cilindros. 
Hacemos rodar los cilindros y, 
una vez parados, los alumnos 
deberán dar con el enunciado, 
que puede resultar de dos tipos: 
uno correcto gramatical y con-
ceptualmente, otro correcto 
desde el punto de vista gramati-
cal aunque no conceptual, es 
decir, un enunciado absurdo.
Mostramos los ejemplos si-
guientes y otros que pudieran 
resultar del azar tras girar los ci-
lindros.
La lectura de la primera foto-
grafía podría ser: “Las frutas di-
bujan un avión y un camino de 
árboles”; sería un enunciado gra-
maticalmente correcto aunque 
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
132 © narcea, s.a. de ediciones
absurdo. También se prestaría a 
la idea de: “Cuando voy en el 
avión dibujo frutas y un camino 
de árboles”.
La segunda es más coherente: 
“Al niño no le gusta el campo ni 
los helados”.
La tercera tendría sentido 
hasta el tercer elemento: “El pa-
yaso viaja a la montaña…”.
Faltaría resolver el picto-
grama relativo al juego del ping-
pong. 
Se podría deshacer el en-
tuerto con la frase: “El payaso 
viaja a la montaña para jugar al 
ping-pong”. 
La proposición sería válida 
teniendo en cuenta el verbo 
“jugar” evocado por el picto-
grama relativo al “ping-pong”.
EL LEOLEO
© narcea, s.a. de ediciones 133
APLICACIONES DIDÁCTICAS 
EL LEOLEO
Este juego del “LEOLEO” ha sido pensado en torno a dos objeti-
vos fundamentales: motivar y crear interés en el alumno por la 
lectura de imágenes de modo no instructivo. A su vez, nos dará pie 
a trabajar los cuatro pilares sobre los que se asienta la lectoescri-
tura:
– Discriminación auditiva.
– Discriminación visual.
– Articulación fonética.
– Reproducción gráfica.
Debemos, no obstante, hacer algunas puntualizaciones previas 
acerca de la adquisición del lenguaje en los niños, en el marco de la 
expresión y de la comprensión:
a) Cuando el niño comienza a hablar, es mayor la competencia 
comprensiva que la expresiva.
 Ello es motivado por dos circunstancias: para poder hablar es 
necesario primero poder comprender y hablar significa saber 
situar los puntos de articulación en su lugar exacto. Este último 
requisito no se alcanza plenamente hasta edades más tardías, y 
hasta los 6 años el niño adquiere paulatinamente el código oral 
empleado por los adultos que le rodean. El niño no es cons-
ciente de cada uno de los puntos de articulación que intervienen 
cuando habla. Es un aprendizaje por ensayo-error en el que in-
terviene una gran dosis de discriminación auditiva.
b) Los adultos actuamos de modelo para el niño.
 Muchos de los estudios sobre el fracaso escolar lo atribuyen a este 
hecho. El código usado por las familias de un nivel culturalmente 
bajo es pobre o limitado, utilizan una misma palabra para designar 
distintas cosas, es decir, usan la lengua exenta de matizaciones. 
Según J. A. Marina “todos tenemos la impresión de que sabemos 
algo más sobre una cosa cuando sabemos su nombre”. Al ser el 
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
134 © narcea, s.a. de ediciones
código de la escuela más elevado, el niño tiene dificultades en 
comprenderlo, lo que origina una automarginación en la dinámica 
escolar.
c) Debemos hablar al niño correctamente si queremos que el 
niño se exprese de forma adecuada. Debemos evitar la costum-
bre de hablar al niño de modo infantilizado, lo que le invita a no 
vocalizar bien, porque el modelo que se le ofrece no es el ade-
cuado.
La finalidad de este juego es amplia, abarcando, en los planos mor-
fosintáctico, léxico y metalingüístico, desde la lectura de imágenes in-
dividuales hasta la construcción de frases (con sentido o absurdas), 
llegando así a cubrir todo el segundo ciclo de Educación Infantil.
En el momento del juego deberemos ser escrupulosos a la hora de 
colocar las imágenes. Es preciso situarlas en el mismo sentido que si 
estructurásemos frases escritas (de izquierda a derecha).
En las primeras fases del juego (3 años) utilizaremos sujeto y verbo. 
En su segunda fase (4 años) sujeto, verbos y complementos. En su 
fase final (5 años y primer ciclo de Primaria), combinaríamos pala-
bras con imágenes; podremos en esta fase cambiar el orden que 
muchas veces dará como resultado frases que nos llevan al absurdo.
El juego se presta a múltiples dinámicas; nosotros, como creadores 
del mismo, proponemos la que nos parece más adecuada, consistente 
en tres momentos bien definidos:
1. Presentar.
2. Definir.
3. Enunciar.
1. Presentar
Cualquiera que sea el número de elementos que usemos, según la edad, 
y una vez colocados los dibujos o pictogramas en los cilindros, presen-
taremos en primer lugar cada uno de ellos, nombrándolos y hablando 
sobre los mismos, expresando las cualidades de los objetos y acciones 
que se presentan en los dibujos. De este modo conseguimos el recono-
EL LEOLEO
© narcea, s.a. de ediciones 135
cimiento así como el desarrollo verbal gracias al coloquio que se esta-
blece en este primer momento de presentación.
2. Definir
El paso siguiente, definir, supondría ampliar la primera fase de tal 
modo que estaríamos en presencia de un árbol de ideas o mapa 
conceptual según el cual aludiríamos al léxico relacionado con cada 
dibujo o pictograma (por ejemplo: “árbol” se asocia a “rama, raíz, 
hojas, frutos, primavera, bosque...”; un verbo como “comer” genera 
a su vez otros como “desayunar, cenar, merendar, probar...”). Queda 
pues, en estos dos primeros pasos, un léxico fijado y siempre enri-
quecido en aras del desarrollo del lenguaje a estos niveles.
Podemos, si lo deseamos, iniciar aquí el juego (nunca competitivo) 
con una revisión de lo dicho hasta este punto.
Antes de pasar a la tercera fase, haremos girar los cilindros hasta 
que se detengan.
3. Enunciar
Esta tercera fase presentará un carácter relacional en la medida en 
que hay que conseguir generar enunciados posibles con los elemen-
tos disponibles (dos, tres o el total de cuatro).
La importancia de esta última fase consiste en lograr construir 
enunciados y debatir sobre su corrección. El desarrollo morfosintác-
tico radicará en la realización de actividades tales como juegos de 
concordancia de género y número y juegos de concatenación lógica 
de la oración, tanto en su estructura como en su contenido.
Con este tipo de prácticas constataremos que el niño que domina 
la producción y expresión oral es también un gran candidato para un 
buen aprendizaje lecto-escritor.
Objetivos
A lo largo de la etapa de la Educación Infantil, nos interesa que a 
través de este juego, u otros de perfil semejante, el niño:
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
136 © narcea, s.a. de ediciones
En el plano auditivo, reconozca los sonidos, identifique las vo-
ces y discrimine sonidos fuertes y débiles.
En el plano fonético y a través de ejercicios de vocalización, 
haga un uso correcto de los órganos fonadores que le permitan 
mostrar fluidez en la emisión de sonidos, de acuerdo con los 
puntos de articulación de cada uno.
En el plano de la expresión oral se ejercite para el logro de los 
siguientes objetivos:
– Nombrar los objetos así como sus características y cualida-
des.
– Designar palabras referidas a cualidades.
– Designar los términos que respondan a acciones.
– Identificar los golpes de voz de las palabras.
– Reconocer la sílaba tónica y átona de las palabras.
– Utilizar correctamente el género y el número de los nombres 
y, en fases posteriores, los diminutivos y aumentativos.
– Expresar y estructurar frases correctamente.
– Narrar una historia breve a través de las anécdotas que pue-
dan surgir o evocar situaciones vividas.
En el plano de la expresión escrita, adquiera en el último 
curso, el trazado de las grafías. A partir de aquí, será capaz de 
escribir palabras con sentido, asociar significantes y significados, 
mostrar interés por la lectura y reconocer finalmente diferentes 
tipos de textos.
© narcea, s.a. de ediciones 137
Reflexiones finalesLa selección de los Materiales Didácticos para Educación Infantil 
expuestos en este libro no responden a una elección al azar: hemos 
pensado fundamentalmente en unas herramientas o soportes que 
dieran, en buena medida, respuesta a los principios metodológicos 
que rigen en esta etapa educativa, que corresponde a los 6 primeros 
años de vida del niño y, especialmente, en la etapa comprendida en 
el segundo ciclo de educación infantil (3-6 años).
Éstos recursos didácticos responden a una perspectiva globaliza-
dora, dado el carácter sincrético del pensamiento del niño. Además, 
a la vez que globalizadora, es significativa porque la clave del éxito 
en el aprendizaje radica en transformar y ampliar sus conocimientos 
previos y posibilitar que el niño haga transferencias. Esta transferen-
cia será la demostración de que los nuevos aprendizajes han sido 
incorporados en las estructuras que ya poseía el niño y los utiliza de 
manera funcional, de tal modo que su interés y motivación por lo 
nuevo estén asegurados.
Estos materiales o recursos didácticos se utilizan en actividades 
concretas de tipo experiencias y juegos. Las experiencias las enten-
demos como algo vivencial, manipulativo, que hace que el niño inte-
riorice el aprendizaje o los contenidos que, como maestros, propon-
gamos; las regletas, el ábaco, los geoplanos etc., son claros ejemplos 
de recursos que propician este tipo de experiencias.
MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL
138 © narcea, s.a. de ediciones
Respecto al juego, hemos expuesto un caso claro: el juego LEO-
LEO, aunque también los otros materiales se prestan a su uso como 
juegos; ahí radica la destreza del maestro: podemos jugar en el geo-
plano a hacer, con gomas, cenefas de preescritura o laberintos y 
dejar rodar una canica para que siga el recorrido prefijado o trans-
formar un círculo en un óvalo haciendo magia.
En efecto, al igual que las experiencias, el juego adquiere especial 
relevancia en esta etapa porque permite al niño desarrollar estructu-
ras cognitivas y potenciar sus relaciones sociales, fortaleciendo así su 
autoestima a medida que comprueba cómo alcanza las cotas que el 
maestro le propone. El juego es, en definiva, el método más idóneo 
para que niño se interese por la actividad. Esta, disfrazada de la pa-
labra “juego”, alienta su ánimo y permite, al ser un juego, rectificar 
los errores cometidos.
Los materiales didácticos expuestos en este libro los interpretamos 
como mediadores para desarrollar dos competencias fundamentales: 
la lógica matemática y el lenguaje. Respecto a la lógica matemática, 
por ejemplo, si un niño al pasar a primero de primaria no ha apren-
dido los conocimientos que bañan toda la lógica matemática, no sa-
brá colocar los sumandos en una suma (a falta de no haber viven-
ciado, experimentado, los conceptos arriba-abajo), no podrá resolver 
problemas de la vida cotidiana, cálculo matemático, etc.
Igual sucede con el lenguaje: si las experiencias no son verbaliza-
das, queda restringido el repertorio estructural y léxico del niño, de 
tal modo que ni se podrá expresar adecuadamente ni podrá com-
prender lo que se le dice, ni lo que lee.
© narcea, s.a. de ediciones 139
Bibliografía
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Tavernier, R. (1987). La Escuela antes de los 6 años. Madrid: Mar-
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Trueba, B. (1999, 2.º ed.). Talleres integrales en educación infan-
til. Madrid: Ediciones de la Torre.
TÍTULOS PUBLICADOS:
AGÜERA, I.: «Teatrillos». Con niños y niñas de Educación Infantil y Primaria.
— Más «Teatrillos». Con niños y niñas de 3, 4 y 5 años.
— Diálogos con mi nieto. Los «mayores» en la educación de los «pequeños».
— Chiquitines. Jugar y aprender hasta los 3 años.
ALPI, L. y otros: Adaptación a la escuela infantil.
AMIEL-TISON, C. y GOSSELIN, J.: Desarrollo neurológico de 0 a 6 años.
ANCÍN, M.ª T.: Cuerpo, espacio, lenguaje. Guías de trabajo.
BALABAN, N.: Niños apegados, niños independientes. Orientaciones para la escuela 
y la familia.
BARNES, B. A. y YORK, S. M.: El sentido común en la educación de los más peque-
ños.
BARROS DE OLIVEIRA, V.: Evaluación psicopedagógica de 0 a 6 años. Observar, anali-
zar e interpretar el comportamiento infantil.
BECKER, J. y otros: Un currículo abierto, flexible, creativo y divertido, para 3-6 años.
BIGUET, M. N.: Descubrir las cosas por el tacto. Para niñas y niños de 2 y 3 años.
BORNANCIN, B. y M. y MOULARY, D.: Conocer el propio cuerpo. Actividades científicas 
y pedagógicas.
BORRETTI, M. J. y COLLET, G.: ¡Qué rico está el pan! 16 Unidades didácticas sobre el 
pan, para Educación Infantil.
BOULE, F.: Manipular, organizar, representar. Iniciación a las Matemáticas.
BOURCIER, S.: La agresividad en niños de 0 a 6 años. ¿Energía vital o desórdenes de 
comportamiento?
BROWN, S. E.: Experimentos de Ciencias en Educación Infantil.
BRUEL, A. y otros: Juegos motores con niñas y niños de 2 y 3 años.
DUCHESNE, J. y JAUBERT, J. N.: La percepción del olor en Educación Infantil.
DUTILLEUL, B., GILABERT, H. y SAUSSOIS, N.: Los niños de 4 a 6 años en la escuela 
infantil.
FELDMAN, J. R.: Autoestima. ¿Cómo desarrollarla? Juegos, actividades, recursos, 
experiencias creativas…
FERLAND, F.: ¿Jugamos? El juego con niñas y niños de 0-6 años.
— Cuéntame un cuento. ¿Por qué? ¿Cómo? ¿Cuándo? ¿Qué historia?
FRANCO, T.: Vida afectiva y educación infantil.
GERVILLA, A.: El currículo de Educación Infantil. Aspectos básicos.
GUIBERT, A., LEBEAUME, L. y MOUSSET, R.: Actividades geométricas para Educación 
Infantil y Primaria.
HEINSEN, M.: Autoestima y tacto pedagógico en edad temprana. Orientaciones para 
educadores y familias.
HERNÁNDEZ, M.ª C.: Educación sexual para niños y niñas de 0 a 6 años.
JULIEN, G.: La comunicación niños-adultos. Cómo ayudarles a expresar y cómo 
aprender a escuchar.
KOHL, M. A.: Arte Infantil. Actividades de Expresión Plástica para 3-6 años.
LAHORA, M.ª C.: Actividades matemáticas con niñas y niños de 0 a 6 años.
COLECCIÓN «PRIMEROS AÑOS»
— La escolarización antes de los 3 años. Organización del aula y diez Unidades 
Didácticas.
LAPORTE, D.: Autoimagen, autoestima y socialización. Guía práctica con niños de 
0 a 6 años.
LEHMANN, E.: Canta, toca, brinca, danza. Sugerencias para la educación musical de 
los pequeños.
— Una canción para cada nombre.
LURÇAT, L.: El niño y sus compañeros. Percepción y comportamiento en el ámbito 
escolar.
LLOPIS, C. (Coord.): Los derechos humanos en Educación Infantil. Cuentos, juegos 
y otras actividades.
MÉNDEZ, L.; MORENO, R. y RIPA, C.: Adaptaciones curriculares en Educación Infantil.
MIR, V. y otros: Juegos de fantasía en los parques infantiles.
— Evaluación y postevaluación en Educación Infantil.
MIRALLES, D. y HERNÁNDEZ, S.: El arte de la Educación Infantil. Educar desde el amor 
y el respeto.
OLLILA, Ll.: ¿Enseñar a leer en Preescolar?
PULLAN, K. y DURANT, L.: Cómo trabajar con niños y familias afectados por las drogas.
PUGMIRE-STOY, M. C.: El juego espontáneo. Vehículo de aprendizaje y comunicación.
RACINE, B.: Disciplinaen la infancia. ¿Por qué? ¿Cómo? Famila y escuela trabajando 
juntas.
RENOULT, N. y B. y VIALARET, C.: Dramatización infantil. Expresarse a través del teatro.
RODRÍGUEZ, M. y DE LA ROSA, M.: Talín, Tolón, se abre el telón… Maestras “teatreras” 
en la Escuela Infantil.
ROFFEY, S. y O’REIRDAN, T.: El comportamiento de los más pequeños. Necesidades, 
perspectivas y estrategias en Educación Infantil.
RUEDA, R.: La Biblioteca de aula infantil. El cuento y la poesía.
SALIDO, E. y M.: Materiales didácticos para Educación Infantil. Cómo construirlos y 
cómo trabajar con ellos en el aula.
SANTOS, M. y GONSALES, J.: Talleres pedagógicos. Arte y magia de las manualidades 
infantiles.
SANUY, C.: Cascabelea. Actividades de expresión oral, corporal, musical y plástica.
SCHILLER, M. P. y ROSSANO, J.: 500 actividades para el currículo de Educación In-
fantil.
SHERIDAN, M. D.: Desde el nacimiento hasta los 5 años. Proceso evolutivo, desarro-
llo y progresos infantiles.
SMITH, J. L.: Desarrollo de las destrezas motoras. Juegos de psicomotricidad de 18 
meses a 5 años.
THWAITES, A.: Conocimiento del entorno. 100 ideas para descubrir, comprender, 
experimentar, interaccionar y comunicarse con el mundo.
Tourtet, L.: Lenguaje y pensamiento preescolar.
TWOMBLY, E. y FINK, G.: Edades & Etapas. Actividades de aprendizaje para 0-5 años.
VIALA, J. P. y DESPLATS, P.: El rincón de audición para el aprendizaje de la lengua.
ZABALZA, M. A.: Didáctica de la Educación Infantil.
	MATERIALES DIDÁCTICOS PARA EDUCACIÓN INFANTIL (...)
	PÁGINA LEGAL
	ÍNDICE
	PRESENTACIÓN
	CONSIDERACIONES METODOLÓGICAS GENERALES
	1. LAS LETRAS Y LOS NÚMEROS
	CÓMO CONSTRUIR LETRAS MINÚSCULAS
	CÓMO CONSTRUIR LETRAS MAYÚSCULAS
	CÓMO CONSTRUIR LOS NÚMEROS
	APLICACIONES DIDÁCTICAS
	OBJETIVOS
	CONTENIDOS
	ACTIVIDADES
	2. EL ÁBACO DESMONTABLE
	CÓMO CONSTRUIR UN ÁBACO DESMONTABLE
	APLICACIONES DIDÁCTICAS
	OBJETIVOS
	CONTENIDOS
	ACTIVIDADES
	3. EL DOMINÓ
	CÓMO CONSTRUIR UN DOMINÓ
	APLICACIONES DIDÁCTICAS
	OBJETIVOS
	CONTENIDOS
	ACTIVIDADES Y JUEGOS
	4. LAS REGLETAS
	CÓMO CONSTRUIR REGLETAS SEGMENTADAS
	CÓMO CONSTRUIR REGLETAS COMUNES
	APLICACIONES DIDÁCTICAS
	OBJETIVOS
	CONTENIDOS
	ACTIVIDADES Y JUEGOS
	5. LOS BLOQUES LÓGICOS
	CÓMO CONSTRUIR BLOQUES LÓGICOS
	REALIZACIÓN DE BLOQUES LÓGICOS CON GOMAESPUMA (...)
	CONSTRUCCIÓN DE BLOQUES LÓGICOS CON CARTÓN
	ELABORACIÓN DE BLOQUES LÓGICOS CON PASTA (...)
	APLICACIONES DIDÁCTICAS
	OBJETIVOS
	CONTENIDOS
	ACTIVIDADES Y JUEGOS
	6. GEOPLANOS I
	CÓMO CONSTRUIR UN GEOPLANO CUADRADO
	APLICACIONES DIDÁCTICAS
	OBJETIVOS
	CONTENIDOS
	ACTIVIDADES
	7. GEOPLANOS II
	CÓMO CONSTRUIR UN GEOPLANO CIRCULAR
	APLICACIONES DIDÁCTICAS
	OBJETIVOS
	CONTENIDOS
	ACTIVIDADES
	8. EL LÁPIZ MÁGICO
	CÓMO CONSTRUIR UN LÁPIZ MÁGICO
	APLICACIONES DIDÁCTICAS
	OBJETIVOS
	CONTENIDOS
	ACTIVIDADES Y JUEGOS
	9. ENSARTABLES
	CÓMO CONSTRUIR ENSARTABLES: CON GOMAESPUMA (...)
	ENSARTABLES DE MADERA
	CUBOS
	CILINDROS
	CÍRCULOS
	APLICACIONES DIDÁCTICAS
	OBJETIVOS
	CONTENIDOS
	ACTIVIDADES
	10. BASTIDORES
	CÓMO CONSTRUIR BASTIDORES
	APLICACIONES DIDÁCTICAS
	OBJETIVOS
	CONTENIDOS
	ACTIVIDADES Y JUEGOS
	11. EL CALENDARIO ESCOLAR
	CÓMO CONSTRUIR UN CALENDARIO ESCOLAR
	APLICACIONES DIDÁCTICAS
	OBJETIVOS
	CONTENIDOS
	ACTIVIDADES
	12. EL LEOLEO
	CÓMO CONSTRUIR UN “LEOLEO”
	APLICACIONES DIDÁCTICAS
	OBJETIVOS
	REFLEXIONES FINALES
	BIBLIOGRAFÍA
	SOBRE EL LIBRO