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Caso Roman C

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CASO CLÍNICO TÉCNICA DE APRENDIZAJE BASADO EN PROBLEMAS
EL PROCESO DE ATENCION MÉDICA DESDE UNA NARRATIVA
TÉCNICA DE APRENDIZAJE BASADO EN PROBLEMAS
CASO CLÍNICO
 El caso clínico que se relata a continuación tiene como objetivo una mejor comprensión de los contenidos de la Guía de Trabajos Prácticos. Forma parte de una estrategia pedagógica que permite a través de una narrativa, construir conocimiento Implementando la Técnica de Aprendizaje Basado en Problemas -ABP - hacia la formación de competencias técnicas y humanísticas. 
Además construir conocimiento teórico-práctico, fortalece el aprendizaje de los médicos en formación, mientras que estimula el pensamiento crítico y la capacidad para comprender y analizar conocimiento científico a partir de la generación de hipótesis, mejorado las actividades e intervenciones de prevención y atención de los pacientes. 
EL CASO ROMAN C. 
El señor Román C. tiene 48 años trabaja de albañil por cuenta propia. La familia no posee cobertura social. No concluyó sus estudios en la escuela primaria. Su familia de origen muy humilde, no lo pudo acompañar en sus estudios, y desde los 10 años acompañó a su padre a trabajar. Su padre también trabajaba en la construcción, allí, con él, aprendió el oficio. 
Actualmente, Román vive en un barrio de la ciudad de La Plata junto a su esposa y dos de sus cuatro hijos. Los hijos mayores están casados y a su vez, cada uno tiene sus hijos. Román y Paola (su esposa) crían a sus hijos más pequeños y también se ocupan de cuidar a sus nietos, que tienen la misma edad. Los llevan a la misma escuela del barrio. Dos de sus nietos se quedan con ellos los fines de semana, cuando su hija mayor, que está separada, organiza salir con sus amigas. Ambos disfrutan jugando con sus hijos menores y nietos. 
Paola cuenta que tanto ella como su hija mayor, estando ambas embarazadas, realizaban juntas los controles de embarazo en la salita del barrio. Actualmente Paola concurre con su hijo menor a rehabilitación en el Hospital Elina De La Serna de la Plata debido a que al niño, de 12 años de edad, hace cuatro años se le diagnosticó dislexia. Paola trabaja en tareas domésticas en casas de familias. Los trabajos de ambos no son estables, por lo cual hay meses que les cuesta llegar a fin de mes. 
Román refiere que él es una persona muy exigente con su trabajo y necesita estar en todas las situaciones que se presenten, lo cual hace que sus días sean agitados y vertiginosos, no teniendo un horario fijo de fin de su jornada laboral. Fuma casi tres atados de cigarrillos por día. Suele almorzar algo en la calle, o compartir un sandwich con sus compañeros de trabajo; refiere tomar mucho mate que acompaña con galletitas a base de grasa. No le gustan las bebidas alcohólicas
Una vez por semana, se junta con amigos del barrio a jugar al fútbol. Desde hace unos meses, empezó a agitarse y si bien continúa yendo al potrero, lo ubicaron como arquero lo cual evita que corra. 
Cuando llega la noche, suele cenar con la familia y acostarse a la medianoche; según sus palabras “me desmayo en la cama”. Últimamente, refiere levantarse y sentirse cansado, duerme aproximadamente seis horas diarias. 
En su familia paterna hay casos de enfermedades cardiovasculares severas; un hermano y un tío fallecieron a causa de las mismas alrededor de los 50 años. Su mujer, conocedora de su historia, le ha insistido en que se haga chequeos, pero Román se ha mostrado mayormente refractario, diciéndole que no es necesario preocuparse, que él está bien. Por este motivo han tenido algunas discusiones, pues ella observa que él no se cuida, y él se enoja e irrita porque no le gusta que le digan lo que tiene que hacer. 
En el 2018, Paola consiguió convencerlo de acercarse a la plaza del barrio un fin de semana. Había médicos y estudiantes de medicina organizando un encuentro comunitario de prevención de enfermedades cardio-vasculares (que integra un proyecto de extensión universitaria). En dicha ocasión, la médica que lo revisa descubre que tiene la presión alta. Ella lo orienta a concurrir a la Unidad Sanitaria del barrio para hacer un control clínico y seguimiento de los parámetros de la tensión arterial. La Promotora de salud le entrega folletería con información acerca de factores de riesgo y factores protectores de las enfermedades cardio-vasculares, y lo invita a asistir a charlas y otras actividades participativas de promoción de la salud. 
Román minimizó las sugerencias dadas por el equipo de salud y continúo con su manera de vivir. Le pareció que le hablaban de cosas con palabras complicadas y él no entendió muy bien que querían decirle. Más que una orientación sintió que se le imponía una forma de vivir, y eso, por su forma de ser no le gustó. 
Dos meses después, acude a su domicilio una promotora de salud y un trabajador social preguntando por Román. Sucedió que, después de la actividad de extensión universitaria, los integrantes del proyecto y los participantes de la unidad sanitaria se reunieron para confeccionar un listado de personas con factores de riesgo cardiovasculares detectadas durante la misma y evaluar en líneas generales las demás actividades realizadas. Con ese listado, el equipo de salud visitaría en su domicilio a las personas en las que se había detectado algunos factores de riesgo cardiovasculares y que hasta ese momento no concurrieron, por su propia decisión, a la Unidad Sanitaria. Román formaba parte del relevamiento realizado y como no se había acercado a la Unidad Sanitaria, la promotora y el trabajador social lo visitaron en su domicilio. Román estaba un poco sorprendido por la visita, se sintió importante, y además el trabajador social le resultó muy simpático; por ello, prometió concurrir a la salita. 
Dos semanas después se concreta la consulta, y el profesional le brinda asistencia e información sanitaria y comienza un proceso integral de atención junto con otros integrantes del equipo. Durante la consulta Román refiere haber presentado cuadros de sudoración, nerviosismo, malestar general. Se le brindó una exhaustiva información sobre comportamientos saludables, en relación a evitar situaciones estresantes, alimentarse adecuadamente llevando una dieta hipo-sódica para proteger el corazón y sobre todo dejar de fumar, “es importante una dieta rica en frutas y verduras” recuerda que le dijo. Sin embargo, Román continuó con sus rutinas y cuando le preguntaban al respecto decía que estaba cansado de que le dijeran que tenía que “hacer dieta”. 
Un lunes, a principios del 2019, siendo las 7 de la mañana Paola toma la decisión de llevar a Román hasta la salita. Hacía tres días que Román presentaba dolor en el pecho pero no quería consultar, decía que ya se le iba a pasar, pero, esa mañana sintió que no podía más. Entró al baño a ducharse para ir a la consulta pero el dolor era muy intenso a tal punto que en dos oportunidades perdió el conocimiento. Le costaba tomar conciencia de la gravedad de su estado, él decía que quería ir manejando a la salita. No logra hacerlo, y Paola lo ayuda a subir a su moto (que utiliza para ir a su trabajo). Como temía que se desvaneciese, lo ata con una bufanda a su cintura y así logra llevarlo lo más rápido posible a la salita. 
Paola sabía que en la salita comenzaban a dar los turnos temprano. En ocasiones tuvo que esperar bastante tiempo afuera de la salita hasta que empezaran a dar los turnos, por eso registró que empiezan a las 7 de la mañana. 
Ingresan a la salita siendo las 7.20 hs. de la mañana aproximadamente, Paola se asoma por la ventanilla de la administración pidiendo si alguien podía atender a su esposo que estaba descompuesto. 
Como aún se encontraban dando los turnos del día, la médica generalista sale de la administración y al verlos les dice que la acompañen hasta la enfermería. En ese momento Román presentaba un fuerte dolor toráxico, sudoración profusa, palidez de piel y facie descompuesta. La médica al ver al paciente tiene una primera impresión diagnóstica, realiza una exploración/maniobras clínico-semiológicaspara asegurar el diagnóstico, coloca oxígeno al paciente para mejorar su ventilación y rápidamente pide la Emergencia 107 - SAME - con clave roja. 
Seguidamente les informa a Paola y Román, que él presenta una enfermedad cardiovascular- Infarto Agudo de Miocardio - en curso. La operadora del SAME recepciona los datos y se comunica con la Emergencia del Htal. San Roque de Gonnet para que vayan esperando al paciente. Mientras tanto la médica de la salita completa la Hoja de Referencia para derivar al paciente a dicho hospital. 
El paciente es trasladado en la ambulancia que, al ser llamada con el diagnóstico probable de IAM (Infarto Agudo de Miocardio), contaba con la complejidad adecuada para estos casos. 
Ya en el Hospital San Roque de Gonnet el paciente es evaluado apenas llega a la emergencia y aún en la ambulancia se determina que la severidad del cuadro hace necesario contar con servicio de hemodinamia, con la que no cuenta ese hospital. Se le informa a Paola que Román necesita tratamiento hemodinámico, que no es conveniente bajar al paciente en ese Htal y aconsejan seguir camino hacia el Hospital HIGA San Martín de alta complejidad. 
Se traslada entonces a Román al Htal. HIGA San Martin, quedando internado en terapia Intensiva con un cuadro grave de enfermedad cardiovascular y sólo un 38% de su corazón funcionante. Durante su ingreso al Hospital se solicitaron diferentes estudios y se informó al familiar y al paciente sobre las prácticas que debían realizar para lo cual se solicitó consentimiento informado. 
La Rehabilitación se presentía lejana y compleja
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