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COMERCIANTE. OBLIGACIONES. LIBROS DE COMERCIO. El régimen comercial argentino define al comerciante “La ley declara comerciantes a todos aquellos individuos que, teniendo capacidad legal para contratar, ejercen de cuenta propia actos de comercio, haciendo de ello profesión habitual” De la definición surgen notoriamente tres características, la capacidad, el ejercicio de actos de comercio por cuenta propia y su habitualidad. La capacidad es la aptitud para contraer derechos y adquirir obligaciones, la misma surge de lo establecido en los Art.19 al 61 del Código Civil y Comercial, al cual nos remitimos, en segundo lugar la definición habla del ejercicio de actos de comercio. El ser comerciante genera determinadas cargas, que no son obligaciones. La obligación que nos interesa analizar en este momento es la de llevar un orden uniforme de contabilidad mediante libros de comercio. Vale realizar una aclaración:si bien el código habla de obligación no lo es tal sentido, ya que la misma constituye una carga. La diferencia es la siguiente, las obligaciones poseen una sanción directa por su incumplimiento por ejemplo multa, no matriculación etc., la carga posee sanciones de forma indirecta, en el caso de los libros de comercio de los comerciantes ordinarios, nunca un juez, autoridad nacional, provincial o municipal puede realizar pesquisa alguna a los fines de exigir el cumplimiento de la teneduría de libros y nunca menos aplicar sanción alguna por su incumplimiento, en este caso el no llevarlos acarrea una sanción indirecta y la misma constituye el valor probatorio en juicio de los mismos, esta es la característica que le da el carácter de carga por sobre el de obligación. Ya en la sección siete del Código Civil y Comercial ( art 320) entramos en la contabilidad mercantil que comienza describiendo claramente la carga mencionada: ARTICULO 320.- Obligados. Excepciones. Están obligadas a llevar contabilidad todas las personas jurídicas privadas y quienes realizan una actividad económica organizada o son titulares de una empresa o establecimiento comercial, industrial, agropecuario o de servicios. Cualquier otra persona puede llevar contabilidad si solicita su inscripción y la habilitación de sus registros o la rubricación de los libros, como se establece en esta misma Sección. Sin perjuicio de lo establecido en leyes especiales, quedan excluidas de las obligaciones previstas en esta Sección las personas humanas que desarrollan profesiones liberales o actividades agropecuarias y conexas no ejecutadas u organizadas en forma de empresa. Se consideran conexas las actividades dirigidas a la transformación o a la enajenación de productos agropecuarios cuando están comprendidas en el ejercicio normal de tales actividades. También pueden ser eximidas de llevar contabilidad las actividades que, por el volumen de su giro, resulta inconveniente sujetar a tales deberes según determine cada jurisdicción local. ARTICULO 321.- Modo de llevar la contabilidad. La contabilidad debe ser llevada sobre una base uniforme de la que resulte un cuadro verídico de las actividades y de los actos que deben registrarse, de modo que se permita la individualización de las operaciones y las correspondientes cuentas acreedoras y deudoras. Los asientos deben respaldarse con la documentación respectiva, todo lo cual debe archivarse en forma metódica y que permita su localización y consulta. Del presente articulo surge claramente la descripción de la carga impuesta por el legislador al comerciante. Los fines de llevar una contabilidad organizada son tres : el primero de ellos en claro beneficio para el comerciante que mediante este sistema puede en todo momento conocer el ritmo de su negocio, el segundo es en protección de los terceros contratantes que frente a un litigio judicial puedan utilizar los libros contables como medios probatorios y el tercer fin es de interes del estado que vela por la seguridad jurídica. . En el articulo 322 del Código lo que el legislador hace es seguir la línea del sistema Francés ya explicado en el cual obliga a los comerciantes a llevar un régimen contable mediante libros de comercio. ¿Qué libros son estos? Los enumerados en el siguiente artículo y donde nos vamos a detener ART. 322 del Código Civil y Comercial “Son registros indispensables, los siguientes:: A) Diario. B) Inventario y balance. C) Aquellos que corresponden a una adecuada integración de un sistema de contabilidad y que exige la importancia y la naturaleza de las actividades a desarrollar D) Los que en forma especial imponga este código u otras leyes. Este artículo se debe dividir en tres partes, la primera de ellas hace referencia a los comerciantes especiales al decir: Sin perjuicio de los que en forma especial imponga esta ley o otras leyes…. El legislador diferencia tipos de comerciantes, los comunes o ordinarios, los especiales y también deja su lugar a los profesionales , nos vamos a detener en estos últimos. Los comerciantes especiales y profesionales son aquellos que encuentran su actividad reglamentada por una ley especial o tienen una regulación especial dentro del código y leyes especiales, a saber Martilleros y corredores públicos, barraqueros, despachantes de aduana, empresas de transporte etc.., ¿cuál es la característica distintiva? Es que realizan una actividad especifica la cual en muchos casos no puede ser realizada por cualquiera, como ejemplo podríamos citar el caso de los martilleros públicos. Para poder ejercer se necesita un titulo universitario habilitante, matricularse en el colegio del departamento judicial donde radique su domicilio y piensa ejercer, otros aunque no revistan la necesidad e un titulo universitario o matriculación realizan una actividad que requiere una regulación propia como las empresas de transporte, a diferencia de los comerciantes ordinarios que no requieren ni regulación especial ni requisitos previos obligatorios a modo de ejemplo, cualquier persona podría mañana mismo abrir un poli rubro con las únicas condiciones de habilitación, inscripción a impuestos etc., Estas últimas son condiciones que no dependen de la persona sino de cualquier tráfico mercantil Con la reforma introducida por la ley 25028 modificatoria de la ley 20.266 la cual establece la obligación de poseer titulo universitario a los fines de poder ejercer la profesión de corredor y martillero público, la doctrina ya no discute si el corredor y martillero son comerciantes toda vez que su actividad no puede ser realizada por personas capaces que ejerzan por cuenta propia tal actividad haciendo de ello su profesión habitual, sino que se exige el título universitario y su ejercicio sin el mismo constituye el mismo delito que pretender ejercer de médico o abogado sin el titulo que lo habilita ( párrafo primero del arto 247 del Código Penal . mod. por ley 24.527), es decir hoy no se discute su calidad de profesionales. La segunda parte habla de los comerciantes ordinarios a los cuales la legislación le impone la carga de llevar dos libros el diario y el inventario y balance, vale aclarar para evitar confusiones que son dos libros ya que el de inventario y balance es un solo libro. La tercera parte de este artículo la mención de “de acuerdo a la magnitud e importancia del negocio” constituye un termino vago y ambiguo ya que es decisión del comerciante en el momento de arrancar su contabilidad y explotación comercial y luego esa decisión va a pasar por el ojo del juez quien decidirá si la magnitud e importancia del negocio fue bien o mal interpretada por el comerciante. A modo de ejemplo, una persona que se dispone a abrir un polirrubro pequeño parecería claro que llevando el libro diario e el Inventario y balance tendría su contabilidad en forma de acuerdo a lo prescripto por los artículo, pero una persona que se dispone a abrir una cadena de supermercados, dada la magnitud e importancia del negocio necesita una contabilidad mucho más compleja por lo cual aparte de llevar el libro diario e inventarioy balance debería utilizar los libros auxiliares que son por ejemplo libro IVA, libro caja, libro de trabajadores etc.. La importancia de la interpretación de este artículo radica en el valor probatorio de los libros de comercio, si el comerciante es llevado a juicio, en el caso de que sea necesario la exhibición de los mismos, la doctrina y jurisprudencia mayoritaria considera que es obligatorio y su incumplimiento acarrea que la contabilidad no esté llevada en forma y la falta de estos últimos libros se lo equipara con la falta del libro Diario o el Inventario y balance. La presente regulación es resultado de la reforma de 1963 según Decreto Ley 4777/63 ya que antes se mencionaba tres libros que eran el Libro Diario, El balance y el viejo Copiador de Cartas hoy derogado. Libro Diario: En el libro diario el comerciante debe asentar en forma ordenada y cronológica todas la actividades de su actividad comercial, es decir lo que percibe, lo que paga, lo que compra, los salarios, los cheques recibidos etc., es el libro fundamental de la contabilidad mercantil. Libro Inventario y Balance: Volvemos a aclarar que es un solo libro, el inventario es una relación y valoración de los bienes, derechos y obligaciones de una empresa, que expresan la estructura de su patrimonio en un momento dado, ya que hay inventario de inicio, de ejercicio, de cierre etc.. y el balance a grandes rasgos puede ser definido como la confrontación entre el activo y el pasivo de una empresa para conocer el estado de los negocios, el mismo ofrece un estado de la situación patrimonial en un momento determinado. B) REQUISITOS EXTRINSICOS E INTRINSICOS Los libros de comercio si bien constituyen una herramienta contable del comerciante y cuentan con el carácter de privados, requieren ciertos requisitos en la forma de ser llevados a los fines de evitar adulteraciones, cambios etc... Cumpliendo de esa forma uno de los propósitos del legislador ya mencionado que es generar a través de los mismos seguridad mercantil en las contrataciones. Los requisitos son los enunciados en los Art. 323 y 324 del Código Civil y Comercial ART. 323: “El interesado debe llevar su contabilidad mediante la utilización de libros y debe presentarlos, debidamente encuadernados, para su individualización en el Registro Publico correspondiente. Tal individualización consiste en anotar, en el primer folio, nota fechada y firmada por su destino, del numero de ejemplar, del nombre de su titular y del numero de folio que contiene. El registro debe llevar una nomina alfabética, de consulta publica, de las personas que solicita rubricacion de libros o autorización para llevar los registros contable sde otra forma, de la que surgen los libros que le fueron rubricados y en su caso de las autorización que se les confieren ARTICULO 324.- Prohibiciones. Se prohíbe: a) alterar el orden en que los asientos deben ser hechos; b) dejar blancos que puedan utilizarse para intercalaciones o adiciones entre los asientos; c) interlinear, raspar, emendar o tachar. Todas las equivocaciones y omisiones deben salvarse mediante un nuevo asiento hecho en la fecha en que se advierta la omisión o el error; d) mutilar parte alguna del libro, arrancar hojas o alterar la encuadernación o foliatura; e) cualquier otra circunstancia que afecte la inalterabilidad de las registraciones. ARTICULO 325.- Forma de llevar los registros. Los libros y registros contables deben ser llevados en forma cronológica, actualizada, sin alteración alguna que no haya sido debidamente salvada. También deben llevarse en idioma y moneda nacional. Deben permitir determinar al cierre de cada ejercicio económico anual la situación patrimonial, su evolución y sus resultados. Los libros y registros del artículo 322 deben permanecer en el domicilio de su titular. El artículo 323 hace referencia a los llamados requisitos extrínsecos, los cuales son encuadernación y foliación, el objetivo de estos dos requisitos es evitar que se agreguen o retiren hojas. La foliación consiste en la enumeración de todas las hojas, generalmente en su margen superior derecho y la encuadernación busca evitar que las hojas se encuentren sueltas, una vez encuadernado y foliado se presenta ante la autoridad comercial, el código habla de tribunal del comercio o juez de paz si este no existiere, en la ciudad de Mar del Plata la autoridad encargada es el Registro Publico de comercio, la autoridad competente lo individualiza indicando a quien pertenece, el numero de hojas, que tipo de libro es y le pone fecha al mismo, de esta forma se logra el contralor a los efectos de evitar el cambio de un libro por otro. Es requisito a los fines de que la autoridad realice la mencionada individualización que el comerciante se encuentre matriculado. Estos requisitos van atrás de los adelantos en materia de informática en cuanto, a raíz de lo enunciado, no permitiría la utilización del sistema de hojas móviles, que surge de la utilización de la computación, por lo cual la ley de sociedades en su art. 61 establece la posibilidad de reemplazar los libros por sistema magnéticos, ordenadores etc. con previa autorización de la autoridad competente, salvo el libro de inventario y balance, ART. 61 DE LA LEY DE SOCIEDADES 19550: “Podrá prescindirse del cumplimiento de las formalidades impuestas por el artículo 53 del Código de Comercio para llevar los libros en la medida que la autoridad de control o el Registro Público de Comercio autoricen la sustitución de los mismos por ordenadores, medios mecánicos o magnéticos u otros, salvo el de Inventarios y Balances. La petición deberá incluir una adecuada descripción del sistema, con dictamen técnico o antecedentes de su utilización, lo que, una vez autorizada, deberá transcribirse en el libro de Inventarios y Balances. Los pedidos de autorización se considerarán automáticamente aprobados dentro de los treinta (30) días de efectuados, si no mediare observación previa o rechazo fundado. El libro Diario podrá ser llevado con asientos globales que no comprendan períodos mayores de un (1) mes. El sistema de contabilización debe permitir la individualización de las operaciones, las correspondientes cuentas deudoras y acreedoras y su posterior verificación, con arreglo al artículo 43 del Código de Comercio. El artículo 324 hace referencia a los llamados requisitos intrínsicos es decir de que forma debe ser llevado el libro en cuanto a sus anotaciones por parte de los comerciantes, los mismos son: orden cronológico en los asientos ( estos son las anotaciones de cualquier tipo que se realicen en los libros comerciales) por lo cual no puede haber blancos ni espacios, en caso de error se debe realizar lo que se llama contaasiento, esta es la forma de corrección, por lo cual no se puede tachar, realizar raspaduras, enmiendas o realizar interlineaciones. También y es de sentido común no se puede alterar la foliatura, mutilar parte del libro o arrancar alguna hoja. De acuerdo a lo explicado si los libros no cumplen con los requisitos extrínsecos e intrínsicos que exige el legislador o no llevan el total de los libros requeridos su contabilidad mercantil se considera no llevada en forma, y es tan estricto lo mencionado que con una hoja mutilada es suficiente para que se aplique la mencionada sanción. C) CONSERVACION Los libros comerciales deben conservarse hasta diez años posteriores a la finalización de la actividad comercial por parte del comerciante, este plazo obedece al plazo máximo de prescripción de las acciones judiciales, se entiende por prescripción a la perdida o adquisición de derechos ocasionadas por el transcurso del tiempo, en este caso nos quedamos con el primer concepto que es la perdida de derecho y esto es así ya que la ley establece un plazo, de acuerdo al tipo de acción judicial, para su entablamento el cual pasado el mismo ocasiona la perdida del derecho. Se debe aclarar que no todas las acciones tienen un plazo de prescripción de diez años sino que el legislador por precaución eligió este que siconstituye el plazo máximo. Art. 328 del Código civil y comercial: “Excepto que leyes especiales establezcan plazos superiores, deben conservarse por diez años: a) Los libros, contándose desde el ultimo asiento b) Los demás registros, desde la fecha de la última anotación practicad sobre los mismos. Los instrumentos respaldatorios desde su fecha. ….. Pasado los diez años los libros no dejan de tener valor ni de constituir una prueba valiosa, pero si el comerciante no los presenta porque ya no los tiene no hay sanción alguna y tampoco se puede considerar que no lleve contabilidad en forma, cosa que si ocurriría dentro de los diez años si se niega a presentarlos o alude que ya no los tiene, pero si el comerciante en el ejercicio de su voluntad quiere presentarlos tienen el mismo valor que siempre tuvieron, es decir nunca dejan de tener valor, sino que pasado determinado tiempo ya no se le puede aplicar la sanción probatoria al comerciante. E) EXHIBICION La exhibición de los libros comerciales puede ser de dos tipos, parcial o total, recordemos que los mismos revisten el carácter de secretos y se encuentran protegidos por el Art. 18 de la Constitución Nacional, al igual que la correspondencia por lo que ninguna autoridad puede realizar pesquisa sobre el comerciante a los fines de saber si lleva libros de comercio, solo en los casos que mencionaremos procede su exhibición. La exhibición parcial procede de oficio o a pedido de parte en un proceso judicial, se denomina parcial ya que solo se indaga sobre el asiento o asientos que hagan referencia al objeto u objetos del proceso judicial, el funcionamiento seria el siguiente: un parte o el juez solicita prueba pericial ( es la prueba en la cual se expiden los peritos sobre puntos determinados previamente) sobre los libros de un comerciante ( puede revestir el carácter de actor o demandado en el juicio) sorteado el perito ( especialista en alguna materia, por ejemplo perito contador, calígrafo, medico etc. En este caso perito contador) y aceptado el cargo en el expediente, el mismo analiza los libros en presencia del comerciante y salvo supuestos de excepción en el lugar del asiento de los libros, luego solamente dictamina sobre los puntos de pericia los cuales deben hacer referencia al litigio, por lo que el perito no puede ir mas allá de ello y analizar y meriturar sobre otro aspecto de los libros del comerciante dado su carácter de privado, el cual solo cede en el presente caso para una cuestión especifica y con el fin de dilucidarla. Si el comerciante se negare a exhibirlos se considerara como que no los posee es decir su contabilidad no estará en forma. La exhibición general por el contrario constituye la entrega total de los libros del comerciante y su documentación y solo procede en los casos enumerados en el código siendo la misma taxativa. Sucesión: La sucesión es el proceso judicial que se inicia a raíz de la muerte de una persona, denominada en adelante causante, en este caso si el mismo era comerciante y llevaba libros de comercio, su contenido es fundamental a los fines de conocer su activo y su pasivo por lo cual corresponde la exhibición general de los mismos, la misma puede se pedida por los herederos y también en casos determinados los legatarios, donatarios, herederos del donante, acreedores de los herederos. Comunión: La presente hace referencia a una comunidad de derechos o intereses sobre una cosa, el ejemplo mas claro seria el caso del empleado, que percibe comisión y a los fines de poder determinar esta, solicita la exhibición de los libros del principal. Sociedades: En este caso todos los socios pueden consultar, revisar y solicitar la exhibición de los libros, salvo las sociedades de responsabilidad limitada y de acciones en las cuales exista un órgano que fiscalice, sea sindicatura o consejo de vigilancia. Administración o gestión mercantil por cuenta ajena: Seria el supuesto en que el mandante solicita la exhibición de libros del mandatario por ejemplo a los fines de informarse de la gestión encomendada, pero si el mandatario llevare otras gestiones solo procede la exhibición parcial según los fundamentos ya explicados. Concurso o quiebra: Existe una diferencia entre el concurso y la quiebra en cuanto a la exhibición de libros, en el primero de los casos la exhibición es voluntaria, procediéndose en la etapa pertinente a la intervención de toda la contabilidad del concursado, en el caso de la quiebra hay un desapoderamiento de los libros del comerciante fallido, y es el sindico quien generalmente toma posesión de los mismos. Fuera de los casos mencionados nunca procede la exhibición general de los libros del comerciante y la documentación contable por lo que tal como se enuncio ut-supra la enumeración de casos que da el código de comercio es taxativa: ARTICULO 331.- Investigaciones. Excepto los supuestos previstos en leyes especiales, ninguna autoridad, bajo pretexto alguno, puede hacer pesquisas de oficio para inquirir si las personas llevan o no registros arreglados a derecho. La prueba sobre la contabilidad debe realizarse en el lugar previsto en el artículo 325, aun cuando esté fuera de la competencia territorial del juez que la ordena. La exhibición general de registros o libros contables sólo puede decretarse a instancia de parte en los juicios de sucesión, todo tipo de comunión, contrato asociativo o sociedad, administración por cuenta ajena y en caso de liquidación, concurso o quiebra. Fuera de estos casos únicamente puede requerirse la exhibición de registros o libros en cuanto tenga relación con la cuestión controvertida de que se trata, así como para establecer si el sistema contable del obligado cumple con las formas y condiciones establecidas en los artículos 323, 324 y 325.ART. 58 Del Código de Comercio: “La exhibición general de los libros de los comerciantes sólo puede decretarse a instancia de parte en los juicios de sucesión, comunión o sociedad, administración o gestión mercantil por cuenta ajena y en caso de liquidación o quiebra” F) VALOR PROBATORIO Es de destacar la importancia de este punto en cuanto hablemos de contabilidad mercantil, ya se explico que la misma no es una obligación sino una carga ya que la sanción no es directa (ej. Multa) sino indirecta, pues es en este punto (el valor probatorio) en donde surge la mencionada sanción. Los comerciantes que llevan los libros exigidos en el código civil y comercial y cumplen con los requisitos extrínsecos e intrínsico se considera que llevan su contabilidad en forma, por el contrario en caso de que falten libros, supuesto que se daría si no llevan los exigidos en el codigo o tengan libros auxiliares y faltasen los principales o si teniendo los exigidos los mismos tengan defectos extrínsecos o intrínsico se considera que llevan contabilidad no en forma. ¿¿LITIGIO ENTRE COMERCIANTES. Primero analizaremos el litigio entre dos comerciantes y los supuestos que se pueden generar: SUPUESTO PRIMERO: Litigio entre dos comerciantes, ambos llevan la contabilidad en forma y los asientos de ambos concuerdan en un todo en relación al objeto de litigio. En ese caso la resolución es simple y el juez debe fallar de acuerdo a lo que dicen los asientos contables de ambas partes. SUPUESTO SEGUNDO: Litigio entre dos comerciantes, ambos llevan la contabilidad en forma, pero los asientos se contradicen en relación al objeto de litigio, en eses caso el juez debe prescindir de esta prueba y fallar de acuerdo a otras constancias probatorias. SUPUESTO TERCERO: Litigio entre dos comerciantes, ambos llevan la contabilidad en forma, pero en los libros de uno de los comerciantes figura el asiento en referencia al objeto del litigio y el otro comerciante no presenta en sus libros asiento alguno en contrario, es ese caso el juez tiene la facultad de apreciar esa prueba y de exigir si es su voluntad otras constancias probatorias. SUPUESTO CUARTO: Litigio entre dos comerciantes, uno de ellos lleva la contabilidad en forma, el otro no presenta la contabilidaden forma, el juez debe fallar de acuerdo a las constancias del comerciante que lleva los libros en forma y el segundo comerciante no puede hacer valer sus constancias a su favor. PRUEBA EN CONTRA DEL DUENO DE LOS LIBROS: Los asientos contables siempre prueban en contra de los comerciantes a quienes pertenezcan sus libros aunque no estuvieren en forma sin admitirse prueba en contrario, salvo que el dueño demuestre que los mismos son productos de violencia etc., pero el adversario debe aceptar todos los asientos y no solo los que le sean favorables. Este precepto surge en el hecho de que nadie obliga al comerciante a realizar asientos ni el contenido del mismo, por lo que si un comerciante, por ejemplo, anota una deuda que el posee producto de una compraventa y luego en una instancia judicial la niega y sus libros son llevados como prueba, en caso de que el perito encuentre el asiento en el cual figura el reconocimiento de deuda, estén o no llevados los libros en forma, el comerciante no puede desconocerlo y seria una figura aunque con muchas diferencias asimilable a una confesión extrajudicial por lo cual el litigio terminaría, salvo como se menciono que el comerciante pruebe que el asiento de mención es producto de violencia, dolo etc.. Por el contrario y como se explico para que el asiento favorezca al comerciante, en el pleito, si se exige que la contabilidad este en forma, evitando de esa forma la constitución de falsa prueba a favor del mismo. LITIGIO ENTRE UN COMERCIANTE Y UN NO COMERCIANTE: Este es un supuesto especial ya que el no comerciante no tiene la carga de llevar libros de comercio por lo cual y teniendo en cuenta lo enunciado no puede contrarrestar los libros del comerciante, en caso de que este ultimo llevare la contabilidad en forma y la prueba es a favor de este, sus libros se consideran como principio de prueba, en el caso contrario y los asientos sean en contra de este y sin importar ya si la contabilidad es llevada en forma o no se aplica lo mencionado en el apartado ut-supra, (prueba en contra del dueño de los libros). Como recaudo se transcriben los artículos de mención en cuanto al valor probatorio de los libros de comercio: ARTICULO 330.- Eficacia probatoria. La contabilidad, obligada o voluntaria, llevada en la forma y con los requisitos prescritos, debe ser admitida en juicio, como medio de prueba. Sus registros prueban contra quien la lleva o sus sucesores, aunque no estuvieran en forma, sin admitírseles prueba en contrario. El adversario no puede aceptar los asientos que le son favorables y desechar los que le perjudican, sino que habiendo adoptado este medio de prueba, debe estarse a las resultas combinadas que presenten todos los registros relativos al punto cuestionado. La contabilidad, obligada o voluntaria, prueba en favor de quien la lleva, cuando en litigio contra otro sujeto que tiene contabilidad, obligada o voluntaria, éste no presenta registros contrarios incorporados en una contabilidad regular. Sin embargo, el juez tiene en tal caso la facultad de apreciar esa prueba, y de exigir, si lo considera necesario, otra supletoria. Cuando resulta prueba contradictoria de los registros de las partes que litigan, y unos y otros se hallan con todas las formalidades necesarias y sin vicio alguno, el juez debe prescindir de este medio de prueba y proceder por los méritos de las demás probanzas que se presentan. Si se trata de litigio contra quien no está obligado a llevar contabilidad, ni la lleva voluntariamente, ésta sólo sirve como principio de prueba de acuerdo con las circunstancias del caso. La prueba que resulta de la contabilidad es indivisible.