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© 2011 por Ediana Marín Ramírez Todos los derechos reservados Registro de Propiedad Intelectual 037153 ISBN 978-9942-13-939-9 Segunda Edición. Quito, Ecuador 2014. Primera Edición digital 2014. Para contactos y capacitaciones escriba a: vinculosparaelcambio@live.com www.vinculosparaelcambio.org Facebook: Vínculos para el cambio mailto:vinculosparaelcambio@live.com http://www.vinculosparaelcambio.org Prohibido todo tipo de reproducción total o parcial, ya sea esta por medios impresos, fotocopiados, digitales u otros, sin autorización escrita de la autora. Contenido Dedicatoria Agradecimientos La locura de la infidelidad Cómo Perdonar y Restaurar la Relación después de una Infidelidad El Problema de la Infidelidad en la Actualidad CAPÍTULO I El proceso del duelo en la infidelidad Mitos acerca de la infidelidad MITO 1: Todos los matrimonios viven una infidelidad en algún momento de su vida. MITO 2: Una aventura sexual ocasional no es tan grave. MITO 3: Una traición es la prueba de que ya no hay amor en el matrimonio. MITO 4: “El otro o la otra” debe ser más sexy o guapa que el cónyuge engañado. MITO 5: Culpar al engañado por la infidelidad MITO 6: “Lo mejor es hacer de cuenta como que nada pasó”. MITO 7: Toda infidelidad tiene que terminar en divorcio. CAPITULO II Tipos de infidelidades La infidelidad accidental La aventura romántica Las infidelidades recurrentes Infidelidades con consecuencias extras Las infidelidades cibernéticas o emocionales Evaluar cual es su caso y decidir que hacer CAPITULO III El camino de perdonar Primer paso del perdón: entrar conscientemente en este proceso Ejercicio 1: el proceso de perdonar. Segundo paso del perdón: renunciar a la idea de venganza Ejercicio 2: desistir de la venganza Tercer paso del perdón: tomar contacto con mi dolor Ejercicio 3: viviendo el dolor Cuarto paso del perdón: dividir mi dolor Ejercicio 4: con quien compartir mi dolor( primera parte) Ejercicio 4: compartir mi dolor con el ofensor (segunda parte) Quinto paso del perdón: ¿qué he perdido? Ejercicio 5: identificar la herida y las pérdidas Trabajar heridas de la infancia Sexto paso del perdón: desviar los pensamientos Ejercicio 6: desviando los pensamientos Sugerencias para cuando los pensamientos atacan Séptimo paso del perdón: perdonarme a mi mismo(a) Ejercicio 7: distancia emocional para la persona engañada Ejercicio de las dos sillas Octavo paso del perdón: ponerse en el lugar del que cometió la infidelidad Ejercicio 8: la empatía Trate por un momento de ponerse en el lugar de su cónyuge: Noveno paso del perdón: otorgar al otro el regalo del perdón EJERCICIO 9: EL REGALO DEL PERDÓN Ritual del perdón CAPITULO IV Primer paso para ganar la confianza: el arrepentimiento Ejercicio 1:valorar las consecuencias y daños Segundo paso para ganar la confianza: Tercer paso para ganar la confianza: el compromiso con la verdad Ejercicio 2: mis miedos y reacciones Identifique sus reacciones Cuarto paso para ganar la confianza: ir un paso adelante para ganar el respeto Otras ideas para ir un paso adelante Quinto paso para ganar la confianza: sembrar con paciencia Sexto paso para ganar la confianza: valorar su historia personal y perdonarse Ejercicio 3: posibles causas de la infidelidad. Séptimo paso para ganar la confianza: fomentar la intimidad emocional Ejercicio 4:la distancia emocional Octavo paso para ganar la confianza: dividir mi dolor Ejercicio 5: dividir mi dolor Noveno paso para ganar la confianza: prever las recaidas Ejercicio 6: ser prevenido Cuando las fuerzas se agotan CAPITULO V El proceso de la infidelidad y cómo prevenirla Primer paso: estar distanciado emocionalmente de la pareja Segundo paso: conocer a alguien que nos resulta atractivo(a) Tercer paso: “solo es un cafecito” Cuarto paso: caer en la infidelidad sexual. Como prevenir la infidelidad y cultivar la intimidad emocional Cuando la fidelidad funciona y rinde sus frutos Como fomentar la intimidad en la pareja Anexo a: test para evalauar las situaciones de riesgo Anexo b: test para valorar el peligro potencial en el ambiente en que usted se desenvuelve Bibliografía Dedicatoria A Erik Mi compañero de vida, Es hermoso saber que sólo hemos sido dos, tan sólo dos. “No le llames cobardía, hay cosas que en la vida Sólo son parados, tan sólo dos. No es compatible la mentira, con algo transparente, Hermoso y frágil, como es, el amor”. Canción “Tentación” de José Luis Perales Agradecimientos No puedo dejar de agradecer a Dios quien me da las fuerzas para pensar, escribir y crear. A dos profesores de la maestría muy apreciados; la Dra. Dorys Ortiz y el Dr. Giovanni Toscano, quienes durante mis años de instrucción académica fueron generosos con sus consejos y enseñanzas, especialmente en las temáticas de cómo acompañar a las parejas en los casos de infidelidad. Al hermoso grupo experimental que recibió parte del contenido de este libro antes de ser publicado, sus ideas, aportes y preguntas lo han enriquecido formidablemente. A Carmen Gallego y Patricia Cuéllar quienes dedicaron horas a revisar la primera edición del libro y aportaron con sus sugerencias y correcciones que están incluidas en esta segunda edición. A mis lindos hijos, Salomé y Juan Esteban quienes me apoyaron, este último me dijo una tarde: “Mami he sido muy paciente mientras escribías tu libro”. Finalmente a Erik, quien con mucha paciencia ha revisado, corregido y transcrito de nuevo toda esta segunda edición, sin su ayuda y trabajo éste no sería posible. La locura de la infidelidad Cómo Perdonar y Restaurar la Relación después de una Infidelidad Este libro está escrito especialmente para todos aquellos y aquellas que han tenido que enfrentar uno de los dolores más grandes en la vida de pareja: haber sido engañado o haber sido infiel y, por tal razón se sienten muy confundidos sin saber qué hacer. Han considerado varias opciones, desde acabar con la relación (y con el infiel o la infiel, lo cual no es recomendable) o darle una nueva oportunidad perdonándole. ¿Qué hacer? ¿Cómo hacerlo? ¿Qué es lo mejor para mis hijos? ¿Termino la relación? ¿Sigo en la relación? ¿Podré perdonar? ¿Si le perdono, lo hará de nuevo? ¿Por qué lo hizo? ¿Cómo lo hizo? Estas son algunas de las preguntas que pueden pasar por la mente de la persona engañada. El objetivo principal de este libro, es ayudarles en esta experiencia tan dolorosa y difícil, permitiéndoles entender mejor el proceso de duelo por el cual están pasando y la necesidad de calmarse y analizar bien las cosas antes de tomar una decisión, ya sea la decisión de perdonar al cónyuge infiel o de terminarla relación. Si la decisión es dar una nueva oportunidad a su cónyuge, encontrarán en estas páginas, todo el proceso necesario para hacerlo de la mejor forma. Recuerde, que una infidelidad no es un simple resfriado, es algo muy grave y debe ser trabajado si no quiere que esto se repita de nuevo. En los capítulos de este manual encontrarán el proceso que tanto el infiel como la persona engañada deben seguir para lograr restaurar la relación, quien fue infiel deberá comprometerse con ganarla credibilidad y el respeto, y la persona que fue engañada deberá enfocarse en el camino del perdón, al mismo tiempo los dos deberían construir una nueva relación trabajando todas aquellas cosas que no estaban resueltas o les distanciaba emocionalmente antes de la infidelidad. Si usted ya ha tomado la decisión de terminar su relación, le invitamos a leer con calma este libo y evaluar su decisión, si sigue firme en ella, le recomendamos que trabaje el capítulo del perdón, pues aunque usted no viva con esa persona, es necesario sanar su corazón y perdonarle, por su bien y el de sus hijos, si los hay. Si quien está leyendo este libro es la personainfiel, quizás significa que está verdaderamente arrepentido y quiere buscar la forma de cómo recuperar su relación de pareja, si este es su caso, este libro puede serle útil para caminar en el proceso de ganar la confianza de su esposa(o) si es que ella o él está dispuesto(a), este es un libro diseñado para trabajar en pareja. Hay capítulos que son para que los dos lo lean y trabajen juntos y otros son para desarrollar en forma individual con algunos ejercicios y tareas necesarias para trabajar en su propia vida y en la relación de pareja. Este manual termina con un pequeño capítulo acerca del proceso de la infidelidad y cómo prevenirla, algo muy importante para el futuro. El Problema de la Infidelidad en la Actualidad La infidelidad es un tema complejo y difícil de abordar que en la actualidad está tocando a la puerta de muchos hogares. No en vano se le considera como uno de los principales disociadores de la familia, las estadísticas acerca de este tema son alarmantes, estudios publicados en el 2008 en Journal of Couple & Relationship Therapy1muestran un aumento muy significativo en las estadísticas de infidelidad conyugal. Según esta revista, en 1998 un estudio de la Universidad de California reportaba que el 24% de los hombres y el 14% de las mujeres habían sido infieles, mientras que una década después, estas cifras habían tenido un salto alarmante; el 50% de las mujeres casadas y el 60% de los hombres casados habían tenido una relación extramarital. Uno de los factores que han influido en este aumento es el uso del internet y las redes sociales, en cada infidelidad podría estar involucrado un celular, algún correo electrónico o el Facebook, etc. En consulta es fácil constatar lo que las investigaciones confirman; el internet está siendo usado por muchos para coquetear y es el mejor lugar para reencontrarse con los ex mejores amigos(as), y ex novios(as) del pasado. Dando lugar a que se inicien conversaciones informales, luego vienen los encuentros para tomar un cafecito y el resto es historia. Para muchos el tener conversaciones sexuales en línea y sexo cibernético no es considerado como algo malo o que dañe la relación, pero la realidad es que sí hace daño; más allá de lo que muchos quieren admitir. Otra fuente o espacio de infidelidad actual es con los compañeros de trabajo, la cercanía diaria, las conversaciones y la familiaridad crean el ambiente propicio para todas aquellas y aquellos que no saben poner límites en sus relaciones y fácilmente se encuentran de la noche a la mañana en medio de una relación demasiado cercana con alguien. Algunos no saben cómo parar esto, otros encantados siguen caminando en esta dirección a pesar del peligro que esto representa. Unido a todo esto, también está la cultura “light” de nuestra época, esa necesidad que hoy existe de tener y solucionar todas las cosas rápidamente y si es sin sacrificio alguno, mucho mejor. Esta filosofía de vida es fatal para la vida en familia, pues todo matrimonio implica un alto grado de problemas y dificultades que requieren de trabajo y esfuerzo para ser resueltos, sin buscar un escape al problema. Ilusoriamente algunos piensan que una aventura puede ser la solución a una vida matrimonial que se ha vuelto rutinaria, monótona o problemática, muchos infieles ni siquiera tienen un matrimonio malo, pero nuestra época estimula “el tener siempre lo más nuevo”, no se puede estar sin el nuevo y más moderno Iphone, computador, Ipod, etc. y desafortunadamente muchos están trasladando este deseo de novedad y nuevas experiencias al nivel de las relaciones y esto es un grave error que puede costar muy caro, dañar la relación de pareja que hasta ese momento era estable y porque no decirlo; también agradable. Los efectos de la infidelidad en el matrimonio son devastadores, bien lo expresa un proverbio muy antiguo: “El que comete adulterio le faltan sesos; El que así actúa se destruye a sí mismo.” Proverbios 6:32 Podemos decir que la infidelidad es una “locura temporal”, pues el infiel pierde toda su cordura, esto trae consecuencias devastadoras para él, su cónyuge, hijos, familias políticas y en algunos casos hasta puede perder el trabajo o la vida. No en vano la infidelidad es reconocida y aceptada ante la ley y ante algunas religión es como causal de divorcio. Un estudio realizado en Cuba en el 20062 con médicos y enfermeras que atendían casos de violencia intrafamiliar resultó ser muy revelador en cuanto a las consecuencias negativas de la infidelidad, la investigación apuntaba a identificar los factores que facilitaban la violencia doméstica, entre estos factores se encontraron, el alcoholismo, los celos, la infidelidad, el bajo nivel económico y un bajo nivel educacional, pero lo sorprendente de este estudio es que el factor de mayor influencia era la infidelidad, seguida del alcoholismo y de los celos. Es cierto que este estudio es de un país específico, pero no deja de mostrar la gravedad del tema, la infidelidad trae muchas consecuencias negativas al engañado, al infiel o la infiel, a los hijos, a la economía del hogar, a veces, hasta las familias políticas se ven afectadas, es decir sus efectos son devastadores, nadie sale ileso. Aun así, hoy en día, más hombres y mujeres caen en la infidelidad, porque en la actualidad no sólo los hombres son infieles. En mi trabajo continuamente debo hacer terapia familiar a decenas de parejas que han vivido este dolor profundo de enfrentar la traición de su cónyuge. Si hago una estadística en base a las atenciones terapéuticas que he atendido durante el año 2011, puedo comentar que de cada diez casos de infidelidades, cuatro son de mujeres. He visto el dolor, la culpa, el arrepentimiento verdadero, también el arrepentimiento falso, los celos, la confianza y el respeto perdidos, las furias y demonios desatados, las luchas por perdonar y restaurar el hogar y, en muchos casos, no en todos, he visto y me he gozado con procesos de perdón genuinos, reconciliaciones y nuevos comienzos que han dado fruto en relaciones más honestas y felices. En algunos de los casos he visto como no es posible la reconciliación ni la restauración de la relación conyugal, pero sí es posible el perdón para lograr ser libres, sanar y brindar a los hijos la mayor estabilidad que sea posible en estos casos. 1. Atwood,J.D.andSchwarz,L.Thenewaffairtreatmentconsiderations.JournalofCoupleandRelationshipTherapy 2. Dr.ValleLlagosteraJGdelyotros.Sobreviolenciaintrafamiliarcontralamujer[artículoenlínea].MEDISAN2008;12(2). <http://bvs.sld.cu/revistas/san/vol12_2_08/san02208.htm>[consulta:fechadeacceso]. http://bvs.sld.cu/revistas/san/vol12_2_08/ CAPÍTULO I El proceso del duelo en la infidelidad Los momentos más duros de la vida, pueden transformarse en los más preciosos. Lo primero que se debe decir a aquellos que han vivido o están viviendo una infidelidad, es que esta no se resuelve sólo “perdonando y haciendo como que nada pasó”, o huyendo inmediatamente y acabando con todo lo que les une. NO, la infidelidad es algo que debe ser abordado y trabajado, y casi siempre se necesita de un tercero que ayude, no alguien de la familia, pues esto muchas veces complica más las cosas. Se requiere de alguien con experiencia que pueda abordar y valorar la situación, a la vez que les acompañe en el proceso de explorar los caminos a seguir, y si los afectados, así lo deciden, restaurar la relación. Necesitan de una guía para vivir el proceso de ganar la confianza, el respeto perdido y les anime a transitar el largo caminodel perdón. Este es el objetivo principal de este libro. En el siguiente gráfico se tratará de explicar un poco el proceso que ocurre a la hora de vivir una infidelidad: En la parte superior está el número uno que señala la relación de pareja que se ha tenido hasta el momento, siguiendo el círculo hacia la derecha se puede ver el paso dos, el momento en el que se descubre o, se declara la infidelidad. Lo primero que ocurre es lo que se muestra en el paso tres; la negación, es un golpe tan duro que al momento de suceder cuesta mucho creerlo, y es normal tener pensamientos como “no puede ser”, “esto no es verdad”, “dime que estoy equivocada (do)”, pero la realidad y las evidencias pesan más. Sigue el paso cuatro, el de la Ira y el enojo, esta es la zona que se puede denominar la “Zona de peligro”, porque en esta etapa se viven muchas emociones intensas y dolorosas y se corre el peligro de tomar decisiones apresuradas sin pensar, guiadas por el dolor y no por la razón. Lo que muchas veces ocurre en esta etapa es que la persona engañada toma uno de estos caminos equivocados, el primero puede ser terminar con todo inmediatamente, cegado(a) por la ira y el orgullo herido toma la decisión inmediata de cortar toda relación y empezar los trámites de divorcio casi al mismo tiempo. Esto puede ser muy comprensible en medio del dolor, pero es necesario considerar varias cosas antes de tomar esta decisión. El otro camino muy peligroso y bastante común en muchas infidelidades es el otorgar un “perdón muy rápido y falso” que no restaura la relación porque no trabaja el problema. Lo que suele suceder es que la persona engañada con todo su dolor y amargura, empieza a cobrar esa deuda emocional día a día y la relación se puede tornar un infierno. En otros casos el infiel no está arrepentido y con un perdón tan fácil lo único que se logra es alimentar su comodidad y las probabilidades de que vuelva a hacerlo, sin tomarse ni siquiera la molestia de preguntarse qué es lo que está mal en él o ella, y que debe cambiar en su vida y dentro de la relación. Por esto, estos dos caminos, el del perdón falso o el de terminar la relación inmediatamente no son lo más recomendados. Cuando una persona está en medio de una crisis no conviene tomar decisiones apresuradas ya que se puede equivocar. Lo mejor es calmarse e ir al paso cinco. El paso cinco es la negociación, que implica calmarse y pensar antes de actuar, evaluando el tipo de infidelidad, esto lo podrá ver en el capítulo siguiente. También hay que valorar cual es la actitud del infiel y si es o no la primera infidelidad. Es importante escuchar al otro y saber qué es lo que quiere hacer ahora que la infidelidad ha sido puesta al descubierto. La persona engañada deberá decidir si quiere o no dar esa oportunidad al infiel, pero antes le recomendamos leer detenidamente el capítulo siguiente que trata de los tipos de infidelidades, esta lectura quizás le ayude a orientar su decisión. Si ambas partes están de acuerdo en intentar restaurar la relación se llega al paso seis. El paso seis señala el proceso en el cual ambas partes deben ingresar; es un camino que deben emprender juntos, pero que requiere de lecturas separadas, pues cada uno tiene sus tareas y ejercicios personales. Algunos de estos ejercicios deberán ser realizados en pareja pero usted encontrará las instrucciones en su momento. El proceso del perdón para la persona engañada se encuentra en el Capítulo III, y el camino para la persona que ha sido infiel, es ganar la credibilidad y el respeto, esto se encuentra en el capítulo IV. De esta forma, cada uno viviendo su proceso irá poco a poco avanzando y luchando con sus propias dudas y pensamientos. Así se llega al paso siete del proceso; la lucha con los pensamientos, la depresión y quizás una vuelta atrás a la ira y el enojo, pero si ambas partes persisten en lo que quieren lograr con la meta de restaurar la relación, el engañado en dar el regalo del perdón y el infiel persiste en sembrar confianza, es muy posible que salgan adelante. Así podrán empezar a caminar juntos y terminar renovando la relación, permitiendo que esta sea más auténtica, cercana y madura. Puede pasar que en este recorrido, a pesar de intentar y persistir en todo el proceso, una de las partes no se siente listo(a) para retomar la relación, entonces es necesario el paso ocho, hacer de nuevo un alto para evaluar qué es lo que no está funcionando. Puede ser que la persona infiel realmente no está arrepentida y no muestra signos de querer hacerlo, ni cambia las cosas que deben ser cambiadas. También puede ocurrir que la persona que fue engañada por más que ha procesado toda la experiencia, sabe que la opción de vivir con esa persona después de la infidelidad sería para cobrarle el resto de su existencia, haciendo de su vida, la de él o ella un infierno, incluyendo a los hijos. Entonces quizás deba revalorar seriamente si vale la pena persistir, o si lo mejor es dejar ir al otro y vivir un proceso de perdón individual. Este es el proceso del duelo en una infidelidad, resumido brevemente. Pareciera ser algo que no es tan difícil, sin embargo es bueno decir la verdad en este momento, no es fácil elegir el camino de la recuperación, es decir, pasar a los pasos seis, siete y ocho, requiere de mucho valor, fuerza de voluntad y paciencia de ambas partes, pero si lo hacen y los dos quieren será una gran muestra de cuanto se valoran el uno al otro. Antes de tomar la decisión de restaurar la relación es bueno leer con calma el Capítulo II en el cual se aborda el tema de los diferentes tipos de infidelidades. Si después de eso deciden como pareja restaurar su relación, cada uno debe en forma individual ir al capítulo que le corresponde, tal como ya hemos mencionado antes, si Ud. ha sido la persona engañada vaya al Capítulo III, y si usted ha sido el o la infiel puede ir al Capítulo IV. Mitos acerca de la infidelidad He aquí algunos de los mitos que existen acerca de la infidelidad y que de alguna manera la promueven y en muchos casos la oculta. MITO 1: Todos los matrimonios viven una infidelidad en algún momento de su vida. Las personas que viven una infidelidad muchas veces encuentran consuelo al pensar que “todos lo hacen”, quizás muchos de ellos crecieron en hogares donde la infidelidad era algo común. Sin embargo, no todo el mundo es infiel, muchas de las parejas que toman una terapia lo hacen porque están buscando ayuda por algunos problemas con los hijos, suegros, dinero o con sus relaciones sexuales. Muchas parejas hoy día prefieren hablar y reclamar sobre su vida sexual que irse con otra(o). La fidelidad es posible, sigue siendo un valor apreciado y como se verá más adelante se puede prevenir caer en esta locura de la infidelidad. MITO 2: Una aventura sexual ocasional no es tan grave. Quienes piensan que este mito es verdad creen poder hacerlo sin que nadie se entere, o tienen una idea equivocada de lo que es la sexualidad y el compromiso dentro de una relación. El acto sexual no solo involucra el cuerpo, sino que también involucra la mente y el espíritu y, todo esto se integra y entiende mejor en el contexto del matrimonio. Como dice un dicho popular “todo se sabe”, una infidelidad arriesga todo lo construido en pareja, pues la confianza se rompe y nunca se puede saber cuál será la reacción de la persona engañada. Las aventuras amorosas causan mucho daño, el matrimonio puede recuperarse de ellas, pero a costa de arduosesfuerzos y sufrimientos. MITO 3: Una traición es la prueba de que ya no hay amor en el matrimonio. Esta es una queja muy comprensible de quien ha sido engañado(a) y la conclusión es “no me ama, por esto lo hizo”. Aún si esto fuera verdad, una infidelidad es la manera más complicada y absurda que el infiel puede elegir para hacerle saber a su cónyuge que ya no le ama. En consulta se ven muchos infieles arrepentidos de lo que han hecho y reconocen que es “una locura” y, que además ahora les puede costar el amor de su vida. Para entender esto es necesario aclarar lo que es el amor. Una infidelidad tiende más a ser un enamoramiento que un amor verdadero y está comprobado que el enamoramiento tiene más relación con los químicos del cerebro que con el amor, pues el verdadero amor involucra no solo los sentimientos sino también una decisión y compromiso. Esto también se analizará más a profundidad en el próximo capítulo. MITO 4: “El otro o la otra” debe ser más sexy o guapa que el cónyuge engañado. Las razones por las cuales se escoge al compañero de infidelidad son muy variadas, pero casi siempre se tiende a pensar que es por sus características sexuales. De ahí que quien ha sido engañado se empeña en saber detalles sobre las relaciones sexuales de los amantes lo que le conduce a vivir un infierno. En consulta es común comprobar que el sexo no es el principal motor para la infidelidad, en muchos casos es la búsqueda de lo que no se tiene en casa: intimidad emocional en el caso de las mujeres, y en los hombres el sentido de aprecio, valoración o admiración de una mujer. Quizás una de las características más importante de los compañeros de aventura es su disponibilidad inmediata a estar “ahí presentes” cuando se les necesita. Es por esto que no se puede centrar la atención sólo en lo sexual. Si ha experimentado una infidelidad debe ver más allá de su vida íntima con su cónyuge y evitar culpar al engañado por la infidelidad, lo cual nos introduce en el siguiente mito. MITO 5: Culpar al engañado por la infidelidad “Algo hace o no hace para que el otro tenga que buscar afuera” El mal de culpar está arraigado en el ser humano profundamente. La conocida historia de Adán y Eva en el paraíso después de pecar nos recuerda este hecho. Cuando Dios le reclama a Adán su falla, él se lava sus manos diciendo “La mujer que tú me diste me dio de comer”. Si bien es cierto que en muchos matrimonios las cosas no andaban muy bien antes de la infidelidad, esto no es una justificación para ir en busca de otro, el engañado también vive los problemas que hay en la pareja, pero no decide ser infiel. Entonces se puede afirmar que nadie obliga a nadie a ser infiel, la infidelidad es una decisión, pues siempre hay otras alternativas para solucionar cualquier problema que exista en la pareja. Por esto le diría a la persona engañada: usted no es culpable de la decisión que su cónyuge tomó, pero si es responsable de cambiar todo aquello de su carácter o actitudes que le han alejado de su pareja antes de que la infidelidad ocurriera. También diría a la persona infiel: usted es responsable 100% de su decisión de ser infiel, puede tratar de disculparse intentando culpar a su cónyuge, pero créalo, esto no le ayudará en nada, solo logrará que él o ella se enoje más. Cuando usted pueda aceptar su responsabilidad, usted podrá tener el control para decidir no hacerlo más. Es también un mito, creer que el matrimonio era de lo peor y por esto el infiel decidió serlo, esto no es siempre cierto, muchos matrimonios estaban marchando razonablemente bien, pero eventualmente ocurre por primera vez una infidelidad. Esta “primera infidelidad” tiene sus características particulares las cuales serán vistas más adelante en los tipos de infidelidades. MITO 6: “Lo mejor es hacer de cuenta como que nada pasó”. Muchas parejas, van a una terapia familiar después de 20 o 25 años de matrimonio con grandes problemas acumulados. Al abordar su historia, se puede encontrar en su pasado, una o varias infidelidades no trabajadas o resueltas a la ligera; frecuentemente la gente dice: “es que yo le perdoné” o simplemente “me hice como que nada pasaba cuando me era infiel hasta que se le pasaba la locura”. Nada más equivocado, pues una infidelidad no es como un resfriado que se cura fácilmente con limonada caliente. Se trata de algo que lastima el corazón, crea heridas y dolor, no solo físico sino también espiritual, es decir un “dolor del alma”. Así es como muchos se sienten después del engaño. La infidelidad genera una deuda muy grande, desata los sentimientos más poderosos de ira, dolor, venganza, tristeza, y además lacera la confianza y el respeto. ¿Cómo tapar algo así solo dejándolo pasar? Toda infidelidad debe ser trabajada. Hay tres caminos largos y dolorosos que recorrer: el camino del perdón verdadero, el de ganar la confianza y el de cambiar lo que estaba mal antes de la infidelidad. Si esto no se da, lo que pueden empezar a vivir como pareja es una relación más distante llena de ira escondida, reclamos, venganzas sutiles y quizás una nueva infidelidad. Este libro tratará de dar una guía para los que quieren recorrer un camino de restauración y perdón. MITO 7: Toda infidelidad tiene que terminar en divorcio. Es verdad que la infidelidad sacude fuertemente al matrimonio, también es un hecho que no toda infidelidad termina en divorcio como algo inevitable. Muchas parejas salen a flote y navegan por mares más tranquilos, apacibles y amorosos después de haber superado una infidelidad. Por supuesto, esto tiene un costo que debe ser pagado por ambos cónyuges, pues el requisito para poder salir adelante es que ambos lo quieran, y se comprometan a hacer su parte en la restauración, que quieran su hogar, deseen permanecer al lado del otro y trabajar una mejor relación. Si alguno de los cónyuges, ya sea el infiel o el engañado no quieren seguir adelante, podría ser que lo más sano sea desistir de vivir juntos, pues podrían empezar a vivir el mito seis y experimentar un infierno por “los hijos”, por “el qué dirán”, por “el miedo a estar solo o sola”, por “la culpa”, por “el dinero”, por “la venganza”, etc. Entonces, después de revisar los mitos, es bueno hacer algunas afirmaciones acerca de la infidelidad mencionadas por un terapeuta acerca de este tema. (Pittman, 1987). · La infidelidad no es una conducta normal, sino el síntoma de algún problema, esto nos recuerda que no solo hay que trabajar la infidelidad sino todo aquello que antes de la infidelidad era un problema en la relación de pareja y especialmente en la vida personal del infiel. · Las aventuras son peligrosas; pueden arruinar el matrimonio de manera fácil e involuntaria, vivir una experiencia de estas sin aprender nada de ella es todo un desperdicio de sufrimiento, los matrimonios que sobreviven a la infidelidad saben lo que esto significa, es por esta razón que es importante conocer bien el proceso de la infidelidad y cómo prevenirla, esto será en el último capítulo del libro. · Las aventuras pueden ocurrir en matrimonios que hasta ese momento, han sido buenos, no siempre una infidelidad tiene que estar asociada a un matrimonio desastroso, la decisión es del que ha sido infiel en un 100% y esto debe ser tenido en cuenta durante todo el proceso, si por el contrario el matrimonio ha estado en medio de una crisis y a esto el infiel le aumenta una más, también es su responsabilidad, pues siempre hay más alternativas a elegir en vez de una aventura amorosa. · Las aventuras implican una relación sexual,pero esta no es su finalidad habitual, lo normal es pensar en la relación sexual como el fin, pero no siempre es así, alguien puede terminar involucrado más por una necesidad de aprobación, reconocimiento, por un ego elevado, por una carencia afectiva o un síndrome de salvador o salvadora, quedarse en lo físico muchas veces no resuelve el problema, es muy importante que la pareja evalúe cual es la “causa” de la infidelidad, entendiendo la palabra causa no como justificación de la infidelidad, sino como algo que señala una luz roja, algo que debe ser trabajado por la pareja. Recuérdese esto constantemente “Nadie puede obligar a nadie a ser infiel”. CAPITULO II Tipos de infidelidades Ser infiel como ser fiel es una decisión que se toma antes de serlo En este capítulo se verán los tipos de infidelidades. Hay muchas formas de clasificarlas, pero en este caso se ha elegido agruparles en cinco; las infidelidades accidentales, las aventuras románticas, las aventuras recurrentes, las infidelidades con consecuencias extras y las infidelidades cibernéticas o emocionales. Es muy importante hacer un análisis de cada uno de estos casos para que la persona que ha sido engañada pueda ver un poco a lo que se enfrenta y tome una decisión de lo que quiere hacer en cuanto a su relación con su cónyuge. Para la persona que ha sido infiel este capítulo puede serle muy útil si lo lee pensando en sí mismo, e identificando cuál es su caso. Si ambos cónyuges deciden darse una oportunidad para restaurar su relación, entonces ambas partes podrán entrar conscientemente en el proceso. La infidelidad accidental Al hablar de infidelidad accidental se hace referencia a la primera infidelidad. La mayoría de las personas no buscan ser infieles; al menos no la primera vez, esto es importante tenerlo claro. Cuando se habla de infidelidad accidental no se está diciendo que él o la infiel no son responsables de lo que han hecho. Lo que se quiere decir con esto es que la infidelidad no es algo habitual en la persona, “no es parte de su conducta”. Es como si estuviera un poco loco. En una primera infidelidad la persona no sabe en lo que se está metiendo; no es cien por ciento consciente del peligro que corre y de las consecuencias para él y su familia. Por lo regular el o la infiel no está enamorado de su compañera(o) de aventura, pero puede ocurrir que en medio de la locura de la infidelidad él o ella crean que lo está, y atribuya su infidelidad a un matrimonio desdichado, pero esto no es necesariamente cierto como se verá en el tema de las aventuras románticas. Allí se aclarará más este punto del enamoramiento y del amor. El infiel en esta categoría; después de que pasa esta locura temporal, o ha sido descubierto, se siente muy mal y muy avergonzado de lo que ha hecho. Por lo general no quiere abandonar su matrimonio, aunque esté atravesando alguna crisis, lo que es muy normal en todos los matrimonios, o quizás su relación conyugal sea algo tediosa o frustrante pero nunca al extremo de querer escapar o terminar con su matrimonio. En este tipo de infidelidad la persona puede ser un gran padre o madre e incluso un amoroso esposo o esposa antes de que llegara esa tercera persona, es decir, son personas normales y buenas. No son seres malvados, ni egoístas o pervertidos. Son personas que quizás cayeron en la infidelidad por ser demasiado curiosos(as), corteses, amables, complacientes o que estando en medio de una distancia emocional con su cónyuge, y en vez de buscar la solución en casa eligieron el camino más fácil (pero más doloroso): dejarse seducir o seducir a otra persona. Figura 1 Todas las personas o al menos la mayoría, se casan con la ilusión de ser felices, construir un lindo hogar, quizás el hogar que no se tuvo en su propia infancia. Se sueña en compartir y disfrutar una vida juntos. Es decir, que nadie en sus cabales se casa con la intención de dañar al otro o ser infeliz. Cuando se inicia el matrimonio, dos personas empiezan a recorrer un mismo camino, con subidas y bajadas como la Figura 1 lo representa. En el lado izquierdo se pude ver a esa pareja que emprende su proyecto de vida; al inicio son sólo dos, pero en el camino se hacen tres o cuatro con la llegada de los hijos. En ese camino hay momentos lindos de mucha alegría y entusiasmo pero también hay otros de angustia o dolor, pues cada etapa de la vida es una crisis que implica cambios y reacomodos; pueden venir tiempos de prosperidad y de adversidad, enfermedades, problemas económicos, pero la meta es vivirlos en familia. El sueño de la mayoría es seguir luchando y terminar al final del camino siendo dos, pues los hijos un día parten del nido y quienes quedan son los mismos que iniciaron ese recorrido tiempo atrás. Es importante ser unos buenos padres pero aún es más importante haber cultivado la relación de pareja a lo largo de ese camino. Una tentación frecuente en la vida conyugal es que cuando llegan los hijos se vive en función de ellos y se descuida la relación de pareja. Para llegar juntos al final del camino, es necesario mantener una relación de pareja viva, con una buena comunicación, actividades compartidas y con mucho amor y respeto. La Figura 2 trata de explicar lo que ocurre a lo largo de la relación de pareja3 Figura 2 Los dos corazones del lado izquierdo representan esas dos personas que han decidió unir sus vidas. Como toda pareja, es normal tener problemas y distanciarse un poco como lo indica el número uno, y también lo más sano y normal es resolver los conflictos y estar de nuevo juntos en armonía hasta que surge una nueva dificultad señalada por el punto dos y así sucesivamente. A veces se tiene la expectativa de que todo debe marchar sin problemas y tener el hogar perfecto. Esto es una fantasía que no tiene nada que ver con la realidad, pues en todos los hogares hay conflictos y dificultades y es bueno internalizar bien esta idea. El problema real está en que muchas veces aparecen las diferencias o dificultades y no se resuelven, ya que en vez de hablar y solucionar los problemas, se dejan ir acumulando más y más sin resolver. Ya sea porque se callan, se ignoran o se “resuelven” a través de gritos y más peleas. Entonces, lo que ocurre es que la distancia emocional empieza a echar raíces en la relación. El punto 3 y 4 señalan esta realidad; en vez de acercarse mutuamente para solucionar las diferencias, la pareja cada día está más distante el uno del otro, viven juntos, duermen juntos pero la comunicación puede ser pobre. Se hablan solo lo necesario, no hay ese trato amable y respetuoso, y puede haber muchos silencios, reclamos o quejas. Muchos son los problemas que a veces se dejan sin resolver desde el principio de la relación; desde el asunto del dinero, o problemas con los suegros o suegras, la intimidad sexual, los quehaceres de la casa, la disciplina de los hijos, el mal carácter de uno u otro, etc. Cuando estas cosas no se resuelven a tiempo, un día la pareja se encuentra en los puntos 3 y 4 del esquema, con una distancia emocional muy grande entre ellos, y es allí donde la relación ya está en peligro, pues en algún momento puede aparecer una persona que resulta atractiva, mas dispuesta o dispuesto para hablar, escuchar, sonreír, ser más amable y cariñosa o más atenta y servicial, etc. Es aquí donde puede ocurrir que él o ella sin mucha conciencia del hecho, resulte en medio de una cercanía emocional con otra persona, si esto sigue así, es muy probable terminar en una infidelidad sexual. Así que mirando atrás, la infidelidad no es el únicoproblema que tiene esta pareja, esta es solo un síntoma. Quizás es el más grave y urgente, pero hay más cosas que tienen que resolver y trabajar si quieren restaurar su relación. Si ha ocurrido esta primera infidelidad, la pareja debe decidir qué hacer luego de responder algunas preguntas: ¿Hay un verdadero arrepentimiento del que fue infiel? ¿La persona engañada valora tanto su matrimonio y está dispuesta a perdonar?, ¿Ambos quieren restaurar su relación y resolver no solo la infidelidad sino todo aquello que les separaba emocionalmente? Si ambas partes lo quieren hacer se puede lograr una restauración de la relación, acortar esa distancia emocional y empezar a caminar juntos. Pero esto requiere de un proceso largo y difícil. Por lo tanto, abordar la primera infidelidad es vital. En consulta es común encontrar parejas con 15 o 20 años de matrimonio con más de una infidelidad, algunas en los primeros años de matrimonio, pero cuando se investiga qué hicieron cuando pasó la primera vez y se les pregunta ¿Cómo lo abordaron? la respuesta más común es: “bueno le perdoné y seguimos adelante”. La mayoría lo hace sin buscar ayuda para trabajar el tema del perdón y como recuperar la confianza. Una infidelidad es algo muy serio que afecta mucho la vida de pareja y debe ser tratado y trabajado a profundidad. Como ya se ha dicho, son dos los caminos a seguir. El que ha sido infiel y quiere restaurar su relación debe comprometerse en ganar el respeto y la credibilidad del otro mientras el engañado o la engañada debe entrar en el proceso de perdonar. Al mismo tiempo los dos deben trabajar en todo aquello que les separaba emocionalmente antes de la infidelidad. Si la primera infidelidad se trabaja bien, puede generar un matrimonio mucho más sano, que sabe enfrentar sus problemas de una forma más adecuada. Las reconciliaciones y restauraciones son posibles si ambas partes la quieren y trabajan duro en los siguientes aspectos: EL o LA INFIEL EL o LAENGAÑADA (O) Arrepentimiento verdadero. Renunciar a la relación extramarital y todo aquello que le conecte con esa persona. Compromiso con la verdad Decisión y compromiso a entrar en el proceso del perdón verdadero. Compromiso a cambiar hábitos y actitudes que le distancian de su cónyuge. Compromiso a c a m b i a r hábitos y actitudes que le distancian de su cónyuge. Decisión de ganar la confianza y el respeto. Colaborar en la recuperación emocional de su cónyuge. Colaborar en su propia recuperación, asumiendo un papel activo y luchar por no quedar atrapada(o) en un rol de víctima. La aventura romántica En este tipo de infidelidad la persona infiel está bastante confundida, pues vive la locura temporal del enamoramiento y este, la mayoría de las veces tiene poca relación con el amor auténtico. Es algo más relacionado con el romance o el enamoramiento, por esto es necesario explorar un poco el tema del amor. La Dra. Helen Fisher4, antropóloga, se ha dedicado a estudiar por varios años a personas locamente enamoradas y sus descubrimientos son muy interesantes, lo que ella ha corroborado es quizás algo que el sentido común sugiere; el amor y el enamoramiento son dos cosas muy diferentes. Al estudiar a las personas locamente enamoradas se puede observar que una parte del cerebro, aquella parte relacionada con la recompensa y el placer se activa solo con pensar en el ser amado y libera varias sustancias químicas que generan estados emocionales alterados. Uno de estos químicos es la dopamina, un neurotransmisor que está asociado al placer y a las adicciones. En las cantidades correctas la dopamina produce energía intensa y mucho entusiasmo, es por esto que en la etapa de enamoramiento dos personas difícilmente se cansan de hablar y estar juntas. Es en esta etapa que es posible hacer todo por el otro y fácilmente se renuncia a muchas cosas con tal de agradarle. Se pueden viajar largas distancias tan sólo para ver al ser amado o pasar todo un día caminando juntos, y hasta permanecer despiertos toda una noche hablando por teléfono. En esta etapa las personas tienden a no ver ningún defecto en el otro, pues todo les parece perfecto e ideal. Esto ocurre porque las áreas encargadas de realizar los juicios sociales, como ver lo malo de la otra persona también están afectadas en este período. Así que se puede decir que en verdad el “amor es ciego” o mejor dicho “el enamoramiento es ciego”. Otro químico involucrado en el enamoramiento es la serotonina, lo interesante de ésta es que fue encontrada en un 40% menos en las personas locamente enamoradas y en los que sufren de un trastorno emocional llamado TOC (Trastorno Obsesivo compulsivo). Todo esto llevó a los científicos a comparar el estado de locamente enamorado con un trastorno mental, es decir que cuando alguien está enamorado también está “un poco loco”. Así que gracias a Dios el estado de “locamente enamorado” termina luego de un tiempo, ya que el cerebro no aguantaría por mucho tiempo este desequilibrio químico. Si el enamoramiento no terminara “todos estaríamos enfermos de alguna forma”. Lo cierto es que este estado termina en algún momento dentro del matrimonio y aún dentro de una infidelidad. Por esto, cuando el enamoramiento se acaba las dos personas empiezan a darse cuenta de cosas que antes no veían y empiezan a percibir con más claridad los defectos y malos hábitos que antes parecían no existir. Muchos matrimonios al experimentar el declive del enamoramiento, tienden a pensar que el amor se acabó y que no queda nada entre ellos, entran en crisis y muchos pueden hasta divorciarse en esta etapa. Toda esta forma de pensar es una idea errada y muy occidental acerca del amor, y esto se analizará más adelante. En el caso de las infidelidades románticas, después de que el infiel pasa esta etapa de “locamente enamorado”, termina estrellándose con la realidad de que esa otra persona tan ideal ya no lo es tanto; las emociones ya no son tan fuertes y pueden empezar las peleas y reclamos. Es común que muchos infieles, exceptuando a los infieles recurrentes, después de vivir su aventura se dan cuenta del grave error que han cometido y de todo lo que pueden perder o han perdido, entonces quieren regresar con su esposa o esposo y es allí donde ambos tienen que valorar lo que quieren hacer. Se deben contestar muy honestamente las siguientes preguntas: ¿Está realmente arrepentido el infiel?¿Quiere en verdad reconstruir su hogar? ¿Puede la persona engañada lidiar con el tema del enamoramiento del otro? ¿Puede perdonarle esta locura? ¿Cuánto duró esta relación y que consecuencias ha traído? Todas estas cosas deben ser valoradas por los dos, pero antes de continuar con el tema de la infidelidad romántica es importante profundizar sobre otra cuestión, qué es el amor y en qué se diferencia del enamoramiento, tanto el infiel como el engañado deben tomar conciencia de esto si quieren restaurar su relación después de la infidelidad, deben aprender a amarse, respetarse y construir algo mucho más sólido que se fundamenta en una decisión. Para profundizar en el tema del amor es necesario tomar distancia del concepto de amor que se tiene en occidente, para esto vamos a ir a un idioma muy antiguo, el griego en el cual fue escrito parte de la Biblia, porque en este idioma existen muchos verbos para traducir la palabra amor como nosotros la conocemos. Los griegos tenían más de diez verbos para el amor. Uno de estos es el “erao” (εραω) que es un amor erótico. De esta raíz proviene la palabra erótico y se refiere al amor pasional o sexual. Luego está el “fileo”(φιλεω) que es un amor sentimental y tiene que ver con las emociones, es el deseo de estar con el otro y disfrutar de él o ella. Si observamos bien éstas definiciones se puede decir que estas coinciden con el amor romántico de occidente, o enamoramiento, pues cuando dos personas sienten todo esto es cuando afirman amar al otro y dicen; “estoy profundamente enamorado de él o ella”, sin embargo, el problema con estos dos amores es que dependen de las circunstancias y de los sentimientos, es decir, son variables o inestables. Son como una onda que sube y baja, si estas circunstancias son favorables, puede estar en su nivel más alto, pero cuando vienen las enfermedades, problemas y crisis pueden llegar a tocar fondo, es en ese momento cuando las personas piensan que el amor se acabó. Pero en el griego existe otro verbo para amar, el agapao (αγαπαω), y éste es muy distinto al amor eros y filos, este amor no depende de las circunstancias ni de las emociones, es un amor que involucra la voluntad. Según Bonilla, en griego este verbo está compuesto por dos raíces αγ (ag) que significa YO y el απαω (apao) que significa MUERO(2002, p. 8), así que este amor conlleva el significado de “sacrificar al yo”, “desacomodar el yo”, “dejar de ser” por el bien del otro, por esto es que es también conocido como el amor de Dios. Este amor es estable, no varía, no es como una onda que sube y baja. Podemos decir que es un amor que permanece en el tiempo porque depende de una decisión y de la voluntad de la persona. Lo interesante es que en el griego del Nuevo Testamento, esta clase de amor es la que se pide a los esposos que deben tener hacia sus esposas. Lograr tener el amor ágape en la relación de pareja es pues, tener un amor más estable que involucra la decisión de compartir la vida con alguien, y ser capaz de morir a todo aquello que hace daño a la relación. Implica cambiar todo aquello del carácter o actitudes que dañan al otro, conlleva morir al egoísmo y al deseo de la satisfacción personal a costa de la de los demás, es desacomodarse para dar al otro bienestar y valor. Cuando esto está presente en una relación y es bilateral, el amor ágape hace que el amor eros y filos se mantenga o renazcan para que permanezcan en el tiempo. Como lo muestra la siguiente pirámide, todos estos amores deben estar presentes en el matrimonio, pero el que está en la base – agapao - es el más importante porque es el que sostiene a los otros dos. En la película clásica “El violinista en el tejado”, ambientada al inicio del siglo XX y en una pequeña comunidad judía en Rusia, se describe muy bien este amor. Hay una escena muy particular en la que se narra el diálogo de un esposo con su esposa, después de 25 años de matrimonio. Él le pregunta a ella si lo ama, ella se siente sorprendida e incómoda con la pregunta y evade dar una respuesta, él insiste y ella le responde evasivamente argumentándole que los años convividos y las experiencias buenas y malas compartidas son la evidencia del amor. Él le recuerda a ella que se conocieron el día de la boda y que ambos estaban nerviosos y asustados, pero sus padres les dieron un consejo ese día:“que aprendieran a amarse”. Este es un concepto difícil de entender desde la perspectiva occidental, pues está muy interiorizado que el amor es algo que se siente, no que se aprende. El amor ágape es el amor que se aprende, se cultiva y se disfruta porque alimenta a los otros amores: la pasión y el sentimiento. Todo matrimonio que quiere permanecer en el tiempo debe tener presente este amor, debe cultivarlo y estar conscientes de que ambos cónyuges se han elegido libremente. Es una decisión permanecer juntos y construir mutuamente una vida con amor, respeto y valoración. Cuando una infidelidad o aventura romántica es descubierta pueden pasar muchas cosas; una es que el infiel o la infiel declare su “amor” por el otro(a) y se vaya de casa, pero cuando se le pase la etapa de “locamente enamorado”, la mayoría quieren regresar con su cónyuge y restaurar la relación. Como se dijo antes, pueden estar realmente arrepentidos de lo que han hecho y harían cualquier cosa por restaurar su matrimonio y recuperar el amor de su cónyuge. En estos casos si la persona engañada está dispuesta a darle una oportunidad, debe evaluar si puede perdonar y distinguir entre el enamoramiento y el amor autentico que pueden construir juntos. Si da esta oportunidad se requiere de todos los pasos que fueron ya descritos en la infidelidad accidental y que veremos más adelante en todo su proceso. Si la persona infiel no muestra arrepentimiento es probable que se quede con la persona con la que fue infiel y quizás más adelante repita la misma historia con otra persona que toque a su corazón y le “haga sentir que su corazón palpita de nuevo por el amor”. Muchas personas piensan y viven así, creyendo solo en el enamoramiento y no en el amor verdadero. Si este es el caso, difícilmente se pude lograr una reconciliación, pues estas personas andan buscando algo que no existe. Quizás tienen una adicción a los químicos que el enamoramiento produce, pero como ya se explicó, este siempre llega a su fin. Como dice el dicho popular:“las vacas siempre ven el pasto más verde del otro lado de la cerca”. El problema es que cuando están del otro lado ven lo mismo y desean regresar o irse para otro lado, esto es muestra de inmadurez y egoísmo, así que quien convive con una persona así, debe pensar muy bien si esto es lo que desea para el resto de su vida. Sugerimos a la pareja hacer juntos el siguiente ejercicio, que les ayudará a valorar como están en relación de su amor: De uno a diez califique estos amores en su matrimonio, siendo 1 muy mal y 10 muy bien. ¿Qué pueden ver al hacer este ejercicio? Quizás el “eros” y el “filos” estén en niveles muy bajos, pero el que realmente cuenta en el deseo de restaurar la relación es el “ágape”. Recuerde el amor ágape es la decisión de permanecer con esa persona y luchar por construir una buena y sana relación y para aprender a amarla o amarlo, cambiando todo lo que tienen que cambiar y muriendo a todo lo que tengan que morir por el bien del otro y de su hogar. El valor que ambos le den determina la posibilidad de la restauración. Si el resultado en el ágape, está entre el 6 y el 10, está mostrando que tiene el deseo y la decisión de trabajar duro por reconstruir la relación. Las infidelidades recurrentes Estas quizás son las más difíciles y complicadas pues han pasado más de una vez, casi siempre sin un proceso de restauración. Lo que ha ocurrido es que el engañado o engañada ha dado su “perdón y olvido” del incidente sin trabajar en él, luego ocurre una vez tras otra, y lo más seguro es que no se ha trabajado la primera infidelidad, ni la segunda, ni la tercera. Así se pueden encontrar parejas en terapia familiar con 20 años de casados pero llenos de resentimientos, enojos y enfrentando una infidelidad más. Aquí tenemos una gran luz roja que nos indica peligro, pues estos infieles son conquistadores empedernidos y generalmente son hombres, pocas mujeres son infieles recurrentes pero siempre es posible encontrar algunos casos de mujeres que traicionan reiteradamente a sus cónyuges. Los infieles recurrentes pueden creer que es una locura desperdiciar una oportunidad cuando hay una persona disponible y que gusta de ellos. También pueden necesitar el ser conquistadores para alimentar su ego y su autoestima. Generalmente las emociones no están involucradas en estas infidelidades, pues lo que importa es lograr la satisfacción de conquistar o serconquistado y el placer de la relación sexual. Se puede decir que estamos ante un comportamiento cien por ciento machista, pues conquistar es un hábito; algo de machos. Estos infieles tienen la necesidad de sentir que son ellos los que dominan la relación de pareja y por esto no les parece en nada raro que su esposa deba aguantar estas infidelidades recurrentes. Algunos pueden hasta sentirse sorprendidos de que sus esposas les reclamen su estilo de vida, pues piensan que “todos los hombres lo hacen”. Según ellos, dejar de ser infieles para estos amantes recurrentes es como someterse a la voluntad de una mujer, y esto resulta ser algo inaceptable desde sus perspectivas machistas. Otros conquistadores recurrentes pueden ser menos descarados en su forma de pensar, quizás pueden mostrarse arrepentidos después de ser “pillados” y prometer el cielo y la tierra, jurando no volverlo a hacer nunca más. Es posible que muchos de ellos en verdad no desean hacerlo más, pero sus convicciones e ideas frente a la fidelidad son muy frágiles como para lograr un cambio, además han aprendido de su esposa que es fácil obtener el perdón y el olvido, al menos hasta la próxima infidelidad. Es muy difícil que un conquistador cambie, pues el arrepentimiento no es algo serio en ellos, es percibido más como un dolor por haber sido descubiertos y todo el malestar que esto le implica a él más que a su esposa e hijos. La mayoría no son conscientes del dolor que causan o lo ignoran con gran facilidad. Es por esto que en estos casos hay que hablar de una luz roja, pues un conquistador está acostumbrado a ser perdonado fácilmente y seguir adelante. Se puede decir que en estos casos hay una responsabilidad compartida con el cónyuge engañado, pues éste no ha podido poner un alto, ni límites sanos cuando perdonó por primera vez, la mayoría de las veces el conquistador empedernido no valora ni aprecia un perdón otorgado tan fácilmente. En estos casos, la esperanza de cambio existe más en la persona engañada que en el infiel, ya que es esta quien debe tomar decisiones muy serias y radicales si no quiere seguir más en este patrón de vida que involucra las infidelidades recurrentes; debe ponerse firme y decir ¡basta, ya no más! Al hacer esto, hay dos posibilidades para las cuales la persona engañada debe estar bien preparada. La primera opción no es tan buena, puede ocurrir que el infiel se vaya y le deje argumentando que está cansado de que usted sea una loca celosa y controladora. Esta posibilidad es quizás una de las más altas; pero si usted está firme y en verdad está cansada(o) de esta vida debe prepararse para planificar su vida sola o solo, dejarle ir a vivir sus aventuras sin fin y que sea otra u otro el que aguante este sufrimiento. Una segunda opción, más escasa, es que la persona infiel al ver la firmeza de su cónyuge y todo lo que puede perder, decida revalorar su vida y cambiar. Quizás se vaya de casa pero regrese arrepentido, pero quizás esto lo ha hecho muchas veces antes ¿Cómo creerle? El error de la mayoría de las mujeres es recibirles inmediatamente, dejándose convencer con sus lindas palabras (recuerde que un conquistador sabe que decir) pero usted debe tener claro que regresar con él sin comprobar su cambio es un grave error. El infiel debe primero ir a buscar ayuda, él tiene un problema grave, podemos decir que necesita de algo así como “infieles anónimos” para vencer su adicción a las conquistas o relaciones extramaritales. Una persona así debe indagar qué es lo que en su forma de pensar está mal y debe ser cambiado urgentemente, sin embargo, se requiere de alguien que le ayude, así que este tipo de personas deben ir con un consejero, psicólogo o terapeuta familiar para poder cambiar sus hábitos, formas de pensar y actuar, reconocerse a sí mismo e identificar cuáles son los valores y prioridades que rigen su vida. Las personas infieles recurrentes tienen mucho que perder cuando deciden cambiar su patrón de vida. Para que la transformación sea posible, ellos deben cambiar de amigos, lugares frecuentados y situaciones que los hacen vulnerables, es por esto que muchos de ellos no están dispuestos a cambiar. Estos conquistadores necesitan urgentemente de una persona a quien rendirle cuentas, a quien llamar cuando la tentación de la infidelidad les acecha. Esta debe ser una persona madura que le conozca y le respete, pero que también sea firme con él en esto de la infidelidad y que no comparta su idea de que ser infiel es normal. Necesita de alguien que tenga en gran estima la fidelidad y le pueda animar a seguir adelante en dejar sus malos hábitos. Puede ser un amigo, quizás una persona cristiana que ha dejado este estilo de vida. En consultas terapéuticas se ha podido ver que funciona muy bien la idea de “un mentor o hermano mayor”. Cuando una esposa(o) de un(a) infiel recurrente decide decir no más, debe estar consciente de lo que puede pasar, y preguntarse si está preparada(o) para ello. Lo más seguro es que usted como cónyuge engañado necesita también ayuda terapéutica, pues hay que trabajar su problema de límites: ¿Por qué no ha podido decir basta a esta relación dañina? ¿Qué es lo que le impide vivir su vida y valorarse más? Se sugiere meditar en el siguiente poema: “El amor que tú sientes por mí, depende totalmente del amor que yo siento por mí”5 ¿Cómo interpreta usted este poema? Lo que esta persona quiere decir es que los otros nos aman, valoran y respetan en la medida que nosotros nos amamos, valoramos y respetamos; por decir algo, en una escala de uno a cien; ¿Cuánto se ama, valora y respeta usted misma(o)? teniendo en mente que amarse y valorarse implica cuidarse, tratarse bien, y no permitir que otros nos hagan daño, maltraten o insulten. Sentirse bien consigo mismo(a)y ser capaz de hacer las cosas bien. Si usted se autoevalúa en esta escala y dice, bueno yo creo que me amo un diez, es probable que su esposo le amará en esa medida también, si alguien dice yo me valoro en un noventa, es probable que su cónyuge también lo hará a ese nivel. “Lo que experimentamos y creemos de nosotros mismos influye en como los otros nos ven o tratan”. Si su cónyuge le ha sido infiel reiteradamente usted es parte del problema. Tal vez, usted no puede decir “NO”, lo cual es un problema de límites y de dependencia emocional que involucra a su autoestima y valoración. Esto implica que usted también debe trabajar su parte, debe aprender a vivir con usted misma(o). Muchas veces se confunde el perdón con el hecho de convivir con la persona o restaurar la relación a como estaba antes, es necesario decir que el perdón no siempre equivale a vivir con la persona infiel, se puede perdonar para ser libre de una relación enferma, estar libre, dejarle ir y poder vivir en paz, sin tener que estar al lado de esa persona que no valora lo que es una relación de pareja estable. “Perdone, pero proteja su corazón hasta ver un cambio permanente y prolongado”6 es un buen consejo de un libro que recomiendo leer para todos aquellos y aquellas que están involucrados con conquistadores. En estos casos se sugiere al cónyuge del infiel, mirar hacia el futuro y hacerse las siguientes preguntas: - ¿Cuántos más años de su vida le quiere dedicar a esta persona que no quiere cambiar su estilo de vida? - ¿Qué es lo que más le impide salir de una relación que le hace daño? - ¿Qué otras personas más se ven afectadas con su falta de firmeza y el no saber poner límites? - ¿Qué cosas ha perdido en todos estos años de aguantar infidelidades? - ¿De seguir así, como será su vida en unos cinco o diez años más? Si usted decide decir ¡basta,no más! y arriesgarse a la posibilidad de perder a su cónyuge, le animamos a vivir el proceso del perdón que se encuentra en este mismo libro, pero hágalo pensando en usted y en la necesidad de ser libre, no pensando en ganar o conquistar al conquistador. Debe dejarle libre para que elija la vida que quiera tener, recuerde nadie cambia a nadie, “solo podemos cambiarnos a nosotros mismos”. Es recomendable que usted busque la ayuda de un especialista o consejero que le ayude a trabajar varias cosas como: su historia personal y analizar por qué no puede poner límite a un abusador. Trabajar su autoestima y crecer como persona, y aprender a vivir sin la dependencia de una relación de manera que pueda manejar la soledad. Si usted siente que no puede decir no a su cónyuge, también sería bueno buscar ayuda profesional, pues pueden existir muchas razones por las cuales usted no quiere, o no puede poner límites a su esposo o esposa. Es bueno que usted tome conciencia de ellas, una de las razones más fuertes es el miedo a la soledad, pero vivir con un conquistador es vivir en soledad, ya que es difícil tener una comunicación íntima con alguien que tiene que estar ocultando cosas y que piensa en él y sus necesidades primero que en las de su familia. Usted decide lo que quiere hacer, si decide seguir con el infiel recurrente debe entender que no es una víctima, porque usted decide quedarse dentro de esa relación; y debe también tener en cuenta que su cónyuge sabe de su dependencia emocional y puede llegar a abusar de esta. En cierta forma esto le asegura a él o ella la libertad de poder hacer lo que quiera porque siempre tendrá a alguien que le espere en casa. Por lo tanto, si su decisión es permanecer al lado del conquistador, usted debe asumir esa responsabilidad y las consecuencias de esta decisión, tanto en usted como en la vida de los que le rodean. Infidelidades con consecuencias extras Las infidelidades con consecuencias extras son las más complejas emocionalmente hablando. Estas ocurren cuando a raíz de la infidelidad hay un hijo de por medio o la infidelidad ha ocurrido con un familiar de la persona engañada, por ejemplo con una hermana(o) o una prima(o), un cuñado(a) lo que hace que las cosas se compliquen aún más. Una cosa es superar un engaño del pasado que no tiene una consecuencia como un hijo y otra es tratar de perdonar un engaño que tiene una consecuencia visible y que no va a desaparecer con el tiempo. Cuando hay un hijo a raíz de la infidelidad, se generan muchos sentimientos y angustias que tratar, pues siendo verdad que el bebé no es responsable de lo que los adultos decidieron, está en medio de un mar de culpas y sufrimiento. La persona engañada deberá considerar todo esto, pues a partir del nacimiento del hijo quedará establecido un vínculo de por vida. ¿En qué grado será este vínculo? Dependerá de muchos factores y lealtades, pues cada caso es único. Por esto en situaciones así, se hace necesario más que nunca el asesoramiento de un profesional, quien sea un medio para aclarar emociones, pensamientos y decisiones. Si la decisión es seguir adelante, la pareja deberá negociar como se llevará a cabo la relación con el nuevo hijo y la forma de acercamiento a la madre o padre de éste. Las cosas pueden empeorar mucho más si la pareja no tiene hijos y el niño(a) de la infidelidad es el primer hijo del infiel o la infiel. Por otro lado, cuando las infidelidades ocurren con personas muy cercanas a la persona engañada, el dolor es mucho más grande pues la traición es doble, la del cónyuge y la del familiar cercano y muchas veces muy querido. Estas situaciones son unas de las más complejas, ponen al engañado entre la espada y la pared, ya que sus lealtades quedan divididas, el camino del perdón se hace más complejo y doloroso. ¿Qué hacer en estos casos? Como no hay recetas para los otros tipos de infidelidad, cada caso es único y depende de lo que las personas quieran y decidan hacer, tampoco hay una receta para estas situaciones tan complejas. En estos casos es necesario la intervención de un profesional que ayude tanto al infiel como al engañado a aclarar sus pensamientos y sentimientos a fin de poder decidir qué es lo mejor para sus vidas. Las infidelidades cibernéticas o emocionales Estas son las infidelidades en las cuales no ha habido una relación sexual física, pero sí, una relación emocional a través del internet o de charlas presenciales y ocasionales con la persona. En estos casos se puede hablar de una infidelidad emocional, pues se comparte con esa persona pensamientos muy íntimos, algunos solo son información acerca de las cosas cotidianas, preocupaciones, o de los problemas que se tienen en el matrimonio y otros son frases o acciones implícitas o explícitas que llevan a la excitación sexual. Cuando esto pasa, la persona involucrada empieza a ocultar información a su cónyuge, por ejemplo no dirá que almorzó con esa persona, saldrá de la ventana del internet cuando uno de sus hijos o esposa(o) entre a la oficina y dedicará más y más tiempo a la computadora. La infidelidad emocional puede ser muy devastadora para un matrimonio, pues esto les aleja como pareja. Se da la deshonestidad y cuando esto sale a la luz igual crea un problema muy grave: la perdida de la confianza y el dolor de no saberse único y suficiente en la vida del otro. Cuando este tipo de infidelidad emocional se da, la persona que ha estado coqueteando le cuesta aceptar que esto también es ser en cierta forma infiel, pues cuando la intimidad emocional y la confianza, es más compartida con otra persona que con el respectivo cónyuge, se está siendo infiel. Si el de la aventura comprende el peligro en el cual ha puesto su hogar, pone un alto y se arrepiente es necesario trabajar en pareja todo aquello que sea necesario para recobrar la confianza, perdonar y en especial hacer una evaluación de la relación de pareja y todo aquello que les ha estado distanciando emocionalmente. Están a tiempo de hacer los cambios necesarios en la relación de pareja y en la forma de ser de cada uno para cultivar una relación más cercana y profunda. Deben ver este acontecimiento como una llamada de atención o luz roja sobre su matrimonio, para cuidarlo y cultivarlo. Evaluar cual es su caso y decidir que hacer ¿Cuál es la situación a la que usted se enfrenta? ¿Quizás usted ha sido el infiel, y puede identificar qué tipo de infidelidad es la que usted cometió? Y lo que es más importante ¿Qué quiere hacer? Si Ud. ha sido infiel y su deseo es restaurar su matrimonio le sugerimos ir al capítulo de ganar la confianza y la credibilidad. Allí usted encontrará una serie de pasos que le ayudarán a direccionar este proceso. No será fácil, pero si usted se compromete a cambiar, y su cónyuge ha decidido darle una oportunidad, las posibilidades de restaurar su matrimonio son muy altas. Si usted ha sido la persona engañada igual debe valorar la situación actual después de ver los tipos de infidelidades. ¿Cuál es su caso? ¿Muestra su cónyuge un arrepentimiento que parece honesto? ¿Quiere darle una oportunidad? Si es así, le animamos a compartir con él o ella este libro, usted debe ir al capítulo de perdonar y su cónyuge al capítulo de ganar la confianza. Cualquiera sea su decisión le recomendamos vivir el proceso del perdón sea con su cónyuge o no. Usted merece estar sano(a) y perdonar algo que de lo contrario le afectará su vida emocional y física. No se quede anclada o anclado en el pasado, tome la decisión de seguir adelante y vivir de una mejor manera. 3. Esquema descrito por el Dr. Giovanni Toscano en la Maestría en Intervención, Asesoramiento y TerapiaFamiliar Sistémica. 4. National Geographic. Febrero 2006. Últimos hallazgos sobre la química del amor. 5. Poema del libro “Amate a ti mismo” de Walter Trobisch. 6. Dres. Herry Cloud y John Townsend. Límites. Ed. Vida. CAPITULO III El camino de perdonar y sanar “¿Queréis ser felices un instante? Vengaos, ¿Queréis ser felices siempre? Perdonad” Henri Lacordaire Antes de entrar a ver los pasos del perdón es muy importante aclarar varias cosas acerca de éste, pues hay muchas ideas erróneas acerca de este tema. También es importante explorar sobre las deudas emocionales, que son las heridas más profundas y las que más requieren del perdón. Una herida del alma es aquella que genera un dolor muy profundo. Se le puede catalogar como un dolor espiritual porque toca lo más íntimo del ser, ataca la dignidad y la identidad, pone a prueba todas las creencias, sueños y anhelos de una persona. Una infidelidad es una herida del alma y toda herida del alma genera una deuda emocional. ¿Qué es una deuda emocional? Es una deuda impagable, como su nombre lo dice, no se puede pagar porque no tiene un precio. ¿Cuánto puede valer una infidelidad? ¿Qué precio puede tener el hecho de que le rompan a uno el corazón? Cuando se tiene una deuda de dinero, se sabe cuánto se debe. Por ejemplo, si la deuda es de diez mil dólares, tendría una persona que le recuerda constantemente su deuda y la tendrá allí cada mes cobrándole, pero cuando usted solo le deba los últimos mil dólares y se los pague, usted estará libre, puede tomar ese recibo que dice “cancelada la deuda”; ya no habrá más una persona recordándole lo que le debe y cobrándole; ya no hay más reclamos, está libre y en paz. Pero con las deudas “impagables”, tanto el deudor como el cobrador tienen un problema. ¿Cómo sabrán que ya es suficiente? Cómo el deudor puede saber ¿Qué ha pagado todo y que está libre? y el cobrador ¿Cuándo estará satisfecho(a)? No pueden saberlo porque no hay un precio determinado y pueden pasarse el resto de sus vidas tratando de pagar o cobrar. Ante una deuda que es “impagable” solo quedan dos caminos posibles para el ofendido: uno es cobrar la deuda toda la vida; cada día, andar detrás del otro recordándole lo que debe. Esto es lo que hacen muchas parejas después de una infidelidad, se la pasan cobrando lo sucedido y en ese camino viven un “infierno”, la persona engañada puede llegar hasta creerse la historia de que es muy bueno o buena por seguir con el otro a pesar de la infidelidad. Van por el mundo mandando mensajes como; miren “soy tan buena persona o buen cristiano que a pesar de todo lo que me hizo vivo con él o con ella” pero esto es un desastre de vida, es como vivir el infierno en la tierra. La herida continúa abierta, el resentimiento ha echado raíces y el infiel sigue allí, muchas veces solo por expiar su falta y esperando que algún día antes de su muerte el otro se digne decirle ¡¿Sabes qué? te perdono de verdad! Pero esto a veces sucede después de haber arruinado o malgastado toda la vida entre gritos, celos, reclamos o indiferencias. El otro camino para el cobrador es perdonar de verdad, esto es cancelar la deuda y no cobrarle más su error para vivir en paz, pero esto no se logra inmediatamente. Se requiere de un proceso que ayude al engañado a sacar su dolor y rabia para poder otorgar un auténtico perdón. Para algunas personas es más fácil perdonar que para otras y esto es normal, pues cada uno tiene su propia historia y experiencias personales que les marcan y hacen ver las cosas de diferente manera. Todo esto tiene que ver con la forma cómo acostumbramos a enfrentar las grandes heridas. Hay dos formas de hacerles frente, como si fueran una cárcel o una escuela. La visión de cárcel es cuando se ve el pasado y las heridas que se han tenido como experiencias que atrapan. El que hizo daño está allí prisionero en una celda fría, pero a su lado también está encerrada la persona que no puede perdonarle ni dejarle libre. Así ambos son prisioneros de lo que pasó .Los resentimientos no disminuyen sino que tienden a aumentar y las relaciones se tornan cada día más difíciles o distantes; es como morir un poco cada día. La otra opción o visión es la de escuela, consiste en ver el pasado y las experiencias dolorosas como un aprendizaje. Pero puede costar porque requiere de esfuerzo, sin embargo, al final se aprenden muchas cosas, se tiene otra visión muy diferente del dolor y de las adversidades. La persona puede decir: “esto que me ha pasado es muy malo y doloroso, pero voy a aprender de todo eso, para que este dolor no sea en vano, voy a crecer para ser una mejor persona, un mejor padre, madre o esposo o esposa”, así que para quienes ven sus heridas del pasado como una escuela les es más fácil perdonar. Cada vez más, el perdón es estudiado desde la psicología por todos los efectos beneficiosos que tiene sobre la salud emocional y física de una persona. Lo contrario también es verdad, cuando alguien vive sin perdonar y el resentimiento echa raíces en su corazón, no solo afecta su estado emocional y anímico, sino que también le afecta físicamente, pues el ser humano es un ser integral, no se puede dividir por áreas. Lo que pasa en su cuerpo afecta su mente y viceversa. Cuando no se perdona, la persona tiende a pensar más y más en la situación que le causó tanto dolor, pero lo que no sabe, es que para el cerebro no existe una diferencia entre lo que se está viviendo en el momento o lo que se está recordando. Así cada vez que se piensa en un mal acontecimiento el cerebro dispara los mismos químicos que fueron disparados cuando el suceso ocurrió por primera vez. Por esto es común ponerse triste, de mal humor o enojado cada vez que recordamos un mal acontecimiento. Esto le resta fuerza y vitalidad al diario vivir porque se vive en un estado de constante estrés y esto además baja las defensas del cuerpo que se hace más vulnerable a enfermedades; tales como migrañas, úlceras y colon irritable. El perdón es usado también en tratamientos con personas que sufren de cáncer para disminuir el estrés que sufren y así poder hacerle frente a la enfermedad con mejores resultados.7 Quien logra perdonar se abre a un mundo de posibilidades, puede dejar el pasado atrás, para soñar con un futuro mejor y lo más importante, disfrutar del presente con los que ama. Un libro que aborda el tema del perdón a profundidad dice: “Perdonar para sanar. Sanar para perdonar”8y este lema es muy real. Se perdona para sanar, pero al mismo tiempo hay muchas cosas que sanar en el camino para poder perdonar al otro, este es el único camino y proceso saludable donde todos salen beneficiados, especialmente quien otorga el perdón, porque este puede sacar afuera todo el resentimiento y el dolor. Antes de entrar al tema del perdón, es importante recordar que hay un momento del ciclo del duelo, el del enojo y la rabia, en la que la persona engañada puede otorgar un perdón falso, como un rito mágico, sin llegar al fondo del asunto, el perdón no es eso, es un proceso largo y doloroso. El perdón falso puede ocurrir y es muy peligroso, pues el dolor y la rabia salen en algún momento. Como se ha dicho antes, la persona engañada empieza a cobrar esta deuda y se siente con derecho de tratar mal a su pareja, esto no es perdón, esto es venganza disfrazada de perdón. El perdón no es olvidar: una creencia muy común es querer olvidar para perdonar, pero esto no es cierto. El cerebro es como una computadora y todo queda almacenado en ella, un ingeniero en sistemas decía queaún los datos borrados de la papelera de reciclaje puede ser encontrados por una mano experta, es decir, ni un computador puede borrar del todo un dato, el ser humano tampoco. Lo que ocurre con el perdón es que el hecho es recordado cada vez menos y con menor dolor hasta que llega un momento en que se recuerda el hecho como una experiencia más, sin dolor y quizás con un toque de satisfacción por haber pasado por esa prueba y seguir adelante. Olvidar es un peligro en cierta medida, pues cuando olvidamos las experiencias del pasado podemos cometer los mismos errores, así que no olvidar en este sentido cobra un significado diferente y valioso. De esa experiencia dolorosa, usted no va a salir igual, hay muchas cosas que ya ha aprendido y aprenderá de todo este sufrimiento. Perdonar tampoco es negar el problema. Pueden surgir frases como:¡Sigamos adelante!, ¡No hablemos del tema!, etc. Esto es muy peligroso, pues para perdonar hay que aceptar que hubo la ofensa y hay que hablar de ella, sino es como quedarse en la negación y esto puede ser contraproducente para la salud. Perdonar tampoco implica soportar agresiones renunciando a la dignidad, no se debe confundir el perdón con soportar a alguien que no quiere cambiar su vida ni su estilo destructivo de conducta, perdonar una infidelidad tras otra solo “porque debemos perdonar” es un error y un mal entendimiento del perdón, pues el perdón autentico genera vida. Muchas veces el perdón se otorga a alguien, pero no se acepta convivir con esa persona porque su conducta no muestra un arrepentimiento verdadero y no es digna de confianza. Se puede perdonar sin restaurar la relación al estado anterior a la ofensa. Por otro lado, perdonar no es humillar al otro, seguir viviendo con la persona infiel “para que vean que buenos cristianos o personas somos” pero dándole un trato disimuladamente humillante, esto no es perdonar. El perdón autentico, libera al otro de pagar una deuda impagable como ya se ha visto, el perdón es un regalo de amor, y los regalos no se cobran, pueden tener condiciones, pero no un costo a pagar. El perdón es algo divino y humano a la vez, se necesita de Dios para perdonar y con estas ideas en mente lea las siguientes páginas para dar inicio a este recorrido y proceso de perdonar y de ser libre. Primer paso del perdón: entrar conscientemente en este proceso “Cuando menos lo esperamos, la vida nos coloca delante un desafío Que pone a prueba nuestro coraje y nuestra voluntad de cambio.” Paulo Coelho Para dar inicio a este proceso de perdonar y sanar, es muy importante entrar a éste en una forma consciente, sabiendo que usted es parte de este proceso. Es verdad que ha sido víctima de algo muy terrible, pero aun ante las adversidades más grandes, cada persona decide cómo responde ante el sufrimiento, se puede asumir un papel de víctima pasiva que espera el cambio de parte de los otros o toma una parte activa y proactiva para generar el cambio. Así se vuelve una parte muy importante de la restauración o sanidad. Por todo esto lea los siguientes puntos y aprópiese de ellos: Ejercicio 1: el proceso de perdonar. Lo hago en libertad: Yo decido hacerlo por mi bien y el de mi familia. Acepto que es un proceso que puede ser largo y doloroso. Le explico a mi cónyuge que necesito tiempo y que estaré en un proceso que me demandará algunos ejercicios, algunos de ellos lo incluirán a él o ella. (En el caso de estar en el proceso de restaurar la relación). Me comprometo a caminar todos los pasos uno a uno y a hacer todos los ejercicio propuestos. Si usted está en el proceso de restaurar su relación, es muy importante el diálogo con su cónyuge, él o ella es la persona que más le puede ayudar en este proceso de restaurar la relación, así que debe ser involucrado en el proceso leyendo especialmente la parte de ganar la confianza, y usted realizando el tema de perdonar. Algunos de los ejercicios mencionados son a nivel personal, pero esto no impide que vaya compartiendo con su cónyuge las cosas que va descubriendo o sanando. Esto será bueno, pues les irá acercando emocionalmente. Hay algunas tareas concretas en las cuales deberá hablar con su cónyuge y usted debe avisarle acerca de esto. Segundo paso del perdón: renunciar a la idea de venganza “Antes de realizar una venganza, se deben cavar dos tumbas”. Para dar inicio al proceso del perdón es muy importante tomar una decisión: NO VENGARSE. El deseo de venganza es un deseo instintivo del ser humano; es el placer de cobrarle al otro lo que hizo, hacerle sufrir un poco o mucho, como dice la frase al comienzo de este capítulo;“¿Queréis ser felices un día?, vengaos. ¿Queréis ser felices toda la vida?, perdonad.” No se puede negar que la venganza produce algo o mucho placer, pero las consecuencias de ésta pueden hacer perder el buen sabor de la venganza. La venganza hace que el daño sufrido permanezca en usted y en los que le rodean, pues para vengarse es necesario estar pensando constantemente en lo que pasó y en formas creativas para que el otro se sienta mal. Todo lo que esto logra es que la persona se quede anclada en el pasado, sin poder vivir su presente ni pensar en el futuro de una forma positiva. Otra consecuencia negativa de la venganza es que estas acciones pueden desatar una espiral de violencia, y en vez de sanar la herida puede hacerla más grande y en ese proceso lo que puede pasar es que se hace más daño, especialmente a los hijos. Hay un psiquiatra judío que vivió la época de la segunda guerra mundial siendo muy joven, él y toda su familia fueron llevados a campos de concentración donde murió su joven esposa y su padres. Solo sobrevivió él y una hermana, su nombre era Viktor Frankl. En uno de sus libros más conocidos “El hombre en busca de sentido”, allí aborda el tema de la libertad del ser humano, la libertad de decidir cómo responder a las agresiones del otro. En su libro, él narra todos los horrores que tiene que vivir en su cautiverio, pero según Frankl, al ser humano le pueden quitar todo: la familia, los títulos, la profesión, la comida, la salud, la ropa, las pertenencias, etc., pero no le pueden quitar La capacidad de decidir cómo responder al otro, y esta idea es fundamental en este punto de la venganza, pues lo más común es que la mayoría de personas actúan por reacción a lo que le hacen, como si el otro o la otra persona tuviera la llave de su vida y control emocional. Esto es una mentira que la gente se dice a sí misma para defenderse y protegerse; “Si ella no fuera tan …” “El me hace enojar” “Ella me hace tener enojo o tener iras”. Frases como estas son muy comunes y descargan en el otro la responsabilidad de lo que se hace o se siente. En el caso de una infidelidad, si el engañado paga o responde de la misma manera en su deseo de venganza y si también comete una infidelidad para herir al infiel, termina dañándose a sí mismo y dividiendo la culpa que debería sentir solo el que cometió la primera infidelidad. Hay que aprender a ser más inteligentes emocionalmente. Cuando alguien agrede a otra persona y el agredido entra a jugar el mismo juego del agresor, es decir, responde de la misma forma, atacando o agrediendo, lo que en realidad logra con esto es darle razón al otro para sentirse un poco mejor por lo que hizo, es como darle la disculpa “yo no soy el más malo acá, mira lo que él o ella hace”. Por ejemplo, Daniela ha sido engañada por su esposo. Ella en su dolor y deseo de venganza va al trabajo de él, hace un gran escándalo insultándole delante de sus jefes y amigos o va la casa de sus padres y les cuenta todo con lujo dedetalles. Daniela se ha desahogado un poco, quizás hasta se sienta bien un rato, pero con estos hechos le da al infiel motivos para él sentirse agredido. Si Daniela no hiciera nada de esto, y al contrario, conservara la cordura y le diera un trato respetuoso a su esposo en medio de todo lo malo que él ha hecho, su culpa y su dolor no se verían atenuados por las acciones “locas de su mujer”. Lo mismo ocurre cuando alguien dice cosas muy hirientes a otra persona, por ejemplo si Mariela insulta a Juan gritándole: “Eres un tonto, no sabes hacer nada bien” y Juan para defenderse le dice “y tú que te crees, mira lo que eres, no sirves para nada” ¿Quién queda mal?; los dos, pues se han puesto en el mismo nivel de agresión. En cambio, cuando alguien es agredido y no da una respuesta igual o similar a lo que le han hecho, solo el ofensor queda avergonzado, quizás la respuesta pacífica del otro le puede hacer reflexionar y no aumenta el grado de violencia en la relación. Así el sentimiento de culpa es sólo del que ofendió, pero el que entra en la venganza, tarde o temprano se sentirá tan sucio y culpable como el otro. Una de las tentaciones más grandes en la infidelidad es involucrar a los hijos en el problema, pero cuanto más puedan los chicos permanecer al margen del asunto, será mejor, pues la relación de padre o madre es independiente de los problemas que como pareja puedan tener. Los hijos necesitan de sus padres y que los amen de una forma incondicional. Es muy normal que estén dolidos, enojados o que no quieran ver o hablar con el padre infiel; en casos así los hijos tienen sentimientos encontrados, por un lado, se sienten decepcionados y enojados, y por otro lado, siguen amando y necesitando de este. Es cierto que los hijos se dan cuenta de alguna manera que las cosas no andan bien entre sus padres y no hay porque mentirles, si ellos preguntan o es evidente que saben algo. Se les debe decir la verdad y mejor si aun si se hace en forma directa y por sus mismos padres, contestando sus preguntas en la medida de lo posible y de acuerdo a su edad, pero siempre cuidando de no involucrarlos demasiado, pues este es un asunto que los adultos deben resolver y es bueno hacerles saber que los padres están trabajando en el problema y decidiendo que van a hacer. La infidelidad es algo que innegablemente marca la vida de todo niño o adolescente, los más pequeños pueden llegar a sentirse culpables de los problemas de sus padres o experimentar mucho miedo, “pues si papá o mamá engañó al otro también puede hacerlo conmigo”. También está el asunto de la decepción, especialmente en los adolescentes y jóvenes, pues muchas veces los padres han sido exigentes con ellos en sus principios y valores, los cuales ahora se ven socavados con la infidelidad. En muchos casos los hijos quedan en medio de una guerra entre los padres, y éstos deben comprender que es un problema de pareja que debe ser resuelto por ellos, sin cargar a los hijos con los detalles de todo lo que aconteció, pues esto en nada les beneficia especialmente sin son niños o adolescentes. Quizás para usted sea bueno tener aliados y personas que le escuchen, pero las personas menos indicadas son sus hijos. Otra forma de meterlos en la batalla es no permitiendo que el padre o la madre infiel vea o se relacione con los chicos, esto tampoco es recomendable pues ellos sufren mucho cuando esto pasa, ellos son los que deben decidir si quieren o no hablar con su padre o su madre. Por otro lado, a veces son los mismos chicos los que se enteran primero de la infidelidad de su padre o madre, esto es realmente muy contraproducente para ellos, pues quedan metidos en medio de un triángulo terrible. Si calla es desleal al padre engañado y si habla es desleal al infiel. Además tiene un peso emocional sobre sus hombros: si él habla, puede terminar con el matrimonio de sus padres y esto es algo muy grande para un adolescente o joven. Es recomendable en estos casos que el joven o niño pueda ser atendido por algún consejero o profesional para ayudarle a manejar sus sentimientos cruzados y poder ser libre de sentimientos de culpa que muy posiblemente tiene en su mente y corazón. Ejercicio 2: desistir de la venganza - Evalúe muy honestamente sus deseos de venganza. - ¿Qué le gustaría hacerle a su ofensor? - ¿Qué consecuencias traería esto a su vida y a la de sus hijos si lo llega a hacer? - Haga una lista de palabras, actitudes y acciones con las que usted ha estado de alguna forma vengándose de su cónyuge. - Tome la decisión de renunciar a estas cosas - ¿Qué debe cambiar urgentemente? ¿Qué tiene que dejar de decir? ¿Qué tiene que dejar de hacer? Tercer paso del perdón: tomar contacto con mi dolor Con cada lágrima de mis ojos y cada palabra de mi boca, sale un poco de mi dolor La infidelidad es como un anzuelo que se clava en la mano. Si se trata de sacar el anzuelo por el mismo orificio por el que entró, la punta estriada del anzuelo se engancha más en la carne y no le deja salir. Así para poder sacar un anzuelo de la mejor forma y con el mínimo de daño posible hay que enterrarlo más, hasta que la punta salga por otro lado y así poder cortarla. Luego de cortar la punta estriada, se puede proceder a sacar el anzuelo fácilmente y con menos dolor. Como ya mencionamos, si se trata de sacar el anzuelo por el mismo camino por el que entró, sin cortar esa punta, lo que se logra es que el anzuelo se enganche más en la carne herida, la desgarre y produzca más daño y dolor. Cuando se sufre una herida del alma como es la infidelidad, el dolor es muy grande y se puede querer actuar rápidamente buscando minimizarlo. A veces se hacen cosas que pueden a largo plazo doler mucho más, como callar, dejar a un lado lo vivido tratando de olvidarlo o usar la venganza para descargar la ira. Pero todo esto a largo plazo rinde sus frutos: más dolor y un profundo resentimiento que puede terminar en depresiones y enfermedades psicosomáticas. Así que para ser sanado hay que tomar conciencia de la herida y del dolor que se ha vivido. Como en la ilustración del anzuelo hay que enterrarlo un poco más, es decir, evitar el dolor no soluciona nada. Hay que aceptar el hecho de que ha sido herido(a) y ofendido(a) de una de las peores formas posibles. Para sacar ese dolor, hay que profundizar un poco en él, vivirlo y aceptarlo, y para lograr esto se ha diseñado un ejercicio que le ayudará a tomar contacto con su dolor. Hay dos maneras de hacerlo; si usted es una persona más auditiva le recomendamos grabar el ejercicio para que lo pueda escuchar con sus ojos cerrados y hacerlo de una mejor forma. Pero si usted es una persona que se siente mejor con escribir, leer y analizar, le recomendamos solo leerlo, pensar en la narración y tener un tiempo en silencio para tomar contacto con su dolor. Antes de comenzar, lea esta lista de sentimientos que le pueden ayudar a identificar su dolor. Señale los que encuentra en su corazón: - Humillado(a) - Asustado(a) - Confundido(a) - Ofendido(a) - Desanimado(a) - Inseguro(a) - Avergonzado(a) - Miserable - Sin Valor - Indignado(a) - Desgarrado(a) - Culpable - Ansioso(a) - Preocupado(a) - Triste - Otro Ejercicio 3: viviendo el dolor Para poder realizar este ejercicio es necesario que separe un tiempo tranquilo, en un lugar donde se sienta cómodo y libre de interrupciones. Siéntese y trate de que su cuerpo esté cómodo, lo más relajado posible, cierre sus ojos si es posible y cómodo para usted, trate de concentrarseen su respiración. Hágalo con calma, respire profundamente y exhale suavemente, sienta su respiración, como sale el aire de su cuerpo y como entra de nuevo, inspire y expire. Hágalo varias veces hasta que se sienta más tranquilo(a) o relajado(a). Ahora empiece a recordar el momento y las circunstancias cuando se dio cuenta que su cónyuge le fue infiel. Piense en sus primeras reacciones y sentimientos; cuales fueron, como se sintió, que había en su corazón en ese momento… que dijo, que hizo… trate de ser consciente de cómo está su cuerpo, como están sus músculos, los latidos de su corazón…quizás late más rápido, ¿cómo siente su cuello y los músculos de la espalda? ... ¿dónde siente que le duele más? Su cuerpo reacciona al dolor y esto es normal pues ha sido herido(a), no solo duele el alma sino también el cuerpo, este refleja el dolor ¿Qué es lo más doloroso de todo lo que ha pasado? … ¿Qué es lo que más le hace sentir humillado(a)? …. Dese el permiso de sentir su dolor, sentirse vulnerable y frágil … es muy normal que heridas como estas hagan que una persona se sienta así … pues el ser queda al descubierto y puede querer luchar contra esto …nadie quiere ser avergonzado ni humillado … pero no lo haga… acepte lo que pasó…una infidelidad produce esto, vergüenza, humillación, puede sentirse como un tonto o tonta, inadecuado(a), dependiente, sin valor …puede sentir mucho miedo … temor al rechazo …identifique sus sentimientos más profundos y no luche con ellos …solo acéptelos… El miedo al rechazo o al dolor puede hacerlo(a) reaccionar de formas mal sanas para protegerse…al comienzo de la ofensa esto es normal…pero no permita que el dolor y el miedo le haga reaccionar de formas que le hagan daño a usted y a su cónyuge; de nada sirve…para ser libre y perdonar hay que aceptar el dolor y la humillación vivida. Enfrentar la vergüenza y el dolor es parte del proceso de sanar… recuerde que la herida es grande y la ha hecho la persona más querida… por esto duele tanto… para protegerse muchas veces se reacciona con cólera o humillando al que nos ha ofendido… ¿Es esta una de sus reacciones? Quizás con palabras, indiferencias… otorgándole un perdón falso que humilla al otro para que otros vean lo bueno o buena que es…Termine este ejercicio sintiendo su dolor, aceptándolo… dígase a usted mismo “he sido gravemente herido(a)… pero estoy viva(o) puedo seguir adelante puedo aceptar mi dolor… piense de nuevo en su cuerpo y en su respiración, concéntrese en ella, repita respiraciones profundas varias veces hasta que su cuerpo se calme … entréguele esta carga a Dios, entréguele su dolor. Quizás el ejercicio anterior no ha sido fácil, tómese su tiempo, quizás deba parar acá y seguir leyendo otro día. Si siente que aún no logra aceptar su dolor, tenga paciencia, es un proceso, pero sí hizo el ejercicio, créalo, algo empieza a pasar dentro de su mente, las heridas grandes tardan en sanar. Y cuando se sienta preparado pase al siguiente paso. Cuarto paso del perdón: dividir mi dolor Una carga compartida… es una carga dividida. Usted ha sido muy valiente al tomar contacto con su dolor. Ahora es bueno contar con personas maduras y sabias que le escuchen sin juzgar ni sermonear. Es importante que sean personas sabias, que le animen a continuar adelante en medio de todo este proceso. Si usted ha decidido darle una oportunidad a su cónyuge y él o ella, está realmente arrepentido(a), debe cuidarse de personas que le desanimen, diciéndole “que tonta o tonto, ¿Cómo sigues con esa persona? Si fuera yo, le dejaba”. Cosas como estas no le ayudan en nada, pues lo que usted necesita son personas que le animen, y escuchen sus sentimientos, respetándole y dándole ánimo. ¿Recuerda el ciclo del duelo? Usted puede estar aún en esa etapa de enojo o tristeza y requiere de ser escuchada(o). Es muy importante desahogarse de todo lo que siente y piensa; pero hacerlo todo el tiempo con la persona que le engaño no ayuda mucho. Se necesita la ayuda de otros que con paciencia compartan esta carga con usted. Muchas personas cuando ven sufrir o llorar a alguien creen que lo mejor es que no llore o que no se sienta mal, pero en esta etapa de su proceso usted tiene derecho a llorar y a sentirse pésimo. Por eso usted necesita personas que le animen pero que le permitan expresar todo el dolor. Cuando los sentimientos son guardados en el corazón pueden hacer mucho daño. Por estos se insiste, procure encontrar personas maduras y sabias que le escuchen sin juzgarle ni sermonearle. La cólera y los deseos de venganza pueden ser frecuentes y reaparecer de la nada, cuando esto pase, solo acepte su enojo y recuerde que usted decidió renunciar a los actos de venganza para así entrar en este proceso. Es normal que a veces piense en hacerlo, pero lo importante es que no lo haga. Quisiera insistir en que compartir todos estos sentimientos y emociones con alguien de su confianza le será de mucha ayuda. Ejercicio 4: con quien compartir mi dolor( primera parte) - Haga una lista de personas que le aman y con las que puede contar en esta crisis. - Mire su lista ¿Quiénes de estas personas le podrían escuchar sin juzgar o sermonear? - ¿Cuándo podría hablar con esta persona? Tome la decisión de hacerlo, sino encuentra a alguien cercano, quizás pueda pensar en un consejero en una iglesia, y si se está sintiendo muy decaído(a) o deprimido quizás sea buena idea ir a un psicólogo o terapeuta familiar para compartir esta carga. Ejercicio 4: compartir mi dolor con el ofensor (segunda parte) A estas alturas, seguramente usted ya le ha reclamado la traición a su cónyuge, y quizás podría hacerlo unas mil veces más pero esto no es recomendable ni para usted ni para su cónyuge, pues ambos necesitan salir lo antes posible de la etapa de estar recordando la infidelidad. Créalo, a usted no le conviene que su esposo(a) gaste ni un minuto más de sus pensamientos en su ex amante, pues con cada reclamo se refuerzan las ideas. Es hora de empezar a ponerle fin a esto. Pero antes, es bueno hacerlo de una manera adecuada, explore el ejercicio. Si cree que ya le ha reclamado a su cónyuge de la forma adecuada y decide no hacerlo más, bien; pero si quiere puede hacerlo guiado por las indicaciones que serán dadas para cerrar el capítulo de “Los reclamos” y así usted pueda desahogarse completamente, decir todo lo que necesita decir y que quizás no lo ha dicho. Primero conteste las siguientes preguntas con toda libertad: · ¿Qué es lo que más le ha dolido de toda esta situación? · ¿Qué no le ha dicho o dejado en claro? · ¿Qué es lo que le da más rabia? · ¿Qué es lo que le da más miedo? Después de haber hecho un inventario de su dolor y lo que no ha dicho, usted puede pensar en hacerle un reclamo responsable, en primera persona y desde el YO, en un reclamo responsable se trata de atacar el problema sin dañar a la persona con insultos, gritos o palabras ofensivas que de nada sirven más que para alimentar la ira y el enojo de ambas partes. He aquí algunas sugerencias para hacer un reclamo responsable. Yo me he sentido… (Muy triste; esto ha roto mi sueño de tener una familia diferente, me siento muy humillado(a) y desvalorizado(a).) No sabes cuánto daño me han hecho… (Tus mentiras, tus comparaciones, que los chicos se enteraran, etc.) Todo esto me hace tener miedo (del futuro, pienso si volverá a pasar, tengo miedo a no ser suficiente para ti) Tengo mucha rabia de… (No poder confiaren ti como lo hacía antes que nos hayas hecho esto) Necesito que me ayudes…. (Necesito tu paciencia, tu cariño cuando estoy en momentos difíciles, que me hables, etc.) Aparte un tiempo para hablar con su cónyuge acerca de esto, pero no lo haga en medio de una pelea o discusión. Dígale que es un ejercicio que le han enviado a hacer con el fin de poder ir cerrando el capítulo de reclamar. Si quiere anote sus ideas en tarjetas para no desviarse de lo que debe decir y así no empezar a atacar. Solo exprese sus sentimientos responsablemente y desde el yo, de seguro que su cónyuge va a escuchar y va a ser confrontado con las consecuencias de sus actos, esto es más que suficiente para él o ella, los gritos, los insultos o sarcasmos están de más si usted se ha comprometido a perdonarle. Expresarle a su cónyuge que usted necesita su ayuda es muy importante, y también que le haga saber lo que necesita de parte de él o ella, hable, pida, no espere que el otro le lea el pensamiento, eso no es posible. Cuando sufrimos y callamos… el dolor se hace más insoportable. Quinto paso del perdón: ¿qué he perdido? “Aprendiendo a aceptar lo que se fue y lo que no cambiará”. Reconocer la pérdida ayuda a vivir el duelo, es necesario identificar la herida específica que hay que perdonar. En el paso anterior se exploró el dolor, ahora usted debe pensar en las cosas que se han perdido por causa de la infidelidad. Algunas de ellas son recuperables, pero algunas no lo son, y es vital para seguir adelante dejar ir lo que se ha perdido, lo que ya no se puede cambiar o recuperar, esto es aceptar la herida y la pérdida. El siguiente ejercicio no es fácil, pero le animo a que lo haga cuando se sienta con las fuerzas de hacerlo, recuerde esto no es una carrera para llegar al final del libro, se trata de ir poco a poco trabajando en su vida y en su dolor, esto puede tomar tiempo. Ejercicio 5: identificar la herida y las pérdidas 1. ¿Qué áreas de su vida se han visto afectadas? · Su autoestima · Su reputación · Su confianza en sí mismo(a) · Su confianza en el otro · Su salud física · Su salud emocional · Sus sueños de vida 2. ¿Qué le ha robado la infidelidad de su cónyuge? ¿Qué cree que ha perdido? 3. ¿Cuál era su sueño para su matrimonio y familia? ¿Cómo se ha visto afectado este sueño? 4. ¿Qué de lo que se ha perdido, se puede recuperar? ¿Qué no se puede recuperar? Usted debe tomar conciencia de algo importante, por más cosas que ha perdido no lo ha perdido todo. Haga una lista: • ¿Qué no ha perdido en medio de esta ofensa? • ¿Qué recursos tiene para seguir adelante? • ¿Con qué personas cuenta para superar todo esto? • ¿Con qué habilidades cuenta que le pueden ayudar a seguir adelante? ¿Qué fortalezas de su carácter le pueden ser útiles para continuar bien hacia el futuro? Trabajar heridas de la infancia Cuando la persona engañada le ha tocado vivir la infidelidad de uno de sus padres cuando era niña(o) o adolescente puede sufrir más intensamente la infidelidad de su cónyuge, la que es como revivir heridas y esto puede intensificar el dolor. Muchas veces las reacciones ante el infiel no solo son por el dolor que él o ella causó, sino que de alguna forma puede ocurrir que él no solo pague por sus pecados sino también el de los padres de su cónyuge. La siguiente historia lo ilustra. Enrique y Anelis estaban en un proceso de restaurar su relación, ambos estaban muy comprometidos con el proceso. Enrique que había sido el infiel, estaba haciendo todo lo necesario para recuperar la confianza de su esposa, Anelis reconocía todo lo bueno que él hacía, y le gustaba mucho como él estaba cambiado en su diario vivir, él estaba siendo amoroso, menos gritón y ya no criticaba tanto ni a los niños ni a ella; aun así ella tenía momentos de mucha rabia y sentía una ira muy profunda que parecía surgir de la nada, sin que Enrique hiciera nada para generarla. Al trabajar la historia personal de Anelis se encontró que durante su infancia y adolescencia ella como hija mayor había tenido que ver el sufrimiento de su madre por las infidelidades de su padre, en contadas ocasiones ella vio como sus padres se gritaban y maldecían, mientras ella se encerraba en el cuarto con sus hermanos menores, ponía música con alto volumen y trataba de calmar a sus hermanos que estaban muy asustados, ella se juró así misma que nunca permitiría que alguien le hiciera lo mismo. Anelis tenía que luchar con su propia historia, ahora era ella la que vivía una infidelidad, y en el fondo de su ser estaba muy enojada con su padre por haberles causado tanto dolor, pero también estaba muy enfadada consigo misma, ¿Cómo era posible que ella perdonara algo así? ¿Dónde quedaba la promesa que se hizo? hablando de esto, Anelis pudo darse cuenta de que no solo estaba lidiando con el dolor causado por Enrique, sino que estaba frente a heridas del pasado, heridas abiertas con la infidelidad de su esposo que sacaban a la luz su dolor y falta de perdón hacia su propio padre, Anelis también tuvo que trabajar con ella misma, renunciar a su promesa o juramento, aceptando que eran cosas diferentes, su esposo estaba arrepentido y estaba cambiando, ella y él estaban manejando las cosas de forma diferente a las de sus padres que se dedicaron a vivir juntos sin perdón y sin restauración. Cuando Anelis pudo ser consciente de su propia historia, pudo separar las cosas, trabajar el dolor del pasado y diferenciar a su esposo de su padre, esto le ayudó a calmar su ira y dejar de cobrarle a su esposo los pecados de su padre. Por esto es muy importante explorar si hay heridas del pasado que han sido abiertas con la infidelidad actual y separar de alguna forma las heridas, aquellas de los padres y las del cónyuge, para esto le animo a reflexionar en las siguientes preguntas: · ¿Fue la infidelidad algo que usted vivió en la relación de sus padres cuando era un niño(a) o adolescente? · ¿Cómo le afecto esto en su infancia o adolescencia? Sería bueno repetir los ejercicios tres y cinco pensando en esta herida del pasado, trate de recordar sus sentimientos de niño o adolescente: · ¿Qué sentía en esos momentos? · ¿Hizo alguna promesa o juramento de que nunca perdonaría una infidelidad? · ¿Hay algún parecido en los sentimientos que experimentó en esa época y los que hoy experimenta? · Si hubo infidelidad en su familia de origen ¿Cómo esto puede afectarle ahora que lo vive en su propio hogar? ¿Quizás ha estado cobrándole una deuda extra a su esposa o esposo? Sexto paso del perdón: desviar los pensamientos “No puedo evitar que los pájaros vuelen sobre mi cabeza, pero si puedo evitar que hagan nido en mi cabeza”. Martín Lutero Seguramente la lucha con sus pensamientos empieza a ser un problema para usted, a pesar de haber decidido restaurar la relación con su pareja es normal tener una batalla con los pensamientos, recordando lo que pasó, cómo pasó, porqué pasó, lo que vio, lo que se dijo, lo que no se dijo, etc. Una frase de Martín Lutero nos recuerda este hecho, los recuerdos y pensamientos son como esos pájaros que vuelan sobre la cabeza, es inevitable que lo hagan, pero si se puede evitar que estos pensamientos dañinos “hagan su nido en mi cabeza” decidiendo no alimentar estos pensamientos cuando llegan de repente y no sentándose a recordarlos y torturarse voluntariamente. El cerebro, como ya se ha explicadoantes, funciona de una forma muy especial, cada pensamiento genera un sentimiento asociado al recuerdo, no importa si pasó hace un día, un mes o un año; pero esto no es todo, el cerebro va creando conexiones fijas de acuerdo a los pensamientos repetitivos de la persona, es decir, que entre más usted piense en algo, su cerebro está más acostumbrado a pensar en eso, se genera un tipo de adicción al sentimiento asociado al pensamiento, es por esto que hoy en día se afirma que las personas pueden ser adictas no sólo al alcohol, o a las drogas, sino que también se puede ser adicto a ciertos estados emocionales, como la ira, la tristeza, la autocompasión, etc. Es tan importante revisar en qué se gasta tiempo pensando, que ideas se alimentan y fomentan más, pensar no es tan gratuito como se dice, pues cada pensamiento negativo o que le recuerde las malas experiencias del pasado tienen un costo en su vida emocional. Sobre este tema hay un video muy interesante en YouTube que es recomendable ver y analizar, aparece bajo el nombre de Neuroplasticidad Neuronal. La buena noticia sobre esto, es que el cerebro es tan flexible que puede ser modificado, se pueden cambiar las conexiones negativas que se han ido fijando con los pensamientos repetitivos. ¿Cómo logra esto el cerebro? Cuando la persona conscientemente empieza a cambiar sus pensamientos negativos o malos recuerdos, pensando en otra cosa, interrumpiendo la secuencia acostumbrada. De esto se trata este paso, se verán algunas ideas concretas para hacerle frente a los pensamientos. Lo primero será calmar la angustia mental que hay en su mente. Cuando ocurre una infidelidad, hay muchas preguntas y cosas sin entender. Considerando que el ser humano es muy complejo y es imposible comprenderlo todo, siempre es importante tener un espacio para hacerle algunas preguntas a su cónyuge, así que pídale a él o ella que le dé un tiempo para hablar del asunto, puede decirle que es parte de un ejercicio y que esto le ayudará a usted en su recuperación. Haga una lista de todas las preguntas que quiere hacerle a su cónyuge, usted es libre de preguntar todo lo que usted quiera saber. Revise de nuevo su lista, ¿hay algo en esa lista que debería ser quitado? ¿En qué le ayuda saber eso? ¿Será útil para su recuperación o alimentará más los malos pensamientos? ¿De alguna manera mi pregunta es recordarle más y más a mi cónyuge esa persona con la que me engañó? Elimine las que definitivamente no sirven de nada. Tenga muy presente que su esposa o esposo es libre para contestar solo las preguntas que crea conveniente para usted y la restauración que ambos quieren, quizás en algunas preguntas su esposo(a) dirá “de eso mejor ni hablar”. Acepte los NO que ella o él le dé. Piense que no es por el deseo de no contarle, sino que le está protegiendo de alguna manera o que ya está cansado de pensar en esa persona y en lo que pasó y quiere sacar de su cabeza a su ex amante, es de mal gusto hablar de eso, etc., dele otras interpretaciones. Acepte que no todo tiene una explicación, es parte de su pérdida y viva la infidelidad como la falla de un ser humano que no es perfecto. Ejercicio 6: desviando los pensamientos Haga una lista de los pensamientos más frecuentes que le atormentan. · ¿En qué momentos del día tienden a aparecer más? · ¿Qué hace cuando estos pensamientos vuelan sobre su cabeza? ¿Les alimenta recordando detalles y trayendo a memoria más cosas? · ¿Qué cree que podría hacer usted cuando estos pensamientos hacen su ataque? Piense en actividades que sean placenteras para usted y que pueda hacer cuando los pensamientos ataquen. Sugerencias para cuando los pensamientos atacan · No luche con los pensamientos negativos, solo acéptelos dígase: “Acá estas otra vez… queriendo molestar”. · Inmediatamente piense en otra cosa (algo que tiene que hacer). Escuche música que no le recuerde el hecho (ayuda mucho la música cristiana). · Hable con Dios, entregándole su dolor. Hable con alguien de otra cosa. · Lea el periódico, haga crucigramas o Sudoku. Haga ejercicio. · Lea un libro (nada trágico) Vea una película divertida. Cuide sus plantas. · Juegue con su mascota. Salga a caminar. · Busque un nuevo hobby. Un ejercicio que he dado a varios de mis pacientes es el siguiente, cuando los pensamientos ataquen toque su anillo de boda, mírelo por un rato, y dígase a sí mismo: “yo gané”, “yo tengo el anillo”, “él o ella me eligió a mí”, “él o ella quiere estar conmigo”, “yo gané”, “no le voy a dedicar ni un minuto más de mis pensamientos a esta persona o a este recuerdo”, “yo gané”. El que pide, recibe Algo que usted debe tener muy claro es que la persona que más le puede ayudar en su recuperación es su esposa o esposo, pero el detalle es que muchas parejas viven un juego que es macabro, esperan a que el otro adivine: “si él me amara, sabría lo que yo necesito”, “si ella estuviera realmente arrepentida, haría esto y aquello por mí”, “si realmente me amara debería saber que esto me molesta mucho”; no puede esperar que la otra persona adivine o lea la mente, no puede, es sólo un ser humano como usted sin poderes mentales que le permiten saber todo lo que usted piensa, siente o necesita, su esposa o esposo necesita que usted hable y exprese lo que quiere o necesita. Un tema que tiene que ver con esto de la lucha de los pensamientos es el de retomar la intimidad sexual, y este puede ser un tema sensible para la mayoría de las parejas en las que ha habido la infidelidad, pero es algo que hay que retomar lo más pronto posible porque en la relación sexual se libera una hormona muy importante; la oxitocina, que es conocida como la hormona del amor y la que crea vínculos con esa persona que se ama. Así que no se puede esperar mucho tiempo en retomar las relaciones sexuales, puede ser que usted en el momento de iniciar una relación sexual experimente recuerdos desagradables o piense en cosas relacionadas con la infidelidad que inmediatamente matan la pasión y el deseo de estar con su esposa(o). Es bueno que usted hable con su cónyuge acerca de lo que le pasa, dígale, “lucho con mis pensamientos, quiero estar contigo pero vienen recuerdos dolorosos a mi cabeza, necesito tu ayuda y compresión”. Lo más importante es que usted pueda asociar la experiencia sexual con su placer, debe comunicarse y por un tiempo concentrarse en su placer y no en el de su cónyuge, él o ella deben colaborar en que usted lo disfrute plenamente, así que debe hablar, pedir y guiar en la cama lo que usted desea que el otro haga por usted, pero esto no será posible si no habla y no pide. Recuerde es tiempo de sacar de la cama a esa tercera persona que se metió entre ustedes, no le dedique ni un minuto más de sus pensamientos a esa persona. Si usted persiste en no tener relaciones sexuales está perdiendo un tiempo valioso de su recuperación, porque lo que está haciendo es reforzando una idea negativa de la relación sexual y asociándola cada vez más con la infidelidad, esto no es bueno. Si lo hace como una forma de “venganza” tampoco sirve de mucho pues esto no actúa en su favor. Séptimo paso del perdón: perdonarme a mi mismo(a) Perdónate: sólo eres un ser humano Los sufrimientos más profundos son los que más hacen crecer y madurar, cada persona decide como la crisis y el dolor le afecta, permita que esta crisis sea una oportunidad de cambio para bien, como dice un lindo pensamiento: “los momentos más oscuros de nuestra vida, pueden convertirse en los más maravillosos”. En la vida, todos los seres humanos fallamos de una u otra forma,si usted mira su propia historia, seguro encontrará cosas por las cuales usted ha sido perdonado en el pasado y es bueno recordarlo. Dentro de una relación de pareja siempre habrá situaciones negativas de las cuales usted puede sentirse responsable o parte del problema. Ahora que está viviendo la infidelidad de su cónyuge, pueden surgir en su mente muchas preguntas sobre usted mismo(a), acerca de su parte en todo lo que está ocurriendo y esto puede ser un peligro o una buena oportunidad de cambio. Muchas personas engañadas pueden sentirse culpables de la infidelidad por situaciones no resueltas dentro del matrimonio o por algunos de los comportamientos que han tenido antes de la infidelidad, es bueno recordar que “nadie obliga a nadie a ser infiel”, aun así usted puede luchar con sus pensamientos de culpa y estos deben ser trabajados. Es verdad que su cónyuge infiel es responsable 100% de la decisión de ser infiel, aun así es bueno revisar todas aquellas cosas, de su carácter, actitudes o acciones, que antes de la infidelidad ya eran un problema dentro de la relación, no puede esperar que sólo su cónyuge infiel cambie, nadie es tan perfecto como para no tener errores o formas de ser que dañen a otros, para esto es importante que haga el ejercicio de “Distancia emocional” que le ayudará a darse cuenta de sus equivocaciones y quizás de aquellas cosas que también debe perdonarse a sí mismo(a) o por las cuales usted debe pedir perdón a su cónyuge. Ejercicio 7: distancia emocional para la persona engañada 1. ¿Cuáles de los siguientes problemas estaban presentes en su vida antes de que ocurriera la infidelidad? Al hacer este ejercicio trate de no pensar en su esposa(o) infiel, piense solo en usted, en la parte que le corresponde a usted: · Insultos y palabras hirientes · Enojos frecuentes · Gritos · Indiferencia · No escuchar o no hablar · Burlas o hablar mal del cónyuge · Problemas con los suegros · Problemas con el dinero · Problemas con los roles y tareas del hogar · Problemas en las relaciones sexuales · Poca amabilidad en el trato · Orgullo y desprecio al otro (trabajo, forma de vestir, gustos, etc.) · Problemas con los hijos (desautorizarse mutuamente, no ser un equipo para disciplinarles) · Críticas hacia los suegros y familiares políticos · Autosuficiencia (no tener en cuenta al otro para toma de decisiones) · Adicciones · Violencia física o emocional · Usar palabras y tonos sarcásticos · Irresponsabilidad económica · Irresponsabilidad con los hijos. · Otros ¿Encuentra algo que debe ser cambiado en su vida? ¿Hay algo por lo cual usted también deba pedirle perdón a su esposa o esposo? Haga una lista de las cosas por las cuales usted se siente culpable en su relación de pareja o de la infidelidad. · ¿Puede discernir cuales son culpas falsas y cuales son culpas reales? · ¿Qué voces internas le están acusando? ¿Qué dicen estas voces? · ¿Qué cosas debe perdonarse a usted mismo(a)? Si encuentra algo por lo cual deba pedir perdón a su cónyuge, debe hacerlo lo más pronto posible, reconocer su parte también será de gran ayuda en este proceso. A continuación encontrará el ejercicio siete diseñado para otorgarse el perdón a usted mismo(a). Debe separar un tiempo y un lugar tranquilo donde pueda estar solo(a) sin ninguna interrupción. Ejercicio de las dos sillas Busque dos sillas y póngalas una enfrente de la otra, una será la silla del acusado y la otra del acusador, siéntese en la silla del acusador e imagínese que usted mismo(a) está sentado(a) en la otra silla, quizás haya algunas cosas que le quiera reclamar a esa otra parte de usted que está sentada imaginariamente al frente suyo. Puede iniciar con las frases que usted se reclama en su interior, “Si no hubieras…” “Si tan solo…” “Debiste haber…..” “Que tonto(a) has sido en….” “Tenías que haber sido más…” “has fallado en…” Reclámele todo lo que quiera, exprese sus sentimientos, si siente rabia hacia usted mismo(a), dígalo, no se calle nada, saque todo lo que tenga que sacar en este momento. Cuando haya terminado de sacar todo lo que hay en su corazón pásese a la silla del acusado. En la silla del acusado, trate de darse cuenta de cómo se siente ante todas las acusaciones y reclamos que le han hecho, exprese sus emociones, quizás usted se siente abrumado(a) con todos esos reclamos, quizás algunos de ellos son verdad, ¿Cómo se siente? ¿Qué le podría decir a esa parte acusadora de usted mismo(a)? Quizás pueda decirle “Me siento muy decepcionada conmigo mismo(a) por….” “Es cierto me he equivocado en varias cosas como….” “Acepto mi error en…” “No soy perfecto(a)… me equivoco, solo soy un ser humano como todos” “perdóname por ser débil” “Perdóname por equivocarme, por cometer errores” “Perdóname por haber sido tan crédulo o crédula” “Por tener expectativas tan altas” dígale a la parte acusadora todo lo que siente, cuando ya no tenga más que decirle pásese de nuevo a la silla acusadora. De nuevo en la silla acusadora ¿Cómo se siente al oírse usted mismo? ¿Vale la pena seguir torturándose con pensamientos inútiles? ¿Puede perdonarse sus fallas y equivocaciones? Si está dispuesto a perdonarse dígaselo: “Te perdono, eres libre, no te reclamaré más…lo pasado es pasado, eres libre” Por un momento cierre sus ojos e imagínese que ambas personas; el acusador y el acusado se levantan y se abrazan, ahora usted puede verse como todo ser humano, falible, digno de ser amado, digno de ser perdonado y perdonar a otros. Hace un tiempo atrás encontré una canción en internet que me parece muy adecuada en este tema del perdón, el autor aparecía como Mero, lamentablemente ya no está disponible el video en youtube. He aquí una parte de la letra que usted puede leer y meditar. Todas las promesas que quedaron sin cumplir, toda forma de violencia que viví, todos los insultos que golpearon mi existir, toda ausencia de ternura que sufrí en el olvido van a quedar… es un alivio el perdonar sin tratar de cambiar lo que no cambiará. Aprendiendo a aceptar lo que fue y será… puedo hacer que el ayer se renueve por completo y yo con él… Octavo paso del perdón: ponerse en el lugar del que cometió la infidelidad La empatía es entrar descalzo al corazón del otro. En medio del dolor y el sufrimiento tiende a ocurrir que la persona engañada ve sólo lo malo de su cónyuge infiel, y pierde de vista que él o ella son solo seres humanos y que a pesar del error tan grave que ha cometido tiene muchas cosas buenas en su ser, la infidelidad es sólo una parte de lo que él o ella ha hecho, trate de empezar a pensar en las cosas buenas de su pareja, haga una lista de lo que más le gustó cuando le conoció y se enamoró. Haga una lista de las cualidades buenas que su esposo(a) tiene. ¿Qué cosas admira y valora de él o ella? No permita que el dolor nuble su mente y le impida ver lo bueno del otro, piense en las cosas lindas que esa persona tiene, si no fuera así, usted no estaría tratando de estar con él o ella. Saque un tiempo para decírselas, no solo debe reclamar, muchas veces olvidamos decir lo bueno del otro por la tendencia tan natural de ver siempre lo malo y negativo, debe tomar un tiempo para charlar acerca de esto con su cónyuge, quizás usted diga ¿Pero cómo yo le voy a decir algo bueno al que me ha sido infiel? Hágalo, recuerde que usted se ha comprometido con un proceso de perdonar, hacerlo le ayuda a cambiar la forma de pensar acerca del otro y se sentirá máscerca de su esposo(a). La persona engañada tiene muy metido en su mente la idea de que es la única persona que sufre o por lo menos es la que más sufre, pero debe entender que su cónyuge infiel también sufre y mucho. ¿Cree que es fácil estar en la mira de todo el mundo como culpable? Una persona infiel que realmente se ha arrepentido puede experimentar muchos sentimientos, vergüenza, dolor, frustración y rabia contra sí mismo. Como se vio en el paso anterior, una de las cosas más duras en la vida es perdonarse a sí mismo los propios errores y equivocaciones, pues no sólo están las consecuencias malas de los actos sino que queda una herida en el ego, el orgullo propio está herido, aceptar esto y vivir con ello no es nada fácil, debe tener presente que su cónyuge ha cometido una falta muy grave, y su dolor puede ser aún más grande, trate de ponerse en el lugar de él o ella y quizás pueda empezar a mirarle con una nueva mirada más compasiva. Ejercicio 8: la empatía Trate por un momento de ponerse en el lugar de su cónyuge: · ¿Cómo cree que él o ella se siente? · ¿Cómo cree que él o ella se siente cada vez que hay reclamos y peleas por la infidelidad? · ¿Si usted fuera el infiel o la infiel arrepentida(o), como le gustaría ser tratada(o)? · Quizás usted diga “yo nunca haría algo así” pero trate de hacer este ejercicio, digamos que usted en su humanidad y fragilidad cometió la locura de la infidelidad. · ¿Cuál es la historia de su esposa(o)? ¿Cómo ha sido su vida en la infancia o adolescencia? · Sin querer justificarle: · ¿Qué heridas o vacíos pueden haber en su corazón? Debe entender que su cónyuge tiene su propia historia que le pudo haber marcado y también está luchando con perdonarse a sí mismo(a), usted debe animarle a trabajar el tema de perdonarse a sí mismo. Recordar la fragilidad del ser humano es importante, ser muy perfeccionista puede ser muy malo para las relaciones, cuando se exagera en la perfección, se espera que todo salga como uno quiere, cuando uno lo quiere y que los otros nunca se equivoquen. Si usted hubiera estado esperando a una mujer u hombre perfecto, que nunca se equivoque, le aseguro que aun seguiría esperándolo y estaría soltero o soltera, porque personas así no existen. Aceptar esto es importante en el proceso de perdonar, es ser más compasivos, ver al otro bajo una nueva mirada de compasión y comprensión. Antes de pasar al paso nueve, que es el regalo del perdón hay varias recomendaciones, no haga este paso apresuradamente, esto no es una maratón, así que debe ir a su propio ritmo, cuando usted haya trabajado a conciencia los pasos anteriores, quizás perdonar le tome más tiempo del que usted pensaba, esto no se hace en un día o una semana, le puede tomar varios meses para poder trabajar su dolor, su perdida, sus pensamientos, perdonarse y ponerse en el lugar del ofensor. Si es necesario regresar atrás y repetir algunos de los ejercicios no importa, puede ser bueno para usted. Lo importante es que usted entre al paso nueve consciente de que lo desea y lo quiere hacer. Noveno paso del perdón: otorgar al otro el regalo del perdón “El perdón no cambia el pasado… pero puede cambiar el futuro”9 Usted ha recorrido un largo camino para llegar hasta acá, otorgar el regalo más precioso que una persona puede dar o recibir: El perdón. Debe sentirse orgulloso(a) de querer hacerlo. Dios es amor y seguramente le ha perdonado muchas cosas ¿Qué le ha perdonado Dios a usted? Si no es creyente puede pensar en las personas que le han perdonado a usted en el pasado ¿Qué le han perdonado? ¿Cómo se sintió al recibir el perdón? ¿Está listo(a) para recibir la bendición de perdonar? EJERCICIO 9: EL REGALO DEL PERDÓN · Busque un espacio tranquilo, siéntese en un lugar cómodo, y apague su celular. · Si lo prefiere grabe esta narración para que pueda escucharla con los ojos cerrados y concentrarse en la historia, si no, lea con calma lo que está a continuación y trate de imaginarlo. · Respire suavemente mientras se deja llevar a través de la narración: Usted está en el bosque, al lado de un hermoso puente de madera que atraviesa un río, el sol brilla y el viento acaricia su rostro, camina hacia el puente y lo cruza, al otro lado hay un largo camino entre viejos árboles, camina por ese sendero hasta llegar a una vieja cabaña, entra en ella … todo está oscuro allí adentro, siente un poco de temor pero sigue adelante, usted sabe que debe continuar …ha caminado mucho para volver atrás, cuando puede ver mejor en la oscuridad encuentra una lámpara y la prende, observa el lugar y en el fondo de la cabaña puede ver dos personas atadas, con cuerdas en sus manos y sus pies… Usted se acerca más y puede ver sus rostros, con sorpresa descubre que usted es uno de los que está allí atado, el otro es su cónyuge, allí están sentados los dos, uno de espaldas al otro… de repente usted está ocupando su lugar en la silla, está allí atado a todo su dolor, tristeza, rabia. Su cónyuge también está allí sintiendo todo lo que usted siente… ¿Cómo se siente de estar allí atado y que su cónyuge también lo está? De repente usted se da cuenta que no están solo en esa habitación, hay alguien más allí, levanta sus ojos y puede ver una persona que les mira con amor y compasión, si Ud. es creyente puedes pensar en Jesús y en como él trató a todas las personas de su época. Si no es usted creyente, piense en una persona que le ama, que se preocupa por usted y quiere que usted sea libre. Jesús o esa persona se acerca a usted y le pregunta ¿Quieres que te ayude a ser libre? Usted se sorprende y se pregunta así mismo(a) ¿Quiero ser libre? ¿Estoy dispuesto(a) a soltar mis ataduras? ¿Dejar libre a mi esposo (a)? Si quiere ser libre, dígale a Jesús o a esa otra persona que le ayude… ve como él se acerca sonriendo, feliz de poder ayudar se agacha y suelta las ataduras una a una…. Usted se siente libre, más liviano (a) puede sentir el amor de Dios y su perdón, comprende que por esto Jesús dio su vida…se levanta y usted se da cuenta que puede caminar sin ese peso en el corazón, mira a su esposa(o), le observa allí atado como antes usted estaba …se acerca a él y puede sentir algo de su dolor y tristeza pero también usted siente el deseo inmenso de liberarle… usted se agacha y con mucho cuidado quita sus cadenas, puede ver su rostro, mirar sus ojos …ver sus lágrimas y su dolor de haber causado tanto daño …. “Usted le dice TE PERDONO eres libre…no te voy a cobrar más esta deuda… está cancelada…” Diga todo lo que hay en su corazón… quizás también usted deba pedirle perdón… por algo que ha hecho y le ha hecho daño a él o ella. Se pueden mirar a los ojos, ya no hay esa rabia…hay paz….Juntos toman esas cuerdas y cadenas que les recuerdan cada ofensa, cada daño, cada dolor. Los dos salen de la cabaña …el sol brilla, sienten el peso de esas ataduras pero caminan hasta el hermoso puente de madera, pero ya no es un puente sobre un río tranquilo … en medio del puente pueden ver el agua que fluye rápidamente y con fuerza, juntos levantan las cadenas y las arrojan al río, éstas rápidamente son arrastradas por la corriente, juntos pueden ver cómo se van alejando, la corriente es más poderosa para arrastrar esas ataduras así como el amor y el perdón es más poderoso que el odio y la venganza …. Ven cómo se van, ya no están más en sus vidas, se sienten en paz libres….dan gracias a Dios por el regalo del perdón. Te sientes orgullosa (o) de ti, puedes felicitarte! Puedes celebrar… lo has logrado! Has dado el mejor regalo que un ser humano puede dar y recibir! Ritual del perdónYa ha otorgado el perdón a esa persona que tanto le ha dañado, pero su cónyuge aún no lo sabe, ahora debe darle ese regalo, para esto es bueno hacer un ritual, usted debe buscar un momento especial para compartir esta experiencia con él o ella, invítele a una cena especial, solo los dos. Usted debe comprar un pequeño regalo que pueda estar lleno de significado y simbolice el perdón que usted le está otorgando, quizás sea un corazón, una llave, un anillo, etc. Dele un significado, por ejemplo la llave podría ser entregar de nuevo la llave de su corazón como símbolo del perdón, empaque su regalo de una forma especial, haga una tarjeta y exprese en ella su perdón, si en medio de este proceso se ha dado cuenta de algunas cosas por las cuales usted debe pedirle perdón a su cónyuge, este es un buen momento para hacerlo. Perdonar no es olvidar, es recordar sin dolor, sin amargura, sin la herida abierta; perdonar es recordar sin andar cargando eso, sin respirar por la herida, perdonar es dejar de recordar al otro lo malo que nos ha hecho, entonces te darás cuenta de que has perdonado. Autor desconocido Si al caminar todo este recorrido usted aún no se siente capaz de hacer el paso nueve y siente que no ha podido perdonar, debe hacer una evaluación muy honesta ¿En quién está la dificultad? ¿En usted que quizás tiene el corazón endurecido o quizás no ve un cambio ni arrepentimiento verdadero en su esposo(a)? Si encuentra que el problema es suyo sería bueno ir más despacio, recuerde que el perdón es un proceso y tal vez necesita un poco más de tiempo, haga de nuevo el ejercicio del dolor, la perdida, revise si ha estado cortando con sus pensamientos adictivos, etc. y regrese al paso nueve cuando se sienta listo(a). Debe recordar que no perdonar es quedarse atado junto al otro y continuar alimentando toda una gama de dolor y rabia que no le hace bien a usted, ni a su cónyuge y menos a sus hijos. El perdón cae como lluvia suave desde el cielo a la tierra. Es dos veces bendito; bendice al que lo da y al que lo recibe. William Shakespeare Quizás el problema está en su cónyuge, si no ve en él cambio alguno, sigue mintiendo, es desamorado, no le interesa promover la intimidad emocional o no cumple con las cosas prometidas para ganar la confianza, es hora de evaluar si realmente él o ella están arrepentidos y quieren conservar el matrimonio, quizás sea necesario hablar con él acerca de lo que está pasando y lo que realmente quiere hacer con su vida y matrimonio. También puede ocurrir que en el fondo de su corazón usted sabe que si siguen juntos, va a seguir cobrándole lo que ha hecho día a día y viviendo un infierno en la tierra; quizás usted se ha quedado anclada(o) en la situación de víctima y no puede salir de allí, si esto es así usted debe buscar una ayuda profesional para hacer una revisión de su historia de vida familiar, quizás hay más heridas del pasado que le impiden seguir adelante dejando atrás el dolor. Es hora de ser honesto(a) y ponerse la mano en el corazón, continuar viviendo juntos debería ser para continuar bien, buscando una relación más madura y real. Si tiene muchas dudas es mejor dejar al otro en libertad y no estar juntos si es para dañarse mutuamente. Si esto es lo que hay en su corazón quizás sea bueno hacer el ejercicio del perdón pero al salir de la cabaña puede usted imaginarse que después de echar las ataduras al río cada uno toma un camino diferente, cada uno es libre, son libres para relacionarse como los padres de sus hijos sin meterlos a ellos en medio de una guerra sin cuartel, los hijos sufren mucho en medio de las separaciones pero también sufren de ver a sus padres en una pelea continua o en medio de una relación fingida y distante. Si lo descrito antes es su caso, usted puede sentirse muy sola o solo, porque a pesar de hacer todo, no logra perdonar o no ven el cambio en el cónyuge, puede experimentar todavía mucho dolor y rabia, si es así es hora de darle una oportunidad a Dios, para que el obre en su vida y corazón, perdonar tiene algo de divino, Dios puede brindarle ayuda si usted así lo quiere, Jesús es el experto en este tema del perdón y también es el experto en cambiar el corazón y darle una mano a todo el que lo pide, él puede darle algo nuevo, mire lo que dice este texto: Les daré un nuevo corazón, y les infundiré un espíritu nuevo; les quitaré ese corazón de piedra que ahora tienen, y les pondré un corazón de carne. 10 7. Carl Simonton. 1982. http://psicologiacotidiana.weebly.com/como- perdonar.html. 8. Jean Monborquette, Como perdonar. 9. http://mariajosemonticoach22.blogspot.com/2011_06_01_archive.htm.Extraído el 20 de agosto del 2011. 10. Exequiel 36:25 NVI http://psicologiacotidiana.weebly.com/como-perdonar.html http://mariajosemonticoach22.blogspot.com/2011_06_01_archive.htm CAPITULO IV El camino de ganar La credibilidad y el respeto “Cosechamos lo que sembramos” Biblia. Gálatas 6:1 NTV Este capítulo está diseñado especialmente para la persona que cometió la infidelidad y quiere trabajar en reconstruir su relación con su esposa o esposo. Quizás quien está leyendo esto sea la persona que sufrió la traición, si usted y su cónyuge están en el proceso de restaurar su relación, le sugerimos que no lea este capítulo por ahora y permita que sea su cónyuge quien lo haga, recuerde que hay un camino para usted: El camino del Perdón. Cada uno de estos caminos está diseñado para ser leídos de forma individual y cada uno de ellos tiene tareas o ejercicios que deberán ser hechos a solas y otros en pareja, pero esto será especificado en su momento. Antes de emprender este camino de ganar el respeto es muy importante hacer un compromiso personal consigo mismo, entendiendo que lo hace en libertad por su propio bien y el de la familia, debe aceptar que es un proceso que puede ser largo, difícil y en algunos momentos, muy doloroso, pero deberá persistir en este. También debe hacer un compromiso de caminar todos los pasos uno a uno y de hacer conscientemente cada uno de los ejercicios, deberá apartar un tiempo especial con su cónyuge antes de iniciar todo este proceso para explicarle lo que usted está dispuesto a hacer para restaurar la relación y salvar el matrimonio, en esta cita o tiempo con su esposa(o) debe explicarle que necesita tiempo para trabajar en su error, cambiar y que en este proceso de ganar el respeto y la credibilidad necesita de ella o él para hacer algunos ejercicios y poder conocer cuál es la forma más adecuada para ayudarle en el proceso de la recuperación. Si usted está dispuesto(a) a esto puede continuar y conocer los pasos sugeridos para la restauración. Primer paso para ganar la confianza: el arrepentimiento “Un buen arrepentimiento es la mejor medicina que tienen las enfermedades del alma”. Miguel de Cervantes El arrepentimiento es fundamental para la restauración de la relación, pero esta palabra en nuestros días está muy desvalorizada y mal interpretada, hay un dicho común que dice “El que peca y reza empata” como queriendo decir que al hacer algo malo, se requiere únicamente de un arrepentimiento pasajero pero luego se puede volver a hacer lo mismo. El verdadero arrepentimiento se trata de otra cosa y para esto vamos a analizar esta palabra en griego en el cual se escribió el Nuevo Testamento, porque si hay alguien que trabajo este tema del arrepentimiento fue Jesús y hay mucho que se puede aprender de este término. En griego la palabra usada para “arrepentimiento” es µετάνοια (Meta- noia) está compuesta por dos palabras Meta y Noia; meta es cambio o transformación, de esta raíz viene también la palabra “metamorfosis”que es cambio de forma. Noia es mente, lo que quiere decir que el arrepentimiento es un cambio o transformación de la mente, implica un cambio de manera de pensar para cambiar la manera de vivir. Este es un concepto mucho más profundo que sólo el dolor de haber hecho algo malo como muchas veces se interpreta el arrepentimiento, por supuesto el arrepentimiento también tiene que ver con el sentimiento de haber fallado y el dolor que esto implica, pero los sentimientos muchas veces son variables y por esto es necesario la voluntad. Para que haya una autentica restauración después de una infidelidad es necesario este arrepentimiento que involucra el hecho de aceptar que se ha obrado mal y tener la decisión de cambiar en lo más profundo del ser, implica cambiar no solo actitudes sino también formas de pensar que dañan la relación. Esto no es muy fácil, se necesita de mucho valor y madurez para hacerlo; es muy humano querer justificarse y buscar culpables para protegerse del dolor de haber fallado y es común que muchas personas cuando son encontradas en una infidelidad empiecen a culpar al cónyuge con frases como “Es que tú me has empujado a esto” o “Si tú fueras distinta(o) conmigo”, pero usted debe entender que justificarse no le ayudará en nada, en esta etapa usted debe asumir su responsabilidad, no importa cuán mal estaba su matrimonio, usted decidió ser infiel y no su pareja, entonces la recomendación es: no debe culpar a su cónyuge y mucho menos justificar o defender a la persona con la cual usted ha sido infiel. Ejercicio 1:valorar las consecuencias y daños Para poder tomar conciencia de lo que usted ha hecho, hay algunas preguntas que son importantes que usted responda con sinceridad, estas también le serán de ayuda para poder pedir perdón a su esposa(o) de una forma más específica y significativa. 1. ¿Cómo se han visto afectados? a. Su cónyuge b. Sus hijos c. Usted mismo d. Las familias extensas (Sus padres, suegros) · 2. ¿Qué áreas de su vida se han visto dañadas? (área física, emocional, espiritual, laboral, familiar, etc.) · 3. ¿Qué ha perdido en medio de esta locura? ¿Qué es lo que más le duele? · 4. ¿Qué está dispuesto a hacer para reconstruir su matrimonio? · 5. ¿De seguir sin cambiar de manera de pensar y actuar que podría pasar en su vida más adelante? · 6. ¿Qué merece su cónyuge después de soportar esta locura? No continúe al siguiente paso sin haber realizado a conciencia este ejercicio. Recuerde esto es un proceso que debe ser vivido a conciencia, tome el tiempo que sea necesario para realizarlo. Segundo paso para ganar la confianza: pedir perdón al conyuge engañado Fallar es tarea de todos, reconocerlo y pedir perdón es tarea de valientes. Después de ser más consciente del alcance de lo que hizo es importante buscar un espacio para hablar con su cónyuge y pedirle perdón, quizás ya lo ha hecho pero es bueno evaluar como lo hizo y si pidió perdón por todo lo que debería haberlo hecho. Recuerde; es muy importante que cuando lo haga no se justifique por lo que hizo ni culpe a su pareja, puede ser que su matrimonio haya estado en una etapa difícil o su cónyuge tenga actitudes que le son molestas y les distancian emocionalmente, pero esto lo viven muchas personas en sus matrimonios y aun así no son infieles, su cónyuge no lo fue y él o ella están en el mismo matrimonio. Lo que debe estar muy claro es que aunque las cosas puedan andar mal en un matrimonio esto no justifica la decisión de ser infiel, hay otros caminos para solucionar los problemas conyugales y tanto usted como su pareja deben empezar a buscar estos caminos. Pedir perdón es el momento de reconocer ante su esposa(o) la responsabilidad por la decisión de ser infiel y por todo el dolor y daños causados, si es posible y ambos están de acuerdo, es bueno contar con la presencia de una persona que sea de la confianza de los dos y que pueda estar presente en este acto sagrado de pedir perdón y que actúe como testigo de su compromiso de ganar la confianza; debe ser una persona imparcial y madura que no les condene ni reproche, pero si no se sienten cómodos con un tercero háganlo solo los dos. Para hacerlo, revise el ejercicio anterior y mire por qué cosas debe pedir perdón, no solo por haber sido infiel sino por los daños que ha causado como “Perdóname por todo el dolor que he traído a tu vida y a nuestro hogar”, “Perdóname por haber roto la confianza que tenías en mi”, “por el daño que esto te ha hecho como mujer (hombre)”, etc. Trate también de expresar sus sentimientos y lo que descubrió al hacer el ejercicio anterior, el cónyuge engañado siente y piensa que es el único o única que sufre, es bueno que él o ella sepa que usted también se siente mal, triste, avergonzado(a), etc. Pero que está dispuesto(a) a hacer lo que sea necesario para restaurar la relación, especialmente a comprometerse con decir la verdad. Una tentación a la hora de pedir perdón es el deseo de justificarse, vienen a la mente todas aquellas cosas del pasado que podrían servir de excusa, también puede estar el deseo inmenso de empezar a reclamarle a su cónyuge todas las cosas malas que él o ella ha hecho en la relación. Algo que usted debe tener muy claro es que este no es el momento adecuado, recuerde que se debe trabajar en orden. Si hay deudas emocionales del pasado, una infidelidad de su cónyuge que no se trabajó a tiempo o ha existido maltrato de parte de él o ella hacia usted, estas cosas serán trabajadas más adelante y usted podrá reclamar y pedir los cambios necesarios de parte de su esposa o esposo. Es muy importante que usted no vaya con la expectativa de recibir el perdón en ese momento, esto es casi imposible porque la herida causada es grave y requiere de tiempo para sanar, recuerde que su pareja debe estar al mismo tiempo viviendo su propio proceso: recorrer el camino del perdón; pero esto le tomará tiempo, lo importante es que él o ella esté dispuesto a hacerlo. Su parte en este momento es reconocer el grave error que ha cometido y PEDIR PERDÓN. Recuerde la frase al inicio de este paso: “Fallar es tarea de todos, reconocerlo y pedir perdón es tarea de valientes”. Tercer paso para ganar la confianza: el compromiso con la verdad “…La verdad los hará libres” Biblia. Juan 8:31b La verdad es la base para la confianza y justamente la confianza es la que más ha sido dañada en medio de la infidelidad, por esto el compromiso con la verdad es fundamental pues cuando se ha sido infiel la mentira se hace parte de la vida, hasta puede volverse un hábito que debe ser cambiado, detrás de cada mentira hay otra más grande para poder tapar la anterior, otro punto muy importante es que la mentira crea distancia emocional, aún las mentiras más pequeñas. La verdad por otro lado libera, bien dice un dicho “el que siempre dice la verdad no tiene que pensar en lo que ha dicho”. Es muy importante indagar el porqué de la mentira y empezar a explorar porqué usted lo hace. Cuando alguien miente existe la tendencia a quedarse discutiendo por la mentira, pero más importante es descubrir la razón para hacerlo ¿Qué hay detrás de la mentira? ¿Será miedo a las reacciones del otro? o ¿Será poca tolerancia al enojo y a las crisis? muchas personas mienten por estas causas, engañándose a ellas mismas, personas así deben aprender que no se puede manejar ni controlar las reacciones de los otros, solo las propias, también deben entender que los enojos y las crisis son parte de la vida y hay que aprender a tolerarlas y manejarlas de la mejor forma para que ambos cónyuges puedan ganar en la relación. Es mejor enfrentar a su cónyuge con unaverdad aunque se enoje antes que decirle una “mentirijilla” que siembra desconfianza. El enojo es pasajero la desconfianza no. Este miedo está muy enraizado en la vida de muchas familias, es algo que tiene que ver con la crianza; los hijos vienen y cuentan a sus padres algo que han hecho y que es una conducta reprochable ¿Cuál es la reacción del padre? Casi siempre es de enojo y condenación, pero pocas veces se valora el hecho de haber dicho la verdad y la mayoría de los padres solo se quedan con el acto negativo que su hijo cometió; sin diferenciar entre el hecho y la persona, aprendemos que si decimos la verdad no solo hay el enojo del padre o madre sino que se dañan las relaciones y esto genera temor, temor a perder al otro y a tener que enfrentar largas discusiones y crisis. El ejemplo de una familia puede ayudar a comprender mejor como funciona esto de las mentiras, digamos que Felipe, un joven de 15 años tuvo un mal día en su colegio, él llega a casa y en medio del almuerzo cuenta a su madre algo de lo que pasó “Mamá hoy en el colegio me dejaron en detención …” lo más seguro es que Felipe no alcance a terminar su frase, seguramente su mamá comenzará a sermonearle, o a regañarle, sin ni siquiera haberlo escuchado “¡Cómo es posible! Seguramente hiciste otra de las tuyas… en que estabas pensando… cuándo podré estar tranquila sin que me des problemas”, si el chico trata de explicar lo que pasó y no es escuchado y además de esto es castigado, en la cabeza de Felipe se irá implantando un pensamiento muy lógico, decir la verdad no es tan bueno, porque no solo se obtiene el enojo de la madre sino que además es sermoneado, tiene que aguantar una larga discusión y finalmente será castigado. Este tipo de intercambio entre un padre y un hijo es el caldo de cultivo para la mentira. Si la madre hubiera dejado que Felipe terminara de contar su historia, calmando su ansiedad, controlando el enojo y haciendo preguntas inteligentes “a ver hijo cuéntame más acerca de esto, ¿Cómo fue que ocurrió? ¿Qué piensas de lo ocurrido? ¿Cómo crees que se sintió ese compañero al cual ofendiste?” etc., este tipo de diálogo no corta la comunicación y además está teniendo en cuenta que el chico ha tenido el valor y la confianza para decir la verdad, esto es algo que debe ser valorado, una madre en estas circunstancias puede decir a su hijo “Gracias por ser honesto, valoro mucho que me hayas contado esto, aunque no estoy muy contenta con tu actitud, aprecio que digas la verdad … debo pensar con tu padre en una consecuencia por tu comportamiento negativo en el colegio” es verdad que el chico no se libra de un castigo o disciplina, pero al menos no tiene que lidiar con un enojo exagerado de su madre y también puede apreciar que decir la verdad le permite mantener la relación de confianza con los que más ama. Las personas le tienen más miedo a perder una relación que al castigo, es por esto que la mentira puede hacerse parte de la vida de alguien. Este tipo de historias se repiten a diario en la relación de pareja, un esposo o esposa empieza a callar algunas cosas, porque la reacción que obtendrá al decir la verdad será igual a la de la madre de Felipe, así que es importante analizar si esto es una de las razones para no decir la verdad, si es algo aprendido del pasado o se debe a reacciones un tanto exageradas de su cónyuge. Si este es su caso, debe haber un cambio en ambas partes, es decir su cónyuge también debe aprender a calmarse cuando escucha una verdad que no les gusta y aprender a valorar el hecho de que no mienta. Si a usted le cuesta mucho ver a su cónyuge enojado(a), es importante vencer ese miedo al enojo del otro y sus reacciones, él o ella por su parte deberá trabajar sus propias reacciones, tomar conciencia de cuan exageradas son a veces y cuánto daño hacen a la relación, pero esto lo hará en su propio tiempo y proceso, recuerde, su cónyuge también está en esto, dele tiempo para trabajar su parte en el problema. Ejercicio 2: mis miedos y reacciones Antes de continuar con el siguiente paso, tome un tiempo tranquilo para hacer este ejercicio, mire lo que descubre acerca de usted mismo, sus miedos y reacciones. Pregúntese luego de terminarlo ¿Cómo sus miedos le hacen reaccionar de una forma negativa con su cónyuge? Cuando ha ocurrido una infidelidad es bueno que quien cometió la infidelidad pueda identificar sus sentimientos y miedos. Trate de pensar en cómo se ha sentido en medio de toda esta crisis, la mayoría de las personas que se sienten enojados(as) o tristes, pero hay más que estos sentimientos, para ayudarle a tomar contacto con sus sentimientos, tenemos una lista larga de ellos, señale los que le describen mejor: · CULPABLE(A) · INCOMODO(A) · INDIFERENTE · CONFUNDIDO(A) · INDIGNADO(A) · INSEGURO(A) · ASUSTADO(A) · ANSIOSO(A) · PREOCUPADO(A) · OFENDIDO(A) · FURIOSO(A) · TRISTE · AMARGADO(A) · HUMILLADO(A) · HERIDO(A) · AVERGONZADO(A) · HARTO(A) · DESANIMADO(A) · MISERABLE · DESGARRADO(A) · DESPRECIADO(A) · OTRO: Para quien cometió la falta, además de poder tener contacto con su propio dolor, esta lista le será útil a la hora de hablar y calmar a su cónyuge cuando esté enojado(a) o triste, en vez de huir, enojarse o callar (que es lo habitual) lo que tiene que hacer es quedarse, abrazarle y hablar, un ejemplo: ante un reclamo de su cónyuge, mala cara o indirecta por todo lo que usted ha fallado, él o ella lo que necesita es escucharle a usted decir algo como: “Me siento tan furioso(a) y avergonzado(a) conmigo mismo(a) por todo lo que te hice, lo siento” o “yo también me siento triste con todo esto, es muy duro para mi haber sido tan tonto(a) para hacer todo lo que hice”. Detrás de cada sentimiento hay un miedo, y por lo general no se expresa realmente lo que se siente, el sentimiento que más fácil se comunica es el enojo. La mayoría de las personas o ataca o se distancia. La siguiente parte es para ayudarle a ver sus miedos que son como los motores de sus reacciones, trate de identificar uno o dos de los que más le describen: TENGO MUCHO MIEDO DESCRIPCION: A ser rechazado(a) Siento que no soy necesario para el otro, no me quieren, me ignoran. Me quedaré sola(o), sin protección o compañía. A no tener el control No tengo éxito en lo que hago ni lo que soy. No puedo hacer bien las cosas, no soy lo suficientemente bueno(a) A ser incompetente No puedo hacer nada para cambiar al otro, no tengo la capacidad para conseguir lo que deseo. Nada de lo que hago le hace feliz a mi esposo (a). A ser desvalorizado No soy una buena persona, no merezco al otro A estar insatisfecho Me siento incapaz, no hago nada bien, todo me sale mal. A ser defraudado Me siento inferior, no valoran lo que soy, pienso o hago. No importo para los demás. A ser indigno No estar bien ni feliz, sentir que algo me falta. A ser juzgado Que se aprovechen de mí y no meden lo que merezco y deseo. A ser humillado Que me critiquen y tengan opiniones negativas a cerca de mí. A ser Que el otro (a) me quiera obligar ahacer lo que ella o él quieren. A ser manipulado y a que me traten sin respeto, me controlado quiten mi dignidad y mi capacidad de decidir. Después de identificar sus miedos, ¿Cuál es el que más le afecta? ¿Puede identificar cuando este miedo entró en su vida? ¿Desde cuándo le acompaña? Muchas de las reacciones en los conflictos se deben más a las historias personalesy experiencias pasadas. Es importante tomar conciencia de cuáles son sus miedos principales y como le afectan o controlan en sus relaciones. Mire su lista de miedos, elija uno o dos, los que más le describen. Identifique sus reacciones · ¿Qué tiende usted a hacer cuando experimenta esos sentimientos? · (el miedo que descubrió en la parte anterior de este ejercicio) · ¿Qué hace cuando alguien o algo disparan en usted ese miedo? · Escapar · Enojarse · No acepta el error · Se pone de mal humor · Se pone terco(a) · Ataca y desvaloriza al otro · Guarda silencio · Enfurecerse · Culpa · Manipula · Defenderse · Soporta injusticias · Daña a otros · Miente · Discute · Exagera las cosas · Niega · Resentirse · Quejarse · Se hace daño Sea muy honesto(a) con usted mismo(a), observe bien sus reacciones y piense cómo estas reacciones le alejan de su pareja ¿Cómo esas reacciones afectan su vida? ¿Identifica algunas razones por las cuales usted miente? ¿Qué puede empezar a cambiar hoy? Elija algo fácil de hacer para empezar el cambio, recuerde, los cambios pueden empezar con algo pequeño. Es recomendable que usted tome iniciativas para el diálogo, una cita semanal para salir solos, compartir alguna actividad juntos y hablar, seguro que después de hacer el ejercicio de los miedos pueden ir saliendo poco a poco temas de diálogo, recuerde que antes de la infidelidad seguro había mucha distancia emocional entre ustedes y la mejor forma de acortarla es a través de conversaciones honestas y del corazón. Sin atacar a su cónyuge, usted puede ir abriendo su corazón acerca de sus miedos y reacciones, el otro no es adivino, no sabe que es lo que hay en su corazón y tampoco que es lo que más le molesta, disgusta o dispara sus miedos y malas reacciones. No diga cosas como “es que tú me haces sentir enojado o controlado” Sino use expresiones desde el yo “sabes he estado descubriendo cosas acerca de mí, yo tengo temor a ser controlado y cuando me siento a si tiendo a enojarme o huir, etc.” Usted puede aprovechar esos diálogos para decirle a su cónyuge las cosas que le molestan de la forma de ser de ella o él. Cuarto paso para ganar la confianza: ir un paso adelante para ganar el respeto “Nunca se aparten de ti la misericordia y la verdad, átalas a tu cuello…y hallarás gracia y buena opinión ante los ojos de Dios y de los hombres”. Biblia. Proverbios 3.3-4 Usted es la persona indicada para ayudar a su cónyuge a que de nuevo crea en usted, pero esto es un proceso que puede tardar y hay algunos pasos concretos que usted puede dar, uno de ellos y el más importante es decidir cortar toda relación con su ex amante, esto implica hacer cambios radicales en todas las cosas que sean necesarias; como el cambio del número de su celular, cerrar cuentas en Facebook u otras redes sociales, cortar relaciones con amigos o conocidos que le conecten con la persona con la cual usted fue infiel. Es muy importante que hable con su cónyuge acerca de esto y juntos decidan qué es lo que a él o ella le daría más confianza y tranquilidad. Lo importante es que usted le demuestre que está dispuesto a hacer todo lo necesario para restaurar la relación y que está comprometido con este proceso, así que debe hacerle algunas preguntas a su esposa o esposo, como ¿Qué te ayudaría a estar más tranquila(o)? ¿Qué cosas son las que ponen en peligro nuestra relación de pareja? ¿Qué quieres que yo haga para que tú estés más tranquilo(a)? Ir un paso delante de su cónyuge para ganar la intimidad emocional y la credibilidad, su esposa o esposo está esperando muchas cosas de usted, no espere que le pida, adelántesele en pequeñas cosas, como contarle sobre su día; cuando llegue a casa cuéntele lo que le paso, pueden ser cosas sin importancia pero comuníquese aun antes de que éste pregunte. Dígale lo que hizo, con quien se encontró, háblele de algún problema del trabajo o alguna alegría. No dé lugar a dudas, diga dónde va a estar, con quien, su hora de llegada y cumpla con esta hora; tome un tiempo de su día para llamarle y saludarle, no deje que sea ella o él que llame para controlarle (recuerde el miedo y la desconfianza que usted sembró en su cónyuge le puede hacer esto), llámele usted varias veces al día, sorpréndale con mensajes o llamadas inesperadas, cuéntele lo que está haciendo o algo que ha pensado de él o ella, dele las gracias por darle esta oportunidad. Después de una infidelidad la persona engañada tiende a ser paranoica y celosa, esto le puede hacer actuar de formas que le hacen a usted sentirse acosado y controlado, lo mejor en estos casos es adelantarse, no se deje acosar, conviértase usted en el acosador, llámele antes de que él o ella le llame, cuéntele todo lo que hizo antes de que le pregunte, etc. Recuerde los viejos tiempos cuando se conocieron y usted hacía cosas por él o ella, qué le agradaba ¿Sabe qué es lo que más le gustó a su esposo(a) de usted cuando se conocieron? ¿Qué cosas hacían juntos y les divertía? Como cónyuge usted es la persona que más conoce a su esposa(o) o al menos debería serlo, si esto no es así, queda en evidencia que los dos han estado muy distanciados emocionalmente y es hora de que esto cambie. Es cierto que uno no termina de conocer a otra persona nunca, pero es importante crecer en ese conocimiento del otro sin agotar las sorpresas y nuevos descubrimientos. Otras ideas para ir un paso adelante · Pídale su opinión acerca de algo que usted ha estado pensando hacer. · Compre un presente, usted sabe que le gusta más a ella o él, que su cónyuge sepa que usted estuvo pensando en él o ella. · Sorpréndale buscándole o visitándole en su trabajo. Mándele mensajes a su celular · Invítele a una salida especial · Si no tuvieron luna de miel, pregúntele si le gustaría tener una y que le gustaría hacer o donde ir, Sueñen juntos en este proyecto. · Sobre todo sea paciente y amable, no se enoje fácilmente, recuerde el proverbio: La blanda respuesta aplaca la ira. · Quinto paso para ganar la confianza: sembrar con paciencia Para ver el fruto de la siembra, hay que esperar, esperar y esperar… con paciencia. Una ley de la vida es que cosechamos lo que sembramos, nadie siembra tomates y cosecha aguacates, esto lo tiene que tener muy claro la persona que cometió la infidelidad, con sus actos ha sembrado temor e inseguridad, ¿Qué se puede cosechar? ¿Cómo cree que su cónyuge puede reaccionar? Es el momento de cosechar ira, resentimiento, enojo y desconfianza; lo primero es aceptar que esta es la cosecha y lo mejor es armarse de paciencia para recogerla y aceptarla. Recuerde su esposa o esposo están en otro proceso, él o ella serán guiados a perdonar e ir disminuyendo todas estas emociones tan fuertes, pero necesita tiempo, mientras esto ocurre usted debe aprender a manejar esos malos momentos y crisis de su cónyuge. La mejor forma de hacerle frente es con la misma ley de la siembra y la cosecha, empiece por sembrar algo nuevo, sembró desconfianza, mentira, enojo, distancia; ahora es tiempo de sembrar otra vez. Siembre confianza, verdad, paciencia, buen trato y valoración. Hay que tener muy presente que nadie siembra un día y cosecha a la mañana siguiente, la cosecha tarda en llegar, sembrar requiere de sacrificio, preparar el terreno,abonar, regar y cuidar, todo esto toma tiempo y requiere de paciencia. Perseverar es la clave en esta etapa, especialmente en los momentos en que su cónyuge tiene un mal momento, un ataque de ira, vuelve a reclamar, se muestra distante y enojado(a) sin “razón aparente”, etc. Estos momentos son los más duros que le harán desanimar y querer abandonar el camino, no lo haga. Tenga presente que usted está sembrando algo nuevo. ¿Cómo lidiar con los ataques e ira del otro? Lo mejor es tomar la posición de “hombre abajo” esto es bajar la cabeza y no defenderse, hay un proverbio muy antiguo “La blanda respuesta aplaca la ira”. Cuando alguien es atacado, la reacción normal es defenderse o huir, ¿Cuál es su tendencia? La idea de “hombre abajo” es no defenderse ni huir, se trata de saber responder a esos momentos difíciles. Su esposa(o) está lidiando con el temor, el miedo ha hecho nido en su corazón, la mejor forma de vencer ese miedo es con amor, “el perfecto amor hecha fuera el temor”. Recuerde que los miedos pueden hacer reaccionar a alguien en formas muy negativas y repentinas, por esto su cónyuge actúa de esas formas que a usted le pueden asustar, enojar o cansar, debe tratar de ponerse en el lugar del otro ¿Cómo estaría usted si fuera la persona engañada? ¿Qué sentimientos y reacciones tendría? Quizás su dolor y miedo le harían reaccionar de formas muy diferentes que harían daño al otro. Tiene que empezar a cambiar su forma de ver las reacciones de su cónyuge, sus ataques de iras, indiferencias, malas caras y reclamos son el fruto de su dolor, usted debe aprender a cambiar sus reacciones ante sus “ataques”. Cuando estos ocurren es normal que en su cabeza pasen pensamientos como estos “No es posible, otra vez, que pereza…se supone que me está perdonando, yo no puedo más con esto, esto no va a funcionar!” y usted para protegerse, puede empezar a atacar diciendo todo eso que le pasa por la cabeza en voz alta o gritando; o quizás prefiera irse o quedarse callado sin decir ni una palabra. ¿Qué provoca esto en su cónyuge? Más miedo e inseguridad, pues con su reacción lo que ella puede interpretar es: “Esto no va a funcionar, ya está cansado, en verdad no está arrepentido, no me quiere” y una infinidad más de pensamientos; pero lo que ella o él están diciendo, o más bien gritando con esta conducta es “Dame seguridad” “Te necesito” “Quiero estar seguro(a) de que estás arrepentida(o)” Lo que el cónyuge engañado necesita, es que en momentos así usted responda de forma diferente a la acostumbrada (enojarse, atacar, callar o huir), usted debe reaccionar de formas que le ayuden a quitar su miedo. Enojarse o huir no ayuda en nada, lo que necesita es quizás un abrazo que le dé seguridad, algunas palabras que calmen su ansiedad, nada de reclamarle o culparle por lo que usted hizo; lo que él o ella necesita en ese momento es sentirse valorados y protegidos. ¿Cómo se logra esto? En vez de distanciarse o enojarse tome la iniciativa de acercarse más, quizás no quiera un abrazo pero intente hacerlo, dígale algo que nazca de su corazón y que refleje lo que usted está comprometido a hacer para salvar su relación, todo aquello que logre mostrarle a su cónyuge que usted está comprometido(a) con este proceso. Venza el miedo del otro con amor, hable de sus sentimientos, pídale perdón por ser parte de todo lo que él o ella está sintiendo en ese momento, exprese su compromiso, por ejemplo: “sé que te sientes muy mal, perdóname por esto, lamento mucho haberte causado tanto dolor, he sido un tonto” “sé que te sientes muy mal por todo esto, pero recuerda yo estoy acá, quiero que esto funcione, estoy haciendo todo de mi parte ¿qué más puedo hacer?”, pero recuerde todo esto debe salir de su corazón, busque lo que hay en su interior, si usted está arrepentido de verdad, muchas cosas naturales fluirán de su corazón. De esto se trata el sembrar, persistir en hacer cosas buenas por el otro, con cada acción que usted haga diferente, estará sembrando seguridad, amor, respeto, confianza e intimidad emocional. Tome iniciativas que le den seguridad al otro, planifique salidas solos, recuerde lo que a él o ella le gustaba que usted hiciera cuando eran unos enamorados y hágalo. Parte del trabajo de sembrar es tener paciencia cuando su cónyuge quiera tener información acerca de la infidelidad, usted debe tener presente que su esposa(o) está librando una batalla con su mente, sufrir una traición deja un vacío en el corazón y en la mente, pues la persona no logra entender lo que ocurrió, es como cuando se vive un trauma, hay la necesidad de organizar la información, darle sentido a la experiencia y comprenderla; por esto es que una persona que ha sido engañada queda con mil preguntas en su cabeza, y quiere aclararlas, usted es la persona indicada para ayudarle a enfrentar la batalla de los pensamientos, siendo paciente y contestando “todas” sus interrogantes siempre y cuando no sea algo que le haga más daño a él o ella, cuando su cónyuge le diga necesito hablar más acerca de lo que paso, escúchele sin enojarse, su pareja debe tener toda la libertad de preguntar lo que quiera y usted tienen la libertad de contestar solo lo que considere conveniente y no le haga daño al otro; la clave está en la forma como usted reaccione a las preguntas que no debe contestar, en vez de enojarse o atacarle diga con calma “de eso mejor ni hablar no quiero hacerte daño” o “eso de nada te servirá, solo voy a responder lo que no te haga daño, recuerda que quiero estar contigo y salvar nuestra relación, permíteme cuidarte de esta forma”. Habrá muchas cosas que si puede responder y que le ayudan a su pareja a calmar la ansiedad, por ejemplo algunos datos, como desde cuándo, dónde se conocieron, si hubo regalos, etc. Pero detalles acerca de las relaciones sexuales o frases que se decían es mejor no hacerlo. Recuerde la clave está en como usted reaccione a las preguntas más incomodas, si no se enoja y además le da seguridad, su esposa(o) quedará más tranquilo(a) y poco a poco su mente se ira calmando, ella o él también tienen tareas y ejercicios para lograr vencer su lucha mental, pero esto le tomará un poco de tiempo. TENGA PACIENCIA. Sexto paso para ganar la confianza: valorar su historia personal y perdonarse Conócete a ti mismo…luego perdónate Pensar en las causas de la infidelidad puede ser útil si se hace para aprender y tomar medidas correctivas, no para juzgar o culpar a alguien, es bueno dar una mirada a su propia historia empezando por su familia de origen, ¿Es la infidelidad algo que se dio en la relación de sus padres o abuelos? En algunos casos la infidelidad es un patrón recurrente en varias generaciones y esto puede marcar la vida de alguien, pero es un patrón que debe ser cuestionado y cambiado si es su caso. Muchas veces es el grupo de amigos los que tienen este estilo de vida y llegan a ejercer una fuerte influencia en la vida de otros, con ideas falsas acerca de que “todo el mundo lo hace o porque conformarse con una sola relación pudiendo tener varias”, a veces el alcohol va de la mano con las infidelidades y hay que tener mucho cuidado con esto, si usted tiene problemas con el alcohol debe buscar ayuda para dejarlo. Aunque la decisión de ser infiel es cien por ciento suya, es bueno pensar ¿Qué cosas cree usted que son las que le animaron o que le abrieron las puertas para tomar esta decisión de serlo? Pensar honestamente en esto le ayudará a darse cuenta de posibles puntos débiles en su vida, su carácter, el carácter de su esposa(o) o algo que no estaba bien en la relación de pareja.Si usted encuentra que habían actitudes negativas de parte de su pareja o que su matrimonio era algo rutinario, no deje espacio en su mente para culparle, pues siempre hay otras alternativas de solución y usted eligió la infidelidad, otro camino pudo haber sido confrontar a su pareja de cómo se había estado sintiendo en la relación y hablar acerca de cambios necesarios en su matrimonio. Ejercicio 3: posibles causas de la infidelidad. Algunas de las causas más comentadas por aquellos que han sido infieles son las siguientes, obsérvelas con atención e identifique si hay alguna de estas en su vida: El aburrimiento y el riesgo de la rutina. La búsqueda de algo “mejor y más emocionante”. Mi esposo(a) no m e satisface sexualmente No hablar de la relación sexual con mi cónyuge. incomprensión. Falta de comunicación, respeto y valoración en la relación. Tener una relación distante con el cónyuge, sentirse menospreciado(a) o sentirse solo(a) al enfrentar la vida y los problemas familiares. La mujer tiende a sentir que su esposo ya no le ama, y el hombre que su esposa no le respeta ni valora. Pero si es solo una vez. Como rechazar esta oportunidad. En esta época todos lo hacen. Problemas de La soledad Falta de amor y respeto Creencias equivocadas Que él o ella sufra lo que yo sufrí. Se trata sólo de sexo. No saber decir no. Ser muy coqueto (a) Tener un complejo de salvador(a) que le hace entrar en relaciones confusas por ayudar a una amiga o amigo. El orgullo y la necesidad de sentirse atractivo (a) y capaces de conquistar. Dejarse influir fácilmente por las opiniones de otros y el deseo de experimentar algo nuevo. Sea cual sea lo que le abrió el camino para involucrarse con otra persona, y si usted es honesto(a) se dará cuenta que pudo haberse evitado trabajando el problema, aceptando que algo estaba mal, ya sea en usted, su cónyuge o en la relación de pareja. Es importante ver esto porque usted necesita ser consciente de sus puntos débiles para trabajarlos y estar más atento(a) la próxima vez, tomando los correctivos en su carácter o en su relación de pareja. Hoy en día los ambientes laborales y las redes sociales son los lugares más propicios para entrar en una relación de mucha intimidad emocional que puede terminar en una infidelidad. De hecho antes de una infidelidad sexual casi siempre hay una intimidad emocional. En el caso de las redes sociales, se puede hablar de una infidelidad cibernética, en algunos casos las personas no llegan a tener relaciones sexuales físicamente pero si pueden tener sexo cibernético, por medio de diálogos sobre sus fantasías, fotos, etc. Esto puede ser tan doloroso para la persona Problemas de límites. La vanidad La curiosidad y las presiones sociales engañada como si hubiera habido una relación sexual física; a esto se le suma el tema de la intimidad emocional, pues lo más seguro es que no solo comparten ideas sobre sexo sino también sobre lo cotidiano y cosas más íntimas como sentimientos, temores y problemas, cosas que deberían ser compartidas con el cónyuge y no con otra persona. Cuando se ha dado una infidelidad cibernética puede ser duro para el infiel que le cataloguen como tal, pero es la verdad, debe aceptar que ha sido infiel, y debe trabajar la adicción a los encuentros románticos en el internet. Al hacer el ejercicio anterior de mirar las razones para la infidelidad: · ¿Qué cosas descubre de sí mismo? · ¿Qué debe cambiar para que usted pueda disfrutar más de su vida en pareja? · ¿Qué maneras de pensar le perjudican y ponen en riesgo su familia? · ¿Qué cosas debe perdonarse a usted mismo? Perdonarse es también una parte muy importante de todo este proceso, no es fácil llevar acuestas el dolor, la culpa y todos los sentimientos que usted puede estar sintiendo, aceptar su error requiere de gran valor y usted está haciendo todo para salvar su matrimonio, esto es algo muy importante. Así que es necesario también que usted se perdone a sí mismo por todo lo que ha hecho, pues culparse o atormentarse con pensamientos repetitivos solo hacen que su ánimo de caiga. En el Capítulo III, se encuentra un paso muy importante El paso siete: perdonarse a sí mismo, este paso tiene varios ejercicios que le animamos a realizar, sería bueno que se detuviera en esta lectura y fuera a ese ejercicio, tómese su tiempo, verá como al perdonarse a usted mismo(a) se sentirá con nuevas fuerzas para continuar adelante. Séptimo paso para ganar la confianza: fomentar la intimidad emocional Como la vida necesita del agua para existir, el matrimonio necesita de la comunicación para vivir La intimidad emocional es una de las cosas más importantes en toda relación de pareja, si usted va un poco al pasado y recuerda cómo eran usted y su cónyuge cuando estaban en la etapa de enamorados o recién casados, podrá recordar que era muy fácil hablar y hacer muchas cosas solos disfrutándolas. Sólo piense en un restaurante lleno de parejas, es fácil ver quiénes son novios y quienes llevan varios años de casados, los novios están muy cerca el uno del otro, se miran a los ojos, no paran de hablar y sonreír, quizás hasta se dan la comidita en la boca, el resto del mundo no existe, solo ellos dos, hablar es la cosa más fácil para ellos. Por otro lado, ¿Cómo están los casados? La diferencia es notable, cada uno puede estar viendo el menú, mirando la tele o buscando algo en que distraerse, difícilmente se miran a los ojos y hablar parece que es una de las tareas olvidadas y uno se pregunta ¿Qué pasó? ¿Acaso no tendrían más cosas de qué hablar y qué disfrutar aquellos que viven juntos? Lo que ha ocurrido es que dentro del matrimonio se empieza a generar la rutina de la vida, los problemas normales del diario vivir y todo esto es como un refrigerante para el amor que va creando una distancia emocional, además que ya no se está en la etapa del enamoramiento que se describió en el primer capítulo de este libro. Fomentar la intimidad emocional es una tarea fundamental y voluntaria, no como antes que se daba de una manera espontánea, ahora hay que provocarla intencionalmente, esto requiere de aprender a comunicarnos, contar acerca de nuestro día, hablar de cosas gratas del pasado, recordar anécdotas del noviazgo, luna de miel, de los chicos, comentar libros, películas, noticas, pedir la opinión del otro sobre algo, respetar esas opiniones, comentar las cosas buenas que los otros hacen, agradecer y valorar lo que el otro hace en el día a día y que se considera una obligación desde el matrimonio. Esto es uno de los errores más comunes, no apreciamos lo que el otro hace porque estamos muy ocupados en ver solo lo malo de él o ella. Cocinar, recoger la ropa, trabajar duro, ser un buen padre o madre, ser cariñoso, alegre, respetuoso, sabio, generoso, etc. Se vuelven cosas sin importancia, pero no lo son. Hay muchas cosas que podemos apreciar, agradecer y lo que es más importante decirlo: “me gusta mucho cuando tu juegas con los chicos”, “me encanta tu sonrisa y como tratas a las personas”, “aprecio tu esfuerzo y deseo de salir adelante” más frases como estas deberían salir de su boca si quiere acercarse más a su cónyuge. Debe retomar la comunicación en todos los niveles, incluso el superficial, aquel en el que solo se habla de “tonteras” como el clima, los partidos, noticias, chistes, etc. Otro nivel es el de las ideas y pensamientos, hablar de sus ideas y convicciones, preguntándole al otro qué opina acerca de esto o aquello, compartir acerca de un libro leído o película, cosas que muynormalmente se hacían de enamorados. Pero hay un nivel más profundo y fundamental en la relación de pareja, es el nivel de la intimidad emocional, en este nivel no solo se habla de ideas o pensamientos sino que también se expresa lo que se siente, se habla de temores, anhelos y sueños; se muestra interés por el otro. Después de una infidelidad este nivel cobra una importancia muy grande, pregúntele a su cónyuge como está, haga citas semanales para salir solos a tomar un café o cenar fuera de casa y pregúntele como está, como se siente, qué sueños tiene, etc. cuéntele sobre su día antes de que el otro pregunte, también pueden hablar acerca de las cosas que antes de la infidelidad estaban mal entre ustedes, sin culpar, solo con el deseo de cambiar para estar más cerca el uno del otro, puede usar todo lo descubierto en el paso anterior como un tema de conversación, pero sin acusar o culpar. La intimidad sexual puede ser para muchas parejas algo difícil de retomar sanamente, pues para la persona engañada puede ocurrir que los pensamientos acerca de la infidelidad lo atormenten a la hora de tener la relación sexual, esto se debe a que nuestro cerebro tiende a asociar una experiencia con otra; así el cónyuge engañado puede tener pensamientos desagradables como ¡Pero si estuvo con otro(a)! ¿Cómo sería? ¿Qué le diría? ¿Por qué lo hizo? etc. Pensamientos como estos no son fáciles de vencer y quizás su cónyuge no quiera saber nada de relaciones sexuales al principio, pero usted es la persona que más le puede ayudar, siendo paciente, preguntando, tomando iniciativas en esta área lo más pronto posible, pues para su esposa o esposo es muy importante saber que usted quiere estar con él (ella), esto aunque le puede indignar, al mismo tiempo le da seguridad. Pero usted debe ser muy tolerante si le rechazan, recuerde es producto de su dolor y miedo; su esposa(o) también estará por otro lado trabajando el tema de cómo lidiar con sus pensamientos y lograr vencerlos. Una forma de ayudar a su cónyuge es tomando iniciativas para la relación sexual y hablando con él o con ella acerca de cómo se siente, pregúntele qué cosas debe usted cambiar en esta área, qué disfruta más, qué puede hacer para que la experiencia sea lo más gratificante posible para su cónyuge, es importante que por un tiempo usted se concentre no en usted y su placer sino en el del otro, pues su pareja necesita lo más pronto posible asociar la relación sexual a una experiencia gratificante y dejar atrás la asociación con la infidelidad que es dolorosa y amarga. Algunas parejas por todo lo vivido tienden a postergar el retorno a las relaciones sexuales y esto es un error, pues están dando espacio a la distancia y quizás a alimentar los pensamientos negativos asociados a la infidelidad. Mientras más pronto se retomen las relaciones y más gratificantes sean para el cónyuge engañado será más fácil la restauración. Se ha descubierto que durante el orgasmo el cuerpo libera oxitocina, que es la hormona de los vínculos afectivos. Entre más relaciones sexuales tenga una pareja, mas vínculos de apego se crean entre ellos, podría decirse que es la hormona de la fidelidad, pues hay estudios que demuestran que en algunas especies de animales, esta hormona está asociada a la monogamia. Ahora es tiempo de hacer el ejercicio de “La distancia emocional”, este ejercicio le ayudará a ver lo que no estaba marchando bien antes de la infidelidad, trate de identificar lo que le desagradaba a usted de su relación de pareja. Ejercicio 4:la distancia emocional · ¿Cuáles eran los principales temas de conflicto antes de la infidelidad? · ¿Su esposo(a) se sentía valorado(a) y apreciado por usted? · ¿Usted se sentía amado(a) y valorado(a) por su cónyuge? · ¿Cuáles de los siguientes problemas estaban presentes en su vida familiar antes de que ocurriera la infidelidad? o Falta de amabilidad (Por favor, gracias). o Insultos y palabras hirientes. o Enojos frecuentes. o Gritos. o Indiferencia. o No escuchar o no hablar. o Burlas o hablar mal del cónyuge con amigos o familiares. o Problemas con las familias de origen. o Problemas con el dinero. o Problemas con los roles y tareas del hogar. o Problemas en las relaciones sexuales. o Problemas con los hijos (desautorizarse mutuamente) o Críticas hacia los suegros y familiares políticos. o Autosuficiencia (No tener en cuenta al otro para toma de decisiones) o Adicciones. o Violencia física o emocional. o Usar palabras y tonos sarcásticos. o Irresponsabilidad económica. o Irresponsabilidad con los hijos. o Orgullo y desprecio al otro (trabajo, forma de vestir, gustos, etc.) o Otros Mire su lista, elija tres temas o problemas que le parecen son los más importantes y de mayor aporte al conflicto y reflexione: · ¿Cuál es su parte en este conflicto o problema? · ¿Cuál problema debe ser trabajado primero? · ¿Es consciente de que esto le distancia de su pareja? · ¿Qué tiene usted que cambiar urgentemente para que su relación con su pareja sea menos distante? · ¿Cómo su pareja le puede ayudar en su proceso de cambio? · ¿Cómo puede hablar con su cónyuge de esto sin terminar en una pelea? Mire de nuevo la lista, casi siempre nos centramos en los problemas más grandes, elija una cosa o problema a la vez. Quizás el más pequeño de la lista pueda ser el más fácil para empezar a cambiar. Recuerde los cambios empiezan en pequeños pasos. Octavo paso para ganar la confianza: dividir mi dolor “Una carga compartida es una carga dividida” Proverbio Popular Este proverbio contiene mucha sabiduría, cuando vivimos situaciones muy difíciles y dolorosas lo más sanador es poder hablar de ello, tener personas dispuestas a escuchar, sin juzgar, regañar o sermonear; solo que escuchen y puedan dar ánimo para seguir adelante, esto es muy fácil cuando de mujeres se trata, la mujer por naturaleza y crianza es dada a hablar y expresar fácilmente sus emociones y sentimientos permitiéndose así desahogarse más libremente. No se puede decir lo mismo de los hombres, el varón tiende a guardar sus emociones y sentimientos. Para la mayoría de ellos es más difícil expresar como se sienten, por esto hay un viejo dicho “existen más viudas que viudos”, pues el hombre se guarda todo en su corazón, lo que le hace tener más tensión interna y le puede hacer más propenso a sufrir infartos cardiacos o derrames cerebrales que las mujeres. Pero tanto para el hombre como para la mujer es bueno contar con personas maduras y sabias que les pueden escuchar después de haber vivido una infidelidad, son muchos los sentimientos que pueden estar dentro de su corazón que necesitan ser expresados, esto le ayudará a lidiar con sus sentimientos de culpa y de rabia. Usted ha estado haciendo su mejor esfuerzo para restaurar la relación y esto toma mucha energía, algunas personas pueden pensar que solo sufre el infiel pero esto no es verdad y usted lo sabe muy bien. Ejercicio 5: dividir mi dolor Es necesario un espacio en el cual usted pueda desahogarse y compartir su carga y sufrimiento. Así que haga un alto en este momento y piense en una lista de personas que le aprecian y con las que usted puede contar: · ¿Quiénes son? · ¿Quién es la persona que más le podría escuchar sin juzgarle o sermonearle? · ¿Cuándo podría hablar con esa persona? · ¿Qué le podría compartir acerca de cómo usted se siente? Deben ser personas que le animen a continuar en el camino, evite personas que piensen que el divorcio es el camino más fácil, pues éstas le animarán a abandonar su esfuerzo con palabras como “ya déjale,hasta cuando vas a aguantar”. Noveno paso para ganar la confianza: prever las recaidas “Es mejor prevenir que lamentar” Proverbio popular Hasta ahora usted ha recorrido un largo camino hacia la recuperación de su matrimonio, lo más importante es que usted pueda tener la paciencia para perseverar y sembrar lo bueno en su relación, aunque siga cosechando algo de la furia de su esposa(o). Si usted persevera en sembrar amor, confianza, gratitud, valoración y verdad usted va a cosechar todo esto y mucho más. Seguramente usted a estas alturas ha aprendido mucho acerca de usted mismo(a), de sus áreas débiles y fuertes, quizás ha entendido más las razones de su infidelidad y como llegó hasta este punto, también puede preguntarse qué ha aprendido de toda esta experiencia tan dolorosa; recuerde “los momentos más difíciles de nuestras vidas se pueden convertir en los más maravillosos”. Lo peor de cometer un error tan grave, es vivirlo sin aprender nada de él, sin cambiar o ser mejores personas, los errores cobran un significado diferente cuando se aprende de ellos y se permite salir transformados, cambiados; así el dolor y tanto sufrimiento no será en vano. ¿Qué ha aprendido usted de sí mismo(a)? ¿En qué forma usted se conoce mejor? ¿Qué formas de pensar o actuar han cambiado en usted? ¿De qué se puede sentir orgulloso(a)? Usted puede pensar en este momento “este error no lo hago nunca más” y que bueno que piense así, pero es mejor prevenir que lamentar, para prever las recaídas es muy importante tener un plan de acción para cuando la tentación toque a la puerta de nuevo, usted sigue siendo un ser humano y como tal puede ser tentado, pero lo importante es que ya no será tan inocente o descuidado(a), puede tener un plan de acción para no cometer de nuevo esta locura que casi le cuesta su hogar. Para ello es importante tener en cuenta varias cosas. En el próximo capítulo usted podrá conocer mejor el proceso de la infidelidad y cómo evitar caer en ella, pero por ahora es importante evaluarse a usted mismo y con base en todo lo que usted ha aprendido acerca de usted y sus debilidades deberá evitar todo aquello que le pueda hacer caer o que le pone en peligro inmediato. Ejercicio 6: ser prevenido Hágase las siguientes preguntas: · ¿Qué lugares usted no debe frecuentar? · ¿Qué personas y amigos debe perder para poder ser fiel? · ¿Qué circunstancias son las que le hacen más vulnerable a una infidelidad? Cuando las fuerzas se agotan Quizás muchos de ustedes en esta etapa del camino se sientan desanimados y cansados, a punto de tirar la toalla, no es fácil lidiar con los estados emocionales del cónyuge engañado, estos pueden variar mucho y hacerle sentir muy mal, enojado(a) o cansado(a). Se la ha pasado sembrando y aún no cosecha mucho o nada, también puede seguir lidiando con su propio dolor o culpa. Por otro lado, la mayoría de las personas se ponen de lado del cónyuge engañado pero usted también sufre y se requiere de mucho valor para reconocer cuando uno se equivoca, usted debe sentirse orgulloso de usted mismo(a) por todo lo que está haciendo para salvar su hogar. Aun así usted puede experimentar que ya no puede más o no logra perdonarse a sí mismo, si usted se está sintiendo así, nunca es tarde para buscar de Dios, recuerde algo que se dijo en el tema del arrepentimiento, Jesús es el experto en este tema y también en el de perdonar, cambiarnos y darnos una mano cuando le buscamos de corazón. Jesús contó una hermosa historia, la parábola del hijo pródigo, seguramente usted la ha oído, se trata de ese hijo que pidió a su padre toda su herencia y estando su padre vivo se va de la casa, se marcha lejos y malgasta todo lo recibido en darse gustos y placeres hasta que un día queda sin nada y termina cuidando cerdos, pasa hambre, vergüenza y mucha humillación, un día toma conciencia de lo que ha hecho y decide regresar a la casa de su padre a pedir perdón, y con temor lo hace ¿Qué encuentra al llegar a su casa? ¿Cómo le trata este padre? Curiosamente no le rechazó ni le acusó, solo le abrió sus brazos y le perdonó. Jesús contó esta historia para mostrar cómo es Dios, él es como este padre, sabe perdonar y ayudarnos a ser mejores personas, si alguien se arrepiente de verdad Dios hace cosas maravillosas en la vida de esa persona, él le da una nueva oportunidad, puede hacer de usted una nueva persona: Por lo tanto, si alguno está en Cristo, es una nueva creación. ¡Lo viejo ha pasado, ha llegado ya lo nuevo! 1 Corintios 5:17. Biblia NVI. CAPITULO V El proceso de la infidelidad y cómo prevenirla “Eres la dulce compañía, que pinta su sonrisa cada día, para mí de rojo y miel. Eres la dulce tentación, la fuerza que me empuja cada día a ser infiel …” Tentación - José Luis Perales. Quienes han vivido una infidelidad saben lo dolorosa que es esta experiencia, no solo para la pareja sino para los hijos, decidir nunca más vivir algo así, es muy importante, pero no basta la decisión, hay que prevenir una nueva recaída, no crea que ahora usted es invulnerable, lo mejor para no caer de nuevo es saber el peligro, conocer el camino por el cual se va derechito a la infidelidad y reconocerse humano y vulnerable, esto le hará ser más cuidadoso(a) y humilde para enfrentar las tentaciones que la infidelidad pueden darle en el futuro. Caer una vez en un hueco profundo y peligroso puede ser comprensible, pero volver a caer en él puede representar una locura, si se sabe dónde está el hueco y como se puede caer en él. La mayoría de las infidelidades no ocurren de la noche a la mañana sino que estas tienen un proceso y es bueno conocerlo para estar prevenido y saber parar a tiempo. Primer paso: estar distanciado emocionalmente de la pareja La vida diaria está cargada de la rutina, cosas que limpiar o arreglar, cuentas que pagar, niños o adolescentes que atender, compromisos sociales a los cuales asistir, problemas no resueltos en la relación, etc. Hay una multitud de cosas que pueden hacer que dos personas descuiden su relación de pareja y estén embarcados en el diario vivir, con una comunicación pobre o superficial. La vida en pareja pasa por diferentes etapas que generan crisis normales en la relación, si es una pareja en su primer año de matrimonio deben lidiar con el acoplarse en la nueva vida, aceptarse en sus diferencias, aprender a llevarse bien con los suegros y suegras, etc. La segunda etapa es el ser padres con hijos pequeños y esto requiere de una gran inversión de energía para atender a los pequeños. Luego viene la etapa de padres con hijos adolescentes, en esta etapa los padres deben enfrentar las demandas de libertad de los hijos y luchar en enseñarles a ser responsables, al mismo tiempo que tanto papá como mamá viven su propia crisis de estar en los cuarenta o cerca de estos. La etapa del nido vacío es cuando los hijos se marchan de casa, muchas veces cuando esto ocurre para muchas parejas puede resultar difícil estar de nuevo solos, pude ser que la relación ha girado muy entorno a los hijos más que en ellos como pareja, esto puede generar una crisis hasta que de nuevo aprendan a estar solos y disfrutar de ello. Estar en cualquier etapa de la vida trae consigo estas épocas de crisis, puede ser que en medio de esos cambios de etapas la pareja tenga un poco más de dificultad para relacionarse y es importante buscar solucionar los problemas a tiempo. Cuando los problemas no son hablados y solucionados es cuando la distancia emocional puede surgir o ahondarse, para prevenir una nueva infidelidad, analice bien en qué etapa del ciclo vital de la familia está usted y su cónyuge, luego muyhonestamente aborden las crisis o dificultades naturales a esa etapa. Segundo paso: conocer a alguien que nos resulta atractivo(a) Cuando alguien se casa no se vuelve ciego ni sordo, la vida diaria siempre dará oportunidades de conocer a alguien nuevo, o tener un reencuentro con alguien del pasado con quien hubo alguna relación sentimental. El asunto es que en algún momento puede aparecer esa persona que de alguna forma le puede parecer atractiva por muchas razones, ya sea por su belleza física, emocional, su forma de hablar, caminar, sus atenciones, etc. Se puede decir que es normal que otros u otras le resulten atractivos, no hay nada de malo en ello. El peligro está cuando usted empieza a pensar en esa persona en una forma romántica o sexual y le da un lugar en su mente; esto es especialmente peligroso cuando se trata de los ex enamorados y ex mejores amigos, pues ya hay algo para recordar y añorar. El lugar de trabajo también representa un lugar de peligro, pues las actividades compartidas a diario pueden ir generando espontáneamente oportunidades de intimidad emocional y coqueteo. Al final del libro usted podrá encontrar un anexo con algunos test para evaluar las zonas de peligro en su vida. Muchas personas entran en relaciones cibernéticas con personas conocidas o desconocidas hasta ese momento, aun sin tener un problema en su relación de pareja, es decir no se necesita estar distanciado emocionalmente del cónyuge para caer en las redes de del internet, se hace más peligroso por supuesto cuando la relación de esposos está deteriorada, pues los encuentros en el internet se pueden convertir en un “consuelo que levanta el ánimo” Es muy importante tomar conciencia de lo peligroso que esto puede ser, aunque hoy día muchos hombres y mujeres argumentan que el sexo cibernético no tiene nada de malo, el criterio acá no puede ser lo físico sino la intimidad que se ha creado con otra persona diferente a su cónyuge y como esto puede dañar su relación de confianza con su esposa(o). Muchas preguntas pueden surgir en la cabeza del otro ¿Por qué lo hace? ¿No soy suficiente en su vida? ¿Cuánto tiempo de su vida está pensando en esa persona en vez de pensar en mí? ¿Cuándo está conmigo en la cama estará pensando en él o ella? Y esto es solo una parte de todo lo malo que puede pasar con las relaciones cibernéticas. Tercer paso: “solo es un cafecito” Si usted no para en el paso anterior, es decir no es honesto al reconocer que esa persona le gusta y sigue adelante, empezará a compartir momentos informales con esa persona, ya sea por el internet o personal- mente, se empieza a dar una intimidad emocional con esa persona que se torna peligrosa porque hay un grado de atracción, así que las personas empiezan a compartir cosas que parecen muy inocentes, pues es solo tomar un café, almorzar un día, salir con esa persona que le resulta atractiva en un grupo de amigos, etc. En medio de esas inocentes salidas se empiezan a dar las conversaciones informales en las cuales poco a poco se va generando esa intimidad emocional o simplemente se va gestando la locura del enamoramiento, si en casa las cosas están tensas o un poco aburridas resulta cada vez más y más atractivo estar con alguien que le imprime algo nuevo a la vida y así en un abrir y cerrar de ojos la persona puede verse involucrada afectivamente o con su instinto sexual puesto en marcha, es en esta etapa cuando la persona se ha involucrado emocionalmente con el otro, se le puede considerar un adulterio emocional. Esto fue lo que le ocurrió a Adriana, ella estaba pasando por un mal momento en su matrimonio, su esposo había perdido el trabajo y las cuentas se acumulaban cada mes, un día se encontró en el chat con su mejor amigo del colegio, empezaron a chatear, con las simples preguntas de rutina ¿Cómo estás? Al comienzo ella no compartió su carga emocional, pero él cada día era más atento, se fijaba en sus fotos, sus comentarios y siempre estaba listo para preguntarle sobre su día, así ella empezó a contarle todo lo que estaba pasando en su hogar y los problemas que tenía con su esposo. Su amigo muy atento quería saber más, abrir el Facebook cada día se transformó en algo emocionante y necesario para Adriana, ella tenía alguien que le escuchaba y se interesaba por sus problemas. finalmente decidieron reencontrarse después de tanto años sin verse personalmente, solo sería una salida a tomarse un cafecito y charlar, ¿Que puede tener de malo algo tan inocente? pensaba Adriana, pero verse, hablar y escucharse se convirtió en una necesidad y así de la noche a la mañana el deseo de verlo se hizo cada vez más fuerte y necesario. Esto en vez de ayudarle a resolver sus problemas con su esposo, creo una distancia más grande entre ellos, pues las mentiras se hicieron necesarias y las discusiones se hicieron más frecuentes. Cuarto paso: caer en la infidelidad sexual. Si los pasos anteriores han seguido su curso y la persona no ha podido poner un freno a tiempo lo más probable es que sea infiel sexualmente, pues cuando la curiosidad emocional y sexual se ha despertado ya es muy difícil ponerle un límite, los pensamientos son muy poderosos, por algo se dice que el órgano sexual más importante no son los genitales sino el cerebro, porque allí es donde todo se gesta, los pensamientos alimentan primero las fantasías románticas y luego las fantasías sexuales, estas van adquiriendo más y más poder produciendo emociones muy fuertes que empiezan a tomar el control de la persona y estas emociones fuerzan a la persona a que estas fantasías se hagan realidad, es aquí donde ocurre la infidelidad sexual y no hay marcha atrás. Adriana terminó siendo infiel, para ella no fue algo difícil dado el nivel de intimidad con el cual estaba con su ex compañero de colegio, lamentablemente ella no pudo poner freno a tiempo. Como prevenir la infidelidad y cultivar la intimidad emocional “No le llames cobardía, hay cosas que en la vida solo son para dos, tan solo dos. No es compatible la mentira, con algo transparente, hermoso y frágil, como es, el amor.” Tentación - José Luis Perales • Lo primero es, no se deje sorprender creyéndose invulnerable en esta área, a pesar de todo lo que una persona haya sufrido por una infidelidad debe cuidarse. • Cuide su relación de pareja, mantenga la comunicación abierta, si tienen dificultades resuélvanlas, sigan este hermoso consejo “No dejen que el sol se ponga estando aun enojados” Efesios 4:26b. Biblia NVI • No comparta pensamientos y sentimientos profundos con personas del sexo opuesto y menos si estas le resultan en alguna forma atractivas. • Si su matrimonio está pasando alguna etapa de crisis o aburrimiento hable con su cónyuge o busquen ayuda con un profesional, crea esto, es más barato emocionalmente y económicamente trabajar estos problemas de pareja que trabajar una infidelidad. Sea honesto y pregúntese si usted está enojado(a) frecuentemente con su pareja, si hay resentimientos por cosas pasadas, o si se siente desconectado de él o ella, si es así debe sacar a la luz sus sentimientos, pero no lo haga con un amigo del sexo opuesto, háblelo directamente con su esposo(a). • Mantenga actualizados los valores correctos, si es cristiano estudie lo que la Biblia enseña acerca de la infidelidad, hay todo un capítulo muy interesante en el libro de los Proverbios, le recomiendo leerlo. Si usted no es un creyente, debe poner la fidelidad como uno de los valores prioritarios de su vida teniendo en cuanta que la verdad es parte vital para nutrir y sostener una relación. • Mantenga recuerdos visibles de su compromiso matrimonial, no se quite su anillo, ponga fotosde su esposo(a) y familia en su oficina o lugar de trabajo y hable con sus compañeros de los buenos momentos que pasa en familia. • Clarifique y mantenga su propósito de vida, llegar juntos al final del camino, esto requiere cuidar la relación de pareja, no descuidar la intimidad emocional y física. Si hay muchos conflictos y peleas quizás sea bueno tomar un curso de cómo pelear limpiamente, para aprender a resolver los problemas de una manera más saludable. • Decida con anticipación cuál será su respuesta cuando la tentación de ser infiel toque de nuevo a su puerta. ¿Dónde va poner el alto?¿En qué etapa del proceso de la infidelidad le conviene decir no más? Recuerde esto: la infidelidad como la fidelidad es algo que se decide antes de hacerlo. • Aprenda a huir a tiempo, no se confíe en su madurez o experiencia ganada, aprenda a poner límites en sus relaciones, no tenga ex novias o ex novios en su Facebook o cualquier otra red social. Mantenga su computadora en un lugar visible, donde cualquiera de su familia pueda ver lo que usted está haciendo en el internet. • No se crea salvador de mujeres u hombres que van por el mundo sufriendo y buscando con quien hablar sus problemas matrimoniales. Muchas infidelidades empiezan así, queriendo consolar a un buen o buena amiga, recuerde usted no es un terapeuta familiar ni un consejero. • Si su trabajo implica viajes con compañeros de labor y hay entre ellos alguien que le resulta atractivo evítelo, no fraternice para nada con esa persona. Y evite totalmente tomar alcohol pues esto le hace más vulnerable. • Si su esposa le dice “Mira ten cuidado con esa mujer, no me gusta cómo te mira” o su esposo le dice “Creo que eres muy amigable con ese hombre” escúchele. Muchas veces él o ella ven el peligro mucho antes que usted se dé cuenta, en vez enojarse piense que quizás su cónyuge tiene razón y que pueden haber comportamientos suyos que deben ser cambiados para prevenir una infidelidad y también con el deseo de que su esposa(o) se sienta amado y exclusivo en su relación. • En esto de la infidelidad no hay Superman o mujer Maravilla que no pueda caer. Cuando conozca a alguien que le parece atractivo (a), sea honesta (o) consigo mismo(a) y hágase esta pregunta: ¿esta persona representa un peligro para mi matrimonio? ¿Me atrae de alguna manera romántica o sexual? Si la respuesta es sí, usted debe cortar toda charla, café o actividad compartida con esta persona. No se confíe de su madurez, es en esta etapa cuando es más fácil huir. • Si la persona le sigue atrayendo y sigue pensando en ella tome una decisión, busque a alguien de confianza y con madurez para confesarle sus sentimientos y pensamientos hacia esa persona. Contar y confesar la tentación le resta poder. Pida que le acompañe en esta lucha que está teniendo. • Si usted no pone un alto continuará al siguiente paso y le costará más alejarse. Recuerde el dicho popular “el diablo es puerco” es mejor huir a tiempo. • Y debe huir hacia el lado correcto, hacia su esposa o esposo, busque acercarse más a él o ella intencionalmente, evalúe como están en cuanto a comunicación, salidas en pareja, hacer cosas juntos, etc. No permita que el trabajo, los hijos y las ocupaciones les alejen, practiquen “el tiempo nuestro”, apartar diariamente unos quince o veinte minutos diarios, ya sea en la mañana, en el almuerzo o una salida a caminar por el barrio para hablar de su día y de cómo están. • Haga a conciencia los test que aparecen en los Anexos A y B y tome las medidas preventivas en caso de estar en peligro de infidelidad. Cuando la fidelidad funciona y rinde sus frutos Finalmente es bueno abogar por la fidelidad, este es un camino posible y además más seguro, pues una vida sin mentiras y secretos permite que haya intimidad emocional, ser más conocidos y entendidos. Después del enamoramiento la pareja debe aprender a amarse y ser amigos, la amistad más que la pasión es una buena receta para la estabilidad conyugal. Sáquese de la mente la idea de que ya se conocen en todo, esto es falso y limita la relación y el dejarse sorprender por el otro, es tiempo de crear espacios para conocerse en nuevas áreas y experiencias, encontrar nuevos hobbies o tareas que puedan compartir juntos y que les permita verse de nuevas formas. Hablar acerca de lo que ambos han aprendido de esta dolorosa experiencia y acerca de los nuevos límites en la relación. Debe quedar muy claro para ambas partes qué se considerará un peligro y que cosas no estarán permitidas dentro de la relación, como por ejemplo: Salir con ex cónyuges o ex enamorados, hacer llamadas o mensajes secretos a amigos o amigas, salir o no salir solos con los compañeros del trabajo, etc. Los límites claros ayudan a ser fieles y evitan situaciones ambiguas y peligrosas. Un criterio muy bueno es la comodidad del otro, no hacer nada que le afecte la seguridad y la confianza del cónyuge. Ser fiel es una decisión, usted debe decidir quién manda, como dice un famoso terapeuta familiar “La cabeza decide que harán los genitales y no a la inversa”. Cuando la razón es la que manda, usted podrá tomar las decisiones correctas antes de ser infiel. El tema de la verdad ya ha sido abordado, pero es bueno recalcar que para ser fiel usted no se puede permitir ni una pequeña mentira, pues confunden y desorientan igual que una mentira grande, al mentir los problemas se agrandan, pues causan más enojo en su cónyuge que lo que usted quería ocultar. Finalmente cultive una relación más sana y humana con su esposa o esposo, no se crean perfectos, más bien trate de verse como simples mortales que fallan, se equivocan y necesitan del amor, la aceptación y el perdón del otro. Tener a alguien al lado que le conoce con todas sus virtudes y defectos y a aun así le sigue amando, es uno de los regalos más hermosos que una persona puede tener en la vida, vale la pena luchar por esto y serle fiel a aquel o aquella que le ha aceptado tal como usted es. Como fomentar la intimidad en la pareja • Separar tiempo para una cita semanal, quincenal o mensual, para salir solos sin los hijos, ¿Qué hacer en esa cita? Pueden turnarse para planearla, una vez puede ser la esposa quien decida lo que quiere que se haga y la siguiente puede planificarla el esposo. • Apartar unos minutos del día para hablar como fue el día de cada uno, quizás ayude hablar de “lo mejor y lo peor de mi día” o un motivo que tiene para dar gracias. • No deje de lado la amabilidad, recuerde dar las gracias, pedir las cosas con por favor, expresar valoración y aprecio por lo que el otro es o hace. • No se aleje cuando haya problemas, aprenda a reclamar lo que no le gusta pero busque formas adecuadas para hacerlo. • Fomenten la espiritualidad en pareja y familia. Oren en pareja, vayan a la iglesia juntos, si son cristianos tengan un tiempo juntos para leer la Biblia y meditar en ella. • Hagan un plan estratégico para su matrimonio, en el que cada uno pueda expresar sus metas y objetivos que les gustaría ver en su matrimonio a corto y largo plazo. • Tener en mente cosas de las cuales pueden hablar cuando salen a cenar o a tomar un café. En el siguiente capítulo encontrará ejercicios que promueven la intimidad emocional con su pareja. Para quienes desean más ejercicios que fomenten la intimidad emocional, les invito a leer mi libro: “Intimidad emocional en el matrimonio: 20 citas para acercarte emocionalmente a tu pareja”Disponible en Amazon.com http://www.amazon.com/Intimidad-emocional-matrimonio-acercarte- emocionalmente-ebook/dp/B00KVUWM64/ref=zg_bsnr_310067011_17 Anexo a: test para evalauar las situaciones de riesgo El mundo del internet y los lugares de trabajo han revolucionado el mundo de las relaciones interpersonales y en muchos casos son los lugares más adecuados para dar inicio a una relación de infidelidad, valore con el siguiente test si usted se encuentra en una zona de peligro y está compartiendo una intimidad emocional con alguien que no es su cónyuge. 1. ¿Se acuesta cada vez más tarde por estar en el internet? · Si · No 2. Pasa mucho tiempo en las redes sociales? · Si · No 3. ¿Cierra usted la ventana del internet cuando un miembro de su familia entra de repente a su oficina para que no vean algo de lo que usted está haciendo? · Si · No 4. ¿Para usted es un problema el que su esposa(o) entré en su cuenta de Facebook u otra red social y lea los mensajes personales que tiene con alguna(o) de sus amigas(os)? · Si · No 5. ¿Ha abierto una cuenta nueva de correo electrónico que su cónyuge no conoce? · Si · No 6. ¿Tiene o ha pensado en tener doble chip para su celular? · Si · No 7. ¿Hay algún amigo del sexo opuesto con el cual está teniendo más contacto de lo normal en el trabajo o por internet? · Si · No 8. ¿Habla usted con su amigo(a) acerca de cómo fue su día más que con su esposa(o)? · Si · No 9. ¿Pasa tiempo compartiendo con esa persona en el chat o en teléfono? · Si · No 10. ¿Se siente usted más halagado y valorado por ese amigo(a) que por su esposo(a)? · Si · No 11. ¿Encuentra muchas cosas positivas en esa persona más que las que puede ver en su esposa(o)? · Si ÿ No 12. ¿Le confía a ese amigo(a) sentimientos profundos y no lo puede hacer con su pareja? · Si · No 13. ¿Se siente incómodo de contarle a su esposa(o) acerca de la amistad que tiene con ese amigo(a)? · Si · No 14. ¿Puede contarle sin temor alguno a su esposa(o) lo que habla con su amiga(o)? · Si · No 15. ¿El trato que usted tiene con esta (e) amiga(o) es de una forma diferente cuando están solos? · Si · No 16. ¿Se siente atraído románticamente o sexualmente por esta persona? · Si · No 17. ¿Ha empezado a verse con ese amigo cibernético en persona? · Si · No 18. ¿Si su amigo(a) es una compañera de trabajo, ha empezado a compartir almuerzos y salidas fuera del trabajo? · Si · No Usted obtiene un punto por cada sí que contesta. De las preguntas del 1 al 6: Si obtuvo dos o más puntos en estas preguntas quiere decir que para usted el internet representa un peligro en este momento y debe hacer los cambios necesarios para evitar tener un romance potencial. De las preguntas 7 a 11: Si obtuvo un dos o más, usted ha inicia- do una relación de amistad muy peligrosa y debe parar todo contacto con esa persona. De las preguntas 12 a 17: Si obtuvo un dos o más, usted está en una relación de intimidad emocional que sólo debe ocupar su esposa o esposo. Es tiempo de hacer un STOP urgente, usted ha cruzado la frontera de una amistad a un romance y tiene un gran potencial para hacerle mucho daño a su matrimonio. TIENE QUE DETENERSE AHORA MISMO. Anexo b: test para valorar el peligro potencial en el ambiente en que usted se desenvuelve El ambiente familiar, social y laboral puede llegar a ser una influencia o no para la infidelidad. Si el ambiente es permisivo, las posibilidades de infidelidad pueden ser mayores y se debe estar muy atento a estos factores. 1. Por mi trabajo debo viajar mucho y pasar días fuera de casa. · Si · No 2. Es común en mi trabajo los romances entre compañeros. · Si · No 3. Si tuviera un “romance en la oficina” nadie de mis compañeros me cuestionaría. · Si · No 4. Nos gusta salir con los compañeros de trabajo a divertirnos pero nadie invita a sus esposas o esposos. · Si · No 5. Si un amigo me confiara que está siendo infiel no se lo reprocharía. · Si · No 6. El ambiente entre mis compañeros o amigos es de muchas fiestas y trago. · Si · No 7. La mayoría de mis amigos me animarían a seguir adelante en caso de tener un romance con alguien. · Si · No 8. La mayoría de mis amigos(as) son infieles a sus esposas o esposos. · · Si No 9. La infidelidad ha sido parte de mi historia familiar (padre, abuelos o hermanos). · Si · No 10. Mi padre no me reclamaría si se diera cuenta de una infidelidad mía. · Si · No 11. Mi madre no me condenaría por ser infiel. · Si · No 12. Mis hermanos no dirían nada en caso de que yo fuera infiel. · Si · No Sume los puntos, cada respuesta positiva es un punto: De 0 a 2 usted está en una zona fuera de peligro. De 3 a 5 Usted está en una zona con algo de peligro y tiene una advertencia de: “camine con cuidado”. De 6 a 9 Usted está en una zona contaminada, trate de salir de ese ambiente o tome medidas de mucha precaución. De 10 a 12 Usted está en un grave peligro, debe buscar nuevos amigos urgentemente, y si es con su familia debe buscar diferenciarse de sus principios y valores respecto a la fidelidad y al matrimonio. Bibliografía Yattenciy Bonilla, Colección Minibook. Palabras en griego. Conozca el profundo significado de la palabra amar. CEINFO. Quito. 2002. 12 págs. Sue Johnson. Abrázame fuerte. New York. Editorial. URANO. 2009. 316 p. Frank Pittman. Mentiras Privadas. U.S.A. Editorial Amorrortu. 1994. 296 págs. Jean Monbourquette. Como perdonar. Sal Terrae. 1998. Fin