Es necesario que el campo sea muy homogéneo sobre el volumen de la muestra. Para preservar la forma de la línea, las variaciones del campo sobre la...
Es necesario que el campo sea muy homogéneo sobre el volumen de la muestra. Para preservar la forma de la línea, las variaciones del campo sobre la muestra deben ser menores que 1/10 de la anchura de la línea, que no suele ser menor de 0,1 G, esto supone una uniformidad de 10 mG que es ∼ 10−5 de uniformidad relativa en el volumen de la muestra. Para conseguir esta homogeneidad en los electroimanes, se hacen las placas polares del mayor diámetro posible y se corrigen por efecto borde. Por otra parte, el campo también ha de ser estable durante el tiempo necesario para el registro del espectro; con estabilizadores electrónicos que miden el campo por efecto Hall se obtienen estabilidades de 10−5.
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