El interés compuesto es un concepto financiero que se refiere al cálculo de intereses sobre el capital inicial y los intereses acumulados previamente. A diferencia del interés simple, en el interés compuesto los intereses generados se suman al capital inicial, lo que resulta en un crecimiento exponencial de la inversión a lo largo del tiempo. En cuanto a su aplicación en el valor futuro del dinero, el interés compuesto se utiliza para determinar cuánto dinero se tendrá en el futuro si se invierte una cantidad determinada en el presente. Para calcular el valor futuro, se utiliza la fórmula: VF = P * (1 + i)^n Donde: VF es el valor futuro del dinero. P es el capital inicial o principal. i es la tasa de interés expresada en forma decimal. n es el número de períodos de inversión. Al aplicar esta fórmula, se obtiene el valor futuro del dinero, que representa la cantidad total que se habrá acumulado al final del período de inversión, teniendo en cuenta los intereses compuestos. Es importante destacar que el interés compuesto es una herramienta poderosa para el crecimiento del dinero a largo plazo, ya que permite que los intereses generados se reinviertan y generen a su vez nuevos intereses. Esto hace que el valor del dinero aumente de manera significativa con el paso del tiempo.
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