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FILOSOFIA.indb 1 27/11/06 11:34:17 FILOSOFIA.indb 2 27/11/06 11:34:17 FILOSOFÍA, DARWINISMO Y EVOLUCIÓN FILOSOFIA.indb 3 27/11/06 11:34:17 FILOSOFIA.indb 4 27/11/06 11:34:17 FILOSOFÍA, DARWINISMO Y EVOLUCIÓN Editor Alejandro Rosas L. FILOSOFIA.indb 5 27/11/06 11:34:17 F I L O S O F Í A , D A R W I N I S M O Y E V O L U C I Ó N © Universidad Nacional de Colombia Facultad de Ciencias Humanas Departamento de Filosofía © Alejandro Rosas L. Primera edición, 2007 1.000 ejemplares ISBN: 978-958-701-760-1 Diseño carátula Camilo Umaña Diagramación Olga Lucía Cardozo Preparación editorial e impresión Universidad Nacional de Colombia Unibiblos Andrés Sicard Currea, Director Correo electrónico: dirunibiblo_bog@unal.edu.co Bogotá, Colombia Impreso en Colombia Printed in Colombia Catalogación en la publicación Universidad Nacional de Colombia Filosofía, darwinismo y evolución / ed. Alejandro Rosas L. – Bogotá : Universidad Nacional de Colombia. Facultad de Ciencias Humanas, 2007 346 p. : ils. I SBN : 978-958-701-760-1 1. Filosofía de la evolución 2. Evolución humana 3. Selección natural I. Rosas López, Alejandro, 1959- - ed. CDD-21 128.4 / 2007 FILOSOFIA.indb 6 27/11/06 11:34:18 [vii] CONTENIDO i x SOBRE LOS AUTORES x i PREFACIO I . SELECCIÓN NATURAL 3 1. Contra la lectura adaptacionista de Lamarck Gustavo Caponi 19 2. La selección natural y su papel causal en la generación de la forma Maximiliano Martínez 37 3. Neodarwinismo y nueva síntesis Vladimir Corredor 57 4. Las interrelaciones entre Genotipo/Fenotipo/ Medio ambiente. Una aproximación semiótica al Debate ‘Evolución y Desarrollo’ Eugenio Andrade I I . COGNICIÓN Y EVOLUCIÓN 99 5. Função natural e indicação – a Atividade de Representação em Fred Dretske Karla Chediak 121 6. El programa de un epistemología evolucionista Paulo Abrantes FILOSOFIA.indb 7 27/11/06 11:34:18 [viii] I I I . EL ORIGEN DEL HOMBRE 181 7. Las primeras descripciones de antropoides en el siglo XVII y su importancia para la Filosofía de la Evolución Jorge Martínez-Contreras 219 8. Lo que la Filosofía de la Mente puede aprender de Kanzi y de la primatología Álvaro Corral 257 9. El concepto de reconciliación en la obra de Frans de Waal Alba Pérez-Ruiz 275 10. El entorno ancestral de las normas de equidad Alejandro Rosas L. 313 ÍNDICE DE AUTORES 316 ÍNDICE DE CONCEPTOS FILOSOFIA.indb 8 27/11/06 11:34:18 [ix] SOBRE LOS AUTORES PAULO ABRANTES abrantes@unb.br Doctor en Historia y Filosofía de la Ciencia de la Universidad de Paris I. Profesor adjunto - Departamento de Filosofía e Instituto de Biología, Universidad de Brasilia. Áreas: Epistemología Evo- lucionista, Filosofía de la Biología, Filosofía de la Ciencia LUIS E. ANDRADE P. leandradep@unal.edu.co Químico, Universidad Nacional de Colombia. Postgrado en Ge- nética molecular de la Universidad Católica de Lovaina. Profesor titular. Departamento de Biología, Universidad Nacional de Co- lombia. Áreas: Formalización de la Relación Secuencia Estruc- tura en RNA y Proteínas. Historia y Filosofía del Pensamiento Biológico y Evolutivo. GUSTAVO CAPONI gustavocaponi@newsite.com.br Doctor en Lógica y Filosofía de la Ciencia de la Universidad Es- tadual de Campinas (UNICAMP). Profesor adjunto del Departa- mento de Filosofía de la Universidad Federal de Santa Catarina. Áreas: Filosofía e Historia de la Biología. KARLA CHEDIAK kachediak@yahoo.com.br Doctor en Filosofía de la Pontificia Universidad Católica de Río de Janeiro. Profesora adjunta de la Universidad del Estado de Río de Janeiro – UERJ. Áreas: Filosofía de la Biología, Epistemología. ÁLVARO CORRAL C. alvaro.corral@utadeo.edu.co Doctor de la Universidad Julius-Maximilians en Würzburg-Alema- nia. Decano de Humanidades, Universidad de Bogotá Jorge Tadeo Lozano. Áreas: Filosofía de la Mente y Filosofía de la Biología. FILOSOFIA.indb 9 27/11/06 11:34:18 [x] VLADIMIR CORREDOR E. corredore@unal.edu.co Doctor de la Universidad de Nueva York. Profesor asociado, De- partamento de Salud Pública, Universidad Nacional de Colom- bia. Áreas: Genética Molecular y Evolutiva de Microorganismos Infecciosos. MAXIMILIANO MARTÍNEZ B. mmartinezb@unal.edu.co Filósofo; Candidato a Doctor en Filosofía de la Universidad Na- cional de Colombia. Becario, Programa Docentes en formación, Departamento de Filosofía, Universidad Nacional de Colombia. Áreas: Filosofía de la Biología, Filosofía Moral, Filosofía Evolu- cionista de la Mente. JORGE MARTÍNEZ-CONTRERAS pascalo69@yahoo.com Doctor en filosofía (Doctorat ès Philosophie) de la Universidad de Paris IV-Sorbona. Profesor titular “C”, Departamento de Filosofía, Universidad Autónoma Metropolitana-Iztapalapa. Áreas: Episte- mología de las Ciencias de la Vida, Epistemología de la Primato- logía y de la Paleoantropología, Filosofía Contemporánea. ALBA LETICIA PÉREZ-RUIZ atelgeof@yahoo.com Maestría en Ciencias de la Universidad Nacional Autónoma de México UNAM. Profesor-Investigador asociado nivel “C”. Área de Estudios Filosóficos. Coordinación de Investigación. Centro de Estudios Filosóficos Políticos y Sociales Vicente Lombardo Toledano CEFPSVLT. Áreas: Epistemología de la Primatología. Comportamiento Social y Cognición en Primates. ALEJANDRO ROSAS L. arosasl@unal.edu.co Doctor en Filosofía de la Universidad de Münster, Alemania. Profesor asociado DE, Departamento de Filosofía, Universidad Nacional de Colombia. Áreas: Filosofía Moral, Filosofía de la Biología, Evolución y Cognición. FILOSOFIA.indb 10 27/11/06 11:34:18 [xi] PREFACIO Filosofía y ciencia son brotes de una misma semilla. Son productos de un impulso por conocer que es eminente en el ser humano, pero cuya forma originaria y primigenia es quizás la vida como tal. Todo ser vivo guarda con su entorno una relación mediada por alguna forma de conocimiento. Su genoma contiene un saber, acumulado a lo largo de eo- nes de evolución, sobre cómo enfrentar adecuadamente los retos planteados por su entorno. Como individuo, contiene mecanismos que le permiten registrar, en tiempo real, los eventos a los que debe reaccionar para mantenerse vivo, reproducirse y heredar a sus descendientes las ventajas y adaptaciones que lo caracterizan. Pero sólo en el ser hu- mano, de entre todos los seres de la tierra, el conocimiento connatural a la vida ha adquirido un formato superior, que permite una forma de transmisión distinta a la genética, mediada por el lenguaje. En el ser humano el conocimiento es a la vez naturaleza y cultura. Desde que formulamos preguntas sobre nuestro origen, e intentamos auto-comprendernos, siempre nos ha inquietado la aparente brecha entre ambas. Ella nos ha in- sinuado una afinidad halagadora con un principio superior y sobre-natural. Si la ciencia y la filosofía están ligadas, en su origen, a esta inquietud, están ligadas a una tercera ex- presión humana: la idea de la divinidad. Hoy todavía nos acompaña la misma inquietud: ¿Es la dualidad entre naturaleza y cultura aparente o real? Si es real, ¿cuál es su alcance y significado? ¿La podemos ex- FILOSOFIA.indb 11 27/11/06 11:34:19 [xii] plicar? ¿O acaso debemos limitarnos a reconocerla como dualidad misteriosa e imponderable? En los orígenes, cuan- do ciencia, filosofía y mito apenas se distinguían entre sí, preguntas como éstas iniciaron el proceso que condujo a su separación. Muy pronto, la brecha entre la naturaleza y lo que nos hace humanos pasó de ser fuente de inquietud a ser una teoría del universo. Bajo su luz, la ciencia quedaba confinada a lo natural, al dominio de las causas; la filosofía, y también la religión, custodiaban el principio superior, el dominio de los fines, las razones y las normas, el dominio de la vida y la inteligencia, la humana y la divina, concebi- da ésta como creadora y diseñadora del universo. Luego, en la modernidad, se inició la ruptura progresiva de esta cosmovisión. La ciencianatural adquiría conciencia de ser conocimiento experimental y lo elevaba, orgullosamente, a paradigma. La filosofía se atrincheró en el conocimiento por reflexión y encontró allí una manera de afirmar su au- tonomía y existencia. Su armonía con la religión también comenzó a desvanecerse, mientras la ciencia avanzaba por su camino experimental y encontraba su destino moderno. La ciencia rechazó las limitaciones impuestas, desde fuera, a su ambición y comenzó un proyecto de explicación uni- versal, que muchos miraron y miran aún con recelo, reparo y hasta condena. La ciencia que hoy nos rodea alberga, en su mismo aliento vital, el proyecto pertinaz, casi obsesivo, de descifrar, con sus métodos, los misteriosos orígenes de la vida y de la inteligencia. Desde su misma esencia, la ciencia niega la existencia de una dualidad infranqueable entre lo natural y lo humano. El proceso de segregación de estas tres expresiones de lo humano no excluye intentos de reencuentro y re-unión. Siendo un proceso vivo, su curso futuro es impredecible. Como en todos estos procesos existen tendencias y hasta bandos. Y éstos se distinguen, en parte, por los esbozos de FILOSOFIA.indb 12 27/11/06 11:34:19 [xiii] respuesta que dan a las preguntas formuladas arriba. Nadie tiene una respuesta completa y final. Todas las respuestas que se ofrecen son hipótesis, conjeturas. En este punto todos rinden tributo, quiéranlo o no, a la concepción científica del conocimiento, como proceso crítico, dinámico, siempre en curso, siempre abierto a la novedad y al cambio. Entre las respuestas que se ofrecen, hay una que nace de un reencuentro entre ciencia y filosofía. En un sentido, es justo reconocer que viene propuesta desde la ciencia natural, específicamente desde la biología y más específi- camente de la teoría que cambió la historia de la biología: la teoría de la evolución por selección natural. Pero este justo reconocimiento sólo alude a la mitad de la historia. La idea misma de la selección natural merece el calificativo de filosófica, tanto como el de científica. Por eso ejerce su fascinación sobre científicos con inquietud filosófica, sobre filósofos naturalistas o incluso sobre filósofos formados en la más estricta tradición de la reflexión. Esta fascinación es científica y filosófica a la vez. En esa doble condición es el verdadero motor del reencuentro. Darwin merece un lugar entre los filósofos. Por fortuna, Latinoamérica no es ajena al interés, ya bien generalizado, por explicitar las diversas maneras en que la filosofía y la selección natural resuenan la una en la otra. Los ensayos que presentamos aquí son aportados por investigadores de tres países latinoamericanos. Si bien hay en América Latina más investigación en este campo que lo que aquí mostramos, no podemos sino proporcionar una muestra, esperando despertar el interés de nuestros lectores. Los ensayos elaboran, desde distintos puntos de vista, retros- pectivos y programáticos, las razones de la fascinación con la selección natural. El primer grupo de ensayos se ocupa del concepto mismo de selección natural, de sus alcances y sus límites; en el segundo grupo se explora la aplicación del FILOSOFIA.indb 13 27/11/06 11:34:19 [xiv] mismo concepto a la representación mental y al conocimien- to; por último, el tercer grupo explora las consecuencias de tomar en serio la idea de que los humanos evolucionamos por selección natural a partir de ancestros no-humanos. Esta compilación de ensayos nació de una reunión en Bogotá en abril de 2006, que denominamos, ojala de ma- nera premonitoria: Primer Encuentro Latinoamericano de Filosofía de la Biología. Se organizó como mesa redonda del 1er Congreso Colombiano de Filosofía, aprovechando la hospitalidad de la Sociedad Colombiana de Filosofía en la sede de la Universidad Jorge Tadeo Lozano. Para su rea- lización recibimos apoyo de varias instituciones: de la Uni- versidad Nacional a través de la Dirección Académica y la Facultad de Ciencias Humanas, del Icetex, de Colciencias y de las Universidades de origen de los ponentes. A todas ellas expresamos nuestro sincero agradecimiento. Los textos están en castellano, salvo en un caso, que publicamos en su original portugués. Es nuestro modesto tributo a una lengua hermana y al importante volumen de investigación que en ella se expresa. No podemos darnos el lujo de ignorarla. ALEJANDRO ROSAS L. Bogotá, octubre de 2006 FILOSOFIA.indb 14 27/11/06 11:34:19 I SELECCIÓN NATURAL FILOSOFIA.indb 1 27/11/06 11:34:19 FILOSOFIA.indb 2 27/11/06 11:34:19 CONTRA LA LECTURA ADAPTACIONISTA DE LAMARCK* GUSTAVO CAPONI Departamento de Filosofía Universidad Federal de Santa Catarina gustavocaponi@newsite.com.br RESUMEN Lo que habitualmente se considera como la teoría lamarckiana de la adaptación no es más que un recurso para explicar el hecho de que las formas vivas particulares presentan peculiaridades morfológicas que no nos permiten alinearlas como eslabones contiguos de una serie de complejidad o perfección creciente. Lamarck no quería saber cómo hacían los seres vivientes para adaptarse al ambiente y sobrevivir; lo que él quería saber era por qué esos seres no subían lineal y ordenadamente por la escala del ser. Lamarck no dijo tampoco que las formas vivas, además de tornarse progresivamente más complejas, debían también ser viables y que por eso era menester completar su explicación de esa tendencia a la complejidad creciente con una explicación de En el presente trabajo retomo parte de los asuntos discutidos en “Retorno a Limoges: la adaptación en Lamarck”. Asclepio 58 (1), 2006 (en prensa). He agregado, sin embargo, ciertas consideraciones sobre la vinculación de las tesis de Lamarck con las de Buffon y cier- tas precisiones sobre la oposición que aquél hace entre naturaleza y circunstancias que me parecen, en ambos casos, bastante importantes para entender el malentendido implicado en la lectura adaptacionista de su pensamiento. Quiero insistir, por otra parte, en el hecho de que, aun cuando mi trabajo tenga su raíz en la interpretación no-adaptacio- nista de Lamarck esbozada por Limoges en La Selección Natural, mi argumento en favor de ella es totalmente diferente e independiente del ensayado por ese autor. FILOSOFIA.indb 3 27/11/06 11:34:20 I S E L E C C I Ó N N AT U R A L [4] esa viabilidad. Eso es lo que tal vez nosotros agregaríamos en estos tiempos darwinianos en los que siempre vemos al viviente asediado por un ambiente que lo amenaza con la extinción. Pero ese no era el caso de Lamarck. Él era tributario de una idea de economía natural en la cual la guerra entre los seres vivos sólo podía tender a la manutención de cierto equilibrio u orden en el cual las razas de los cuerpos vivos subsisten todas pese a sus variaciones; y por eso, lo que hoy llamaríamos la viabilidad eco- lógica del viviente no planteaba para él ningún interrogante ni merecía mayores explicaciones. Lo que sí merecía explicación era la constante perturbación del orden natural y para explicar- la Lamarck apeló a las circunstancias. Pero las modificaciones de los perfiles orgánicos producidas por esas circunstancias no eran para él nada semejante a lo que hoy caracterizaríamos como respuestas a las exigencias del medio. Ellas no tenían por qué redundar en alguna ventaja para sus portadores; y es por eso que su posible utilidad no era nunca considerada en los análisis y en las explicaciones de Lamarck. Lejos de ser pensadas como recursos para enfrentar las circunstancias, esas modificaciones eran con- sideradas como marcas o como deformaciones producidas por las condiciones en las que se desarrollaban las diferentes formas de vida. En sus escritos Lamarck mencionó, es cierto, múltiples peculiaridades morfológicas que hoy consideraríamos ejemplos de adaptaciones; pero esos ejemplos no son allí interpretados de ese modo. La singularidad morfológica puede ser hoy un indicio poderoso de adaptación; pero no lo era para Lamarck. Para él, esa singularidad merecía ypodía ser explicada: merecía serlo en tanto la misma constituyese una anomalía en relación a las series zoológica y botánica; y podía serlo apelando a los fenómenos fisio- lógicos que la acción de las circunstancias podía desencadenar en los organismos individuales. Pero esa explicación no presuponía ni apelaba a la supuesta utilidad que el rasgo en cuestión pudiese eventualmente comportar. Como todos sabemos, hay en Lamarck (1815, 134) dos fuerzas trasformadoras de los perfiles orgánicos: por un lado está el propio poder de la vida “que tiende sin cesar a com- FILOSOFIA.indb 4 27/11/06 11:34:20 Contra la lectura adaptacionista de Lamarck [5] G u st a vo C a p o n i plicar la organización, a formar y multiplicar los órganos particulares, en fin, a incrementar el número y la perfec- ción de las facultades”; y por el otro lado está esa “causa accidental y modificante cuyos productos son las diversas anomalías en los resultados del poder de la vida”. Por eso, la forma de cada ser vivo es, concomitantemente, “producto de la composición creciente de la organización que tiende a formar una gradación regular” y “producto de la influencias de una multitud de circunstancias muy diferentes que tien- den continuamente a destruir la regularidad en la gradación de la composición creciente de la organización” (Lamarck [1809]1994, 207-208). Sabemos también que la idea de serie y la idea de una tendencia hacia la composición creciente de la organización constituyen diferencias fundamentales e insuperables entre Darwin y Lamarck (Limoges 1976, 40-48): por ese lado, nin- guna aproximación entre ambos autores llegaría muy lejos. Pero si de lo que se trata es de la influencia de las condicio- nes de vida en la conformación de los organismos la cosa es totalmente distinta. En lo que toca a ese punto, Lamarck parece, por lo menos a primera vista, anticipar en algo a Darwin: en ambos naturalistas las presiones del ambiente o de las circunstancias aparecen como factores que imponen o exigen transformaciones, produciendo así la diversificación de las formas (Lamarck 1802, 44; Darwin 1859, 112). Desde cierta perspectiva, hasta parecería que Lamarck (1802, 194), pese a nunca usar el término adaptación, está hablando de algo semejante a una radiación adaptativa. Respondiendo a las exigencias de las circunstancias, di- ríamos, las formas vivas se transforman y se diversifican dan- do lugar a diferentes especies y variedades también capaces ellas mismas de divergir indefinidamente (Mayr 1976, 239; Barthélémy-Madaule 1979, 129). Además, esta impresión de semejanza se refuerza cuando Lamarck (1802, 45) nos FILOSOFIA.indb 5 27/11/06 11:34:20 I S E L E C C I Ó N N AT U R A L [6] dice que tales circunstancias no tienen que ver sólo con los factores climáticos generales y con los medios circundantes en general, sino que también se relacionan con “los hábitos, los movimientos más ordinarios, las acciones más frecuen- tes” de cada animal; e incluso con sus “medios (moyens) de conservarse”, con su “manera de vivir, de defenderse y de multiplicarse”. A la manera de Darwin (1859, 69-70), y a diferencia de Buffon (Roger 1983, 156), Lamarck también parece entender que los factores climáticos, por sí solos, no pueden explicar los perfiles de los seres vivos y que para llegar a comprender esos rasgos era menester atender a sus modos o condiciones de vida (Corsi 2001, 120-121). Es importante observar, sin embargo, que en la argu- mentación lamarckiana, las referencias a las circunstancias ambientales sólo entran en juego para explicar por qué las formas vivas particulares se ramifican en variedades que no pueden ser simplemente alineadas como peldaños sucesivos de la escala zoológica (Limoges 1976, 47-48); y esto nos está indicando que, para Lamarck, las circunstancias no sólo no son la principal fuerza transformadora de lo viviente; sino que además, la explicación del amoldamiento de ese viviente a las circunstancias no es tampoco el objetivo de lo que a me- nudo se ha considerado como su teoría de la adaptación. En efecto, las referencias de Lamarck al modo por el cual las circunstancias influirían en los perfiles de los orga- nismos no sólo constituyen una teoría auxiliar en su sistema, una teoría muy importante y célebre pero auxiliar al fin; sino que además, el objetivo de esta teoría auxiliar no es explicar la adecuación del viviente a las circunstancias sino explicar los descaminos de la serie. Lamarck no quería saber cómo hacían los seres vivientes para adaptarse al ambiente y sobrevivir; lo que él quería saber era por qué esos seres no subían lineal y ordenadamente por la escala del ser. Es ésa la cuestión a la que responde su teoría sobre la influencia de FILOSOFIA.indb 6 27/11/06 11:34:20 Contra la lectura adaptacionista de Lamarck [7] G u st a vo C a p o n i las circunstancias en la morfología; y es en ese sentido que, siguiendo a Camile Limoges, podemos decir que no hay problemática de la adaptación en Lamarck: lo que se plantea en esa teoría auxiliar es la problemática de la serie y lo que se intenta con la misma es explicar los desvíos o anomalías de las formas orgánicas en relación a esa serie. Es el problema de la serie, en definitiva, el que convoca y motiva la postulación de ambos factores lamarckianos de transformación: uno para explicar las grandes líneas de su constitución y el otro para justificar la filigrana de sus des- viaciones. Decir, como Montalenti (1983, 32), que “lo que Lamarck quiso explicar con su teoría era la adaptación” es definitivamente un error. Lamarck no dijo que las formas vivas, además de tornarse progresivamente más comple- jas, debían también ser viables y que por eso era menester completar su explicación de esa tendencia a la complejidad creciente con una explicación de esa viabilidad. Eso es lo que tal vez nosotros diríamos en estos tiempos darwinianos en los que siempre vemos al viviente asediado por un ambiente que lo amenaza con la extinción. Pero ese no es el caso de Lamarck: para él la extinción sólo puede ocurrir aisladamente y sobre todo por la inter- vención del hombre (Limoges 1976, 45-46; Jacob 1973, 167; Mayr 1976, 247). Lamarck ([1809]1994, 130) fue, en efecto, tributario de una idea de economía natural en el cual la guerra entre los seres vivos sólo tiende a la manutención de cierto equilibrio u orden en el cual “las razas de los cuerpos vivos subsisten todas pese a sus variaciones”; y por eso “los progresos adquiridos en el perfeccionamiento de la organi- zación nunca se pierden” (ver también: Barthélémy-Madau- le 1979, 128-129 y Corsi 2001, 89-90). En su mundo, como observó Limoges (1976, 48), “es impensable que una especie no se acomode a su entorno; en su sistema sin extinción de especie, no se prevé sanción contra las especies que fraca- FILOSOFIA.indb 7 27/11/06 11:34:21 I S E L E C C I Ó N N AT U R A L [8] san en su acomodamiento a las circunstancias exteriores”; y, ya en ese sentido, puede decirse que no hay realmente una problemática de la adaptación en Lamarck. Lo que hoy llamaríamos la viabilidad ecológica del viviente no planteaba para él ningún interrogante y por eso no merecía mayores explicaciones. Se nos podría objetar, sin embargo, que, si de todos modos, el acomodamiento de los organismos a sus circuns- tancias forma parte de la explicación que Lamarck sugiere para los desvíos de la serie, entonces, no puede decirse, sin más ni más, que el asunto de la adaptación esté totalmente ausente de su obra. ¿Acaso esa presión de las circunstancias, poderosa al punto de desviar el orden natural, no se parece en algo a las exigencias ambientales resaltadas por Darwin?; y, consecuentemente: ¿No tienen las respuestas que los or- ganismos dan a esas exigencias algo de muy semejante a las adaptaciones darwinianas? ¿No habría también Lamarck, en este sentido, resaltado y reconocido la importancia de ese orden de fenómenos, preparando así el terreno para la instauración darwiniana? Sé que estas preguntas pueden parecer puerilmenteretóricas: al final de cuentas, hablar de la adaptación en La- marck es un lugar común. Sin embargo, esa unanimidad de las lecturas adaptacionistas de Lamarck es definitivamente cuestionable. La misma, me parece, es una unanimidad sos- pechosamente post-darwiniana: una consecuencia de que los textos de Lamarck hayan pasado a ser leídos como Darwin lo había hecho; es decir: como si Lamarck fuese “un autor que trata el problema de la adaptación para darle una solución insatisfactoria” (Limoges 1976, 48-49). Darwin nos lleva a leer a Lamarck como si éste fuese su precursor; y esto vale incluso para aquellos autores usualmente denominados neo- lamarckianos. Las así llamadas teorías neolamarckianas siem- pre fueron deudoras del darwinismo: suponían planteada la FILOSOFIA.indb 8 27/11/06 11:34:21 Contra la lectura adaptacionista de Lamarck [9] G u st a vo C a p o n i problemática de la adaptación y se remitían a los escritos de Lamarck como fuente de soluciones alternativas para la misma. Los textos de Lamarck siguen sin embargo ahí; y su lectura, según me parece, puede exigirnos revisar ciertas ideas recibidas, y muy difundidas, sobre su pensamiento. Esos escritos mencionan, es cierto, múltiples peculiari- dades morfológicas que hoy consideraríamos ejemplos de adaptaciones; pero si los leemos atentamente veremos que esos ejemplos no son allí interpretados de ese modo. La singularidad morfológica puede ser hoy un indicio poderoso de adaptación; pero no lo era para Lamarck. Para él, esa singularidad merecía y podía ser explicada: merecía serlo, como ya vimos, en tanto la misma constituyese una anomalía en relación a la serie; y podía serlo apelando a los fenómenos fisiológicos que la acción de las circunstancias podía desen- cadenar en los organismos individuales. Pero esa explicación no presupone ni apela a la supuesta utilidad que el rasgo en cuestión pudiese eventualmente comportar. Tácito, nos dice Borges (1952, 280) en El pudor de la historia, “no percibió la Crucifixión, aunque la registra en su libro”; y algo pare- cido podemos decir nosotros de Lamarck en relación a los fenómenos que hoy mentamos con el concepto darwiniano de adaptación: sus libros los registran copiosamente, pero él no los percibía de ese modo. Los mismos son allí registrados como simples anomalías o deformaciones morfológicas que rompen con el orden natural. Decir que “Lamarck pretende que la respuesta al me- dio es siempre favorable” (Tetry 1981, 146), o que desde su perspectiva “todas las variaciones que acontecen son útiles” (Jacob 1973, 167), es un error muy común y persistente; pero no por eso deja de ser un error. Y lo que está en la base de ese error es la propensión a leer Lamarck con los ojos de Darwin a la que acabamos de aludir. Pero sólo es necesario fracasar en la tentativa de encontrar en Lamarck FILOSOFIA.indb 9 27/11/06 11:34:22 I S E L E C C I Ó N N AT U R A L [10] cualquier referencia clara e inequívoca a la utilidad de las modificaciones para percibir que lo que allí está en juego es un problema distinto del darwiniano. Para Lamarck, las modificaciones que los organismos sufrían en virtud de sus condiciones de vida no tenían por qué redundar en alguna ventaja para sus portadores; y es por eso que la posible utilidad de las mismas no es nunca considerada en sus análisis y explicaciones. Lejos de ser pen- sadas como recursos para enfrentar las circunstancias, esas modificaciones son, en todo caso, marcas o deformaciones producidas por las condiciones en las que se desarrollaban las diferentes formas de vida: los ojos de un topo no se atro- fian para dejar de ver; sino por dejar de hacerlo. Pero no sólo los ejemplos de atrofia de órganos entran en ese esquema. La explicación que Lamarck da del tamaño y la forma que llegan a tener los grandes cuadrúpedos herbívoros sigue también ese mismo patrón. Estos animales, nos dice, además de poseer el “hábito de consumir, todos los días, grandes volúmenes de materia alimenticia que distienden los órganos que los reciben”, poseen también el hábito “de no hacer más que movimientos mediocres” y de eso “ha resultado que los cuerpos de estos animales se hayan engrosado considerablemente, hayan de- venido pesados y macizos, y hayan adquirido un volumen muy grande como se lo ve en elefantes, rinocerontes, vacas, búfalos y caballos” (Lamarck [1809] 1994, 229). En cam- bio, observa Lamarck, en las tierras donde la presencia de predadores obliga reiteradamente a correr, esos efectos no se han notado: el ejercicio les dio a gacelas y antílopes un cuerpo más esbelto. Pero esta esbeltez y ligereza no es una adaptación para la carrera: es un resultado o un efecto de la carrera; y lo mis- mo ocurre con el tristemente célebre pescuezo de la jirafa. Para Lamarck, esa estructura anatómica no se estiró para FILOSOFIA.indb 10 27/11/06 11:34:22 Contra la lectura adaptacionista de Lamarck [11] G u st a vo C a p o n i permitir alcanzar las ramas más altas de los árboles, sino por causa del movimiento reiterado y continuo que ese animal realiza en su rutina de alimentación: el movimiento, o su ausencia, simplemente causa una modificación pero nada exige que esa modificación tenga que ser necesariamente útil (Lamarck [1809] 1994, 232-233). Ya el caso del perezoso recuerda más al de los grandes herbívoros; y allí también queda muy claro que Lamarck ([1809] 1994, 234) presenta su conformación y sus capaci- dades motoras, no como ejemplos de una progresiva adap- tación a un modo de vida, sino como el simple resultado de ese modo de vida. Lamarck no piensa darwinianamente: no busca una utilidad particular para las características del perezoso. Éstas no son vistas como integrando una estrategia de supervivencia sino como la simple consecuencia de las condiciones de vida a la que este animal se vio confinado. Siendo que lo que vale para el perezoso valdría también para cualquier tipo de animal cuyas condiciones de vida cambien y pase de tener alimento en abundancia, como un caballo europeo mantenido en un establo, a tener que depender de los escasos, magros y secos arbustos de la Pa- tagonia: ese cambio generaría, según Lamarck, una raza de caballos menores. Pero esto sería un efecto directo y trasmisible a la descendencia de la falta de nutrientes; y no una adaptación darwiniana a esas condiciones. Sólo después de Darwin nuestro caballo criollo podrá ser visto como algo distinto de un caballo europeo degenerado por las difíciles circunstancias que le habrían tocado en suerte. A este respecto Lamarck está definitivamente más cerca de la temática buffoniana de la degeneración que de la te- mática darwiniana de la adaptación: y hasta puede decirse, que su teoría sobre la influencia de las circunstancias en los perfiles orgánicos no es otra cosa que una generalización y una radicalización de ese tímido, e inmediatamente desecha- FILOSOFIA.indb 11 27/11/06 11:34:22 I S E L E C C I Ó N N AT U R A L [12] do, atisbo de transformismo que Buffon ([1753]1868, 35-39) insinuó al sugerir la plausibilidad de considerar al asno como un simple caballo degenerado por los efectos del clima y de la alimentación acumulados a lo largo de generaciones. Para Lamarck, como para Buffon, las circunstancias deforman, degeneran o desvían, en mayor o menor grado, el normal desarrollo de las formas, pero no por eso las optimizan o las adecuan al cumplimiento de una función; y la diferencia es realmente importante: en otros contextos, el hecho de no verla podría llevarnos a confundir el retardo en el crecimien- to de un niño desnutrido con un recurso o estrategia para encarar la escasez de alimentos. Podemos trazar, sin embargo, una analogía mucho me- nos dramática que esa: no ver la diferencia entre la adapta- ción darwiniana y la deformación lamarckiana es como no ver la diferencia existente entre el desgaste que el uso produjo en nuestros viejos zapatos y las innovaciones de diseño que puede presentar un nuevo modelo de calzado deportivo. Esas innovaciones están ahí porquese espera alguna ventaja de ellas, para el usuario o para el fabricante; el desgaste, en cambio, sólo eventualmente, pero nunca necesariamente, podrá hacer más cómodos nuestros viejos zapatos, pudiendo también producir el efecto contrario. Es decir: para La- marck, las peculiaridades morfológicas de los seres vivos que escapan al orden y a la secuencia normal de las formas, se parecen más a las abolladuras que los choques pueden dejar en un auto, que a los parachoques con los que los equipamos. Los autos no tienen abollones para amoldarse a las cosas con que chocan; los tienen como efecto de los choques. Pero, el indicio más claro de la poca confianza que La- marck podía tener en el poder conformador, y no meramente deformador, de las circunstancias, lo encontramos en su His- toire Naturelle des Animaux sans Vertèbres. Allí, a la hora de explicar cómo la boca de los insectos superiores pudo ha- FILOSOFIA.indb 12 27/11/06 11:34:22 Contra la lectura adaptacionista de Lamarck [13] G u st a vo C a p o n i cerse más compleja, dejando de ser un aparato meramente succionador y pasando a ser un aparato masticador provisto de un número de partes mayor y más complejamente arti- culadas, Lamarck (1816, 303, 311), en lugar de apelar a las influencia de las circunstancias, atribuye esos incrementos de la complejidad morfológica a la instauración gradual de un plan de organización dispuesto por la propia naturaleza. Y eso es lo que Lamarck hace siempre que tiene que ex- plicar cualquier incremento en la complejidad morfológica de una estructura. Con todo, para entender el significado de esta tesis, y no creer ingenuamente que con la palabra naturaleza se esté aludiendo ahí a la intervención de un medio ambiente que, a la Darwin, moldearía los seres vivos, es menester recordar que, cuando Lamarck usa la palabra naturaleza, es para referirse a esa potencia productora y organizadora, el poder de la vida, que nunca puede confundirse con las circunstancias. Éstas, por el contrario, son precisamente las fuerzas o factores que se oponen al accionar de la naturaleza, obstaculizándolo o desviándolo (Lamarck 1820, 141-142). Las circunstancias, es cierto, pueden propiciar diver- sas modificaciones morfológicas, agrandando o atrofiando, retorciendo o enderezando, los apéndices maxilares de las diferentes especies de insectos (Lamarck 1816, 300), pero el propio surgimiento y la efectiva diferenciación de esas estructuras, por convenientes o necesarias que ellas sean para la subsistencia de los insectos, no depende para Lamarck, ni de lo que estos animales hagan o dejen de hacer, ni tampoco de las circunstancias en las que los mismos desarrollan sus existencias: para Lamarck, la instauración de esas estructuras obedece pura y exclusivamente a un plan de organización impulsado y propiciado por el poder de la vida que produce y establece en los seres vivos, sucesiva y gradualmente, “los diferentes sistemas de órganos particulares” (Lamarck 1820, FILOSOFIA.indb 13 27/11/06 11:34:23 I S E L E C C I Ó N N AT U R A L [14] 141). Las circunstancias y los hábitos que las circunstancias pueden promover no tendrían nunca ese poder creador, ni podrían producir tampoco ningún incremento real de com- plejidad como el verificado en el pasaje de los insectos suc- cionadores a los masticadores. Pero, definitivamente, el mejor ejemplo para ver cómo la referencia a cualquier ventaja eventual de las modificacio- nes orgánicas está ausente en el razonamiento de Lamarck, lo encontramos en su explicación de la formación de los cuernos de los rumiantes. Estos animales, nos dice Lamarck ([1809] 1994, 230), “no pudiendo emplear sus pies más que para sostenerlos, y teniendo poca fuerza en sus mandíbulas, las cuales se ejercitan exclusivamente en cortar y masticar la hierba, sólo pueden batirse a golpes de cabeza, dirigiendo uno contra otro el vértice de esa parte”; y como sus accesos de cólera, sobre todo entre los machos, son frecuentes, “su sentimiento interior, por la mediación de esos esfuerzos, dirige más fuertemente los fluidos hacia esa parte de la ca- beza” formándose allí “una secreción, de materia córnea en algunos casos y de materia ósea mezclada de materia córnea en otros, que da lugar a protuberancias sólidas: de ahí el origen de los cuernos y las astas con los que la mayor parte de estos animales tienen la cabeza armada”. Lamarck, reconozcámoslo, parece estar yendo dema- siado lejos y forzando hasta lo insostenible las ideas usuales respecto a cómo los comportamientos repetidos pueden modificar los perfiles de un organismo. La analogía con el robustecimiento por el ejercicio de los brazos del remero ha quedado sin duda muy lejos. Lamarck, además, ni siquiera habla de chichones que se endurecen y se tornan constantes como los callos; habla de fluidos que, por el propio ímpetu de las embestidas, y no por el impacto, fluyen hacia esa parte del cuerpo produciendo, por acumulación, esas protuberancias que llamamos cuernos o astas. Con todo, antes de consi- FILOSOFIA.indb 14 27/11/06 11:34:23 Contra la lectura adaptacionista de Lamarck [15] G u st a vo C a p o n i derar este ejemplo como una muestra jocosa o pintoresca del primitivismo o del infantilismo de las tesis que estamos analizando, sería más provechoso no dejar de percibir cómo, sin ceder en ningún momento a la tentación de pensar que esas protuberancias estén ahí porque sean útiles para algo, Lamarck persevera en su arduo tour de force fisiológico e intenta explicar esa peculiaridad en base a la circulación y la acumulación de los fluidos orgánicos. Sin mencionar siquiera las ventajas que, a posteriori de su aparición, esa protuberancia podría representar, Lamarck se limita a considerarlas como el efecto residual de un mo- vimiento habitual y constante. Es más: en este caso se hace particularmente patente que el comportamiento sólo cuenta en su teoría en tanto que factor capaz de desencadenar o producir fenómenos fisiológicos; y aquí vale algo semejante a lo que dijimos en relación a los ojos de los topos: los toros, según Lamarck, no tienen cuernos para embestir, los tienen por causa de las embestidas. Aunque no sean callos o chicho- nes, los cuernos de los toros se parecen más a abolladuras, a efectos de embestidas y de golpes, que a parachoques o a arietes. Por eso, si este u otro ejemplo de Lamarck tiene algo de ridículo, no lo será por postular una teleología o intención de los organismos a modificarse (Pichot 1993, 583). Todo lo contrario: lo que fuerza a Lamarck a argumentar de esa forma es la necesidad de explicar estructuras tan singulares, como pueden serlo cuernos y astas, por la simple y ciega dinámica de fluidos cuya circulación se acelera y se desvía por efecto de movimientos corporales. Pero no teníamos porque esperar otra cosa: Lamarck tampoco es llevado a analizar esas estructuras porque las mismas siquiera apa- rentasen cierta conveniencia o utilidad; para él las mismas sólo interesan en tanto parecen indicar una distorsión o una anomalía en relación al orden natural. FILOSOFIA.indb 15 27/11/06 11:34:23 I S E L E C C I Ó N N AT U R A L [16] Algo parece haber interferido con lo que podría ser con- siderado como el devenir natural o normal de las formas y es necesario saber qué fue. A veces podrán ser factores tan simples como la carencia o sobreabundancia de nutrientes para crecer; y otras la repetición obcecada y constante de un movimiento que termina por desviar el desarrollo esperable de las formas en cuestión. Como sea, si ese orden o devenir natural de las formas obedece a un factor físico como lo es la dinámica de los fluidos que constantemente canalizan el interior de los seres organizados tendiendo a incrementar el tamaño y la complejidad de todas sus partes, lo que pertur- ba o desequilibra esa dinámica, haciéndola más intensa en algunos casos y menos intensa en otros, debe ser también un factor físico capaz de interferir con ese movimiento de fluidos. Y es ahí, claro, donde entran las circunstancias.La- marck, podríamos decir, no pudo ser más claro porque no contó con esa (para él) inimaginable lectura adaptacionista de su Filosofía Zoológica que Darwin, sin quererlo, acabó imponiendo. R E F E R E N C I A S B I B L I O G R Á F I C A S Barthélemy-Madaule, M. 1979. Lamarck ou le mythe du précur- seur, Paris: Seuil. Borges, J. [1952] 1980. Otras inquisiciones, Prosa Completa II, 223-229. Barcelona: Bruguera. Buffon, G. [1753] 1868. L’âne, T. IV de L’Histoire Naturelle Ge- nérale et particulière, en Oeuvres de Buffon (Ordenadas y anotadas por Jules Pizzetta), Vol. III, 35-43, Paris: Parent- Desbarres. Caponi, G. 2006. Retorno a Limoges: la adaptación en Lamarck, Asclepio 58 (1) (en prensa). Corsi, P. 2001. Lamarck: genése et enjeux du transformisme 1770- 1830. Paris, CNRS Editions. Darwin, C. 1859. On the Origin of Species, London: Murray. FILOSOFIA.indb 16 27/11/06 11:34:23 Contra la lectura adaptacionista de Lamarck [17] G u st a vo C a p o n i Jacob, F. 1973. La lógica de lo viviente, Barcelona: Laia. Lamarck, J. 1802. Recherches sur l’organisation des corps vivants, Paris: Maillard. Lamarck, J. [1809] 1994. Philosophie Zoologique (Presentación y notas por A. Pichot), Paris: Flammarion. Lamarck, J. 1815. Histoire Naturelle des Animaux sans Vertèbres (T. I), Paris: Verdière. Lamarck, J. 1816. Histoire Naturelle des Animaux sans Vertèbres (T. III), Paris: Verdière. Lamarck, J. 1820. Système Analytique des Connaissances Positives de L’Homme, Paris: Belin. Limoges, C. 1976. La Selección Natural: ensayo sobre la primera constitución de un concepto (1839-1859), México: Siglo XXI. Mayr, E. 1976. Lamarck revisited, en Mayr, E. 1976. Evolution and diversity of life, 222-250, Cambridge: Harvard Uni- versity Press. Montalenti, G. 1983. Desde Aristóteles hasta Demócrito vía Da- rwin, en Ayala, F. & Dobzhansky, T. (eds.) 1983, Estudios sobre la filosofía de la biología, 25-44, Barcelona: Ariel. Roger, J. 1983: Buffon et le transformisme; en Biezunski, M. (ed.) 1983, LA RECHERCHE en histoire des sciences, 149-172, Paris: Seuil. Tetry, A. 1981. Hérédité ou non-hérédité des caractères acquis par le soma: problème explosif, en Lamarck et son temps, Lamarck et notre temps, 143-118, Paris: Vrin. FILOSOFIA.indb 17 27/11/06 11:34:24 FILOSOFIA.indb 18 27/11/06 11:34:24 LA SELECCIÓN NATURAL Y SU PAPEL CAUSAL EN LA GENERACIÓN DE LA FORMA* MAXIMILIANO MARTÍNEZ Departamento de Filosofía Universidad Nacional de Colombia I N T R O D U C C I Ó N ¿Cómo entendía Darwin el mecanismo de la selección na- tural? Esta es una pregunta que, al parecer, no tiene una respuesta unívoca hoy día, incluso entre los darwinistas más consumados. Es claro para todos que Darwin explica y re- suelve el asunto de las adaptaciones mediante el mecanismo que llamó ‘selección natural’.1 Pero, ¿cuál era el objetivo de Darwin en el Origen de las Especies, cuyo fundamento es dicho mecanismo?, ¿cómo resuelve Darwin el enigma del diseño en la naturaleza? ¿Lo hace al dar una respuesta dife- rente (no-teológica) a la que dio Paley? ¿O más bien Darwin trataba de cambiar el foco de la investigación biológica/evo- 1 Ver Darwin ([1859] 1998), especialmente capítulos 3 y 4. La investigación de la que hace parte el presente texto, es financiada por la beca ‘Académicos en formación’ de la Universidad Nacional de Colombia. Gran parte del texto fue redactado durante una estan- cia de investigación en el IIFs de la UNAM en Ciudad de México, estancia financiada por la Red de Macrouniversidades y el Banco Santander. Agradezco a Alejandro Rosas, Francisco Ayala, Carlos López Beltrán, Michael Ruse, Vivette García Deister, Claudia Lore- na García, Ana Barahona, Gustavo Caponi, Sergio Martínez, Paulo Abrantes, Daniel Piñero y Fabrizzio Guerrero McManus su amabi- lidad y disposición para discutir las ideas aquí expuestas. FILOSOFIA.indb 19 27/11/06 11:34:24 I S E L E C C I Ó N N AT U R A L [20] lutiva hacia una perspectiva de tipo poblacional, más que individual? Mi interés en este texto no es averiguar cuál era el objetivo concreto de Darwin, de hecho, supongo que tenía varios, entre los cuales están los dos que acabo de mencionar. Aunque concuerdo con algunos en ver a Darwin como el proponente de una explicación del diseño en la naturaleza alternativa a la de Paley, mi objetivo, en el presente escrito, es dar los primeros pasos en la composición de una noción de selección natural lo suficientemente robusta que explique su capacidad creativa y capture la intuición que Darwin tenía al respecto. Esta noción robusta de selección natural creativa, a mi modo de ver, puede construirse mediante la conjunción de algunos trabajos en el área. Para ello, retomo las ideas de Ayala, Neander y Campbell, quienes proponen una selección positiva, con incidencia directa en la creación de las adaptaciones, y las comparo con el trabajo de Sober, para quien la selección natural es una fuerza meramente negativa sin incidencia directa en el origen de la novedad fenotípica. Al final, mencionaré qué tipo de utilidad tiene el presente trabajo para el debate actual en la filosofía de la biología. 2. L A S E L E C C I Ó N N AT U R A L Y L A G E N E R A C I Ó N D E L A N O V E D A D F E N O T Í P I C A : E L D E B AT E En una discusión en varios números del The British Journal for the Philosophy of Science, en el año de 1995, los filó- sofos Karen Neander y Elliot Sober se enfrascaron en una disputa con respecto al papel causal jugado por la selección natural en la conformación fenotípica de los organismos. Esta discusión puede remontarse a unos años atrás, cuando Neander (1988) examina críticamente la noción de selección natural expuesta por Sober en su célebre The Nature of Selection (1984). En este último, Sober defiende una idea conservadora de la selección natural como fuerza negativa FILOSOFIA.indb 20 27/11/06 11:34:24 La selección natural y su papel causal en la generación de la forma [21] M a xi m ili a n o M a rt ín e z sin incidencia en la formación de las novedades fenotípicas. Para Neander, por el contrario, la selección natural es una fuerza positiva con un rol causal directo en la formación de los rasgos de los organismos. Fuertemente influenciada por los trabajos de Francisco Ayala, Neander intenta des- legitimar la propuesta de Sober (la cual atribuye también a Cummins y Dretske) llevándola a realizar un trabajo con- ceptualmente muy elaborado con respecto a la forma en que opera el mecanismo de selección natural. Veamos, como primera medida, en qué consiste la visión de la selección negativa, expuesta principalmente por Sober. Más adelante examinaremos el enfoque positivo. 3. L A V I S I Ó N N E G AT I VA D E L A S E L E C C I Ó N N AT U R A L Sober ([1984] 1993, 148ss.) distingue tres tareas explicativas para una teoría de la evolución que quiera dar cuenta de la diversidad orgánica. Podemos preguntarnos por el desa- rrollo individual de una adaptación, podemos preguntarnos por la persistencia (en tiempo evolutivo) de una adaptación y podemos preguntarnos por el origen (creación) de una adaptación. Para explicar el desarrollo individual de un rasgo (adaptación) debemos acudir al proceso ontogenético me- diante el cual llegamos a tener dicho rasgo. Para explicar la persistencia de un rasgo necesitamos determinar las causas por las cuales los individuos con dicho rasgo prosperaron y persistieron desde el pasado sobre individuos que no po- seían dicho rasgo. Para explicar el origen de un rasgo de- bemos explicar los procesos mediante los cuales se origina o emerge el plan genético que codifica para dicho rasgo. Según Sober, de esos tres tipos de tareas explicativas sólo la segunda, la pregunta por la persistencia, es respondida por la selección natural. La selección natural explica por qué un rasgo persiste sobre otros, no explica ni el desarrollo FILOSOFIA.indb 21 27/11/06 11:34:24 I S E L E C C I Ó N N AT U R A L [22] ontogenético de estos mismos ni mucho menos su creaciónu origen (Neander, por el contrario, argumentará, como veremos más adelante, que la selección natural sí explica el origen de las adaptaciones). A la base del papel explicati- vo otorgado a la selección natural por Sober, se encuentra una noción particular de la misma. Y es que para Sober, la selección natural es una fuerza estrictamente negativa que opera simplemente eliminando a los individuos menos aptos, seleccionando, por ende, a los más aptos (que resultan serlo por las adaptaciones que tienen). Esto lo lleva a proponer una lectura de Darwin, a mi modo de ver, alejada de la usual. Según Sober, la revolución darwiniana consiste en cambiar de contexto a la pregunta por las adaptaciones: se trata de explicar su persistencia, no su origen. Para Sober, Darwin resuelve el asunto de las adaptaciones al explicar por qué los organismos que existen (persisten) son aquellos que poseen ciertas adaptaciones. Es un error pensar que Darwin resuelve el asunto al explicar cómo se originan en los individuos las adaptaciones que tienen. Así, siguiendo a Sober, no es que Darwin esté proponiendo una respuesta naturalista a la pregunta de Paley (pregunta por la creación), lo que hace es plantear una nueva concepción acerca del tipo de preguntas que deben ser respondidas con relación a la diversidad (preguntas por la persistencia): La selección natural no explica por qué yo tengo un pul- gar oponible (en vez de no tenerlo). Este hecho cae bajo el ámbito de los mecanismos de la herencia. Hay sólo dos tipos de hechos que la selección natural puede explicar al nivel individual. Puede explicar por qué los organismos particulares sobreviven y por qué gozan de cierto grado de éxito reproductivo. Pero las propiedades fenotípicas y genotípicas de los individuos –propiedades morfológicas, fisiológicas y conductuales– caen fuera del dominio pro- pio de la selección natural (Sober [1984] 1993, 152). FILOSOFIA.indb 22 27/11/06 11:34:25 La selección natural y su papel causal en la generación de la forma [23] M a xi m ili a n o M a rt ín e z La razón para defender esta distinción es simple: para Sober, la selección natural explica únicamente la frecuencia o distribución de un rasgo en una población (por qué los individuos que lo poseen sobrevivieron y persistieron). No explica el origen o creación de las adaptaciones mismas en un individuo particular. La explicación seleccionista tiene como foco la población y no el individuo. 4. A P O Y O S I N T U I T I V O S A L A V I S I Ó N N E G AT I VA Encontramos algunos apoyos intuitivos para el enfoque ne- gativo de la selección natural. a) El proceso de selección natural es un proceso de dos etapas: generación aleatoria de variación heredable (por mutación, recombinación, etc.) y posterior selección de dicha variación pre-existente. Aquí, las variaciones son creadas por las mutaciones y la selección natural simplemente escoge entre ellas, una vez ya están presentes, dependiendo su grado de aptitud. b) La selección natural es asimilada a un cedazo o filtro: los individuos y sus planes genéticos son arrojados al cedazo de la selección natural (condiciones de vida), decantando a los más adap- tados y eliminando a los menos adaptados. Esta metáfora del filtro es similar a la de la selección natural podando el árbol de la vida: la selección natural determina cuáles ramas se quedan y cuáles se eliminan, pero el árbol es necesaria- mente una forma previa a los cortes. c) Es posible pensar en un mundo donde coexistieran todas las especies, tanto las actuales como las que ya fueron eliminadas (no habría habido proceso de selección en dicho mundo). La selección natural no habría tenido ningún papel en la creación de los organismos y sus adaptaciones. Una condición para ello es que tal mundo debería tener recursos ilimitados. Nuestro mundo, por el contrario, tiene recursos limitados, lo que FILOSOFIA.indb 23 27/11/06 11:34:25 I S E L E C C I Ó N N AT U R A L [24] propicia la competencia. Pero la competencia no crea los organismos, ellos son una condición previa para ella.2 Además de Sober, André Ariew (2003) defiende el en- foque negativo de la selección natural apoyado en las in- tuiciones que acabo de exponer. Ariew, en una ingeniosa respuesta a The Mind Doesn’t Work That Way, de Fodor, sostiene que los rasgos (que componen a los fenotipos) están necesariamente presentes antes de que la selección natural pueda favorecerlos. Así, siguiendo a Sober, Ariew afirma que la selección natural explica por qué los rasgos están presentes al explicar el incremento de su frecuencia en una población, ella no explica cómo se originan. 5. E L E J E M P L O D E S O B E R Sober da un apoyo adicional a su visión de la selección na- tural negativa al acudir a la distinción de Lewontin entre explicación del desarrollo y explicación de la selección (ex- plicaciones según el contexto, para Lewontin). La primera, como vimos, da cuenta de cómo los individuos de una po- blación adquieren ciertas propiedades (cambio individual). La segunda explica cómo una población viene a componerse de individuos con ciertas propiedades (cambio en la pobla- ción). Como mencionamos arriba, estos son dos asuntos totalmente diferentes y la selección natural sólo explica el segundo. Sober tiene un ejemplo muy ilustrativo al respecto ([1984] 1993, 149). Nos dice que imaginemos un salón de clases (salón C) en donde hay diez niños, los cuales todos están en un nivel de lectura tres. Ahora, si nos preguntamos 2 Me parece pertinente anotar la dificultad (¿imposibilidad?) de pen- sar en un mundo tal, pleno de recursos. Un mundo sin lucha por la existencia requeriría no sólo recursos infinitos (cualquier cosa que ello quiera decir), también cambio en las formas de alimentación de los seres vivos. FILOSOFIA.indb 24 27/11/06 11:34:25 La selección natural y su papel causal en la generación de la forma [25] M a xi m ili a n o M a rt ín e z por qué los niños del salón C leen en un nivel tres, podemos responder de dos formas. Si tomamos en cuenta la explica- ción del desarrollo, entonces debemos explicar cómo cada niño va desarrollando paulatinamente la habilidad de leer, hasta llegar al nivel tres. Si atendemos a la pregunta por la selección, debemos averiguar cuál fue el criterio exigido para permitir el ingreso de los individuos al salón C (en este caso, tener un nivel tres de lectura). En el primer caso los niños se toman como individuos dinámicos, en el segundo se toman como estáticos (figura 1). Figura 1. Dos tipos de explicación para un mismo rasgo. Salón C: 10 niños ¿Por qué los niños del salón C tienen un nivel 3 de lectura? Dos tipos de explicación: Desarrollo Selección Lectura arriba del nivel 3 Cómo desarrolla cada niño su capacidad (Indi- viduos dinámicos) Cuál es el criterio para aceptar el ingreso del niño al salón (Indivi- duos estáticos) Nos dice Sober: La frecuencia de los rasgos de una población puede ser explicada por la selección natural, pero esta no puede explicar la posesión misma de esos rasgos en dicha pobla- ción (…) las explicaciones seleccionistas, a diferencia de las del desarrollo, no explican hechos que se dan al nivel de las poblaciones agregando las explicaciones que se dan a nivel individual. La selección natural puede explicar por qué todos los individuos en el salón C leen en un nivel tres, pero no lo hace mostrando cómo cada uno adquiere tal capacidad ([1984] 1993, 152). FILOSOFIA.indb 25 27/11/06 11:34:25 I S E L E C C I Ó N N AT U R A L [26] Así, para Sober, el único criterio para permitir el acceso al salón C es que el individuo tenga un nivel determinado de lectura (nivel tres), sin importar cómo adquirió y desa- rrolló tal capacidad, el cual es un asunto completamente diferente (y el cual puede tener, en cada caso, una respuesta diferente): Las dos explicaciones dan cuenta de por qué los indivi- duos del salón C leen en un nivel tres, pero lo hacen ubi- cando tal proposición en diferentes contextos. La historia del desarrollo nos dicecómo cada individuo adquiere la habilidad de lectura que tiene. La historia de la selección muestra cómo el salón contiene individuos que leen en un nivel tres y no individuos con otros niveles de lectura ([1984] 1993, 149) Hasta aquí he expuesto los principales argumentos que dan apoyo al enfoque negativo de la selección natural. Nos concentraremos ahora en el enfoque positivo. 6. L A S E L E C C I Ó N N AT U R A L C O M O U N A F U E R Z A C R E AT I VA No sólo Neander defiende el papel causal-positivo de la se- lección natural, Ayala y Gould pueden contarse como im- portantes partidarios de esta visión.3 En su monumental The Structure of Evolutionary Theory Gould afirma: La Selección Natural obviamente se ubica en el centro de la teoría de Darwin, pero debemos reconocer como su segundo postulado fundamental la afirmación de que la selección natural actúa como la fuerza creativa del cambio evolutivo. La esencia del darwinismo no puede residir en la mera observación de cómo opera la selección 3 Aunque Gould lo hace, como es de suponerse, por razones muy di- ferentes a las de Ayala y Neander. FILOSOFIA.indb 26 27/11/06 11:34:25 La selección natural y su papel causal en la generación de la forma [27] M a xi m ili a n o M a rt ín e z natural –porque generalmente se ha aceptado un papel negativo para ella, pues elimina al no adaptado y preserva el tipo (2002, 139). Gould parece estar corrigiendo a Sober. Por otro lado, uno de los principales defensores del papel creativo de la selección natural, Ayala, nos dice La SN ha sido comparada con un filtro que retiene las escasas mutaciones útiles que aparecen y deja ir a las fre- cuentes mutaciones dañinas. La selección natural actúa de esa manera, pero es mucho más que un mero pro- ceso negativo, puesto que es capaz de generar novedad e incrementar la probabilidad de ciertas combinaciones genéticas que de otra manera serían extremadamente improbables. La selección natural es, en este sentido, creativa (1999, 7) Usualmente, Ayala (1993, 1999) ilustra dicho papel creativo, la generación de la novedad, a partir del siguiente ejemplo. Escherichia coli es una bacteria que necesita del aminoácido histidina para su crecimiento. Si arrojamos unas cuantas bacterias a 1 cc de histidina estas se multiplicarán y tendremos, en un par de horas, de dos a tres billones. En dicha bacteria, mutaciones esporádicas de resistencia al antibiótico estreptomicina ocurren en el orden de uno en cada cien millones. Si agregamos estreptomicina a nuestras bacterias, tendremos que sólo sobrevivirán de veinte a trein- ta, las cuales, de nuevo, se multiplicarán y en pocas horas llegaran a ser de veinte a treinta millones, todas resistentes al antibiótico. Así mismo, mutaciones esporádicas de Esche- richia coli con capacidad para crecer sin histidina ocurren en el orden de cuatro en cien millones. Si trasladamos ahora nuestras bacterias a un medio sin histidina, sólo sobrevivirán unas cien. Estas a su vez se multiplicarán y en unas horas serán nuevamente de dos a tres billones, todas resistentes a FILOSOFIA.indb 27 27/11/06 11:34:26 I S E L E C C I Ó N N AT U R A L [28] la estreptomicina y con la capacidad de crecer sin histidina. De esta manera, mientras que la probabilidad de que las dos mutaciones ocurran espontáneamente en la misma bacteria es de cuatro en diez millones de billones, la selección natural ha producido bacterias con tales características en sólo dos pasos. Es en este sentido en que se afirma que la selección es creativa: la selección natural produce combinaciones de genes que de otra manera serían altamente improbables (Ayala 1999, 8; 1993, 13). 7. E L A R G U M E N T O D E N E A N D E R Muy influida por Ayala, Neander (1995a) elabora el siguien- te argumento para defender la creatividad de la selección natural. Primero, Neander distingue dos tipos de selección: de un solo paso y acumulativa. En una secuencia que genera resultados al azar y luego escoge uno de ellos (secuencia Azar/Selección), la selección de un solo paso puede envol- ver múltiples repeticiones, aunque estas son aisladas y no interconectadas entre sí: A S A S A S$ $ $ Por el contrario, la selección acumulativa envuelve múl- tiples repeticiones interconectadas ( ) ( ) ( )A S A S A S$ $ $ $ $ Los resultados de cada tipo de selección son muy dife- rentes, debido a la manera en que opera cada una. En la selección de un solo paso, el resultado de cada secuencia A/S está aislado de los demás y no altera los probables resul- tados de las secuencias futuras. En cambio, en la selección acumulativa la secuencia A/S influye y altera los resultados posibles de las secuencias futuras, pues cada secuencia opera sobre los resultados de la secuencia previa. Según Neander, el enfoque de Sober aplica al primer tipo de selección, mas FILOSOFIA.indb 28 27/11/06 11:34:27 La selección natural y su papel causal en la generación de la forma [29] M a xi m ili a n o M a rt ín e z no al segundo. El siguiente ejemplo, el cual es una modifi- cación mía del ejemplo que usa Neander (1995a, 74), ilustra la influencia de la selección acumulativa en la probabilidad de ocurrencia de los resultados posteriores. Imagínese que tenemos una urna que contiene ochenta balotas numeradas de uno a ochenta. En el fondo de la urna hay ocho hoyos con los números 10, 20, 30, 40, 50, 60, 70 y 80, en donde, tras un giro de la urna, deben caer las respectivas balotas cuyos números concuerden, es decir, la balota con el número 10 en el hoyo 10, la 20 en el hoyo 20, etc. La probabilidad de que, después de hacer girar la urna, caigan en los ocho ho- yos las balotas respectivas es extremadamente baja. Podría uno pasarse la vida intentando una y otra vez sin obtener éxito. Ahora, imagine que, en los múltiples intentos, cada vez que una balota acertada cae en uno de los ocho hoyos, esta permanece allí de ahora en adelante (no se sale de su hoyo en los nuevos giros). De esta manera, tras múltiples giros, la probabilidad de llenar los ocho hoyos con las balotas respectivas va, paulatinamente, aumentando considerable- mente (ver figura 2). ¿Cómo se relaciona este ejemplo con el proceso de selección natural? Según Neander, la versión de selección natural de Sober tiene como base la selección de un solo paso, en donde la mutación es seguida de selección, e igno- ra la selección acumulativa, cuando la selección es seguida por posterior mutación o recombinación. El punto es que, para Neander, la selección natural opera como la selección acumulativa, no como la de un solo paso. En la naturaleza, un proceso de selección precedente puede alterar en gran medida la probabilidad de ocurrencia de resultados poste- riores (traducidos en frecuencias génicas subsiguientes). Esta incidencia de la selección natural en los subsiguientes procesos de selección es posible gracias al mecanismo de la herencia. Neander (1995a, 77), adicionalmente, se vale FILOSOFIA.indb 29 27/11/06 11:34:27 I S E L E C C I Ó N N AT U R A L [30] Figura 2. Selección acumulativa. del siguiente razonamiento (ver también Lewens 2004, 33): imaginemos que tenemos tres tipos de proto-ojos, G1, G2 y G3. G3 es levemente mejor que G2 y G2 levemente mejor que G1. G1 es genéticamente más cercano a G2 que a G3 y G2 se encuentra a la misma distancia genética de G1 y G3. Ahora, si en una población de estrictamente individuos con G1 uno de ellos muta hacia G2, haciendo que tras varias generaciones el rasgo G2 se fije y desplace a G1, entonces la selección natural, al haber escogido y permitido que se fijara G2 debido a su mayor grado de aptitud, ha incre- 10 40 50 60 70 8020 30 78 10 40 50 60 70 8020 30 77 40 40 70 7050 10 40 50 60 70 8020 30 80 10 40 50 60 70 8020 30 79 70 FILOSOFIA.indb 30 27/11/06 11:34:27 La selección natural y su papel causal en la generación de la forma [31] M a xi m ili a n o M a rt ín e z mentado enormemente la posibilidad de que aparezca G3 (pues G3 es más cercano a G2 que a G1).4 Así, entérminos probabilísticos, la selección natural promueve los cambios en dirección del incremento del diseño adaptativo, siempre y cuando este incremento implique aumento en la aptitud de los portadores del rasgo.5 Es en este sentido que Neander toma a la selección natural como una fuerza creativa. 8. C A U S A L I D A D D E S C E N D E N T E Podemos conectar el trabajo de Neander con algunas ideas de causalidad descendente (downward causation), las cuales pueden reforzar el argumento de la selección natural creati- va (Campbell 1974; Popper [1978] 1997). Campbell (1974, 180ss.), en una discusión con respecto al reduccionismo y la organización jerárquica de la naturaleza en niveles (mo- léculas, células, tejidos, órganos, organismos, poblaciones, especies, ecosistemas, cada uno de los cuales tiene una realidad factual y organiza las unidades reales existentes en el nivel inferior), propone cuatro principios: 1. Todos los procesos de niveles superiores están restringidos por y actúan en conformidad con las leyes de los niveles inferio- res. 2. Los alcances teleonómicos de los niveles superiores requieren mecanismos y procesos específicos de los niveles inferiores. 3. La evolución biológica encuentra leyes que no son descritas por las leyes de la física y la química inor- gánica, y las cuales no podrán ser descritas en el futuro por sustitutos de ellos. 4. (Principio de causalidad descendente) Donde opera la selección natural, en un nivel superior de organización, a través de la vida y muerte de las entidades 4 Lewens (2004, 33) critica este argumento de Neander, aunque, a mi modo de ver, no da en el blanco. 5 Para un detallado examen de la selección natural y la causa probabi- lística ver Hodge (1987). Ver también López Beltrán (1993). FILOSOFIA.indb 31 27/11/06 11:34:27 I S E L E C C I Ó N N AT U R A L [32] en dicho nivel, las leyes de este sistema selectivo de nivel superior determinan en parte la distribución de los eventos y sustancias del nivel inferior. Todo proceso en un nivel inferior de una jerarquía está restringido y actúa en confor- midad con las leyes de los niveles superiores. De acuerdo con lo anterior, para Campbell, a diferencia de como es entendida usualmente en las discusiones filosóficas y por el sentido común, la causalidad es descendente cuando lapsos substanciales de tiempo (agrupando numerosas generacio- nes reproductivas) son tomados como un instante. Popper ([1978] 1997, 34-35), a su vez, nos dice que po- demos hablar de causalidad descendente dondequiera que una superestructura afecte causalmente a su subestructu- ra. Para Popper, la selección natural de variantes azarosas produce un efecto descendente en el organismo concreto, el cual se puede amplificar mediante una larga secuencia de generaciones vinculadas por la herencia. Una variante azarosa se acepta cuando encaja en la estructura del nivel superior, de otra manera es rechazada. Ahora, vinculando esta noción de causalidad descenden- te con las propuestas de Ayala y Neander, podemos decir que los eventos que ocurren en un instante t en un nivel superior determinan las entidades y eventos que aparecerán poste- riormente en el nivel inferior. La selección a nivel individual (nivel superior) determina cuál es el material genético (nivel inferior) que prevalecerá y cual desaparecerá. La causalidad descendente, en este caso, actúa a través de la herencia. Y es precisamente este tipo de causalidad la que le permite a la selección natural influir en el material sobre el cual apa- recerá la futura variación, donde ella misma posteriormente operará. La selección natural, al actuar mediante y sobre la acumulación de variaciones y selecciones previas, va ca- nalizando y condicionando las posibles variaciones futuras, promoviendo una tendencia y dirección para estas últimas (dirección adaptativa). FILOSOFIA.indb 32 27/11/06 11:34:28 La selección natural y su papel causal en la generación de la forma [33] M a xi m ili a n o M a rt ín e z 9. C O N C L U S I O N E S Aunque en el texto me limité simplemente a delinear al- gunas ideas para un desarrollo más detallado en el futuro, a mi modo de ver, podemos extraer algunas conclusiones importantes de lo hasta aquí expuesto. Podemos decir que la selección natural es un proceso de dos pasos: generación aleatoria de variación y posterior selección (no aleatoria) de dicha variación a través de la replicación diferencial (en esto concuerdan las dos visiones, negativa y positiva). Ahora, volviendo al argumento de Neander, si nos enfocamos en una secuencia aislada A/S no explicamos la creación de las secuencias génicas que dan paso a las adaptaciones. Por el contrario, si nos enfocamos en las múltiples relaciones y alteraciones de numerosas secuencias (herencia/causalidad descendente) podemos explicar cómo, en este estricto sen- tido, la selección natural crea las adaptaciones. Por otro lado, lo expuesto aquí trae algunas consecuen- cias para el debate actual en Filosofía de la Biología. Por un lado, se aclara el sentido en que se entiende a la selección natural como fuerza creativa, que capturaría (mediante un mayor refinamiento teórico/empírico) la intuición darwinia- na al respecto. Por otro lado, la negación de la selección natural positiva y la consideración exclusiva de la selección natural negativa facilita la aceptación y adopción de explica- ciones de la variación y conformación fenotípica diferentes y complementarias a la selección natural (constreñimien- tos del desarrollo, estructuralismo, auto-organización, etc.) dando paso expedito a la anhelada (en algunos ambientes académicos) integración evo-devo. Así mismo, se abre es- pacio para un minucioso trabajo exegético, y así determi- nar exactamente cómo el mismo Darwin entendía el papel jugado por la selección natural en la conformación de las adaptaciones (negativo para algunos, positivo para otros). Por último, se dan los primeros pasos para conformar un modelo robusto y elegante de selección natural que pueda FILOSOFIA.indb 33 27/11/06 11:34:28 I S E L E C C I Ó N N AT U R A L [34] ser contrastado y comparado con propuestas alternativas de generación de la forma orgánica, como las que acabo de mencionar. Este último punto, así como el primero, los desarrollo en otro escrito. R E F E R E N C I A S B I B L I O G R Á F I C A S Ariew, A. 2003. Natural Selection Doesn’t Work that Way: Jerry Fodor vs. Evolutionary Psychology on Gradualism and Sal- tationism, Mind & Language 18 (5): 478-483. Ayala, F. 1993. Darwin’s Revolution, en Campbell, J. & Schopf, W. (eds.) Creative Evolution?, 1-17, Boston: Jones and Bartlett. ________ 1999. Adaptation and Novelty: Teleological Explanatio- ns in Evolutionary Biology, Hist. Phil. Life Sci. 21: 3-33. Campbell, D. 1974. Downward Causation in Hierarchically Or- ganized Biological Systems, en Ayala F. & Dobzhansky Th. (eds.) Studies in The Philosophy of Biology, 179-186, Lon- dres: MacMillan. Darwin, C. [1859] 1998. The Origin of Species, Kent, GB: Wordsworth. Gould, S.J. 2002. The Structure of Evolutionary Theory, Cambrid- ge, MA: Belknap Press of Harvard University Press. Hodge, M.J.S. 1987. Natural Selection as a Causal, Empirical, and Probabilistic Theory, en Kruger, Gingerenzer & Morgan (eds.), The Probabilistic Revolution, 233-270, Cambridge, MA: MIT Press. López Beltrán, C. 1993. El gen como factor causal probabilístico en la teoría de la selección natural, Crítica 25 (75): 31-53. Lewens, T. 2004. Organisms and Artifacts, Cambridge, MA: MIT Press. Neander, K. 1988. What Does Natural Selection Explain? Correc- tion to Sober, Philosophy of Science 55 (3): 422-426. ________ 1995a. Pruning the Tree of Life, The British Journal for the Philosophy of Science 46 (1): 59-80. FILOSOFIA.indb 34 27/11/06 11:34:28 La selección natural y su papel causal en la generación de la forma [35] M a xi m ili a n o M a rt ín e z ________ 1995b. Explaining Complex Adaptations: A Reply to Sober’s ‘Reply to Neander’, The British Journal forthe Phi- losophy of Science 46 (4): 583-587. Popper, K. [1978] 1997. La selección natural y el surgimiento de la mente, en Martínez, S. & Olivé L. (eds.), Epistemología evolucionista, México: Paidós/UNAM. Sober, E. [1984] 1993. The Nature of Selection, Chicago: The University of Chicago Press. ________ 1995. Natural Selection and Distributive Explanation: a Reply to Neander, The British Journal for the Philosophy of Science 46 (3): 384-397. FILOSOFIA.indb 35 27/11/06 11:34:28 FILOSOFIA.indb 36 27/11/06 11:34:28 NEODARWINISMO Y NUEVA SÍNTESIS VLADIMIR CORREDOR Departamento de Salud Pública, Universidad Nacional de Colombia vcorredore@unal.edu.co Las ideas posteriores a la publicación del Origen de las Es- pecies por Charles Darwin en 1859, y de los Experimentos de Hibridación en Plantas por Gregor Mendel en 1866, per- mitieron la síntesis entre el Darwinismo y el Mendelismo que ha venido a llamarse la Nueva Síntesis. Hay tres ideas o condiciones para explicar el proceso evolutivo en la teoría propuesta por Darwin y que son de particular importancia: que las especies producen más pro- genie de la que realmente puede sobrevivir y reproducirse, que esa capacidad de los organismos de sobrevivir y repro- ducirse es variable (que es lo que hoy en día conocemos como adaptabilidad o fitness diferencial) y finalmente que la variación es heredable. Estas condiciones permiten que se lleve a cabo el proce- so evolutivo por selección natural (no otros tipos de procesos evolutivos), es decir el proceso evolutivo darwiniano. En El Origen de las Especies, la única imagen que se presenta en el libro es la de un árbol filogenético, es decir, una explicación del proceso evolutivo donde se nos muestra la aparición de las especies a partir de un ancestro común. Esa aparición de especies a partir de un ancestro común implica por supuesto la herencia, la variación y por con- siguiente la presencia de fitness diferencial sobre el cual FILOSOFIA.indb 37 27/11/06 11:34:29 I S E L E C C I Ó N N AT U R A L [38] va a operar la selección natural. El proceso de evolución por selección natural implica entonces que las especies se originan a partir de un ancestro común, que la selección natural opera sobre unidades auto-reproductivas, y que debe existir un mecanismo de generación de la variabilidad. Este mecanismo de generación de la variabilidad, representaba una gran preocupación para Darwin, y continúa siendo, en alguna medida, una preocupación para los investigadores en evolución en nuestros días. Para que el proceso Darwinista de evolución se lleve a cabo se requiere también que haya acumulación de rasgos distintos de generación en generación. Es decir, se requie- re de una explicación de la aparición de la variación y de la teoría de la herencia, y ninguna de las dos explicaciones tenía un fundamento sólido en tiempos de Darwin. Con res- pecto a la herencia los investigadores en tiempos de Darwin pensaban en dos modelos: la herencia dura y la herencia blanda. La herencia dura es aquella donde el constituyente de la herencia es absolutamente inmodificable mientras que la herencia blanda es aquella constituida por unidades que pueden ser modificadas por otros agentes, incluidos agentes externos. Para Darwin, que había propuesto la idea de la selec- ción natural para explicar el proceso evolutivo, la idea de la herencia dura era inicialmente más atractiva. Es decir, la idea de que hay caracteres que no son modificables, que se van a heredar de generación en generación, y sobre los cuales va a operar la selección natural. Sin embargo, esta idea presupone un problema lógico: ¿si la herencia es dura, de dónde proviene la variación? ¿Hay un estímulo especial que va a producir la variación de ese material hereditario? La idea de la herencia dura fue defendida por Darwin durante mucho tiempo; sin embargo, las ideas de Darwin sobre la herencia y sobre la variación fueron FILOSOFIA.indb 38 27/11/06 11:34:29 Neodarwinismo y nueva síntesis [39] V la d im ir C o rr e d o r cambiando con el tiempo para tratar de llegar a una reso- lución lógica de los problemas impuestos para explicar el proceso evolutivo. La necesidad de recurrir a una herencia blanda es con- secuencia de la idea de que el material que se va a transmitir de generación en generación debe tener la capacidad de ser modificable para explicar la variación; si ese material puede ser modificable por agentes externos, entonces tendríamos una versión Lamarckiana de la herencia. Para aquellos que en tiempos de Darwin no apreciaban o no estaban de acuerdo con el proceso de selección natural, la única manera de explicar las adaptaciones y las numero- sas modificaciones adaptadas a diferentes situaciones en diferentes organismos, era que hubiera agentes externos capaces de modificar el material de la herencia. Por lo tan- to, era necesario recurrir a una teoría blanda de la heren- cia, donde el material de la herencia pudiera modificarse. Este problema era importante, no sólo para aquellos que no creían en la selección natural; también era importante para Darwin, en el sentido de que muchas de las modifica- ciones de los organismos en tiempo evolutivo, en muchos casos, presentan patrones particulares. Las modificaciones ocurren, aparentemente, en ciertas direcciones, como si tu- vieran una polaridad hacia ciertos fenotipos o características (es el proceso conocido como ortogénesis). Para explicar la ortogénesis, se recurre a la idea de que la variación no es al azar, sino dirigida, y esa variación dirigida debe entonces provenir del medio externo. Otra preocupación expuesta en El Origen de las Especies es la de la reducción gradual de órganos inútiles, como por ejemplo los ojos de los peces de las cavernas. Los órganos que son necesarios en unas condiciones, pero no en otras, como cuando un organismo coloniza un nuevo nicho, van perdiéndose. La explicación de la pérdida de estos órganos FILOSOFIA.indb 39 27/11/06 11:34:29 I S E L E C C I Ó N N AT U R A L [40] está dada por la posibilidad de que un elemento externo pueda tener una acción sobre el material hereditario. Otra preocupación es la de cómo explicar la evolución de órganos completos; Darwin tenía una idea de la evolución como evolución gradual, y es muy difícil explicar, de acuerdo a su teoría de la evolución gradual, la aparición de órganos com- pletos. Por lo tanto, también era de alguna manera atrayente la idea de una variación dirigida desde el medio externo. De estos problemas se podría hacer una lista. En primer lugar, cuál es el origen de la variación (cómo es la variación en las poblaciones naturales – es decir, qué tanta variación hay en una población de una determinada especie y qué tipo de variación es esa; qué significa la variación continua o lo que Darwin llamaba también la variación individual – la variación que ocurre de manera gradual en una determinada población y dónde se pueden ver gradientes de variabilidad en una determinada población). En segundo lugar, si la va- riación ocurre al azar o no. Finalmente, cuál es la naturaleza de la herencia. Las observaciones de Darwin a partir del estudio y co- nocimiento de la domesticación de los animales (animales criados bajo condiciones de domesticación, donde es posible crear diferentes razas) y de la observación de las grandes diferencias de variación entre los animales criados en con- diciones de domesticación y los animales en condiciones naturales, lo indujeron a aceptar la posibilidad de una he- rencia blanda. Así, por ejemplo, las diferencias existentes entre los individuos de una especie en condiciones naturales es muy poca y la especie en términos generales tiende a ser uniforme. En otros casos hay grandes variaciones, pero éstas están representadas por un gradiente de variación. Por el contrario, en el caso de las razas de animales domésticos, las variaciones son muy grandes, como por ejemplo en el caso de los perros, como si la selección indujera de alguna manera la variación. FILOSOFIA.indb40 27/11/06 11:34:29 Neodarwinismo y nueva síntesis [41] V la d im ir C o rr e d o r Es tan importante esta preocupación en Darwin, que llega a decir que las condiciones más favorables para la va- riación parecen darse cuando los organismos son criados por varias generaciones bajo domesticación e inclusive piensa que son las condiciones alimenticias bajo condiciones de domesticación las que proporcionan la variabilidad. Darwin recurre entonces a la idea de una herencia blan- da para poder explicar los diferentes patrones de variabilidad en diferentes organismos y reconoce tres tipos de herencia blanda: Una herencia, que es el resultado del efecto del medio ambiente sobre el sistema reproductivo, que es más una manera Lamarckiana de ver la posibilidad de introducir o de inducir la variación a partir del medio externo en el sistema reproductivo de un determinado organismo, y esta variación no es una variación dirigida; sería una manera de introducir variación al azar en el sistema (aunque Darwin no apreciaba el término “al azar”) y la selección natural operaría a partir de la variación introducida en el sistema reproductivo; otro es el efecto directo del medio ambiente sobre todo el organismo; y por último el efecto del uso y el desuso de un determinado órgano tal como es expuesto por Lamarck. Es muy interesante también que Darwin al final piensa que el uso y el desuso son importantes en la genera- ción de la variación, y dice, casi sin ninguna duda, que el uso en nuestros animales domésticos fortalece y agranda ciertas partes mientras que el desuso las disminuye; está pensando realmente que si uno tiene una vaca para producir leche, entonces esa característica se va a reforzar por medio del ordeño. Esto lleva a Darwin a producir una teoría basada en la hipótesis de la pangénesis, que básicamente tiene tres carac- terísticas: 1) las propiedades hereditarias de un organismo están representadas en las células germinales por partículas llamadas gémulas, que constituirían el material hereditario, FILOSOFIA.indb 41 27/11/06 11:34:30 I S E L E C C I Ó N N AT U R A L [42] 2) esas gémulas pueden ser transportadas a células distintas de donde fueron derivadas, y pueden introducir variación en otro sitios del organismo, y 3) en tejidos modificados por el ambiente, las células pueden liberar gémulas modificadas que se pueden transmitir a la progenie; Darwin plantea, incluso, que la propiedad de estas gémulas de circular en la sangre permite la inducción de la variación en ciertos organismos, y llega incluso a decir que los organismos que han estado adaptados por más tiempo a una determinada función son más fuertes que los que tienen adaptaciones más recientes. El rechazo a la herencia blanda proviene fundamental- mente del trabajo de Weissman, particularmente de 1883 y 1884 (Darwin murió en 1882). Este trabajo es supremamen- te importante y tiene básicamente tres preocupaciones; 1) una preocupación sobre la biología celular, 2) una preocupa- ción sobre la biología del desarrollo y 3) una preocupación sobre el proceso evolutivo. A partir de los trabajos en biología celular, Weissman piensa (al igual que otros investigadores) que el material genético está realmente contenido en el núcleo, que la he- rencia está basada en la transmisión de generación en ge- neración de una sustancia con propiedades químicas bien definidas, y que los mecanismos para que opere la herencia de los caracteres adquiridos son imposibles dada la separa- ción de la línea somática y la línea germinal. Esta idea, la separación de lo que Weissman llamaba el plasma germinal – que va a determinar la herencia – y el plasma somático – las células del cuerpo que no van a dar lugar a nuevas ge- neraciones –, es esencial y se va a fortalecer, a partir de 1883 y 1884, de manera experimental. Weissman, por ejemplo, le cortó la cola a miles y miles de ratones que reprodujo de generación en generación y mostró que la herencia de los caracteres adquiridos era imposible. FILOSOFIA.indb 42 27/11/06 11:34:30 Neodarwinismo y nueva síntesis [43] V la d im ir C o rr e d o r El otro problema de la herencia es el de si se trata de una mezcla de caracteres, una fusión o mezcla de las ca- racterísticas del padre y la madre, o si la herencia es una herencia particulada o discreta, donde hay elementos que no son modificables, aportados por padre y madre, y que se combinan en la generación siguiente. Estas dos formas de ver la herencia son esenciales para comprender el proceso evolutivo. También es importante saber si la variación es continua, como Darwin lo observaba en tanto taxónomo y naturalis- ta: al estudiar las poblaciones de una determinada especie observa variaciones pequeñas y ello lo induce a pensar que el proceso evolutivo es un proceso gradual. O si por el con- trario (y Darwin también estaba muy atento a estas obser- vaciones) la variación es discontinua: de vez en cuando en una población hay individuos que no se parecen de ninguna manera al resto. Dos teorías, entonces, de la evolución son importantes: una, que la evolución es gradual, que es cuando se piensa que la variación es en esencia continua; y otra que la evolu- ción es saltatoria, que es cuando se piensa que la variación que es importante en términos evolutivos, es esencialmente discontinua. Aquí hay planteado un problema que es también muy importante en el estudio de la variación. Todos en la época aprecian la aparición de variación continua y discontinua; sin embargo, no es claro, por no tener una teoría de la herencia, si la variación continua es heredable o si la variación discon- tinua es heredable; cuál de las dos variaciones es heredable o si las dos son heredables. Hacia 1900, que es cuando se redescubre el trabajo de Gregor Mendel, hay tres preguntas importantes. Estas tres preguntas adolecen de la falta de una teoría sólida sobre el origen de la variación y la naturaleza de la herencia y son FILOSOFIA.indb 43 27/11/06 11:34:30 I S E L E C C I Ó N N AT U R A L [44] determinantes en el momento del redescubrimiento del trabajo de Mendel: 1) si la herencia es blanda o si es dura; 2) cuál es la fuerza principal que promueve el cambio evolutivo: si es una mutación, como esperan que ocurra aquellos que pensaban que lo importante en el cambio evo- lutivo es la variación discontinua; o, como pensaba Darwin, si es la selección de pequeñas variantes continuas que durante un proceso selectivo prolongado pueden producir grandes cambios; o si es la inducción de la variación por el medio ambiente; o si son unas fuerzas intrínsecas que hacen que el organismo varíe; 3) finalmente, si la evolución es gradual o saltatoria. Mendel era un sacerdote en el pequeño pueblo de Brünn en Moravia, donde publicó en 1866, un artículo decisivo so- bre la hibridación de variedades de arvejas. En general existe la tendencia a pensar que el trabajo de Mendel, por provenir este de un pequeño pueblo en Moravia, es una genialidad. Es importante enfatizar, en contra de este argumento sim- plista, que Mendel estudió en la Universidad de Viena entre 1851 y 1853, cuando esta ciudad era un importante centro en ciencias y donde obtuvo una importante formación en física (uno de los profesores de Mendel fue el famoso físico Doppler) y en la manera como los físicos abordan los pro- blemas experimentales. Mendel proviene no solamente de una tradición en fí- sica, sino de una tradición en el modelo experimental: el modelo experimental de hibridación o de hibridización en plantas era muy utilizado por investigadores cuyo interés era tratar de determinar el origen de las especies. Para tratar de determinar el origen de las especies hacían cruces en- tre diferentes especies, la mayoría de los cuales resultaban no viables. Entre esos investigadores, Gärtner, Kölreuter y Nägeli, con quien Mendel tuvo correspondencia, revisten FILOSOFIA.indb 44 27/11/06 11:34:30 Neodarwinismo y nueva síntesis [45] V la d im ir C o rr e d o r particular importancia por laamplia experiencia en la hi- bridación con plantas; sin embargo, ninguno se había hecho la pregunta acerca de cómo se transmite el material de la herencia de generación en generación. Mendel aborda el problema de manera distinta. Se hace la pregunta de cómo se está transmitiendo de generación en generación el material hereditario; escoge la planta de arveja como modelo experimental para responder esa pregunta y de ella escoge siete características o propiedades que se puedan diferenciar claramente por su presencia o ausencia. Éstas son: semilla madura rugosa o lisa; semilla amarilla o verde; envoltura de la semilla blanca o grisácea con manchas violetas, en cuyo caso la flor es blanca o violeta; vaina rugosa o inflada; vaina amarilla o verde; flores en posición axial o terminal; y planta alta o baja. Estas características sirven para determinar a partir de los cruces cuál es el patrón de la herencia para cada uno de estos caracteres discretos. Antes de iniciar el experimento y a través de auto cruces durante muchas generaciones se asegura de que las plantas son absolutamente puras. En el experimento de cruce de planta con semilla lisa y otra de semilla rugosa, obtiene todas las semillas lisas (uni- formes) en la primera generación; al hacer el auto cruce de esa primera generación de plantas con semillas lisas obtie- ne una segunda generación de plantas con una fracción de semillas lisas y otra de rugosas. Por lo tanto hay una carac- terística en la primera generación donde todas las plantas son lisas, que se va a expresar únicamente en la segunda generación, donde aparecen plantas con semilla rugosa. Esto significa que hay una característica que no estaba expresada en las plantas parentales, que está oculta en la primera ge- neración, y que se expresa en la segunda generación; esta característica oculta es lo que permite la distinción entre genotipo y fenotipo, entre lo que se expresa y la unidad FILOSOFIA.indb 45 27/11/06 11:34:30 I S E L E C C I Ó N N AT U R A L [46] de la herencia que se transmite y cuya formulación es tan importante como concepto cuando se redescubrió el trabajo de Mendel en 1900. El siguiente experimento es básicamente el mismo pero considerando diferentes características, es decir, no solamente si la semilla es lisa o rugosa, sino también si es amarilla o verde. Lo que se observa en este experimento es que estas características se reparten de manera indepen- diente y en la progenie todas las combinaciones posibles van a estar representadas. Estas leyes, hoy conocidas como las leyes de Mendel, se han venido a llamar la ley de la uni- formidad, la ley de la segregación y la ley de la segregación independiente. Lo que interesa desde el punto de vista evolutivo en los hallazgos de Mendel es que muestra que hay algo que se hereda y que ese algo tiene unas reglas en la manera como se expresa y se transmite de generación en generación. Ese algo es el quantum de la herencia, una unidad, algo que se hereda de una determinada manera y que determina las diferentes características fenotípicas. Este es el primer rechazo formal, a través de una aproxi- mación experimental, de la herencia mezclada o herencia por fusión. Es la primera demostración clara de que la he- rencia es particulada. Esto es esencial en el sentido de que la herencia mezclada, para efectos del problema evolutivo, presenta un gran problema: si hay variación en una pobla- ción pero la herencia es por fusión de elementos que van a generar algo nuevo, durante el proceso de selección la variación va a perderse. Darwin era muy conciente de este problema y es una de las razones por la cual también pen- saba que la variación era introducida por el medio externo. El experimento de Mendel resuelve uno de los problemas fundamentales de la variación: el concepto de la herencia particulada o de caracteres discretos permite explicar la va- FILOSOFIA.indb 46 27/11/06 11:34:31 Neodarwinismo y nueva síntesis [47] V la d im ir C o rr e d o r riación en una población, es decir la presencia de múltiples combinaciones de caracteres. El trabajo de Mendel permite, por lo tanto, concluir que los caracteres se segregan como unidades discretas y que algunos son dominantes sobre otros, y por consiguiente permite la distinción entre fenotipo y genotipo. También permite establecer que la segregación entre los caracteres es independiente, dando lugar a una explicación de la va- riabilidad en las poblaciones naturales. Hay, por lo tanto, dentro del esquema del pensamiento evolutivo una ruptura esencial. Dos cosas que eran vistas como separadas: la herencia y la variabilidad, pueden ser vis- tas a partir de ese momento como las dos caras de una misma moneda, es decir, ese proceso de la herencia de unidades discretas permite explicar la variabilidad en una población. Al mostrar cómo se transmite el quantum de la herencia, también permite analizar como se conserva la variabilidad. Es en ese sentido que el Mendelismo es una salvación para la teoría Darwinista. El redescubrimiento del trabajo de Mendel en 1900, se debe en esencia a de Vries, Correns y Tschermak, casi todos al mismo tiempo, trabajando en el problema de la herencia, y en particular a de Vries, trabajando en una teoría de la mutación. Adicionalmente, otra persona que no es uno de los redescubridores del trabajo de Mendel, pero que en un sen- tido puede ser más importante que los otros tres, es Gregory Bateson, quien en Inglaterra, después de leer el trabajo de Mendel, lo traduce al inglés. Es no solamente el populariza- dor más importante, sino quien a partir de ese trabajo lleva a cabo una gran cantidad de investigaciones sobre la heren- cia e introduce en el medio científico palabras tales como, genética, alelos, heterocigoto y homocigoto. Al momento del redescubrimiento del trabajo de Mendel, hay entonces dos corrientes importantes: aquellos que pensaban que la FILOSOFIA.indb 47 27/11/06 11:34:31 I S E L E C C I Ó N N AT U R A L [48] variación es continua y que se aproximan más a un proceso de evolución por variación gradual, y aquellos que piensan que la variación es discontinua y que son más próximos a un modelo de evolución saltatoria. Ambos, Bateson y de Vries, favorecen una idea de evolución saltatoria. En Holanda, de Vries busca demostrar su idea de que la evolución es salta- toria y ocurre a través de grandes cambios mutacionales; y para ello busca plantas o individuos en una población que sean muy distintas de otras. Así, por ejemplo, un individuo muy distinto al resto en una población le permite exponer su teoría de la evolución por mutación y se convierte en un defensor del mutacionismo y de la evolución saltatoria. Esta corriente va a defender la idea de que la evolución no procede por selección natural de manera gradual, sino a través de grandes cambios mutacionales saltatorios. Si de alguna manera va a operar la selección natural es únicamen- te a través de la selección negativa, es decir purificando la población de otros elementos. La selección no es concebida en sentido positivo, como un agente que retiene nuevas mutaciones que son beneficiosas. Otra escuela, en parti- cular la de Galton, quien era primo de Darwin, pensaba por el contrario que la evolución es gradual. Por iniciativa del mismo Galton se pretende cuantificar la magnitud de la selección en una determinada población para tratar de explicar el cambio por evolución gradual, bajo la premisa de que la herencia es mezclada y no particulada. Los tres son muy importantes en el desarrollo del pensa- miento estadístico. Galton, por ejemplo, introduce la noción de correlación de la regresión. Los proponentes de la variación discontinua van a pen- sar, entonces, que la variación continua es irrelevante y que lo único que importa en el proceso evolutivo son las grandes mutaciones. La selección natural no tiene consecuencias, ya que los cambios evolutivos son bruscos. FILOSOFIA.indb 48 27/11/06 11:34:31 Neodarwinismo y nueva síntesis [49] V la d im ir C o rre d o r Este resumen de la idea del proceso evolutivo Darwinis- ta por una parte, y de las ideas sobre la herencia de Mendel por otra, muestra las tensiones entre las diferentes escuelas de pensamiento al momento del descubrimiento del trabajo de Mendel y revela la ausencia de un acuerdo entre ellas. Cuando Weissman propone la idea de la separación de las líneas somática y germinal, no tiene necesidad de re- currir a la idea de una herencia blanda, sino que acepta únicamente una herencia dura, es decir, una herencia de elementos discretos. Pero es, en un sentido, una inferencia a partir de las observaciones y de algunos experimentos, no es una aproximación como la aproximación Mendeliana. Sin embargo Weissman, al proponer la separación entre las líneas somática y germinal, y al no recurrir a la idea de una herencia blanda, asume una posición estrictamente selec- cionista. Esa posición seleccionista es lo que fue dado en llamarse por Romanes, que era alumno de Darwin, el Neo Darwinismo, y es una de las formas del Neo Darwinismo moderno. La Síntesis Evolutiva, entonces, comprende la integra- ción del pensamiento Mendeliano con el pensamiento Da- rwiniano y busca un acuerdo entre esas diferentes escuelas, entre la herencia particulada, el proceso de selección natural y la variación continua. Es, en últimas, un acuerdo entre esas tres grandes corrientes de pensamiento en biología. La sínte- sis se va a dar, en un principio, esencialmente por el trabajo en genética de poblaciones, e inicialmente por los trabajos independientes de Hardy y Weinberg en 1908, donde se muestra que bajo los principios de la herencia Mendeliana y asumiendo el apareamiento de los parentales al azar, las frecuencias fenotípicas del material de la herencia en un cromosoma que no es sexual permanecen constantes de generación en generación. También describen una fórmula que para muchos es el inicio de la genética de poblaciones, FILOSOFIA.indb 49 27/11/06 11:34:31 I S E L E C C I Ó N N AT U R A L [50] porque muestra cómo se van a distribuir las características tanto fenotípicas como genotípicas durante la reproducción de generación en generación. Bajo determinadas condicio- nes esas características se van a mantener constantes; esto es muy importante también porque, aunque hoy en día parece obvio, era contra-intuitivo en ese entonces. Se pensaba que si había una característica distribuida en mayor proporción que otra durante su transmisión de generación en genera- ción, la de menor frecuencia se diluiría en la población y por lo tanto no se mantendría la variabilidad. Mostrar entonces que se pueden mantener esas frecuencias es una forma de mostrar que se mantiene la variabilidad, y por supuesto es mostrar la posibilidad de que diferentes modelos expliquen cómo es la transmisión de esas características fenotípicas y genotípicas. El otro cuerpo de trabajo es el de la genética de pobla- ciones, derivada de los desarrollos matemáticos de Ronald Fisher, J.B.S. Haldane, ambos en Inglaterra, y de Sewall Wright en los Estados Unidos; a partir de modelos mate- máticos ellos van a determinar cuáles son las característi- cas de la distribución genotípica y fenotípica en diferentes condiciones y situaciones, bajo diferentes intensidades de selección, etcétera. El trabajo de Fisher, iniciado en 1918, es muy importante porque hace una correlación entre indi- viduos genéticamente relacionados, suponiendo un modelo de herencia mendeliana. Luego, en 1922, en el artículo titu- lado Sobre la Relación de Dominancia, demuestra utilizando métodos estocásticos que la selección, aun en una magnitud que puede ser muy pequeña, tiene consecuencias evolutivas muy grandes en una población. En este trabajo se muestra por primera vez que, aun si la intensidad de selección es muy pequeña, los cambios que van a ocurrir en las frecuencias génicas en una población pueden ser muy grandes; y que si la selección favorece al heterocigoto, es decir al individuo que FILOSOFIA.indb 50 27/11/06 11:34:32 Neodarwinismo y nueva síntesis [51] V la d im ir C o rr e d o r tiene dos formas alélicas distintas (supongamos la forma lisa y la forma rugosa en el caso de las semillas de Mendel), hay un equilibrio estable y las dos formas se van a mantener en la población. Esto es importante porque demuestra también que es posible mantener la variabilidad en una población y que esa variabilidad no va a desaparecer. Así mismo, en 1930, Fisher propone que la aparición de un alelo raro en una población tiene poca importancia en el proceso evolutivo, dado que el tamaño de la población que se está estudiando es muy grande. Es decir, si en una población muy grande se introduce una nueva forma, las consecuencias evolutivas no van a ser mayores sobre la población. En 1930 Fisher publica el libro La Teoría Genética de la Selección Natural, que para algunos es el libro más importante en evolución después de El Origen de las Especies. El trabajo de Haldane introduce una teoría matemática sobre la selección natural y publica numerosos artículos sobre el tema, cada uno sobre problemas distintos de la selección natural como son: la selección cigótica, la selección gamé- tica, familiar, ligada al cromosoma sexual, etcétera, y hace también una teoría sobre las intensidad de la selección y los coeficientes de selección en distintos casos. Publica un libro en 1932 titulado Las Causas de la Evolución. Finalmente, en 1931 Wright publica un artículo largo titulado Evolución en Poblaciones Mendelianas, donde hace un tratamiento de la evolución de acuerdo al patrón de herencia mendelia- no de diferentes alelos. Wright hace a su vez énfasis en un punto muy importante y que para Fisher no tiene mayor importancia. Se trata precisamente del papel del muestreo al azar, es decir, de cuáles son las consecuencias evolutivas del muestreo al azar de los alelos que contiene cada uno de los parentales cuando se aparean. Para Fisher esto no es im- portante, pero Wright plantea que el muestreo al azar puede tener un significado evolutivo de la mayor importancia, y FILOSOFIA.indb 51 27/11/06 11:34:32 I S E L E C C I Ó N N AT U R A L [52] que puede cambiar el perfil evolutivo de la población. Para 1931 tenemos una teoría matemática de la evolución, y de la evolución pensada como el cambio de frecuencias génicas durante el proceso evolutivo. La otra persona que contribuyó de manera importante a la Síntesis Evolutiva es Hermann Müller, quien obtuvo el premio Nobel de Medicina en 1946 por sus trabajos sobre la acción mutagénica de los rayos X y que proviene, no de una tradición matemática, sino de una tradición experimental. Esa tradición experimental es más parecida a la tradición de la evolución discontinua o saltatoria, o a la teoría mutagénica de de Vries. De hecho, el trabajo de Müller va a enfocarse sobre la naturaleza de la mutación y sus consecuencias en el proceso evolutivo. A través de la acción mutagénica de los rayos X, muestra la importancia de nuevas formas mutantes de genes, en razón de que pueden reproducirse en la po- blación. También muestra que la mayoría de las mutaciones son deletéreas, es decir, que no son beneficiosas para el or- ganismo y hace una contribución muy importante al iniciar la utilización de la mosca de la fruta, la Drosophila, como modelo experimental. La Nueva Síntesis ha venido a conocerse como la sínte- sis, no sólo del Darwinismo y el Mendelismo, sino de estas dos corrientes junto con otras corrientes de la biología, en particular la paleontología y la sistemática. Quien más con- tribuyó en esa síntesis es, tal vez, Theodosius Dobzhansky a través del libro La Genética y el Origen de las Especies publicado en 1937. Allí, Dobzhansky integra de alguna manera el pensamiento cuantitativo en evolución con la tradición experimental y naturalista. Dobzhansky formado en Rusia como naturalista, empieza a interesarse por los problemas de la genética y en 1927 emigra a los Estados Unidos, donde trabaja junto con Thomas Hunt Morgan en Columbia University.Los problemas de la genética le inte- FILOSOFIA.indb 52 27/11/06 11:34:32 Neodarwinismo y nueva síntesis [53] V la d im ir C o rr e d o r resan como problemas experimentales, e intenta atacar el problema del origen de las especies desde una perspectiva experimental y no desde una perspectiva matemática. El éxito de Dobzhansky es dudoso para algunos; sin embargo es muy importante la contribución que hace al tratar de lo- grar una síntesis de estas corrientes. Dobzhansky y la nueva síntesis se centran en la evolución gradual, en reconocer la importancia de la selección natural, y en reconocer el origen poblacional de la diversidad. Esto es importante pero de alguna manera algo sesgado porque Dobzhansky, siguiendo un poco la tradición de Fisher, piensa que en general las características que se observan en una población son carac- terísticas que han sido seleccionadas, y son seleccionadas porque tienen un beneficio para la población. No reconoce la posibilidad de que muchas de las características presentes en una población puedan no tener beneficio alguno para el organismo. Uno de los énfasis y esfuerzos más grandes de Dobzhansky es tratar de explicar que la heterocigosis que se observa en una población se observa porque es beneficiosa; es decir que la gran variación observada en una población de individuos se mantiene porque es beneficiosa y que si bien en un momento dado esa variación puede no tener un beneficio directo, podría tener un beneficio futuro. Según la Nueva Síntesis entonces, la naturaleza del polimorfismo radica precisamente en la ventaja del heterocigoto. En la visión de la Nueva Síntesis nuevas variantes pue- den ser seleccionadas positivamente por su contribución a la adaptabilidad del individuo, mientras que otras son elimina- das por que no contribuyen de manera alguna o contribuyen negativamente. Así mismo, dos variantes distintas en la po- blación pueden mantenerse a un mismo tiempo porque – de acuerdo con Fisher – el heterocigoto (el individuo con dos variantes de un mismo gen) posee una ventaja selectiva. FILOSOFIA.indb 53 27/11/06 11:34:32 I S E L E C C I Ó N N AT U R A L [54] En general la Nueva Síntesis hace un gran énfasis en la selección natural, en la idea que la variabilidad que obser- vamos se ha fijado en la población porque es beneficiosa. Sin embargo, hay críticas a la Nueva Síntesis con respecto a cuál es la razón por la cual se fija en la población una de- terminada variante. Una de ellas es que hay variantes, en particular variantes a nivel molecular, que se pueden fijar de manera neutra, porque se fijan sin influir ni positiva ni nega- tivamente en la población. Así, en modelos de simulación es posible observar que al medir una determinada frecuencia alélica de generación en generación, los alelos se pueden fijar en toda la población sin ser seleccionados positivamen- te con consecuencias importantes en el proceso evolutivo, cambiando así el perfil de la población, como sucede, por ejemplo, cuando las poblaciones son muy pequeñas. Ernst Mayr, uno de los proponentes de la Nueva Sín- tesis, plantea que ésta busca llegar a un acuerdo donde se incluyen ideas tales como que no todas la mutaciones son deletéreas, algunas son neutras y otras adaptativas, el ma- terial genético es constante, no hay herencia Lamarckiana y la recombinación es una de las fuentes mas importantes de variación de las poblaciones. Así mismo, la Nueva Síntesis incluye la idea de que la variación fenotípica continua es el resultado de factores po- ligénicos múltiples y de interacciones epistáticas, afirmación que no está en conflicto con la herencia particulada. Esta afirmación es importante porque la herencia cuantitativa, la herencia que en principio no parece particulada o discreta, tales como el peso, el tamaño, etcétera, puede explicarse por la influencia de la interacción de varios genes. Esta visión no está en conflicto con la visión Mendeliana de la herencia. Esto es lo que en general constituye la síntesis de todas estas corrientes. FILOSOFIA.indb 54 27/11/06 11:34:33 Neodarwinismo y nueva síntesis [55] V la d im ir C o rr e d o r Si volvemos entonces a las condiciones iniciales podemos expresarlas de manera algo más precisa: los requisitos para que ocurra el proceso evolutivo es que haya variación de diferentes atributos y propiedades entre individuos de una misma población; que haya una relación consistente entre el atributo y la capacidad de apareamiento, de fertilización, de fertilidad, de fecundidad y/o de supervivencia – que son los diferentes constituyentes de lo que se denomina la fitness o la adaptabilidad; que haya una relación consistente entre parentales y progenie para un atributo dado y que el atributo sea por lo menos parcialmente independiente de los efectos ambientales comunes, es decir, que esté determinado por las características genéticas de esos individuos. Si estos re- quisitos se cumplen el proceso evolutivo, entendido como el cambio en la distribución de la frecuencia del atributo entre estadios más allá de lo esperado por el desarrollo on- togénico del individuo, es posible. Si la población no está en equilibrio, entonces la distribución del atributo en la progenie va a ser predeciblemente diferente de la de todos los parentales. Es posible, entonces, resumir de manera algo distinta lo expuesto inicialmente. Para que ocurra el proceso evolutivo debe haber selección natural o deriva genética. Para que la selección opere, deben cumplirse tres requisitos: herencia, variación y fitness o adaptabilidad diferencial. El proceso de la herencia ha sido aclarado, en gran parte, por el trabajo de Mendel; y la fitness diferencial ha sido aclarada sobre todo por la genética matemática de poblaciones. El origen de la variación es un problema molecular entre otros. La selección puede adquirir varias formas, ya sea selección por mortalidad, por fecundidad, por fertilidad o selección sexual; si existen estas condiciones, puede ocurrir la evolución con- cebida como los cambios acumulativos en las características de una población a través de varias generaciones. Hay una FILOSOFIA.indb 55 27/11/06 11:34:33 I S E L E C C I Ó N N AT U R A L [56] característica adicional que puede producir un cambio evo- lutivo: la deriva genética, los cambios al azar. Sin embargo, para que ocurra deriva genética debe haber variación, debe haber herencia, por definición no hay fitness diferencial, y el tamaño de la población debe ser pequeño. Por supuesto, las dos cosas pueden ocurrir simultáneamente durante el proceso evolutivo. R E F E R E N C I A S B I B L I O G R Á F I C A S Endler, John A. 2001. Natural Selection in the Wild, Princeton: Princeton University Press. Mayr, Ernst. 1985. The Growth of Biological Thought: Diversi- ty, Evolution, and Inheritance, Cambridge MA: Belknap Press. Mayr, Ernst & Provine William (eds.), 1998. The Evolutionary Synthesis: Perspectives on the Unification of Biology, Har- vard University Press, Reprint edition. Provine, W. 2001. The Origins of Theoretical Population Genetics, 2da ed. Chicago: University of Chicago Press. FILOSOFIA.indb 56 27/11/06 11:34:33 LAS INTERRELACIONES ENTRE GENOTIPO, FENOTIPO Y MEDIO AMBIENTE. UNA APROXIMACIÓN SEMIÓTICA AL DEBATE ‘EVOLUCIÓN Y DESARROLLO’ EUGENIO ANDRADE Departamento de Biología Universidad Nacional de Colombia leandradep@unal.edu.co RESUMEN Las teorías de la evolución por un lado y las del desarrollo por otro, ofrecen explicaciones aparentemente opuestas cuando examinan el papel que debe atribuirse a la estructura o la función, a los genes o el medio ambiente, a la autoorganización o a la selección natural e igualmente chocan sobre el problema de si las varia- ciones evolutivas son dirigidas o por el contrario azarosas. Este problema tiene su fundamento en el bucle autorreferente que surge a consecuencia de las distinciones entre lo interno/externo e individual/poblacional. Para avanzar en la integración de las teorías del desarrollocon las evolutivas, se debe asumir que la ontogenia y la filogenia son procesos abiertos, no programados que conducen a incrementos de información. En este trabajo se conciben los organismos como Agentes Evolucionantes en Desarrollo que codifican información del medio ambiente y que obedecen a una tendencia transformativa general hacia solucio- nes de compromiso entre: a) Incrementos de la individualidad o singularidad fenotípica (especificidad y estabilidad), y b) la anti- cipación a los cambios del medio ambiente. Se explica cómo los FILOSOFIA.indb 57 27/11/06 11:34:33 I S E L E C C I Ó N N AT U R A L [58] cambios en el contenido de información mutua entre el Fenoti- po (F) y el Entorno o medio ambiente (E), jalonan los cambios subsiguientes entre los contenidos de información mutua entre el Genotipo (G) y el Fenotipo (F) y entre el Genotipo (G) y el medio ambiente (E), en dos escalas de temporalidad diferentes: trayectoria de vida individual (ontogenia) y tiempo de las especies (filogenia), respectivamente. En consecuencia, la adición de eta- pas terminales al desarrollo y la minimización de los incrementos en los pasos de desarrollo deben seleccionarse positivamente. Este enfoque muestra como las seis relaciones espacio/tiempo/ función derivadas de Peirce y descritas por Taborsky proveen de un marco conceptual apropiado para el entendimiento de esta visión unificadora. Palabras clave: Genotipo (G), Fenotipo (F), Entorno o medio ambiente (E), Desarrollo, Evolución, Información, Autorreferen- cia, Agentes Evolucionantes en Desarrollo (AED), Semiosis. 1. L A S C AT E G O R Í A S U N I V E R S A L E S D E P E I R C E Y E L D I S C U R S O D E L A B I O L O G Í A El pensamiento evolutivo, tal como ha sido concebido por las escuelas clásicas (lamarckiana, darwiniana, neodarwiniana y epigenética), introdujo un esquema de comprensión de la realidad que sobrepasa en profundidad la ontología clá- sica fundada en el mecanicismo. Este esquema, que muy rara vez se hace explícito por parte de estudiantes e inves- tigadores de las ciencias biológicas, se corresponde con la cartografía elaborada por Charles S. Peirce, basada en tres categorías fundamentales [1; 2; 3] y las consiguientes seis relaciones derivadas [1-1; 2-1; 2-2; 3-1; 3-2; 3-3] que fueron propuestas para caracterizar todo lo existente. La biología se ha constituido en un área específica del conocimiento, sus- tentada en una sólida evidencia empírica que no solamente corrobora esta ontología evolucionista, sino que contribuye a su desarrollo y contextualización en diferentes programas de investigación. A continuación presentaré este esquema FILOSOFIA.indb 58 27/11/06 11:34:33 Las interrelaciones entre genotipo, fenotipo y medio ambiente. Una aproximación semiótica al debate ‘Evolución y Desarrollo’ [59] E u g e n io A n d ra d e general del discurso biológico con la intención de mostrar que la controversia actual ‘Evolución vs. Desarrollo’, o ‘Na- turaleza del organismo vs. Condiciones de vida’ requiere de una aproximación semiótica para su entendimiento y para la interpretación de los datos empíricos. A ) L A D I S T I N C I Ó N E N T R E L O I N T E R N O Y L O E X T E R N O La discusión sobre la manera como las interacciones entre los organismos y el medio ambiente afectan los cam- bios evolutivos, se remonta a la idea lamarckiana sobre la influencia de las circunstancias (medio ambiente) sobre los hábitos y costumbres de los organismos. Esta visión se sustenta en una distinción entre lo interno y lo externo que se convirtió en la condición necesaria del discurso biológico, puesto que confinaba lo viviente al dominio espacial interno claramente diferenciado del mundo inorgánico. Los orga- nismos se consideraron como seres dotados de sentimientos e impulsos derivados de una organización interna que los capacita para reaccionar a las influencias del medio exter- no. La diferenciación creciente de las partes asociada a los sistemas de coordinación interna permite que el organismo actúe de manera coherente como una unidad (Lamarck 1803). Dentro de esta visión las transformaciones de las formas de vida se perciben como procesos embriológicos influidos por factores internos y externos. El factor inter- no (o el sentimiento interior) juega el papel predominante y por medio de la fuerza vital (calor y electricidad) hace que la organización tienda a ser cada vez más compleja de acuerdo al Plan de la Naturaleza (Burkhardt 1995). El factor externo corresponde a las condiciones de vida o las circunstancias (el medio ambiente) que ejercen una acción directa sobre la estructura y la herencia de los seres vivos (Jacob 1982), desviándolos accidentalmente del Plan de la Naturaleza. Es decir, el corte lamarckiano distingue entre los impulsos internos de los organismos, que confieren el FILOSOFIA.indb 59 27/11/06 11:34:34 I S E L E C C I Ó N N AT U R A L [60] plan corporal de los seres vivos (las características estruc- turales fundamentales), y el medio ambiente que moldea las características secundarias. El tiempo aparece como una dimensión del mundo orgánico solamente a nivel individual, no existiendo un tiempo universal, por cuanto Lamarck no acepta una historia única de la vida a partir de un ancestro común, sino series de transformaciones idénticas a partir de sucesivas generaciones espontáneas. Numerosos autores, y entre ellos Darwin, postularon que a partir del nacimiento una serie de modificaciones estructurales se incorporan al germen y se fijan en cierto momento, cuando la organización todavía es flexible, en la niñez, como si se hubieran ido añadiendo a los individuos viejos durante miles de siglos: Al ver que todos los vertebrados (…) pueden ser ras- treados hasta un germen, dotado de principio vital (…) y sabiendo por analogía, que absolutamente todos estos animales descienden de algún tronco único – uno llega a sospechar que el nacimiento de las especies y el de los individuos en sus formas actuales están estrechamente relacionados –; por nacimiento las sucesivas modificacio- nes de la estructura se añaden al germen, en un cierto momento (incluso en la infancia), cuando la organización es flexible, tales modificaciones se hacen en gran medida fijas, como si se añadieran a los viejos individuos, duran- te miles de siglos; cada uno de nosotros, entonces, ha pasado por tantos cambios como cualquier otra especie (Darwin 1838). La teoría de la recapitulación expresa la existencia de una interdependencia estrecha entre la ontogenia y la filogenia. De acuerdo a Haeckel, la ontogenia (desarrollo embrionario individual) y la filogenia (historia de la especie) no se pue- den entender de manera independiente, por cuanto están intimamente conectadas (Haeckel 1879). La ontogenia es FILOSOFIA.indb 60 27/11/06 11:34:34 Las interrelaciones entre genotipo, fenotipo y medio ambiente. Una aproximación semiótica al debate ‘Evolución y Desarrollo’ [61] E u g e n io A n d ra d e una recapitulación de la filogenia, en otras palabras, la serie de formas por las que pasa el organismo individual desde el huevo al estado adulto, es una reproducción breve y com- primida de la larga serie de formas por las que pasaron los ancestros de tal organismo desde las etapas más tempranas de la evolución hasta el presente. De acuerdo a la recapitulación, las leyes que gobiernan la evolución de las especies son las mismas que rigen la evo- lución de los embriones (Richards 1992). Haeckel justificó la recapitulación al aceptar que la evolución procede por la adición continua de nuevos estados al crecimiento (Bowler 1992). La herencia de las características adquiridas se expli- caba por el aceleramiento del crecimiento individual, puesto que de este modo la forma adulta ancestral se constituye en un estado intermedio por el cual el organismo pasa para llegar a un nuevo estado de madurez. Es decir que las formas de los adultos ancestrales se comprimen y aparecen en sus descendientes en estados de desarrollos más tempranos. Elpunto de vista de Darwin expresado en sus cuadernos de notas de 1836 a 1844 (Darwin 1987) puede caracterizar- se como neolamarckiano y recapitulacionista, puesto que considera que el desarrollo embriológico evolucionaba por adiciones terminales producidas como respuesta dirigida de los organismos a las condiciones de vida (Richards 1992). Aunque los procesos de desarrollo individual y el de las especies comparten algunas propiedades, deben dife- renciarse claramente, dado que una aproximación centra- da exclusivamente en la distinción interno/externo lleva a confundir los niveles individuales y poblacionales con el peligro de perder de vista la perspectiva macroevolutiva. Era necesario explicar no solamente el orden intraorgánico sino el ínterorgánico, por tanto se necesitaba distinguir entre lo individual y lo poblacional. FILOSOFIA.indb 61 27/11/06 11:34:34 I S E L E C C I Ó N N AT U R A L [62] Figura 1. El cuadrante Lamarckiano/Neodarwiniano. El eje Y se refiere al corte espacial lamarckiano (interno/externo) y el X al temporal Neoda- rwiniano (individual/poblacional), (Andrade 2005). Este esquema muestra como el discurso de la biología se ajusta a las seis relaciones derivadas de las tres categorías universales Firstness, Secondness and Thirdness de Charles Sanders Peirce. Internal Lamarckian Cut External II Chance Openess Impulse Analog S = Local-Internal t = Present [1-1] [3-3] EDA Semiotic Election [2-1] [2-2] S = Local-External t = Perfect Determination Closure Discreteness I III IV Future Propensities Digital Codes Genetic Information S = Global-Internal t = Progressive [3-2] Statistical average Constraints Natural Selection S= Global-External t = Progressive [3-1] A sy m m et ry Sy m m et ry Population G lobal Individual L ocal NeoDarwinian Cut Los cuadrantes superiores de la figura 1, ilustran el desa- rrollo individual como una transición de II (potencialidades internas del individuo) a I (realización del individuo que adquiere una forma estable y definida). FILOSOFIA.indb 62 27/11/06 11:34:35 Las interrelaciones entre genotipo, fenotipo y medio ambiente. Una aproximación semiótica al debate ‘Evolución y Desarrollo’ [63] E u g e n io A n d ra d e B ) L A D I S T I N C I Ó N E N T R E L O I N D I V I D U A L - L O C A L / P O B L A C I O N A L - G L O B A L Y L A P E R S P E C T I VA S E M I Ó T I C A : El compromiso de Darwin con la teoría de la recapitula- ción no le impidió establecer la distinción entre lo individual y lo poblacional. Sin embargo, la incorporación formal de esta distinción a la teoría evolutiva requirió de la adopción, por Fisher, de los métodos estadísticos de la termodinámica de Boltzmann a la genética. Desde entonces las característi- cas individuales se definen con respecto a valores promedios medidos para la población, y la selección natural se convierte en la causa principal de la transformación. La explicación por selección natural es una inferencia retrospectiva por cuanto considera que las características fenotípicas están presentes por su contribución a la resolución de algún pro- blema. Por oposición a lo que ocurre en la física clásica, la teoría evolutiva por selección natural no puede tener un carácter predictivo, sino que al reconstruir un escenario pasado infiere unas ventajas adaptativas para los caracteres seleccionados. La evolución se percibe como una serie de etapas en las que se presentaban diferentes opciones posi- bles y donde sólo una fue favorecida. Debemos tener en cuenta que de acuerdo a Weissman, el fenotipo (F) está determinado por el genotipo (G) de modo tal que las modificaciones de F por la acción del en- torno (E) no pueden afectar a G. Este modo de razonar inspiró la formulación del dogma central en 1953, donde la dualidad G/F se convirtió en la dualidad DNA/Proteínas. La aceptación de la idea del gen como entidad fundamental determinada, discreta y cerrada dio lugar a que el estudio de la evolución se centrara alrededor de la investigación de los cambios en la composición genética de la población por efecto de la selección natural. Esta aproximación arrojó resultados importantes imposibles de desconocer y dotó al evolucionismo de un formalismo matemático inexistente FILOSOFIA.indb 63 27/11/06 11:34:35 I S E L E C C I Ó N N AT U R A L [64] hasta entonces. Sin embargo, llevó a que los organismos individuales se concibieran como seres no autónomos de- terminados por dos causas opuestas, una que actúa desde G y otra que opera desde E, (Andrade 2003). Según el neoda- rwinismo, el medio ambiente plantea problemas que deben ser resueltos por los organismos durante su adaptación, sin embargo asume a priori que las variaciones son azarosas y que la solución adecuada aparece con una probabilidad extremadamente baja. Es decir, que los organismos al variar azarosamente en su comportamiento, sin mediar ningún tipo de interpretación de las condiciones del medio, care- cen de intencionalidad. En otras palabras, aunque para el neodarwinismo los organismos resuelven problemas, esta afirmación no pasa de ser una metáfora. Los modelos estadísticos buscan grados de predecibi- lidad en condiciones de frontera específicas, por medio de la identificación de unidades fundamentales y la especifica- ción de reglas de agregación e interacción entre ellas. Pero mientras los organismos no sean concebidos como agentes procesadores y usuarios de información, los factores alea- torios y deterministas se confinan a propiedades exclusivas de G o E sin precisar claramente las contribuciones espe- cíficas de cada uno. La eliminación de las interpretaciones finalistas o teleológicas conllevó la erradicación de todo tipo de intencionalidad en la naturaleza y de paso arrasó con el reconocimiento de la autonomía a nivel del organismo indi- vidual. Con el auge del determinismo genético la perspec- tiva embriológica pasó a un segundo plano en importancia, puesto que se concebía como un proceso preprogramado genéticamente orientado o dirigido hacia una meta específi- ca (el estado adulto); y al ver la ontogenia como un proceso cerrado se dejó de lado su contribución en la producción de las innovaciones evolutivas. FILOSOFIA.indb 64 27/11/06 11:34:35 Las interrelaciones entre genotipo, fenotipo y medio ambiente. Una aproximación semiótica al debate ‘Evolución y Desarrollo’ [65] E u g e n io A n d ra d e La idea de un proceso en el que las etapas se dan por escogencia entre opciones reales está dotada de una car- ga cognitiva muy fuerte, que en el siglo XIX era difícil de aceptar; y por eso Darwin trata de asimilarla a una ley física y mecánica, aunque de hecho sería mejor pensarla por ana- logía a los sistemas intencionales. Others have objected that the term selection implies conscious choice in the animals which become modi- fied; and it has even been urged that as plants have no volition, natural selection is not applicable to them. In the literal sense of the word, no doubt, natural selection is a false term (…) It has been said that I speak of natural selection as an active power or Deity; but who objects to an author speaking of the attraction of gravity as ruling the movements of the planets? Everyone knows what is meant and implied by such metaphorical expressions; and they are almost necessary for brevity. So again it is difficult to avoid personifying the word Nature (Darwin 1859, 91-92). La distinción individual-local/poblacional-global permi- tiría ver la evolución como un proceso análogo a un sistema intencional en el cual la población jugaría el papel de un sujeto no localizable. Sin embargo, al subrayar el dominio poblacional-global, la escuela neodarwiniana ignoró el ámbi- to de lo interno, restringiéndose exclusivamente al dominio de lo externo, (los cuadrantes I y IV de la figura 1), a pesar de que Darwin tuvo una visión internalista, razón por la cual Depew y Weber hablan del Darwin lamarckiano (Depew & Weber 1995), y Richards del Darwin recapitulacionista(Ri- chards 1992). Además de descubrir la ley de la selección na- tural, Darwin intentó dar una explicación embriológica de la variación evolutiva, estuvo de acuerdo con la recapitulación, discutió la posibilidad de las variaciones dirigidas por medio del uso y desuso, se preguntó si la adquisición de hábitos era FILOSOFIA.indb 65 27/11/06 11:34:35 I S E L E C C I Ó N N AT U R A L [66] o no un tipo de aprendizaje y si el instinto correspondía a la posible fijación de estos contenidos; además, en la teoría de la pangénesis, postuló una influencia de la acción de los organismos en respuesta a las condiciones del medio en la conformación del material hereditario (Darwin 1888). Darwin ofreció una diversidad de factores evolutivos, razón que motivó a Peirce (C.P. 1.398-1.399)1 a considerar la tríada darwiniana: Variación, Herencia y Selección como un caso relevante en el que se manifiestan las tres categorías universales. La Primeridad corresponde al impulso interno, el azar, la posibilidad, la variación evolutiva; la Segundidad a la determinación, la actualidad, la herencia de las caracte- rísticas fijas y estables; y la Terceridad a la agencia, el hábito, la continuidad y la selección natural, a la manifestación de una ley evolutiva universal. La figura 1 muestra los dos cuadrantes inferiores pro- ducidos por la distinción individual/poblacional. El III co- rresponde al dominio de lo interno/poblacional (información genética) y el IV al externo/poblacional (regularidades es- tadísticas producidas por la selección natural). Estas dos zonas están asociadas a procesos que generan regularidades y simetría a la vez que proveen un potencial combinatorio que favorece la emergencia de nuevas configuraciones. En este sentido, hay que resaltar que los cuadrantes III y IV de la figura 1 corresponden a manifestaciones de una ley evolutiva universal, descrita por Peirce como la tendencia de la naturaleza a generar hábitos, explicada por el modo de ser de la Terceridad. 1 Las referencias a la obra de Charles S. Peirce aparecen como C.P. seguidos por un número que corresponde a Collected Papers tal como fueron recopilados y clasificados por Harstone et al. Estas citas se corroboraron con la recopilación de Sercovich. Ambas fuentes aparecen en la bibliografía al final del texto. FILOSOFIA.indb 66 27/11/06 11:34:36 Las interrelaciones entre genotipo, fenotipo y medio ambiente. Una aproximación semiótica al debate ‘Evolución y Desarrollo’ [67] E u g e n io A n d ra d e If the laws of nature are results of evolution, this evolution must proceed according to some principle, and this princi- ple will itself be of the nature of a law. But it must be such a law that it can evolve or develop itself. (…) Evidently it must be a tendency toward generalization, - a generalizing tendency. But any fundamental universal tendency ought to manifest itself in nature. Where shall we look for it? (…) But we must search for this generalizing tendency rather in such departments of nature where we find plasticity and evolution still at work. The most plastic of all things is the human mind, and next after that comes the organic world, the world of protoplasm. Now the generalizing tendency is the great law of mind, the law of association, the law of habit taking. We also find in all active protoplasm a ten- dency to take habits. Hence I was led to the hypothesis that the laws of the universe have been formed under a universal tendency of all things toward generalization and habit taking (Peirce C.P. 7.515). La evolución a nivel poblacional está representada en la figura 1, como un movimiento del cuadrante IV al III, me- diado por la acción perseverante de la selección natural que se expresa en un tiempo verbal correspondiente al presente continuo o progresivo en inglés. Natural Selection is daily and hourly scrutinizing, throug- hout the world, every variation, even the slightest; re- jecting that which is bad, preserving and adding up all that is good; silently and insensibly working, whenever and wherever opportunity offers, at the improvement of each organic being in relation to its organic and inorganic conditions of life” (Darwin 1859) (Itálicas por E.A.). La semiótica supera los dualismos mente/materia, inter- no/externo, individual/poblacional y las distinciones tempo- rales presente/pasado/presente continuo (gerundio). A partir FILOSOFIA.indb 67 27/11/06 11:34:36 I S E L E C C I Ó N N AT U R A L [68] de las tres categorías de Peirce y tomándolas en grupos de a dos resultan los siguientes seis tipos de relaciones, (Taborsky 2002; 2004): 1) La Primeridad como Primeridad [1-1], define el campo de lo interno-local en un tiempo presente. Correspon- de al impulso, la energía disponible, la información sin fronteras, el azar, la espontaneidad, o la potencialidad existente en el momento presente. Se trata de una co- dificación análoga interna representada en el cuadrante II. 2) La Segundidad como Segundidad [2-2], define el campo de lo externo-local. Corresponde a la determinación, lo discreto, lo dado o actual tal como se manifiesta en las formas individuales diferenciadas, y describible en un tiempo pasado. Se trata de una codificación análoga externa representada en el cuadrante I. 3) La Segundidad como Primeridad [2-1], define el límite o interfase entre lo interno/externo, individual/pobla- cional, presente/pasado/presente continuo o gerundio. Permite la conversión de códigos análogos en digitales y viceversa, por medio del establecimiento de una red de conexiones. Es un estado que promueve los acopla- mientos, las interacciones y está representada por la intersección en el cruce de los ejes X-Y. 4) La Terceridad como Primeridad [3-1], define el campo de lo externo-global en un tiempo presente continuo que corresponde a las poblaciones, la fitness o las re- gularidades estadísticas introducidas por la selección natural. Esta relación se representa en el cuadrante IV. 5) La Terceridad como Segundidad [3-2], define el campo de lo interno-global en un tiempo presente continuo. Esta relación corresponde a las propensiones futuras y la innovación generada por el procesamiento de la in- FILOSOFIA.indb 68 27/11/06 11:34:36 Las interrelaciones entre genotipo, fenotipo y medio ambiente. Una aproximación semiótica al debate ‘Evolución y Desarrollo’ [69] E u g e n io A n d ra d e formación codificada en el modo digital. Se representa por el cuadrante III. 6) La Terceridad como Terceridad [3-3], corresponde a una dimensión no delimitable ni espacial, ni temporalmente por cuanto es una propiedad de todo tipo de sistema informacional. Se trata de un principio de regularidad que opera por medio del establecimiento de hábitos dándole, así, continuidad al proceso evolutivo. Esta re- lación se representa por la espiral de la figura 1. De acuerdo a Taborsky, las realidades morfológicas (áto- mos, células, organismos, palabras, acciones, signos… etc.) se forman a partir de la selección de un conjunto funcio- nal que incluye tres de las seis relaciones (Taborsky 2004). Un análisis morfogenético debe superar la dicotomía que concibe un determinismo dependiente exclusivamente de factores genéticos (interno) o medio ambientales (externo), y una aleatoriedad que se origina en la mutación (interno) o en las fluctuaciones del ambiente (externas). Aunque las fronteras, interno/externo y local/global están tan implicadas que parecen casi indistinguibles, el análisis de las zonas espa- cial-temporal-funcional permitiría reexaminar las relaciones entre ontogenia y filogenia. 2. L A T E O R Í A D E S I S T E M A S E N D E S A R R O L L O Y L O S A G E N T E S E V O L U C I O N A N T E S E N D E S A R R O L L O Existe un debate sobre las relaciones entre ontogenia y filogenia, por cuanto cada una ha sido postulada como la causa de la otra. La teoría de la evolución por selección natural asume la preexistencia de variaciones individuales aleatorias, sin preocuparse por indagar la influencia delos procesos de desarrollo en la producción de estas variaciones. El neodarwinismo afirma que los embriones se desarrollan FILOSOFIA.indb 69 27/11/06 11:34:36 I S E L E C C I Ó N N AT U R A L [70] de acuerdo a un programa genético controlado por los genes Hox, de modo que el papel atribuible a otros factores es des- preciable. Pero, ¿en qué medida la ontogenia es un proceso determinista guiado por la información genética?, ¿en qué medida la ontogenia está influenciada por factores diferentes a los genéticos?, ¿en qué medida la ontogenia resuelve el problema del origen de las variaciones evolutivas? El desarrollo entendido como una sucesión de etapas desde estados de menor a mayor diferenciación, reaviva el espectro de la recapitulación lamarckiana por causa del temor justificado a que la evolución se conciba como un proceso teleológicamente dirigido. Pero el entendimiento de la ontogenia como un proceso no programado y abierto impide recaer en las ya superadas concepciones finalistas. El debate evo-devo revive la polémica entre el prefor- mismo y la epigénesis y se centra en la discusión sobre el papel que se le debe asignar a la información genética por un lado y a la epigénesis (auto-organización) por otro, en la generación de la forma. La genética sería una nueva versión del preformismo por cuanto afirma que el desarrollo está programado, es decir que todos los factores formativos pre- existen de forma codificada en los genes (Oyama 2001). Por el contrario, los epigenetistas sostienen que el desarrollo se auto-construye en las interacciones entre el organismo y su medio. La resolución de este problema clarificaría discusio- nes seculares sobre si el origen de las variaciones evolutivas depende de la naturaleza de los organismos o por el contrario de las condiciones ambientales. Así mismo permitiría esta- blecer el nexo entre micro y macro evolución. Waddington imaginó la canalización del desarrollo como una bola que desciende por los valles de un paisaje epigené- tico, cuyas características se moldean tanto por una red de genes interactuantes como por el medio ambiente. A medida que el proceso transcurre, el paisaje se va reconfigurando, FILOSOFIA.indb 70 27/11/06 11:34:37 Las interrelaciones entre genotipo, fenotipo y medio ambiente. Una aproximación semiótica al debate ‘Evolución y Desarrollo’ [71] E u g e n io A n d ra d e generando nuevas rutas y profundizando trayectorias reco- rridas previamente. El paisaje epigenético es una interfase dinámica entre la dotación genética del huevo y las interacciones medio ambientales modulables por el organismo en desarrollo (Waddington 1961). En este modelo ni G, ni E determinan causalmente a F, sino que participan en la conformación del paisaje y del patrón de canalizaciones a que el proceso ontogenético da lugar. La asimilación genética (Waddington 1957) explica por qué los genes que tienen mayor proba- bilidad de fijarse en la población son los que refuerzan o producen el mismo efecto que ejercían los estímulos exter- nos sobre el organismo individual. En las etapas tempranas de la evolución del desarrollo, los factores morfológicos determinantes correspondían a procesos epigenéticos in- fluenciados por fuerzas externas ejercidas sobre agregados celulares primitivos (Ho & Saunders 1979; Goodwin 1994; Jablonka & Lamb 1995; Jablonka & Lamb 1998; Newman & Müller 2000). Los determinantes físicos externos actúan como factores causales del desarrollo, los cuales pueden ser reforzados por genes que suministran las proteínas estruc- turales pero que no ejercen una influencia directa sobre la arquitectura resultante. La asimilación genética (Wadding- ton 1961) conecta la morfogénesis a una red genética que facilita la producción de los materiales constitutivos. En otras palabras, los genes entraron tardíamente en la evo- lución a consolidar los procesos epigenéticos (Newman & Müller 2000; Salazar-La Ciudad et al. 2003). Los organismos modifican su paisaje epigenético a me- dida que interactúan con el ambiente y así, disminuyen los rangos de variabilidad y plasticidad estructural. En condi- ciones estables se esperaría que los factores que refuerzan esta pérdida de plasticidad tiendan a fijarse. La constancia de la ontogenia se ve influenciada por diferentes factores, como la estabilización de redes genéticas, el encauzamiento FILOSOFIA.indb 71 27/11/06 11:34:37 I S E L E C C I Ó N N AT U R A L [72] por factores citoplasmáticos presentes en el óvulo… etc. La Teoría de Sistemas en Desarrollo investiga las leyes de la construcción fenotípica dentro del contexto de las inte- racciones epigenéticas y ambientales. El F no es pensable en términos de contribuciones independientes de G y E, y corresponde a la epigénesis del organismo que se va mol- deando en la interacción con E. La reconstrucción de los puentes entre la ontogenia y la filogenia contribuirá a ampliar la síntesis evolutiva que busca explicar la evolución divergente en términos del de- sarrollo embriológico sin desconocer la influencia de los genes y el rol de la selección natural. La ontogenia requiere del mantenimiento de una organización interna que obe- dece a la información analógica (Hoffmeyer & Emmeche 1991; Hoffmeyer 1996), la cual se divide en zonas externas e internas correspondientes a los modos [2-2] y [1-1] res- pectivamente, (figura 1, cuadrantes I y II). La información analógica equivale al reconocimiento inmediato de patrones por medio de los motivos estructurales propios del agente en evolución y desarrollo (AED) dentro de un rango continuo de variabilidad. Análogo se refiere al hecho de que el reco- nocimiento es no-aleatorio y reversible dado que se hace por complementariedad estructural o similitud (Root-Bernstein & Dillon 1997). El reconocimiento interno de motivos es- tructurales se realiza en la interacción entre componentes constitutivos, mantienendo así, la coherencia del individuo a medida que interactúa con el entorno. La información digital se refiere a la codificada en forma de un texto compuesto de símbolos (DNA) que puede modi- ficarse por transiciones discontinuas (mutación y recombina- ción). La información digital aparece cuando unas estructuras se convierten en símbolos que pueden ser permutados para dar lugar a significados o contenidos funcionales diferentes. La información digital está codificada en el modo [3-2], y está FILOSOFIA.indb 72 27/11/06 11:34:37 Las interrelaciones entre genotipo, fenotipo y medio ambiente. Una aproximación semiótica al debate ‘Evolución y Desarrollo’ [73] E u g e n io A n d ra d e asociada con la definición de las tendencias futuras. Los genes carecen de una frontera material definida, se superponen, son físicamente discontinuos por cuanto poseen secuencias intercaladas, pueden encontrarse dentro de otros genes y su continuidad se revela únicamente a nivel del RNA. Los genes actúan en red bajo el control del sistema epigenético que interactúa con el medio ambiente. Los genes como fuente de información pertenecen a la relación [3-2]. El carácter atómico y discreto atribuible a los genes es una aproximación mendeliana que no se sostiene a nivel del DNA. Las zonas internas y externas están conectadas por los sistemas de herencia epigenética (SHE) (Maynard Smith & Szathmary 2001, Jablonka et al. 1992, Jablonka & Lamb 1998), ya que los acoples a factores externos requieren de un reacomodo de los componentes internos. Por otra par- te, la selección natural, externa al individuo, configura el registro genético o digital compartido por la población. Los sobrevivientes llevan una representación más fiel (aunque desactualizada) de su medio ambiente. Se trata, por tanto, de la supervivencia de los mejores codificadores de infor- mación ambiental. La relación entre estos dos tipos de dualismos, el la- marckiano (interno/externo) y el neodarwiniano (individual/ poblacional) con frecuencia han sido fuente de debates in- terminables entre alternativas aparentemente excluyentes. Afirmo que laaproximación semiótica, fundamentada en la idea que existe una interpretación real de todos los recursos informativos por parte del organismo en desarrollo, favorece una integración congruente con los desarrollos de la TSD (Oyama 1985, Griffiths & Gray 1994). La noción de Agentes Evolucionantes en Desarrollo (AED) intenta formalizar una teoría de los organismos como sujetos interpretantes que se enfrentan a múltiples alternativas en su interaccionar con factores externos. Esta FILOSOFIA.indb 73 27/11/06 11:34:37 I S E L E C C I Ó N N AT U R A L [74] noción fusiona desarrollo con evolución en la medida que ambos procesos están mediados por la acción de los orga- nismos, de acuerdo a Baldwin, que los consideró participes en la formación de sus propias adaptaciones por medio de la llamada selección orgánica: Organic Selection -- The process of ontogenetic adap- tation considered as keeping single organisms alive and so securing determinate lines of variation in subsequent generations. Organic Selection is, therefore, a general principle of development which is a direct substitute for the Lamarckian factor in most, if not in all instances. (…) The use of the word “Organic” in the phrase was sugges- ted from the fact that the organism itself cooperates in the formation of the adaptations which are effected, and also from the fact that, in the results, the organism is itself selected; since those organisms which do not secure the adaptations fall by the principle of natural selection. And the word “Selection” used in the phrase is appropriate for just the same two reasons (Baldwin 1896). Los cuadrantes superiores de la figura 1 corresponden a relaciones asimétricas mientras que los inferiores dan cuenta de las propiedades de la Terceridad que para Peirce son la fuente de simetrías y regularidades. Si tenemos en cuenta el potencial asociado a la información digital (cuadrante III) podemos hablar de la ontogenia como de la transformación de G a F a escala individual, o de las potencialidades a una determinación, o sea de [1-1] a [2-2]. Esta transformación requiere de un interpretante que Hoffmeyer (1996) ubica en el huevo. Embryogenesis, or ontogenesis, is a sign operation in the sense that a one-dimensional “DNA inscription” contai- ning a coded version of its parents is converted in a three- dimensional organism (…). An inscription is not meant to be active, it is meant to be deciphered, and so it is with the FILOSOFIA.indb 74 27/11/06 11:34:38 Las interrelaciones entre genotipo, fenotipo y medio ambiente. Una aproximación semiótica al debate ‘Evolución y Desarrollo’ [75] E u g e n io A n d ra d e DNA inscription. (…) The egg – or the growing embryo – is the some one for whom the genome represents a sign of a specific process of development (Hoffmeyer 1996). Del mismo modo, la evolución es un fenómeno pobla- cional que corresponde a la transformación de F a G por medio de un intérprete, en este caso el linaje. “Any given lineage interprets its ecological niche as a sign that the DNA pool must be modified” (Hoffmeyer 1996). La interdependencia entre estos dos procesos se expresa en el hecho de que cada miembro de la población provie- ne de una ontogenia, y que las secuencias de DNA que se interpretan durante la ontogenia provienen de un pool ge- nético seleccionado a nivel poblacional. Para entender esta doble implicación se requiere especificar lo que ocurre en la interfase interno/externo e individual/poblacional repre- sentada en la relación [2-1]. Esta interfase corresponde al AED que actúa inicialmente como un explorador al azar de las posibilidades del entorno por medio de las mediciones. Estas se van haciendo más orientadas a medida que el AED obtiene información. El agente promueve acoplamientos a los factores del medio, generando así, un registro o ajuste estructural interno. Sin embargo, nunca habrá suficiente información como para dar una respuesta completamen- te dirigida, y por tanto los AED deben hacer elecciones arriesgando algo. La materialización del agente involucra relaciones en el modo de Terceridad (Taborsky 2004). Los AED captan selectivamente información de E para mante- ner la adaptabilidad y capacidad evolutiva, por medio de la generación de una diversidad de individuos que abren hacia el futuro las posibilidades evolutivas.2 2 Una formalizacion de la idea del agente se encuentra en el libro Los demonios de Darwin: semiótica y termodinámica de la evolu- ción biológica (Andrade 2003). FILOSOFIA.indb 75 27/11/06 11:34:38 I S E L E C C I Ó N N AT U R A L [76] La idea del ser vivo como observador interno allana el camino hacia una comprensión de las relaciones entre on- togenia y filogenia, poniendo de relieve las características comunes a estos procesos, tales como: 1. Autorreferencia. 2. Aumento de información. 3. Apertura e incompletud. 4. Ausencia de programa previo. 5. Irreversibilidad. En un universo compuesto de agentes semióticos, el azar ontológico (independiente del observador) es la incerti- dumbre epistémica (dependiente del observador) del mismo agente. El azar (Primeridad) realimenta permanentemente el potencial evolutivo, pero su manifestación y renovación obedece a una dinámica continua que tiene lugar en todo momento y lugar (Terceridad). La continuidad está dada por el modo [3-3]. “Continuity, as generality, is inherent potentiality, which is essentially general (…) The original potentiality is essentially continuous or general” (Peirce C.P. 6.204-205). La concreción de esta actividad se manifiesta en la in- terfase. Los agentes son seres reales que conocen, en este sentido pertenecen a los dominios ónticos y epistémicos simultáneamente, es decir, son estructuras materiales orga- nizadas que deben su existencia a operaciones mentales y que a su vez son instrumento de subsiguientes operaciones mentales. Su carácter mental se debe a su nexo con los mo- dos [3-1], [3-2] y [3-3]. La perspectiva internalista muestra la inseparabilidad entre las realidades subjetiva y objetiva, puesto que los agentes (sujetos) co-evolucionan permanen- temente con su E (realidad objetiva). En otras palabras, los agentes moldean y dan forma a su E en la medida en que simultáneamente son moldeados por ellos. La relación [2-1] indica que la interfase se cruza en am- bas direcciones, la incertidumbre: 1) se reduce por medio de la medición y 2) se incrementa con los borrados de informa- ción y/o el cambio ambiental. Los organismos son agentes FILOSOFIA.indb 76 27/11/06 11:34:38 Las interrelaciones entre genotipo, fenotipo y medio ambiente. Una aproximación semiótica al debate ‘Evolución y Desarrollo’ [77] E u g e n io A n d ra d e en cuanto regulan y amortiguan las influencias genéticas (G) y medio ambientales (E), su autonomía depende de evalua- ciones e interpretaciones de las fuentes de información G y E que llevan a resultados fenotípicos impredecibles. Estas evaluaciones e interpretaciones son impredecibles para un observador externo y constituyen el fundamento del azar epistemológico. La información digital en el modo [3-2] posibilita la rea- lización de opciones múltiples por parte del agente. Los or- ganismos son manifestaciones de procesos y relaciones que colapsan en el modo [2-1] como organización material que tiende a la individualización, en la medida en que mantiene su nexo con la relación [3-3]. La interfase [2-1] no puede funcionar por sí misma, en cuanto se cierra y localiza, hace parte del mundo material que identificamos como [2-1] y [2-2]; en cuanto hace parte de la población, manifiesta su nexo con las relaciones [3-1] y [3-2]. La captura de energía libre conecta de nuevo con la relación [1-1]. La relación [2- 1] establece las interacciones para construir la red, mientras que las relaciones [2-2] son mecánicas y no contribuyen a la red de intercambios y procesamientos de información. Un agente (AED) debe ser estudiado en dos escalas de tiempo simultáneamente (ontogenética y evolutiva). En ambas el registro reflejasu conocimiento sobre el estado del sistema. El registro ontogenético (análogo) está dado por F y tiene dos parámetros medibles: (1) Especificidad (qué tan específica es su relación con respecto a ciertos factores de E); (2) Estabilidad (qué tan restringido es el espectro de conformaciones posibles). Estos dos parámetros definen la exclusividad o singularidad de cada F. El registro filogenético (digital) está constituido por el DNA. La actividad del AED en la ontogenia define y canaliza las tendencias que se veri- fican en el tiempo evolutivo (Balbín & Andrade 2004). Las tendencias evolutivas globales son el resultado de procesos FILOSOFIA.indb 77 27/11/06 11:34:38 I S E L E C C I Ó N N AT U R A L [78] locales que tienen lugar a nivel individual en la ontogenia. De acuerdo a la recapitulación, las formas ancestrales de vida en sus etapas juveniles determinaron tendencias evolu- tivas por medio de cambios de hábito y comportamiento ante las exigencias del medio ambiente; y a medida que algunas de estas modificaciones fueron apareciendo en estadios de desarrollo más tempranos se convirtieron en parte del plan corporal (Bauplan) de las especies descendientes. El dogma central se refiere a la imposibilidad de modifi- car G por acción de F durante el curso de vida del individuo, pero no sobre poblaciones fenotípicas a escalas de tiempo evolutivo donde la selección determina el pool genético (G) para la siguiente generación. Además, las ganancias de in- formación durante el curso de la vida individual expresadas como modificaciones en los sistemas de herencia epigenética (SHE), no violan el dogma central. Los organismos (AED) son codificadores de información (G) y constructores de nichos (E). A su vez, G y E parcial- mente especifican la ontogenia de F que en consulta per- manente con E, actúa afinando y coordinando la expresión genética durante la ontogenia. Los AED se auto-organizan aprovechando los potenciales derivados de la interpreta- ción de las fuentes de información G y E. Los organismos participan en la formación de su mundo de experiencias y representaciones (Umwelt), dando lugar a un bucle auto- rreferencial en las relaciones entre G/F, G/E y F/E. Según Rosen un circuito autorreferente no es predicable puesto que se define con respecto al contexto o totalidad a la cual pertenece, una totalidad que solamente se puede definir en términos del objeto que queríamos definir inicialmente (Rosen 1990). Por tanto, los seres vivos son sistemas no predicables. Se ha pretendido eliminar el pensamiento circular al afir- mar que el desarrollo depende de la preexistencia de un FILOSOFIA.indb 78 27/11/06 11:34:39 Las interrelaciones entre genotipo, fenotipo y medio ambiente. Una aproximación semiótica al debate ‘Evolución y Desarrollo’ [79] E u g e n io A n d ra d e programa genético o que la información fluye en una sola dirección desde el DNA; no obstante, el intento de resolver las preguntas sobre el origen de la información genética lleva a la necesidad de tener en cuenta las influencias de E sobre F a escala individual y de F sobre G a escala poblacional. De igual modo los problemas sobre el origen de los patrones corporales, de las adaptaciones y en general de las grandes transiciones evolutivas muestran la dependencia del medio ambiente en dos sentidos: directamente como factor que imprime la forma por medio de fuerzas físicas, e indirecta- mente por medio de las necesidades de los organismos a dar cuenta de las incertidumbres del entorno. El neodarwinismo y el dogma central de la biología molecular eliminan los circuitos causales cerrados en favor de un razonamiento lineal. A pesar de todo, el desarrollo y la evolución forman un bucle autorreferente de implicación recíproca. (…) all life is founded on self-reference. (…). Would the organism not then be regarded as the DNA analog’s self-description rather than the DNA’s be- ing the organism’s digital self-description? (Hoffmeyer 1996, 42, 44). 3. L O S AED M I D E N PA R A M A N E J A R L A I N C E R T I D U M B R E D E L M E D I O A M B I E N T E A continuación pretendo justificar las siguientes pro- posiciones: 1. La ontogenia y la evolución son aspectos de una misma Tendencia General a la Modificación (TGM). 2. Esta TGM está impulsada por las interacciones del agente con factores del entorno. 3. Esta TGM da lugar a una solución intermedia entre: (a) Aumentos de exclusividad fenotípica (estabilidad y especificidad), y (b) Anticipación de cambios medio ambientales. FILOSOFIA.indb 79 27/11/06 11:34:39 I S E L E C C I Ó N N AT U R A L [80] 4. La minimización de redundancia y del incremento de pasos al desarrollo debe seleccionarse positivamente. Esta TGM se describe como un vector de fuerza orien- tado hacia el incremento de los contenidos de información mutua entre F/E que se puede descomponer en dos: el eje X que representa el desarrollo (contenido de información entre G /F), y el Y la evolución (contenido de información mutua G/E). (Figura 2). Un AED mide para adquirir la información requerida para la captación de energía libre. La medición es cualquier clase de interacción entre un sistema observador y uno ob- servado, que genera una descripción simplificada y funcional del segundo (E) por el primero (AED) (Pattee 1995). En otras palabras, por medio de la medición, los AED selec- cionan o filtran del E la información que les interesa. Una medición requiere: (1) Reconocimiento por complementa- riedad estructural, (mediado por un motivo utilizado como estándar de clasificación y comparación de una diversidad de factores externos). (2) Ajustes estructurales que reducen el conjunto de conformaciones accesibles, (el número de conformaciones individuales para el estado no acoplado es mayor que para los acoplados). Las interacciones reducen la plasticidad fenotípica dando lugar a estados más exclusivos o individualizados. Los ajustes de F registran una descripción funcional de E como la distribución de configuraciones en el estado acoplado. Por tanto, el AED “decide” en función de los resultados de las mediciones. La eficiencia en la codifi- cación es una función de la habilidad del AED para “mode- lar” el entorno en términos de regularidades que permiten abreviar el registro. Los F carecen de memoria evolutiva puesto que son inestables y sensibles a influencias de E, para su estabili- zación requieren de información genética (G). Los AED forcejean permanentemente para dar cuenta de E por medio FILOSOFIA.indb 80 27/11/06 11:34:39 Las interrelaciones entre genotipo, fenotipo y medio ambiente. Una aproximación semiótica al debate ‘Evolución y Desarrollo’ [81] E u g e n io A n d ra d e Figura 2. La lineal diagonal punteada muestra el incremento en el con- tenido de información mutual entre Fenotipo (F) y el medio ambiente E, como el resultado de una acción permanente y continua en el tiempo en un E estable. F i corresponde a los fenotipos que varían desde un estado de baja a alta exclusividad. Este vector se descompone en uno vertical y otro horizontal. El eje vertical muestra los incrementos de información mutua entre G y E en un tiempo evolutivo. El eje horizontal muestra los incrementos en el contenido de información mutua entre G y F en el curso del desarrollo. E i representa la influencia física del medio ambiente sobre la forma y que disminuye con el tiempo evolutivo: E 0 > E 1 > E 2 > E 3 . SHE i representa los Sistemas de Herencia Epigenética cuya influencia se va incrementando con el paso del tiempo evolutivo: SHE 0 < SHE 1 < SHE 2 < SHE 3 . Las flechas horizontales de G a F indican el desarrollo a nivel individual, mientras que las verticales de F a G indican la evolución a nivel de la población. (Andrade 2005). de ajustes recíprocos y así van creando la red de interaccio- nes en la que el contenido de información mutua entre F y E tiende a incrementarse. El amortiguamiento generado por la red permite un amplio margen de fluctuaciones de F. Aunquela fase de ajuste es reversible en el sentido de que la modificación puede desaparecer cuando se retira el FILOSOFIA.indb 81 27/11/06 11:34:40 I S E L E C C I Ó N N AT U R A L [82] estímulo ambiental, se convierte en una condición selectiva para variantes genómicas que fijan el registro de modo irre- versible. Además, los organismos producen perturbaciones impredecibles en el entorno al cual tratan de ajustarse, la creciente coordinación interna los hace más capaces de re- sistir los cambios ambientales. Los procesos de desarrollo embriológico están sometidos a dos tendencias opuestas. (1) La Terceridad o tendencia compresora que opera por condensación (la tendencia de los caracteres a aparecer en estados más tempranos al que aparecieron por primera vez) y por eliminación de etapas tardías. (2) La Primeridad o tendencia a adicionar nuevos pasos al final del desarrollo, y a permutar aleatoriamente las etapas anteriores. La acción conjunta de estas dos fuerzas mediadas por el AED, se manifiesta en la tendencia a mini- mizar los incrementos de información. Fenómenos como la neotenia (pérdida de etapas terminales) explican porque la recapitulación no se puede interpretar de un modo rígido, como si cada paso de la filogenia debiera verse reflejado en la ontogenia en el mismo orden dentro de la sucesión lineal. Cuando la adición de nuevas etapas ocurre sobre procesos que han perdido etapas tardías estamos ante una bifurcación evolutiva. No obstante, a grandes rasgos la recapitulación sí se cumple y se observa en el establecimiento de los patrones de organización de complejidad creciente (Arthur 1997, 2002; Ekstig 1994). La actividad del AED se puede rastrear en la interfase dado que F es el registro que a nivel de la ortogenia carac- teriza al individuo y a nivel de la filogenia la población. La población se estudia por la distribución de probabilidad de los F accesibles para cada individuo en un medio ambiente local. Las interacciones individuales (mediciones) modifican el paisaje epigenético individual y definen los nuevos estados disponibles para la población (el paisaje adaptativo). De FILOSOFIA.indb 82 27/11/06 11:34:40 Las interrelaciones entre genotipo, fenotipo y medio ambiente. Una aproximación semiótica al debate ‘Evolución y Desarrollo’ [83] E u g e n io A n d ra d e esta manera, el paisaje epigenético abre nuevas vías tanto epigenéticas como filogenéticas. De acuerdo con Von Baer, el desarrollo es un proceso de modificación que va de lo más general a lo específico, y en este modelo se postula que la evolución tiende a optimi- zar la producción de los F específicos. La reducción en las irregularidades del paisaje epigenético acelera la ontogenia, facilitando el acortamiento de las vías de desarrollo a causa de la presencia de factores morfogenéticos del entorno. La internalización de estos factores en la forma de una repre- sentación simbólica estabiliza un estado de singularidad estructural. La reducción de redundancia se produce adju- dicándole nuevas funciones a estructuras repetidas, de esta manera el agente accede a nuevas tareas sin prolongar la ontogenia excesivamente. A medida que el organismo se construye en su recorri- do por el paisaje epigenético, F se restringe, se canaliza y nuevas rutas cada vez más pandas se ramifican accediendo a las variaciones intraespecíficas e individuales. El paisaje epigenético se moldea a medida que algunos F se retienen por su funcionalidad, labrando de este modo creodos o “ca- minos” profundos, haciendo que sea cada vez más difícil acortar la ontogenia. Los creodos profundos corresponden a las descripciones más cortas (alta exclusividad estructural, y desarrollo rápido), mientras que los “valles” pandos co- rresponden a descripciones redundantes e inestables (baja exclusividad estructural o fenotipos plásticos que aceptan cambios ontogenéticos). Resumiendo, los AED operan por medio de la iden- tificación de regularidades ambientales que dan lugar a codificaciones condensadas en dos modos: (1) Análogo o reducción de estados intermediarios para obtener F; (2) Digital o descripción genética no redundante, por ejem- plo, la evolución de los genes Hox ha transcurrido desde la dispersión al agrupamiento con incremento en número, la FILOSOFIA.indb 83 27/11/06 11:34:40 I S E L E C C I Ó N N AT U R A L [84] colinearidad descubierta en la casi totalidad de los artrópo- dos y vertebrados expresa la tendencia hacia la optimización de la codificación. 4. E L D E S A R R O L L O Y L A E V O L U C I Ó N S O N P R O C E S O S D E A U M E N T O D E I N F O R M A C I Ó N A ) L A R E L A C I Ó N F E N O T I P O / E N T O R N O Según Wagensberg, un ser vivo, en nuestro caso un AED, tiende a liberarse de la incertidumbre del resto del mundo reaccionando a las fluctuaciones del medio ambiente (Wagensberg 2000). La capacidad para anticipar fluctua- ciones de E está relacionada con la plasticidad fenotípica. Los forcejeos del organismo para dar cuenta de los desafíos ambientales originan una tendencia a incrementar el con- tenido de información mutua entre F y E, y cuando esta información se incorpora en el registro genético, se incre- mentan los contenidos de información mutua entre G y F, y entre G y E. Los F individuales se ajustan a E, y en caso de ser seleccionados y fijados genéticamente se detectan a posteriori incrementos de información mutua entre G/F y G/E. La relación F/E está mediada por el comportamiento de los AED, y corresponde a una interacción funcional, permanente y siempre en curso que genera ajustes estruc- turales (codificaciones analógicas). In other words, every ontogeny as an individual history of structural change is a structural drift that occurs with conservation of organization and adaptation. We say it again: conservation of autopoiesis and conservation of adaptation are necessary conditions for the existence of living beings; the ontogenic structural change of a living being in an environment always occurs as a structural drift congruent with the structural drift of the environ- ment. This drift will appear to an observer as having been “selected” by the environment throughout the history FILOSOFIA.indb 84 27/11/06 11:34:40 Las interrelaciones entre genotipo, fenotipo y medio ambiente. Una aproximación semiótica al debate ‘Evolución y Desarrollo’ [85] E u g e n io A n d ra d e of interactions of the living being, as long as it is alive (Maturana & Varela 1992). Consideremos F y E como fuentes informativas. De acuerdo a Shannon se obtiene la ecuación (1), (Wagensberg 2000): (Ec. 1) (1) H (F) – (2) H (F|E) = (3) H (E) – (4) H (E|F) = (5) H(F:E) Sea H(F) (1) la diversidad de estados fenotípicos acce- sibles al organismo independientemente de E. H(F|E) (2) corresponde a la información condicional o la variabilidad del AED cuando E es constante; se refiere a la plasticidad fenotípica o la capacidad anticipatoria del AED a los cam- bios del E; es la condición para que exista una capacidad para evolucionar (evolucionabilidad). H(E) (3) corresponde a la diversidad de estados accesibles por parte del medio ambiente. H(E|F) (4) representa la sensibilidad del medio ambiente, el impacto, o la capacidad de ser modificado por el AED; corresponde a la variabilidad del E cuando el F es constante. H(F:E) (5) representa la complementariedad entre F/E o la información que circula entre el organismo y el medio ambiente; es la condición para la existencia de las entidades vivientes. Entre mayor sea H(F|E), mayor es la independencia de la incertidumbre de E; es decir, que el ajuste organismo/en- torno debe mantener la evolucionabilidad. En un entorno estable (H(E) bajo), la independencia individual se obtiene sin necesidad de incrementar H(F|E) y en este caso la espe- cialización se convierte en una ventaja. Por el contrario en un medio inestable y cambiante (H(E) alta), H(F:E) puede dis- minuir y el AED puede extinguirse o por el contrario optar, o hacer una elección que abre una nueva ruta de desarrolloy evolutiva. El AED intercambia información con E para delimitar la interfase interno/externo y así mantenerse lejos del equilibrio. La independencia del AED se paga expor- FILOSOFIA.indb 85 27/11/06 11:34:40 I S E L E C C I Ó N N AT U R A L [86] tando hacia afuera los efectos de su actividad interna, los consiguientes incrementos en la incertidumbre del E se ma- nifiestan como presiones selectivas que lo obligan a cambiar los valores restrictivos en la interfase. Con el incremento de la incertidumbre del E, el AED incrementa la plasticidad fenotípica o la habilidad para escoger y por tanto perturbar E de modo impredecible. En consecuencia, la necesidad de manejar la incertidumbre de E se convierte en el potencial que promueve una mayor diferenciación tanto a nivel del desarrollo como en la evolución. La evolución y el desarrollo describen trayectorias de transformación desde estados primitivos de baja exclusividad fenotípica a estados más estables y específicos por medio de la interiorización de información ambiental. Las formas primitivas de vida debieron ser muy plásticas puesto que eran moldeables por la influencia directa de E, con el curso de la evolución la plasticidad fue decreciendo debido a la codificación genética de algunas características fenotípicas producidas como respuesta a los desafíos ambientales, y seleccionadas por su estabilidad y funcionalidad. La discri- minación de factores de E se hace por el acoplamiento con módulos de AED, de manera que la diversificación de los módulos estructurales conlleva un aumento de la habilidad discriminatoria del AED, (incrementos de los valores de H(F) y H(F|E) simultáneamente). En otras palabras, la varia- bilidad da la capacidad de discriminar más características de E haciéndolo más predecible para el AED. Por tanto, el incremento en diversidad estructural define la exclusividad de F (estabilidad y especificidad). Es digno de subrayar que el AED tiende a incrementar su exclusividad estructural por medio de la creación de condiciones favorables para la incor- poración de variaciones congruentes con estas tendencias. E es depositario de información, aunque en un momento determinado no sea relevante para los organismos, poten- cialmente sí puede llegar a ser parte de su mundo inter- FILOSOFIA.indb 86 27/11/06 11:34:41 Las interrelaciones entre genotipo, fenotipo y medio ambiente. Una aproximación semiótica al debate ‘Evolución y Desarrollo’ [87] E u g e n io A n d ra d e no de representaciones (Umwelt) como consecuencia de comportamientos exploratorios que una vez seleccionados se codifican en forma de hábitos. Además, un AED puede también ceder algo de su identidad individual aumentando su dependencia hacia otros individuos similares a cambio de una mayor independencia de las incertidumbres de E, dando lugar a niveles más complejos de organización. Por ejemplo la multicelularidad pudo haber comenzado por cooperación entre células individuales como un medio de disminuir la incertidumbre del E (Wagensberg 2000). Resumiendo: (1) Los AED forcejean para incorporar información de E incrementando así la exclusividad de F. (2) El desarrollo y la evolución no dependen exclusivamente de la adaptación a un E estable, sino de la independencia a condiciones cambiantes de E manteniendo la habilidad para elegir. (3) Durante la ontogenia los aumentos de información se detectan como modificaciones de las rutas epigenéticas en particular por la adición terminal de pasos. (4) En la filoge- nia, los incrementos de información se reflejan en aumentos de la plasticidad fenotípica. B ) L A S I N T E R R E L A C I O N E S G E N O T I P O / F E N O T I P O Y G E N O T I P O / E N T O R N O Los AED actúan en red con otros agentes que son parte de su E. Los incrementos en el contenido de información mutua entre F y E son la condición necesaria para los incre- mentos subsiguientes en la información mutua entre G y F, y entre G y E. Específicamente, la tendencia a incrementar el contenido de información mutua entre el registro digital (la secuencia de DNA o G) y el analógico (el F o la estructura), H(G:F), es el medio para incrementar la autonomía del AED en un E constante. La exclusividad estructural surge en la in- terfase que permite la asimilación genética de innovaciones evolutivas por medio de la conversión de información analó- gica en digital (Andrade 2002, 2003, 2004). La información FILOSOFIA.indb 87 27/11/06 11:34:41 I S E L E C C I Ó N N AT U R A L [88] recolectada intensifica el potencial evolutivo una vez que ha sido convertida al formato digital o genético. La conversión de información ambiental en genética, es un fenómeno que en parte se resuelve con el modelo de la asimilación gené- tica de Waddington. La información genética se hereda de acuerdo a las leyes de Mendel, mientras que otras clases de información se pueden transmitir por medio de los Sistemas de Herencia Epigenética (SHE). La contribución evolutiva de los SHE depende de su incorporación al registro gené- tico. La información puede incorporarse al registro gené- tico solamente si su versión análoga correspondiente se ha producido y estabilizado por la acción del estímulo externo. Es decir que los registros analógicos, aunque reversibles e inestables, favorecen la fijación de mutantes que producen o refuerzan la característica que los organismos manifiestan en presencia del estímulo externo. Una vez incorporada, el organismo manifiesta la característica aun si el estímulo ex- terno se ha retirado. Podemos concluir que la contribución evolutiva del almacenamiento individual de información analógica no debe ser despreciada. La digitalización de información conlleva incrementos en H(G:F) y H(G:E) que van retrasados con respecto a los in- crementos en H(F:E). Como vimos, la exclusividad de los F es un producto evolutivo de la interiorización de información del E en la forma de modificaciones en el desarrollo. Las modificaciones que tienen mayor probabilidad de ser selec- cionadas son las que afectan las etapas terminales dado que no perturban la coordinación intrincada entre sus elementos constitutivos, aunque la duplicación y la permutación de pa- sos intermediarios también pueden ser seleccionadas por su congruencia funcional con cambios en el E. Estos procesos, en tanto contribuyen a optimizar la ontogenia, ejercen una presión a favor de minimizar el incremento de G (registro digital). Así, el agente se vuelve menos dependiente de su E FILOSOFIA.indb 88 27/11/06 11:34:41 Las interrelaciones entre genotipo, fenotipo y medio ambiente. Una aproximación semiótica al debate ‘Evolución y Desarrollo’ [89] E u g e n io A n d ra d e y más dependiente de su historia en la medida en que H(G:F) y H(G:E) se ha incrementado a lo largo de la evolución. Resumiendo: las relaciones G/F y G/E están mediadas por el proceso de asimilación genética que explica la incor- poración de información ambiental en el registro genético. La evolución de la ontogenia es un proceso de ganancia de información que se expresa como un incremento de la in- formación mutua entre G y F, aunque F nunca llega a estar completamente determinado por G. Del mismo modo la filogenia es un proceso de ganancia de información que se expresa como incrementos en el contenido de información mutua entre G y E, aunque la información de E solamente se incorpora de modo parcial en G.3 5. C O N C L U S I O N E S El estudio de las interrelaciones entre G, F y E explica por qué la evolución no puede depender exclusivamente de variaciones aleatorias, sino de la acción conjunta de fac- 3 La ecuación (1) también sirve para entender estas relaciones: (1a) H (G) – H (G|F) = H (F) – H (F|G) = H(G:F) , y (1b) H (G) –H (G|E) = H (E) –H (E|G) = H(G:E). Donde, H(G) representa la complejidad genotípica. H(G: F) representa la información genética que contribuye al fenotipo. H(G|F) corresponde a los genes que no son informativos para la cons- trucción de F. La información condicional refleja la flexibilidadde G con respecto a F, por ejemplo la capacidad de incluir mutaciones neutras y codificar nuevas funciones. H(F|G) representa las carac- terísticas del F que no son dependientes de G debido a que están influenciadas por E. H(F) corresponde a la complejidad fenotípica. Del mismo modo, H(G:E) es la información que se ha incorporado evolutivamente al genoma. H(G|E) la capacidad anticipatoria basada en la existencia de secuencias redundantes duplicadas y no codan- tes. H(E|G) corresponde a las características del E no registradas por el AED, aunque es posible que algunas de ellas sean registradas en el futuro. H(E) corresponde a la complejidad del medio ambiente. FILOSOFIA.indb 89 27/11/06 11:34:42 I S E L E C C I Ó N N AT U R A L [90] tores internos y externos, individuales y poblacionales que convergen para dar una respuesta, ni dirigida ni aleatoria, sino basada en las opciones que minimizan los riesgos. Afir- mar que todas las variaciones son aleatorias equivale a re- chazar la idea de evolución, pero por otra parte, decir que las variaciones son dirigidas significa que la evolución esta prefijada o preprogramada. Las variaciones son el produc- to de las elecciones hechas por los agentes, y por tanto no son ni azarosas, ni dirigidas. El ámbito del azar está aso- ciado a la innovación, la libertad, la creatividad, y ocurre permanentemente dentro de los umbrales más o menos flexibles que la canalización permite. Se trata de eventos que tienen probabilidad de ocurrir realmente, así sea muy baja, pero nunca de eventos con probabilidades cercanas a cero, que en la práctica son imposibles. Este es un modelo que reduce el azar sin caer en el error opuesto que sería un determinismo evolutivo. Las elecciones se hacen dentro de un rango restringido de posibilidades, pero cuál será elegida, depende de las evaluaciones propias de los agentes. Estas elecciones despiertan nuevas posibilidades las cuales eran impredecibles con antelación, en este momento el potencial de la Primeridad [1-1] renueva el ímpetu evolutivo dentro de una ley evolutiva dada por la Terceridad. Las interacciones G/F/E subyacen como el fundamento que explica las relaciones entre ontogenia y filogenia que no son del tipo causa-efecto lineal, sino de implicación re- cíproca. Si el asunto fuera únicamente romper este circuito lógico tal como se ha hecho ubicando la variación antes que la selección, y la información genética antes de la forma, entonces, la ontogenia sería prioritaria a la filogenia. Esta prioridad expresa el hecho de que la ontogenia es la fuente de las variaciones individuales y también, el proceso en el cual el texto digital (G) se traduce a una representación ana- lógica (F). Estaríamos, por tanto, forzados a afirmar que la FILOSOFIA.indb 90 27/11/06 11:34:42 Las interrelaciones entre genotipo, fenotipo y medio ambiente. Una aproximación semiótica al debate ‘Evolución y Desarrollo’ [91] E u g e n io A n d ra d e ontogenia es la causa de la filogenia. No obstante, aceptando que los bucles autorreferentes sí se dan en la naturaleza, prefiero justificar más bien la idea de que existe una tenden- cia general a la modificación de la forma que se manifiesta en dos marcos referenciales de temporalidad. Este modelo hace justicia a la notable contribución de Oyama aportán- dole elementos de formalizacion al equiparar un Sistema de Desarrollo con un AED. Por otra parte, la cartografía de las seis relaciones o mo- dos de codificación inspirados en Peirce, se convierte en marco filosófico obligado para tratar problemas científicos dando un esquema de interpretación a los datos empíricos. La organización física de los AED está codificada en los modos analógicos [2-1] y [2-2], pero su actividad interpre- tativa está asociada a los modos [3-1] y [3-2]. El AED es la interfase donde G y E se interpretan instantáneamente, puesto que la interacción con E provoca ajustes fisiológicos, conductuales y en los SHE que regulan la expresión gené- tica, a la vez que crean a largo plazo las condiciones para la eventual asimilación de nuevas variantes génicas. Newman y Müller afirman que la relación entre genes y forma es una condición derivada o un producto de la evolución (Newman & Müller 2000); una afirmación que espero haber explicado al señalar que en últimas es el resultado de las elecciones hechas por los AED. Este modelo muestra que la selección natural favorece los procesos de desarrollo cortos, y la plasticidad fenotípica de los AED que disminuye el riesgo que implican sus elec- ciones. La existencia de rutas de desarrollo no redundantes se explica por un proceso semiótico, mediado por un sistema suficientemente complejo como para ser capaz de minimi- zar el aumento de pasos. Este fenómeno es la razón por la cual la recapitulación en sentido estricto no ocurre, aunque el núcleo central de esta doctrina se mantiene vigente. Es FILOSOFIA.indb 91 27/11/06 11:34:42 I S E L E C C I Ó N N AT U R A L [92] decir, las innovaciones evolutivas surgieron como respuesta de los organismos ancestrales en sus etapas juveniles a las modificaciones ambientales, a través de cambios de com- portamiento que allanaron el camino para mayores modifi- caciones, algunas de las cuales se fijaron genéticamente. A G R A D E C I M I E N T O S Agradezco el apoyo del Departamento de Biología y de la Vicerrectoria de Investigaciones de la Universidad Nacio- nal de Colombia. A Teresa Pérez Hernández por su lectura juiciosa y valiosas sugerencia en redacción y estilo. R E F E R E N C I A S B I B L I O G R Á F I C A S Andrade, E. 2000. From external to internal measurement: a form theory approach to evolution, BioSystems 57 (2): 49-62. ______ 2002. The organization of Nature: Semiotic agents as inter- mediaries between digital and analog informational spaces, S.E.E.D. Journal (Semiosis Evolution Energy Development) 2 (1): 56-84 http://www.library.utoronto.ca/see ______ 2003. Los demonios de Darwin. Semiótica y Termodinámica de la Evolución Biológica, Bogotá, D.C. Colombia: UNIBI- BLOS. ______ 2004. On Maxwell’s demons and the origin of evolutionary variations: and internalist perspective, Acta Biotheoretica 52: 17-40. ______ 2005. 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Pode-se ver a unidade desses elementos na própria enunciação da representação, que diz: um sistema (ou um estado) S representa a propriedade P se e somente se S tem a função de indicar,ou seja, de pro- ver informação sobre F relativa a certo domínio de objetos (Dretske 1995b, 4). Portanto, não existe representação sem função, embora haja informação sem função. Por exemplo, a fumaça de uma chaminé carrega informação sobre a velo- cidade do vento, embora essa não seja sua função. Ter uma função é aquilo a que algo está destinado a fazer, para o que qual foi concebido ou gerado. A função própria de toda representação é, segundo o autor, a indicação, a veiculação de informação. FILOSOFIA.indb 101 27/11/06 11:34:44 I I C O G N I C I Ó N Y E V O L U C I Ó N [102] 1. F U N Ç Ã O N AT U R A L Dretske reconhece que existem funções que são adquiridas naturalmente. Elas se distinguem das funções convencionais que são derivadas das intenções ou propósitos de um agente humano. As funções naturais, relativas ao funcionamento de órgãos, mecanismos e comportamentos, foram geradas sem que houvesse um agente, elas se formaram por meio da história evolutiva e teriam como causa principal a seleção natural. No entanto, a seleção natural não é a única causa, também o aprendizado é fonte de função natural. O conceito de função que Dretske incorpora à sua re- flexão sobre a representação origina-se, segundo o próprio autor, da análise feita por Godfrey-Smith em seu artigo, de 1994, sobre a história moderna da teoria de função. Drets- ke afirma que não defende uma teoria própria de função natural por ser suficiente que haja teorias fortes afirmando a existência das funções naturais, uma vez que essas são requeridas para sustentar a tese da existência de represen- tações naturais: ...desde que haja funções naturais – qualquer que possa ser sua correta interpretação – isso é o suficiente para meu projeto naturalista. No entanto, vou assumir nesse trabalho que as funções naturais são sempre adquiridas por meio de um processo histórico como a seleção natu- ral (para os sistemas) e o aprendizado (para os estados) (Dretske 1995b, 170). As funções naturais são, então, necessárias para explicar tanto as atividades de representação originadas pelo pro- cesso evolutivo, tendo a seleção natural como mecanismo principal, quanto as formadas pelo processo de aprendizado, através da experiência individual. Em ambos os casos o pro- cesso de aquisição de conhecimento é de natureza histórico, a história filogenética no primeiro e a história ontogenética no segundo. FILOSOFIA.indb 102 27/11/06 11:34:44 Função natural e indicação – a atividade de representação em Fred Dretske [103] K a rl a C h e d ia k O conceito teleológico de função, tal como entende Dretske, desenvolveu-se a partir da definição dada por Larry Wright em seu artigo Functions, de 1973. Segundo Wright, a função explica porque certo traço, órgão ou comportamento, existe e pode ser expressa em duas teses fundamentais: “X existe porque realiza Z” e “Z é a conseqüência de X existir”. O primeiro enunciado apresenta a forma da explicação funcional e estabelece a condição necessária para se enten- der que X tem a função Z, descartando a acidentalidade. O segundo apresenta a distinção entre as etiologias funcionais e os outros tipos de explicações etiológicas, pois nem toda explicação etiológica é funcional. Por isso, não basta dizer que X está lá porque realiza Z, é necessário completar dizen- do que Z é o resultado ou a conseqüência do fato de X estar lá. Por exemplo, seria correto dizer que as plantas possuem clorofila porque elas realizam a fotossíntese e a realização da fotossíntese é a razão pela qual plantas possuem clorofila. Porém, não seria correto dizer que há oxigênio na corrente sanguínea dos seres humanos porque esse se combina fa- cilmente com a hemoglobina. Embora seja verdadeiro que o oxigênio se combina facilmente com a hemoglobina não é essa sua função e não faria sentido dizer que o oxigênio está lá por essa razão: ...a função do oxigênio na corrente sanguínea humana é prover energia para as reações de oxidação e não combi- nar com a hemoglobina. Combinar com a hemoglobina é apenas um meio para tal fim (Wright 1973, 159). Uma característica importante da explicação funcional é seu caráter teleológico que a distingue da explicação causal ordinária, uma vez que esta remete às causas anteriores, enquanto que as explicações teleológicas apelam para os efeitos e dão a eles um poder causal. O caráter teleológico está presente nesse conceito, na medida em que seus enunciados são formados com expres- FILOSOFIA.indb 103 27/11/06 11:34:45 I I C O G N I C I Ó N Y E V O L U C I Ó N [104] sões do tipo: “de modo que” ou “a fim de que”, indicando o propósito, aquilo a que está destinado a fazer. Um exemplo recorrente é o de que o coração tem a função de bombear sangue para o corpo. Wright acredita que as explicações teleológicas têm força causal: Explicações funcionais, embora sejam claramente não causais no sentido restrito comum, dizem respeito a como a coisa com função chegou ali. São, assim, etiológicas, o que quer dizer que são ‘causais’ num sentido amplo (Wright 1973, 156). Outra característica importante intrínseca ao conceito de função é a normatividade, que designa um padrão a partir do qual a função é pensada ao determinar o que certo item deve fazer ou como deve se comportar. Esse caráter normativo explica porque um certo órgão ou artefato, que não funciona de forma adequada, não perde sua função. Ruth Millikan considera que o caráter normativo do conceito de função não pode estar baseado apenas nas dis- posições atuais que um item apresenta. Esse elemento é indiscutivelmente importante, mas não suficiente. A função não poderia ser descrita somente em termos disposicionais, porque com base nesse elemento não seria possível distin- guir de forma eficaz a ação que é feita com propósito da ação que é feita sem propósito, ou seja, o que é funcional do que não é funcional. As explicações dos casos em que o comportamento de um item é diferente do que diz a nor- ma, como, por exemplo, um determinado órgão que não funciona ou que funciona de modo inadequado, seriam ar- bitrárias e insuficientes. A função não poderia ser definida apenas em termos disposicionais e é assim que, segundo ela, Wright a concebe. O que sustenta a norma numa conce- pção disposicional são os casos bem sucedidos, como afirma Wright, ao considerar que a realização do sucesso, ou seja a FILOSOFIA.indb 104 27/11/06 11:34:45 Função natural e indicação – a atividade de representação em Fred Dretske [105] K a rl a C h e d ia k satisfação do objetivo, é o modelo que determina a função. Desse modo, segundo Millikan, o caráter disposicional é suficientemente forte para gerar uma explicação teleológica, mas não necessariamente histórica. Para ela, o conceito de função apresentado por Wright é uma forma especial de explicação teleológica, do tipo etiológica, mas não histórica (Millikan 1989, 289). O conceito de função própria apresentado por Millikan baseia-se no caráter histórico do traço, ou seja, está sustenta- do na história evolutiva que responde pelas “razões de sobre- vivência” desses traços. (Millikan 1984, 28). Há assim uma estreita relação entre o conceito de função e o de adaptação e os problemas que afetam a concepção adaptacionista de evolução, baseada no conceito de seleção natural, atingem também a tese da função própria. A principal crítica dirigida à concepção histórica de função, que leva em conta apenas a seleção original ou passada, é a de que se corre o risco de deixar de assinalar funções importantes e reconhecidas, bem como corre-se o risco de atribuir função a órgãos que não cumprem mais esse papel. Por isso, Godfrey-Smith reformula a concepção de Mi- llikan, de modo a incorporar a seleção recente ou moderna como critério no lugar da seleção antiga ou originária. Para ela, o processo histórico determinante para caracterizar cer- to comportamento como funcional é a seleção original ou passada, ou seja, o que explica a existência dos membros de uma família que possuem certa função é o fato de que, no passado,esses membros foram bem sucedidos no processo seletivo. Godfrey-Smith defende que a explicação, baseada na evolução originária, diz respeito a como as forças evoluti- vas, seletivas ou não, originaram a estrutura que certo traço possui, mas muitas vezes essa explicação não dá conta mais do por quê certo traço é mantido na população. É verdade que é difícil determinar a partir de quando a atividade de se- leção passou a ser recente ou moderna, mas segundo o autor FILOSOFIA.indb 105 27/11/06 11:34:45 I I C O G N I C I Ó N Y E V O L U C I Ó N [106] isso não é relevante, embora possa se dizer que quanto mais se afasta do presente, menos força explanatória a teoria da seleção natural possuiria para explicar as funções atuais. Sua perspectiva é denominada “visão histórica moder- na”, porque entende a função como disposição que explica a atual manutenção de um traço por meio da seleção natural. Com isso, pretende dar conta de casos como, por exemplo, o da pena das aves, em que se acredita que a seleção atuou originariamente tendo em vista a função de termo-regulação e não a função do vôo, e só depois teria havido seleção para a sua função principal atual que é o vôo. Diz ele: ... a função de m é F se e somente se m é membro da família T. Membros da família T são componentes dos sistemas biológicos do tipo S. Dentre as propriedades copiadas pelos membros de T está a propriedade ou o conjunto de propriedades C que podem realizar F. Uma das razões pelas quais membros de T, tal como m, existem agora é o fato de que membros passados de T, no passado recente, foram bem sucedidos na seleção por causa da contribuição positiva para a aptidão (fitness) dos sistemas de tipo S. (Godfrey-Smith 1994, 359) Dretske segue a concepção de função histórica apre- sentada por Godfrey-Smith e acredita que esse conceito é importante para a análise da representação. Um certo traço, como um órgão ou comportamento, evoluiu porque teria havido seleção para ele em razão do benefício trazido por tal função, em termos adaptativos, para o organismo. Por exemplo, a capacidade de representar um predador com o recurso da percepção auditiva e visual provavelmente evoluiu em várias espécies animais. O mesmo ocorre com a histórica ontogênica relacionada ao aprendizado. Nesse caso, o caráter histórico relaciona-se com a experiência do indivíduo. É o caso de um animal que passa a evitar certo alimento por ter tido experiências desagradáveis após sua ingestão. Em ambos FILOSOFIA.indb 106 27/11/06 11:34:45 Função natural e indicação – a atividade de representação em Fred Dretske [107] K a rl a C h e d ia k os casos, o comportamento atual é explicado pela história que dá conta do propósito de sua existência e manutenção. 2. I N D I C A Ç Ã O O segundo elemento importante para a concepção de repre- sentação em Dretske é a indicação. Há, segundo ele, uma estreita relação entre qualquer sistema de representação e a indicação. Todo sistema representacional tem a função de indicar como as coisas se passam em outro domínio com o qual está em relação (Dretske 1995a, 52). Como observa Godfrey-Smith, a indicação não é uma relação entre coisas, mas entre estados de coisas, referindo- se, principalmente, a uma condição do mundo ou do am- biente local. O que a caracteriza é a relação de dependência existente entre esses estados de coisas: Um sistema representativo não estaria no estado em que está sem que o mundo se apresentasse de certa forma, então, este estado do sistema indica aquela condição do mundo (Godfrey-Smith 1992, 286). Nesse sentido, a indicação é distinta da representação. Um aspecto importante dessa diferença é que a indicação não pode ser falsa e a representação pode. A indicação só ocorre quando é o caso, do contrário, não é indicação. Por exemplo, uma pessoa pode ficar na dúvida se a marca na neve é de um certo animal, mas a relação entre a marca e o animal é mais estreita, a marca não pode indicar que foi feita por certo animal se não tiver sido feita por ele. A partir daí, duas observações tornam-se importantes. Uma é que a relação de indicação entre os dois estados de coisas não pode ser pura coincidência ou meramente casual. Alguém pode observar um marcador de gasolina quebrado que, por coincidência, marca o nível exato da gasolina naquele mo- mento, mas não há relação de indicação nesse caso, porque FILOSOFIA.indb 107 27/11/06 11:34:46 I I C O G N I C I Ó N Y E V O L U C I Ó N [108] a indicação não estaria sustentada na percepção do obser- vador, mas na relação física entre o marcador e o nível de gasolina. A indicação independe do observador, ela ocorre numa relação entre o indicador e o indicado que subsiste ainda que não haja alguém para percebê-la. A outra con- seqüência é que caso não seja possível decidir-se entre duas ou mais possibilidades sobre o que causou certo resultado, como ocorre no caso de dois animais que produzem a mesma marca no solo, então, não há relação de indicação. A relação de indicação, diz Dretske, leva-nos a supor que ...há algo na natureza (não apenas nas mentes que se esforçam para compreender a natureza) algum fato ou conjunto de fatos objetivos, independentes do observa- dor, que formam a base da significação de uma coisa ou a indicação de uma coisa sobre outra (Dretske 1995a, 58). Por exemplo, os anéis do tronco de uma árvore estão relacionados com a idade da árvore, compreendamos ou não o significado dessa relação (Dretske 1995a, 62). Desse modo, a representação apresenta uma depen- dência em relação à indicação, mas não o inverso, pois a indicação deve ser tratada de forma independente. A repre- sentação mesma não explica de que modo ela representa o que representa. O que faz com que algo seja representação é aquilo que ele tem a função de indicar e isso é dado pela informação que ele carrega: Se você tem um sistema, cuja função é indicar F, e ele está funcionando adequadamente, então, as coisas vão “aparecer” para ele do modo como elas realmente são. Godfrey-Smith observa que Dretske mudou um pouco o sentido de indicação presente na sua obra de 1986, Explai- ning behavior, em relação à sua obra de 1981, Knowledge and the flow of information. Nessa, ele considerava que só haveria indicação se a informação fosse completa, ou seja, FILOSOFIA.indb 108 27/11/06 11:34:46 Função natural e indicação – a atividade de representação em Fred Dretske [109] K a rl a C h e d ia k igual a 1. Na segunda, signos naturais substituem a infor- mação e apresentam-se como indicadores confiáveis, mas não perfeitos. Exige-se que haja regularidade, ou seja, de- pendência na relação entre indicado e indicador. 3. R E P R E S E N TA Ç Ã O O enunciado fundamental que Dretske apresenta sobre a representação, diz: um estado interno C representa/indica a condição externa F se e somente se C for tomado como causa de um movimento do corpo M graças à relação de in- dicação entre C e F. (Dretske 1995a, 84). Esse é um modelo genérico que se aplica a todos os casos em que há represen- tação. Nele, o conceito de indicação apresenta-se na relação entre C e F. Relação essa anterior à própria representação e condição da própria representação, sendo de natureza proto-semântica. A explicação é: C é requerido como causa de M porque C indica F. Dretske mostra, através da análise dos sistemas repre- sentativos, a relação entre os conceitos de representação, função e indicação. Para ele, o conceito de representação tem uma ampla aplicação, podendo ser utilizado tanto para seres inanimados, como artefatos ou instrumentos, para se- res vivos sem linguagem proposicional, como plantas e bac- térias e, por animais capazes de aprendizado. Na realidade, só nesse ultimo caso o conceito de representação alcança sua realização plena, mas o uso nos outros casos é legítimo por estarem presentes tanto a indicação quanto a função. No caso dos instrumentos, a representação tem um ca- ráter em parte convencional, em parte natural. O elemento convencional responde por sua função, que é determinadapor aquele que o concebeu e determina seu propósito. Seu elemento natural está no fato de que sua função é indicar algo. Um instrumento pode realizar várias indicações, mas só uma realiza a função. Por exemplo, um termômetro. Ele FILOSOFIA.indb 109 27/11/06 11:34:46 I I C O G N I C I Ó N Y E V O L U C I Ó N [110] indica a temperatura, porque existe uma correlação entre a contração e a expansão do mercúrio e a temperatura. Não se pode utilizar o termômetro para indicar as oscilações das bolsas de valores, porque não existe correlação entre o mer- cúrio e as condições econômicas. Outro exemplo é o altíme- tro que tem a função de representar a altitude, marcando a variação dessa em função da diferença da pressão do ar, de modo que ela aumenta na medida em que a pressão do ar diminui. Há uma relação natural entre o diafragma que se enche na medida em que a pressão diminui e que se contrai quando a pressão aumenta. Ele expressa sua expansão ou contração em um ponteiro associado a uma escala de me- dida. O altímetro, assim com qualquer outro instrumento, tem o poder de representar algo não para si mesmo, mas para alguém que construiu o instrumento e compreende a relação estabelecida. Por isso, não se trata ainda de um uso pleno da noção de representação, porque o instrumento apenas põe em funcionamento um mecanismo, cuja causa é externa. As representações presentes no seres vivos que não pos- suem linguagem proposicional são diferentes das represen- tações presentes nos instrumentos, porque as funções que determinam não são dependentes de fatores extrínsecos, são determinadas intrinsecamente. Elas derivam do modo pelo qual as relações de indicação evoluíram e, portanto, do modo como são usadas pelo sistema do qual fazem parte. Animais apresentam relações de indicação com o ambiente para atividades vitais como adquirir alimento, evitar preda- dores e encontrar parceiro. A natureza, através do processo de evolução, desenvolveu esses sistemas de indicação não apenas nos animais, mas também nos vegetais. Nos ani- mais, os sentidos são o modo pelo qual se estabeleceu uma dependência entre o que o que acontece internamente no animal e o que acontece fora. Dretske entende que as ha- FILOSOFIA.indb 110 27/11/06 11:34:46 Função natural e indicação – a atividade de representação em Fred Dretske [111] K a rl a C h e d ia k bilidades sensitivas evoluíram exatamente por causa de sua capacidade de informar sobre o ambiente. O exemplo que apresenta é o das bactérias marinhas que têm magnetos, imas internos que funcionam como bússolas alinhando-os ao campo magnético da terra. Esses indicadores orientam o deslocamento das bactérias para as regiões mais ao norte onde há menos oxigênio, condição boa para sua sobrevivên- cia. A função desse sistema sensório primitivo é o de indicar onde se encontram as condições boas para essas bactérias, no caso, as condições anaeróbicas da água. Sistemas desse tipo seriam sistemas de representação natural. Segundo Dretske, os comportamentos instintivos são frutos do desenvolvimento de mecanismos que se desen- volveram, provavelmente, por seleção natural através de muitas gerações graças aos benefícios que trouxeram aos seres em que ocorrem. As plantas também usam seus mecanismos represen- tativos para regular o próprio comportamento, ainda que, sem intencionalidade, como puro mecanismo. O exemplo que Dretske fornece é o de certa planta que altera sua cor de vermelho para branco em função dos polinizadores. Os beija-flores são atraídos na primavera por flores vermelhas e migram no fim dessa estação. Restam, então, as mari- posas que preferem as flores brancas. Há um mecanismo nessa espécie de planta que detecta a alteração da estação e desencadeia a alteração da cor. É um tipo de “relógio bo- tânico”, nos diz Dretske, que representa de forma acurada uma variação, a registra e modifica seu comportamento. Esse processo muito provavelmente favoreceu sua polinização ao longo do tempo em que o mecanismo se fixou. O que não existe, no caso das plantas, é um agente intencional que apreenda o sentido do que está sendo representado. Ela está mais próxima da atividade representativa presente nos animais do que de um instrumento, porque esse remete a FILOSOFIA.indb 111 27/11/06 11:34:47 I I C O G N I C I Ó N Y E V O L U C I Ó N [112] um outro ser que o concebeu e o utiliza. A planta utiliza o seu indicador para gerar ou alterar seu comportamento, ainda que seja através de um puro mecanismo, pois elas mudariam de cor ainda que seu comportamento, por uma razão ou por outra, não tivesse sucesso em atrair poliniza- dores (Dretske 1999, 26). Para Dretske, a função de indicação que surge com os sistemas naturais é o eixo de sustentação dos modos de re- presentação verdadeiros e mais sofisticados, presentes nos indivíduos capazes de aprender. Mesmo nos processos cog- nitivos genuínos de representação, originados por meio de aprendizado, em que se pode falar propriamente de crenças, há uma parte que tem papel causal e que responde pela propriedade indicadora que carrega informação. Um estado interno torna-se uma crença ao adquirir con- teúdo semântico, um sentido.Isso ocorre quando a compo- nente de seu poder indicativo natural adquire relevância explicativa. Então, uma crença é um indicador cujo sentido natural foi convertido em uma forma não natural, na medi- da em que ela passou a ter a tarefa de explicar a ação ou o comportamento M. É apenas no caso dos animais que podemos falar de representação no sentido próprio do termo, que podemos falar de conceito ainda que numa dimensão não lingüística. Portanto, a condição para haver representação é o apren- dizado, ou seja, a ruptura com os mecanismos automáti- cos. Aprender é gerar uma representação interna (Dretske 1995a, 99). Dretske oferece dois exemplos que servem para ilustrar o fenômeno da representação entre animais, um extraído da biologia, outro um experimento de pensamento. O da biologia refere-se a um pássaro que se alimenta da borbo- leta monarca, produtora de um leite tóxico capaz de causar vômitos na ave. Depois de uma ou mais experiências des- FILOSOFIA.indb 112 27/11/06 11:34:47 Função natural e indicação – a atividade de representação em Fred Dretske [113] K a rl a C h e d ia k agradáveis de se alimentar dessa borboleta, o pássaro passa a evitá-las. Porém, há outra espécie, Viceroy, que simula as cores da borboleta Monarca, como forma de defesa contra predadores. O pássaro evita comer a Viceroy também. O outro exemplo diz respeito a um hipotético animal denominado Buster que viveria num lugar em que haveria vermes chamados Furms. Buster seria capaz de perceber as qualidades dos Furms, do tipo cor, forma, movimento, textura, etc. No entanto, Buster não nasceu com nenhum mecanismo para interagir com Furms, por isso, sua presença passa despercebida até o dia em que, acidentalmente, cheira um Furm vermelho e tem uma sensação desagradável de dor no nariz. Buster passa a evitar Furms vermelhas, mas quando cheira o verde passa tem a mesma sensação, então, passa a evitar Furms em geral. Em ambos os exemplos, processo é o mesmo. Tanto a ave, quanto Buster, passam a evitar os animais ameaçadores porque aprenderam com a experiência que aquele animal, que são capazes de reconhecer, causou-lhes danos. A expli- cação, diz-nos Dretske, é que se formou uma representação interna que passou a ser utilizada em outras experiências. Nada de semelhante ocorre no caso dos instrumentos, das plantas ou das bactérias, porque seus mecanismos não se alteram com a experiência. No caso das plantas, até pode haver alteração ao longo das gerações, mas não se trata de aprendizado que só ocorre no indivíduo. Já no caso dos ani- mais, algo se formou e passou a controlar o seu comporta- mento e isso é representação no sentido próprio, não apenas porque explica causalmente o comportamento da ave, mas porque tem um sentido e é esse que explica o poder causal da representação: Então, a história causal parece ser essa:um R (repre- sentação interna) que significa M causa evitação por significar M. Um estado significativo não apenas causa o FILOSOFIA.indb 113 27/11/06 11:34:47 I I C O G N I C I Ó N Y E V O L U C I Ó N [114] comportamento (isso também é verdadeiro para o ter- mostato e a planta), seu sentido explica o porque está causando isso. O sentido é então explanatoriamente re- levante para o por que de o pássaro estar se comportando do jeito que está. (Dretske 1999, 29) Para Dretske, a capacidade de aprender é suficiente para caracterizar a apreensão de um conceito. Por mais ru- dimentar que seja, é suficiente para sustentar a existência de crença. Bluster seria capaz de identificar algo como um Furm e evitá-lo, sem que isso requeresse autoconsciência ou linguagem proposicional, exigindo apenas aquisição de representação interna por meio de aprendizagem. Há aprendizado quando a ação ou o comportamento depende da presença dessa representação interna, conceitual, que se forma a partir da relação de indicação com certo estado de coisa. A existência dessa relação de indicação é essen- cial, ela é o mecanismo interno sensível à presença ou à ausência desse estado de coisa. A indicação seria comum a toda e qualquer forma de representação. Um termômetro tem de ser sensível à temperatura externa; uma planta que precisa encontrar a luz tem de ser sensível à luminosidade, o animal que tem de evitar o obstáculo tem de ser sensível a eles. O mesmo valeria com relação ao aprendizado: a ave que evita a borboleta venenosa ou a criança que corre para mãe e não para outra pessoa desenvolveram sistemas de indicação. O aprendizado confere função aos indicadores, com isso, sentido e também papel causal. A indicação tem de ser entendida como uma espécie de representação natural, embora, rigorosamente, ela não seja representação. O indicador, enquanto signo natural, caracteriza-se por não poder ser falso. A representação, ao contrário, pode ser falsa. Pode haver representação de P sem que P seja o caso, mas não pode haver indicação de P sem que P seja o caso. De acordo com Dretske, há uma relação FILOSOFIA.indb 114 27/11/06 11:34:47 Função natural e indicação – a atividade de representação em Fred Dretske [115] K a rl a C h e d ia k de dependência necessária entre a representação e a indi- cação, pois é essa última que possibilita a representação. 4. D I S C U S S à O Para Dretske, a indicação está presente na relação que os seres vivos mantêm com o mundo exterior e essa seria a úni- ca solução possível para o “problema do projeto” (the design problem), quando se considera que as espécies, ao invés de terem sido criadas, evoluíram e tiveram de ser supridas com algum tipo de mecanismo que fosse sensível à presença ou à ausência de uma condição F: Apenas se tal indicador existe é possível solucionar o problema do projeto. Não se consegue que um sistema faça M, nas condições F, a menos que haja algo nele que indique quando essas condições existem (Dretske 1995a, 97). Essa dependência da representação natural em relação à indicação é, no entanto, questionada por vários autores como, por exemplo, Godfrey-Smith. Para esse autor, não seria correto recuperar uma compreensão tão forte de co- rrespondência, como a que está presente no conceito de indicação, apoiando-se no conceito de adaptação e de função biológica. A tese de Dretske de que a função biológica gera mecanismos de indicação que teriam surgido na história evolutiva da espécie e que explicariam o sucesso evolutivo desses mecanismos é problemática porque há casos, e não são poucos, em que a adaptação segue outros caminhos. A argumentação de Godfrey-Smith baseia-se na tese de Dretske de que não pode haver indicação nem representação sem que haja certo grau de confiabilidade na relação entre o sistema de indicação e o fator por ele indicado. Em Explaining Behavior, Dretske não exige que a indicação satisfaça todos os casos e adota uma perspectiva estatística, em que a exigência FILOSOFIA.indb 115 27/11/06 11:34:47 I I C O G N I C I Ó N Y E V O L U C I Ó N [116] mais suavizada é a de que haja regularidade suficiente para que se gere a relação de indicação: Correlações acidentais entre duas variáveis, não importa o quanto durem, não são suficientes. Para que uma coisa indique algo sobre outra, a dependência deve ser genuína (Dretske 1995a, 57). Para Godfrey-Smith, ainda assim seria um erro sustentar que a indicação tem um papel relevante para a compreensão da representação natural. Isso ficaria demonstrado quando se consideram os casos em que os estados internos não são suficientemente confiáveis para satisfazer a exigência mí- nima de indicação. Porém, também seria contra-intuitivo recusar-lhes o estatuto de estados representativos (Godfrey- Smith 1992, 297). No entanto, se seguirmos a tese de Dretske de que ha- vendo baixa confiabilidade, não há indicação e que não ha- vendo indicação, não há representação, essa conseqüência é inevitável. Godfrey-Smith fornece como exemplo o caso dos animais predadores que manifestam fraca correlação de confiabilidade com a presa. Isso pode ocorrer em uma população de presa que tenha desenvolvido uma camufla- gem altamente sofisticada, dificultando ou até impedindo que o predador desenvolva um indicador com alto grau de confiabilidade. A espécie pode até desenvolver a melhor correlação possível com a presa e ainda assim não conseguir ultrapassar a baixa confiabilidade. Essa discussão apresenta-se no livro Explaining be- havior, quando Dretske retoma numa nota o comentário crítico a seu conceito de indicação feito por Elliott Sober, cujo conteúdo é bem semelhante ao desenvolvido por Go- dfrey-Smith. Sober afirma não ser possível correlacionar diretamente a representação com o estado de coisas, ou seja, tomá-la como representação verdadeira desse estado de coisas. No caso de uma planta que germina na prima- FILOSOFIA.indb 116 27/11/06 11:34:48 Função natural e indicação – a atividade de representação em Fred Dretske [117] K a rl a C h e d ia k vera, não seria correto considerá-la como um indicador da primavera. Segundo o autor, a correlação estabelecida pela seleção se dá entre os competidores: “Um estado não precisa correlacionar-se confiavelmente com a primavera, portanto, não precisa indicar a chega- da da primavera, de modo a estar suficientemente bem correlacionado com a chegada da primavera a ponto de conferir uma vantagem a seu possuidor” (Dretske 1995a, 90, nota 7). Exemplos como esse descrito por Sober, em que a repre- sentação possui um baixo grau de confiabilidade e que não há indicador, podem ser suficientes e, às vezes, até benéficos em termos evolutivos. Eles exemplificam os casos em que se busca a melhor correlação possível com o ambiente, ainda que essa seja fraca e não gere um indicador. No entanto, o ponto forte da argumentação de Godfrey- Smith refere-se aos casos em que o organismo não quer o indicador, nem o melhor disponível, mas quer mesmo a co- rrelação fraca, por ser ela mais adaptativa. Trata-se, por exem- plo, dos “falsos positivos”, em que se produz C na ausência de F e dos “falsos negativos”, em que não se produz C na presença de F. Um exemplo de falso positivo é dado por Kim Sterelny em seu livro The Representational Theory of Mind, ao comentar a crítica de Ruth Millikan e de Godfrey-Smith ao conceito de indicação de que é possível haver um dispo- sitivo ou mecanismo que representa F, mesmo quando ele não tem poder de indicação. É o caso da representação de um predador feita por um coelho. Esse representa raposa muitas vezes em que não há raposa nenhuma. O raciocínio é o de que um coelho que representa uma raposa quando não há raposa perde pouco, mas um coelho que não representa a raposa quando há uma raposa, perde tudo. Então, pode ser uma função do coelho representar raposas, mas não indicar raposas, já que um movimento suspeito poderia ter sido pro- FILOSOFIA.indb 117 27/11/06 11:34:48 I I C O G N I C I Ó N Y E V O L U C I Ó N [118] vocadopor um outro animal, como diz Sterelny e, nesse caso, o movimento indica esse animal, mas a representação é de raposa (Sterelny 1990, 123). Desse modo, muitos detectores de predador ou de presa usam mecanismos de baixa confiabi- lidade, pois seria mais adaptativo deflagrar comportamentos de ataque ou de fuga com grande freqüência do que desen- volver sistemas de detecção de alta confiabilidade. Embora seja mais raro do que um falso positivo, o falso negativo também pode ser benéfico evolutivamente e oco- rrer na natureza. Um exemplo citado por Godfrey-Smith é o de uma fêmea que, às vezes, evita copular com o macho apropriado. A explicação é que o custo em copular com um macho de outra espécie e gerar uma prole infértil é muito maior do que deixar passar, por causa de um falso negativo, um macho apropriado (Godfrey-Smith 1992, 303). Desse modo, a indicação não é o único nem é o principal fator, e talvez até seja inadequado, para explicar as respostas adaptativas existentes entre os seres vivos. Para Godfrey- Smith, a verdadeira explicação de porque C causa M envolve uma complicada rede de relações de custo e benefício que não pode ser satisfeita apenas com o fato de que C indica F. Sua posição é a de que o conceito de indicação deve ser rejeitado por ser inteiramente inadequado para lidar com explicações sobre a função do conhecimento na natureza e sobre adaptação. Ele não propõe o abandono do conceito de representação, mas considera que esse deve ser tratado sem se recorrer ao conceito de indicação. O caminho seria tentar combinar, como procura fazer no desenvolvimento de sua tese sobre a “complexidade ambiental”, a visão natu- ralista com a pragmática, sustentando que a mente tem as propriedades confiabilistas, defendidas pelos naturalistas e o interacionismo próprio dos pragmatistas que compreendem a mente a partir da sua interação com a exterioridade e con- sideram que o modo de se representar o mundo depende e deriva dessa forma pela qual interagimos com ele. FILOSOFIA.indb 118 27/11/06 11:34:48 Função natural e indicação – a atividade de representação em Fred Dretske [119] K a rl a C h e d ia k R E F E R Ê N C I A S B I B L I O G R Á F I C A S Dretske, F. 1995a. Explaining Behaviour. Reasons in a World of Causes, Cambridge (MA): MIT Press. ______ 1995b. Naturalizing the Mind, Cambridge (MA): MIT Press. ______ 1999. Machines, plants and animals: the origins of agency, Erkenntnis 51: 19-31. ______ 2000. Perception, Knowledge and Belief. Selected Essays, Cambridge: Cambridge Univ. Press. Godfrey-Smith, P. 1992. Indication and adaptation, Synthese 92: 283-312. ______ 1994. A modern history theory of function, Noûs, 28 (3): 344-362. ______ 1998. Complexity and the Function of Mind in Nature, Cambridge: Cambridge Univ. Press. James, W. 1989. Pragmatism, São Paulo: Nova Cultural. Millikan, R. 1984. Language, Thought, and other Biological Ca- tegories. New Foundations for Realism, Cambridge (MA): MIT Press. ______ 1989. In defense of proper function, Philosophy of Science 56: 288-302. Neander, K. 1991. The teleological notion of function, Australa- sian Journal of Philosophy, 69: 454-468. Sober, E. 2000. Philosophy of Biology, Colorado: Westview Press. Sterelny, K. 1991. The Representational Theory of Mind. An in- troduction, Cambridge: Blackwell. ______ 1997. Where does thinking come from? A commentary on Peter Godfrey-Smith’s Complexity and the function of mind in nature, Biology and Philosophy 12: 551-566. Walsh, D. 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La selección natural constituye una explicación natura- lista (en lugar de sobrenaturalista) de las adaptaciones exhi- bidas por los seres vivos, tanto en su estructura anatómica y organización funcional, como en su comportamiento. Los diseños de los organismos y las funciones que desempeñan sus diferentes partes son, así, explicados sin que se apele a ningún tipo de providencialismo, a lo que Dennett (1995) 1 Una primera versión de este artículo apareció originalmente en por- tugués con el título ‘O programa de uma epistemologia evolutiva’. En: Revista de Filosofia (Curitiba), vol 16, n. 18, p.11-55, 2004. La traducción estuvo a cargo de Alejandro Rosas. Se publica con permiso del autor y la revista. FILOSOFIA.indb 121 27/11/06 11:34:49 I I C O G N I C I Ó N Y E V O L U C I Ó N [122] llamó ‘skyhooks’ – que podríamos traducir como ‘ganchos colgados del cielo’. Con la selección natural, Darwin des- cubrió un modo de explicar la complejidad adaptativa sin presuponer la intervención milagrosa de una inteligencia diseñadora. La selección natural puede, al mismo tiempo, ser vista como una explicación mecanicista (o mecanística) de las adaptaciones observadas en los seres vivos.2 Las explicacio- nes teleológicas (que recurren a causas finales) – que fueron tradicionalmente propuestas para los fenómenos del mundo animado, para el origen, desarrollo y funcionamiento de los seres vivos – pudieron también, de ese modo, ser rechazadas por la biología. Antes de proseguir, conviene recapitular, brevemente, lo que distingue la evolución darwinista de la evolución según Lamarck.3 En la evolución lamarckiana el individuo se adapta al medio ambiente durante el lapso relativamente corto de su existencia. El organismo transmite, entonces, las caracterís- ticas adquiridas a sus descendientes. La causa de la variación adaptativa es, de forma directa, el medio ambiente. Este 2 Aunque mecanística, la explicación con base en la selección natural presenta características diferentes de las explicaciones mecánicas típi- cas propuestas por otras ciencias naturales, como la física por ejemplo. No exploraré este punto, que excede el tema de este artículo. 3 No estoy interesado en ser fiel, históricamente, al modo como Darwin y Lamarck formularon sus teorías, pero sí en una traducción más abstracta de sus contribuciones, en tanto dos modalidades distintas en que se puede explicar un proceso evolutivo. Es importante, en ese contexto, distinguir la evolución (por ejemplo, de las especies biológi- cas) en cuanto hecho, de las explicaciones que se pueden proponer para ese hecho. Mi énfasis está, aquí, en distinguir tipos de explicación de la evolución, y no en ofrecer evidencias a favor de la existencia de procesos evolutivos. FILOSOFIA.indb 122 27/11/06 11:34:49 El programa de una epistemología evolucionista [123] P a u lo A b ra n te s ‘instruye’ (informa) al organismo acerca de cómo aumentar su adaptación. Si se usan (anacrónicamente, claro) los conceptos de la genética, sería lamarckiana la tesis de que las modificacio- nes en el fenotipo (como consecuencia de sus interacciones con el medio ambiente) causan variaciones en el genotipo, transmitiéndose así a la descendencia. La información ‘flu- ye’ del medio ambiente hacia el fenotipo, y de éste hacia el genotipo. Es en ese sentido que se debe entender la tesis de que, en el lamarckismo, el medio ambiente instruye al organismo respecto de las modificaciones (variaciones) que son adaptativas (configurando una ortogénesis4). En otras palabras: en el lamarckismo hay acoplamiento entre las va- riaciones y las presiones selectivas ambientales. En la evolución darwinista, en cambio, la fuente o causa de la variaciónadaptativa no es el medio ambiente, que simplemente ejerce el papel de seleccionar las variaciones generadas autónomamente, ‘ciegamente’ (de modo no infor- mado) por los sistemas biológicos (ver figura 1). Las varia- ciones no son, por tanto, instruidas (dirigidas) por el medio ambiente. Hay desacoplamiento entre los mecanismos de selección y de variación. En otras palabras, la generación de variaciones no está correlacionada con informaciones res- pecto de lo que puede o no ser útil al sistema, informaciones respecto de posibles soluciones a los problemas adaptativos. El darwinismo, al defender que el proceso de variación es ciego, rechaza por tanto la ortogénesis. En el darwinismo (si se me permite, de nuevo, ser ana- crónico) las modificaciones fenotípicas (que ocurren a lo largo de la vida de un organismo individual, en su ontogé- 4 La ortogénesis corresponde a la tesis de que las variaciones se dan en direcciones que garantizan la adaptación del individuo al medio ambiente. FILOSOFIA.indb 123 27/11/06 11:34:49 I I C O G N I C I Ó N Y E V O L U C I Ó N [124] nesis) no causan, directamente, cambios en el genotipo. La información no fluye del medio ambiente hacia el fenotipo, y de éste hacia el genotipo, como en el lamarckismo. Indirectamente, es claro que también en la evolución darwinista el medio ambiente tiene el papel de afectar la distribución estadística de los genes en una cierta población (o sea, en la filogénesis). Pero eso se da por la selección de los fenotipos – o, si ustedes quieren, de los organismos (seres vivos) individuales – que funcionan como vehículos para cier- tos genotipos. Los fenotipos, no los genotipos, son quienes interactúan causalmente con el medio ambiente externo. Los fenotipos son seleccionados en función de su mayor o menor grado de adaptación que condiciona, a su vez, su potencial de reproducción. Cuantos más descendientes deja el organismo, mayor es la participación de sus genes en la distribución ge- nética de la población. Para el darwinismo no hay adaptación ideal, absoluta, de un organismo. La adaptación de un ser vivo es siempre local, relativa a un medio ambiente particular. Si se pre- sentan cambios en las características del medio ambiente, el organismo puede dejar de estar adaptado. Tampoco hay progreso en la evolución, o sea, una línea ascendente, como creía Lamarck. Por otro lado, en el darwinismo la evolución tiene un carácter estadístico: tenemos que hablar siempre de poblaciones y de la distribución de características en una población, lo que dificulta la comparación con una concep- ción lamarckiana de evolución. La evolución darwinista se expresa en la población, y no en el desarrollo de un individuo particular. Resumiendo, las distinciones entre los dos tipos de evo- lución (o mejor, entre tipos de explicación para las adapta- ciones) pueden hacerse con base en: a) la dirección en la que fluye la información; FILOSOFIA.indb 124 27/11/06 11:34:49 El programa de una epistemología evolucionista [125] P a u lo A b ra n te s b) el mecanismo de variación (si es ciego o no; si hay o no acoplamiento entre variación y presión selectiva); c) el papel que desempeña el medio ambiente en cada tipo de evolución (si es instruyendo o seleccionando); La explicación darwinista de la evolución (que postula lo que llamaré, en adelante, ‘proceso selectivo’) implica tres sub-procesos: variación, selección y transmisión (o reten- ción) de características. Las explicaciones propuestas por Lamarck para la ‘evolu- ción’ de los seres vivos fueron, sin duda, un avance en direc- ción al mecanicismo.5 Pero, aparte de comprometerse con la ortogénesis –es decir, con la idea de una dirección en la evolución de los seres vivos–, ella no explica por qué las mo- dificaciones ocurridas en el individuo, durante su desarrollo, deban ser adaptativas. Apelar a una instrucción del medio ambiente –que indicaría, de algún modo, cómo el organismo debe modificarse para volverse más adaptado– puede resul- tar tan insatisfactorio como apelar a explicaciones providen- cialistas, llevando a autores como Cziko (1995) a defender que, en el contexto del instruccionismo, las adaptaciones también terminan siendo milagros. Además, Lamarck no 5 Lamarck mantuvo, sin embargo, sus compromisos providencialistas (sobrenaturalistas): los organismos tienen una adaptación perfecta al medio ambiente por haber sido diseñados por Dios. Lamarck creía que hay una tendencia, innata a todos los seres vivos, de ascender en la escala de complejidad y de perfección. También tendría origen divino la tendencia progresiva que creía ver en la ‘evolución’ de los seres vivos. Por tales connotaciones, Darwin prefirió no usar el término ‘evolución’ en el Origen de las Especies, sino la expresión ‘descenden- cia con modificación’. La noción de evolución, como la utilizamos hoy en día, tiene su significado ligado al proceso darwinista de selección natural. Su uso en el contexto lamarckista sólo puede, actualmente, ser metafórico, de ahí el uso que hago de comillas cuando hablo de ‘evolución’ en este contexto. FILOSOFIA.indb 125 27/11/06 11:34:50 I I C O G N I C I Ó N Y E V O L U C I Ó N [126] explicó cómo las modificaciones, supuestamente adaptativas, son transmitidas a la descendencia.6 Finalmente, el carácter revolucionario de la explicación darwinista para la complejidad adaptativa puede también verse en su manera de evitar cometer petición de principio, es decir, la falacia de asumir (de modo, en general, implícito) justamente aquello que se pretende explicar. Sería cometer petición de principio, en este caso, presuponer un sistema con igual o mayor complejidad adaptativa que el sistema a ser explicado; o también, invocar algún conocimiento previo (‘pre-ciencia’, pre-visión o anticipación), cuyo origen no sea elucidado, para explicar las adaptaciones reveladas por los organismos.7 A partir de esas distinciones fundamentales entre el darwinismo y el lamarckismo en biología, se pueden arti- cular dos tipos abstractos de explicación – conocidas como seleccionismo e instruccionismo, respectivamente – que son abstractas por no hacer referencias directas a las propie- dades o procesos biológicos. Esas formulaciones abstractas, pueden ser utilizadas como modelos para explicar fenóme- nos adaptativos en otras áreas, como en la psicología y en la epistemología8. 6 Es preciso reconocer que Darwin tampoco llegó nunca a una expli- cación aceptable de la herencia y no tuvo conocimiento de los trabajos de Mendel, que sólo fueron redescubiertos en el siglo XX. 7 Las motivaciones naturalista, mecanicista y la de evitar la petición de principio en las explicaciones no son motivaciones del todo inde- pendientes, sino que se relacionan de muchas maneras, como debe quedar claro en las discusiones que hago en esta sección. Pero creo que es útil discutirlas cada una por separado. 8 ‘Epistemología’ es usado en este texto en su sentido usual de teoría del conocimiento. FILOSOFIA.indb 126 27/11/06 11:34:50 El programa de una epistemología evolucionista [127] P a u lo A b ra n te s 2. M O T I VA C I O N E S D E L S E L E C C I O N I S M O E N P S I C O L O G Í A Una rápida incursión en procesos simples de aprendizaje tal vez pueda elucidar mejor la distinción entre instruccionis- mo y seleccionismo en tanto tipos abstractos de explicación para adaptaciones en general. Creo que también ilustra la motivación de no admitir petición de principio, que lleva a adoptar una explicación de tipo seleccionista para fenóme- nos adaptativos. Se puede ver el aprendizaje como un proceso en el cual los patrones de comportamiento exhibidos por un individuo (organismo, sistema cognitivo, etc.) se vuelven gradualmente más adaptados a las condiciones del medio ambiente en que se sitúa. Considérese la diferencia entre el condicionamiento operante y el pavloviano. En este último, el individuo que presenta un determinado patrón conductual ante un estí- mulo (por ejemplo, un can que saliva ante deun pedazo de carne) aprende a exhibir ese mismo comportamiento en respuesta a otro estímulo (por ejemplo, el sonido de un pito) que le sea presentado concomitantemente al estímulo anterior. De ese modo, el individuo (ej. un animal) aprende a responder a otro estímulo (el sonido, o estímulo condi- cionado) de la misma manera como respondía al estímulo anterior (o incondicionado). En este caso, se puede decir que hay una instrucción al individuo por el medio ambiente, que le exhibe dos estímulos concomitantemente, de modo análogo a lo que ocurre en el caso de la explicación lamarc- kiana (instruccionista). El instruccionismo, por tanto, puede explicar algunas adaptaciones del comportamiento (como en el condiciona- miento pavloviano), pero no es capaz de explicar el aprendi- FILOSOFIA.indb 127 27/11/06 11:34:50 I I C O G N I C I Ó N Y E V O L U C I Ó N [128] zaje de comportamientos nuevos y complejos.9 Para esto se requiere el otro tipo de condicionamiento: el operante. En el condicionamiento operante, el animal presenta es- pontáneamente, aleatoriamente,10 un comportamiento que es, en seguida, reforzado o castigado. El comportamiento inicial no es causado por un estímulo externo. Las condicio- nes ambientales solamente seleccionan el comportamiento, volviéndolo más frecuente (por el refuerzo) o menos fre- cuente (por el castigo). Puede decirse, de otro modo, que los efectos del comportamiento o bien aumentan, o bien disminuyen la probabilidad de que se repita. Ya Skinner percibió la analogía entre la llamada ‘ley del efecto’ y la selección natural darwiniana.11 Dennett refuerza esa analogía (1975, 73): en el condicionamiento operante, las variaciones en los patrones de comportamiento, presentadas de forma inicialmente aleatoria, son seleccionadas por las 9 Nótese que en el condicionamiento pavloviano el individuo no apre- nde una nueva respuesta. Él aprende a asociar una respuesta antigua (al estímulo incondicionado) a un nuevo estímulo (condicionado). 10 Es una simplificación afirmar, como hago aquí, que la emisión de comportamientos es aleatoria. Distinguiré, en adelante, entre vari- ación ciega y aleatoria, con el fin de reconocer que siempre hay una canalización de las variaciones. Por ahora, esa simplificación tiene el fin didáctico de aproximar el condicionamiento operante a una modalidad básica de proceso selectivo. 11 El psicólogo Thorndike fue el primero en enunciar esta ley que puede ser formulada, simplificando, en los siguientes términos: las respuestas conductuales reforzadas son repetidas con mayor frecuencia. Skinner, aparentemente, vio más que una simple analogía entre esta ley y la selección natural darwinista; habría una continuidad entre el proceso de condicionamiento operante y el proceso de selección natural (ver Dennett 1985, 374). Es evidente que las capacidades de aprendizaje tienen, por su vez, que ser explicadas por un proceso, también dar- winista, ocurriendo en tiempo filogenético. Ver la nota 12. Pero no es sólo en este sentido, creo, que Skinner habla de continuidad. FILOSOFIA.indb 128 27/11/06 11:34:50 El programa de una epistemología evolucionista [129] P a u lo A b ra n te s condiciones ambientales (ver las criaturas skinnerianas en la figura 2). El individuo, inicialmente, no tiene idea (pre-cien- cia) de los efectos de su comportamiento. No recibe, tampoco, ninguna instrucción del medio ambiente con respecto a esos efectos, como es el caso en el condicionamiento pavloviano. Dennett va más allá y defiende que algún tipo de selec- cionismo, en algún nivel, puede ser inevitable, necesario para que se explique el aprendizaje sin cometer petición de principio. Lo mismo vale para que se explique, de modo aceptable, cualquier manifestación de inteligencia y de creatividad genuinas. Pues la explicación seleccionista no presupone, por ejemplo, un conocimiento previo (de las condiciones ambientales y de cómo responder adaptativa- mente a ellas) y no comete petición de principio postulando la existencia de homúnculos que guían el comportamiento observado (y que poseen una inteligencia, racionalidad, pre- visión, etc. cuyo origen no es, a su vez, explicado).12 Para explicar el aprendizaje de comportamientos nuevos y complejos sin cometer petición de principio, es preciso tener en cuenta dos sub-procesos desacoplados: generar y poner a prueba. El condicionamiento operante, como vimos, posee esa estructura: el organismo ‘genera’ comportamien- tos y el medio ambiente los ‘pone a prueba’ (selecciona). En lo que concierne a la explicación de la creatividad, Dennett toma prestada de Paul Valéry la fórmula: “se nece- sitan dos para inventar cualquier cosa”, un generador y un selector/probador (1975, 71). Lo generado puede ser, por ejemplo, un comportamiento o una idea. Sin embargo, se 12 Se pueden ver las mentes de diferentes tipos y sus propiedades (que pueden llegar a caracterizar alguna forma de inteligencia) como te- niendo la función de aumentar la adaptabilidad de los organismos y su flexibilidad conductual. Esta tesis puede sugerir una estrategia para explicar cómo evolucionaron las mentes (y los procesos cognitivos que las caracterizan). Ver también nota 21. FILOSOFIA.indb 129 27/11/06 11:34:51 I I C O G N I C I Ó N Y E V O L U C I Ó N [130] exige que el generador actúe, en última instancia, de modo arbitrario, fortuito, aleatorio, ciego (sin conocimiento pre- vio),13 injustificado, no intencional. En caso de que el generador presente un grado de cla- rividencia, de conocimiento, de creatividad, de intencio- nalidad, de inteligencia –generando solamente candidatos plausibles, justificados, por ejemplo comportamientos o ideas al mismo tiempo nuevas y adecuadas– eso debe ser explicado por procesos selectivos ocurridos previamente. Esos procesos selectivos anteriores explicarían cómo fue adquirido ese conocimiento, sea por aprendizaje a lo largo de la historia ontogenética del individuo, sea como resulta- do de procesos selectivos ocurridos a lo largo de la historia filogenética (en caso de ser innato el conocimiento). En otras palabras, se exige que toda y cualquier adaptación sea explicada. Si esta última supone alguna adaptación previa, también tiene que ser explicada y así sucesivamente, hasta llegar a un generador que actúe sin ninguna pre-visión, sin capacidad de escoger, por tanto de modo completamente aleatorio. A través de esa serie de explicaciones recursivas de cual- quier indicio de inteligencia (pre-visión, etc.) llegamos, en el límite, a generadores que son meros autómatas. Eso no basta, evidentemente, para explicar adaptaciones. Lo ge- nerado tiene que ser seleccionado por algún probador, por un medio ambiente que hace la selección de lo que es o no es adaptativo: En resumen, todo proceso de aprendizaje genuino (o de invención, que es solamente un tipo especial de aprendizaje) debe invocar, al menos en un nivel, pero 13 Hasta aquí vengo utilizando los términos ‘aleatorio’ y ‘ciego’ prácti- camente como sinónimos, pero veremos adelante que se deben dis- tinguir, para una comprensión adecuada del enfoque seleccionista. FILOSOFIA.indb 130 27/11/06 11:34:51 El programa de una epistemología evolucionista [131] P a u lo A b ra n te s probablemente en muchos niveles, el principio de gene- rar-y-poner a prueba (Dennett 1975, 85-6).14 Toda genuina15 capacidad de invención y de aprendizaje implica, por tanto, un elemento de aleatoriedad y otro, críti- co, de elección y de edición. El elemento de crítica puede ser distribuido en diferentes proporciones entre el generador y el probador (este último, o aquél, presentándose como más o menos inteligente e informado). Cuanto más informado, inteligente e intencional sea el generador, más actúa como un homúnculo. Pero la inteligencia y la información que el homúnculo posee, tienen que ser, a su vez, explicadas. Y esa explicación, si no quiere cometer petición de principio, tendrá que prescindir totalmente de homúnculos en algún nivel, recurriendo solamente a un generadoraleatorio (a un autómata) y a un selector.16 Dennett insiste que la seducción que ejerce el princi- pio de la selección natural17 no se debe, primariamente, al hecho de ser mecanístico, materialista, sino al hecho de no cometer petición de principio en la explicación de las 14 En la sección 4-1 discutiré la relación de esta tesis con la distinción que hace Dennett, en trabajos más recientes, entre diferentes tipos de criaturas: darwinianas, skinnerianas, etc. 15 ‘Genuino’ es un adjetivo para aludir a algo enteramente nuevo, o sea, que no puede ser derivado de alguna información o conocimiento que el sistema ya poseía previamente. 16 Un caso particular de la falacia de petición de principio es, por tanto, la de suponer homúnculos para explicar el origen y/o el funcionamiento de las mentes. 17 Mi opción en este texto fue utilizar el término ‘proceso’ en vez de ‘principio’, mientras que Dennett prefiere este último. Con eso deseo enfatizar que es algo que ocurre en el mundo (y no solamente un elemento de nuestras teorías), como también lo son los varios sub- procesos implicados en la selección natural, todos ellos necesarios para que ocurra la adaptación. FILOSOFIA.indb 131 27/11/06 11:34:51 I I C O G N I C I Ó N Y E V O L U C I Ó N [132] adaptaciones biológicas (Dennett 1975, 73). El principio de selección natural es un modelo disponible para quien esté buscando principios, en otras áreas, que sean satisfactorios en ese aspecto: Darwin explica un mundo de causas finales y de leyes teleológicas con un principio que es, con certeza, meca- nístico pero – de forma más fundamental aún – comple- tamente independiente de significado y de propósito... [el principio de la selección natural] es una condición necesaria de cualquier explicación de propósito que no cometa petición de principio (Dennett 1975, 73). Dennett separa, por tanto, el carácter mecanístico y ma- terialista del proceso de selección natural, de su éxito en evitar la petición de principio. Se podría encontrar algún proceso que no cometiese petición de principio y que, al mismo tiempo, fuese no-mecanístico (si bien él piense que eso es poco probable): No es que nuestro pre-concepto previo en favor del ma- terialismo nos dé una razón para aceptar el principio de Darwin, que es materialista, sino que nuestra aceptación previa de la condición de no cometer petición de princi- pio nos da una razón para adoptar el materialismo, una vez que se percibe que Darwin ofrece una explicación materialista para el diseño [design] y el propósito en la naturaleza, que no comete petición de principio (Dennett 1975, 74). Aunque en esta sección, en la que comenté algunos planteamientos de Dennett, haya un énfasis en el compor- tamiento y en un enfoque conductista, es preciso dejar claro que el seleccionismo no implica la adopción de ese programa particular en psicología.18 Podemos, también, explorar las 18 Por el contrario, se puede defender que una perspectiva evolucionista se contrapone al ambientalismo extremado de los conductistas más FILOSOFIA.indb 132 27/11/06 11:34:51 El programa de una epistemología evolucionista [133] P a u lo A b ra n te s capacidades explicativas del seleccionismo en lo concernien- te, por ejemplo, a los mecanismos y procesos cognitivos. El área de la psicología evolucionista explora en esa dirección: tales mecanismos y procesos serían adaptaciones, resultantes de una evolución a ser explicada por la selección natural.19 Por ejemplo, se puede preguntar cómo evolucionaron las capacidades cognitivas necesarias para que un animal pueda aprender, con base en el condicionamiento, sea pavloviano u operante. En ambos casos, la explicación tendrá que ser seleccionista, y no instruccionista.20 ortodoxos, que niegan tanto los instintos y su base hereditaria, como el recurso a estados internos para explicar el comportamiento animal y humano. Ver, por ejemplo, Laland, K. & Brown, G. (2002). 19 Conviene, en este punto, ser más preciso en cuanto al sentido es- tricto en que ‘adaptación’ será usado en adelante. Una estructura, proceso o comportamiento de un sistema se dice ‘adaptado’ si posee una función para el sistema o aumenta su eficiencia al replicarse. Es preciso, por otro lado, distinguir la adaptación (algo ya obtenido), de la adaptabilidad o capacidad de aumentar la adaptación. Godfrey- Smith resalta que no toda explicación externalista, esto es, de cómo el medio ambiente afecta y moldea la estructura y el funcionamiento de sistemas, posee un carácter adaptacionista. Para ello es preciso ver tal estructura y funcionamiento como una solución, útil para el sistema, de problemas puestos por el medio ambiente. Esta es la perspectiva del seleccionismo que, en esa medida, constituye una modalidad especial de externalismo, distinta, por ejemplo, del instruccionismo de tipo lamarckiano. En este último, el medio ambiente imprime di- rectamente en el organismo cambios que no tienen que ser, necesari- amente, útiles para el sistema, adaptativos, funcionales, teleonómicos (Godfrey-Smith 1998, 49-50). Haré más adelante consideraciones adicionales sobre el uso de términos como ‘externo’ y ‘interno’ en el contexto de las explicaciones seleccionistas. 20 Ver, a ese respecto, la sección 4-1 en la que no solamente presento la distinción que hace Dennett entre diferentes tipos de criaturas, sino también esbozo hipótesis respecto de cómo tales tipos de criaturas pueden haber evolucionado. FILOSOFIA.indb 133 27/11/06 11:34:52 I I C O G N I C I Ó N Y E V O L U C I Ó N [134] 3. M O T I VA C I O N E S D E L S E L E C C I O N I S M O E N E P I S T E M O L O G Í A Paso, ahora, al caso de la epistemología, que es el objeto de este artículo. ¿Qué vendría a motivar, en esta área, la adopción de una perspectiva seleccionista? ¿Cuáles son sus implicaciones? Con base en las discusiones anteriores, podemos esperar que la tentativa de articular un seleccionismo aplicable a la epistemología esté también motivada por una postura al mismo tiempo naturalista y mecanicista, además de rechazar explicaciones que cometan petición de principio. El conocimiento y los procesos que lo generan son consi- derados, por tanto, fenómenos naturales, que deben ser expli- cados empleando los mismos recursos que las ciencias utilizan para explicar otros tipos de fenómenos naturales. Se presupone, además, que la epistemología también en- frenta enigmas adaptativos, problemas relativos a funciones, a diseños, análogos a los problemas adaptativos encontrados en biología y en psicología, que mencioné en las secciones anteriores.21 Campbell, uno de los pioneros en articular un programa seleccionista en epistemología, reconoce explícitamente la 21 Godfrey-Smith (1998) defiende la tesis de que la función de la cog- nición es lidiar con la complejidad ambiental. Los procesos cognitivos de alto nivel implican estados mentales que representan el mundo (por ejemplo, creencias). Se puede extender esa tesis y defender que tales representaciones en sí mismas (con sus propiedades particulares como estados mentales), y no sólo los procesos cognitivos que las generan, son adaptadas en el sentido de desempeñar una función para el sistema cognitivo. Esa función, más específicamente, sería la de hacer el comportamiento del sistema más plástico y adaptable a cambios en el medio ambiente (físico, biológico y social). Para una aplicación de esta tesis al caso particular de la evolución humana, ver Sterelny (2003). FILOSOFIA.indb 134 27/11/06 11:34:52 El programa de una epistemología evolucionista [135] P a u lo A b ra n te s motivación “metafísica” o “metateórica” de ese programa, en especial en lo que concierne a un compromiso mecanicista: comprender procesos que manifiestan propósito sin apelar a milagros, sin la introducción de una “metafísica teleológica” (Campbell citado en Bradie 2001, 41). Bradie traduce la motivación de una epistemología evo- lucionista en los siguientes términos: “... el enigma episte- mológico es solamente una extensiónnatural del enigma biológico...” (2001, 49).22 Una motivación naturalista puede también expresarse en la tentativa de reducir propiedades semánticas y episte- mológicas, como verdad, adecuación empírica, justificación, etc., a propiedades naturales (léase, descritas por las ciencias naturales), como las de función, adaptación, aptitud, etc.23 3-1 . E X P L I C A C I O N E S P R O V I D E N C I A L I S TA S , I N S T R U C C I O N I S TA S Y S E L E C C I O N I S TA S E N E P I S T E M O L O G Í A Admitamos que el conocimiento sea un fenómeno na- tural y con características adaptativas – o sea, que el conoci- miento y los procesos cognitivos que lo generan desempeñan una función para el organismo o sistema cognitivo. Con base en los tipos de explicación caracterizados anteriormente, podemos también distinguir explicaciones providencialistas, 22 Esta no es, con todo, la manera más adecuada de colocar la motivación de una epistemología evolucionista, en la medida en que, como mos- tré en el caso de la psicología, muchas otras áreas del conocimiento lidian con enigmas adaptativos y no solamente, o primariamente, la biología. Es más fructífero ver la explicación seleccionista, propuesta históricamente por Darwin en el dominio biológico, como una ab- stracción, sin compromisos necesarios con un lenguaje biológico o con entidades y procesos biológicos. 23 Sobre las diversas facetas del naturalismo en tanto orientación filosó- fica, ver Abrantes 1998. FILOSOFIA.indb 135 27/11/06 11:34:52 I I C O G N I C I Ó N Y E V O L U C I Ó N [136] instruccionistas y seleccionistas de adaptaciones propiamen- te epistemológicas o cognitivas. 1. El providencialismo en epistemología puede ser ejem- plificado por la teoría platónica del conocimiento como re- miniscencia (anamnesis). El alma es el repositorio de un conocimiento que le es inherente, constitutivo. No se plantea la cuestión de su origen, ni se busca una explicación de sus propiedades adaptativas (ej. la propiedad del conocimiento de ser adecuado a sus objetos). El conocimiento no es, en este caso, explicado; es con- siderado innato y (milagrosamente) adecuado a sus obje- tos. En el providencialismo, simplemente se postula que el agente (o sistema cognitivo) tiene conocimiento, que tiene creencias que son verdaderas y que son justificadas. De modo general, en teoría del conocimiento el infali- bilismo y el fundacionalismo se asocian al providencialismo. Veremos que esas posiciones son recusadas por el seleccio- nismo, y problemáticas en el ámbito del instruccionismo. 2. El instruccionismo en epistemología puede ser ejem- plificado por el empirismo de Locke. La mente es considera- da originalmente como una tabula rasa y el mundo externo transmite (instruye) el conocimiento a través de los sentidos, escribiéndolo en la mente. Uno de los problemas con el instruccionismo en episte- mología consiste en asumir la confiabilidad de los órganos de los sentidos y la validez de las informaciones que ellos transmiten (caracterizándolas como conocimiento). El ins- truccionismo no tiene recursos para explicar esas propie- dades adaptativas, que resultan, así, milagrosas como en el providencialismo. Se supone que la instrucción a través de la experiencia del sujeto (o sistema cognitivo) garantiza la adaptación del conocimiento adquirido al mundo, a los objetos del conocimiento. FILOSOFIA.indb 136 27/11/06 11:34:52 El programa de una epistemología evolucionista [137] P a u lo A b ra n te s El instruccionismo en epistemología está asociado a la pasividad del sujeto en la adquisición del conocimiento: la mente se limita a registrar los datos de los sentidos o, cuando mucho, es capaz de asociarlos mecánicamente y de inducir generalizaciones a partir de esa base empírica. En el caso particular de las teorías científicas, el empi- rismo y el inductivismo son claramente insuficientes para explicar los valores cognitivos, las llamadas ‘virtudes epis- témicas’ que atribuimos a las teorías (como, por ejemplo, la de ser adecuadas empíricamente, verdaderas etc.). El persistente problema de la inducción, anotado por Hume, puede ser reformulado en los siguientes términos: no hay cómo tener certeza tratándose de creencias obtenidas por un proceso instruccionista. Si por ventura esas creencias son adaptadas a sus objetos (por ejemplo, si configuran un auténtico conocimiento), se trata de algo fortuito, milagroso, ya que esa propiedad no puede ser explicada invocándose tal proceso. 3. El seleccionismo en epistemología se apoya en una crí- tica a los enfoques anteriores (providencialista e instruccio- nista), porque éstos no explican lo que debería ser explicado, o porque cometen petición de principio en las explicaciones que proponen para las adaptaciones consideradas pertinen- tes en la epistemología. Es el momento de ser más específico respecto de cuáles son esas adaptaciones pertinentes.24 En lo que concierne a la epistemología, ellas pueden incluir: la adaptación, relativa a aspectos del medio ambiente físico, de los órganos impli- cados en la cognición (ej. los órganos perceptivos), de su estructura y funcionamiento; la adaptación de la actividad cognitiva y de sus productos a los problemas con que el 24 Incluso porque la noción de ‘adaptación’ tal vez sólo tenga realmente sentido dentro de un contexto darwinista-seleccionista. Ver nota 19. FILOSOFIA.indb 137 27/11/06 11:34:53 I I C O G N I C I Ó N Y E V O L U C I Ó N [138] sistema se enfrenta;25 la adaptación de los productos de la actividad científica (ej. teorías) a los valores de la comunidad científica, etc. Menciono, en este pasaje, diferentes procesos y en- tidades que son, por hipótesis, adaptadas (o adaptativas). Además, hay varios modos de concebir cuál sea el medio ambiente selectivo relevante para cada una de ellas. Cada alternativa – cada tipo de adaptación – puede, en princi- pio, requerir un tipo particular de explicación seleccionista. Existen, de hecho, varios intentos de formular epistemolo- gías seleccionistas (evolucionistas), teniendo en cuenta la explicación de modalidades particulares de adaptaciones cognitivas. Lo que tienen en común es el hecho de que rechazan explicaciones providencialistas e instruccionistas de las adap- taciones pertinentes al fenómeno del conocimiento como siendo, en verdad, pseudo-explicaciones. La explicación con base en la selección natural (descrita de modo abstracto) sería el único tipo de explicación aceptable para adaptacio- nes (incluyendo las pertinentes a la epistemología) y para el fenómeno resultante: la evolución (en este caso, la evolución de la cognición y del conocimiento). En particular, es característico del programa seleccionista, como vimos, que rechace como explicación aceptable que el conocimiento sea directamente causado o informado por el medio ambiente físico o cualquier otro tipo de medio ambien- te. En lugar de que el conocimiento sea enseñado al sistema 25 En el caso de la cognición de alto nivel, las soluciones para tales prob- lemas – los productos de la actividad cognitiva – son, típicamente, rep- resentaciones del mundo observable. Cuando tales representaciones tienen el carácter de teorías científicas, ellas pueden también referirse supuestamente a un mundo inobservable. En ambos los casos, se debe explicar la adaptación de esas representaciones mentales a los mundos respectivos (y sus objetos). FILOSOFIA.indb 138 27/11/06 11:34:53 El programa de una epistemología evolucionista [139] P a u lo A b ra n te s cognitivo, por así decir, de fuera hacia adentro, en un único proceso, el seleccionismo propone, como alternativa, dos sub- procesos desacoplados – variación y selección – para explicar el conocimiento (y las adaptaciones correlacionadas).26 En el seleccionismo tenemos, por tanto, un proceso en dos etapas (por lo menos): el agente genera o emite – de forma autónoma, no instruida de fuera – variaciones cog- nitivas y el medio ambiente las selecciona (confirmando o rechazando cada variacióncognitiva, como adecuada o in- adecuada). Las variaciones pertinentes a la epistemología pueden incluir: variaciones en la estructura y en el funcionamiento de los órganos implicados en la cognición, percepciones, procesos cognitivos de alto nivel y/o sus productos (represen- taciones, etc.), comportamientos, métodos, etc. Esas alter- nativas ya habían sido mencionadas arriba, cuando distinguí las adaptaciones pertinentes a la epistemología.27 En el caso de representaciones (ej. teorías), decir que son ‘adaptadas’ puede significar, usando el lenguaje tradicio- nal de la epistemología, que son justificadas (confirmadas) o que son verdaderas. Una de las críticas que se hace al seleccionismo es que la adaptación no garantiza la verdad.28 26 La propia dinámica cognitiva (modificaciones en las estructuras y procesos cognitivos) y del conocimiento (producto de esos procesos) son dinámicas evolutivas que resultan de procesos selectivos. Esas dinámicas son análogas a las que ocurren en la filogénesis en biología. Ver también nota 38. 27 Conviene recordar que las adaptaciones resultan de varias etapas del proceso selectivo, incluyendo el de variación. Una variación se dice ‘ciega’ justamente porque, al ser emitida, nada garantiza que resulte adaptativa para el sistema. 28 Discuto la cuestión del realismo en la conclusión del artículo. Ver, a ese respecto, Hull (2001, 162); Downes (2000); Papineau (2003). Ver también cómo Nagel (1986, 83) combina su racionalismo con una posición claramente seleccionista en epistemología. FILOSOFIA.indb 139 27/11/06 11:34:53 I I C O G N I C I Ó N Y E V O L U C I Ó N [140] Además, ninguna adaptación puede ser considerada absoluta en un proceso evolutivo y, consiguientemente, todo conoci- miento pasa a ser considerado falible. 4. L A S E P I S T E M O L O G Í A S S E L E C C I O N I S TA S D E P O P P E R Y D E C A M P B E L L K. Popper y D. Campbell, de forma independiente y más o menos en la misma época, propusieron versiones muy influ- yentes de epistemologías seleccionistas, con varios puntos en común. Tales propuestas servirán no solamente para ilus- trar los objetivos y las características fundamentales de las explicaciones seleccionistas en epistemología, sino también el(los) modo(s) cómo pueden ser construidas, y las hipótesis que presuponen. 4-1 . P O P P E R : D E L A S M E T Á F O R A S A L PA R A L E L I S M O D E P R O C E S O S S E L E C T I V O S En el libro La Lógica de la Investigación Científica29 hay algunos pasajes en los cuales Popper sugiere una analogía entre la manera como teorías son puestas a prueba y la ma- nera como los seres vivos compiten y son seleccionados de acuerdo con su adaptación diferencial al medio ambiente. Esa analogía es motivada por las críticas de Popper al in- ductivismo, apoyadas en el presupuesto de que no hay una lógica del descubrimiento. En esos pasajes, expresiones prestadas de la teoría da- rwinista, como ‘sobrevivir’, ‘seleccionar’, ‘lucha por la su- pervivencia’, ‘lo más adaptado’, ‘selección natural’, etc. son empleadas metafóricamente. Popper no sugiere que exista una identidad entre la naturaleza de las teorías (o la natu- raleza del conocimiento) y la naturaleza de los seres vivos; 29 La primera edición de este libro, en alemán, data de 1934. La primera edición inglesa es de 1959. FILOSOFIA.indb 140 27/11/06 11:34:53 El programa de una epistemología evolucionista [141] P a u lo A b ra n te s o identidad en el nivel de los procesos específicos por los cuales ambos ‘evolucionan’. Él no pretende resolver proble- mas en epistemología buscando semejanzas estructurales con procesos evolutivos en biología. Su objetivo tampoco es explicativo: las metáforas evolucionistas son usadas me- ramente para ilustrar su metodología falsificacionista. La epistemología presupuesta por Popper en esa fase se puede, entonces, entender como ‘evolucionista’ en un sentido aún metafórico. Para él, las hipótesis y teorías cien- tíficas no son instruidas o dirigidas por la experiencia; en sus términos, ellas no son generadas por un método inductivo, sino de forma ciega, siendo posteriormente seleccionadas por un medio ambiente empírico, por una base empírica compuesta por enunciados de observación.30 La situación cambia a partir de los años 60: Popper deja atrás las inocentes metáforas evolucionistas de su primer libro y aplica el seleccionismo a procesos que ocurren in- ternamente en el sistema cognitivo. Ahora tiene lugar una transferencia crucial de conceptos desde la epistemología hacia la biología: el re-representa la evolución biológica a la luz de conceptos epistemológicos. A partir de ahí, intenta abordar de modo unificado ambos procesos. Popper deja de anotar vagas similitudes entre la diná- mica del conocimiento científico y la evolución de las espe- cies, para defender una continuidad entre esos procesos, comprometiéndose con la tesis de que la evolución de los seres vivos también puede ser vista como un proceso de adquisición de conocimiento. Afirma, entonces, una con- tinuidad fundamental entre los diversos niveles: genético, 30 Este medio ambiente es, por tanto, simbólico, en la medida en que está en la esfera del lenguaje y no de los hechos brutos, no expresados por medio de enunciados. FILOSOFIA.indb 141 27/11/06 11:34:54 I I C O G N I C I Ó N Y E V O L U C I Ó N [142] fenotípico, conductual y el del desarrollo científico propia- mente dicho. Popper espera, en esta fase, ser entendido literalmente cuando afirma que el mecanismo de crecimiento del cono- cimiento es el mismo en la ameba y en Einstein (!?): Con este modo de presentar la situación pretendo des- cribir cómo el conocimiento realmente crece. Eso no debe ser entendido metafóricamente, aunque haga uso, obviamente, de metáforas. La teoría del conocimiento que deseo proponer es en gran medida una teoría da- rwinista del crecimiento del conocimiento. De la ameba hasta Einstein, el crecimiento del conocimiento es siem- pre el mismo: intentamos resolver nuestros problemas y obtener, por un proceso de eliminación, algo que tiende a la adecuación en nuestras soluciones tentativas (Popper 1972, 261). No solamente tenemos a la misma entidad – el conoci- miento – implicada en la dinámica biológica y científica, sino también el mismo método de ensayo y eliminación del error controlando su crecimiento en ambos contextos. Popper afir- ma que los ensayos pueden ser “nuevas reacciones, nuevas formas, nuevos órganos, nuevos modos de comportamiento, nuevas hipótesis” (Popper 1972, 242; Hooker 1995, 132). Popper opone, sistemáticamente, la inducción y el apren- dizaje a partir de la experiencia – en términos de lo que estoy llamando aquí un proceso instruccionista – al aprendizaje por ensayo y error (en una perspectiva seleccionista).31 El aprendizaje por ensayo y error es asociado al modo como 31 Popper no utiliza los términos ‘instruccionismo’ y ‘seleccionismo’, como hago aquí. Pero tiene claramente presentes las distinciones entre diferentes tipos de procesos de aprendizaje que distinguí en la sección 2. FILOSOFIA.indb 142 27/11/06 11:34:54 El programa de una epistemología evolucionista [143] P a u lo A b ra n te s actúa la selección natural darwinista y la metodología fal- sificacionista. El anti-inductivismo de Popper es formulado, en sus últimos trabajos, en términos del proceso de variación ciega: toda conjetura teórica es ciega porque su valor cognitivo no puede apoyarse en un procedimiento de inducción a partir de una base empírica. Una conjetura teórica sólo puede ser evaluada por sus consecuencias empíricas (deducidas de la misma), pudiéndose entonces juzgar en qué medida “se adaptan al medio ambiente (simbólico)”. Este medio ambiente puede incluir otras conjeturas teóricas, así como enunciados de observación. Se trata, por tanto, de un pro- ceso de variación ciega acompañado de selección. Además de concebir la evolución como (un tipo de) cre- cimiento del conocimiento, en su artículo Of clouds and clocks(1965) Popper articula la hipótesis de que los organis- mos son sistemas, compuestos de diversos sub-sistemas que implementan los procesos de variación ciega y de selección (o de “control plástico”): Cada organismo puede ser visto como un sistema jerár- quico de controles plásticos – como un sistema de nubes controladas por nubes. Los sub-sistemas controlados ha- cen movimientos de ensayo y error que son parcialmente suprimidos y parcialmente restringidos por el sistema controlador (Popper 1972, 245). Más aún, en ese artículo afirma que: ... [Mi teoría] consiste en una visión de la evolución como un sistema jerárquico creciente de controles plásticos, y de una visión de los organismos como incorporando – o en el caso del ser humano, evolucionando de modo exo- somático – este sistema jerárquico creciente de controles plásticos (1972, 242). FILOSOFIA.indb 143 27/11/06 11:34:54 I I C O G N I C I Ó N Y E V O L U C I Ó N [144] En la ciencia, de forma análoga, nuestras teorías (con- jeturas), dice Popper, “mueren en lugar nuestro”. Entretanto, sabemos que, dada su metafísica de “tres mundos”, Popper no puede llegar a una descripción real- mente unificada de las dinámicas biológica y epistemológica. El sustenta solamente la existencia de un paralelismo entre lo que acontece en el tercer mundo (el epistemológico) y lo que acontece en los otros dos mundos (el físico y el psicológi- co). No existe una teoría abstracta que pueda ser igualmente instanciada en cada uno de esos mundos. En Popper, ese paralelismo está basado en un “principio de transferencia” que Hooker formula de la siguiente ma- nera: “... lo que es verdadero lógicamente en el mundo3 es verdadero causalmente en el mundo1 y en el mundo2”. 32 Lo que Dennett (1986, 1995) llama “criaturas popperia- nas” es un caso especial de los sistemas de controles plásticos de los que habla Popper. Esas criaturas son capaces de alma- cenar información del medio ambiente (físico y biológico).33 Esa información es utilizada para pre-seleccionar (controlar) las disposiciones conductuales de la criatura. La informa- ción funciona, por tanto, como un medio ambiente selectivo interno (ver figura 3). Por ser capaces de pre-seleccionar disposiciones para el comportamiento que se muestran po- 32 Hooker en (Hahlweg & Hooker 1989, 104). 33 Esa información puede, en ciertos tipos de sistemas, tener el carácter de una representación del medio ambiente externo. Este medio ambi- ente, por otro lado, puede incluir no sólo objetos físicos, sino también otros sistemas cognitivos y seres vivos. Para una epistemología selec- cionista (o evolucionista), constituye un objeto central de investigación saber cómo evolucionarán sistemas capaces de almacenar información sobre el medio ambiente externo con diferentes modos de codificar esa información y de utilizarla en el procesamiento cognitivo. Esas explicaciones tendrán que ser propuestas también en términos de procesos selectivos. Ver también nota 40. FILOSOFIA.indb 144 27/11/06 11:34:54 El programa de una epistemología evolucionista [145] P a u lo A b ra n te s tencialmente dañinas, las criaturas popperianas exhiben un mayor grado de adaptabilidad (o “plasticidad”, para usar el término que prefiere Popper) comparadas con las criaturas “darwinianas” y “skinnerianas”. Las criaturas skinnerianas, contrariamente a las da- rwinianas, son capaces de condicionamiento,34 o sea, de un tipo de aprendizaje a través del cual modifican su comporta- miento de forma adaptativa durante la vida de la criatura.35 Vimos que Skinner y Dennett consideran la “ley del efecto” en psicología como análoga al principio darwinista de la selección natural (ver figura 2). 34 Vimos en la sección 2 que el condicionamiento puede ser pavloviano u operante. La ley del efecto es seleccionista en su carácter y sólo se aplica al condicionamiento operante. Por lo tanto, las criaturas skin- nerianas de que nos habla Dennett son capaces de ese último tipo de condicionamiento. Como todas esas criaturas operan según procesos selectivos, Dennett no menciona criaturas, que podríamos llamar ‘pavlovianas’, que funcionarían según un proceso instruccionista. 35 Las criaturas darwinianas son aquellas que evolucionan en consecuen- cia del proceso selectivo darwinista, en un medio ambiente físico. Podemos, claro, hablar también de ‘aprendizaje’ metafóricamente a lo largo de la escala filogenética. En ese caso, las criaturas darwin- ianas también ‘aprenden’ (no como individuos, sino como especie). En seguida, en la reconstrucción que propone Dennett, surgirán criaturas con la capacidad de plasticidad fenotípica: sólo parte del procesamiento que ocurre en ellas es ‘rígidamente impreso’ [hard- wired], habiendo margen para el aprendizaje y, consecuentemente, para cambios conductuales a lo largo de la existencia de cada criatura individual. Esos cambios conductuales pueden tener implicaciones evolutivas en la medida en que pueden afectar el éxito reproductivo de los individuos dotados de esa capacidad (el llamado ‘efecto Baldwin’). Ese efecto es estrictamente darwinista, y nada tiene de lamarckiano. Ver (Dennett 1995). FILOSOFIA.indb 145 27/11/06 11:34:55 I I C O G N I C I Ó N Y E V O L U C I Ó N [146] a) b) c) a) b) c) Siguen ilustraciones de cómo funcionan, en términos de procesos selectivos, las criaturas darwinianas, skinnerianas y popperianas:36 Figura 1. a) Criaturas darwinianas - diferentes fenotipos ‘rígidamente im- presos’ [hardwired] en su constitución física; b) Selección de un fenotipo, que es favorecido; c) Multiplicación del fenotipo favorecido. Figura 2. a) Criatura skinneriana intenta, de modo ciego, diferentes res- puestas; b) ... hasta que una respuesta es seleccionada por ‘refuerzo’; c) La próxima vez, la primera elección de la criatura será la respuesta reforzada. 36 Adaptado de Dennett (1995, 374-78). medio ambiente medio ambiente medio ambiente medio ambiente medio ambiente medio ambiente FILOSOFIA.indb 146 27/11/06 11:34:56 El programa de una epistemología evolucionista [147] P a u lo A b ra n te s Figura 3. a) Criatura popperiana: posee un medio ambiente selectivo interno que pre-selecciona candidatos a la acción; b) Ya en la primera vez la criatura actúa de manera previsiva (mejor de lo que haría si se comportase de modo aleatorio). Popper también anticipó lo que Dennett llama “criaturas gregorianas”, que incorporan instrumentos (desarrollados por ellas mismas) a su medio ambiente interno, destacando el lenguaje (ver figura 4).37 De ese modo, las criaturas grego- rianas pasan a ser capaces de manipular sus representacio- nes del medio ambiente externo (ej. haciendo simulaciones o encadenando largos raciocinios). Así, ellas aumentan su adaptabilidad, relativamente a los otros tipos de criaturas anteriormente caracterizados. Es razonable suponer que nosotros, humanos, seamos los únicos ejemplos, actualmente existentes, de criaturas gregorianas.38 37 Popper (1972, 329). Sobre la posibilidad de mejorar, de ese modo, nuestro desempeño cognitivo y de ser más optimistas en cuanto a apostar a la verdad como fin cognitivo, ver Papineau (2003, 60). Ver también la discusión del realismo epistemológico que hago al final del artículo. 38 Con las criaturas gregorianas y el advenimiento del lenguaje créanse, también, las condiciones para que ocurra una evolución propiamente cultural, en la cual tales criaturas se tornan vehículos de palabras e ideas (memes) que evolucionan de forma autónoma (una evolución exosomática, esto es, fuera del cuerpo, tesis ya explícita en Popper; ver, arriba, citación del pasaje de la página 242 de su artículo de 1972). Este es el objeto de la ‘memética’ y también se relaciona, en el caso a) b) medio ambiente medio ambiente FILOSOFIA.indb 147 27/11/06 11:34:57 I I C O G N I C I Ó N Y E V O L U C I Ó N [148] Figura 4. Criatura gregoriana asimila instrumentos mentales del medio ambiente (cultural); esos instrumentos mejoran tanto sus generadorescomo sus probadores Esas diversas criaturas que Dennett describe, ade- más de ejemplificar la acción de procesos selectivos en su comportamiento, estructura y/o funcionamiento cognitivo, habrían a su vez evolucionado con base en esos mismos procesos. Dennett las ordena cronológicamente en una “to- rre de generar y poner a prueba”: las criaturas darwinianas precedieron a las skinnerianas, estas a las popperianas, y el surgimiento de las criaturas gregorianas es el más reciente en la escala evolutiva. En vez de “ganchos colgados del cie- lo”, como en las explicaciones providencialistas, tenemos a lo largo de ese proceso la acción de “grúas” (cranes), que, supuestamente, permiten acelerar el proceso de selección natural pero que son, ellas mismas, resultados de un mis- mo proceso de selección natural desarrollándose por vastos períodos de tiempo. de una evolución del conocimiento científico, con lo que Bradie llama una epistemología evolucionista de teorías (ver sección 4-3). Tener también en consideración la hipótesis de Dawkins de un “fenotipo extendido”, en la que los instrumentos, y, de modo general, la cultura, las instituciones, etc. pueden ser vistos como extensiones de nuestro fenotipo biológico. Ver nota 51. medio ambiente cultural FILOSOFIA.indb 148 27/11/06 11:34:58 El programa de una epistemología evolucionista [149] P a u lo A b ra n te s 4-2 . C A M P B E L L : L A I N T E R N A L I Z A C I Ó N D E L P R O C E S O S E L E C T I V O Campbell (1973) amplió el “paradigma de una jerarquía anidada de selección y retención” (nested hierarchy selective retention paradigm) aplicándolo a una amplia gama de pro- cesos, yendo de los niveles más bajos –atómico, molecular y de formas primitivas de vida– hasta procesos de alto nivel en sistemas complejos.39 Él extrapoló ese paradigma para “todos los procesos de conocimiento”: para las diversas modalidades a través de las cuales sistemas con diferentes grados de complejidad incorporan información (“conocimiento”)40 con respecto al medio ambiente. 39 Como señalé, Campbell prefiere usar la expresión ‘epistemología se- leccionista’ para enfatizar que no está comprometido con una analogía con el proceso selectivo darwinista formulado en términos estricta- mente biológicos. Por esta razón prefiero usar, en varios lugares del texto, la expresión que favorece Campbell, en lugar de la más usual, ‘epistemología evolucionista’, que aparece en el título del artículo. 40 Es claramente problemático identificar ‘información’ y ‘conocimiento’. Entre otras cosas, ‘conocimiento’ presupone conciencia, ya que im- plica creencias y otros estados mentales de alto nivel, sin mencionar la cuestión de la justificación (que nos involucra con la discusión entre in- ternalistas y externalistas; ver al respecto Abrantes & Bensusan 2003). Campbell (y creo que muchos naturalistas) están dispuestos a hablar de ‘conocimiento’ aun cuando los estados o procesos implicados son inconscientes, automáticos, ‘hardwired’ (que podríamos traducir por ‘impresos en el circuito’). A este respecto hay un comentario intere- sante de Campbell relativo a un presupuesto que yo calificaría como ontológico, del programa seleccionista: “... Aunque los procesos de conocimiento conscientes del hombre sean reconocidos como más complejos y sutiles que los de organismos inferiores, ellos no son tomados como más fundamentales o primitivos. En esa perspectiva, cualquier proceso guiado por un programa almacenado para la adap- tación de los organismos en ambientes externos es incluido como un proceso de conocimiento, y cualquier mejora en la adecuación de tal FILOSOFIA.indb 149 27/11/06 11:34:58 I I C O G N I C I Ó N Y E V O L U C I Ó N [150] Fue Campbell quien forjó la expresión “selectores vi- carios” [vicarious selectors], refiriéndose a la idea, también presente en Popper, de que la selección de variaciones se efectúa en los diversos niveles, muchos de ellos internos al sistema, en los cuales la selección – que sería de otro modo realizada por el medio ambiente externo – es ejercida por delegación (substitutiva o vicarial) por alguna estructu- ra interna al sistema.41 Alguna estructura de control, que tenga incorporada información sobre el medio ambiente externo (eventualmente en la forma de una representación o modelo), substituye la acción selectiva directa de este am- programa es considerado una mejora en conocimiento. Si el lector prefiere, puede comprender este artículo adecuadamente tomando el término ‘conocimiento’ como metafórico cuando es aplicado a los niveles inferiores de la jerarquía de desarrollo. Pero como el problema del conocimiento – cuando es definido en términos de contenidos conscientes por el filósofo – ha resistido a cualquier solución amplia- mente [generally] aceptada, parece perderse poco y, posiblemente, se gana algo, al extenderse de ese modo la gama [range] de procesos considerados” (Campbell, citado en Bradie 2001, 40-1). Ver también Hull (2001, 165); Papineau (2003, esp. la sección 10). 41 Aunque yo venga utilizando, de forma no ambigua, los términos ‘interno’ y ‘externo’ – en donde la frontera corresponde a los límites del propio sistema cognitivo –, con la noción de ‘selector vicario’ esa frontera se desplaza adentro del sistema y surge, incluso, la posibi- lidad de que existan varias de esas fronteras (en caso de haber un apilamiento de selectores vicarios). Esta es una manera de entender la noción de ‘selector vicario’: un medio ambiente interno incorpora información sobre el medio ambiente externo, como en las criaturas popperianas (figura 3). Los términos ‘interno’ y ‘externo’ pasan a ser ambiguos y las fronteras varían de sistema cognitivo a sistema cog- nitivo, o incluso dentro de un único sistema cognitivo. La tesis de la continuidad podría ser colocada en términos de un desplazamiento, a lo largo de la escala filogenética, de la frontera entre lo interno y lo externo, multiplicándose el número de generadores y de probadores (medios ambientes selectores). Ver también Godfrey-Smith (1998). FILOSOFIA.indb 150 27/11/06 11:34:58 El programa de una epistemología evolucionista [151] P a u lo A b ra n te s biente y, así, aumenta la probabilidad de supervivencia, la adaptabilidad del sistema. Evidentemente, el desarrollo de esas estructuras internas, con las funciones especificadas, es también resultado de procesos selectivos, ocurridos en etapas evolutivas anteriores (en una escala filogenética), si no quisiéramos cometer petición de principio.42 La hipótesis de selectores (o probadores) vicarios permi- te a Campbell concebir la modalidad humana de adquisición de conocimiento, y su dinámica, como teniendo continuidad con modalidades epistémicas / cognitivas anteriores en la escala evolutiva: Cuando son examinados en continuidad con la secuencia evolutiva, los procesos humanos de conocimiento termi- nan implicando numerosos mecanismos en varios niveles de funcionamiento substitutivo, relacionados jerárquica- mente, y con alguna forma de retención selectiva en cada nivel (Campbell 1973, 419). Para Campbell y Popper, los órganos de los sentidos o, más precisamente, las informaciones sensoriales que ellos nos aportan del medio ambiente, también funcionan como vicarios, y no solamente las representaciones simbólicas, de alto nivel (Popper 1972, 245). Campbell, por ejemplo, argumenta que la visión, al pro- veer informaciones que hacen el papel de un medio am- 42 Campbell sugirió que la adaptabilidad al medio ambiente (la plasticidad de comportamientos) aumenta muchísimo para sistemas estructurados escalonadamente. El aumento de adaptabilidad vía selección externa es, de hecho, mucho más lenta y arriesgada que vía selección interna. La aplicación de ese “paradigma” a una amplia gama de procesos en los más diversos niveles tal vez motive el uso, por Downes (2000, 437-8), de la expresión “enfoque de continuidad” para referirse a esta epistemología seleccionista (por oposición al enfoque de “paralelismo”, adoptado por Hull, entreotros). Ver también nota 40. FILOSOFIA.indb 151 27/11/06 11:34:58 I I C O G N I C I Ó N Y E V O L U C I Ó N [152] biente selectivo interno – que substituye el medio ambiente físico externo – sirve para evitar una exploración de este último por un arriesgado contacto directo del sistema con objetos del entorno, a través de una locomoción a ciegas (Campbell 1973, 414-8). Los sistemas cognitivos dotados de ese selector vicario pueden seleccionar previamente, de manera interna, de entre un conjunto de locomociones posibles (generadas internamente por algún mecanismo de variación ciega), el mejor desplazamiento posible, dadas las circunstancias.43 El sistema cognitivo (digamos, un orga- nismo) demuestra, en su efectiva locomoción, poseer una solución previa del problema que le fue planteado (ej. cómo llegar hasta el alimento de la forma la más directa y rápida posible sin toparse con objetos potencialmente peligrosos).44 43 No es obvia la comparación de criaturas dotadas de visión, que fun- ciona como un selector vicario, con las diversas criaturas distinguidas por Dennett. Señalo, simplemente, que las representaciones de las criaturas popperianas tienen el carácter de representaciones simbóli- cas y no simplemente de imágenes, por ejemplo, visuales. 44 Campbell (1975) insiste que los órganos de visión presuponen una asociación, que es contingente, entre la opacidad de los objetos y su impenetrabilidad. La visión, para Campbell, evolucionó (como selec- tor vicario) en un medio ambiente particular, explorando de forma oportunista una asociación empírica frecuente entre la penetrabilidad (de los objetos) y su transparencia. El conocimiento de esa asociación, ‘rígidamente impreso’ [hardwired] en los órganos visuales, es falible. Es decir, la visión incorpora una conjetura sobre cómo es el mundo, una ontología si se quiere. Esa conjetura puede mostrarse falsa en am- bientes distintos de aquellos en que comúnmente viven los organismos dotados de ese mecanismo vicario de selección, o en otros mundos po- sibles. ¿Quién no presenció a los pobres pájaros hiriéndose al intentar volar a través de nuestras ventanas de vidrio? Eso se puede generalizar, según Campbell: cualquier selector vicario incorpora conocimiento fal- ible sobre el mundo. Para una epistemología seleccionista, por cierto, todo conocimiento es falible, sea innato, o adquirido durante la vida del individuo. FILOSOFIA.indb 152 27/11/06 11:34:59 El programa de una epistemología evolucionista [153] P a u lo A b ra n te s En otras palabras, no se mueve a ciegas.45 Esa pre-ciencia, que no es más que información incorporada por el selector vicario (en este caso un órgano de los sentidos), debe ser explicada por procesos selectivos ocurridos en una esca- la filogenética. De esa manera, los selectores aumentan la adaptabilidad del organismo. La adquisición de conocimiento tendría, por tanto, para Campbell, un carácter indirecto y conjetural [presumptive]: los selectores vicarios presumen que el medio ambiente (externo) posee determinadas características. Si el medio ambiente se modificó entretanto, el selector vicario pue- de dejar de funcionar adecuadamente. Hay, por tanto, una historicidad y localidad inherentes al funcionamiento de los selectores vicarios.46 Una formulación abstracta del proceso selectivo abre, por tanto, las puertas para admitir que el proceso pueda ocurrir escalonadamente en un sistema complejo, en una estructura con diferentes niveles, ocurriendo en cada nivel un proceso de generación de variaciones y de selección. En 45 Nótese que el término ‘ciego’ está siendo utilizado en diferentes contextos en el párrafo, en las expresiones ‘locomoción a ciegas’ y ‘variación ciega’. El proceso selectivo implica la generación a ciegas de locomociones virtuales, emitidas por un generador, y tales varia- ciones de desplazamientos virtuales son seleccionadas por un medio ambiente vicario interno, antes de que el sistema cognitivo exhiba alguna locomoción efectiva (desplazamiento físico). Como resultado, el desplazamiento del sistema no es ciego (aleatorio), exhibiendo pre- visión (conocimiento conjetural del medio ambiente físico/biológico) para quien observa, de fuera, su comportamiento. 46 Toda selección es, por tanto, local, o mejor, oportunista. En ese contexto, Kim toma en serio la noción de jerarquía: “... cuando dos selectores vicarios de diferentes niveles están en conflicto, nosotros nos atendríamos al más general, fundamental, más antiguo evoluti- vamente (aquel que está más próximo del medio ambiente y que es, por tanto, más fundamental)” (Kim 2001, 107). FILOSOFIA.indb 153 27/11/06 11:34:59 I I C O G N I C I Ó N Y E V O L U C I Ó N [154] esa formulación, los procesos selectivos son, por así decir, introyectados en un sistema individual, sin limitarse a las relaciones entre individuos, y de estos con el medio am- biente externo al sistema (como es el caso en la biología evolucionista). Podemos ver esta hipótesis como pertinente a los me- canismos cognitivos de tipo selectivo ocurriendo en el in- dividuo (Downes 2000, 437-8).47 Otra manera de verla es como una estrategia metodológica para englobar la cogni- ción individual. En la tentativa de responder a los enigmas adaptativos propiamente cognitivos, el enfoque seleccionista adopta, en general, la estrategia de presuponer procesos selectivos48 ocurriendo en diferentes niveles de un sistema complejo estructurado jerárquicamente. 4-3 . ¿ D O S E S P E C I E S D E E P I S T E M O L O G Í A S E V O L U C I O N I S TA S ? M. Bradie (1986, 1995) propone una distinción entre dos programas en epistemología evolucionista: EEM (una epistemología evolucionista de mecanismos, o mejor, de apa- ratos cognitivos49) y EET (una epistemología evolucionista de teorías). La EEM enfoca los aparatos cognitivos de los organis- mos (órganos de los sentidos, cerebro, etc.) como productos 47 Downes habla de un “modelo de continuidad o de selección anidada [nested]” (2000, 438). 48 Para simplificar, estoy usando la expresión ‘proceso selectivo’ en lugar de ‘procesos de variación, selección y retención’. Es importante, sin embargo, tener siempre presente que el proceso selectivo comprende distintos sub-procesos. Al utilizar ‘procesos selectivos’ en plural, estaré refiriéndome a diferentes ciclos de procesos selectivos, ocurridos a lo largo del tiempo. 49 El término ‘mecanismo’ es usado en ese contexto por Bradie en el sentido de aparato cognitivo (ej. aparato perceptual, estructuras ce- rebrales implicadas en la cognición, etc.). FILOSOFIA.indb 154 27/11/06 11:34:59 El programa de una epistemología evolucionista [155] P a u lo A b ra n te s de un proceso evolutivo que explicaría su evidente adapta- ción al medio ambiente. La EET, por otro lado, pretende simplemente hacer una extensión metafórica del proceso evolutivo en biología con el fin de aplicarlo directamente a la propia dinámica del conocimiento (y no exclusivamente a los aparatos cognitivos implicados en su producción y dinámica, objetos de una EEM), incluyendo ahí al científico.50 Es difícil, sin embargo, clasificar epistemologías selec- cionistas como la de Campbell en esas categorías propuestas por Bradie, en la medida en que el “paradigma seleccionista” de aquel parece aplicarse, literalmente, tanto a la cognición individual como a los productos de las actividades cognitivas (ej. teorías) y su dinámica. Campbell se compromete, como ya señalé, con la tesis de la continuidad que, a su vez, presu- pone la hipótesis de selectores vicarios. Como indiqué en la nota 41, esta hipótesis consiste, básicamente, en internalizar el proceso selectivo, desplazando la frontera entre lo interno y lo externo o, si se prefiere, la frontera entre el elemento generador de variaciones y el elemento que selecciona (o medio ambiente).51 50 Bradie percibe la EET como poseyendo un carácter metafórico y la EEM como una aplicación literal del proceso de selección natural a la epistemología. La distinción entredos especies de epistemología con base en la dicotomía literal/metafórico es, a mi modo de ver, dis- cutible, y debe ser investigada de forma más cuidadosa, como indico en la última sección de este artículo. 51 Incluso la epistemología de Popper, a pesar del paralelismo que está obligado a defender en función de su metafísica de tres mundos, difícilmente puede ser clasificada en esas categorías propuestas por Bradie (ver Downes 2000, 440, nota 3). Podemos también intentar poner la frontera entre lo interno y lo externo fuera del sistema cog- nitivo y ver el propio desarrollo del conocimiento como implicando procesos selectivos en diferentes niveles, mas allá del sistema indi- vidual. Por ejemplo, la ciencia puede ser vista como un sistema con FILOSOFIA.indb 155 27/11/06 11:34:59 I I C O G N I C I Ó N Y E V O L U C I Ó N [156] Además, cuando Popper y muchos otros sugieren que la evolución puede darse de modo exosomático (ver criaturas gregorianas, figura 4), ellos no pretenden ver esta evolución como siendo simplemente una extensión metafórica de la evolución biológica, como juzga Bradie con la idea de una EET.52 5. C R Í T I C A S A L P R O G R A M A S E L E C C I O N I S TA E N E P I S T E M O L O G Í A Las críticas al seleccionismo son más incisivas justamente en el dominio de la dinámica cultural y, particularmente, de la dinámica (ontogenética) del conocimiento humano, que es el foco de este trabajo. La objeción más comprometedora a la extensión del programa seleccionista a la epistemología apunta al con- traste entre el carácter ciego [blind] de la generación de variaciones en el caso de la evolución orgánica, y el carácter intencional de la generación de conocimiento, en especial en la actividad científica.53 Esta generación, afirman los críticos, se basa en un conocimiento previo acumulado; el científico adopta, además, métodos y tiene en mente la resolución de problemas particulares. En el caso de la generación de variaciones conceptuales, el calificativo ‘ciego’ se refiere a la característica siguiente: diferentes partes (los científicos) interactuando entre sí según pro- cesos selectivos. Cada científico, a su vez, es también un sistema, con partes internas interactuando entre sí según procesos selectivos. No desarrollaré aquí esas posibilidades de extensión del seleccionismo. 52 En la conclusión indico una investigación, en curso, sobre esta cuestión, que involucra la dicotomía literal/metafórico y también la estructura del raciocinio analógico. 53 Aunque las críticas que aquí presento están enfocadas sobre el cono- cimiento científico, ellas pueden ser también planteadas, en términos similares, para el conocimiento en general. FILOSOFIA.indb 156 27/11/06 11:35:00 El programa de una epistemología evolucionista [157] P a u lo A b ra n te s en la generación de nuevas variaciones, el sistema cognitivo – en el caso de la ciencia, el científico – no anticipa ni posee pre-visión de que tales variaciones van a ser soluciones a los problemas que el se plantea (o que el medio ambiente plantea al sistema). En un artículo reciente, Bradie reproduce las tres con- notaciones del término ‘ciego’ en un contexto epistemoló- gico, ya apuntadas por Campbell: (1) Las respuestas no están acopladas a las condiciones ambientales, que no ocasionan la emisión de las primeras; (2) Las respuestas tentativas individuales no están corre- lacionadas con la solución; [...] (3) Respuestas sucesivas no son correcciones de respuestas previas (Bradie 2001, 41; Campbell 1973, 422). Para Kim, decir que las variaciones conceptuales son ‘ciegas’ significa afirmar que las diversas alternativas gene- radas (tentativas experimentales, hipótesis, teorías, etc.) no son “unas más probables de ser correctas que otras” (Kim 2001, 109). El mismo Toulmin, que propone una versión de epis- temología evolucionista (seleccionista), admite la falla en la analogía. Hay dos modos como pueden darse las relaciones entre variación y selección: ellas pueden estar acopladas o desacopladas. Aunque los procesos de evolución biológica y de evolución científica ejemplifiquen un mismo “patrón formal de explicación poblacional” – afirma Toulmin – existe, sin embargo, una desemejanza fundamental entre el cambio conceptual y la especiación orgánica: en el desarrollo de las disciplinas científicas, contrariamente a la evolución orgáni- ca, hay un ‘acoplamiento’ (coupling) entre la producción de variaciones conceptuales/teóricas y la selección intelectual de esas variaciones (Toulmin 1972, 338). Toulmin resalta que el darwinismo, al defender que el proceso de variación es ciego, rechaza la ortogénesis, es FILOSOFIA.indb 157 27/11/06 11:35:00 I I C O G N I C I Ó N Y E V O L U C I Ó N [158] decir, la tesis de que las mutaciones se darían en direcciones que garanticen la adaptación. La evolución científica, con todo, sería de otro tipo, en el cual la generación de variacio- nes conceptuales no sería ciega, sino dirigida por métodos (que son cristalizaciones de conocimiento acumulado) y res- tringida por la necesidad de resolver determinados proble- mas. Richards (1981, 56) subraya que Toulmin defiende, por tanto, un lamarckismo en lo que dice respecto a la evolución del conocimiento, y no un genuino seleccionismo. Esa crítica planteada por Toulmin es también clara- mente enunciada por Thagard, después de presentar las características de la variación ciega en la evolución orgánica, características que distinguí arriba: Cuando los científicos llegan a nuevas ideas, usualmen- te lo hacen como resultado de una preocupación con problemas específicos. Por tanto, contrariamente a la variación biológica, la variación conceptual es depen- diente de las condiciones ambientales (Thagard 1988, 103, 107).54 En ciencia – continúa la objeción a la pertinencia de una epistemología seleccionista (evolucionista) – las teorías no son generadas ciegamente, sino teniendo a la vista de- terminados fines y adoptando procedimientos heurísticos 54 El medio ambiente, en este caso, sería un conjunto de problemas y no, directamente, el mundo físico. Usando una distinción de tipos de problemas científicos hecha por Laudan, es claro que los “problemas empíricos” son, en el caso de la ciencia, centrales; pero no se puede, con eso, disminuir la importancia de los “problemas conceptuales” en esa actividad. Thagard está afirmando que, en ciencia, la generación de variaciones está acoplada a tal medio ambiente compuesto por problemas científicos. Él traduce esa analogía negativa (es decir, esa falla en la analogía) como un acoplamiento, en la actividad científica, entre el contexto de descubrimiento y el de justificación (Thagard 1998, 106). FILOSOFIA.indb 158 27/11/06 11:35:00 El programa de una epistemología evolucionista [159] P a u lo A b ra n te s – basados en el conocimiento previamente acumulado – que limitan las alternativas teóricas consideradas plausibles. Incluso filósofos de la biología favorables a otorgar al darwinismo un mayor alcance, aplicándolo a diversas áreas de la filosofía, como es el caso de Michael Ruse, apuntan a esa falla en la analogía. Para Ruse, ... las disanalogías son tan grandes que probablemente cualquier tentativa de ver el cambio en la teoría científica a través de las lentes del evolucionismo Darwinista causa más perjuicios que beneficios. No he visto ninguna razón para cambiar de opinión. Ruse apunta, específicamente, a la falla en la analogía relativa al modo como son generadas las ideas científicas: ... la mayor parte de las nuevas ideas surge solamente como resultado de un gran esfuerzo dirigido, y son a su vez dirigidas, o proyectadas para la tarea en mente (Ruse citado en Kim 2001, 109). Esos pasajes son extraídos de un artículo55 de 1983. En un libro más reciente, aunque proponiendo “tomarse a Da- rwin en serio”, la misma crítica reaparece: Las variaciones científicas son dirigidas, las orgánicas no. ¿Pero qué significa esa diferencia? Significa que Nicolás Copérnico, o CharlesDarwin, o James Watson tenían un objetivo en mente – la comprensión de la Naturaleza – que dirigió y reguló la ciencia que ellos produjeron. En otras palabras, el científico tiene un papel activo en el curso de la ciencia (Ruse 1995, 93). Ruse acusa a los seleccionistas, en particular, de no dis- tinguir entre que “algo ‘sea desconocido’ y algo ‘sea alea- torio’”. 55 Ruse (1983). FILOSOFIA.indb 159 27/11/06 11:35:00 I I C O G N I C I Ó N Y E V O L U C I Ó N [160] En la misma línea, Cassini menciona el argumento de Peirce de que sería altamente improbable hacer cualquier avance en ciencia si la generación de hipótesis o teorías fuese hecha al azar (Cassini 1998, 26). Thagard ve, también, una relación entre la tasa de pro- ducción de variaciones teóricas y la situación de estabilidad o de crisis en que se encuentra una disciplina científica – sien- do esa tasa mayor en situaciones de crisis (uno de los rasgos que Kuhn atribuye a los períodos de ciencia extraordinaria). En la evolución orgánica, al contrario, el medio ambiente no ejerce ninguna influencia sobre esa tasa (Thagard 1988, 107). 5-1 . R E S P U E S TA S D E L O S S E L E C C I O N I S TA S A L A S C R Í T I C A S Los epistemólogos seleccionistas no están, en general, dispuestos a considerar el carácter dirigido, teleonómico, de las variaciones conceptuales en ciencia como una falla en la analogía. Ellos juzgan esencial que las variaciones sean ciegas en cualquier proceso selectivo, incluyendo la evolu- ción del conocimiento científico (o, de modo más amplio, la evolución de la cultura). Aceptar tal crítica (de falla en la analogía) haría perder fuerza heurística y/o explicativa al intento de ver la evolución del conocimiento científico como un genuino proceso selectivo.56 Campbell y Popper, que podríamos considerar los padres de la epistemología seleccionista contemporánea, fueron, de hecho, enfáticos en considerar la generación de teorías científicas como un proceso de variación ciega, a semejanza de la evolución orgánica: Veo esa idea de ‘ceguera’ [blindness] de ensayos en un movimiento de ensayo-y-error como un paso importante, 56 Ver Munz (1993); Kantorovich (1993, 146, 148s). FILOSOFIA.indb 160 27/11/06 11:35:01 El programa de una epistemología evolucionista [161] P a u lo A b ra n te s superando la idea errónea de ensayos aleatorios (Popper citado en Kim 2001, 103). Epistemologías seleccionistas como la de Campbell asi- milan esa aparente falla en la analogía considerando que, de hecho, existen restricciones a la variación conceptual, teórica, en el caso de la ciencia; pero restricciones análogas también actúan en la evolución orgánica, en la medida en que la evolución actúa sobre pre-adaptaciones, es decir, a partir de estructuras orgánicas preexistentes, que la canali- zan. El análogo de las características genéticas, anatómicas, etc. que restringen la generación de variaciones en los orga- nismos vivos sería, en ciencia, el conocimiento ya disponible que restringe, de diversos modos, la generación de nuevas variaciones teóricas y experimentales. Kim responde, en esa misma línea, a las críticas de Ruse que, como vimos, apuntan al carácter no-aleatorio, dirigido, de la generación de ideas por los científicos: ... La preocupación de Ruse con la refutación de la ana- logía entre las variaciones orgánica y científica lo lleva a descuidar los constreñimientos [constraints] existen- tes (genéticos, anatómicos, etc.) que afectan la gama de variaciones que son posibles. Así, él arguye como si la variación biológica fuese completamente aleatoria, en el sentido de que cualquier cosa puede emerger de las ca- racterísticas de la especie. Del mismo modo que la gene- ración, como la selección, de los pensamientos-tentativos [thought trials] son constreñidas por las exploraciones vicarias en un medio ambiente vicario [incorporado] en el pensamiento, el trasfondo genético y las peculiaridades de la especie en cuestión restringen y, en ese sentido, pre-seleccionan la gama de posibles variaciones (Kim 2001, 111). FILOSOFIA.indb 161 27/11/06 11:35:01 I I C O G N I C I Ó N Y E V O L U C I Ó N [162] Los seleccionistas distinguen, de hecho, variaciones alea- torias [haphazard or random] de variaciones ciegas. Cziko, por ejemplo, aclara que el uso del calificativo ‘ciego’, en el contexto del seleccionismo, no significa que las variaciones no sean constreñidas. Si fuese ese el caso, el término ade- cuado sería ‘aleatorio’, es decir, todas las variaciones serían igualmente probables. En ciencia, las variaciones son cierta- mente constreñidas por la experiencia y por el conocimiento previamente adquirido pero, en último análisis, no deja de existir una componente ciega en la investigación. Cziko señala que si no estamos dispuestos a “retornar a las explicaciones providencialistas e instruccionistas”, los constreñimientos a la variación, en el caso de la ciencia, como por supuesto en biología, “deben ser vistas como enigmas adicionales de adaptación” y, por tanto, explicadas en términos de procesos selectivos ocurridos en el pasado filogenético (Cziko 1995, cap. 15, 7). Se trata de rechazar la visión tradicional, según la cual los resultados científicos poseen un “carácter teleológico” y substituirla por “una explicación mecanística de las adap- taciones maravillosas de las variaciones conceptuales a los problemas científicos” (Kim 2001, 103).57 Articular una ex- plicación mecanística de la creatividad sería, en ese sentido, una de las motivaciones para la adopción del seleccionismo en epistemología. La diversidad de casos de enigmas de adaptación exige, entretanto, que se perciba la “complementariedad entre diferentes tipos de variación ciega y retención selectiva” – título de un artículo reciente de Cziko (2001). Vimos, anteriormente, que el proceso selectivo puede darse entre sistemas (individuos en una población) o en el interior de un 57 Como en otras partes de esta discusión, hago notar que el medio ambiente aquí está constituido por un conjunto de problemas. FILOSOFIA.indb 162 27/11/06 11:35:01 El programa de una epistemología evolucionista [163] P a u lo A b ra n te s sistema particular. También es preciso distinguir los efectos de procesos selectivos ocurridos en el pasado (antecedente- mente) – sea en el pasado filogenético, sea ontogenético – de los que ocurren en el presente. Campbell ya había hecho tales distinciones en su artículo de 1973, donde discute di- ferentes casos y niveles de resolución de problemas, desde aquellos enfrentados por organismos con una estructura rudimentaria, hasta los complejos procedimientos de reso- lución de problemas en ciencia, que implican creatividad. Para el conocimiento innato que se expresa en hábitos y comportamientos instintivos en los animales, por ejemplo, el seleccionismo apela solamente a procesos selectivos que ocurren entre individuos de una población, a lo largo de su historia filogenética. En cambio, para el conocimiento aprendido a lo largo de la historia ontogenética de un individuo, aunque los procesos selectivos que se dieron en la historia filogenética sean sin duda relevantes – por ejemplo, para explicar la adaptación de órganos de percepción o del cerebro, ciertamente im- plicados en la cognición y, por tanto, en la adquisición de conocimiento – el seleccionismo apela a una participación creciente de procesos selectivos ocurriendo al interior del individuo en el presente, o que hayan ocurrido en su pasado ontogenético (resultando en aprendizaje).58 Procesos selecti- vos que ocurrieron en el pasado son responsables de que un 58 Conviene aquí distinguir los procesos selectivos implicados, por ejemplo, en la embriogénesis (ej. en el desarrollo del cerebro de los animales) y, de modo más general, en el desarrollo de un individuo, por un lado, de los procesos selectivos implicados en el aprendizaje propiamente dicho, de otro (ej. condicionamiento operante, apren- dizaje del lenguaje, incorporación de elementos culturales, etc.).Am- bos procesos podrían ser clasificados bajo la rúbrica de ‘ontogénesis’ – que ocurren durante la vida de un individuo – para distinguirlos, en bloque, de los procesos evolutivos ocurridos en la ‘filogénesis’. FILOSOFIA.indb 163 27/11/06 11:35:01 I I C O G N I C I Ó N Y E V O L U C I Ó N [164] conocimiento ya adquirido pueda restringir la adquisición de nuevos conocimientos, por ejemplo a través de métodos y heurísticas. En el caso de un conocimiento (o comportamiento) to- talmente nuevo – es decir, poco o nada similar a conocimien- tos ya adquiridos y que, por tanto, presuponen creatividad – procesos selectivos ocurriendo al interior del individuo y en el presente, con poca o ninguna restricción por parte de procesos selectivos ocurridos en el pasado, tienen, propor- cionalmente, mayor participación. Kim defiende el mismo punto: Cuando es instado a dar una solución a un problema intelectual particular, un científico genera cierto número de pensamientos-tentativos o bien de experimentos-ten- tativos para encontrar una solución a aquel problema. Al hacer eso, él o ella pueden reducir el espacio de búsque- da sirviéndose de resultados previos de investigación, que son basados en los modelos, teorías e instrumentos de registro [inscription devices] disponibles en la época. Entretanto, más allá de esos procesos restringidos, él o ella tiene que buscar ciegamente la solución al nuevo problema (Kim 2001, 108). Ese tipo de complementariedad entre procesos selecti- vos que ocurrieron en el pasado – filogenético y ontogené- tico – y procesos selectivos que ocurren en el presente, no parece, entretanto, aceptable para muchos.59 Los defensores del seleccionismo no niegan que el cien- tífico, al generar variaciones teóricas e hipótesis, tiene en mente la solución de determinados problemas, además de ser guiado por un conocimiento previamente acumulado (frecuentemente cristalizado en métodos o heurísticas adop- 59 Ver, por ejemplo, Cassini (1998, 28-29). FILOSOFIA.indb 164 27/11/06 11:35:02 El programa de una epistemología evolucionista [165] P a u lo A b ra n te s tadas conscientemente). Ellos simplemente enfatizan que ese conocimiento previo precisa, él mismo, ser explicado con base en procesos selectivos ocurridos en el pasado (fi- logenético u ontogenético), si no se quiere cometer petición de principio en la explicación de adaptaciones (en este caso conceptuales, teóricas). Cziko, por ejemplo, sentencia que Thagard, al decir que las variaciones están, ... ‘correlacionadas con las soluciones de problemas’ comete petición de principio con respecto a como ese conocimiento previo que guía [al científico] fue obteni- do en primer lugar. Nuestro científico, a diferencia del proceso de evolución orgánica, casi con certeza posee un fin y genera las variaciones metodológicas y teóricas en un intento de alcanzar ese fin. Pero en la medida en que se hacen nuevos descubrimientos para los cuales no existe conocimiento previo, ese crecimiento del conoci- miento científico y tecnológico es posible solamente por la producción y puesta a prueba de nuevas variaciones experimentales cuyos resultados son desconocidos hasta ser comprobados. Como dijo Campbell, el secreto de la innovación racional es la selección retrospectiva [hind- sighted] y no la variación previsiva [foresighted] (Cziko 1995, cap.15, 6; cap. 9, 3). Recordemos, tan sólo, el carácter necesariamente falible de cualquier conocimiento (teórico, metodológico, tecnoló- gico, etc.) que, como dije anteriormente, es una implicación de una epistemología seleccionista. Enfatizo, una vez más, que el seleccionismo implica la mezcla de un elemento de variación ciega – eventualmente constreñida por un conocimiento adquirido previamente – y FILOSOFIA.indb 165 27/11/06 11:35:02 I I C O G N I C I Ó N Y E V O L U C I Ó N [166] de un elemento de selección (nada ciego).60 Ambos sub- procesos son imprescindibles para explicar adaptaciones. Cziko defiende que, ... del mismo modo que la evolución biológica depen- de de la existencia de variación ciega en la estructura y en el comportamiento de los organismos, la ciencia depende de una variación ciega similar en las hipótesis que son propuestas. Eso no significa que las hipótesis no son constreñidas por el conocimiento ya obtenido ... Tanto en la evolución biológica cuanto en la ciencia, tales constreñimientos reflejan la acumulación pasada del conocimiento por una previa variación ciega y se- lección, que son esenciales para limitar los tipos futuros de variación que aparecen. Pero los constreñimientos, por sí solos, no pueden responder por la emergencia de nuevas y mejores adaptaciones del organismo al medio ambiente, y de la teoría científica al universo (Cziko 1995, cap. 10, 13).61 Kantorovich hace un intento de responder a la objeción de que el descubrimiento científico no es (aparentemente) ciego suponiendo estadios sub-conscientes de variación cie- ga y de selección de ideas en los procesos cognitivos de los científicos.62 Del mismo modo como son generadas nuevas variaciones en los seres vivos, la generación de nuevas conje- 60 Ver, a este respecto, Calvin (1990). 61 Hay diferentes tipos de medios ambientes selectivos en ese párrafo, generando bastante ambiguedad, un rasgo en mi oponión prob- lemático del programa seleccionista. Volveré a discutir ese punto en la sección final. 62 Se puede ver esta hipótesis de Kantorovich como una implicación de su epistemología que necesitaría, evidentemente, de corroboración. La misma exigencia se puede hacer con respecto a la hipótesis de Campbell de selectores vicarios, algo que discuto en la sección final del artículo. FILOSOFIA.indb 166 27/11/06 11:35:02 El programa de una epistemología evolucionista [167] P a u lo A b ra n te s turas en la ciencia sería también, en última instancia, ciega, esto es, no “... influenciada por la ‘presión’ de los problemas que ellas deben resolver o de los datos que supuestamente deben explicar” (Kantorovich 1993, 146). Una crítica análoga apunta al desperdicio que estaría necesariamente asociado a un genuino proceso de variación ciega, ya que muchas de las variaciones (ideas, teorías, hipó- tesis) serían inadecuadas, simplemente errores (del mismo modo que la mayor parte de las variaciones en el dominio biológico).63 Cziko responde que ... ese desperdicio puede ser comprendido como un pre- cio inevitable que debe ser pagado por un proceso en el cual nuevas adaptaciones y conocimiento pueden emer- ger sin intuiciones [insights] providencialistas externas y milagrosas, o sin un guía instruccionista milagroso (1995, cap. 15, 5). Cziko llama la atención, además, sobre un hecho inne- gable: el gran número de fracasos que ocurren tanto en el trabajo científico cuanto en el tecnológico. Sabemos que los errores de los científicos son, en general, escamoteados por una historiografía de la ciencia presentista que sólo registra lo que es considerado acierto desde el punto de vista del estadio actual del conocimiento.64 Tal historiografía, dice Cziko, tiende a reforzar la visión de que la actividad científica es dirigida, implica pre-visión, instrucción, y no un proceso “doloroso” de ensayo y error (1995, cap. 15, 5). La controversia que desarrollé en esta sección se refiere a la existencia o no de fallas relevantes en lo tocante al sub- 63 Ver, a este respecto, el argumento de Peirce, mencionado en la sec- ción 5. 64 Para una caracterización del tipo presentista de historiografía de la ciencia, ver Abrantes (2002). FILOSOFIA.indb 167 27/11/06 11:35:02 I I C O G N I C I Ó N Y E V O L U C I Ó N [168] proceso de variación (como parte del proceso selectivo), comparando como se da éste en biología y en epistemología. Hay también críticas que apuntan a fallas en la analogía en cuanto a los otros dos sub-procesos darwinistas: los de selección y de retención de características.65 6. V A R I A C I O N E S F I N A L E S E N T O R N O A L T E M A Mi principal objetivo en este artículofue el de presen- tar la epistemología evolucionista (o seleccionista) como teniendo, fundamentalmente, las mismas motivaciones del darwinismo en biología. Tanto el paso rápido que hice por la psicología, como la exposición detallada de las respuestas de los epistemólogos evolucionistas a varias críticas que re- cibieron, fueron medios de explicitar esas motivaciones del seleccionismo: la motivación naturalista, la mecanicista y la de rechazar la petición de principio en explicaciones para adaptaciones de modo general. Es claro que un programa de esa naturaleza no se justi- fica únicamente por sus motivaciones sino, sobre todo, por sus resultados. Al llevar adelante ese programa seleccionista en epistemología, sus articuladores pretenden no sólo re- cusar determinados enfoques que consideran inaceptables – por las razones que expuse detalladamente – sino tam- bién resolver, o tal vez disolver, algunos de los problemas recalcitrantes desde que esa área dio sus primeros y firmes pasos con Platón. Aquellos que no tienen simpatía con las motivaciones de ese programa, o que las consideran descabelladas, eviden- temente tenderán a rechazarlo en bloque y de antemano, sin examinar sus implicaciones. En ese grupo estarán, cier- 65 Para mantener la extensión de este artículo dentro de límites razon- ables, no analizaré esas otras críticas, mucho menos contundentes que las aquí presentadas. FILOSOFIA.indb 168 27/11/06 11:35:02 El programa de una epistemología evolucionista [169] P a u lo A b ra n te s tamente, los que rechazan completamente el darwinismo incluso en biología (¡cuánto más en epistemología!), y posi- blemente también aquellos que son críticos solamente con algunos aspectos del mismo (por ejemplo, los críticos de un adaptacionismo exacerbado). También estarán en ese grupo filósofos alérgicos a cualquier propuesta naturalista, viéndola como amenaza a la propia autonomía de la filosofía. Espero que aun esos críticos radicales, si llegaron hasta aquí, hayan sacado provecho de la lectura del artículo, no sólo por encontrar explicitadas las que me parecen ser las motivaciones del programa, sino sobre todo por ver explo- radas algunas de sus implicaciones, que podrán proveer mu- nición adicional a sus críticas y, probablemente, ¡consolidar su antipatía! En el estadio actual de desarrollo del programa, algunas de sus deficiencias y limitaciones son bastante evidentes. En el frente explicativo del programa, algunos críticos apuntan a la ausencia de evidencia empírica cabal a favor de algunas hipótesis que los seleccionistas proponen – como la de selectores vicarios – que les permiten articular explicacio- nes de adaptaciones epistemológicas.66 ¿Son falseables tales hipótesis? En caso afirmativo, ¿qué evidencias habría a favor de (o contra) la existencia de estructuras (neurofisiológicas) que implementarían la internalización de los procesos de generación y de retención selectiva en diferentes sistemas cognitivos? Si muchos filósofos están dispuestos a ignorar tal tipo de crítica, por considerar que las teorías filosóficas son indiferentes a la evidencia empírica, ese ciertamente no es el caso de los naturalistas. En el frente ontológico del programa, los filósofos po- drán decir que las tentativas de analizar propiedades epis- temológicas (ej. justificación) y propiedades mentales (ej. 66 Ver, por ejemplo, Bradie (2001, 42). FILOSOFIA.indb 169 27/11/06 11:35:03 I I C O G N I C I Ó N Y E V O L U C I Ó N [170] intencionalidad) en términos de propiedades naturales (in- vocadas por ciencias naturales, como la biología) – uno de los proyectos de los naturalistas67 – son aún incipientes y enfrentan graves dificultades, a pesar de pasos significativos ya dados en esa dirección.68 ¿En qué medida el conocimien- to y los procesos que lo generan pueden ser considerados fenómenos naturales?69 Los epistemólogos ¿deben encarar sus problemas como adaptativos, teniendo que responder, consiguientemente, a cuestiones relativas a funciones, pro- yectos, etc. y a cómo surgieron? Es cierto que siempre en- contraremos a alguien listo a blandir la tradicional acusación de que se está incurriendo en la falacia naturalista... Hay también dificultades por abordar los procesos que parecen intrínsecamente intencionales – como los cognitivos y los de generación de conocimiento, justamente los que importan a la epistemología – adoptando una postura me- canística estricta que rechaza toda teleología, a pesar de que esa postura, en biología, ha obtenido un éxito indiscutible. Un análisis del concepto de función puede ser central en ambas áreas. Vimos que incluso filósofos como Toulmin y Ruse, simpatizantes en general con el seleccionismo, señalan el carácter dirigido, intencional, de la generación de varia- ciones (teorías, metodologías, etc.) en empresas cognitivas como las ciencias. Si hay selección aquí, ella se parece más a una selección artificial que a una selección natural. Los 67 En Goldman (1998) tenemos un esclarecedor intento de distinguir varias vertientes del naturalismo en epistemología. Ver Abrantes (2004a) para una clasificación análoga de naturalismos en filosofia de la mente. 68 Ver, por ejemplo, Millikan (1984). 69 Para una incisiva defensa de la tesis de que el conocimiento debe ser visto como un fenómeno natural, inclusive no limitado a humanos, configurando un ‘tipo natural’ [natural kind], ver Kornblith (2002, cap. 2). FILOSOFIA.indb 170 27/11/06 11:35:03 El programa de una epistemología evolucionista [171] P a u lo A b ra n te s seleccionistas intentan, claro, introducir selectores vicarios, ‘grúas’ en el sentido de Dennett, que explicarían el finalismo (aparente) de esos procesos en términos de otros procesos, ocurridos antecedentemente y, en última instancia, meca- nísticos. Los valores y los fines de la comunidad científica podrían tener, por ejemplo, el carácter de un medio ambien- te selectivo vicario, a ser explicado por procesos selectivos y, por tanto, mecanísticos. Algunas implicaciones de un enfoque seleccionista en epistemología pueden herir otras intuiciones bastante arrai- gadas. Por ejemplo, algunos considerarán inaceptables las implicaciones que parecen ineludibles en un enfoque selec- cionista en epistemología, como el falibilismo. Los realistas epistemológicos no verán con buenos ojos que el carácter necesariamente local de toda adaptación parece implicar una posición no-realista, ya que la verdad posee un carác- ter global. En otras palabras, si hay evolución de nuestras creencias, ella no puede ser vista como una aproximación a la verdad.70 Sin embargo, el progreso, aunque no tenga sentido en el contexto de la evolución biológica, nos parece un rasgo característico (a lo menos) de la dinámica del co- nocimiento científico.71 70 Ver Bechtel (1990). El realismo epistemológico no debe, con todo, ser confundido con el realismo metafísico. Los seleccionistas son, inequívocamente, realistas en el último sentido: ellos presuponen que existe una realidad, un mundo extra-mental autónomo; más aún, ellos defienden que las mentes, en verdad, son productos de procesos naturales ocurridos en ese mundo (Wuketits 1984, 2001). ¡Los selec- cionistas, por tanto, parecen comprometidos, al mismo tiempo, con un irrealismo epistemológico y con un realismo metafísico (Stein 1990)! Habrá, por cierto, filósofos que torcerán la nariz ante un tal híbrido (aunque no haya, necesariamente, inconsistencia en ello). 71 Ver Ruse (1990); Stein (1990). FILOSOFIA.indb 171 27/11/06 11:35:03 I I C O G N I C I Ó N Y E V O L U C I Ó N [172] Es evidente que si las implicaciones de un programa hieren intuiciones que nos son caras, eso puede ser consi- derado una razón para rechazarlo (sobre todo por filósofos que tanto se apoyan en ellas). Pero eso también se puede asumir como un precio a pagar por los progresos en nuestra comprensión del mundo y de nosotros mismos. Algunos de los grandes avances realizados tanto en la filosofía como en la ciencia sacudirán intuicionesarraigadas. La mecánica cuántica es un ejemplo elocuente. La propia teoría de Da- rwin sacudió profundamente nuestras intuiciones respecto de cómo nos insertamos en la naturaleza, por más “claras y distintas” que hayan parecido a lo largo de siglos, para no decir milenios. Incluso aquellos que, como yo, simpatizamos con las motivaciones del programa seleccionista en epistemología, tendremos críticas, o por lo menos dudas, por ejemplo en lo que concierne a su amplitud, que a veces parece excesiva. ¿A qué precio buscamos extender ese programa a otras áreas, incluso si estamos bien motivados? Me incomoda, por ejemplo, la facilidad con que los se- leccionistas redefinen el medio ambiente selectivo, y tam- bién su ambigüedad en la caracterización de las variaciones relevantes, en el intento de aplicar el proceso selectivo a la temática epistemológica (y, de un modo general, a la evo- lución cultural). Subrayé, en varios momentos a lo largo del texto, cómo los epistemólogos seleccionistas son pródigos en concebir los más diversos tipos de medios ambientes además del físico (que es el medio ambiente patrón en explicacio- nes de adaptaciones): un medio ambiente de problemas; de valores; de conceptos y de teorías; de datos empíricos, sensoriales, y cosas semejantes. ¿Cómo se relacionan esos diferentes medios ambientes y qué papeles desempeñan en explicaciones particulares? En todo caso, no dejo de percibir en esa proliferación algo de artificialidad, intentos ad hoc FILOSOFIA.indb 172 27/11/06 11:35:03 El programa de una epistemología evolucionista [173] P a u lo A b ra n te s de articular lo que algunos vislumbran como un “darwinis- mo universal”, con ramificaciones en las más diversas áreas. De modo general, considero bastante sospechosas las pro- puestas de teorías de todo, intentos por demás extremos de unificación explicativa. Quiero también dejar abiertas otras cuestiones – algunas de ellas explícitamente planteadas al largo del artículo – que espero puedan motivar nuevas investigaciones en el ámbito de ese programa. Un conjunto de cuestiones tiene un carácter metodo- lógico. ¿Cuál es el papel que desempeñan las analogías en la formulación de una epistemología evolucionista (o de cualquier teoría que tenga un carácter seleccionista)? En ese contexto, ¿tiene aún sentido la distinción, que propone Bradie, entre una epistemología evolucionista metafórica (o analógica) y una epistemología evolucionista literal? ¿Cómo se obtienen abstracciones de tipos explicativos tomándose como punto de partida explicaciones que tuvie- ron éxito en determinadas áreas (como es, indiscutiblemen- te, el caso de la explicación basada en la selección natural en biología)? ¿Qué ganamos al articular tales abstracciones? ¿Cómo, a partir de esas abstracciones, pueden obtenerse explicaciones adecuadas a determinados tipos de problemas, en áreas particulares? ¿Qué relación tienen esos procedi- mientos con el uso de modelos y analogías en las ciencias y en la filosofía? La respuesta a esas cuestiones pasan, a mi modo de ver, por una caracterización del raciocinio analó- gico y del papel que desempeña en la actividad filosófica y científica.72 72 En Abrantes (1999b) desarrollo un modelo de raciocinio analógico en las ciencias y es mi intención extenderlo al caso de la generación de teorías seleccionistas fuera del ámbito biológico. Una de las distin- ciones que considero relevantes – para cuestionar la que hace Bradie FILOSOFIA.indb 173 27/11/06 11:35:04 I I C O G N I C I Ó N Y E V O L U C I Ó N [174] Otro conjunto de cuestiones podrían ser formuladas en relación a la inserción de los tópicos a que me dediqué en este artículo en el amplio y diversificado frente de investi- gación en torno a la evolución de la cognición y del compor- tamiento, animal y humano. La literatura a ese respecto ha crecido exponencialmente en las últimas décadas y hay di- ferentes enfoques, muchas veces conflictivos, en desarrollo. En algunas partes de este artículo, señalé relaciones del pro- grama de una epistemología evolucionista con la psicología evolucionista, de un lado, y con la memética, de otro. Pero seguramente habría aún mucho por decir con respecto al amplio tópico de la evolución de la cultura, de sus relaciones con la evolución genética y del lugar que habría de ocupar allí la cuestión de los orígenes y de la dinámica evolucionista del conocimiento (común, científico, tecnológico, etc.). Veo las críticas y el gran número de cuestiones dejadas abiertas, no como indicios de la precariedad del programa sino, al contrario, de su vitalidad, de su capacidad de sacudir algunas de las nuestras convicciones y, al mismo tiempo, suscitar nuevas líneas de investigación. La tarea es, con todo, tan fabulosa, que el tono escogido por Dennett para descri- birla es bastante adecuado: Érase una vez un tiempo en que no había mente, ni significado, ni error, ni función, ni razón, ni vida. Ahora existen todas esas cosas maravillosas. Debe ser posible contar una historia sobre cómo todas ellas vinieron a la existencia; y debe ser una historia de cómo, con sutiles incrementos, se pasó de elementos que claramente no entre dos tipos de epistemologías seleccionistas – es la distinción entre analogías formales y materiales. Para una historia de la discusión en filosofía de la ciencia sobre modelos y analogías en el siglo XX, ver Abrantes (2004b). FILOSOFIA.indb 174 27/11/06 11:35:04 El programa de una epistemología evolucionista [175] P a u lo A b ra n te s poseían esas propiedades maravillosas, a elementos que claramente llegaron a poseerlas (1995, 200).73 R E F E R E N C I A S B I B L I O G R Á F I C A S Abrantes, P. 1993. Naturalizando a epistemología, en Abrantes, P. (org.) Epistemología e Cognição, Brasília: Editora da UnB. ______ 1998. Naturalismo epistemológico: introdução, en Évora, F. & Abrantes, P. 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Agradezco también a los colegas que se dignaron comentar versiones anteriores de este texto – cuyos nombres omito para evitar olvidos embarazosos – y a mis alumnos, que tuvieron que digerir versiones por demás crudas del material que sirvió de base a este texto. No quiero omitir, por último, mi agradecimiento a Alejandro Rosas por asumir la traducción de este artículo y por sus comentarios a esta versión. FILOSOFIA.indb 175 27/11/06 11:35:04 I I C O G N I C I Ó N Y E V O L U C I Ó N [176] S. (ed.) Filosofia e Conhecimiento: das formas platônicas ao naturalismo, 273-333, Brasília: Editora da UnB. Bechtel, W. 1990. Toward making evolutionary epistemology into a truly naturalized epistemology, en Rescher, N. (ed.), Evo- lution, cognition and realism, 63-77, NY: University Press of America. Bradie, M. 1986. Assessing evolutionary epistemology, Biology and Philosophy 1: 401-59. ______ 1995. Epistemology from an evolutionary point of view, en Sober, E. (ed.) 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La paginación utilizada para identificar citaciones en este artículo es mía, con base en el archivo descargado directamente de la página del autor (http://faculty.ed.uiuc.edu/g-cziko/without_miracles/04. html). ______ 2001. Universal selection theory and the complementarity of different types of blind variation and selective retention, en Heyes, C. & Hull, D.L. (eds.) Selection theory and so- cial construction, 15-34, Albany: State University of New York Press. FILOSOFIA.indb 176 27/11/06 11:35:04 El programa de una epistemología evolucionista [177] P a u lo A b ra n te s Dennett, D. [1975] 1986. Why the law of effect will not go away, en Dennett, D. Brainstorms, 71-89, Sussex: Harvester Press. _______ 1995. Darwin’s dangerous idea: evolution and the me- anings of life, NY: Simon & Schuster. Downes, T. 2000. Selection and Scientific Inquiry, Biology & Phi- losophy 15 (3): 425-442. Giere, R. 2001. Critical hypothetical evolutionary naturalism, en Heyes, C. & Hull, D.L. (eds.) 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En el siglo XVII se describieron por lo menos dos “orangutanes” infantes, una hembra y un macho (que eran en realidad chimpancés), con el fin de buscar su semejanza con los humanos. 150 años después de estos estudios, la Teoría de la Evolución los retomará con fuerza como un argumento en favor de sus tesis: pudieran los simios ser los seres vivos más parecidos a nuestros ancestros y su estudio conducir a conocer más sobre nosotros mismos. Con miles de trabajos sobre el tema publicados en los últimos decenios, el camino fincado hace más de 300 años ha fructificado. Sin embargo, nuestra inquietud sigue siendo filosófica; nos preguntamos aquí si, en una perspectiva creacionista anterior a la evolucionista, no existía ya una búsqueda de un eslabón en la cadena - en este caso de la Creación y de sus razones - y que por ello podemos hacer dialogar a los autores de los siglos XVII y XVIII con los que vinieron después de la Revo- lución Darwiniana. Por esta razón estudiaremos el impacto que FILOSOFIA.indb 183 27/11/06 11:35:06 I I I E L O R I G E N D E L H O M B R E [184] tuviera el descubrimiento europeo y la descripción científica de los primeros póngidos (antropoides) – chimpancés y orangutanes – sobre la incipiente primatología y la filosofía, disciplina que en su campo antropológico se hace actualmente preguntas semejantes a las de entonces. 1. I N T R O D U C C I Ó N En lo siglo XVI se anuncia la existencia en el África de prima- tes muy cercanos en su aspecto a los humanos. Se mencionan, en particular,a animales que hoy asimilamos al chimpancé y al gorila. Por otro lado, los holandeses dan a conocer la exis- tencia de los orangutanes, antropoides que pueden observar vivos en lo mercados de Batavia (Java). En el siglo XVII suce- de algo más importante aún: llegan a Europa “orangutanes” (los primeros en ser estudiados eran en realidad chimpancés) que son descritos por los anatomistas destacados de la época, los cuales no dejan pasar desapercibido el hecho de que se parecen más a los humanos que a los otros monos. En ese siglo y en este campo destacan los trabajos del inglés Edward Tyson (1650-1708), uno de los anatomistas más connotados de la historia de la disciplina, gran conocedor del folclor histórico, desde la Antigüedad, en torno a monos, sátiros y esfinges, pero sobre todo el padre indiscutible de la primato- logía (concepto que surgirá recién a mediados del siglo XX).1 Tyson era, en efecto, un médico y anatomista de una gran cultura científica y literaria, lo que demuestra en sus libros, que sólo en parte analizaremos a continuación. En 1699 publica Orang-Outang, sive Homo Sylvestris,2 seguido de un estudio filológico sobre los sátiros, las esfinges, 1 Theodore C. Ruch fue el primero en proponer el término, en 1941 en Bibliographia Primatologica. 2 Orang-Outang, sive Homo Sylvestris: or, the Anatomy of a Pygmie compared with that of a Monkey, an Ape and a Man. To which is FILOSOFIA.indb 184 27/11/06 11:35:06 Las primeras descripciones de antropoides en el siglo XVII y su importancia para la filosofía de la evolución [185] Jo rg e M a rt ín e z- C o n tr e ra s los cinocéfalos, etc., de los antiguos: Philological Essay on the Pygmies of the Ancients. En aquél encontramos el pri- mer estudio comparativo que haya sido realizado entre un simio o póngido3 (un chimpancé en este caso), un mono (un papión o cinocéfalo) y el humano. Es cierto que la semejanza entre humanos y monos era conocida en nuestra tradición occidental desde la Antigüedad, gracias a las breves referen- cias de Aristóteles, pero en especial como consecuencia de los trabajos de Galeno.4 Vesalio,5 quien lo cita en la época moderna, sospecha, en efecto, que varios de los estudios anatómicos de aquél no habrían sido realizados sobre cadá- veres humanos sino sobre monos (Galeno conoció y disecó a papiones y a macacos de berbería [Macaca sylvanus] pero con seguridad no a simios, lo que sin duda lo hubiera con- vertido a él en padre de la primatología). Sin embargo, nadie antes del inglés había investigado de manera comparativa la anatomía – y hasta cierto punto el comportamiento – de tres seres tan cercanos en la Scala naturæ, escala en cuya added, A Philological Essay concerning the Pygmies, the Cynocepha- li, the Satyrs, and Sphinges of the Ancients (sic), Londres, Thomas Bennet. 3 Póngido proviene de la palabra de origen congolés pongo, citada por primera vez en nuestra tradición por Purchas, (Purchas 1625) quien la tomó de un relato de un marinero inglés prisionero de los portugueses en el norte de lo que hoy es Angola, en el siglo XVI. Cf. (Martínez-Contreras, J. 1992a) 4 Claudius Galenos, 129-199. Galeno, médico griego, tuvo su primer entrenamiento en la disciplina como médico de gladiadores. Pero la disección de humanos estaba estrictamente prohibida en su tiempo, eso llevó a Vesalio a la sospecha de que trabajaba más bien con pri- mates (si fue el caso, habría sido probablemente, pensamos nosotros, con macacos del Norte del África [Macaca sylvanus]). 5 Andreas Vesalius, 1514-1564. Vesalio tuvo la oportunidad de disecar y de estudiar en la Italia renacentista cadáveres humanos, actividad prohibida en el resto de Europa. FILOSOFIA.indb 185 27/11/06 11:35:07 I I I E L O R I G E N D E L H O M B R E [186] existencia de origen divino todos creían entonces. Pero no fue el inglés, sino dos médicos holandeses, los primeros en poner en relación estrecha a los póngidos con los humanos: Iacobus Bondt (Bontius) [Leyden 1592 - Batavia 1631] y Nikolaas Tulp [1593 -1674]. En la medida en que Tyson no fue el primero ni en usar el término orangután ni en describir a un chimpancé, debemos destacar previamente por lo menos6 el trabajo de esos médicos holandeses gracias a los cuales el “orangután” (pues no siempre se trató en esos siglos de orangutanes, más a menudo de chimpancés) entró en la tradición occidental con grandes consecuencias para quien desee reflexionar so- bre el lugar del humano en la creación así como, un siglo y medio después, en la evolución. Esos dos médicos holandeses habían aprovechado el comercio de su país con lo que son hoy la India e Indonesia para describir a un animal asombroso por su parecido a los humanos, especialmente cuando son bebés, los oranguta- nes.7 Esta semejanza, en efecto, ya era puesta de relieve por los habitantes de la zona que, en lengua malaya – la lingua franca de la región – hablaban del simio como de un orang (persona, hombre), hutan (selva o bosque). El nombre re- sultó fascinante para los europeos, nombre antropomórfico que se acompañaba, además, de toda una serie de creencias sobre la naturaleza, en especial sexual, del animal, que más adelante veremos. 6 Por falta de espacio no hablaremos de los escritos de Conrad Gesner (Historiæ Animalium), quien copia a Bontius, ni de Olfert Dapper (Description de l’Afrique) quien copia a Tulp y cuyo “Quoias-Morrou” es probablemente un chimpancé (aunque el dibujo es el “sátiro” de Tulp (figura 2). 7 El orangután, con su pelaje rojizo, se parece a los bebés pelirrojos. FILOSOFIA.indb 186 27/11/06 11:35:07 Las primeras descripciones de antropoides en el siglo XVII y su importancia para la filosofía de la evolución [187] Jo rg e M a rt ín e z- C o n tr e ra s 2. L A O R A N G U TA N A D E B O N T I U S El introductor del término fue el primero de los médi- cos8 holandeses, Bondt (conocido en latín como Bontius), quien pasó cuatro años (y murió) en Batavia (Java) trabajan- do para la Compañía de Indias. Con toda seguridad observó a los orangutanes, probablemente a aquellos capturados para su venta – entonces como ahora – y exhibidos en aque- lla ciudad, pues las dos subespecies sólo habitan las islas de Borneo y de Sumatra. Su descripción de una hembra pone de manifiesto el comportamiento de berrinche – se- mejante al de niños humanos – que hacen los infantes de la especie cuando quieren atraer la atención para obtener algo, conducta fácilmente observable en animales cautivos o salvajes: Sin embargo cuando vemos a este maravilloso monstruo con faz humana (…) que camina erecto, en especial esta joven hembra de sátiro (…) que oculta su cara con sus manos (…) llorando copiosamente, emitiendo gemidos y expresando otros actos humanos, uno pudiera decir que no carece de nada que no sea humano si no es el lengua- je. Los nativos dicen de hecho que ellos pueden hablar, pero que no desean hacerlo por temor a ser obligados a trabajar (…) El nombre que le dan es Orang outang (Bontius 1658).9 8 Recibe el grado de Doctor en 1614 y será el primer médico profesor de la Universidad de Lovaina. Fue uno de los primeros en estudiar la enfermedad de Beri Beri y en proponer la ingestión del hígado de tiburón para prevenir la enfermedad. 9 El libro fue publicado póstumamente por el hermano de Bondt. Tra- ducido del inglés por nosotros. FILOSOFIA.indb 187 27/11/06 11:35:07 I I I E L O R I G E N D E L H O M B R E [188] Figura 1. Orangutana hembra según Bontius. Nótese el pelo alrededor de la cara, una mano más simiesca por la distancia entre el pulgar y el índice, el hirsutismo generalizado, pero un cuerpo erecto, una vulva y pies humanos. FILOSOFIA.indb 188 27/11/06 11:35:08 Las primeras descripciones de antropoides en el siglo XVII y su importancia para la filosofía de la evolución [189] Jo rg e M a rt ín e z- C o n tr e ra s Figura 2. Nótese el pelaje alrededor de la cara, así como la relación pulgar-índice de las manos. Estos elementos provienen de una buena descripción anteel dibujante. Pero no hay duda de que éste, o por indi- caciones o de motu propio, introdujo rasgos femeninos humanos, como la vulva, los pies, la postura erecta, así como la proporciones generales del cuerpo, en su “orangutana”. Este carácter tímido o púdico del animal, a pesar de su antropocentrismo, refleja un hecho que puede ser compro- bado etológicamente. Al animal no le gusta que lo miren directamente a los ojos pero, a diferencia de un gorila, que puede incluso atacar al impertinente (Martínez-Contreras 1994), el orangután prefiere ‘cubrirse’ de la mirada intru- sa, o divisar en otra dirección. Más de un siglo después de FILOSOFIA.indb 189 27/11/06 11:35:08 I I I E L O R I G E N D E L H O M B R E [190] Bontius, otro médico holandés, Relian, observará, solicitado por Buffon, el comportamiento tímido del animal, quien según aquél se cubre los órganos sexuales ante la vista de los humanos, confirmándole al francés este carácter antro- pomórfico de la hembra de la especie (se sobreentiende que en ello sería semejante a la mujer. Cf. Martínez-Contreras 1992b). Otro aporte de Bontius a la tradición occidental es haber sido el primero en señalar, como lo podemos leer en la últi- ma frase de su texto, una tradición dayak (uno de los grupos étnicos más importantes de Borneo, que habita el interior de la isla, mientras que los melayu ocupan la costa) en el sentido de que los orangutanes pueden hablar, pero que procuran no hacerlo para que no los pongan a trabajar. Al respecto, la gran especialista en la especie de Borneo, Biruté Galdikas, ella misma casada con un dayak, escribe que esta cultura posee su propia historia que corresponde a la occidental de “la bella y la bestia”. Según el cuento, un orangután rapta a una mujer y la lleva a su nido en lo alto de un árbol, de donde ella, no teniendo la habilidad arborícola de su raptor, queda prisionera. Aunque la mujer está al principio aterrorizada, acaba por encontrar amable y gentil a su raptor. La mujer se embaraza del simio y termina por tener un hijo, mitad humano, mitad simio. Como extraña su aldea, un día escapa ayudada por una larga soga confeccionada con ramas y pelo del orangután (tecnología humana). El antropoide, al darse cuenta de su fuga, la persigue. La mujer pierde al niño en la huída y el simio, loco de ira, lo abre en dos, quedándose con la mitad simiesca. La mujer regresa a su aldea con la mitad humana de su hijo (Galdikas 1999). Ambas mitades sobreviven. Este mito también tiene estrecha relación con el aún más famoso de Platón en el sentido de que el amor proviene de la búsqueda que realizan la dos mitades de un ser único separadas por un castigo divino. FILOSOFIA.indb 190 27/11/06 11:35:09 Las primeras descripciones de antropoides en el siglo XVII y su importancia para la filosofía de la evolución [191] Jo rg e M a rt ín e z- C o n tr e ra s Galdikas señala que existe también el mito sexualmente inverso (Galdikas 1999): las orangutanas raptarían a veces a hombres para copular y tener hijos con ellos, (lo que no deja de hacernos pensar en mitos señalados por Malinowski en las Islas Trobiand10). En todo caso, si para los dayaks la cruza entre simios y humanos es posible y viable, recordemos que sólo muy recientemente, con el desarrollo de la genética se ha abando- nado totalmente la idea de que pudiera haber cruzas trans- específicas entre chimpancés y humanos. En todo caso, en el siglo XVII los científicos no creían para nada posible este tipo de entrecruzas, no así las posibles relaciones sexuales entre humanos y bestias, el animalismo, de cuya práctica común en el mundo civilizado, así como en el “salvaje”, no dudaban. El gran error de Bontius, uno que puso en duda la credibilidad de todo su relato, fue proponer un dibujo an- tropomorfo del orangután, ‘dictado’ probablemente a un dibujante carente de un modelo real que copiar. En él te- nemos a una mujer con vello en todo el cuerpo y con el cabello que parece dar la vuelta a la cara por debajo de la quijada. El dibujo ha irritado en el curso del tiempo a todos los especialistas que lo han visto por ilustrar más bien a una mujer y no a un simio. 3. E L “O R A N G U T Á N ” D E T U L P El colega de la Universidad de Lovaina, también holandés, de Bondt, Nicolaas Tulp (conocido por su nombre latinizado de Tulpius y quien también pasó a la historia gracias a una 10 En el caso de los trobiands, el cuento era que había bandas de mujeres que raptarían a hombres para cometer violaciones de grupo: a los cautivos les provocarían una erección por manipulación para luego copular todas con él (Malinowski 1929). FILOSOFIA.indb 191 27/11/06 11:35:09 I I I E L O R I G E N D E L H O M B R E [192] de las obras maestras de la pintura, La lección de anatomía del Dr. Nicolás Tulp (1632), de Rembrandt) y quien conocía sin duda aquel relato antes de su publicación póstuma, ten- drá la gran suerte de poder estudiar lo que él cree es otro “orangután” negro y proveniente del África esta vez. En efecto, cincuenta años antes de Tyson, Tulp, quien era también médico y anatomista, había descrito, en un ca- pítulo especial de un libro de anatomía (Tulp 1641), a un animal que él llamó Orang-outang,11 (adoptando el vocablo malayo introducido en Occidente por Bontius), pero también denominado sátiro, pensando seguramente en los personajes “libidinosos” de la tradición greco-romana, en esto también retomando términos del otro holandés. Tulp no parece haber disecado al animal, como Tyson, aunque sí lo hizo dibujar con los labios del infante extendidos, como si se tratara de un viejo libidinoso (figura 3). A pesar de su nombre, se tra- taba también de un chimpancé, igual que el ejemplar del inglés. Por ello éste denominará a su estudio Orang-outang sive Homo sylvestris retomando el título completo que el holandés diera a su capítulo ad hoc. Pero en la medida en que duda que ambos ejemplares sean de la misma especie –en lo que se equivoca, pues ambos son chimpancés–, Ty- son bautiza a su animal Pygmie, inspirándose también en lo relatos de los antiguos, para preguntarse enseguida si puede tratarse del pigmeo de aquéllos. A continuación traducimos,12 modernizándolo, el texto de Tulp, comentando párrafo por párrafo. 11 Nótese la ortografía francesa del animal utilizada por autores holan- deses e ingleses. 12 A partir de la versión inglesa del texto escrita originalmente en latín (Montagu 1943, 250-252). FILOSOFIA.indb 192 27/11/06 11:35:09 Las primeras descripciones de antropoides en el siglo XVII y su importancia para la filosofía de la evolución [193] Jo rg e M a rt ín e z- C o n tr e ra s Aunque se encuentra fuera del campo de la medicina, añado sin embargo a este trabajo al Sátiro Índico;13 trai- do, para la realización de esta memoria, de Angola y entregado a Federico Enrique, Príncipe de Orange. Este sátiro era un cuadrúpedo; pero a partir de la faz humana que manifiesta, se le denomina por parte de los Indios orang-outang u hombre de los bosques [orang-outang sive homo sylvestris]. Por su tamaño, se parece a un niño de tres años; por su corpulencia, a uno de seis. El descubrimiento de este animal es suficientemente extraordinario como para que valga la pena publicar su exis- tencia cuanto antes, en un libro dedicado a temas médicos y no naturalistas. Tulp lo vio caminar, por ello afirma que es un cuadrúpedo, aunque no dice nada del nudilleo que tanto inquietará a Tyson unos años después. Pero también lo vio caminar erecto, como los humanos. De manera idéntica a Bontius, señala que manifiesta una figura humana. Pero también destaca su corpulencia y fuerza, fuerza que en los años 1930 fue valorada, en el caso de un adulto, al equiva- lente de cuatro fornidos remeros.14 En cuanto a su cuerpo, no era ni gordo ni grácil, sino robusto; y sin embargo muy ágil y muy activo. Sus ar- ticulaciones son en efecto muy fuertes y posee grandes músculos ligados con ellas; por ello podía intentar cual- quier cosa y lograrla. La parte frontal de su cuerpoes en todos lados tersa, pero es velludo en el dorso y está 13 En mayúsculas en el texto original. Como veremos más adelante, ni es el sátiro de los antiguos, animal por demás imaginario, ni es originario del la zona del mar Índico. Sabemos que el simio de Tyson es un chimpancé, pero no es posible verificar si la subespecie es angoleña o no. 14 Se trata de pruebas de tirar la cuerda realizadas por Yerkes en su centro primatológico. (Cf. Martínez-Contreras 2003). FILOSOFIA.indb 193 27/11/06 11:35:09 I I I E L O R I G E N D E L H O M B R E [194] cubierto (en todo el cuerpo) de pelos negros.15 Su cara imita a la humana, pero sus narices son planas [simiæ] y plegadas hacia adentro, a la manera de una vieja mujer arrugada y desdentada. Estas narices planas aparecen bien en el dibujo que manda a realizar Tulp, mejor que en el de Tyson ya que en este el dibujante sintió la necesidad de proporcionarle al animal una nariz más humana y la alargó. Es probable que el animal sufriera de alopecia (en los trayectos en barco, igual que los marineros, comían muy poca fruta) pues los infantes están bien cubiertos de pelos en todo el dorso (Cf. figura 5). En cuanto a su cara humana, basta tener a un póngido en los brazos para tener inmediatamente una sensación humana observándolo. Sus orejas no se diferencian en verdad en nada de la forma humana. Ni tampoco el busto, provisto en ambos lados con mamas redondas (pues era de sexo femenino); el abdomen tenía un muy profundo ombligo; y sus miem- bros tanto superior como inferior eran tan parecidos a los del hombre que uno podría apenas distinguirlos, como si se tratada de diferenciar dos huevos. En realidad, las orejas del chimpancé son proporcional- mente mucho más grandes que las humanas. Las del gorila, que no conoció Tulp, se asemejan en proporción a las de los humanos. Tampoco carecía de los músculos necesarios para recos- tarse ni tampoco del orden correcto de los dedos de la mano, ni tampoco del aspecto humano del pulgar; o de las pantorrillas de las piernas; o de los huesos del talón de los pies [pedis calcis fulcrum]. Todo ello unido bellamente y 15 La negrura de la pelambre es otro dato que claramente indica que se trata del simio africano y no del asiático. FILOSOFIA.indb 194 27/11/06 11:35:10 Las primeras descripciones de antropoides en el siglo XVII y su importancia para la filosofía de la evolución [195] Jo rg e M a rt ín e z- C o n tr e ra s con sus miembros con semejante forma, eran la causa de que pudiera caminar erecto la mayor parte del tiempo; tampoco tenía dificultad alguna en levantar fardos, inclu- so de gran peso, y de transportarlos fácilmente. La semejanza entre manos y pies, así como la posibilidad de utilizar los pies como manos, harán que más tarde estos simios sean denominados cuadrumanos (figura 5), pero este hecho no parece llamar la atención del holandés, salvo la afirmación antropocéntrica que posee “el orden correcto de los dedos”. Tal vez el animal se encontraba en un lugar donde no había posibilidades de trepar sobre ningún ob- jeto, puesto que habría inmediatamente demostrado sus dotes. Cuando caminan erectos, los chimpancés lo hacen sin embargo de una forma balanceada que contrasta con la humana. Es cierto, como ya se dijo, que son muy fuertes. Cuando quería beber, agarraba por su asidero un cántaro con una mano colocando la otra claramente debajo de la base del recipiente y después se limpiaba cualquier humedad residual que hubiera quedado en sus labios de una manera en nada menos correcta y delicada de aquella que se observa en la corte de los príncipes. Demostraba la misma destreza cuando se dirigía a su lecho. Prefería inclinar su cabeza sobre el cojín y envolvía confortable- mente su cuerpo con las mantas, cubriendo su cuerpo de la misma manera que lo hace la mayoría de la gente cuando se acuesta en semejante lugar.16 Los chimpancés aprenden, sobre todo jóvenes, muchas cosas. Son también animales que manejan instrumentos, por ello no les es difícil aprender a usar correctamente 16 Esta parte será copiada por Dapper, quien además colocará al “sátiro” de Tulpius en un dibujo, bajo un árbol y con fondo de selva tropical, incluyendo un volcán, detrás del animal (Dapper 1681, 365). FILOSOFIA.indb 195 27/11/06 11:35:10 I I I E L O R I G E N D E L H O M B R E [196] utensilios humanos. En la naturaleza confeccionan nidos, generalmente sobre ramas bifurcadas, pero también en el suelo, para dormir en las noches y para hacer siestas. El uso de mantas entre humanos es lo que más se asemeja a este comportamiento natural. Además, son animales muy higiénicos y muy atentos a cualquier suciedad en su pelaje, por lo que no es de extrañar que limpien con tanto cuidado cualquier líquido residual en sus labios. En siglo XVII estas habilidades debieron asombrar grandemente. En lo que sigue, Tulp abordará muchos de los mitos y tradiciones que en realidad tienen que ver con el orangután y no con el chimpancé, pero que en la Tradición Occidental se han entremezclado de asombrosa manera: Pero como se le dijera en una ocasión a nuestro amigo, Samuel Blomartio, por parte del Rey de Sambaca, estos Sátiros, especialmente los machos, en la isla de Borneo, tienen tal fuerza de espíritu (fuerza vital) y tal estructu- ra real en sus músculos que no sólo atacan a hombres armados sino también al sexo no guerrero, a las mujeres y a las niñas. Al mismo tiempo, el deseo hacia estas últimas los quema tan ardientemente que muchas veces raptan a aquellas que capturan. De hecho, están tan inclinados al venéreo (incluso entre ellos, como era común entre los sátiros licenciosos de los antiguos) que se encuentran deseosos y lascivos en todo momento: es tal la situación que las mujeres indias evitan los bosques y las forestas donde, peor que perros y serpientes, deambulan estos desver- gonzados animales. Todo lo anterior lo manifiesta verdaderamente este sá- tiro. Entonces nada mejor que esta imitación era repre- sentada por los sátiros de la Antigüedad. A éstos Plinio los describía a sus lectores mencionando expresamente: hay un animal, un cuadrúpedo, en las montañas tropi- FILOSOFIA.indb 196 27/11/06 11:35:10 Las primeras descripciones de antropoides en el siglo XVII y su importancia para la filosofía de la evolución [197] Jo rg e M a rt ín e z- C o n tr e ra s cales, uno particularmente pernicioso; tiene una figura humana, pero con pies de cabra y ostenta un cuerpo cubierto por todos lados de pelo. No posee ninguna de las costumbres humanas: se regocija en las profundida- des de los bosques y huye de cualquier contacto con el hombre (Libro 7, cap. 3). Notemos que Plinio usa ‘cuadrúpedo’ igual que Tulp en su texto (recordemos que de los primates, sólo el huma- no es bípedo), pero todos los demás rasgos del sátiro nada tienen que ver con los simios. Nos puede asombrar ahora la credibilidad de la que gozaban los poetas (los autores clásicos decimos ahora). Por otro lado, la sexualidad abierta es sinónimo, tanto en la época romana, como en Occidente hasta hace pocos años, de pernicioso, de peligroso. Frente estas características notorias, el sátiro del bendito Jerónimo difiere tal vez: sin embargo, coincide con las figuras de los poetas.17 Había, dice: un hombre con las narices replegadas hacia adentro y una cara burda con cuernos; con las extremidades del cuerpo terminando en pies de cabra. Identificándolos con esta figura, los poetas, que se expresan más claramente, llaman a sus sátiros lascivos, desvergonzados, con dos formas,18 con dos cuernos, y (que viven) en los bosques con lujuriosas inclinaciones. 17 Manera de referirse a los escritores de la Antigüedad. 18 Forma de cabra y de humano. FILOSOFIA.indb 197 27/11/06 11:35:10 I I I E L O R I G E N D E L H O M B R E [198] Figura 3. La orangutana de Tulpius, en realidad una chimpancé hembra. Nótese la diferencia frente al dibujo anterior. Éste es dibujado a partir de un animal real. Pero se le han extendido los labios para el finde mostrar que el animal era libidinoso. Por lo visto en aquellos tiempos este gesto de labios era visto como obsceno y en todo caso no lo usan los chimpancés con esos fines. Si se analizaran con cierto grado de verdad (con cuidado), los epítetos de los Antiguos, uno vería que no estaban tan equivocados. Todavía se encuentra a este lascivo animal en la montañas tropicales de la India; se regocija en los oscuros rincones; evita todas las comodidades humanas y uno escucha, de manera no desmerecida, que son sa- FILOSOFIA.indb 198 27/11/06 11:35:11 Las primeras descripciones de antropoides en el siglo XVII y su importancia para la filosofía de la evolución [199] Jo rg e M a rt ín e z- C o n tr e ra s laces, velludos, que caminan de cuatro patas, que tienen una cara humana y que están provistos de narices que se repliegan hacia adentro. Pero el pie de nuestro animal no tiene garras, ni su frente los cuernos de un chivo; tampoco tiene el cuerpo pelo en todos lados, sólo en la cabeza, en los húmeros y en la espalda. El resto es terso; y tampoco tiene las orejas puntiagudas. Tampoco Horacio los describió errónea- mente: son en efecto flexibles y, como dije, verdade- ramente humanos. Finalmente, ya sea que nada en la naturaleza de las cosas fuere un sátiro, o si algo hubiere, fuere sin duda este animal, el cual, en esta plancha, nos es representado.19 Las descripciones de Plinio están llenas de movimiento. Pero ahí donde hubiera debido tener mayor precaución este reverente hombre es, por un lado, (en creer en) estos inventos de la imaginación de los poetas, que crean bajo los encantos de Circe: no sé de nadie a quien los sentidos no le puedan fallar; por otro lado, se trataba en efecto de verdaderas razas exóticas, que vivían en luga- res tan remotos, (es lógico) que no se podía sino seguir los pasos de otros (lo que habían dicho), por lo que era entonces más fácil aceptar (los relatos) que averiguar, con curiosidad, sobre la naturaleza de las cosas narradas y ya aceptadas por todos. Aquel que desprecia su propia fe fácilmente cae en las escabrosas rocas de las falsas acusaciones y debilita la au- toridad de su historia al diferir de la opinión establecida. Este perjuicio antes mencionado, aunque de manera co- rrecta, lo sufrió Herodoto. Un escritor que, por lo demás, no deja de embelesarnos. A partir de él, en consecuencia, en la medida que esto no hubiera podido ser hecho en tan 19 Cf. figura 2. FILOSOFIA.indb 199 27/11/06 11:35:11 I I I E L O R I G E N D E L H O M B R E [200] gran oscuridad, Plinio seleccionó los mejores ejemplos; se contentó con dejar a este sátiro en vez del verdadero para la posteridad. Pero fue en el servicio de la fama; y uno nunca puede verdaderamente alejarse de la opinio- nes que han adquirido edad; ni de las fábulas inventadas por los poetas. La apariencia de este sátiro indio, que tal vez se vuelva famoso, puede dispersar esta densa niebla. Es muy difícil complacer a todo el mundo. Como vemos, Tulp no era sólo un anatomista sino un verdadero filósofo que señalaba lo poderosa que puede ser la tradición que enfrenta el científico. Lo interesante es que Tulp no abandona la idea de que el orang-outang pudiera tener alguna relación con el sátiro de los antiguos, a pesar de la clara asociación que semejante personaje tiene con la yuxtaposición de un macho cabrío y un humano. 4. E L “O R A N G U T Á N ” D E T Y S O N El estudio del “orangután” de Tyson se apoya también en la breve observación y posterior anatomía de un chimpancé proveniente probablemente de Angola (en consecuencia de la sub-especie Pan troglodytes troglodytes), simio de aproxima- damente tres años que el inglés logró estudiar vivo un breve tiempo, ya que el animal, bastante enfermo, murió rápida- mente.20 Más que la anatomía misma, lo que en este trabajo 20 No sabemos de qué murió el chimpancé, pero en el lado derecho de su maxilar inferior se aprecian las marcas de una grave infección que atacó al hueso. Tyson señala la existencia de esta lesión así como la sospecha de aquélla fuera la causante de su temprana muerte. Hay que añadir que ningún animal tropical vivía mucho tiempo en los fríos países europeos donde los animales eran “conservados” sin calefac- ción. El esqueleto del chimpancé de Tyson se conserva en el Museo de Historia Natural de Londres y es el ejemplar óseo más antiguo que de un simio se posea. Sin embargo, aunque Tyson lo hizo desollar, la piel FILOSOFIA.indb 200 27/11/06 11:35:11 Las primeras descripciones de antropoides en el siglo XVII y su importancia para la filosofía de la evolución [201] Jo rg e M a rt ín e z- C o n tr e ra s nos interesa destacar brevemente es lo que en el extraordi- nario siglo para la ciencia que fue el XVII se podía pensar de la relación entre simios y humanos, así como en lo que significaba ser humano frente a los primates no humanos. Las especulaciones sobre el origen de la humanidad y los esfuerzos por clasificar sus variedades conocidas eran prácticamente inexistentes en los tiempos de Tyson, en la medida en que durante el periodo de su vida sólo conocemos cinco discusiones publicadas sobre estos temas, de las que señalamos tres. En 1655 Issac de la Peyrère [1594-1676] publica Prœa- dimatœ, estudio en el que el autor trató de probar que Adán y Eva no fueron los primeros humanos (De la Peyrère 1655). Este asunto no debiera de haber provocado mucho escán- dalo pues se sabe que el Dios judeo-cristiano habría creado primero a Lilit, quien se rebelara contra su creador, aunque también sabemos que la Iglesia no autorizaba a cualquiera a leer el Viejo Testamento.21 Pero el trabajo de La Peyrère causó gran escándalo, fue acusado de hereje y se vio obli- gado a retractarse. Produjo una gran literatura antagonista, pero ningún estudio verdaderamente científico sobre el asunto. En 1677, Sir Matthew Hale publica póstumamente The Primitive Origination of Mankind22 donde discute la no se ha conservado. El primate naturalizado más antiguo y del cual, por lo mismo, se conserva su piel, es el Jocko mandado a naturalizar por Buffon, también un pequeño chimpancé, que se encuentra en la Zooteca del Museo de historia Natural de París. Tuve la suerte de poder estudiar a ambos ejemplares (Martínez-Contreras 1996). 21 El personaje de Lilit está emparentado con un demonio femenino sumerio. Lilit no desea, entre otras cosas, que el hombre se le imponga en una posición sexual que la deje debajo de él. “La posición (sexual) del misionero” puede tener un origen más antiguo del que se creía. 22 The Primitive Origination of Mankind Considered and Examined According to the Light of Nature, Londres. Este hombre había sido FILOSOFIA.indb 201 27/11/06 11:35:11 I I I E L O R I G E N D E L H O M B R E [202] controversia pre-adanista23 y acaba por favorecer las tesis del mosaico. En realidad el primer verdadero intento de clasificación lo tenemos en 1684 en un texto, una carta de hecho, en la que Bernier24 publica – con un subterfugio del anonimato – la supuesta misiva que le enviara un viajero, que en reali- dad fue él mismo. Bernier es uno de lo primeros en hablar de especies (en el sentido de raza o variedad) humanas.25 Pero entre sus cinco especies destaca mayores diferencias entre algunas de ellas con todas las demás, como en el caso de los negros africanos, de quienes nos dice que conservan su color cuando viven en Europa ya que sus hijos nacen ne- gros ahí también, con lo cual tienen algo en la “sangre” que los hace ser negros independientemente de su exposición al sol. (El racismo, como sabemos, está muy ligado con la justificación de la esclavitud y el tráfico de personas, por ello las teorías raciales tendrán su gran auge bastante después, en los siglos XIX y XX, aunque siempre buscarán apoyarse un juez que creía en la existencia de brujas y quien había presidido varios juicios ad hoc. 23 Además de los pre-adanistas existían y existen los adanistas, los se- guidores del “Adán, nuestro padre”, grupo que defiende, entreotras cosas, el regreso al tipo de vida que pudieran haber tenido Adán y su compañera Eva, por ejemplo, deambular desnudos. 24 Bernier, François 1684. Nouvelle division de la Terre, par les diffé- rentes Espèces ou Races d’hommes qui l’habitent, envoyée par un fameux Voyageur à Monsieur L’Abbé de la **** (sic) à peu près en ces termes, Journal des sçavans, París, No 12, Lettre du Lundi 24. Avril MDCLXXXXIV, 133-140. (Nacido en 1620, muerto en 1688). 25 Coloca en el mismo grupo a europeos tanto del norte (salvo a algunos moscovitas) como del sur, a asiáticos próximos y a algunos lejanos, así como a los amerindios. El segundo grupo lo constituyen los afri- canos (negros), la tercera, los asiáticos de lo que hoy son Indonesia, Tailandia, Japón, China, etc., la cuarta son los lapones, la quinta son lo que después se llamarán hotentotes o cafres. FILOSOFIA.indb 202 27/11/06 11:35:12 Las primeras descripciones de antropoides en el siglo XVII y su importancia para la filosofía de la evolución [203] Jo rg e M a rt ín e z- C o n tr e ra s en “autoridades” científicas en búsqueda de la justificación de sus argumentos). El filósofo alemán Leibniz, quien leyó el texto de Ber- nier, resumirá mejor que nadie los debates y las creencias de entonces en tormo a la existencia de una sola especie humana derivada de la creada por Dios, pero también de la existencia de variedad en humanos, animales y plantas provenientes de la influencia del clima. Recuerdo haber leído en algún lado,26 aunque no puedo encontrar el pasaje, que algún viajero había dividido al hombre en razas o clases. Hizo una raza especial de los lapones y de los samoyedos, otra de los chinos y de sus ve- cinos, otra de los cafres y hotentotes de ciertas tribus. En América existe una maravillosa diferencia entre los gari- bes o caribes, que son muy bravos y con mucho ánimo, y los del Paraguay, que parecen infantes o pupilos toda su vida. Eso, sin embargo, no es razón por la que todos los hombres que viven en la Tierra no sean de la misma raza, que se ha visto alterada por diferentes climas, como vemos que las bestias y las plantas cambian su naturaleza, y mejoran o degeneran (Leibniz 1718, 37).27 26 Leibniz lo leyó en el Journal des sçavans, cf. nota 24. 27 Gottfried W. Leibniz (1646-1716). Traducción de la versión inglesa por un servidor. FILOSOFIA.indb 203 27/11/06 11:35:12 I I I E L O R I G E N D E L H O M B R E [204] Bernier28 se convierte entonces en el promotor de los trabajos que posteriormente realizarán Blumenbach,29 Lin- neo y Buffon sobre variedades de primates humanos y no humanos. Es interesante ver cómo los relatos de los viaje- ros cobrarán gran importancia, a pesar de lo poco fiables que generalmente son, en los trabajos de historia natural. Esto es muy claro en la antropología y la primatología de Buffon. Nótese, además, cómo Buffon utilizará a profusión el término “degeneración” mencionado por Leibniz, entre otros, sólo que en el francés significará no sólo adaptación dentro de los parámetros de la especie sino creación de nuevas especies. Además, ni Buffon, ni Linneo, ni ningún otro naturalista famoso del siglo XVIII hará lo que realizó Bernier, viajar y relatar de primera fuente lo que ve. Pero es Tyson y no Bernier quien da a los naturalistas del siglo XVIII el instrumento para ir más allá de la especie y del género, ya que les proporciona el instrumento comparativo que permite crear agrupaciones más grandes de seres vivos, v. gr., un orden biológico. Es así como Linneo, gracias a Ty- son, puede crear medio siglo después el orden de Primates, 28 De Bernier viene la idea que explotará Buffon, en el sentido de que las mujeres más bellas del mundo son las circasianas (Martínez-Con- treras 2003b). Bernier es sobretodo conocido por sus relatos sobre el Industán (los países actuales de India, Pakistán, Bangladesh, Afga- nistán, etc.) a donde viaja entre 1655 y 1669 y donde fuera médico al servicio de la corte del Gran Mongol, durante diez años. Se ha editado en varios idiomas su relato. El único disponible en librería es una traducción al italiano: Viaggio negli Stati del Gran Mogol (ISBN 88-7164-007-1). Es interesante notar que a pesar de fascinación por la India y su cultura, Bernier no dice nada del sistema de castas, aun- que sí mucho sobre el aspecto físico de la gente, en particular sobre la diferencia que nota entre los mongoles, más blancos, y los indios, más morenos. 29 Blumenbach, J. F 1775. De Generis Humani Variate Nativa, Göttin- gen. FILOSOFIA.indb 204 27/11/06 11:35:12 Las primeras descripciones de antropoides en el siglo XVII y su importancia para la filosofía de la evolución [205] Jo rg e M a rt ín e z- C o n tr e ra s que incluye a las tres especies, monos, simios y humanos, ordenadas en un carácter “ascendente”. Linneo “clasifica”, por la misma ocasión, a Dios como primate.30 Ahora bien, Tyson, igual que el sueco, se benefició también con ideas anteriores, y no sólo de las de los médicos holandeses ya mencionados. Si Tyson se pregunta si su orangután pudiera ser una especie humana, su respuesta es negativa, aunque destaca, como ya dijimos, el mayor parecido del animal con los huma- nos que con los monos. Por otro lado, no duda en proponer que los sátiros, las esfinges y demás quimeras de los antiguos pudieran tener como fundamento el conocimiento directo o indirecto de los antropoides por parte de aquéllos. Si como historiadores de la ciencia no podemos poner- nos en el lugar intelectual y existencial de Tyson, pudiéramos lograr contribuir a esclarecer mejor sus investigaciones, pues ahora sabemos más que él tanto en primatología como en antropología. Así, mis investigaciones me llevan a la conclu- sión contraria a la del inglés: los antiguos sólo conocieron la existencia de póngidos gracias al viaje de Hanón en el siglo VI a.n.e. (probablemente a la región geográfica ahora denominada Guinea), pero la mitología de faunos y hadas es muy anterior a ese viaje. Hanón tampoco habló de pigmeos sino de mujeres velludas y agresivas que capturó, desolló y cuyas pieles entregó a un templo cartaginés donde fueron exhibidas durante siglos, hasta que los romanos quemaran toda la ciudad. En relación con las quimeras, llama la atención, en el caso de Tyson, que no haya pensado en los ensamblajes, 30 En francés, los principales funcionarios de la Iglesia Católica, es decir los primeros o más importantes, también se denominan “primates”, igual que el orden biológico. En español se tuvo la precaución de crear el término “primados” para aquéllos. FILOSOFIA.indb 205 27/11/06 11:35:12 I I I E L O R I G E N D E L H O M B R E [206] pues es contemporáneo de Hume quien fue el primero en demostrar que nadie inventa cosas nuevas, elementos que antes no existían, sino que en la creación imaginaria sólo ha- cemos yuxtaposiciones. El caso del sátiro es bastante eviden- te, sobre todo si se considera que surge en una sociedad de pastores: es un macho cabrío en la parte inferior, hombre en la superior, pero conservando los cuernos del animal sobre su cráneo. En las sociedades pastorales se suele practicar la zoofilia. Cualquier miembro de las sociedades rurales obser- varía sin duda frecuentemente las cópulas de sus animales domésticos y vería que entre las cabras el macho da la im- presión de estar casi erecto durante el acto sexual, por lo que de lejos puede asemejarse en parte a una persona parada, a diferencia, por ejemplo, de los perros y de los vacunos, más inclinados sobre la hembra durante la cópula.31 En cuanto al nombre de orangután dado a un chim- pancé, hay que ver que la ruta que seguían los marinos que venían de lo que hoy es Indonesia era costeando casi todo el continente africano y deteniéndose y comerciando en los puertos establecidos por los diferentes países europeos sobre sus costas, pero nunca adentrándose en tierra firme. Puede llamarnos la atención que los orangutanes rojos y los chimpancés negros, por parecidos que sean los infan- tes de ambos géneros,pudieran ser confundidos, pero esta situación duró hasta inicios del siglo XIX. Chimpancés y orangutanes eran vistos como dos variedades de la misma especie. De manera semejante, tampoco llamaban enton- ces demasiado la atención las diferencias físicas entre los humanos puesto que se pensaba que todos descendían de 31 Ahora bien, existe también el elemento sexual. La competencia esper- mática entre los caprinos hacen que éstos tengan harenes exclusivos, mientras que los cánidos y los vacunos son sociedades de multimachos (la competencia espermática se da en ellos de otra manera). FILOSOFIA.indb 206 27/11/06 11:35:13 Las primeras descripciones de antropoides en el siglo XVII y su importancia para la filosofía de la evolución [207] Jo rg e M a rt ín e z- C o n tr e ra s Adán y de Eva y que las variaciones provenían, como ya lo mostramos, del medio ambiente, especialmente del efecto de los rayos solares. Hay que poner de relieve que la tesis más fuerte de nuestra época, apoyada en la genética, es semejante a la del siglo XVII, no en su aspecto religioso, sino en el he- cho de que existe una sola especie monotípica de Homo, proveniente de individuos semejantes a un grupo étnico particularmente “feo”32 para los europeos de aquellos siglos, los bosquimanos.33 En relación con el nombre de orangután dado un chim- pancé, es posible que la imagen antropomórfica de un animal llamado “persona del bosque”34 fuera entonces como ahora muy atractiva, sobretodo porque se decía, adicionalmente, que era muy libidinosa, aspecto que como ya dijimos quiso expresar Tulp en su dibujo.35 Tyson, en la medida en que los sátiros eran considerados faunos, no pudo sino pensar en las diversas historias sobre 32 Buffon, argumenta de manera cartesiana en favor de la existencia de una sola especie humana, pero apoyado no en datos anatómicos sino mentales (en el sentido de esprit). Al respecto nos dice que un grupo humano particularmente “horrible”, como los hotentotes, son humanos en la medida en que poseen el habla y, en consecuencia, el pensamiento. Cf. (Martínez-Contreras 1992b) 33 Cf. supra nota sobre Bernier. 34 Los españoles que circundaban el África ya decían entonces, aunque hablando del cinocéfalo, que los monos podían hablar pero que no lo hacían para no ser puestos a trabajar. Esta es una idea de origen dayak, como ya dijimos, en relación con el orangután que luego pasó, a través de los viajeros, al África. 35 Cf. figura 3. Es gracioso que los hombres y las mujeres tan dados a la coquetería veamos sin embargo con supuesto temor y reprobación el comportamiento de aproximación sexual de los animales, tal vez por su crudeza. La coquetería es a la vez afirmación y negación de la sexualidad. FILOSOFIA.indb 207 27/11/06 11:35:13 I I I E L O R I G E N D E L H O M B R E [208] hadas, que también poseen, según el folclor, sus fiestas, dan- zas y música nocturna, y que provienen de las mismas creen- cias que dieron nacimiento a estas quimeras. Para asustar a los niños se les cuentan historias de hadas y de gnomos. Al respecto, Tyson nos recuerda que la palabra pánico proviene del término griego Pan que se refería precisamente al sátiro, pues si estos seres son supuestamente alegres cuando están entre sí, según los “poetas”, de noche parecían asustar a los adultos de la misma manera que éstos usaban esas imágenes para atemorizar a los niños, costumbre sobre la que Tyson, quien también era psicólogo, señala lo mala que puede ser para el desarrollo infantil. Tyson piensa entonces que tanto los sátiros de los anti- guos como las esfinges,36 aunque pudieran haberse inspirado en la imagen de los “orangutanes”, no existen en realidad. No tenemos tiempo para desarrollar aquí el hecho de que con el análisis, en siglos posteriores, de la civilización egipcia, se descubre que Ramsés II poseía por lo menos a un pigmeo africano, a quien hacia desfilar en procesiones especiales.37 Tyson obviamente no lo sabía, ni tampoco estaba enterado 36 El historiador eclesiástico griego Filostorgios (360?-430?) habla de la esfinge como de una especie de mono con un pecho imberbe y con mamas semejantes a las de la mujer. (Philostorgii Cappadocis 1642. Ecclesisticæ Historiæ, Ginebra, Lib. 3, Cáp. 11, 41, citado en (Mon- tagu 1943, 315 nota 19). Los egiptólogos consideran que la esfinge es una quimera de leona y de un ser alado, probablemente un águila. 37 3,500 años después de los egipcios, los americanos metieron en una jaula de un zoológico de Missouri, en 1904, a un pobre pigmeo con- golés cuya familia había sido previamente masacrada por los colonia- listas belgas. Su jaula se encontraba junto a la de los simios como un esfuerzo “pedagógico” de darwinistas racistas que querían poner de relieve la existencia de eslabones perdidos. Gracias a la presión de grupos afro-americanos, Ota Benda, como se llamaba aquel hombre, fue liberado, pero acabó suicidándose diez años después de su llegada a los EEUU. FILOSOFIA.indb 208 27/11/06 11:35:13 Las primeras descripciones de antropoides en el siglo XVII y su importancia para la filosofía de la evolución [209] Jo rg e M a rt ín e z- C o n tr e ra s de que existen pigmeos en dos lugares del planeta, por ello piensa que si hubieran sido vistos por alguien, se trataría probablemente de simios, en lo que, por supuesto, se equi- voca. Una observación bien hecha vale, en nuestra opinión, varios libros de teoría. En resumen, ahora como en tiempos de Tyson, hay que distinguir el mito de la realidad y si los personajes de los poetas de la Antigüedad no existen, en el siglo diecisiete se da el hecho extraordinario del descubrimiento para la ciencia europea del género que sabemos ahora es el más cercano al humano, el chimpancé. Por ello, para el inglés, monos, simios y humanos son tres grupos distintos anatómicamente, aunque posean una notable semejanza; en especial simios y humanos, cuya se- mejanza entre sí es mayor que la de cualesquiera de los dos con los monos. Lo extraordinario es que esta mayor cercanía entre los géneros Pan y Homo queda ya claramente demos- trada anatómicamente, aunque la sistemática primatológica tardará un siglo en separar los géneros Pongo38 y Pan entre sí (Martínez-Contreras 1996). Es cierto que no encontramos nada en Tyson que nos oriente hacia una variación debida al clima o a cualquier idea de especiación. No podemos forzarlo a ser evolucionista antes de la letra. Tyson habría visto vivo al chimpancé tal una sola vez, un poco antes de la muerte de éste en abril de 1698 (el animal habría llegado hacía apenas unos meses a Inglaterra) y había notado que caminaba sobre sus nudillos. Como el animal 38 Pongo pygmæus es la especie a la que pertenecen las dos subespecies de orangutanes, de Sumatra y de Borneo. Se puede ver claramente que el nombre científico proviene de los escritos de Purchas (por pongo) y de Tyson (por pigmeo). FILOSOFIA.indb 209 27/11/06 11:35:13 I I I E L O R I G E N D E L H O M B R E [210] estaba enfermo, pensó que esta conducta era anormal.39 El animal probablemente murió de una infección al maxilar, provocada por una caída sobre un cañón en el barco que lo transportaba. El inglés realizó su disección en aproximada- mente un mes. Preparó luego el esqueleto de tan excelente manera sigue aún intacto en Londres. La piel, conservada también, ha desaparecido. Su trabajo fue presentado ante la Royal Society el 1 de junio de 1698, reunión donde anun- ció la confección de un libro, mismo que aparecerá un año después. Hay varios elementos que en el trabajo y la comunica- ción oficial de resultados del inglés nos recuerdan la que se ha dado en llamar la revolución darwiniana de 1859. El elemento más importante que aquí queremos destacar es el concepto de “gradual”, tan importante en la teoría de la evolución darwiniano-wallaciana. Veamos el acta de aquella reunión: Dr Tyson produced the Skinn of the Orang-Outang, and shewed the great resemblance thereof to a humane Creature, that the hair of the Arms from the Wriststo the Elbow shaded towards the Elbow which in all Quadrupeds is downwards, that its brain was almost a pound, and in all things resembled a Man’s. As also the Liver in one body without Lobes as in a man, and the Eyes wholly humane without the 7th Muscle in the Eye which is look’d upon by the Anatomists to be peculiar to mankind (sic).40 39 Un siglo después, en 1810, una conducta anormal de una orangutana que no usa sus piernas para desplazarse en el suelo, hará creer a Frédéric Cuvier que pudiera ser la manera “normal” de caminar del animal. Esto demuestra lo poco que se ha sabido sobre los póngidos hasta inicios del siglo XX (Martínez-Contreras, 1996). 40 Journal Book of the Royal Society, Londres, v., 95. Citado por Mon- tagu (Montagu 1943, 226). FILOSOFIA.indb 210 27/11/06 11:35:14 Las primeras descripciones de antropoides en el siglo XVII y su importancia para la filosofía de la evolución [211] Jo rg e M a rt ín e z- C o n tr e ra s Figura 4. El “orangután” (chimpancé) infante macho de Tyson. Nótese lo bien dibujados que están los miembros, las manos y pies, el pene, la cabeza, orejas, nariz, etc., en especial el diente roto que le costara la vida al animal al caer de un mástil en el velero que lo traía. FILOSOFIA.indb 211 27/11/06 11:35:14 I I I E L O R I G E N D E L H O M B R E [212] Figura 5. Compárese la foto de este chimpancé de la especie Pan tro- glodytes verus, con el dibujo proporcionado por Tyson. El dibujo es de gran calidad, pero no siendo en color, no puede mostrar la pe- lambre blanca ni el tono rosa de la piel de los infantes de la especie. Foto: Jorge Martínez-Contreras © 2002 En este resumen, resulta fundamental destacar la seme- janza que entre hombres y “orangutanes” se señala en cuatro aspectos anatómicos: la dirección del pelo del antebrazo, el tamaño y forma del cerebro, la estructura semejante a la humana del hígado, así como la ausencia de un músculo del ojo, aspectos todos típicamente humanos. Esta orientación FILOSOFIA.indb 212 27/11/06 11:35:15 Las primeras descripciones de antropoides en el siglo XVII y su importancia para la filosofía de la evolución [213] Jo rg e M a rt ín e z- C o n tr e ra s del vello del antebrazo será de gran utilidad para Darwin y los darwinianos en sus combates en favor de la evolución un siglo y medio después, luchas que pasaban, entre otras cosas, por tener que demostrar que los póngidos y los hu- manos tenemos un ancestro común (Darwin 1871, 192-193; Romanes 1982, 89-92). En la presentación de sus trabajos, Tyson introducirá en la tradición occidental la prueba de que existe un ani- mal tan cercano al hombre que el concepto de gradación tomará un sentido diferente. Gradación, que proviene de grada o peldaño, significa que en la scala naturæ hay un continuum separado por pequeños saltos o peldaños. En cierta manera el darwinismo propondrá que estos peldaños son tan pequeños, que existe tal gradualismo, que se pasa de las formas más primitivas a las más modernas de manera más semejante a un hilo que a una escalera. Pero veamos lo que nos dice Tyson: I have made a Comparative Survey of this Animal, with a Monkey, an Ape, and a Man. By viewing the same Parts of all these together, we may the better observe Nature’s Gradation in the formation of Animal Bodies, and the Transitions made from one to another (…). By following Nature’s Clew in the wonderful labyrinth of the Creation we may be more easily admitted into her Secret Recesses, which Thread if we miss, we must needs err and be bewilder’d (sic) (Tyson 1699, vii-viii). Se nos antoja que la metáfora de nuestro anatomista es la de algo semejante a un capullo de gusano de seda. Para Tyson el mundo cognoscible se asemeja a una madeja (clew) cuya trama (thread) debe ser seguida a través de todos los laberintos y rincones secretos de la misma, pero si esta madeja fuera semejante a aquel capullo, bastaría encontrar el hilo y seguirlo. Esta metáfora se parece mucho a la tesis de Darwin quien argumenta que con pequeñas variaciones FILOSOFIA.indb 213 27/11/06 11:35:15 I I I E L O R I G E N D E L H O M B R E [214] graduales y a lo largo del tiempo las formas más primitivas, impulsadas, entre otras fuerzas, por la selección natural, darán lugar a las más complejas. De hecho, invito al lector a cambiar en la frase de Tyson “Creation” por “Evolution” y tendrá una expresión que no desdeñaría Darwin. Por lo menos en el caso de lo que será después el orden Primates, Tyson nos propone una gradación ascendente que va del cercopiteco (monkey), pasando por el papión (ape) para llegar al chimpancé (orangután) y finalizar en el humano. Es obvio que no podemos hacer de Tyson un evolucionista, pero su pensamiento en torno a una gradación en donde encontramos diferencias tan progresivas como las que le permiten decir, por primera vez en nuestra tradición, que el “orangután” es más semejante a los humanos que a los de- más monos, sí lo colocan como a uno de los científicos cuyas investigaciones favorecieron directamente el desarrollo de la teoría de la evolución. En efecto, el universo de todo lo que ha vivido (99% de lo cual ha desaparecido) puede ser visto en nuestro tiempo – nadie sabe cómo será percibido en el futuro – como una enorme madeja y el ADN como la trama. La diferencia fundamental es que en el caso de los creacionistas nos encontramos con una intencionalidad divi- na; en el caso de los darwinianos con el juego de la variación al azar y la selección, positiva y negativa, de las variantes en función de su fitness. Finalmente, la crítica a las malas investigaciones, a aque- llas que provocan “yerros (que nos) alejan de la trama”41 ponen a Tyson, en términos filosóficos, como a un realista optimista: la realidad existe y puede ser descrita para alcan- zar así el “true Knowledge” y uno de sus instrumentos es la anatomía comparada que contribuyó a fundar. 41 Ibid. FILOSOFIA.indb 214 27/11/06 11:35:16 Las primeras descripciones de antropoides en el siglo XVII y su importancia para la filosofía de la evolución [215] Jo rg e M a rt ín e z- C o n tr e ra s A más de trescientos años, los trabajos de estos anato- mistas, en especial de Tyson, no dejan de tener actualidad y de plantear problemas semejantes a los que enfrentan los filósofos evolucionistas contemporáneos. R E F E R E N C I A S B I B L I O G R Á F I C A S Bernier, F. 1684. Nouvelle division de la Terre, par les différentes Espèces ou Races d’hommes qui l’habitent, envoyée par un fameux Voyageur à Monsieur L’Abbé de la **** (sic) à peu près en ces termes, Journal des sçavans (sic) 12, París, (Lettre du Lundi 24. Avril mdclxxxxiv), 133-140. Blumenbach, J. F. 1775. De Generis Humani Variate Nativa, Göttingen. Bontius, I. 1642. Historiæ Naturalis & India Medica Orientalis, Ámsterdam. Buffon, G. L. L. Conde de 1749-1788. Histoire naturelle géné- rale et particulière avec la description des Cabinets du Roi, París: Imprimerie Royale. Dapper, O. 1681. Description de l’Afrique, Ámsterdam. Darwin, C. 1871. The Descent of Man, and Selection in Relation to Sex, Londres. Galdikas, B. 1999. The most enigmatic ape in the world, en Oran- gutan Odyssey, 8-35, N.Y: Harry N. Abrams Press. Gesner, C. 1551. Historiæ Animalium, Vol. I, De Quadrupedibus Viviparis, Zurich. Huxley, T. H. 1863. The Evidence as to Man’s Place in Nature, Londres: Williams & Norgate. Leibniz, Gottfried W. 1718. Otium Hanoveriana sive Miscelanea, Leipzig. Malinowski, B. 1929. The Sexual Life of Savages in Western Me- lanesia, Londres: Routledge & Kegan Paul. Martínez-Contreras, J. 1992a. L’émergence scientifique du gorille, Revue de Synthèse, 3-4: 399-42. FILOSOFIA.indb 215 27/11/06 11:35:16 I I I E L O R I G E N D E L H O M B R E [216] Martínez-Contreras, J.1992b. Des mœurs des singes. Buffon et ses contemporains, 557-568, en J. Gayon, (ed.), Buffon 88, París: Vrin. Martínez-Contreras, J.1994. El descubrimiento histórico de los póngidos: El pongo, La ciencia y el hombre,