Descarga la aplicación para disfrutar aún más
Vista previa del material en texto
CONCEPTO DE PROYECCIÓN En neurofisiología y psicología Designar la operación mediante la cual un hecho neurológico o psicológico se desplaza y se localiza en el exterior, ya sea pasando del centro a la periferia, ya sea del sujeto al objeto. Psicoanalítico operación por medio de la cual el sujeto expulsa de sí y localiza en el otro (persona o cosa) cualidades, sentimientos, deseos, incluso «objetos», que no reconoce o que rechaza en símismo. − Se trata de una defensa de origen muy arcaico que se ve actuar particularmente en la paranoia, pero también en algunas formas de pensamiento «normales», como la superstición. I La palabra proyección tiene en la actualidad un empleo muy extenso, tanto en psicología como en psicoanálisis NEUROLOGÍA PSICOLOGÍA PROYECCIÓN deriva de la geometría − una determinada zona cerebral constituye la proyección de cierto aparato somático, receptor o efector… − si bien implica un movimiento del centro a la periferia. Así́, en lenguaje psicofisiológico, se dice que las sensacio olfativas, por ejemplo, se localizan por proyección a nivel del aparato receptor En este mismo sentido Freud habla de una «sensación de comezón o de excitación de origen central proyectada en la erógena periférica» Se utiliza el concepto de proyección para los siguientes procesos − El sujeto percibe el medio ambiente y responde al mismo en función de sus propios intereses, aptitudes, hábito afectivos duraderos o momentáneos, esperanzas, deseos, etc. − las estructuras o rasgos esenciales de la personalidad pueden aparecer en el comportamiento manifiesto. - técnicas llamadas proyectivas: el dibujo del niño revela su personalidad - en las pruebas normalizadas que son los test proyectivos propiamente dichos (por ejemplo Rorschach sitúa al sujeto en presencia de situaciones poco estructuradas o de estímulos ambiguos, lo que permit ciertos rasgos de su carácter y ciertos sistemas de organización de su conducta y de sus emociones. − Transferencia: El sujeto muestra, por su actitud, que asimila una determinada persona a otra: en tal caso se dic ejemplo, que «proyecta» la imagen de su padre sobre su jefe. − Identificación: El sujeto se asimila a personas extrañas o, por el contrario, asimila a símismo otras personas o ser inanimados “La Fontaine, por ejemplo, proyectó en los animales de sus Fábulas sentimientos y razonamientos antropomórficos” − Proyección: El sujeto atribuye a otros las tendencias, deseos, etc., que él no reconoce en símismo; así́, por ejem racista proyecta sobre el grupo odiado sus propios defectos y sus tendencias inconfesadas. II Freud recurrió al concepto de proyección para explicar diversas manifestaciones de la psicología normal y patológica 1. Proyección: descubierta en la PARANOIA a partir de 1895-1896, dos breves trabajos… En ellos la proyección se describe como una defensa primaria que constituye un abuso de un mecanismo normal consistente en buscar en el exterior el origen de un displacer. El paranoico proyecta sus representaciones intolerables, que vuelven a él desde fuera en forma de reproches. 2. 1915: Describe el conjunto de la construcción fóbica como una autentica «proyección» en lo real del peligro pulsional: «El yo se comporta como si el peligro de desarrollo de la angustia no viniera de una moción pulsional, sino de una percepción, y en consecuencia puede reaccionar frente a este peligro exterior mediante las tentativas de huida que representan las precauciones fóbicas» 3. La proyección en lo que designa como «celos proyectivos», que distingue tanto de los celos «normales» como del delirio celotípico paranoico; el sujeto se defiende de sus propios deseos de ser infiel atribuyendo la infidelidad a su cónyuge; al hacerlo así́, desvía su atención de su propio inconsciente, la desplaza sobre el inconsciente del otro… 4. Nunca designa la transferencia en general como una proyección y sólo emplea este último término para indicar un fenómeno particular en relación con aquella: el sujeto atribuye a su analista palabras o pensamientos que son en realidad los suyos propios (por ejemplo: «pensará usted que..., pero no es verdad») III 1. La proyección encuentra su principio más general en la concepción freudiana de la PULSIÓN… EXPLICACIÓN (el organismo se halla sometido a dos tipos de excitaciones generadoras de tensión: unas de las que puede huir y protegerse, y otras de las que no puede escapar y frente a las que no existe, en principio, un aparato protector o «protección contra las excitaciones»*. Tal es el primer criterio de lo interior y de lo exterior) − La proyección aparece entonces como el medio de defensa originaria frente a las excitaciones internas que por su intensidad se convierten en excesivamente displacenteras: el sujeto las proyecta al exterior, lo que le permite huir (precaución fóbica, por ejemplo) y protegerse de ellas. Existe «[...] una tendencia a tratarlas como si no actuasen desde el interior, sino desde el exterior, para poder utilizar contra ellas el medio de defensa representado por el protector contra las excitaciones. 2. la proyección asociada a la introyección: en la génesis de la oposición sujeto (yo)-objeto (mundo exterior) El sujeto «[...] incorpora a su yo los objetos que se le presentan en tanto que son fuente de placer, los introyecta y, por otra parte, expulsa de él lo que en su propio interior es motivo de displacer (mecanismo de la proyección)» IV Dificultades que se encuentran para entender la proyección desde el ámbito metapsicológico 1. La primera dificultad se refiere a lo que se proyecta: Freud describe la proyección como la deformación de un proceso normal que nos induce a buscar en el mundo exterior la causa de nuestros afectos… en el caso de la paranoia (SCHREBER), la afirmación "yo lo odio" se transforma por proyección en esta otra: "él me odia" (él me persigue), lo cual entonces me dará́ derecho a odiarlo» … En este caso es el afecto de odio (podríamos decir, la pulsión misma) lo que se proyecta. − Lo odiado, lo malo es lo que se proyecta… − M.KLEIN: para ésta, lo que se proyecta es el objeto «malo» (fantaseado), como si la pulsión o el afecto, para poder ser verdaderamente expulsados, debieran encarnarse necesariamente en un objeto. 2. La concepción freudiana de la PARANOIA. En efecto, Freud no siempre sitúa en el mismo lugar la proyección en el conjunto del proceso defensivo de esta enfermedad. − EN SUS TRABAJOS SOBRE PROYECCIÓN PARANOICA, la concibe como una mecanismo de DEFENSA PRIMARIO, como una oposición a la REPRESIÓN, que actúa en la NEUROSIS OBSESIVA (en esta neurosis, la defensa primaria consiste en una represión en el inconsciente del conjunto del recuerdo patógeno y en la sustitución de éste por un «síntoma primario de defensa», la desconfianza de símismo. − EN LA PARANOIA: la defensa primaria debe comprenderse en forma simétrica a la anterior: también hay represión, pero hacia el mundo exterior, y el síntoma primario de defensa lo constituye la desconfianza de los demás. El delirio se concibe como el fracaso de esta defensa y como el «retorno de lo reprimido», que vendría del exterior 3. la teoría freudiana de la alucinación y del sueño como proyección. Si, como insiste Freud, es lo displacentero lo que se proyecta… ¿cómo explicar la proyección de un cumplimiento de deseo? − Este problema no escapó a Freud, el cual le dio una respuesta que podría formularse así́: si bien, en su contenido, el sueño realiza un deseo agradable, en su función primaria es defensivo: tiene por fin ante todo mantener a distancia lo que amenaza con perturbar el sueño: «[...] en lugar de la solicitación interna que aspiraba a ocupar [al durmiente] por completo, se ha instalado una experiencia externa, y él [el durmiente] se ha desembarazado de la solicitación de ésta. Un sueño es pues, también, entre otras cosas, una proyección: una exteriorización de un proceso interno» V ● los test proyectivos que no se trata aquí́ solamente de una estructuración de los estímulos en concordancia con laestructura de la personalidad: el sujeto, de modo especial en las láminas del T. A. T., proyecta seguramente lo que él es, pero también lo que él no quiere ser. Cabría preguntarse si la técnica proyectiva no suscita en forma electiva el mecanismo de proyección de lo «malo» afuera. ● Se observará también que un psicoanalista no asimilará la transferencia en su conjunto a una proyección, en cambio, reconocerá ́ que la proyección puede intervenir en la transferencia. ● En efecto, sólo encontramos en él lo que se halla siempre implícito en la definición psicoanalítica de la proyección: una bipartición en el seno de la persona y el arrojar sobre otro la parte de símismo que ha sido rechazada.
Compartir