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Principales enfermedades y tratamientos En la cría de ovejas La producción ovina es una actividad ganadera de gran importancia a nivel mundial, ya que las ovejas son una fuente valiosa de carne, leche, lana y otros productos derivados. Sin embargo, al igual que otras especies animales, estas presentan susceptibilidad a una amplia variedad de enfermedades que pueden afectar su salud, bienestar y productividad. Una de las enfermedades de mayor relevancia en la cría de ovejas es la lengua azul, una enfermedad viral transmitida por mosquitos del género Culicoides. Esta patología puede generar signos clínicos como fiebre, anorexia, edema facial, lesiones en la boca y patas, y en casos graves, la muerte del animal. El control de la lengua azul se basa en la implementación de medidas de control de vectores, programas de vacunación y restricciones en el movimiento de animales. Otra enfermedad viral relevante es la peste ovina, causada por un virus del género Morbillivirus. Esta patología altamente contagiosa puede provocar signos como fiebre, diarrea, neumonía y alta mortalidad. El manejo de la peste ovina en ovinos requiere de la aplicación de rigurosas medidas de bioseguridad, vigilancia epidemiológica y sacrificio sanitario de los animales afectados. La agalaxia contagiosa, una infección bacteriana causada por Mycoplasma agalactiae, también representa una amenaza significativa para la industria ovina. Esta enfermedad puede generar signos como fiebre, disminución de la producción de leche, artritis y mortalidad. El control de la agalaxia contagiosa implica el uso racional de antibióticos, mejoras en las condiciones de higiene y la implementación de programas de vacunación. La paratuberculosis, también conocida como enfermedad de Johne, es una enfermedad bacteriana crónica causada por Mycobacterium avium subspecie paratuberculosis. Esta patología puede ocasionar diarrea crónica, pérdida de peso y mortalidad en los ovinos. El manejo de la paratuberculosis se basa en la detección y eliminación de animales positivos, la mejora de las prácticas de manejo y la aplicación de pruebas diagnósticas. Entre las enfermedades parasitarias de gran relevancia en la cría de ovejas, se encuentra la fasciolosis, ocasionada por el parásito Fasciola hepatica. Esta infección puede provocar pérdida de peso, anemia, edema y, en casos graves, la muerte del animal. El control de la fasciolosis implica el uso de antiparasitarios, el manejo adecuado de los potreros y la mejora de las condiciones de drenaje. Otra parasitosis importante es la coccidiosis, causada por protozoos del género Eimeria. Esta enfermedad puede generar signos como diarrea, deshidratación y retardo en el crecimiento de los corderos. El manejo de la coccidiosis en ovinos requiere de la implementación de programas de profilaxis, el uso racional de coccidiostáticos y el mejoramiento de las condiciones de higiene y alojamiento. La sarna ovina, ocasionada por ácaros del género Psoroptes, es una ectoparasitosis que puede provocar prurito, alopecia y alteraciones en la calidad de la lana. El tratamiento de la sarna ovina implica el uso de productos acaricidas y el establecimiento de medidas de control y erradicación del parásito en la explotación. Otras enfermedades parasitarias relevantes en la cría de ovejas incluyen la verminosis gastrointestinal, la cisticercosis y la hidatidosis, cada una de las cuales requiere de un abordaje específico para su prevención y tratamiento. En cuanto a las enfermedades bacterianas, la aborto enzoótico de las ovejas, causado por la bacteria Chlamydia abortus, es una de las más importantes. Esta patología puede generar abortos, muerte embrionaria y problemas reproductivos en los rebaños. El control del aborto enzoótico implica la implementación de programas de vacunación, el aislamiento de animales infectados y la mejora de las prácticas de manejo. Otras enfermedades bacterianas relevantes en la cría de ovejas son la ectima contagiosa, la artritis-encefalitis caprina, la mastitis y las infecciones por Corynebacterium, Pasteurella y Listeria, cada una de las cuales requiere de un abordaje específico para su prevención y tratamiento. Para lograr un manejo eficaz de las enfermedades en la cría de ovejas, es fundamental implementar un enfoque integral que incluya: 1. Programas de bioseguridad y biosanidad, con medidas de control de la entrada de patógenos a los rebaños. 2. Vigilancia epidemiológica y diagnóstico oportuno de las enfermedades mediante pruebas de laboratorio. 3. Aplicación racional de tratamientos farmacológicos (antibióticos, antiparasitarios, antivirales, etc.), siguiendo las indicaciones de los profesionales veterinarios. 4. Implementación de planes de vacunación acordes a las necesidades de cada explotación ovina. 5. Mejora de las prácticas de manejo, alimentación, alojamiento y bienestar animal en los rebaños. 6. Capacitación continua de los productores y trabajadores en temas de sanidad animal. 7. Investigación y desarrollo de nuevas herramientas de diagnóstico, tratamiento y prevención de enfermedades. En resumen, el manejo eficaz de las enfermedades en la cría de ovejas es fundamental para garantizar la productividad, la competitividad y la sostenibilidad de esta actividad económica. La colaboración entre los productores, los profesionales de la salud animal y los organismos gubernamentales es clave para identificar, prevenir y controlar oportunamente los problemas sanitarios que afectan a estos animales de granja.