Las suturas en el cráneo de un recién nacido tienen la función de permitir que los huesos se muevan durante el proceso del nacimiento. Actúan como articulaciones de expansión y permiten que el hueso se agrande de manera uniforme a medida que el cerebro crece y el cráneo se expande. Esto ayuda a que la cabeza adopte una forma simétrica. Si alguna de las suturas se cierra prematuramente, puede haber problemas de crecimiento en esa área, lo que puede afectar la forma normal de la cabeza.
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